Vous êtes sur la page 1sur 37

Los ponchos argentinos

El poncho es unaprenda tan simple como un rectángulo, cuyas medidas difieren


según el uso y la región, con un tajo al medio para pasar la cabeza. Se usa como
abrigo y como prenda impermeable, cuando está hecho por los aborigenes en
forma artesanal
Es un tejido de lana de oveja o llama domésticada, hilado y devanado en huso. Su
medida mas corriente, 2, 40 mts por 1, 40 mts. Se teje a mano en telares rústicos
compuestos por un rectángulo con cuatro maderas y una pala para golpear la tela
y una vara perpendicular para ir ciñendo bien los hilos, empujando con fuerza
hacia abajo.
El origen es difícil de precisar, porque es una prenda muy sencilla y básica, hay
relatos anterior a la era Cristiana sobre su existencia. Pero acá interesa el poncho
argentino.

El aborigen siempre lo uso como prenda de abrigo, para llevarlo puesto o para
cobijarse en un camastro tendido, fue un prenda como complemento del ajuar
funerario, para los muertos, cuando eran enterrados, fue objeto como regalo, muy
significativo del Indio al hombre blanco, se recuerda la anécdota, durante el
encuentro entre el Cacique Mariano Rosas y el General Lucio V. Mansilla, cuando
el cacique le regala al Oficial su poncho diciéndole: 'Si alguna vez no hay paces,
mis indios no lo han de matar, hermano, viéndole el poncho'. Para los mapuches,
que su mujer le tejiera un poncho era una muestra de amor. Lo usaba el Criollo, de
la campaña, del campo, y de los pueblos. Todos. Lo vemos en los cuadros de
nuestros próceres, que era de uso corriente.
Hoy el poncho también es uso y costumbre, en personas de cualquier condición,
pero su uso es mas notorio, en el interior.
En algunos lugares, el tejido lo hace la mujer exclusivamente, y sus formas y
teñidos se transmiten y se enseña por el va boca a boca, de madre a hija o nieta o
sobrina.
En el norte hay zonas que están hecho solamente por mujeres, pero en Salta hay
muchos artesanos varones que los tejen.
Hay ponchos en Catamarca, Salta, Jujuy, Neuquén, Rio Negro, Tucumán, como
las provincias mas importantes en esas artesanías. No quita que otras provincias
tambien tengan artesanos en ponchos.
El Poncho Patrio

De tela celeste con guarda y flecos en color blanco, es decir, los colores de
nuestra Bandera, es el poncho oficial y representativo de nuestra Nación. Apareció
por primeravez en 1820, como parte del uniforme del Regimiento de Dragones de
la Patria. Con el tiempo aparecieron las guardas en color blanco y el color azul se
convirtió en celeste para reflejar la identidad nacional. El Poncho Patrio original fue
usado hasta principios del siglo XX por la policía y por el ejército. Era color azul
oscuro con forro de bayeta roja, cuello y abertura cerrable con botones. No llevaba
flecos.

A continuación, una descripción de los ponchos tradicionales en cada provincia


argentina.

Buenos Aires
No existe un poncho bonaerene normalizado, aunque en sus variados diseño
puede observarse la influencia del Poncho Pampeano en sus distintas variantes.
Tradicionalmente, en muchas zonas de la provincia se usaba un poncho claro con
flecos negros y guardapampa, aunque también se usaba el diseño inverso
(poncho negro con flecos blancos). El Poncho Pampa de 8 guardas podría
considerarse característico de la Provincia de Buenos Aires.
Catamarca

Los ponchos catamarqueños son particularmente reputados por la finesa de su


tejido en lana de vicuña. Las mujeres que los fabrican son las herederas de la
tradición inca. Una Fiesta nacional e internacional del poncho argentino se
organiza en julio desde hace mas de cuarenta años, con exposición de los
artesanos y festival de folklore. Los ponchos catamrqueños son muy suaves y
decorativos, y su clor aracterístico es el marrón claro.

Córdoba

Aunque no existe ningún tipo de regulación que determine cómo debe ser el
poncho cordobés, tradicionalmente se acepta que sus colores sean negro y blanco
(colores tradicionales usados por los indígenas comechingones en su vestimenta),
pudiendo ser, eventualmente de otros colores, como el rojo. Presenta en sus
costados dos guardas de diseño comechingón, siendo el motivo más usado la
guarda culebraica, que podems ver en la siguiente imagen.

