NOTAS SOBRE LO QUE ES UNA CRISIS

Comprendo una crisis como dos cosas: como una detención, una parada, para
ver (como cuando uno va a Caracas por la autopista central, y llega a ese
condenado lugar cerca de San Felipe donde no sabe para dónde ir, y nadie te
ayuda, sino que se ríen y dicen "otro que se equivocó..."). La diferencia es
que, así no se trate de que no veas la dirección, igual te detienes, para ver, para
verte a ti mismo viendo. Para apreciar toda la cuestión de estar en ese
momento "crucial", en ese cruce, en esa detención, saboreando el camino,
justamente en lo que no es: ya deja de ser "caminar", y se ha convertido en
"parada". ¿Acaso no sentimos a veces en algunas paradas un sabor de
eternidad? ¿Acaso no nos hacemos imaginariamente la "absurda" pregunta
"Cómo sería si yo me quedara el resto de mi vida en este lugar"?

La segunda manera de comprender la crisis es como un momento de colación,

o filtro. Como cuando agarramos el colador o la criba, y pasamos la parchita
molida o la piña molida por ahí (o inclusive el limón, para sacarle las
condenadas pepas esas). Eso es necesario hacerlo con toda cosa que uno
muele: seleccionar lo que queremos y dejar fuera lo que no queremos. Los
locos, claro, se quedan con la broza y echan fuera el jugo. Pero desde antiguo
la preferencia es al revés, y ya Horacio aconsejaba, hace como 2000 años, que
uno "sepa filtrar (o licuar) su vino" (sapias vina liques) en una oda muy
bonita. Eso, porque el vino antiguo venía lleno de brozas e impurezas, como
moscas y pellejos de uva y etc. La visión de la crisis, la visión crítica, la que
filtra y criba lo falso de lo verdadero (si puede, y hasta donde puede),
corresponde a esta visión de la crisis.

Hay una tercera noción de crisis, y es más complicada aún. Crisis es un estado
de incertidumbre. Por ejemplo, cuando un enfermo entra en crisis, es que no se
sabe si se va a salvar o se va a morir. Eso es la propia crisis. Por ejemplo,
Venezuela, no se sabe si se va a salvar o se va a destruir, entonces diríamos
que "está en crisis". Pero eso es un decir, claro, porque hace años que pasamos
la dichos "crisis", y aún si ahora no tenemos certeza, al menos tenemos la
certidumbre de que estamos mal. Estamos mal, ya la crisis pasó. No es como
que no sabemos si fracasaremos o no: ya estamos en el suelo y mucho.