Desigualdad de género: Educación y convivencia

Evaluación final

Realizado Por:

Brayan Steven Rivera Cód. 1.117.528.064

Elizabeth Rodríguez Cód. 1.117.516.425
Jessica Paola Vargas Trujillo Cód. 1.117.544.099
Deicy Mayerly Ortiz Cód.

Grupo: 98

Tutor: Alex Jhovanny Hinestroza

Universidad Nacional Abierta Y A Distancia – UNAD

Escuela De Ciencias Sociales, Artes Y Humanidades
Programa De Psicología
Florencia 27 de mayo de 2018
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Introducción

El género en un sujeto se construye a partir de la influencia de

diversos factores, entre ellos está: la cultura, la clase social, la historia de la
familia, la etnia, la edad, la religión, ideologías políticas, esta influencia está
enmarcada como un proceso de socialización, puesto que es a partir de los
patrones estructurados en las relaciones intersubjetivas que se propende y
se direcciona la sexualidad en un sujeto femenino o masculino. Por esta
razón en la actualidad existe una marcada inequidad de oportunidades entre
la mujer y el hombre, puesto que gracias a la preponderancia y prevalencia
del arraigado machismo en el contexto, no se puede hablar de igualdad de
condiciones, ya que el sexo masculino siempre tiende a tener privilegios
laborales (acceso a recursos materiales), en el ámbito familiar(toma de
decisiones), por ende económicos y emocionales; impidiendo con ello que la
mujer logre desarrollarse plenamente en el colectivo en el que se
desenvuelve.
Es así, como se resalta las desigualdades sociales de género, la
construcción de géneros desde el poder y la subordinación, de las mujeres
hacia los hombres. Donde la violencia y discriminación priman en la
vulneración de los derechos humanos de las mujeres. Por lo anterior, este
trabajo tiene el fin de requerir a una adecuada revisión de la literatura que
muestre los procesos en que la sociedad ha permitido que exista
desigualdades de condiciones entre mujeres y hombres; de igual forma las
intenciones de parte de los diferentes entes gubernamentales en que se
valla generando un equilibrio de género mediante la implementación de
políticas públicas y estrategias de intervención que buscan un poco de
equidad frente a esta problemática. Por tanto, en el siguiente informe se
plantea las conclusiones individuales de cada participante del grupo y a su
vez la respuesta colaborativa de la pregunta orientadora: ¿Cómo se puede
trabajar desde la psicología para la paz en nuestro país, teniendo en cuenta
las situaciones de desigualdad y violencia de género que existen?
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Conclusiones Individuales

Brayan Steven Rivera

 En la sociedad actual es indispensable la formación en género e igualdad

como una vía esencial para prevenir la violencia, y más aun sabiendo que
el informe, Estimaciones mundiales y regionales de la violencia contra la
mujer: prevalencia y efectos de la violencia conyugal y de la violencia
sexual no conyugal en la salud (OMS, 2013), señala que cerca del 35% de
todas las mujeres del mundo han experimentado hechos de violencia, de
cualquier índole, Manifestando la necesidad de que se forjen ciertos
compromiso de todos los sectores para eliminar la tolerancia de la
violencia contra las mujeres.
 Se considera ineludible la formación para la igualdad entre hombres y
mujeres, la prevención y detección de la violencia de género y la detección
precoz de la violencia en el ámbito familiar, especialmente sobre la mujer
y los hijos e hijas. Además se muestra la importancia que existe en la
incursión de la mujer en la educación tanto formal como no formal, aun es
un tema de complejidad y de bastante tela que cortar, con el pasos de los
años aún se observa la discriminación para que la mujer acceda a ciertas
carreras que según la sociedad están diseñas solo para los hombres, ya
que hay estereotipos que no se ajustan a lo que la historia nos enseña,
por lo que hay que tener una perspectiva que nos ayude a vernos y
enfocarnos a nosotros mismos.
 La educación, como un derecho fundamental, tiene que promover el
pensamiento, la autonomía, la aceptación y el respeto a las diferencias, la
imaginación y la creatividad para buscar alternativas orientadas a resolver
pacíficamente las dificultades que surgen en la convivencia personal y
grupal, una educación integradora, no excluyente.
 Entonces, en esencia, el texto nos invita a reflexionar sobre la situación de
desigualdad que afecta a las mujeres en general (adolescentes y niñas)
que, a pesar de la preocupación de los organismos internacionales, por las
consecuencias que tienen en el desarrollo de las personas y de las
sociedades, estas sigan siendo discriminadas, ultrajadas además se debe
observar que el sistema de derechos humanos, según está establecido y
regulado y los mecanismos de garantía previstos para asegurar su
cumplimiento pueden resultar limitados cuando se trata de defender los
derechos humanos de las mujeres.
 El texto nos muestra también, la importancia que requiere cambiar y
reformar el enfoque de género a la ahora de concebir y hacer los
proyectos, programas y políticas garantizando de esta manera los
derechos de las mujeres, además; se debe hacer una comprensión
exhaustiva de las estructuras sociales y las relaciones de poder que
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condicionan no sólo las leyes y las políticas, sino también la economía, la