Pero, sin dudas, el poncho más famoso de Córdoba es el Poncho Coscoíno,


característico de la ciudad de Cosquín y de su festival folclórico, el cual sí está
normalizado en su diseño: es de color blanco, con guardas culebraicas y flecos en
color negro.
Corrientes
Los ponchos tradicionalmente usados en Corrientes son generalmente grises con
rayas rojas o azules. Los colores más usados son: azul, rojo oscuro y verde
(colores sobrios y adecuados para todo uso), aunque hay gran variedad de colores
y de rayas: están los apala, poncho de lanilla de color natural o vicuña, a listas
más claras u oscuras, cualquier poncho castaño o amarronado claro con rayas
amarillas. Su diseño está muy influenciado por los ponchos paraguayos y
jesuíticos.

Chaco

El poncho característico de ésta provincia en es Poncho Puyo, o Pullo, de forma


cuadrada, cuyo tamaño puede variar de 1m a 1,40 por lado. Se parece a las
matras pampeanas. Tiene una especie de felpa por un haz y su tejido es grueso,
pudiendo tener boca o no. Fue muy utilizado por los habitantes de los lugares
boscosos ya que su pequeño tamaño disminuía la probabilidad de que se
produjeran desgarros. El color tradicional es el rojo y los motivos son similares al
de la foto.
Chubut
El poncho chubutense por antonomasia en el Poncho Mapuche, también llamado
Poncho Patagónico. Los Mapuches tienen una larga tradición en el tejido de los
ponchos y el trabajo de los colores con rojos y azules oscuros. Muchos motivos
geométricos y/o simbólicos. En la cultura mapuche, el poncho es un verdadero
carnet de identidad de la persona que lo lleva. Así el de los caciques tenía una
guarda con un motivo geométrico particular, con ángulos rectos y en forma de
cruz. Hoy está ampliamente reproducido bajo nombre de guarda pampa e inspira
los ponchos de varias regiones.

Entre Ríos

Si algo caracteriza al gaucho entrerriano, es el Poncho Colorado, símbolo de


federalismo. Como su nombre indica, es completamente rojo, aunque
ocasionalmente ueda tener detalles en negro similares a los del Poncho Salteño.
Algunos artesanos de la provincia confeccionan ponchos en otros colores, aunque
siempre con detalles en color rojo, al que consideran distintivo de la provincia.
Formosa
Se aceptan como ponchos tradicionales de ésta provincia al llamado Poncho
Toba, tradicionalmente usado en épocas frías por el pueblo Qom, y confeccionado
en tonos de gris con guardas blancas, y en menor medida, al Poncho de Sesenta
Listas, de origen paraguayo. Recientemente se presento en la legislatura de la
provincia un proyecto para establecer un poncho oficial de color blanco con
detalles en verde y marrón.

Jujuy
El tradicional poncho jujeño es de color marrón vicuña. Se utilizaba la lana de
alpaca o de vicuña sin tintura porque dicho color permitía a quienes lo usaban
camuflarse con el color de la tierra en combate. Habitualmente se la agregan
bandas o guardas en tonos de marrón, ocre y beige.
La Pampa

El "poncho pampa", o "pampeano" utilizado por indios pampas y araucanos, y


luego introducido en Buenos Aires y el resto de la llanura rioplatense, se teje con
lana de oveja o de guanaco y se singulariza por su decoración en forma de
guardas, con repetición de motivos de cruces, en tonos de gran sobriedad,
predominando los negros con guardas blancas o de colores claros.
La Rioja

Diseñado en color rojo como símbolo de federalismo, el Poncho Riojano lleva


además listados de los colores típicos de la tierra y, en forma paralela, una guarda
usada en la decoración por los indios Capayanes, que simboliza a la tierra en su
perfil de montaña y está trabajada en espejo, como lo hacían nuestros pueblos
originarios. La cruz que se forma centrando la guarda representa la lluvia y el color
negro de la terminación transversal de la boca del galón simboliza el luto
respetuoso y eterno y la reivindicación de todos los riojanos que murieron en pos
de un ideal.

Mendoza
Como en otras provincias de la región, el poncho tradicional es el Mapuche,
caracterizado por colores vivos rojos o azules y decoración con motivos
geométricos o en cruces, como la Guarda Mapuche, cuyo diseño habitual es el
que podemos ver en el siguiente dibujo.

