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282 PIERLUIGI CHIASSON dive, y nada dispone, acerca de la eventual retribucién del tiempo invertido por un secretario in itinere, 5. Para los jueces del Tribunal de Casacién, por tanto, parece pacffico: 44) que el derecho legislativo puede presentar lagunas —si no fuese asf, no ten- dria raz6n de ser el precepto de las disposiciones preliminares que prescribe el recurso a la analogfa y a los principios generales—, y b) que la integracién de las lagunas es algo distinto de su constatacién. No obstante, respecto de la constatacién de la laguna, que es el resultado, como se ha visto, de una sofisticada actividad de reinterpretacién, el Tribunal Supremo utiliza expresiones a la luz de las cuales la laguna parecerfa un fond- meno totalmente evidente, un genuino objeto de constaracién, asi como viene sugerido por el léxico (pero no por el contenido del ensayo) de CANARIS: Es indudable [..] ue la Ley [..] nim, 777 [..] conciemne estrictamente[.. Estd claro, por tanto, que el régimen de la Ley nit. 777/60 nada preve [..]- in. dudablemente |}. No queda sino la constatacién de que el tiempo in itinere (. etd: mas alld de la previsién de la ley considerada embargo, una evidencia similar, como se ha visto, ha pasado totalmen- te desapercibida al Tribunal. CAPITULO IV ANTINOMIAS Contrarium autem aliquid in hoe codice positun ‘ullum sibi locum vindicabie nec invenitur, si quis ‘suptilianimo diversitatis rationes excutiet. Codex lustinianus 1, ANTINOMIAS EN LOS RAZONAMIENTOS JUDICIALES En este capitulo, de la misma manera que se ha intentado Hlevar a cabo en el capitulo precedente referido a las lagunas, me propongo delinear un compendio de las nociones que pueden resultar titiles para el andlisis argu- mentativo de las sentencias (pero lo dicho vale, como de costumbre, también para los escritos doctrinales), con la finalidad de conseguir una identificacién consciente y una conceptualizacién rigurosa de las situaciones en las que los jueces, en sus discursos, se enfrentan y resuelven problemas que atienen & « Cx)p)®y se considera, ademas, que entre las formas mas im- portantes de incompatibilidad normativa se dé ante todo la incompatibilidad (que suele Hamarse) «légica», el primer concepto de antinomia (A,) puede quedar precisado del modo siguiente: (A’,) antinomia es cualquier situacién en la que dos normas jurfdicas co- nectan a un mismo supuesto de hecho abstracto (clase de supuestos de hecho concretos) consecuencias jurfdicas légicamente incompatibles. Sin embargo, zen qué ocasiones dos consecuencias juridicas son Iégica- ‘mente incompatibles? Si bien el sentido comiin metodolégico de los juristas sugiere lo contratio, a cuestién no es, en modo alguno, sencilla. De una forma totalmente provisional puede estipularse, recurriendo a una definicién ostensiva, que son «légicamente incompatibles» todas las parejas de normas juridicas de la siguiente forma: (N)) «Si F;, entonces Cy» [0: «(x) (Fx Ca)» (Ny) «Si F;, entonces no-Cy> [o: «(x) (Fx > Cx») Jas cuales conectan a un mismo supuesto de hecho (F;) consecuencias juridi ‘cas opuestas (respectivamente: C, y no-C,), cuya conjuncién da lugar a una consecuencia juridica compleja, que parece absurda o (como también se ha = Tamla como svi ti en os caps precedents: ear td (pr osu par ug nt 2) vale uc: wes enoces rh Gx donee sin ria sna pedal ue cies eta om, a ul orren ke dale econ sen stent Inc)» sito na scmindesencs jr, pune pra por Gh sch F (liga tmpome on dorm cn pe ligt Ci In mesa Meats sneer ce) 288 PIERLUIGI CHIASSON dicho) l6gicamente imposible —pues de la combinacién de las dos normas, se obtiene Ia norma: «(x) (Fy [Cyx & Cx)» —7 J: nocisn de incompatibilidad légica definida ahora ostensivamente, sin embargo, correspond s6lo a una de las dos formas de incompatibitidad V6gica Tagg norMAs que os teéricos y los jurstas suelen distinguir, Se wata en cheers See incompatbilidad, u oposicién, por contradiecién, No obstante vs cane jidera que entre las normas también pueden darse, y asf ocurre, elaciones incompatibilidad, u oposicién, l6gica por contrariedad. A Ia Tuz de lo dicho, el concepto de antinomia (A',) puede set concretado tlteriormente det modo siguiente: (212) antinomia es cualquier situacién en la que dos normas juricas eo- cones un mismo supuesto de hecho abstracto (0 clase de supuestos de hecho coneretos) consecuencias juridicas contradictorias o contrarine {Al igual que ocurre con Ia nocién de contradiccién Iégica, también la pede ea Conlrariedad légica puede definirse ostensivamente. Ein concrete (N)) «Si F,, entonces Of [esto es. «(x) (F,x > VAx)»] (N,) «Si F,, entonces Phf» (esto es: «(x) (Fx —> PhAx)»] jis cuales conectan a un mismo supuesto de hecho (F,) dos consecuencias Iurigicas que consisten, respectivamente, en la obligacidn de levar s esha wn 42. Del sentido comtin de los juristas al pragmatismo de los filésofos Con tespecto a la nocién de incompatiilidad légica entre normas, no con- Fred elt estipulaciones arriba mencionadas, que como decin rellejon eal fe ensar extendidos y consolidados en Ia cultura juridicn, equersta arfontar uno de los problemas capitales de Ia l6gica dedntica, que en ese cea ‘lo puede ser mencionado, ‘Las nociones de contradiccién y de contrariedad légica han sido acufadas Para dar cuenta de relaciones entre proposiciones (declaraivas o apofanticas) SaAsE te mez intra de portant, come Sst ee nee ee ee ANTINOMIAS be) y han sido definidas, en consecuencia, recurriendo a los predicados «verdad to» y «falso». Dos proposiciones son «contrarias» cuando no pueden ser an. bas verdaderas, pero pueden ser ambas falsas; por su parte, dos proposiciones son «contradictorias» cuando no pueden ser ni ambas verdaderas, ni ambas falsas, asf que necesariamente una de las dos es verdadera, y la otra falsa’, ‘Sin embargo, las normas jurfdicas, a diferencia de las proposiciones, no son ni verdaderas ni falsas. Son, por el contrario, segiin sea la perspectiva que se adopte en cada ocasién: validas o invalidas (en algtin sentido de «validez» {que debe definirse con precisién), aplicables o inaplicables (al menos prima facie)’, justas 0 injustas (respecto de una ciertafilosofia de la justicia), efica- Ces 0 ineficaces (respecto de sus destinatarios y/o de los érganos de aplic Ci6n), violables o inviolables, susceptibles de ser observadas o no susceptibles de serlo, utilizables (por lo que hace a alguna finalidad) o inutilizables, ete Asi pues, parece no resultar oportuno definir las nociones de contradiccidn y de contrariedad entre normas en términos de verdad o falsedad ", Entonces, c6mo definirlas?? Algunos tedricos del derecho han propuesto definiciones de los conceptos de incompatibilidad (contradiccién o contrariedad) entre normas que podrfa- ‘mos denominar pragmidticas, modeléndolos sobre Ia idea de que las antino- mmias son situaciones probleméticas por lo que hace a la préctica: son obsticu. los con los que los agentes —ya sean los ciudadanos destinalarios del derecho © los érganos de aplicacién—no pueden evitar confrontarse (y ello con inde- endencia de la eventual disponibilidad de vias de escape sencillas). En el ensayo Sui criteriper risolvere le antinomie [Sobre los criterios para resolver las antinomias, na, Norberto Boppio caracteriza la antinomia por contradiccién como la situacién de incompatibilidad entre dos normas tal que en su virtud: 4@) las dos normas no pueden ser aplicadas simulténeamente a un mismo caso (concreto), y 1b) _ se trata de establecer cudl de las dos deba ser aplicada, cul debe ser preferida por encima de la otra Bossio caracteriza por su parte la antinomia por contrariedad como la situacién de incompatibilidad entre dos normas, tal que en su virtud: * Cli, p. Con, 1961: 167s. Proposicionescontarias: «El caro de Rino es negron/l erro 1b Rino es rojon;propsiciones conradictoras: El eared de Rino es negon/al carro de Rino és no, egron "Sobre Ia nocién de evaidez-aplcabildado, o de waplicabildad estemae de una norma a un «ao, eft respectvamente: BuLYGI, 1981; 65 ss Moweso y avant, 1996: 13s "IN. Bona en un primer momento defini exes nacione en erm de ved y flsedad ef Bousio, 1960: £2 en un ensayo pocos aos desu sin embargo, como menclonaré ene texts cu breve (yen nota 11), adopt6 una postin diferente, de tipo spragmaticor Sobre las Positones ahora ‘encionadas, lt. pe ALCHOURHON, 1988: 291 ss 200 PIERLUIGI CHIASSON 4) _1as dos normas no pueden ser aplicadas simulténeamente a un mismo caso (concreto), y ) se trata de establecer si aplicar una, o bien ta otra, o ninguna de las dos, aplicando en su lugar una tercera norma". No resulta claro, en las definiciones de Bowsto, de qué tipo es la «impo: sibilidad> de «aplicar» simulténeamente las dos normas incompatibles. Por supuesto, un juez, puede (modalmente) aplicar a un mismo caso, en un mismo juicio, dos normas incompatibles; pero, si lo hace, dictaré una sentencia per- Pleja, algo absurdo, un sinsentido pragmético no susceptible de ejecucién. Parece entonces que la imposibitidad a la que alude BosBto es por lo menos pragmitica, Hay sin embargo otra lectura posible, que no excluye la primera, 10 que extrae de ésta su propia justificacién. Si, como aqui se hace, se en tiende «aplicar» en sentido técnico, como actividad reservada a los jueces (y a otros érganos de aplicacién), se podria incluso entender la «imposibilidad» a la que Bonto se refiere como una imposibilidad dedntica (normativa): como la prohibicién, establecida por una metanorma secundaria, de aplicar simul- ‘dneamente dos normas primarias incompatibles. Esta interpretacién parece cencontrarse en consonancia con las normas que suelen presidit, aqui y ahora, la actividad jurisdiccional, y proporciona por tanto una reconstruceién muy razonable de la postura de Bossio, de la que me serviré en breve, En la postuma Aligemeine Theorie der Normasn, Hans KELSeN sostiene: Existe un conilicto entre dos normas cuando aquello que una de ellas re- aula como obligatorio es incompatibile con aquello que 1a otra regula como Obligatorio, de modo que Ta observancia o la aplicacién de una norma com- porta necesaria o posiblemente la violacién de Ia otra [..]