Vous êtes sur la page 1sur 6

Usamos cookies propias y de terceros para ayudarte en tu navegación.

Si continua navegando
consideramos que acepta el uso de cookies. Aprender más Lo entiendo

Fan c Es
Fan cs en español

 Login Nada como la pasión por DioXa


INICIO 8. Mismo carácter, distinto comportamiento

ULTIMOS [Comentarios - 42]   Tabla de Contenidos


FANFICS
- Tamaño del Texto +
AUTORES

TITULOS
Vegeta no estaba seguro del recibimiento que iba a recibir, pero no le
CATEGORÍAS importó. Al n y al cabo, él era el príncipe de los saiyajins y ellos sólo unos
débiles terrícolas que deben acatar sus órdenes y tratarle como se
merece. Decidió dirigirse a la mujer en estos términos:
INFORMACIÓN
- ¿Qué te ocurre, mujer?. Parece que hayas visto un fantasma. Necesito
9951 AUTORES. que tú o tu padre reviséis la cámara de gravedad, creo que ha sufrido
150623 algún daño y no funciona correctamente. Ahora voy a darme una ducha y
MIEMBROS. a comer algo, estoy hambriento. - Diciendo esto, comenzó a caminar
23528 FANFICS. rumbo al interior de la casa.
169761
CAPITULOS. - ¡Eh!, ¿dónde diablos crees que vas?. No recuerdo haberte invitado a mi
casa, ni tampoco a comer. Asi que, ya te estás largando por donde has
venido.- Le contestó Bulma llena de ira y enojo. No iba a permitir que ese
bastardo se volviera a reir de ella como lo hizo hace más de un año. Una
Fan c parte de ella, quería que se marchara, y la otra, le decía que no lo dejara ir,
pero su orgullo estaba demasiado dañado como para permitirse otro error.

Vegeta se paró un instante, volvió sus pasos hacia donde se encontraba


ella, y con su ceño fruncido le dijo:

- Eso no va a ser posible, mujer. He decidido quedarme aquí hasta la


llegada de esas chatarras, y tú no vas a impedírmelo. - Le dijo con una
sonrisa irónica.

- ¡Yujuuuu..Vegeta!. En la cocina tienes un amplio menú que te acabo de


preparar. Ya lo he dispuesto todo también para que tu habitación esté lista
enseguida. ¡Oh! Qué alegría que hayas vuelto.- La madre de Bulma
apareció de repente antes de que ella pudiera contestar y sus palabras
hicieron enojar bastante a su hija.

- ¿Pero qué estás haciendo, mama?. El no va a quedarse aquí. Es más, no


quiero que vuelva nunca más a posar sus pies en esta casa.- Dijo Bulma
fuerayde
Usamos cookies propias desí.
terceros para ayudarte en tu navegación. Si continua navegando
consideramos que acepta el uso de cookies. Aprender más Lo entiendo
Vegeta sonrió con gesto de victoria e ignorando las protestas de Bulma,
se dirigió a la cocina, entrando en ella. El nunca había podido soportar a la
Sra.Briefs, de hecho, en varias ocasiones se contuvo para no eliminarla. Su
afán por molestarle continuamente con tonterías y estupideces, le
sacaban de quicio. Pero en esta ocasión, la reacción de la rubia señora, le
estaba sirviendo para lograr su objetivo.

- Bulma, tranquilízate, hija. Si te enfadas de esa forma, conseguirás


envejecer antes de lo normal. - Le dijo la señora con su eterna sonrisa.

- ¡Mamá!. Basta ya. ¿Es que no te das cuenta de cómo es Vegeta?. Nos
trata como si fuéramos sus esclavos. Sólo nos utiliza para lograr lo que
quiere, y cuando haya acabado con esos androides, tiene pensado matar
a Goku y destruir el planeta.- Bulma estaba hecha una furia. No podía
entender como su madre era de esa manera. Nada parecía preocuparle y
siempre demostraba una tranquilidad increíble.

De pronto, la Sra.Briefs se acercó a su hija, y le acarició el cabello mientras


le decía:

- Hija... Ya has sufrido bastante..¿no crees?. Se perfectamente lo que


sientes por él. Tienes un hijo suyo, un niño precioso que lleva su sangre. Si
lo alejas de ti ahora, tal vez nunca más tendrás la oportunidad de que
vuelva a tu lado. Elegiste a un hombre difícil y ahora debes aceptar las
consecuencias. Admite que no es un hombre como los demás e intenta
comprenderle. ¿Crees que la vida junto a tu padre fue siempre tan fácil
como ahora?. Pues te equivocas. Los primeros años que pasamos juntos
fueron complicados para mí, puesto que la empresa estaba en pleno auge
y él debía viajar constantemente alrededor de todo el mundo por
negocios. La mayoría del tiempo lo pasaba sola y muchas veces estuve
en la tesitura de dejarlo todo, pero le amaba tanto que decidí esperar y
quedarme a su lado, y al nal tuve mi recompensa.- Su voz sonaba dulce
con un pequeño toque de amargura.

