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LA DIRECCION DE ACTORES (JUDITH WESTON)

LUIS TÁMARA 2016142058

La autora plantea una serie de pasos y concejos que nos abren nuevos caminos
en las relaciones entre los directores de cine y los actores, la forma adecuada de
dirigirnos a ellos para obtener los resultados que requiere la escena, de igual
modo la relación que deben establecer los actores con sus personajes y también
los escritores con sus guiones. Se basa fundamentalmente en varias técnicas
adecuadas para ensayar con los actores, sin embargo no argumenta que sean
necesarias en todos los casos, ya depende de cada director y de la escena
misma.

Cada uno de estos puntos los cuales la autora titula como soluciones rápidas y
dirección por resultados , no son más que concejos de sus experiencias vividas,
las cuales nos pueden aportar ejemplos de algunas técnicas que se pueden
utilizar con los actores a la hora de ensayar o en el momento en que se dice
acción. En varios casos puede que el director presente falencias respecto a la
preparación que tiene para dirigir, como falta de claridad en la idea central de la
cinta y cómo quiere mostrar la historia atreves de la imagen y del sonido, es allí
donde el actor se ve perjudicado, dado que si no tiene una dirección clara y
concisa, va a caer en el error de hacer completamente lo opuesto a lo que le está
pidiendo el director, incluso así el actor sea una persona con mucha experiencia
en el mundo del cine y la televisión.

Se sabe que a la hora de dirigir una cinta son muchos los aspectos importantes
que debe tener cuenta el director general, como la fotografía, el sonido y los
diferentes departamentos que conforman una producción audiovisual, pero una de
las más importantes es la actuación, ya que con una mala representación de los
personajes se echa a la borda todo, por esta razón es vital que el director general
dé las indicaciones requeridas y correctas para que el actor pueda dar lo que la
escena está pidiendo; por esta razón la autora expone que sólo actuando y
poniéndose en el lugar del actor descubrirás que siente el actor en su propia piel y
las indicaciones de dirección que llegan o no llegan para lograr un buen acto.

Muchas personas del mundo del cine y la televisión dicen que la dirección de
actores es algo e intrasmisible que no se puede enseñar, argumentado que hacer
esto trunca el desarrollo de la acción de un personaje, no obstante la autora
argumenta que un director si puede transmitir y dar indicaciones al actor siempre y
cuando sea de forma correcta, sin acudir a la tan mencionada dirección por
resultados, en la cual como su nombre lo dice, el director dirige al actor con el
único fin de obtener el resultado que él quiere, pero sin tener en cuenta la manera
en que lo está haciendo

Siendo así, el texto nos muestra situaciones que no son buenas a la hora de un
rodaje, como cuando el director le pide al actor que la escena que está
desarrollando debe ser más graciosa o aburrida. Este es un claro ejemplo de
cómo no debe dirigirse un director a sus actores, ya que no está siendo claro y lo
único que puede lograr es que el actor se confunda y esto termina en un juego de
adivinanzas entre los dos. La autora recomienda en estos casos mejor acudir a
una modificación creativa en la cual se le plantee una situación diferente al actor
para así obtener el estado de ánimo que requiere la escena, claro está sin salirse
de la línea narrativa de la historia.

De igual modo plantea una situación en la que el director le lee las frases al actor
es decir, indicarle la entonación que debe dar a cada frase, lo cual es tiempo
perdido y por lo contrario la autora aconseja hacerle saber al actor cual es el
sentido de esa frase para así obtener la entonación deseada, para esto es
indispensable que el director esté preparado antes del rodaje y tenga una
interpretación visual y creativa del guion, para que cuando llegue al set de rodaje
no cometa estos pequeños errores que pueden perjudicar en general una
producción audiovisual. Entre estos métodos que la autora recomienda no usar
esta el uso de un mapa del territorio emocional, en el cual el director le dice los
sentimientos y reacciones que debe tener el personaje en el desarrollo de la
escena, lo cual no recomienda ya que de esta forma el actor sentirá una carga y
una obligación que debe cumplir lo cual hará que acción no sea natural y esto
dejara que el espectador se entere de cuáles son los sentimientos y reacciones
que vienen a continuación y se pueden ver afectadas las transiciones
emocionales, en estos casos es mejor que el director le haga saber al actor cual
es la intención o el objetivo del personaje para que este mismo emprenda una
búsqueda con sus acciones para conseguir lo que desea.

Es necesario que el director utilice diferentes métodos para dirigirse al actor y así
encontrar las palabras correctas para decir a un actor justo antes de que la
cámara ruede, palabras con las cuales el actor se sienta estimulado y apoyado,
mas no obligado y vigilado y se pueda establecer una conexión y magia entre el
director y el actor.

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