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Unidad Didáctica #3 - Introducción al Feminismo
Índice
0. Preguntas para la reflexión. .............................. página 4
1. Feminismo: conceptos básicos. .............................. página 5
¿Qué es el patriarcado?
Sistema sexo-género.
Heteropatriarcado.
Machismo.
2. Discurso materialista: origen. .............................. página 8
División sexual del trabajo.
Economía feminista.
3. Sistema patriarcal: género y andro- .............................. página 12
centrismo.
Identidad de género.
Roles de género.
Heteronormatividad.
Masculinidad/feminidad.
4. LGTBI. .............................. página 16
Sistema heteronormativo y binómico.
5. Violencia sistémica. .............................. página 18
Violencia de Género.
-Violencia “doméstica”.
-Estereotipos de género.
-Educación sexista.
-Micromachismos.
Desigualdad laboral.
-Conciliación laboral/familiar.
6. Organización feminista. .............................. página 24
Empoderamiento.
Transversalización.
Cuotas de género.
Uso no sexista del lenguaje.
Comisión de mujeres y taller de masculi-
nidades.
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- Como elemento de estudio individual, que nos permita contar con una
base para enfrentarnos a las obras clásicas.
- Como material que sirva a los colectivos para la lectura, estudio y debate
colectivo.
- Como material de soporte que sirva para la formación de formadores ca-
paces de para impartir ponencias acerca de la temática. Además se puede contar
con el Power Point (ppt en lo sucesivo) cuya estructura es similar a la del presen-
te manual. El ppt se puede encontrar en la web de la Caja de Herramientas de la
UJCE.
- Tanto para la formación individual como colectiva, al final del mismo
proponemos una serie de elementos para profundizar sobre la temática y poder
aplicar estos métodos científicos de análisis a la realidad. Así debemos enfocar
nuestro estudio y profundización en base a tres cuestiones:
- Comprender críticamente el manual y proseguir con el estudio de las
obras y ponencias recomendadas en la bibliografía.
- Se propone responder previa y posteriormente a las preguntas que apa-
recen al principio y al final bajo el título de “Preguntas para la reflexión” y “Pre-
guntas para el Debate”, de manera individual y colectiva según sea el formato de
estudio.
-Realización de los “ Para profundizar en la política de la UJCE” de amplia-
ción biográfica y bibliográfica, así como del taller “Navegando por la red” del capí-
tulo 7.
Para cualquier duda, aportación o sugerencia que nos quieras hacer llegar
no dudes en ponerte en contacto con formacion@juventudes.org.
Una vez dicho esto, solo nos queda ponernos al estudio. Pues como dijo
Jorge Dimitrov en su famoso discurso ante el VII° Congreso de la Internacional
Comunista: “Hay que estudiar, camaradas, estudiar constantemente, a cada paso,
en el proceso de la lucha, en libertad y en la cárcel. ¡Estudiar y luchar, luchar y estu-
diar!”.
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- ¿Qué es el género?
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como se impone socialmente: de forma femenina De una mujer se espera que se case y que
si eres mujer, dulce, sumisa, amable, respetuosa tenga hijos con un hombre y que este la proteja y
y desafiante, agresivo, invulnerable si eres hom- le garantice una vida de recursos materiales su-
bre. Además debes tener el cuerpo «normal» de ficientes, mientras ella se encarga de cuidar a los
una mujer y el cuerpo «normal» de un hombre. niños y en caso de que la mujer trabaje tenga lo
El género habrá de coincidir con un sexo bioló- que venimos llamando «doble jornada laboral»,
gico determinado, imponiendo por tanto una co- la doméstica, no pagada.