. Norma 1: El hurto debe ser castigado. Norma 2: El hurto entre parientes no debe ser castigado. La aplicacién de la norma 2 (abstencién del castigo del hurto entre parientes) resulta necesariamente una violacién de la norma 1; que Ta aplicacién de la norma | viole la norma 2 es, en cambio, tinicamente una posibilidad (s6lo si se castiga el hurto entre parientes); [..] un conflicto de normas no puede ser asimilado a una contradiccién l6gica, sino més bien —si se da el caso— a dos fuerzas que actiien sobre un mismo punto con dos direcciones distintas. Un ‘conflicto de normas es una situacién indeseable, pero totalmente posible y para nada infrecuente™ Estas propuestas definitorias caracterizan de un modo en principio plau- sible las antinomias como situaciones problemdticas en el dmbito préctico. Presentan sin embargo un defecto: hablan de «observancia», «aplicacién>, «violacién» 0 «imposibilidad de aplicacién» de normas, de modo que no se distingue con nitidez la posicién del saibdito comiin de la posicién del juez, ‘Bonmo, 19630: 95. "2 Keases 1998: cap. 29, apdos. Ly I Cl, adem las defnicions de aninomi formulas por Box.ano, 1962: 201; von Whit, 1963 203; MAzzantst, 1987: 348, 330, ¢ URRALD, 1987: 333 ANTINOMIAS 201 como seria en cambio oportuno hacerlo, En concreto, no actaran si, en orde~ namientos como los occidentales contempordncos, subsiste entre Ia posicién del siibdito y la del juez una notable asimetrfa; y en breve veremos que en efecto, en tales ordlenamientos, en ningyin caso un juez.se llega a encontrar en la situacién dilemstica evocada por Kes, que ie impone violar una de las dos normas incompatibles. ‘Teniendo en cuenta lo dicho, las nociones de contradicei6n y contratiedad normativas pueden ser caracterizadas, de manera por completo experimental, como sigue. Para el stibdito comiin frente al derecho, una antinomia es la situacién problemétiea que consiste: a) En ser destinatario de dos normas primarias que establecen conse- cuencias I6gicamente incompatibles, en el sentido antes definido, para un mis- ‘mo supuesto de hecho (simple 0 complejo)" b) En encontrarse, a consecuencia de ello, en la imposibilidad empiri- ca de observar, seguir 0 comportarse simultdneamente «on arreglo a lo que aqueéllas establecen para un tinico y mismo caso que ambas regulan» ". De tal situacién problemitica se dan dos variantes que vorresponden, res- pectivamente, a las situaciones de contradiccién normativa (normas primarias contradictorias) y a ls situaciones de contrariedad normativa (normas prima- rias contrarias). 4.2.1. Elcomiin stibdito del derecho ante dos normas contradictorias Las consecuencias légicamente incompatibles que dos normas primarias conectan a un mismo supuesto de hecho abstracto son contradictorias (esto es, dos normas son contradictorias) si: i) Los destinatarios de las normas se encuentran, al menos prima facie, cen una situacién de incertidumbre acerca de qué conducta pueden (deéntica- mente) ylo deben realizar (situacién de duda prdctica) ™ FBniendo por esupucstos de hecho simples a clase de Tos supuestos de hecho coneretos, iden- tificada sobre la base den cierto conjnto de propiedades, ala cual una norma conecta una cera con Sccucncia normativa por ssupuestos de hecho complejos»entiendo el supueso de echo que resulta dela conjuncion (no tautolopica ni contadctoria) de los supesios de hecho regulados por dos © més noemas diversi, smlténearente vigetes, al menos prima ace, Por cemplo, espeto de as norms iQ) (Re-> Cx) © «(Dr > Cx)m eta comple et supuesio de hecho ats & Ds, el cul cons Ttaye el antecedent dela norma comple, obtenida mediante la combinacion (combinato disposto) te las dos norma, sgn Ia cul «(x (Rr e Dr > Cx & Cx)» Las nociones de supuesto de hecho Complejo y de norma complej servién, como se werden breve, para ilstrar aque ipo particular de Sntinomia que sick lamatse «antinomia parcalparial,o «paral bate, 0 en conereto>. Cf ‘ademas apdo. 6. ns palabras ctdas son de Mazzaese, 1987: 348,350. 2m fi) Queda abierto, sin embargo, un curso de accién que no comporta vio- lacién alguna de normas por parte de éstos, si las normas antinémicas son normas de conducta; ni eventuales consecuencias desfavorables, antinémicas son normas atributivas de estatus 0, en general, normas constitu- tivas (duda practica relativa). Dos ejemplos tal vez. podrian ayudar a aclarar la cuestisn. Primer ejemplo. Dadas las normas de conducta (0 regulativas): (N,) «Abocar residuos t6xicos en vertederos no autorizados est prohibi- don [esto es: «(x) (RTx > PhAx)», que equivale a «(x) (RTx > “PerAx)>] (N,) «Abocar residuos t6xicos en vertederos no autorizados esta permi- tido» [esto es: «(x) (RTx > PerAx)»] los potenciales contaminadores se encuentran, al menos prima facie, en una situacién de duda priictica. Sin embargo, siempre les queda la posibilidad de Ievar a cabo una conducta que no les exponga a consecuencias juridicas ne- gativas: por eso, ¢s suficiente cumplir con la prohibicién impuesta por Ny. La imposibilidad (empirica) de comportarse simulténeamente en funcién de las dos normas no se resuelve, por tanto, con la imposibilidad (empirica) de no violar la una o Ia otra de las dos narmas, sea lo que: sea To que se haga. Segundo ejemplo. Considérense ahora las dos normas constitutivas (y cen concreto, en la terminologia de A. G. Conte, las normas tético-constitu- tivas)" (N,) «Al cumplir los dieciocho afios de edad se adquiere la capacidad de realizar todos los actos juridicos para los que no se haya previsto una edad diversa» [esto es: «(x) (I8Ex > CAJx)»] (No) «Al cumplir dieciocho arfos de edad no se adquiere In eapacidad de realizar todos los actos juridicos para los que no se haya previsto una edad diversa» [esto es: «(x) (I8Ex + sCAJx)>. Ambas normas son, por su naturaleza, inviolables. Al igual que los pote! ciales contaminadores, las personas de dieciocho afios se encuentran en una situacién de duda préctica relativa: asf, les queda abierta la posibilidad (em- pitica) de no realizar acto juridico alguno, evitando asf dar vida a actos que pudieran ser juzgados invalidos (prevaleciendo la norma N,). ™ Clr Cows 1983. nel mencionado ensayo, CONTE nigga que puedan darse antinomias dent cas: ene reglas idtico-constittvas dias (en euantorelasro-dedmicus); i) entre reps ei o-consittivas dedntias (en ent eérca-contitivas). A este dtm respect nega, por jem, fave sean antinomicas las relas wt enrogue del rey bajo jque esta prohibidos y «El enroque del rey {aj jag est permits, ya que ss estas regs son constutivas de fo que es re, jague y enroque, tmonecs ni “rey ti "jaque", mt “enroque” tienen, en la Segunda rela, el mismo sentido que "rey", Se ym denen a prime i 5 Fe exon mide, como re ova, a, ‘opr due las dos rests eidico-consttatvas dednticas pertenezcan simolténeament a un mismo “Sstnenommativo, ls dos elas den lugar situaciones de duda préctica,consistiendo en dfiniciones incompatibies entre sf den mismo tino. ANTINOMIAS 23 4.2.2. El-stibdito comiin del derecho frente a dos normas contrarias Las consecuencias I6gicamente incompatibles que dos normas conectan a ‘un mismo supuesto de hecho abstracto son contratias (esto es, dos normas son contratias), si: ’) Los destinatarios de las normas se encuentran, al menos prima facie, cen una situacién de incertidumbre sobre qué conducta pueden (dednticamen- te) y/o deben llevar a cabo (situacién de duda préctica). fi) Tal situacién los coloca frente a un auténtico dilemma: haga lo que ha- gan, siempre violardn una u otra de las dos normas de conducta, exponiéndose a eventuales consecuencias desfavorables (duda préctica absoluta), Piénsese, por ejemplo, en los destinatarios de las siguientes normas: (N,) «Abocar residuos t6xicos en vertederos no autorizados esté probibi do» [«(x) (RTx—> PhAx)», que equivale a «(x) (REx > sPerAx)») (N,) «Abocar residuos t6xicos en vertederos no autorizados es obliga- torio» [«(x) (RTx > OAx)», que equivale a «(x) (RTx > =PerAx)»], EI dilema es evidente: un comportamiento prohibido es un comporta- miento cuya comisién no se permite; un comportamiento obligatorio es un ‘comportamiento cuya omisién no se permite. Un comportamiento que, simul- téneamente, esté prohibido y sea obligatorio es un comportamiento del que, simulténeamente, no se permite la comisién y no se permite la omisi6n, 4.2.3. El juez ante las antinomias Si pasamos ahora a considerar las situaciones en las que puede encontrarse un juez en presencia de antinomias, es necesario distinguir dos casos radical- mente diversos 44) Lasituacién del juez en presencia de una antinomia entre normas pri- arias, relativas a la conducta de los sibditos comunes del derecho. +b) La situacién del juez en presencia de una antinomia entre normas secundarias, relativas, por su parte, a la conducta del propio juez.en tanto que 6tgano con autoridad. En Ia primera situacién, el juez en modo alguno se encuentra, al menos en principio, en una situacién