dinámica social y la vida familiar y comunitaria. Se hace necesario
desactivar los nocivos estereotipos de género, de modo que a las mujeres
no se les perciba según las pautas de lo que “deberían” hacer, sino que se
les considere por lo que son personas singulares, con sus propios deseos y
necesidades.
 Finalmente, el texto género y educación y convivencia muestra la
importancia de la educación en el momento de cambiar estereotipos de
género hay que tener en cuenta que la educación implica
fundamentalmente relación, por tanto, el centro educativo es un espacio
privilegiado para construir relaciones de género basadas en el derecho a la
igualdad y en el respeto por la diferencia. La educación es un compromiso
social que supone un principio de justicia elemental que requiere tratar a
todas las personas desde la igualdad de su dignidad y de sus derechos de
ciudadanía, esta forma de entender la educación obliga a crear un clima
de centro en el que no estén presentes los estereotipos tradicionales de
género y en el que, por tanto, se forme en la educación en igualdad.

Jessica Paola Vargas

 La desigualdad de género se convierte en la actualidad en una

problemática social que afecta varios contextos sociales de los individuos
salud, educación y trabajo. La misma vulnera principalmente a las
mujeres por ser el género cultural de mayor debilidad, siendo un ejemplo
de ello la violencia que por muchos años ha estado latente en la sociedad,
cada día vemos como la mujer es violentada física y psicológicamente,
cuestión que atentan contra sus Derechos Humanos. Ya que el
incumpliendo de la igualdad como norma establecida, se ve derivado de la
condición y rol cultural que las mujeres en las sociedades actuales deben
ejercer (amas de casa, cuidadoras, etc.).
Aunque existen muchas organizaciones como la ONU, ONG etc. Que con
grandes avances han planteado estrategias y/o programas para combatir
con la mitigación de la desigualdad social de la mujer, esto en el
reconocimiento de sus derechos, eliminación de la violencia,
empoderamiento entre otras acciones. Las políticas públicas y dichos
programas desde un plano crítico han sido insuficientes para velar por los
derechos, la salud e integridad física y mental de las mujeres, pues la
realidad actual muestra como este género es menospreciado, maltratado y
estigmatizado. Cada día mueren muchas mujeres a causa de la violencia y
maltrato en manos de hombres. Por esta razón es fundamental que toda
nación en sus planes sociales conforme programas educativos en género e
igualdad como una vía esencial para prevenir la violencia de género,
planteándose en la infancia, adolescencia y adultez. Además de fortalecer
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las políticas públicas en el control del cumplimiento de los derechos