rrespondencia superficial, puesto que el género
es una construcción social y no algo natural aso- Dentro de la estructura básica del patriar-
ciado a un cuerpo. cado, se configuran las relaciones sociales del
parentesco y dos instituciones: la heterose-
Dicho esto puede entenderse porqué la xualidad obligatoria y el contrato social, y
transexualidad es considerada una patología. por tanto, la heterosexualidad es esencial para la
Un transexual es una persona que nace con el continuación del patriarcado. Esta institución
sexo biológico de un género que no le correspon- afecta tanto al hombre como a la mujer,
de normativamente, es decir, desafía el sistema porque delimita los contenidos de su se-
sexo/género. Por ejemplo, una persona que nace xualidad. Por tanto, el régimen heteropatriar-
con genitales y características físicas de varón, cal también ha sido una institución económica
pero que psicológicamente se siente correspon- que ha permitido y mantenido la doble jorna-
dida con el género femenino, o a la inversa. Es da laboral para las mujeres así como la división
importante diferenciar la orientación sexual de sexual del trabajo. El capitalismo se sostiene
la identidad de género. como sistema político, económico, social, cultu-
ral y militar, apoyado en múltiples dominaciones
En la actualidad, la transexualidad es que refuerzan el sometimiento de amplias fran-
considerada como una patología bajo el nombre jas de la humanidad, aumentando su dependen-
de “trastorno de identidad de género”. Este he- cia y vulnerabilidad. El heteropatriarcado contri-
cho hace que las instituciones médico-psiquiá- buye en esta perspectiva, colocando a una parte
tricas tengan el control sobre las identidades de de la humanidad- las mujeres y las personas que
género y se aplique un ataque tránsfobo sobre se alejan del patrón heterosexual- en condicio-
quienes no se adecuan a las normas sociales es- nes desventajosas y en la marginalidad.
tablecidas sobre la construcción sociocultural
del género. Frente a la condición heterosexual como
norma, conviene que quede claro el concepto de
«orientación sexual» como independiente
Heteropatriarcado. del sexo o del género: La orientación sexual es
la atracción romántica, emocional y sexual hacia
Hablamos de Heteropatriacardo para otras personas, la cual lleva a establecer relacio-
referirnos a que desde el sistema patriarcal se nes sexuales y afectivas con personas de uno
nos impone no sólo que: i) si tenemos un de- u otro sexo. No hay que olvidar que prácticas y
terminado sexo tenemos que tener su género relaciones sexuales y afectivas tienen que ver
«correspondiente», convirtiendo las diferencias mucho más con las relaciones sociales del ser
entre hombres y mujeres en algo natural, ii) sino humano más que con otros aspectos, como po-
también que tenemos que desear al género-se- drían ser los biológicos, es más, la orientación
xo contrario al nuestro. Pues, una verdadera mu- sexual no guarda relación alguna con el sexo
jer desea a un hombre y un verdadero hombre biológico de la persona. La orientación sexual se
no puede desear a otro hombre, ya que dejaría podría representar como una línea continua que
de ser un «hombre de verdad». va desde heterosexualidad hasta homosexuali-
dad. Las personas totalmente heterosexuales se
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Machismo.
Si decimos que el patriarcado es el con-
junto de relaciones sociales y representaciones
ideológicas por las que un conjunto de individuos,
conformado como colectivo social homogéneo
(varones), domina a otro conjunto de individuos,
que también es conformado como colectivo so-
cial homogéneo (mujeres), esto implica que en
función del sistema se desprendan coacciones
diversas. Si decimos que el patriarcado es un
sistema, el machismo son los efectos visibles
de ese sistema y por tanto el machismo será la
manifestación del sistema de opresión en forma
violenta, ya sea física, psicológica o simbólica.
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que el capital realiza sobre la fuerza de trabajo. eliminación de la división sexual del trabajo.
Para las mujeres obreras, la opresión de Sin embargo no podemos analizar la eco-
género introduce un incremento diferencial en nomía feminista dejando de lado la perspectiva
su explotación. El sistema explota a las mujeres socialista. El patriarcado oprime a todas las mu-
en el ámbito laboral sin quitarle la responsabili- jeres, pero esta opresión ha ido desarrollándo-
dad histórica por el trabajo doméstico no remu- se a lo largo de la evolución del sistema de pro-
nerado, recargándolas con una doble jornada ducción capitalista, por lo que somete a la mujer
laboral. A lo cual, hay que añadir el hecho de trabajadora a una doble desigualdad: la de ser
que las religiones y otras instituciones refuercen mujer y clase obrera. Es por ello que no enten-
ideológicamente este sistema postergando una demos posible la liberación de la mujer y la des-
y otra vez a “la mujer como el corazón del hogar”. trucción del patriarcado fuera de la lucha por el
socialismo, como tampoco cabe socialismo sin
la destrucción del patriarcado. De esta manera,
Economía feminista. debemos analizar la economía feminista desde
la perspectiva marxista de la división sexual del
La economía feminista trata de poner de trabajo y comprender que el patriarcado no sólo
relieve aquellas actividades que históricamente se manifiesta en la superestructura, sino tam-
han sido invisibilizadas y catalogadas como tra- bién en la infraestructura.