problematica anéloga a la del sibdito. Al con- trario. Si se adopta, por ejemplo, Ia propuesta definitoria de Boraio (en la reconstruccidn que antes he offecido), cuando dos normas primarias prima ‘facie relevantes para un caso conereto son contradictorias, el juez: i) no puede (Gednticamente) aplicar ambas, y ii) debe aplicar una o la otra. 204 PIERLUIGI CHIASSON De esta manera, la antinomia por contradiccién entre normas primarias puede constituir un problema para el juez. que opere en un ordenamiento se- Imejante, si, pero s6lo si, debiendo decidir conforme a derecho y debiendo ‘motivar su decisién, el ordenamiento no le ofece algsin criterio (cierto) para cestablecer cudl de las dos alternativas es la correcta. En otras palabras: la an rnomia por contradiccién entre normas primarias puede colocar al juez en una situacidn de duda, si, como el mismo Bosbio ha puesto de manifiesto, existe tuna laguna en el nivel de las metanormas sobre la resolucisn de los conflic- tos. Este problema, por lo demas, no urge cuando se considera que, en estas situaciones, el juez tiene el poder para decidir discrecionalmente cuél de las dos normas apiicat. Las mismas consideraciones valen aparentemente también para las anti- nomias por contrariedad entre normas primarias, en presencia de las cuales, siempre a tenor de In propuesta definitoria de BosBio, el juez: i) no puede (de6nticamente) aplicar ambas; pero, ii) debe aplicar, segiin sean los casos, tuna, o bien la otra, o ninguna de las dos aplicando en este Gltimo supuesto una tercera norma, Lo que debe excluirse en ambos casos es que el juez se legue a encon- trar con la imposibilidad empfrica de aplicar dos normas que deberia aplicar simulténeamente; o en Ia situaci6n, descrita por KELSEN, de no poder aplicar tuna de ellas, sin violar a un tiempo —necesaria 0 eventualmente— Ia otra. ‘Veamos a continuacién, brevemente, la segunda de las situaciones refe- ridas anteriormente: es decir, la situaci6n del juez. en presencia de una ant homia entre normas secundarias. En tales situaciones, el juez es por hipstesis Cyr)» (N)) «Si Fy, entonces no-C», esto es: «(x) (K\x > Cx)» donde «no-C)» («C,») simboliza aqui, genéricamente, cwalquier consecuen- cia l6gicamente incompatible (contradictoria o contratia) respecto de «C» Ejemplo: (N,) «std prohibido abocar residuos en vertederos no autorizados (N,) «Est permitido abocar residuos en vertederos no autorizados» ”. 5.1.2. Antinomias relativas unilaterales Dos normas son incompatibles en modo relativo y unilateral (ineompa- tibilidad parcial unilateral, 0 total-parcial), cuando conectan consecuencias juridicas incompatibles a dos supuestos de hecho abstractos diversos, pero relacionados desde un punto de vista conceptual, de modo que el ambito de aplicacién de una de las dos normas se encuentra enteramente incluido en el de la otra norma. A dicho propésito, Ross evoca la imagen de dos eftculos, uno de los cuales se encuentra enteramente inscrito en el otro. Cuando ocurre esto, se sostiene que entre los dos supuestos de hecho abs- tractos subsiste una relacién de especie a género, o bien de subespecie a es- pecie: de modo que una de las dos normas pueda Ilamarse «especial» (0 «par- © incluso: «Aboca resis en un vertdero no autorizado esti prohibidos/«Abocar resiuos ‘en un vertedero no autorizado es obligatoion ee ANTINOMIAS Ea ticular»), respecto de la otra que, por su parte, resulta respecto de la primera (més) «general» Las antinomias relativas unilaterales se presentan entre parejas de normas juridicas de la forma siguiente: (N,) «Si F,, entonces Cy», esto es: «(x) (Fx > Cx» (N,) «Si F,, entonces no-C,», esto es: «(x) (yx —Cyx)> cuando, por hipétesis, vale que: «Si; entonces F)», esto es: «(x) (Fax —> Fy)». La norma N, es, respecto de la norma No, una norma (més) general, mien- tras que esta gltima, por su parte, es respecto de la primera, una norma parti- ccular o especial La incompatibilidad es parcial unilateral y explicita, por la siguiente ra- z6n: las dos normas, a la luz. de su formulacién, entran en contflicto en todos los casos caracterizados por las propiedades que identifican, por hip6tesis, el Ambito de aplicacién de una de las dos normas, es decir, el de la norma parti- cular, o més precisamente, N, (en nuestro ejemplo, los casos que son F). Ejemplo: (N)) «Esta prohibido abocar residuos en vertederos no autorizados»; (N,) «std permitido abocar residuos téxico-nocivos en vertederos no au- torizados». Sin embargo, las dos normas no entran en conflicto en los casos en que la propiedad F, no esté acompafiada también por la propiedad F,(F & F,). Esto es asf porque, por hip6tesis, no vale que: «Si, entonces F», esto es: «(x) (Fix > Fax)». 5.1.3. Antinomias relativas bilaterales implicitas Dos normas son incompatibles implicitamente en modo relativo y bila- feral (incompatibilidad parcial bilateral, o parcial-parcial), cuando conectan consecuencias juridicas incompatibles a dos supuestos de hecho abstractos iversos, caracterizados por propiedades sin relacién conceptual, pero no re- cfprocamente excluyentes, De modo que, segtin Ross, el dmbito de aplicacién de una de las dos normas se encuentra parcialmente incluido en el de la otra norma, y viceversa: Ross evoca, a propésito, la imagen de dos cfrculos en interseccién. Cf Moneso | Maruos, 2008: 131, 298 PIERLUIGI CHIASSON Las antinomias relativas bilaterales se presentan entre parejas de normas Jjuridicas de la forma siguiente: (N,) «Si F,, entonces Cy», esto es: «(x) (Fx > Cx)» (N,) «Si E,, entonces no-Cy», esto es: «(1) (Fat > Cy)» cuando, por hipstesis, no vale nis «SiR, entoncesF,», esto es: «(x) (Fr > Fst)» nique: «Si F,, entonces Fy», esto es: «(x) (Fat > Fx)» de modo que el conflicto surge siempre que se produzean supuestos de hecho concretos que posean, simulténeamente, las propiedades F;,,FyF, (F, &F,). En citcunstancias especificas, por lo que hace a las propiedades defini torias de los respectivos supuestos de hecho abstractos y a sus respectivas ‘extensiones, puede sostenerse que una de las dos normas sea una «norma (de derecho) comin» (a menudo, aquélla con una més amplia extensién 0 més significativa estadisticamente) y la otra sea, a su vez, respecto de la primera, ‘una «norma excepcional».. ‘Ejemplo: las dos normas (N,) «Bisté prohibido abocar residuos t6xico-nocivos en vertederos no au- torizados»; (N,) «Est permitido abocar residuos de 1a manufacturacién mineral en vertederos no autorizados» entran en conflicto siempre que, por hipétesis, ciertos desechos emplazados en el solar de una industria puedan calificarse, al mismo tiempo, como «residuos de la manufacturacién minerab> y «residuos t6xico-nocivos»™, 5.14. Antinomias relativas bilaterales explicitas os normas son explicitamente incompatibles en modo relativo y bitate- ral, cuando conectan consecuencias juridicas incompatibles a dos supuestos de hecho abstractos diversos, caracterizados por conjuntos de propiedades no reefprocamente excluyentes, en los cuales figura al menos una propiedad comin —de modo que el ‘mbito de aplicacién de una de las dos normas s encuentra parcialmente incluido en el de la otra, y vieeversa—. Sirve, también cen este caso, la imagen de los dos eftculos en interseccisn. 3 © también: Los ciadanosdeben contribu al gasto péblico mediante el pago de impues tosefeLon deaporetdos no deben contibuit al gasto pablo mediante el pago de impuestor, fe fan. IIL ando. 121 ANTINOMIAS 299 Las antinomias relativas bilaterales explicitas se presentan entre parejas de normas juridicas de la forma siguiente: (N,) «Si F; & F, entonces Cy», esto es: «(x) (Fix & Fax Ca)» (N,) «Si F; & Fy entonces no-Cy», esto es: «(x) (Fyx & Fut > Cx)» toda vez. que tengan lugar supuestos de hecho concretos que posean, simulté- rneamente, las propiedades F; y F, y F, (F; & F, & F,). Se trata entonces, podria decirse también, de antinomias entre dos normas especiales que comparten el ‘mismo género. Ejemplo: (N)) «Probibido ponerse corbatas rojas (N,) «Permitido ponerse corbatas sintéticas» ® las cuales, como resulta evidente, entran en conflicto en las clases de compor- tamientos consistentes en ponerse corbatas sintéticas de color rojo. 5.1.5. Antinomias por exclusividad bilateral Dos normas son incompatibles por exclusividad bilateral, cuando conec- tan la misma consecuencia juridica, cada una a titulo excluyente, a supuestos de hecho diversos. Cada norma, en otras palabras, establece una condicién necesaria y suficiente distinta para una cierta consecuencia juridica, Las antinomias por exclusividad bilateral se presentan entre parejas de normas jurfdicas de la forma siguiente: (N,) «Sélo si F,, entonces Cy», esto es: «(x) (Fyx => C.a)> (N,) «Sélo si F,, entonces Cy», esto es: «(x) (Fx => C.a)> y por hipstesis vale que: y entonces no-F,», esto es: «(x) (Fx > Fx)» «Si F,, entonces no-F,», esto es: «(x) (Fx > Fx)». Cada una de las dos formulas expresa, no ya una sola norma, sino la con- Juncién de dos normas (como se ha visto anteriormente: cap. I, apdo. 6.4; ‘cap. II, apdo. 14; cap. IM, apdo. 7.3): (N')) 62) (Fx > Cx)» & (N")) «(a GF > “Cpa (ND) «(3) Fax Cx)» & (N") «(0 EX > Cx)» ® Gunsm, 2004 244-24, tre a colacin ejemplo de dos narmas de as cules una probe Ik limportacisin de vino nto; yl oa permite la importacion de vinos con denominaign de orge. 300 PIERLUIGI CHIASSON Y es, respectivamente, entre las normas (N’,) y (N”,). por una parte, ¥ entre las normas (N”,) y (N’2), por la otra, entre las que subsiste la incompa- tibilidad. Ejemplo: (N)) «Tan s6to los titulares de empresas agricolas de dimensiones modes- tas pueden acceder a eréditos preferentes»; (N,) «Tan s6lo los titulares de rentas procedentes de actividades de extor- sidn pueden acceder a eréditos preferentes»®. 