Misiones
Los ponchos jesuíticos, elaborados por las misiones que dan nombre ala
provincia, eran hechos en cualquier tipo de de hilo. Así es como fabricaron telas
de algodón, de lana de oveja, de alpaca y mixtos. Se fabricaban utilizando piezas
de una ancho de entre 20 y 30 cm. Las calidades y variedad de diseños y colores
son importantes, yendo de los más sencillos, de telas listadas, a los
medianamente complejos, con paños laterales de telas listadas y banda central de
tejido de labor de falsa doble faz, culminando con los de mayor riqueza artesanal,
nacidos de una sola pieza de tela. Eso sí, siempre repitiendo la secuencia del
diseño.
Neuquén

De notable influencia mapuche y araucana, como en toda la Patagonia, los


ponchos neuquinos tienen diversos colores que varían del negro al beige, y por
supuesto un azul oscuro, muy especial, y tambíen los hay color terroso, y un
colorado típico, combinado con la guarda pampa, característica, en negro.

Río Negro
Las características, diseños y colores de poncho rionegrino con muy similares a
los de la vecina provincia de Neuquén, aunque también es muy habitual la
presencia de ponchos Pampa, ya que el sector norte de la provincia foraparte de
la llanura pampeana y la influencia indígena pampa y araucana es innegable.
Salta

El más célebre de todos. Tradicionalmente de color rojo o borravino, con dos


franjas negras y flecos negros en los bordes. También se lo puede encontrar de
color café o marrón, como se hacían antiguamente, aunque sin las franjas negras.
La bandera de Salta está inspirada en el poncho salteño color borravino. Está
compuesto por dos paños cosidos a mano con punto zigzag. Estos dos paños
pueden ser de lana de oveja, vicuña, guanaco, alpaca o llama o de hilos
industriales, de merino, seda etc. Durante la guerra gaucha, los soldados del
general Martín Miguel de Güemes, llamados «infernales» a causa de su
característico poncho rojo, combatieron por el bando patriota contra los realistas
en en norte. Tras el asesinato de Güemes, se agregaron las dos franjas negras en
señal de luto.
San Juan
El original color marrón vicuña o guanaco, con una guarda beige claro en sus
costados y delicados flecos a los lados, son aspectos del poncho tradicional
sanjuanino, Por lo general tiene un tamaño de 2,40 metros de largo por 2 metros
de ancho, cubriendo el cuerpo hasta la altura de las rodillas. Su peso y tamaño
varían de acuerdo con la altura del usuario, con el tipo de lana (vicuña, guanaco u
oveja) y el grosor del hilado.
San Luis

Si bien no se encuentra oficialmente ormalizado un poncho típico de ésta


provincia, muchos consideran que, de acuerdo a la usanza tradicional, el poncho
puntano es en tonos terrosos, similar al poncho sanjuanino. Sin embargo, también
son típicos los ponchs con motivos pampas y mapuches, característicos de las
provincias vecinas.
Santa Cruz

El Poncho Oficial de Santa Cruz tiene un campo moro que obedece a la


conjunción entre el blanco que representa a la producción ganadera/ovina y el
negro, a la minera y petrolera, coronado por dos calles de labor de motivos
netamente tehuelches con colores de tinturas naturales que colaboran en describir
a la provincia: El amarillo, como fiel representante de la estepa; el verde,
visualizando las vegas, los valles y su potencialidad; y el morado: realizado en
base y en representación del fruto del calafate.
Santa Fe

Tradicionalmente, el poncho de los gauchos santafesinos es azul, con guardas


rojas y flecos blancos (pudiendo también ser rojo con guardas azules). Sin
embargo, en la provincia también son comunes los ponchos de tipo litoraleño,
comúnmente grises con rayas rojas o azules, aunque también los haya rojos,
azules o verdes. También es muy común un poncho simlar al Puyo del Chaco, de
color azul de lugar de rojo.

Santiago del Estero


Instituido oficialmente por ley, el Poncho Santiagueño mide 1,80 centímetros de
largo, por 1,20 de ancho y su composición es "sobre el color tierra base de su
campo"; tiene en las guardas simbólicamente los tres tonos de la cerámica
indígena santiagueña: el natural, rojo y marrón oscuro (colores puros de base)
distribuidos en el rojo del mistol de la greca al natural, lana de oveja de los flecos y
costura; así como también costura y fondo de la guarda y el marrón oscuro lloro de
algarrobo para las líneas que debilitan las guardas.