- Mamá...Vegeta no es como papá. Eso es lo que trato de que entiendas. A


él no le importamos en absoluto, ni tu, ni yo, ni mi hijo. Nadie le importa,
sólo se preocupa de si mismo. - Le dijo Bulma a su madre con un tono
más suave.

- ¿Y como lo sabes?. ¿Te lo ha dicho él?. Ni siquiera le has mostrado a su


hijo. Ahora eres tú la que se comporta de forma egoísta.- Replicó la
Sra.Briefs.

- ¡Oh, mamá...!. Es imposible discutir contigo sobre esto. ¡Está bien!...al n y


al cabo, esta es vuestra casa. Yo fui la que invitó la primera vez a Vegeta y
ahora debo aceptar las consecuencias. Veremos a ver qué sale de todo
esto. Será mejor que vaya a ver como se encuentra Trunks, antes no quiso
comer casi nada y me tiene bastante preocupada. - Y dejando allí a su
madre, encaminó sus pasos al interior de la casa.

Vegeta, en el último momento, había decidido darse primero una ducha,


cambiarse y luego bajar a la cocina a devorar lo que le había preparado la
Sra.Briefs. Cuando acabó de vestirse con ropa limpia, y se disponía a bajar
a comer, escuchó el llanto de un bebé que parecía provenir de la
habitación de enfrente.
Usamos cookies propias y de terceros para ayudarte en tu navegación. Si continua navegando
Salióque
consideramos de acepta
su cuarto y sede
el uso dirigió hacia
cookies. allí. Cuando
Aprender más entro, se jó que justo al
Lo entiendo
lado de la cama, se encontraba una preciosa cuna decorada con dibujos
infantiles. Se acercó a ella lentamente, y frunciendo el ceño, dirigió su
mirada al interior. El bebé no paraba de llorar y Vegeta se le quedó
mirando unos instantes hasta que se dirigió a él:

- ¡Mocoso del demonio!. Los saiyajins no lloriquean de esa forma. Si


continúas así, vas a conseguir que me estallen los oídos.- El bebé dejó de
llorar, abrió sus azules ojitos, le miró con el mismo ceño fruncido de
Vegeta, y alzó sus pequeños bracitos hacia el hombre que lo observaba. -
¿Qué es lo que quieres, niño?. Si tienes hambre, yo no puedo
proporcionarte comida. - Le dijo el príncipe con su rme tono de voz.

- ¡Aléjate de él ahora mismo! - Bulma acababa de llegar a la habitación y


aquella imagen de Vegeta asomado a la cuna, provocó que ella le gritara
de esa forma. Se dirigió con rapidez a la cuna y agarró fuertemente al
bebé entre sus brazos, casi sin que Vegeta pudiera reaccionar.

- No seas ridícula. ¿Acaso crees que si hubiera querido hacerle algún


daño, tú hubieras podido hacer algo por evitarlo?. - Le dijo el príncipe
bastante ofendido.

- Nadie te dio permiso para entrar en mi cuarto.- Contestó Bulma ya algo


más tranquila.

- Por si no lo recuerdas..mujer, hubo un tiempo en que no necesite ese


permiso del que hablas...- Sonrió de forma irónica. - Por cierto..¿qué pasó
con su cola?. No la veo por ninguna parte.- Dijo cambiando de tema al
instante.

- ¿Qué ocurre Vegeta?. ¿Acaso dudas de que sea hijo tuyo?.- Le devolvió
la misma sonrisa.

- No necesito ver su cola para saber que es mi hijo. Su nivel de combate


es muy alto para ser un niño tan pequeño. Está claro que ha heredado mis
genes. Y ahora, contesta a mi pregunta. - Contestó Vegeta con
determinación.

- Se la cortamos al nacer. Lo decidimos debido al peligro que ello suponía


tanto para él como para nosotros.- Replicó Bulma de mala gana. De
pronto, el niño empezó a llorar de nuevo con todas sus fuerzas.

- Está claro que de mi heredó su fuerza y de ti, su capacidad para gritar.


Será mejor que lo alimentes, mujer, o ese niño acabará por destrozarme
los tímpanos.- Y diciendo esto, se encaminó hacia la puerta saliendo a
través de ella.

