Académique Documents
Professionnel Documents
Culture Documents
Nuestra forma de educar a los hijos viene determinada por cómo lo han
hecho nuestros padres o cómo lo hacen los demás. De esta
forma, repetimos patrones, sin analizarlos en profundidad para
determinar si están bien o mal. Hoy te daremos algunos ejemplos de
cómo ciertas actitudes que potenciamos y que creemos son buenas pueden
matar el instinto de tus hijos.
Los miedos que no se superan se convierten en barreras Cuando un niño siente esa falsa sensación de seguridad, su sexto sentido
se adormece y cuando sea necesario no se despertará. Cuando cometan un
Contrariamente a esta actitud, existen los padres que intentan proteger en error se sentirán perdidos, la inseguridad les someterá. Tenemos la
todo momento a sus hijos. Es normal que tengas esta tentación. Pero, ellos errónea idea de que debemos proteger a nuestros hijos, pero lo que en
tarde o temprano tendrán que lidiar con los problemas, los miedos y las verdad deberíamos enseñarles es cómo protegerse a ellos mismos.
situaciones con su propia actitud y sus diferentes aptitudes. Les estás
inculcando una falsa seguridad, que se va a romper drásticamente si un Como padres no siempre tenemos la razón
día no puedes alcanzar esos niveles de protección. ¿Por qué siempre queremos tener la razón? Los adultos también se
equivocan, pero parece que queremos ser mejores, dar una falsa
apariencia de perfección. No nos damos cuenta de que somos tan
humanos y tan imperfectos como los demás. Esto provoca que cometamos
muchos errores.
¿Recuerdas cuando tú eras un niño? ¿Te acuerdas de cuándo no
comprendías por qué te mandaban hacer algo cuando tus propios padres no
predicaban con el ejemplo? Esto puede contrariar a un niño, provocando
que no sepa realmente lo que está bien o lo que está mal.
El instinto de un niño se ve mermado en esta situación y en muchas otras.
Como, por ejemplo, cuando no escuchamos verdaderamente a nuestros
hijos porque lo que dicen son “tonterías”. Recuerda ese respeto que tú le
estás queriendo inculcar a tu hijo. Él también se lo merece, ¿no lo
crees?
“El ejemplo tiene más fuerza que las reglas” -Nikolái Gógol