5.1.6. Antinomias por exclusividad unilateral Dos normas son incompatibles por exclusividad unilateral, cuando conec- tan la misma consecuencia juridica a supuestos de hecho diversos y una de elas lo hace a titulo exclusive. En otras palabras, una de las dos normas establece una condicién necesa- ria y suficiente para una cierta consecuencia juridica; allf donde la otra norma establece, por su parte, una condicién suficiente, pero no necesaria, para la ‘misma consecuencia, Las antinomias por exclusividad unilateral se presentan entre parejas de normas juridicas de la forma s (N;) «Sdlo si F), entonces Ci», esto es: «(x) (Fyx => C,x)> (N;) «Si F,, entonces C\», esto es: «(x) (Fy > Cx)» cuando, por hipstesi «Si F,, entonces no-F,», esto es: «(x) (Fx > Fx)». Como en el caso precedente, la primera de las dos férmulas expresa, no ya una tinica norma, sino la conjuncién de dos normas: (N")) (a) (Fy Cyr» & (N”)) (a) (GF > Cx). Y es, precisamente, entre las normas (N",) y (Na) entre las que subsiste la incompatibilidad. Ejemplo: nes modes- (N,) «Tan s6lo los titulares de empresas agricola de dimer tas pueden acceder a créditos preferentes»; (N,) «Los titulares de rentas procedentes de actividades de extorsién pue~ den acceder a eréditos preferentes». Las dos norias son implictamenteredundantes, como resulta evident, toda vex que en wn ‘mismo sujeto concurran, un tiempo as cuaades de modesto empresa asta extrsionado, ANTINOMIAS 201 5.2. Antinomias en abstracto, antinomias en concreto He mencionado anteriormente una segunda taxonomfa de antinomias, igualmente recurrente en la literatura te6rico-general y dogmitica, Se trata, como dije, de una taxonomia dual, que divide las antinomias en dos clases: por una parte, las antinomias directas, en abstracto, 0 (concep- tualmente) necesarias; por la otra, las antinomias indirectas, en concreto, 0 eventuales, De entre los seis tipos de antinomia que he distinguido anteriormente, partiendo de la taxonomia de Ross, cinco (las antinomias absolutas, las anti- hhomias relativas unilaterales, las antinomias relativas bilaterales explicitas, las antinomias por exclusividad bilateral, y las antinomias por exelusividad wi lateral) son antinomias directas 0 en abstracto, En todos estos casos, efectiva- mente, el conflicto entre las dos normas consideradas caso por caso depende, directamente, de su contenido: en particular, del modo en que se caracterizan los supuestos de hecho abstractos y/o del tipo de conexién légico-sintéctica «que existe entre los supuestos de hecho abstractos y las respectivas consecuen- cias juridicas, Diversamente, son antinomias indirectas —en conereto o eventuales— las antinomias parciales bilaterales implicitas. También en este caso, por st par- te, dadas dos normas que conectan consecuencias incompatibles a supuestos de hecho abstractos distintos, identificados mediante propiedades concept ‘mente no relacionadas, pero no recfprocamente exeluyentes, se puede identifi- car abstractamente la clase de casos en los que las dos normas entran en con- flicto, utiizando la técnica de combinar las disposiciones: esto es, obteniendo de las dos normas una tercera norma, compleja, que resulta de la conjuncién, respectivamente de los supuestos de hecho condicionantes y de las consecuen- cias juridicas de las dos normas (simples) de partida, Por ejemplo, de las normas (N,) «Si F,, entonces C.», esto es: «(x) (Fa —> Ca)» (N,) «Si F, entonces no-C;», esto es: «(x) (Fx > Cx)» puede obtenerse, por combinacién, Ia norma: (Ny) «Si F, & F, entonces C, y no-C), esto es: «(x) (Fix & Fat > Cyt & Cy» la cual conecta dos consecuencias incompatibles a un mismo supuesto de hecho abstracto F, & F,, gue, por hipétesis, no resulta conceptualmente im- posible, 302 PIERLUIGI CHIASSON 6. LAS ANTINOMIAS COMO INCOMPATIBILIDADES NO-LOGICAS. ENTRE NORMAS (ANTINOMIAS IMPROPIAS) La incompatibitidad l6giea —o aquello que en la teor‘a de las antinomias Jjuridicas se suele denominar as'— no es la tnica forma de incompatibilidad ‘que se considera que pueda darse entre dos normas al menos prima facie vi genes para un mismo ordenamiento. Me he referido anteriormente a la distinei6n, trazada por Karl ENGiscH, centre incompatibilidad «l6gica», «teleol6gica», «axiol6gica», y «de princi pio», poniendo de manifiesto la forma en que se considera que s6lo las anti- rnomias légicas pueden ser antinomias «en sentido propio», o «propiamente dichas>, mientras que las otras serfan antinomias «impropias» *, Las situaciones que se incluyen bajo el apelativo de antinomias impro- pias merecen atencidn en el contexto del andlisis de los razonamientos ju- diciales, en sf y por sus conexiones con las antinomias W6gicas. Tratarlas, aun cuando sea en forma sumatia, permite precisamente reflexionar sobte ulteriores, posibles, formas de conflicto entre normas, asi como afinar el instrumental conceptual con el que acercarse a una realidad lejos de ser cristalina, Con el aftadido de algunas modificaciones en la taxonomia (y la termino- logia) de ENaiscu, parece posible distinguir, junto a la incompatibilidad légica (y alas antinomias Igicas), no menos de otras cuatro formas de incompatibi- lidad normativa: 1) Ia incompatibilidad (que lamaré) pragmatica, que da lugar a las an- tinomias pragmaticas 2) Ta incompatibilidad instrumental, que da lugar a las antinomias in trumentates, en sti momento denominadas también, aunque de modo confuso, «, Enciscs 1968: 258-259, ambign incuye Ins antinomiasténicas, que econsisten (en In ausencia de undad eal erminologa. Por ‘emplo,el concepta de plicn oil urado en el derecho consttucional no e dati al del Jere) Penal, No obsante, cra aparentemente de situacioneso bien hetecogénen respect Je ors aap es de antinomiase identifcadas por él o bien reducible a éstas ANTINOMIAS 303 Antinomias pragmaticas Entre dos normas se produce una incompatibilidad pragmdtica —esto es, una relacién que podrfamos llamar de incongruencia instrumental abso- uta 0 total—, toda vez que una de las dos normas prescriba comportamic tos, 0 constituya estados de cosas, cuya existencia sea (configurable como) condicién impeditiva respecto de la realizacién del fin presctito por la otra norma Por ejemplo: respecto de la norma final (que en un ordenamiento pue- de tener el status de principio constitucional), que prescriba el deber del Estado de asegurar la reinsercién social del condenado que haya cumplido la condena, resulta (configurable como) pragméticamente incompatible la norma de desarrollo que permita transmitir un documental sobre el delito cometido por una persona, justo inmediatamente antes de su excarcelaci6n, Asf, en tal caso, la norma de desarrollo permite un comportamiento que es (previsiblemente) impeditivo de la realizacién del objetivo prescrito por la norma final, ‘En la (para nosotros ya habitual) simbologia de 1a légica de predicados, ORES)» [esto es: «Para todo x vale que: si x es un condenado que ha cumplido la condena (CC), entonces es obligatorio asegurar la reinsercién social (RES) dew] (N,) «(x) (Clr RDCx)» [esto es: «Para todo x vale que: sixes un conenado cuyo cumplimiento de con- dena es inminente (CD), entonces esté permitido retransmitit un documental sobre el delito cometido (RD) por x»], para sostener que entre las dos normas se produce una antinomia pragmética (una incongruencia instrumental total), es necesario sostener que esté fundado tn juicio empfrico de incompatibilidad pragmética —anankéstico o probabi- istico— grosso modo de la forma siguiente: (UP) «(x) (RDCLe > Sx)» [esto es: «Para todo x vale que: sires la retransmisién de un documental sobre un delito en Ia inminencia de excarcelacién de su autor, entonces x impedird 2B ejemplo ha sido extra del esbozo dl weaso Lebacho, que ALsxy, 198695 ss. ula par tear as ecolisones» ents principiosy su solucién mediante eponderacin 204 PIERLUIGI CHIASSON Seguramente 0 con un grado de probabilidad apreciable— ta reinsercién social del autor del delito»]**, 6.2. Antinomias instrumentales Entre dos normas se produce una incompatibilidad instrumental —esto ¢s, una relacién de incongruencia instrumental relativa— si i) Unade las dos normas es un norma final (impone la consecueién de un determinado objetivo) y la otra es una norma instrumental respecto de la primera (impone comportamientos, o constituye estados de cosas, con vistas a la tealizacién de aquel determinado objetivo). ii) La norma instrumental prescribe comportamientos, o constituye es- tados de cosas, que son (0 pueden razonablemente considerarse) inadecuaddos para la consecucién del objetivo prescrito por la norma final, en la medida (que se considera) prescrita y alcanzable”. AA diferencia de las antinomias pragméticas, por tanto, las antinomias ins- trumentales se producen toda vez que una norma (instrumental) prescriba 0 constituya condiciones —uo ya impeditivas, sino por decirlo asf— insuficien- tes respecto del objetivo prescrito por una norma final. Esto equivale a soste- net, en concreto, que la norma instrumental se funda sobre un juicio empiric (anankéstico 0 probabilfstico) de adecuacién instrumental que es falso, 0 en todo caso infundado. 