Bulma se quedó quieta unos instantes, y al momento, se dispuso a darle


el pecho a su hijo. Mientras lo hacía, se puso a pensar en lo acontecido
unos segundos antes. Se había comportado como una estúpida creyendo
que Vegeta le haría daño al bebé. Estaba claro que el niño no
representaba ninguna amenaza para él y además, había reconocido casi
con orgullo que era su hijo. No podía creerlo. Tal vez, su repentino regreso
fuera para conocer a Trunks. No estaba segura, pero parecía estar más
tranquilo que cuando se marchó. ¿Habrá conseguido transformarse en
supersaiyajin?. Tendría que averiguarlo y haría lo posible para conseguir la
respuesta.
Usamos cookies propias De todas
y de terceros formas, ahora
para ayudarte lo importante
en tu navegación. es que
Si continua él había
navegando
regresado...y
consideramos que aceptaen el
el uso
fondo,
de ella se sentía
cookies. feliz. más Lo entiendo
Aprender

Vegeta, después de comer, volvió a su cuarto para descansar y allí se


encontraba tumbado en la cama con los brazos por detrás de la nuca. - El
crío es fuerte y está sano. Su nivel de combate es muy superior a
cualquier niño saiyajin que yo hubiera conocido anteriormente, pero su
aspecto es muy diferente...ese tono de cabello tan extraño y ese color
azul en sus ojos, iguales a los de ella. Ella...tan hermosa como siempre.
Cuando salí de esa nave y me encontré con sus ojos, la desee más que
nunca y la deseo ahora...¿por qué?..¿qué tienen sus ojos?, no es sólo
eso...es toda ella, todo su ser. Mi cuerpo necesita sentirla de nuevo,
acariciarla y hacerla mía de nuevo...porque eso es lo que ella es...es
mía...de nadie más.- Y con esos pensamientos, el príncipe se quedó
dormido.

El resto del día continuó con normalidad y Vegeta y Bulma no coincidieron


en ningún momento, parecía que ambos se estuvieran evitando.

Al día siguiente, Vegeta se encerró durante todo el día en su cámara de


gravedad y no salió de ella para nada, excepto para comer.

Al atardecer, un coche llegaba a Capsule Corp. Yamcha venía a hacer su


visita semanal a Bulma, tal como había estado haciendo los últimos
meses. Cuando marcó su código en la puerta y entró al jardín, se quedó
un momento paralizado al descubrir la cámara de gravedad en el y con
las luces encendidas. - No puedo creerlo. Ese bastardo ha vuelto mucho
antes de lo previsto.- Se dijo a sí mismo. Al momento, se dirigió al interior
de la casa buscando a Bulma y se encontró a mitad de camino con el
Sr.Briefs.

- Ah, hola Yamcha. ¿Cómo estás?.- Le preguntó amablemente el hombre.

- Pues bien, gracias. Aunque un poco sorprendido por el regreso de ese


saiyajin. - Contestó con aires de desprecio hacia Vegeta.

- Pues sí, la verdad es que nos sorprendió a todos un poco, pero ya ves, se
pasa el día entero entrenando, apenas le hemos visto desde que regresó
ayer.- Dijo el Sr.Briefs mirando por la ventana y jando su vista en la
cámara de gravedad.

- Ya... Por cierto, ¿dónde está Bulma?. - Preguntó Yamcha con curiosidad.

- Pues hace un rato que no la veo, imagino que debe estar en su cuarto
con mi precioso nieto. - Dijo volviéndose para mirar al joven.

- Gracias. Subiré para saludarla. - Y diciendo esto, se dirigió a las


escaleras.

Bulma se encontraba en su cuarto con el pequeño Trunks en brazos.


Acababa de cambiarle y el niño se mostraba feliz. Jugaba con los dedos
de su madre y ella le proporcionaba carantoñas y mimos. Esos eran los
momentos del día que más disfrutaba la mujer, los que pasaba junto a su
hijo. Verle sonreir, jugar y mirarla con esos preciosos ojos, hacían sentirse a
Bulma la persona más feliz del mundo.

De pronto, llamaron a la puerta. - ¿Si, quien es? - Contestó ella sin dejar de
sonreírle
Usamos cookies propias y deaterceros
su bebé.para ayudarte en tu navegación. Si continua navegando
consideramos que acepta el uso de cookies. Aprender más Lo entiendo
- Soy yo..¿puedo pasar?. - Se escuchó desde fuera.

- Claro, Yamcha, pasa. - Dijo mirando a la puerta.

El hombre entró y sonrió nada mas ver la imagen tan hermosa que se
mostraba ante sus ojos.

- Espero no interrumpir... - dijo acercándose a mirar al pequeño que se


mostraba feliz en brazos de su madre. - ¡Vaya, Trunks, has vuelto a crecer
desde que te vi la semana pasada! - Exclamó Yamcha.

- Tienes razón. Eres muy observador.- contestó Bulma mientras se


acercaba a la cuna para dejar allí al pequeño Trunks.