bajo alejado de la producción (no productivo) y
que, además, han sido realizadas comúnmente Los principales objetivos de la economía
por mujeres. Las temáticas que asimismo abor- feminista son la satisfacción de las necesidades
dan son el trabajo y empleo, el uso del tiempo, básicas de las mujeres y de los hombres. Para
los cuidados, la feminización de la pobreza, po- ello es necesario poner en cuestión el modelo de
líticas de conciliación, desarrollo económico y organización de los tiempos y la división sexual
bienestar, pero sobretodo introducir la perspec- del trabajo. Se debe establecer un nuevo plan-
tiva de género en la economía política. Asimis- teamiento para el acceso a los recursos y benefi-
mo, la economía feminista denuncia la función cios entre hombres y mujeres. Además, estable-
del trabajo doméstico dentro del actual sistema cer una nueva definición sobre quién hace qué y
económico, analiza la existencia de la división cómo se valora; cómo se toman decisiones al in-
entre trabajo reproductivo y trabajo productivo terior de los hogares; cuáles son y cómo se distri-
y además establece esta división no es neutral buyen los empleos remunerados; qué posibilita
según el género, sino que está profundamente y qué dificulta el reparto de la riqueza y a quién;
marcada por las relaciones de desigualdad que cómo se reparten las tareas del hogar; cómo se
se dan entre mujeres y hombres. También reco- atienden las necesidades de las personas depen-
noce su existencia como lugar de trabajo y como dientes, a quién afecta y en qué sentido; cómo
elemento central para la reproducción y reposi- las leyes y el contexto socio-económico influyen
ción de la fuerza de trabajo. Trabajo socialmente en el mantenimiento de la división sexual del
necesario, no remunerado y que debe cuantifi- trabajo y en el replanteamiento de la división
carse y añadirse a cualquier análisis para enten- genérica de la sociedad. En definitiva, un cambio
der la explotación en el capitalismo. de modelo de sociedad basado en la sostenibili-
dad del desarrollo humano, medioambiental y
Por lo tanto, podemos decir que la eco- económico en términos de igualdad de género y
nomía feminista representa la aplicación de un justicia social. Es decir, aplicar el enfoque femi-
nuevo enfoque que, desde el pensamiento femi- nista a la lucha por la liberación social de la clase
nista y desde un sentido interdisciplinar, tiene trabajadora y la construcción del socialismo.
un alto potencial transformador, proponiendo la
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Si los hombres deben estar plenamente estar social. Éste estadio lo podremos conseguir
disponibles para las empresas, se entiende que a través de una reforma fiscal progresiva, sa-
no ejercen responsabilidades en el ámbito del cando los recursos monetarios para ponerlos a
hogar. Sin embargo, las mujeres si actúan en di- funcionar bajo otra lógica, es decir, distribución
cho ámbito puesto que se entiende el ser ama de de recursos y prestaciones públicas para hacer
casa como algo natural. Pero nosotras no ejerce- efectiva una reorganización social y económica
mos exclusivamente ese rol, también formamos alternativa a la actual. A su vez, hay que prohi-
parte de la esfera de pública de la sociedad, en la bir el ánimo de lucro en los sectores del cuidado
cual sufrimos una doble opresión e invisibilidad, privado. No debiendo a estar sometido a la lógica
cargándonos con responsabilidades en ambos de la acumulación del capital, por tanto tiene que
espacios. Es importante mencionar que las ta- ser el Estado quien debe garantizar tales servi-
reas del hogar, al no ser remuneradas, quedan cios. Además, para poder tener una conciliación
simbólicamente asociadas al “no-trabajo” y ex- familiar real se debe disminuir la jornada laboral
cluidas del campo analítico de la economía. son que ello suponga una pérdida del salario y
que se establezca una reorganización del espacio
Si analizamos las características del tra- y tiempo en función de las y los trabajadores y
bajo no remunerado de las mujeres y su función de las trabajadoras, y nunca por parte de las em-
dentro del sistema capitalista, demostraremos presas. En cuanto al trabajo reproductivo tiene
su enorme importancia en el mantenimiento de que haber un reconocimiento de la reproducción
la fuerza de trabajo y su contribución a la satis- (mantenimiento de la vida y cuidados persona-
facción de necesidades dentro de la organización les e integración de las necesidades básicas) en
económica (regida por el sistema patriarcal). El el modelo de desarrollo y en la consecución de
trabajo no remunerado de las mujeres sostiene la una vida digna para todas las personas y un es-
sociedad y ayuda a bajar desproporcionadamen- tablecimiento del régimen de empleo doméstico.
