SAN FRANCISCO TUTLA, OAX.

- Autoridades del Instituto Estatal de Ecología, de

la Universidad de Ciudad Juárez, y del Centro Interdisciplinario de Investigación
para el Desarrollo Integral Regional (CIIDIR), pusieron en marcha aquí, un nuevo
prototipo de horno ladrillero, que aseguran que disminuye en 80 por ciento la
contaminación, y a la mitad el costo de operación, además de reducir el tiempo de
cocción del ladrillo rojo, de 18 a ocho horas, conservando la misma calidad
obtenida por los productores mediante sus procesos tradicionales.

Convencer a los desarrolladores del proyecto se llevó muchas semanas, hasta la

construcción del horno ladrillero en un predio del productor Juan Erick Martínez
Pérez, quien hizo votos porque este nuevo modelo no resulte un fracaso como los
creados en otras administraciones gubernamentales.

PREOCUPADOS POR LA CONTAMINACIÓN

Los 27 socios de la "Unión de Productores de Ladrillo Rojo de San Francisco

Tutla", agencia municipal de Santa Lucía del Camino, "estamos muy preocupados
por la contaminación, y ahora queremos apostarle a un cambio real a favor de la
naturaleza, pero queremos que las autoridades nos hablen siempre con la verdad
y, sobre todo, con mucha transparencia", señaló.

muchos ladrilleros de esta agencia municipal, perdieron la confianza en el

gobierno, porque los prototipos de hornos ladrilleros creados en otras
administraciones gubernamentales, supuestamente para disminuir la
contaminación durante los procesos de cocción del producto, no alcanzaron la
eficacia en producción, ni el ahorro en los costos de operación que nos ofrecieron
sus desarrolladores y por lo mismo, fracasaron.

Alba Yadira Corral Avitia, profesora investigadora de la Universidad Autónoma de

Ciudad Juárez, coordinadora del proyecto, dijo que una vez demostrada la eficacia
de este prototipo de horno ladrillero, el Instituto Estatal de Ecología y Desarrollo
Sustentable, podrá replicarlo en otras comunidades productoras de ladrillos, como
San Sebastián Tutla, Santa Cruz Amilpas, Santa Lucía del Camino, Tlacolula y
Nochixtlán, por citar algunas.

RESULTADOS ACEPTABLES

El Horno Ladrillero, con resultados aceptables en su primera prueba, fue

construido con recursos del Fondo Metropolitano, explicó Efraín Lavariega Aquino,
Jefe del departamento de cambio Climático e Impacto Ambiental del IEEDS, y
adelantó que de su funcionamiento quedarán convencidos todos los ladrilleros
oaxaqueños.

La investigadora Corral Avitia, en reunión con los productores de ladrillo de esta

agencia municipal de Santa Lucía del Camino, subrayó que 23 hornos similares
funcionan con probada rentabilidad en Ciudad Juárez.
Alba Yadira Corral añadió que a diferencia del horno tradicional que está abierto
de la parte superior y lanza una inmensa nube de humo negro, las dos unidades
que integran el MK2, están cubiertos por una cúpula. Son módulos cerrados y el
humo se queda atrapado en los mismos. Con este sistema, la emisión de CO2 se
reduce drásticamente.

Durante la segunda prueba de calentamiento y producción del Horno Ladrillero,

denominado MK2, estuvo presente el productor de ladrillo rojo, Camilo Jiménez
Chávez, originario de Ciudad Juárez, quien hizo una explicación a sus similares de
Oaxaca, sobre las bondades de este prototipo.

MAYOR PRODUCCIÓN EN MENOS TIEMPO

El horno usa aserrín como materia prima principal, y el material puede avivar la
flama desde la puerta de alimentación, a manera manual o bien, a través de un
dosificador que opera con aire a presión. Éste último equipo necesita de una toma
de electricidad para su funcionamiento.

No obstante, el nuevo prototipo permite también, con una ligera modificación, el

uso de diesel.

Un módulo tiene capacidad de cocción para siete mil ladrillos y el otro para cinco
mil 500 unidades. La tecnología permite un óptimo aprovechamiento del calor. Si
un productor, con el horno tradicional, empleaba 18 horas para lograr una
producción de siete mil ladrillos, con este nuevo sistema puede alcanzar un
volumen de diez mil piezas en tan sólo ocho horas.

Oriundo de esta comunidad conurbada a Oaxaca de Juárez, Juan Erick Martínez

Pérez, segunda generación de productores de ladrillo rojo, recuerda que los
experimentos del gobierno estatal por disminuir la contaminación que producen los
hornos ladrilleros tradicionales, data desde la administración de Heladio Ramírez
López, "cuando se nos quiso obligar al uso de gas en nuestra actividad artesanal".

En una sola quema se gastaban mil kilos de gas, y por lo mismo, el gasto era muy
fuerte. El programa gubernamental terminó rechazado por los productores.

Bondades del nuevo

prototipo de Horno Ladrillero

*Reduce en 80 por ciento la contaminación, debido a un filtro.

*El techo sellado impide la pérdida descontrolada de calor y contaminación hacia

el medio ambiente.

*Mejora la calidad del aire en el área que rodea a las ladrilleras.

*Evita que los ladrilleros estén expuestos al fuego.

*No hay pérdida de material, porque el ladrillo sale parejo sin cristalizarse ni
quebrarse.

*Ahorra tiempo al realizarse la quema: máximo diez horas en clima caliente y 12

horas en clima frío.

*Realización de quema durante diversas condiciones climatológicas (lluvia o

nieve).