6.3. Antinomias axiol6gicas Se produce una incompatibilidad axioldgica entre dos normas, cuando éstas reflejan valoraciones que son comparativamente incongruentes respecto de una escala de valores comunes. Ello ocurre, en particular, cuando las con- secuencias jurfdicas que las dos normas adscriben a los respectivos supuestos de hecho abstractos no son (supuestamente) congruentes respecto al valor, 0 dlesvalor, relativo de los dos supuestos de hecho, tal como puede estimarse con base en la (presunta) escala de valores comunes. Considérense, por ejemplo, dos delitos diversos: el hurto y la violacién. ® La nocién central para este tipo de incompatbilidad normatva— de una nocma que set, imponga o prescrba una condicin impeditiva para la consecucion del fin preerito por ol norma ‘equeifa un andisis que no puede concise en esta sede, ® Por ejemplo, respecto dela norma final que impone al gobiemo garantizar a convivencatan- 4quilay paeiica de Ios eudadanes,revervando a In justi ns acelones conta los malchores, soni ‘Gumenaimenteincompatbles las normas que, digamos, establezcan una organiacin para les Tuerzas policials yuna localizacién tetra de éstas —probablementeo con seguridad insuiciente para farantizar fa obj, en a medida (que se considore)dasealeo alcanzabe. ANTINOMIAS 305 En una hipotética escala de valores comin, disefiada a partir de los pri constitucionales y legislativos de politica criminal extrafdos de wn si tema penal positivo, los dos delitos pueden: a) tener el mismo desvalor; 0 cen cambio, b) tener un desvalor diverso, en cuyo caso uno de los dos tendra necesariamente un desvalor mayor que el otto. Sobre la base de estas hipstesis, la norma que castiga el hurto [Ny: «(x) (Hx 08,x)>] y la norma que castiga la violacién [Nq: «(x) (Phx —> OS3x)»] pueden resultar axiolgicamente incompatibles, en las circunstancias si- guientes. Si los dos delitos tienen el mismo desvalor, cuando los dos delitos no sean castigados con la misma pena, 0 con penas que se consideren equivalentes, ino que uno de los dos sea castigado con mayor severidad que el otro. Si los dos delitos tienen un diverso desvalor, siempre que éstos sean cas- tigados, respectivamente: a) con la misma pena, o penas consideradas equiva- lentes; 0 b) con penas diversas, cuando aquélla mas grave sea la imputada al delito por hipétesis menos grave, y viceversa Como resulta obvio, la configuracién de antinomias axiol6gicas es una operacin que requiere «constalaciones» (de la esvala de valores conn del valor/desvalor telativo de los supuestos de hecho abstractos; del valot/desva- lor relativo de las consecueneias juridicas) que pueden ser altamente opinables y Megar a consentir fatalmente a los operadores Ia proyeccién de sti propia escala de valores (sus propios principios de politica del derecho) sobre los ‘materiales juridicos utiizados. Cabe subrayar, no obstante, que la categoria de las incompatibilidades axiol6gicas es problemética también desde un punto de vista conceptual, al ‘menos por lo que hace a dos cuestiones relacionadas entre sf 1, En los ordenamientos dotados de una constitucién rfgida que por hi- pétesis encierra en si—en principios como el de igualdad, el de razonabilidad, el de proporcionalidad de las penas, etc. — la medida suprema de valoracién de la congruencia axiolégica del resto de normas, las antinomias axiolégicas ‘ng son mas que situaciones en las que se verifican violaciones de tales princi pios, por parte del legislador ordinario, que legitiman la censura por incons tucionalidad de las normas axiolégicamente incongruentes , Notese que desde esta perspectiva resulta confuso hablar de antinomia, © incompatibilidad, entre las dos normas que reflejarian valoraciones incon- sruentes. > A patrde los clementosindicados en el texto, no parece que pueda compartrse I afirmacién de Enossc, 1968: 264-265, segun la cul: «A diferencia dela antinomias peopismente dichas, que eh tbiolto pueden permanecer, las aninomias de vlorscisn, generalmente, Jeben ser aceptas COm0 Incvitabless PIERLUIGI CHIASSONI En todo caso, la incompatibilidad deberfa, més adecuadamente, ser esta- blecida entre una de las dos normas, por una parte, y los principios superiores que incorporan la escala de valores comtin, por la otra. La segunda norma, entonces, no es uno de los elementos de un conflicto normativo, sino tan sdle tun indicio de la incompatibilidad de la primera norma respecto de tales prin. Cipios, funcionando asf como término de comparacién que pone de manifiesto la incongruencia®. 2. Si, a la luz de las consideraciones precedentes, nos preguntamos — 6s ésta Ia segunda cuestién problemética por lo que hace a la nocién de in- compatibilidad axiol6gica— que incompatibilidades cabe identifica, si se da cl caso, entre una de las dos normas «axiolégicamente incompatibles», por tun lado, y las normas (superiores) que integran el sistema de valores presu- puesto por las primeras, por otro, parece que puede obtenerse la siguiente conclusion, Desde un punto de vista estructural, las antinomias axiolégicas pueden set entendidas, segiin cual sea el caso, como antinomias instrumentals, o bien como antinomias pragmticas, de un tipo particular; y concretamente: como antinomias instrumentals 0 pragmaticas complejas, en las que la incompati_ bilidad de una norma respecto de un sistema de valores y de fines ineorpora. dos a otras normas no puede ser mostrada, simplemente, acercando la norma 2 ese sistema de fines y valores; por el contrario, se necesita el auxilio de un tercer elemento (Ia otra norma), para poner de manifiesto la incongruencia, 64. Antinomias teleol6gicas Se produce una incompatibilidad teleoldgica entre dos normas, por titi mo, si ') Cada una de las dos normas es una norma final, prescribe la realiza- ci6n de un determinado objetivo —en una cierta medida, y/o en una medida razonable, y/o razonablemente apreciable—. ii) No es posible realizar conjuntamente los dos objetivos en la medida (considerada) apropiada, puesto que perseguir el objetivo marcado por una de las dos normas obstaculiza la persecucién del objetivo marcado por la otra. Desde esta perspectiva, resulta posible distinguir, a partir de la taxonomfa de Ross (como se ha visto antes, apdo. 5), entre antinomias teleoldgicas abso lutas, parciales unilaterales y parciales bilaterales. © Dicho en otros términos: a presencia simulténea de dos normas que efljanvaloracions in ‘prgtuntes inazonables) respeto de un sistema de valores comin y posupuests eel dats de og Se pate para cl establecimiento dea legiimidad de cada una dels dos nomgeeopects ded so (de Valores comin. ANTINOMIAS 307 Una antinomia teleolégica es absoluta, cuando la consecucién del fin prescrito por una de las dos normas resulta en todo caso impeditivo para la consecuciGn del fin prescrito por la otra norma, y viceversa, Una antinomia teleoldgica es parcial unilateral, cuando la consecucién del fin prescrito por una de las dos normas resulta en todo caso impeditivo para Ja consecucién del fin prescrito por la otra norma, pero no viceversa. Existen Por tanto, en hipétesis, modos de alcanzar este Gitimo fin que no interfieren hnegativamente con la consecucién del otro. Y, por tiltimo, una antinomia teleol6gica es parcial bilateral, cuando la cconsecucién del fin prescrito por alguna de las dos normas es, s6lo en algunas ocasiones, impeditivo para la consecucién del fin prescrito por la otra norma, y vieeversa, En la literatura metodol6gica més reciente se ha prestado particular aten- cidn a una especie determinada de antinomia teleol6gica, constituida, como mencionaba anteriormente, por los «conflictos entre principios» 0 «colisiones enire principios»: entendiendo que estos tiltimos son una clase especialmente importante de normas finales 0 —en el Iéxico de Robert ALEXY— «preceptos de optimizacisn»™, En conereto, se debe a ALEXY el haber oftecido un anélisis (que podrfa- ‘mos llamar) estructural de los conflictos entre prineipios consttucionales. Diria que los elementos sobresalientes del anilisis de ALEXY son Ios dos siguientes: i) Los principios constitucionales (entendidos como preceptos de op! ‘mizacién) no entran en conflicto directamente, sino indirectamente, en el nivel de las normas de desarrollo (reglas) extrafdas de éstos y, en este sentido, ins trumentalmente subordinadas a éstos («zugeordnete>. ii) La estructura de los conflicios entre principios constitucionales —y podemos afadir: de las antinomias teleolégicas en general—es, por tanto, una estructura compleja, que involucra cuatro normas. Para ilustr ALEXY aduce, entre ottos, el siguiente ejemplo (del cual ciertos asp resultan familiares para nosotros). u andlisis de la estructura de las colisiones entre principios, 108 ya Una cadena de televisién alemana pretende retransmitir un documental sobre la llamada «masacre de Lebach» —un episodio de terrorism acaecido ‘mucho tiempo atrés—coincidiendo con la excarcelacién de uno de los respon- sables. Este tiltimo solicita a la autoridad judicial que se impida la retransmi- sién del documental, puesto que lesiona su derecho, garantizado constitucio- nnalmente, a la reinsercién social. La cadena de televisiGn, personada en juicio, © Chr ALY, 1986: 958 208 PIERLUIGI CHIASSON solicita el rechazo de la inhibitoria, invocando a su favor el derecho (superior) de libertad de prensa, a su vez fundado sobre el derecho a la libertad de expre- sin, igualmente garantizado por la Constituci6n. Segiin ALEXY, los dos principios por hip6tesis constitucionalmente rele- vantes para Ia decisién del caso conereto entran en conflicto no directamente entre si, sino indirectamente: es, precisamente, a partir del hecho que de ellos se pueden extraer —mediante «coneretizacién»— dos normas de desarrollo logicamente incompatibles (y, precisamente, contradictorias) (N,) Gx) (DIEX > PRx)» [esto es: «Para todo x vale que: si x es un documental acerca de un delito, due se pretende retransmitir en la inminencia de la excarcelacién de su autor (DIE), entonces esta prohibido/no est4 permitido retransmitir (R) x]; (N,) «@) (DIEX—> PRe)» [esto es: «Para todo x vale que: si x ¢s un documental acerca de un delito, que se pretende retransmitir en la inminencia de la excarcelaciGn de su autor, en- tonces esté permitido retransmitir >]. 