humanos.
 Para alcanzar la equidad de género, se debe generar un cambio social en
el contexto familiar y social, donde las costumbres, las normas y los
aprendizajes sean más igualitarios tanto para niños como niñas,
apoyándose directamente de la educación que se convierte en un derecho
instaurado en la Declaración Universal de los Derechos Humanos, pues
este en su accionar tiene el propósito fundamental de conseguir la
igualdad de género. Luchando mediante estrategias de información y
orientación contra la discriminación y violencia de las mujeres. Por tanto,
la educación se convierte en una herramienta necesaria para asegurar la
igualdad de las mujeres, respetar sus derechos y valorarlas tal cual se
valoran a los hombres. Es de esta forma como se deben crear programas
educativos en todos los ámbitos sociales (colegios, universidades,
trabajos, etc.), pues esta permite la formación del hombre en el
fortalecimiento cognitivo y conductual a la hora de accionar
negativamente contra las mujeres, puesto que promover en el mismo el
pensamiento, la autonomía, los valores, las diferencias para buscar
soluciones a los problemas, esto de forma pacífica y respetando los roles,
contribuiría con la minimización de la violencia contra la mujer.
 Se concluye que la estrategia de educación en género en las universidades
en España, son muy viables puesto que gracias a la implementación de
estos programas en la educación superior se lograría países más justos en
igualdades para mujeres y hombres. Ya que que la educación, es un
derecho fundamental y un componente básico del desarrollo humano, que
en su ejecución contribuye con la inclusión de las mujeres, en el trabajo,
estudio etc. Formar a los futuros profesionales en ciencias, pedagogía,
literatura entre otras áreas, con bases en la formación de genero e
igualdad es una intervención que permite proporcionar competencias y
cambios de pensamiento y actitud en los individuos, que con sus
conocimientos promulgaran en sus quehaceres profesionales la
importancia de mitigar la desigualdad de género, que hoy ocasiones
similitud de diferencias que afecta el desarrollo normal de las mujeres.
Donde impregnara el saber convivir, el respeto, la solución mediada de
conflictos por iguales. La educación social, por tanto, es conveniente para
el desarrollo humano, y es tarea de las entidades sociales promover esta
estrategia, implementarla como materia y fomentar su educación en
ámbitos universitarios.

Elizabeth Rodríguez

 Marshall hace referencia sobre la ciudadanía como aquel conjunto de

derechos y de deberes que relaciona al individuo a la plena pertenencia a
una sociedad (Marshall, 1950), estas características de toda persona e
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inherentes a su dignidad, que el Estado está en el deber de respetar,

prometer o satisfacer son los que hoy conocemos como derechos
humanos garantizando su plena realización, La igualdad de género es un
principio constitucional que estipula que hombres y mujeres son iguales
ante la ley, esto indica que todas las personas, sin diferencia alguna
tenemos los mismos derechos y deberes frente al Estado y la sociedad en
su conjunto.
 Debemos entender el género como una categoría política, es decir que, no
es sólo una herramienta para el análisis, sino que constituye una
responsabilidad a favor de la igualdad de la mujer en el mundo. Mediante
la formación para la igualdad entre hombres y mujeres, la prevención y
detección de la violencia de género y la detección precoz de la violencia en
el ámbito familiar, especialmente sobre la mujer y los hijos e hijas.
Además se muestra la importancia que existe en la incursión de la mujer
en la educación tanto formal como no formal, aun es un tema complejo,
con el tiempo que ha trascurrido aún se observa la discriminación para
que la mujer acceda a ciertas carreras que según la sociedad están
diseñas solo para los hombres, ya que hay estereotipos que no se ajustan
a lo que la historia nos enseña.
 La Formación Profesional es una herramienta muy importante para
progresar hacia un nuevo modelo de crecimiento económico. promover,
en el marco del Espacio Europeo de Educación Superior, una mayor
conexión entre la Formación Profesional de Grado Superior, la Universidad
y las empresas de los distintos sectores productivos y de servicios del
ámbito público y privado, con el fin de mejorar los procesos de
investigación e innovación y la respuesta a las necesidades de un
determinado territorio. Y, finalmente, el Objetivo. Modernización e
Internacionalización de las Universidades. Formación, investigación,
transferencia del conocimiento y responsabilidad social supone un avance
para la mundialización de la educación y sus aportaciones científicas
y sociales para hacer frente a los problemas no resueltos como violencia
sobre las mujeres en todo el mundo