- La verdad es que sí. También he observado que ha regresado vuestro


huésped.- Dijo el joven cambiando de tema y con algo de seriedad en sus
palabras.

- Pues si...regresó ayer. Ha sido una sorpresa para todos nosotros. -


Terminó de acostar al bebé en su cunita y lo arropó con la sábana.

- ¿y para ti ha sido una sorpresa agradable o desagradable?.- La miró a los


ojos esperando impaciente una respuesta.

- No se que es lo que quieres que te responda, Yamcha. Lo cierto es que


me negué a que se quedara, pero mi madre insistió y no tuve más
remedio que acatarlo. Ayer le sorprendí aquí, observando a Trunks, y me
asusté porque pensé que quería hacerle algún daño. Pero no era así,
supongo que, aunque sea un saiyajin, la curiosidad le hizo entrar a
conocer a su hijo. No sé, Yamcha, ayer noté en sus ojos, en su forma de
comportarse, que ha vuelto distinto a cómo se marchó...no sé como
explicarlo, pero estoy segura de que no es el mismo hombre, algo ha
cambiado en él...- Bulma se había acercado a la terraza y pronunció estas
palabras mientras su vista se centraba en la cámara de gravedad y en el
juego de luces que se podían ver a través de sus pequeñas ventanas.

- ¿a qué te re eres, Bulma?. ¿Quieres decir que se ha mostrado amable o


cariñoso contigo y con Trunks?.- Preguntó extrañado el joven.

- No...en ese sentido se comportó tan "educado" como siempre.- Dijo


Bulma con una medio sonrisa, y luego continuó: - A ver cómo te lo
explico...verás, creo rmemente que Vegeta está más tranquilo, más
seguro de sí mismo, y la única explicación a eso que yo encuentro es que
haya conseguido ser un supersaiyajin al igual que Goku.-

- Puede que tengas razón. Supongo que está convencido de que acabará
con esos androides él solo. Ya le conoces, Bulma. Lo único que le importa
es pelear y demostrar a todo el mundo lo todopoderoso que es el
príncipe de los saiyajins. Yo no veo ningún cambio signi cativo en eso, y
encima ahora se mostrará aún mas arrogante y engreído de lo que era
antes. Será mejor que no te hagas muchas ilusiones en cuanto a él. -
Respondió Yamcha quitándole importancia a lo que Bulma dijo
anteriormente.

- No me hago ilusiones, lo cierto es que desde que llegó no nos hemos


visto ycasi
Usamos cookies propias y, la verdad,
de terceros pre ero que
para ayudarte en tulanavegación.
cosa siga Si
así.- Respondió
continua Bulma
navegando
intentando
consideramos negar
que acepta ellauso
evidencia. Lo cierto
de cookies. es que
Aprender se moría
más de ganas de verle
Lo entiendo
de nuevo. La noche anterior no pudo casi dormir pensando en que él se
encontraba en la habitación de enfrente, a tan sólo unos pasos de ella.
Casi podía percibir ese aroma tan varonil que él desprendía, como cuando
pasaban aquellas noches de pasión juntos, cuando la transportaba a la
locura, con sus besos, sus caricias, su mirada...Lo deseaba de nuevo, igual
o más que antes. Pero tenía que ser fuerte, no quería volver a sufrir, y
ahora su hijo la necesitaba y no podía permitirse el lujo de cometer ningún
error que pudiera afectarle a él directamente. Lo mejor sería seguir los
pasos que le ordenaba su mente y no los que le dictaba el corazón.

Al pasar un rato, Yamcha se marchó y la noche estaba empezando a caer


sobre la ciudad del Oeste. De pronto, la puerta de la cámara de gravedad
se abrió y Vegeta salió de ella con aires de tranquilidad. Fijó su vista por
unos segundos en el cielo y encaminó su rumbo hacia el interior de la
casa. Iba directo a darse una ducha para después comer algo y subir a
dormir. Mientras andaba, recordó que había sentido hacía tan solo unas
horas el ki de Yamcha cerca, y se concentró para ver si aún seguía por allí,
pero no lo localizó, probablemente se habría marchado ya. - Espero por el
bien de ese insecto, que no se le haya ocurrido en mi ausencia, ponerle
una mano encima a la mujer. Ella es mía... y esta noche... voy a reclamar lo
que me pertenece.- Se dijo a sí mismo con una media sonrisa en sus
labios.

Previo
Opciones

Siguiente

Usted debe login (registrarse) para comentar.

Buscar | Términos del Servicio | Normas de publicación | Política de


privacidad | Ayuda
©2007 por www.fan c.es. Todos fan cs son propiedad de sus respectivos
autores, así como las series de anime, manga, videojuegos o libros en los que
están basados.
SKIN BY Artphilia Designs. ALL RIGHTS RESERVED.

Vous aimerez peut-être aussi