100%(2)100% ont trouvé ce document utile (2 votes)
431 vues2 pages
El mito griego del nacimiento de Afrodita cuenta que después de que Cronos castró a su padre Urano con una hoz de pedernal, las gotas de sangre que cayeron al mar formaron espuma de la que surgió Afrodita. Según la mitología, Afrodita luego llegó a la isla de Chipre, donde estableció su santuario. Aunque el mito no es originario de Grecia, varias culturas del Mediterráneo oriental tenían versiones similares sobre el nacimiento violento de la diosa del amor
El mito griego del nacimiento de Afrodita cuenta que después de que Cronos castró a su padre Urano con una hoz de pedernal, las gotas de sangre que cayeron al mar formaron espuma de la que surgió Afrodita. Según la mitología, Afrodita luego llegó a la isla de Chipre, donde estableció su santuario. Aunque el mito no es originario de Grecia, varias culturas del Mediterráneo oriental tenían versiones similares sobre el nacimiento violento de la diosa del amor
El mito griego del nacimiento de Afrodita cuenta que después de que Cronos castró a su padre Urano con una hoz de pedernal, las gotas de sangre que cayeron al mar formaron espuma de la que surgió Afrodita. Según la mitología, Afrodita luego llegó a la isla de Chipre, donde estableció su santuario. Aunque el mito no es originario de Grecia, varias culturas del Mediterráneo oriental tenían versiones similares sobre el nacimiento violento de la diosa del amor
La divinidad más celebrada del Olimpo, la diosa del amor y de la
belleza, objeto de culto en todo el mundo antiguo nació, según nos relata Hesiodo en su Teogonía como consecuencia de una acción violenta: la venganza de Gea sobre Urano, padre de sus hijos. Después de su unión con Urano nacieron los Cícloples y su padre los castigó arrojándolos al tenebroso submundo del Tártaro. Los Titanes fueron poco después fruto de una nueva unión y su madre, Hera, les convenció para que se revelaran contra su padre, Urano, y así consumar su venganza. El menor de ellos Cronos, aprovechando el sueño de su padre le sujetó los genitales con la mano izquierda y con la derecha, utilizando una hoz de pedernal, se los seccionó, castrándole; para después arrojarlos al mar en el cabo Drépano. De las gotas de sangre que se derramaron sobre la tierra nacieron las Erinias o Furias: Alecto, Tesífono y Megeria y las Melíades o ninfas del fresno. Una vez los genitales en el mar se deslizaron por el piélago durante mucho tiempo y fue surgiendo a su alrededor una blanca espuma (en griego áphros significa espuma) y finalmente del miembro inmortal, surgió la bella Afrodita, diosa del deseo, creciendo la hierba bajo sus pies; así llegó hasta las playas de Citera, siguiendo camino después hacia el Peloponeso para finalmente fijar su residencia definitiva en la isla de Pafos (Chipre), donde aun pervive su santuario; una vez allí: las estaciones, hijas de Temis, la vistieron y engalanaron. Este mito no es originario de Grecia, Hesiodo recoge que su origen es cadmeo y puede documentarse su tradición, aunque conciertas variaciones, dentro de las culturas hurrita e hitita, por lo que pudiera suponerse proveniente de pobladores prehelénicos del norte. Se sostiene, también, que la castración posiblemente no sea metafórica, ya que se sabe que algunos pueblos asentados en regiones del África oriental tienen por costumbre, después de la lucha, que sus guerreros, provistos de una hoz en miniatura, proceden a la castración de sus enemigos vencidos. Cronos una vez realizada la castración de Urano ayudado por sus hermanos, los Titanes y los Cíclopes, obtuvo la soberanía sobre la tierra, y una vez que se sintió amo del mundo volvió a desterrar a los Cícoples al Tártaro; y después se desposó con su hermana Rea y gobernó en la Élide.