Deicy Mayerli Ortiz

 Se ha logrado conseguir el reconocimiento de las mujeres como iguales a

los hombres gracias a la ONU a través de la comisión de la condición
jurídica que han buscado conseguir el nivelamiento de los derechos de las
mujeres y eliminar cualquier forma de discriminación hacia nosotras. Aun
así las políticas públicas están negadas a asimilar el avance de las
femeninas aunque muchos programas se ejecuten de manera
instrumental basados en la visión y en el marco de derechos.
 Es necesario brindar formación sobre equidad y género ya que esta es una
vía de hecho para prevenir muchos actos violentos que se presentan en el
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país en contra de las mujeres, según la ONU cerca del 35% de todas las
mujeres del mundo alguna vez en la vida hemos experimentado algún tipo
de violencia en nuestra contra siendo este un indicativo demasiado alto y
que deja en entrevisto lo que se ha pretendido establecer desde el año
1945 cuando los países pertenecientes a naciones unidas se
comprometieron en adoptar medidas incluyentes que permitieran una
participación e igualdad entre las mujeres y los hombres, ya que esta es
una situación que afecta a manera general y preocupa a los organismos
internacionales debido a las consecuencias que tiene esta situación en el
desarrollo de las personas y comunidades , la desigualdad de género es
una manera de atentar contra los derechos humanos.
 En el texto podemos resaltar que subraya que la educación es debe
promover la autonomía, la aceptación y el respeto de las diferencias, el
objetivo es lograr que la educación sea fundamental y lleve las riendas de
la transformación, según Freire 1979, la educación debe ser utópica y que
promueva la transformación de realidades en el caso particular de la
equidad de genero debemos llevarlo al plano en que se requieren de
políticas públicas que apoyen la igualdad.

¿Cómo se puede trabajar desde la psicología para la paz en nuestro

país, teniendo en cuenta las situaciones de desigualdad y violencia
de género que existen?

La desigualdad de género ha sido un problema que ha estado latente por

muchos años en Colombia, actualmente como se ve en muchas noticias el
mismo ha transcendido donde se resalta con mayor proporción la violencia
de genero (muestres, maltratos, roles etc.). Estadísticamente se demuestra
que insólitamente las mujeres sufren de maltratos familiares, violaciones,
embarazos a temprana edad entre otras cuestiones que afecta no solo los
derechos humanos sino también la parte física y mental. La sociedad tiende
en su proceso de culturización justificar las agresiones y haciendo culpables
a las mujeres por provocar la situación violenta. Por tal razón se es
necesario atender y buscar estrategias de intervención para fortalecer los
programas y políticas públicas que permitan en su acción restablecer los
derechos de la mujer, desarrugar la cultura, posiblemente machista que aun
poseen las comunidades.
La inclusión del enfoque de género en el país, la promoción de
empoderamiento comunitario, y el fortalecimiento de valores como la
igualdad, la justicia, paz y reparación, deben ser el puente principal para que
se logre paz, con una igualdad de género equitativa y sin ningún tipo de
violencia. Pues para nadie es un secreto, que en nuestro país el carácter
social de la identidad de género se ha perdido de manera desmesurada, las
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desigualdades entre hombres y mujeres, como construcciones sociales,