'Nétese que, desde la perspectiva de la taxonomia de las antinomias impro- pias que antes he trazado, una antinomia teleol6gica —por ejemplo, una anti- nomia entre principios constitucionales como aquella examinada por ALEXY— es una situacién compleja, que involucra cuatro normas (dos principios y dos normas de desarrollo derivadas de éstos, y subordinadas a éstos), en la cual, ademas de la antinomia teleol6gica entre los dos principios (que es indirecta cen el sentido ahora mismo visto) y de la antinomia légica entre las dos normas de desarrollo derivadas de estos principios respectivamente, se pueden identi- ficar dos antinomias ulteriores. Se trata, en conereto, de dos antinomias prag- miticas cruzadas: en realidad, la norma de desarrollo derivada de cada uno de los principios es pragméticamente incompatible respecto de! otro principio, 7. LA ESTRUCTURA COMPLEJA DE LAS ANTINOMIAS IMPROPIAS {Qué relaciones pueden configurarse entre antinomias propias (incompa- tibilidades I6gicas) y antinomias impropias (incompatibilidades no-I6gicas)? Desde la perspectiva de la técnica de la argumentaci6n jurfdica, puede sos- tenerse que las antinomias impropias tipicamente aparecen ligadas a las anti- nomias propias —y es posible comprender la estructura de ellas precisamente en tales conexiones—. De modo que podria hablarse, con las pertinentes cau- telas, de una conexién metodol6gica (argumentativa) tipica entre antinomias impropias, por un Ido, y antinomias propias, por otro. ANTINOMIAS 309 Acabamos de ver que una tal conexién se produce, por ejemplo, entre antinomias teleolégicas y antinomias I6gicas. Formularé, a continuacién, algunas consideraciones en tomo las relacio- nes entre antinomias légicas y el resto de antinomias impropias. 7.1. Antinomias pragméticas y antinomias Igicas Una antinomia pragmitica es, como se ha visto, una incompatibitidad en- tre una norma final [por ejemplo: (N,) «(x) (Tx -> OZx)»] y una norma de desarrollo que prescribe un comportamiento [por ejemplo: (Ns) «(x) (Lx PKx)»], 0 constituye un estado de cosas [por ejemplo: (Ns) «(x) (Tx > IKx)>], el cual obstaculiza Ia realizacién del fin prescrito por la norma final. Puesto que es cierto, o altamente probable, que: CIP) (x) (Kx > 52x), Con una premisa tal, a modo de experimento metodol6gico, una disposi- OZx)»] pod scr (re)interpretada y reformulada como la conjuneién de dos normas: a) una norma que impone («P=») a los comportamientos que realizan un cierto fin («CZ»), y b) una norma que prohibe («P>) a los comportamientos que impi- den la realizacién de («CZ»). Por ejemplo. EN?) «Qa) (Lx > APACZa)» & (N") a(x) (Tx > PC=Z)> Y por tanto, ya que: (@) (Kx > Caz) se sigue que: (N”)) (a) (Bx > PK)» que es una norma derivada de la norma final y Kégicamente incompatible res- pecto de la norma de desarrollo: (Ny) «(2) (Tx > PK». Las antinomias pragméticas son por tanto configurables como situaciones de incompatibilidad compleja, entre las que se distinguen no menos de dos situaciones diversas de incompatibilidad normativa — una incompatibilidad pragmética, entre una norma final y una norma de desarrollo por hipstesis dada; y ademés, — una incompatibilidad I6gica, entre In norma de desarrollo, dada por hipstesis, y una norma de desarrollo implicita, l6gicamente derivada de la norma final y de un juicio de condicionalidad impeditiva, 310 PIERILUIGI CHIASSON 7.2, Antinomias instrumentales o axiolégieas y antinomias légicas Una reconstruccién andloga a la precedente puede delinearse, aparente mente, incluso por lo que hace a la estructura de fas antinomias instrumentales y de las antinomias axiol6gicas. Por otto lado, estas iltimas, como dije antes, son a su vez. configurables ‘como casos particulares de antinomias pragmiticas 0 instrumentales (como se ha visto antes, apdo. 6.3). 8, IDENTIFICACION DE LOS CONFLICTOS NORMATIVOS: ANTINOMIAS E INTERPRETACION El andlisis del primer de los tres conceptos de antinomia que he definido al inicio —(A,) antinomia como incompatibilidad entre dos normas prima facie vigentes para un mismo ordenamiento— ha puesto de manifiesto que, para un instrumental ideal del anatista de los razonamientos judiciales (y también de los del jurista y del operador préctico del derecho at large), resulta ttl la inclusi6n de una pluralidad de nociones de conflicto normativo, distinguiendo (por lo menos) entre antinomias l6gicas, pragméticas, instrumentales, axi Idgicas y teleol6gicas, y teniendo en cuenta al mismo tiempo las relaciones estructurales que pueden configurarse entre éstas He mencionado que el primer concepto de antinomia (A,) es un concepto estético: una antinomia viene asf caracterizada sin hacer referencia alguna ni ‘a su «constatacidn (identificacién), ni a st posibilidad de resolucién, en un modo tal que resulta totalmente opaco respecto del aspecto metodolégico —o dindmico— del fenémeno de los conflictos normativos. El segundo concepto de antinomia —(A;) antinomia es cualquier in- compatibilidad entre dos normas, que no pueda eliminarse mediante inter- pretacién— es, por el contrario, un concepto dinémico, que obliga a prestar atencidn a las conexiones existentes entre incompatibilidades normativas ¢ interpretacién, En concreto, el segundo concepto de antinomia sugiere: — Que pueden producirse incompatibilidades normativas que cabe elimi- nar mediante interpretaci6n. — Que no obstante pueden producirse incompatibilidades normativas que, contrariamente, no pueden eliminarse mediante interpretacién. — Que, de modo estipulativo, pareciera oportuno distinguir un «auténti- co» conilicto de normas —y hablar de antinomia— s6lo en este tiltimo caso: tan slo si un conflicto normativo se resiste a la interpretacién, esto es, 8610 ANTINOMIAS: sit si no existe interpretacién capaz de eliminarlo (prevenirlo, hacerlo desapa- recer). Las relaciones entre interpretacién y antinomias son sin embargo mis complejas, y cabrfa decir més radicales, de lo que ya ha sido sugerido por el segundo concepto, (A,), en sf mismo considerado, En realidad, existen buenas razones para sostener que, en ciertas condi- ciones, las antinomias son variables dependientes de la interpretacién. As dependeria de Ia interpretacién su identificacién, y/o su eliminacién (al menos en una vfa preventiva), y/o su ereacién=! Pero, jen qué condiciones?, jen qué sentido, ademés, la interpretacién jjugaria un papel determinante en la identificacién, o la creacién, o también en Ta eliminaci6n de las incompatibilidades normativas? La tesis segtin la cual las antinomias son variables dependientes de la in- terpretacién puede ser entendida en (al menos) dos modos diversos: como una tesis de teorfa de las normas juridicas, 0 bien como una tesis de teorfa de la interpretacién, que a su vez presupone la adhesi6n a la tesis precedente de teorfa de las normas. 8.1. Las antinomias son variables dependientes de la interpretacién (en tanto que tesis de teoria de las normas) Las normas jurfdicas son esenci normas implicitas imente de dos tipos: normas explicitas y Son explicitas —como se ha dicho en varias ocasiones en el curso del presente escrito— las normas que son (configuradas o configurables como) €l significado (0 mejor: uno de los posibles significados) de una disposicién (entendiendo por «disposiciém», como se recordaré, cualquier enunciado del discurso de las fuentes). Por su parte, son implicitas as normas que: i) No son (configuradas o configurables como) el significado (0 uno de los posibles significados) de una disposicién. ii) Si identifican, por el contrario, a partir de una 0 més normas dadas, cexplicitas y/o implicitas, mediante determinadas técnicas de explicitacién (in- tegracién) —entre las que pueden mencionarse, por ejemplo: la analogia le- 2 Sobre este punto, ef, por todos, GuasTIM, 1998: 219 si, 2004; 24658; CHIASSON, 1999: 297.298, 5 Las nrmasconsuetudinarias —aiexpiitas implicit, sen la definicién que aoa ofrece tienen un papel estadsticay aoligeamente modesto (fuera del derecho ifemacional), 312 PIERLUIGI CHIASSON 4is, el razonamiento a contrario y a fortior’ o el recurso a la naturaleza de las cosas (en tanto que razonamientos productivos), la abstracci6n a partir de una sola norma especifica (menos general), la induccién a partir de un conjunto finito de normas espeeificas (menos generales), la deduceién a partir de dos o mas normas (los Hamados articulos puestos en relacién: combinato disposto) obien a partir de una norma y de una cierta definicién doctrinal o judicial [una cierta «regla (doctrinal o judicial) sobre el uso de las palabras», para retomar tuna expresién de ALEXY], la proyeccién sobre los materiales juridicos po: vos de tesis dogméticas atenientes a la naturaleza de un érgano o institucién, la proyeccién sobre materiales juridicos positivos de ideologias juridicas 0 filosofias de la justicia, etcétera, Si se adopta este punto de vista sobre las normas que componen el dere- cho, es posible trazar una taxonomia ulterior de las antinomias —genérics mente entendidas, con base en el primer concepto, como incompatibilidades entre dos normas juridicas—, distinguiendo entre antinomias entre normas explicitas, antinomias entre normas implicitas, y antinomias mixtas, i. e., entre dos normas, de las cuales, por hip6tesis, una es explicita y la otra implica. 