El desamor en las canciones de Mon Laferte

En el presente texto, se analizarán 5 canciones de la artista Mon Laferte (Norma

Monserrat Bustamante Laferte), en las cuales se presenta un mismo tema, el desamor. A
partir de este tema, se analizarán las canciones y cómo se desarrollan los sujetos poéticos
en dichas canciones, los cuales son la mujer (voz poética y sujeto poético principal) y el
amado (sujeto poético secundario). Estas canciones son: Vuelve por favor, Mi buen amor,
Si tú me quisieras, Tormento e Invéntame. Además, para argumentar el análisis, se
utilizarán las fuentes “Overcoming Breakup-Superar el desamor” de Isabel Larraburu y
“Amar o depender” de Walter Riso. Este análisis se hará a partir de 3 criterios distintos, los
cuales son: Causa o motivo de la depresión, cómo vive y qué efectos causa la decepción
amorosa en el sujeto y la construcción del culpable de la decepción amorosa. A
continuación, se dará paso al análisis.

Ahora bien, el primer criterio a analizar será el de causa o motivo de la depresión del
sujeto poético principal de todas las canciones. En primer lugar, en la canción “Vuelve por
favor”, la depresión se da debido a una implícita ruptura de la relación amorosa de la voz
poética. Un ejemplo de ello, se puede evidenciar en el siguiente verso: “Me derrito en el
pasado, los recuerdos de tu amor (Estrofa 1, 7-8)”. Aquí la voz poética habla sobre un
amor del pasado y los recuerdos de este amor, por ello se puede deducir que en esta
canción se refleja la etapa posterior a una ruptura amorosa. En la canción “Mi buen
amor”, en segundo lugar, la causa de la depresión se produce por el sentimiento de
decepción frente al comportamiento de su ex pareja. Esto se puede evidenciar en el
siguiente fragmento de la canción: “Tú no cambiarás, no me vas a convencer (Estrofa 2,
1)”. En tercer lugar, en la canción “Si tú me quisieras”, a partir del análisis, el motivo de la
depresión se genera por un amor no correspondido. Esto se puede presenciar en el
siguiente verso: “Todo sería diferente si tú me quisieras (Estrofa 5)”. En la canción
“Tormento”, en cuarto lugar, al igual que en la canción “Vuelve por favor”, el sentimiento
de depresión se da debido a una ruptura de la relación amorosa, la cual se da de manera
implícita. El siguiente ejemplo refleja la existencia de esta ruptura: “Mi vida es un
tormento, mi vida es un lamento. Nadie más te amará como te pude amar, nadie más te
puede aguantar como yo, como yo (Estrofas 9-10)”. Por último, en la canción
“Invéntame”, el motivo de la depresión se da como fruto del alejamiento del ser amado.
Esto a partir del siguiente fragmento: “Por dudar de mi verdad, te fuiste ayer, dejaste mis
brazos a un amanecer (Estrofa 1)”. En suma, la causa o motivo de la depresión, en la
mayoría de canciones, se da debido a una causa externa a la voz poética, la cual la
convierte en víctima del desamor.
El segundo criterio a analizar es el cómo vive y qué efectos causa la decepción amorosa en
el sujeto poético principal de las canciones. En primer lugar, en la canción “Vuelve por
favor”, el sujeto poético principal siente dolor, sufrimiento, tristeza y depresión debido a
la ruptura amorosa. Esto se presenta en diversas partes de la canción, como, por ejemplo:
“Hay estoy sintiendo que me muero si no estás aquí a mi lado (Estrofa 1, 5-6) (…) yo no sé
cómo se vive sin tu amor, muero de sed y tú teniendo tanta agua, yo no sé que nada
calma mi dolor (Estrofa 4, 1-3)”. En estos extractos, se evidencia explícitamente el gran
sufrimiento que padece el sujeto poético principal debido al desamor, lo cual llega al