soportadas en sistemas simbólicos, políticos, religiosos y culturales, y no en
condiciones “naturales” o biológicas siguen siendo prevalentes. De acuerdo
con esto, desde la psicología para la paz, teniendo en cuenta las situaciones
de desigualdad y violencia de género que existen en Colombia, se podría
trabajar desde muchas dimensiones ya que la psicología desde todos sus
ámbitos consigue dar aportaciones significativas que ayuden a mitigar en
cierta forma todos los episodios de violencia que muchas familias y
principalmente mujeres han tenido que vivir y afrontar de la mejor forma o
mejor decir, con las pocas herramientas que les han suministrado para salir
adelante.
Siendo una de las estrategias fundamentales en ese proceso la educación
para la paz en entornos primarios y secundarios del desarrollo del hombre,
esto mediante la puesta en marcha de talleres de educación emocional, pues
controlar las emociones del individuo conlleva a que se presenten mejores
relaciones sociales, donde se resaltan los valores como mecanismo necesario
para la equidad de genero, y fortalecimiento de la autoestima y ansiedad del
individuo. A su vez se debe fortalecer la educación sexual, donde se oriente
sobre la identidad de genero y la creación de roles mas flexibles para las
futuras generaciones, siendo el foco principal la mitigación de creencias y
culturas desiguales entre hombres y mujeres, considerándolas a ellas como
actores sociales de derechos.
Es así, como se debe asumir el enfoque de género como medio o
herramienta para que la equidad sea una realidad para los colombianos,
contribuyendo de cierta forma también a la renovación y auge de unas
políticas públicas reestructuradas desde su marco jurídico y social, para que
situaciones de desigualdad y violencia de género sean cada día menos
prevalentes en la sociedad. Donde la cultura social evoque en sus prácticas
el conjunto de valores, actitudes y comportamientos hacia el respeto de la
vida, el ser humano, su condición sexual, su dignidad, desde una paz
conciliadora. Coadyuvando al reconocimiento de la mujer y a su vez la
diversidad de genero (LGBTI, lesbianismo etc.), como personas colombianas
sujetas de derechos.
Esta actividad demanda del profesional interventor una serie de cualidades
personales y competencias disciplinares constitutivas del concepto de
comunidad y las relaciones que se dan en su interior, así como la
consolidación de una relación intervenida en la que no solo participan los
profesionales, sino que se involucran las poblaciones en la construcción de
su propia realidad, puesto que toda sociedad contribuye y se beneficia de la
diversidad cultural. Por otra parte de debe cuestionar los sistemas que sólo
buscan consignar número de personas atendidas más que sistematizar
experiencias y hacer seguimiento responsable de los procesos, en pocas
palabras dejar las estadísticas y comenzar a actuar con la comunidad, con
las mujeres vulneradas, ayudar a restablecer sus derechos y trabajar por
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afianzar proyectos sociales que garanticen que esto mismos prevalezcan en

pro de las comunidades.
En ese orden de ideas la labor del psicólogo debe ser más desde el sentir
propio, sin formatos, sin programas o lineamientos ya establecidos, debe ser
una intervención que entienda las dificultades de actuar sin explicar y
comprender, que las labores de reconstrucción tanto personal, familiar y
social deben ir más allá del simple hecho de tener unas cifras que nos hablen
cuantitativamente de cuantos sucesos han ocurrido en el país. El quehacer
en esta problemática debe girar de forma integral y positiva, donde el
objetivo primordial es lograr la satisfacción de una necesidad individual o
social en coherencia al entorno contextual del individuo, para evitar
trasgresiones y vulneraciones a los derechos propios y colectivos para el
caso puntual de la mujer.
La cultura y la paz deben entenderse como el medio idóneo para alcanzar el
humanismo y la comprensión, de las diferencias y diversidad de la sociedad,
por ello se debe resaltar la inclusión en todos los ámbitos para el verdadero
disfrute de los derechos humanos los mismos que están plasmados en
muchas leyes. Se hace indudable seguir trabajando de forma incansable
contra la no violencia de género, sensibilizar no solo a las generaciones ya
existentes, sino tomarlo como manual desde las familias como la primer
escuela, que no hay que hacer a nadie lo que no te gustaría que te hicieran,
empezar a la reconstrucción del tejido familiar, pero más allá de los
lineamientos que nos enseñan en las instituciones, deber ser una enseñanza
del alma, una enseñanza ancestral y permeada por todas las personas que
conforman las sociedades, sin importar ni la edad, la religión, el sexo, solo
debe importar el disfrute a la vida y las virtudes que la conforman, pues en
nuestro país lamentablemente se reconoce que la violencia ha afectado de
manera diferente a hombres, mujeres y a personas con identidades de
género diversas, así como su relación con desigualdades históricas.
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Referencias bibliográficas

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mayo de 2018, disponible en:
http://bibliotecavirtual.unad.edu.co:2077/lib/unadsp/detail.action?docID=1
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http://www.investigacionenlaescuela.es/articulos/59/R59_5.pdf

Mazzoldi. G, Cuesta.I, Alvarez. E. La ideología de Género: ¿Un spoiler para la paz?,

FIP, (2016). Recuperado
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