8.1.1. Antinomias entre normas explicitas En las antinomias entre normas explicitas, por definicién, cada wna de las, dos normas incompatibles es (configurada 0 configurable como) el significado (uno de los posibles significados) de una disposicién, Si se conviene en lamar interpretacién textual a la actividad que con te en determinar el significado, acreditado o acreditable como juridicamente correcto, de una disposicién (cfr. cap. II, apdo. 2), entonces puede afirmarse —en un primer sentido, débil si se quiere— que las antinomias explicitas son variables dependientes de la interpretacin (textual): pues tales incompatibili- dades se producen asi, entre normas que, por hip6tesis, no pueden ser identi cadas sin haber llevado a cabo previamente una actividad de tal tipo ®. Antinomias entre normas implicitas Si, siempre de modo estipulativo, convenimos en llamar interpretacién metatextual al conjunto de actividades heterogéneas que incluye las activida- Por tnt, dese este punto de vist, y se trata de una tsi que Toe sostenid, si ben con una texminologta divers, por lax mentes mis rilants de la escucta de Vien (KELSEY MRL), To que el legislador(constteional,ondinaro, regional, provinell, et) produce no son norma, 6 hablando, sino dsposicioner, ie, enamciados que debertninerpretarse después para ug ‘sfetivo on a tegucln de Ia via sci, Ce, sre este puto, cap. ANTINOMIAS. 313 des de individuacién (0 explicitacién) de normas jurfdicas implicitas a partir de ciertas normas dadas, explicitas y/o implicitas, con el auxilio de las t ccas antes referidas (cfr. también cap. Il, apdo. 4, y cap. II, apdo. 11), entonces puede afirmarse —de nuevo, si se quiere, en sentido débil— que las antino- rmias enire normas implicitas son variables dependientes de la interpretacién (metatextual): pues tales incompatibilidades se producen ast entre normas que, por hipétesis, no pueden identificarse sin haber realizado previamente una actividad de tal tipo. Por tiltimo, la misma conclusién puede igualmente sostenerse, por razones obvias, en relacién con las antinomias mixtas, 8.2. Las antinomias son variables dependientes de Ia interpretacién (en tanto que tesis de teorfa de la interpretacién) La tesis segtin la cual las antinomias son variables dependientes de la interpretacién también puede ser entendida —dije anteriormente— como una tesis de teorfa de la interpretacién, que por supuesto presupone una con- cepcién de Ins normas como Ia que se encuentra en la base de Ia tesis pre- cedente. Desde este dltimo punto de vista, la interpretaci6n jugaria un papel rele- vante, segtin cual sea el caso, en el momento de identificar (constatar, averi- guar) y/o crear y/o prevenir (eliminar preventivamente) antinomias. Ahora intentaré aclarar estas nociones, limitando el discurso, por razones de brevedad, tan s6lo a las antinomias explicitas, Para tal fin, me serviré también aqui, como hice para las lagunas (cfr. ap. III, apdo. 7.3), y a modo de experimento mental, ce un modelo metodo- K6gico (como representacién esquemitica de las posibles operaciones inter- pretativas conectadas con el fenémeno de las antinomias) que se centra en la idea de que la interpretacién textual puede configurarse oportunamente como un procedimiento intelectual: a) informado por las directivas de un cédigo hermenéutico, y 6) articulado tipicamente en no menos de dos fases distintas, esto es, una fase de primera interpretacién y una fase de reinterpretacién, 0 interpretacién habida cuenta de todo, de las disposiciones™. Se trata, necesaro es reconarlo, tan slo de un modelo que me parece paricularmente pers picuo de entre os tantos por los que se puede opr el caro ultramalenarto de Id metodolog rida ‘ccidenal pede en préctiea ser reduido, sin exageracion, «una sucesiGn de innumerables modelos hermendutios sicldgieos yo puramentemtodogcos, Para una caracerizacin dels principales ‘modes, lt. ep. Hl, apo, 5, nota su PIERLUIGI CHIASSON Primera interpretacién de las disposiciones: compatibilidad total, incompatibilidad total, incompatibitidad parcial En la fase de primera interpretacién, el intérprete atribuye a cada una de Jas (para simplificar) dos disposiciones —previamente identificadas en cuan- to prima facie televantes para la solucién de una quaestio iuris, abstracta 0 concreta— un primer significado, sobre la base de las directivas primarias del cédigo interpretativo que él considera de cumplimiento obligatorio 0, por lo menos, permitido, siempre por supuesto a Ia luz de consideraciones dle opor- tunidad material o ideal ®, Por ejemplo, si el c6digo interpretativo le impone someter las dos dispo- siciones a una interpretacién a) literal (originalista y/o actualizada), 6) psic 6gica (originalista y/o contrafactual), ¢) l6gica, d) autoritativa doctrinal, asi como ¢) autoritativa judicial, el intérprete identificard para cada una de las dos disposiciones el conjunto de significados a ésta adscribible sobre la base de cada uno de tales métodos (cfr. cap. Il, apdo. 11). Los resultados de la fase de primera interpretacién —desde el punto de vista, que aqur interesa, de la identificacion de antinomias— pueden ser del siguiente tipo. Compatibilidad totat: todos los significados adscribibles a una de las dos disposiciones resultan compatibles con los significados adscribibles a la otra disposicién, y viceversa. Incompatibilidad total: todos los significados adscribibles a una de las dos dlisposiciones resultan incompatibles con los significados adscribibles ala otra disposicién, y viceversa, Incompatibilidad parcial: algunos de los significados adscribibles a una de las dos disposiciones resultan incompatibles con algunos de los significa- dos adscribibles a la otra disposicién™. Reinterpretacién de las disposiciones Dados los resultados de la fase de interpretacién inicial, en la fase de rei terpretacién (o interpretacién habida cuenta de todo) de las dos disposiciones, Sobye el modelo de los eéigos interpretative, eft: cap Il, apdos. 1013, 18. > Laipologta de las elaciones de incompatildadente los dos conjunios de normas explicitas ‘blends de las dos disposiciones pola ser refinada ltrormente,distinguiendo, por ejemplo. entte incompatibilded parcial bilateral, que corresponde al txcer caso oasiderado one texto, incompat bili parcial unilateral, 0 incompatblied otal unllatral, que se obtndria toda vex que algunos de lossignicados de una de las dos disposiciones eaten en conic eun todos lox siguificados de la ota sisposicién. Al irzar ef modelo metodolégic, omitiré a psiilidad de este sitimo tipo ANTINOMIAS ais el intérprete, a tenor de las circunstancias y de aquello que considere debido y oportuno realizar, puede altemnativament 1. Crear wna antinomia 2. Prevenir (climinar en sede interpretativa) una antinomia, 3. Constatar de modo ponderado una antinomia. 8.2.2.1, Creacién de una antinomia Puede hablarse de creacién de una antinomia en dos situaciones: — Cuando a resultas de la primera interpretacién de las dos disposiciones se da una situacién de incompatibilidad parcial entre las normas explicitas que se obtienen de las dos disposiciones. Cuando a resultas de la interpretaci6n inicial de las dos disposiciones se da una situacién de compatibilidad total entre las normas explicitas que se ‘obtienen de las dos disposiciones, En el primer caso (situacién de incompatibilidad parcial), 1 intérprete «crea» una antinomia decidiendo adscribir a las dos disposiciones dos signi ficados (normas explicitas) incompatibles entre sf, a pesar de disponer, por hip6tesis, de significados alternativos que resultan compatibles. ‘Teniendo esto en cuenta, podria hablarse a este respecto de una creacién en sentido debit. La decisi6n de proceder en este modo puede justificarse, por ejemplo, por la adhesin del intérprete a una directiva secundaria preferencial a tenor de la cual, dada una disposicién que tolere una interpretacién que dé lugar a una antinomia (junto a otras que por el contrario no dan lugar a incompatibilidad), se debe privilegiar tal interpretacién, con el fin de provocar la expulsién de la disposicién del sistema, asegurando de este modo la coherencia erga omnes del propio sistema. Esta directiva secundaria —de interpretacién antisistemé tica 0 antiadecuadora— puede por tanto reflejar la adhesién del intérprete al dogma de la coherencia del derecho, acompaftada no obstante del simultneo rechazo del principio de conservacién de los documentos normativos”. Alternativamente, la creacién de una antinomia —en la hip6tesis ahora considerada— también podria justficarse por Ia adhesin del intérprete a una directiva secundaria consecuencialista, segtin la cual: es necesario evitar att buir a una disposicién un significado que genere una ineompatibilidad si, pero sélo si, las consecuencias de la creacién de Ia antinomia y de su resolucién tienen que considerarse, habida cuenta de todo, menos ventajosas para el sis- tema, que las consecuencias de la prevencién de Ia antinomia 2 Soe este punto, ef tambign exp I, spo, 12.3.1, 316 PIERLUIGI CHIASSON Enel segundo caso (situacidn de compatibilidad oral, el intérprete «crea» tuna antinomia decidiendo reinterpretar las disposiciones para obtener de éstas al menos dos significados (dos normas explicitas) incompatibles entre sf. Aqui puede por tanto hablarse, por contraste respecto de la situacién descrita prece- dentemente, de una creacién en sentido fuerte Este resultado puede obtenerse, por ejemplo: @) mediante una reinterpretacién extensiva de los términos que, en una 0 ambas disposiciones, describe el supuesto de hecho abstracto; o bien b) mediante una reinterpretacién interpolativa de un témino con fun- cidn excluyente («s6lo» y afines) en una disposicién no-exclusiva, de modo tal que se haga expresar a esta tltima dos normas conjuntamente, de entre las cuales una por hipstesis es incompatible con la norma expresada por la otra disposicién™ La creaci6n en sentido fuerte de una antinomia comporta que el intérprete ‘modifique el propio c6digo interpretativo, utilizando directivas primarias di- versas de aquellas usadas en la fase de primera interpretacién; 0 bien que, a pesar de mantener fijo el cédigo interpretativo originario, utilice las mismas directivas teniendo en cuenta, sin embargo, diferentes recursos —por ejemplo: distintos pasajes en los trabajos preparatorios, diversas lecturas de los mismos pasajes utilizadas en la fase de interpretacisn inicial, diferentes opiniones doc- trinales, etectera—. 