Tierra del Fuego, Antártida e Islas del Atlántico Sur


Creado en 1984, y realizado en color gris con guardas verdes y blancas que
representan la cordillera y el mar. Es uno de los más tradicionales y de los
primeros en ser institucionalizados.
Tucumán

Fue oficializado en 1975, y sus colores exactos fueron institucionalizados en 2004.


El poncho tucumano es de color marrón con franjas bordó. Su origen se basó en la
mezcla de marrones de las distintas variedades de animales de nuestros cerros,
como: la Vicuña, el Guanaco, y la Llama, al que se le suma el color de la tierra,
con la que los indios Quilmes hacían sus trabajos de alfarería consistentes en
botijas y tinajas de barro cocido de regular tamaño, redondas y de cuello corto y
angosto, las que eran adornadas con pinturas geométricas de color bordó. Estos
tintes bordó los aborígenes los conseguían de los árboles propios de la zona.

Historia y clasificación
Humilde en su origen, a la intemperie en la pampa y la cordillera, colorido en el
Norte, sedoso y fino sobre los hombros de los patriotas, austero en los conventos,
el poncho encierra en su trama la historia secreta de los pueblos de América.
Dos piezas tejidas en algodón y lana de llama, con abertura en el centro, de la
cultura nazca (hacia el 500 d.C.) y un unku , abrigo de los incas, cosido bajo las
sisas como una camisola, evidencian el uso en pueblos precolombinos de una
prenda de características similares al makuñ de los mapuches o el poncho,
vocablo que sería originario de los araucanos. El plangit es una técnica tintorera
(conocida en varios continentes) que utilizaron los pilagá y los mapuches para
obtener los ponchos "de argollas". Los aborígenes de la región chaqueña -tobas,
chiriguanos, mocovíes, wichis -representaban en sus ponchos la identidad tribal,
recibían en sus tejidos influencias andinas, amazónicas y españolas a partir de la
introducción del telar a pedales y el empleo de la lana de oveja.
Desde la segunda mitad del siglo XVII los ponchos tejidos en las reducciones
jesuíticas ya no llevan la iconografía indígena: se les ha ordenado eliminar lo
mágico, los signos de la cosmovisión local, lo que los europeos llamaban el
fetichismo.

Ponchos de la pampa
Los ponchos listados, tejidos por los pueblos centrales y del Norte, de Bolivia,
Perú y Alto Perú, recreaban esa herencia jesuítica y durante el siglo XVIII se
vendían en Buenos Aires, Córdoba y La Pampa. Fueron los que usó el gaucho en
todo el territorio pampeano, su abrigo, adorno, envoltura para apoyar la cabeza o
proteger el brazo armado.
Los ranquelinos se distinguen por la maestría de su ejecución. Los ranqueles eran
muy andariegos por las influencias araucana y de pueblos del Norte. Las múltiples
etnias de la región pampeana tejían en telares verticales el pelo de guanaco
hilado, y la lana de oveja a partir de la influencia hispánica.
Con la invasión araucana, aproximadamente en el 1000, se inició el proceso de
araucanización y esas etnias, que se identifican hoy como mapuches, no
adoptaron el telar hispánico y no alteraron su técnica ni sus característicos diseños
con la guarda "pampa" o "greca" similar a sus grabados rupestres. Utilizaban para
sus tejidos la técnica de la "guarda atada" y la del laboreo, formando el dibujo con
los hilos de la urdimbre y la trama, teñidos con distintos colores. En todas las
culturas los colores tuvieron un significado especial, correspondiente a un código
que burlaba las prohibiciones del colonizador.

Ponchos "arribeños"

Los "arribeños" eran los ponchos que provenían de las provincias al norte de
Córdoba: Salta, Tucumán, Catamarca, Santiago del Estero, Jujuy. Varios de ellos
están tejidos con lana de vicuña: un camélido que hasta hace poco tiempo se
sacrificaba, pero en los últimos años se cría, y se esquila, lo que permitió
recuperar una especie prácticamente en extinción.
El poncho sigue entre nosotros, distintivo de individualidad y pertenencia, simbólico y
cotidiano.

Vous aimerez peut-être aussi