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de los
nacionalismos
en Europa
La irrupción
de los
nacionalismos
en Europa
Una mirada crítica
al neoliberalismo global
ISBN 978-987-693-756-6
1. Nacionalismo. 2. Neoliberalismo .
Buglioni, Alfredo I. Mason, Alfredo II. Título
CDD 320.94
Índice
Prólogo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 7
Conclusiones . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 123
Bibliografía . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 147
PrÓLOGO
Debemos a Alfredo Buglioni y Alfredo Mason este gran estudio sobre los
nacionalismos populistas que irrumpieron en Europa a partir de la crisis
del 2008. Se trata de un gran aporte para poner en cuestión la estigma-
tización a la que son sometidos los gobiernos de nuestros países con la
calificación de “populismo”, tan de moda en tiempos de neoliberalismo.
La investigación demuestra que nada tienen en común sus populis-
mos con los nuestros. Esos movimientos surgen como resultado de las
políticas neoliberales planteadas por los partidos tradicionales europeos
que supieron conformar la Unión Europea para evitar guerras entre
ellos, pero no para exportarlas.
La austeridad promovida por los países de la UE generó una mayor
desigualdad entre sus miembros y entre sus pueblos. Margaret Thatcher,
fundadora del neoliberalismo británico y autora de la frase “No hay al-
ternativa”, al ser consultada sobre cuál fue su mejor obra respondió sin
dudarlo: “Tony Blair”. Para el poder real, da lo mismo ser socialista o
conservador, neoliberales son todos.
Pertenecer a la ciudadanía europea fue la gran motivación por la cual
los países del Este europeo se ajustaron para cumplir con los dictados del
Tratado de Mastrich, que exigen, entre otras cosas, no tener déficit fiscal
y sacrificar soberanía monetaria. Los rumanos, por ejemplo, lo lograron,
pero se estrellaron con carteles en restaurantes de la costa brava españo-
la donde reza: “Prohibido entrar con perros y rumanos”.
En este ejemplo está el germen de la “aporofobia”. El término fue
creado en el año 2016 por la filósofa española Adela Cortina autora del
libro Aporofobia, el rechazo al pobre: un desafio para la sociedad de-
mocratica. Surge a partir de los términos griegos áporos (sin recursos) y
fobos (temor, pánico). Según la autora es la madre de la xenofobia. Este
odio al pobre se expresa con los excluidos del propio país y de los de afue-
ra. Fue incluido en el Diccionario de la Real Academia Española en el año
2017 y declarada palabra del año por la Fundación del Español Urgente,
porque: “Aporofobia pone nombre a una realidad, a un sentimiento que,
a diferencia de otros, como la xenofobia o la homofobia, y aun estando
muy presente en nuestra sociedad, nadie había bautizado”.
Y a pobre se llega por las políticas neoliberales, pero también por el
horror de las guerras que los países más importantes de Europa exportan
a sus vecinos del África, ya sea participando activamente o vendiendo
sus armas a grupos locales, sin que importe filiación política o religio-
sa, el asunto es que se enfrente, dividan y se maten. Luego, cuando los
atacan en su propio territorio como le sucede a Francia, toda Europa se
conmociona y los ultranacionalismos explotan con su xenofobia externa
e interna.
Esos sentimientos son los que recogen los nacionalismos europeos.
Muy distintos de los “populismos” latinoamericanos cuyos valores alien-
tan la Justicia Social, la Unidad continental y la convivencia entre los
países vecinos respetando la idea de diversidad. La principal diferencia
entre el sentir de los pueblos de América Latina y los nacionalismos de
Europa es que nosotros construimos puentes y ellos solo quieren muros.