8.2.2.2. Prevencién de una antinomia Puede hablarse de prevencién de una antinomia, igualmente, en dos situa- me — Cuando a resultas de la primera interpretacién de las dos disposiciones se da una situacién de incompatibilidad parcial entre las normas explicitas que se obtienen de las dos disposiciones. — Cuando a resultas de la primera interpretacién de las dos disposiciones se da una situaci6n de incompatibilidad total entre las normas explicitas que se obtienen de las dos disposiciones. En el primer caso (situacidn de incompatibilidad parcial), el intérprete «previene> una antinomia decidiendo adseribir a las dos disposiciones dos significados (normas explicitas) compatibles entre sf, pese a haber identifi- cado, por hipstesis, también significados alternativos incompatibles entre sf Teniendo esto en cuenta, podria hablarse a este respecto de una prevencién en sentido débil. na" 8 modo, muir de wa dpscons en noma ex, ep ANTINOMIAS 37 La decisién de proceder de dicha forma puede justificarse, desde la pers- pectiva de las directivas hermenéuticas secundarias, por la adhesién del intér- prete a una directiva preferencial inhibitoria de interpretacién adecuadora 0 sistemiitica (también conocida, como decfa, como «argumento de la coheren- cia de la diseiplina juridica»: cap. I, apdo. 12.3.1.1), segtin la cual, dada una disposicién que tolere una interpretacién que dé lugar a una antinomia junto otras que por el contrario no den lugar a la incompatibilidad, debe evitarse {al interpretacién, con el objeto de promover, en la medida de lo posible, la coherencia del derecho y la conservacidn de los documentos normativos. Se {rata, como resulta evidente, de una metadirectiva incompatible con aquella que preside la creacién de una antinomia en la misma situacién de ineompa- tibilidad relativa, En el segundo caso (situacién de incompatibilidad total), el intérprete una antinomia decidiendo reinterpretar las dos disposiciones a modo de obtener de éstas al menos dos significados (dos normas explicitas) compatibles entre sf. Teniendo esto en cuenta, podrfa hablarse aqui, en con- traste con la situacién descrita anteriormente, de una prevencién en sentido fuerte. Este resultado puede obtenerse, por ejemplo: 4) mediante una reinterpretacién restrictiva disociadora de los términos ‘que describen el supuesto de hecho abstracto en una de las dos disposiciones, en ambas, recurriendo a la llamada técnica de la disociacién, o bien b) mediante una reinterpretacién restrictiva deflacionaria, consistente en suprimir un signo légico exclusivo u otro signo de significado excluyente de una de las dos disposiciones, o de ambas, haciendo asf que decaigan even- ‘wales antinomias por exclusividad unilateral o bien bilateral La prevencién en sentido fuerte de una antinomia comporta que el intér- prete modifique el propio cédigo interpretativo, utiizando directivas prima- rias diversas de las usadas en la fase de interpretaciGn inicial; 0 bien que, a pesar de mantener fijo el cédigo interpretativo originatio, utilice las mismas directivas teniendo en cuenta, no obstante, datos diferentes —por ejemplo, distintas consideraciones en los trabajos preparatorios o diversas lecturas de las mismas consideraciones utilizadas en Ia fase de interpretaci6n inicial, una diversa configuracién de la ratio legis, un diverso concepto dogmético, etestera—, 8.2.2.3, Constatacién ponderada de una antinomia Puede hablarse, para terminar, de constatacién o identificacién ponderada de tna antinomia cuando: a8 PIERLUIGI CHIASSON — a resultas de 1a primera interpretacién de las dos disposiciones se da una situacién de incompatibilidad total entre las normas explicitas que se ob- tienen de éstas; y ademés, — el intérprete considere que no subsisten las condiciones para proceder a la prevencién (en sentido fuerte) de 1a antinomia, ya sea modificando el cédigo interpretativo originario, o bien teniendo en cuenta datos diferentes al utilizar las mismas directivas primarias. En consideracién de lo anterior, podria hablarse mas adecuadamente de una situacién de identificacién ponderada en sentido fuerte. Para distinguir- la de la situaci6n de identificacién ponderada en sentido débil, que antes he caracterizado, desde una perspectiva diversa, como creacidn en sentido debit. 9, CRITERIOS Y METACRITERIOS PARA LA RESOLUCION DE LAS ANTINOMIAS El tercer concepto de antinomia que he definido al inicio del capstulo —(A,) antinomia es una incompatibilidad entre dos normas, que no puede set climinada mediante interpretacién, ni puede ser superada aplicando un criterio de resolucién preconstituido— es, como el segundo concepto (A;), un concep: to que captura modios de pensar en los que el fenémeno de las antinomias es visto desde la perspectiva, dinémica, de la metodologfa y de la técnica de la argumentacién juridica, Asi, el concepto (Ax) sugiere: 1, Que pueden verificarse incompatibilidades normativas, que no pue~ den prevenirse mediante interpretacién, las cuales no obstante pueden ser su- peradas aplicando un criterio de resolucién preconstituido. 2. Que pueden verificarse ineompatibilidades normativas, que no pue- den prevenirse mediante interpretacién, las cuales por el contratio no pueden ser superadas aplicando un criterio de resolucién preconstituido, puesto que un tal critetio por hip6tesis no existe, 3. Que, de modo estipulativo, pudiera resultar oportuno reconocer un «auténtico y verdadero» conflicto de normas, y hablar asf de una (verdadera) antinomia, s6lo en este tltimo caso: slo si un conflicto normative, que no puede prevenirse mediante interpretacién, tampoco puede ser superado apli- cando un eriterio de resolucién preconstituido. Mis alla de su oportunidad en sede de metodologfa tedrica, este dhimo concepto de antinomia llama la atenci6n sobre otro objeto clisico de la teorfa de las antinomias: los criterios de resolucién de antinomias, con referencia particular a su variedad, naturaleza, efectos e interferencias recfprocas. ANTINOMIAS 319 En honor a la verdad, hay que decir que se trata de uno de los sectores tra- dicionalmente més cultivados por los metodélogos del derecho. Me limitaré, Por tanto, a realizar algunas répidas consideraciones. Los criterios de resolucién de las antinomias pueden ser entendidos como quel tipo particular de metanormas metodol6gicas (cft. cap. II, apdo. 5), cuya funcién consiste en establecer — cudl, de entre dos normas incompatibles, debe pre yademés, — de qué manera ésta debe prevalecer, esto es, con qué efectos desde el punto de vista del ordenamiento jurfdico pertinente, o bien de un sector 0 subsector de aquel. lecer sobre otra; Desde el punto de vista de su otigen (genético), los criterios de resolucién de las antinomias pueden ser tanto normas explicitas (que se obtienen a partir de 1a interpretaci6n de disposiciones individuales en el discurso de las fuen- somo normas implicitas (explicitadas por los intérpretes a partir de las, téenicas adecuadas para ello); asf como también normas consuetudinarias (por ejemplo: costumbres judiciales, convenciones constitucionales, etc.) En virtud de la propiedad que se considere relevante a los efectos de es- tablecer la prevalencia de una norma sobre otra, los criterios de resolucién de antinomias pueden ser distribuidos en dos clases. ‘Son formales los criterios que hacen depender la prevalencia de una norma sobre otra de propiedades que no ataiten al contenido de tas normas en con- flicto, Son de este tipo: 1, El llamado criterio jeréirquico, o principio jerdrquico, 0 criterio de la Jjerarquia de las fuentes. 2. Blriterio de competencia, o principio de competencia, 3. El eriterio cronoldgico, 0 principio cronoldgico. Son, por el contrario, sustanciales los criterios que hacen depender la pre- valencia de una norma sobre otra de propiedades atenientes al contenido de las normas en conflicto, Son de este tipo: 1. Blcriterio de especialidad, o principio de especialidad. 2. Elcriterio de excepcionalidad, si y en la medida en que sea algo dis- tinto, como diré, al criterio de especiatidad. 3. Blecriterio que, a fata de una denominacién te6rica o dogmética con- solidada, llamaré criterio axioldgico, Los ctiterios ahora enumerados son entendidos por lo comiin como me- tanormas de primer nivel (0 bien normas de segundo nivel), que establecen ‘cules de entre dos normas incompatibles de primer nivel debe prevalecer.

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