punto de crear una dependencia emocional hacia a la persona “amada”. En la canción “Mi
buen amor”, en segundo lugar, el sujeto poético de la canción muestra explícitamente que
vive la decepción amorosa con sentimientos depresivos, de resentimiento, de confusión y
sufrimiento. El siguiente ejemplo es clara muestra de ello: “Tú no cambiarás, no me vas a
convencer de que ahora sí todo va a estar bien (Estrofa 2). (…) Mi buen amor, si no quieres
regresar, por qué vuelves a buscarme una vez más (Estrofa 4, 1-3). (…) Después de todo lo
que tuve que pasar, las terapias, los amores de mentiras, más mentiras (Estrofa 6)”. En
todos estos fragmentos de la canción el sujeto poético refleja todos los sentimientos
negativos ya mencionados. En tercer lugar, en la canción “Si tú me quisieras”, el desamor
produce en el sujeto poético principal ansiedad, sufrimiento, locura, dolor, y obsesión.
Como se puede ver en las siguientes citas: “Todos los días salgo a caminar, hago mil cosas
pa’ no pensar, me lleno de adornos, sufro de trastornos, siempre te quiero llamar (Estrofa
2, 1-5)”. En este ejemplo se muestra claramente la forma negativa y enfermiza en la que el
sujeto poético vive el desamor. Como cuarto lugar, en la canción “Tormento”, el sujeto
poético principal experimenta una gran tristeza, impotencia, decepción y resentimiento
producto de una ruptura amorosa. Estos sentimientos negativos se ven de forma directa
en los siguientes ejemplos consecutivamente: “Mi amor fue sincero, te quise de verdad. A
pesar de tu silencio, te quise más. (Estrofa 1) (…) Yo sé que jamás, nadie más te amará
como te pude amar (Estrofa 3, 2) (Estrofa 4, 1-2) (…) No me grites por favor, de nuevo
hueles a licor (Estrofa 5, 1-2)”. Por último, en la canción “Invéntame”, el sujeto poético
principal vive la decepción amorosa con tristeza, nostalgia, orgullo, resentimiento y dolor.
Lo siguiente es muestra de ello: “Por dudar de mi verdad, te fuiste ayer. Dejaste mis
brazos a un amanecer (Estrofa 1, 2-4) (…) Ya no me mandes decir que no me quieres
perder (Estrofa 7, 1-2) (…) Invéntame y oblígale a que te ame como yo (Estrofa 8, 1-2) (…)
Inventa lo que un día pudimos ser (Estrofa 10, 1-2)”. En general, en todas las canciones se
puede apreciar el gran impacto que causa la decepción amorosa en el sujeto poético
principal. Impacto que, según Isabel Larraburu (“Superar el desamor”), es una de las
etapas del duelo emocional después de una ruptura. En esta etapa hay una sensación de
paralización, desorientación e incredulidad. La vida se estanca y la tensión se concentra en
la pérdida sentimental. Todos estos síntomas se presentan en todas las canciones
analizadas anteriormente. Las canciones muestran también la etapa de “pena y
depresión”, según Larraburu, esta emoción puede afectar tanto al que abandona como al
abandonado. Suele describirse como un sentimiento de vacío y como si faltase una parte
de uno mismo. Otra etapa es la de resignación, la que solo se muestra en las canciones
“Mi buen amor” e “Invéntame”. Para Larraburu esta etapa es la más difícil de todas en el
proceso de duelo, ya que no solo hay que aceptar que la relación se ha terminado, sino
que también hay que liberarse de ella por completo. Además, en algunas canciones
analizadas, el sujeto poético principal presenta obstáculos para poder superar la ruptura
amorosa. Larraburu explica que entre estos obstáculos está la dependencia, la cual se da
cuando la persona no desea terminar la relación ni mental, ni emocional ni físicamente.
Esto se puede ver de manera clara en las canciones “Si tú me quisieras”, “Vuelve por
favor” y “Tormento”.