te los costes de mantenimiento y reproducción Por tanto, estamos de acuerdo en que el desarro-
de la sociedad capitalista. Es decir, el sistema ca- llo de las personas que forman una sociedad no
pitalista no solo se beneficia de este injusto re- es un asunto privado ni familiar, ni de mujeres,
parto sexual del trabajo, sino que no puede fun- sino que debe ser una responsabilidad colectiva.
cionar sin el trabajo dedicado a la reproducción El Estado y las instituciones públicas deben asu-
social. Aquí es donde toma sentido la economía mir su responsabilidad de garantizar el derecho
feminista. de cualquier persona a ser atendida y cuidada,
siempre y cuando ésta no pueda por sí sola. Sin
La socialización de los cuidados debe par- embargo, al poder económico le benefician las
tir de lo público atendiendo particularmente a las nuevas perspectivas que plantean las necesida-
del sector doméstico y de cuidados (guarderías, des actuales, viendo una nueva fuente de bene-
residencias...) permitiendo que todos y todas las ficios; empleos privados, precarizados y llevados
personas puedan participar de manera equitati- fundamentalmente por mujeres.
va en la esfera pública y puedan hacer un uso
del tiempo repartido de forma similar. Así muje- De esta forma, no podemos olvidarnos
res y hombres podrían atender de modo equiva- del objetivo de nuestro programa socialista,
lente a ciertas necesidades tales como el trabajo pues entendemos que sólo a través de la supe-
extra-doméstico, formación y superación perso- ración del capitalismo y de la construcción de la
nal, creatividad o descanso y atención personal. sociedad socialista estableceremos las nuevas
De este breve análisis extraemos una de las pro- bases en las que la propiedad de los medios de
puestas más importantes de la economía femi- producción, consumo y las luchas desde el plano
nista, como es la ampliación de consumo de bie- material al superestructural se orienten hacia la
nes y servicios que se producen habitualmente superación de las clases y el patriarcado, ya que
y cuyo objetivo es alcanzar el máximo de bien- ambas luchas están estrechamente ligadas ya
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aquel que tiene que salir al trabajo a negociar su sido nunca el hogar, sino más bien el centro del
salario y que, por tanto, no desarrolla aquellas trabajo donde negociar el salario.
habilidades comunicativas y empáticas sino, por
ejemplo, habilidades retóricas, sentimiento de La configuración social del género, en
omnipotencia, de seguridad, etc. el caso del hombre, se realiza en oposición a lo
femenino, un hombre es aquello que no es una
A partir de este planteamiento es cuando mujer. La identidad masculina en ese sentido se
se puede entender la cuestión de radical impor- caracteriza por la competitividad y por la agre-
tancia de «los cuidados», la capacidad de dar sividad y no por la emocionalidad, consecuencia
cuidados que tienen las mujeres y la carencia de propia de la capacidad de cuidar como definitoria
ella de los hombres. En base a las condiciones del género femenino.
materiales sobre las que se construye el género,
el cuidado es una habilidad, capacidad, compor- Otros fenómenos como el culto a la mater-
tamiento propio de aquellas cuidadoras del ho- nidad (presentándolo como algo natural) tienen
gar, teniendo como correlato la capacidad de la un correlato en la represión sexual de las muje-
comunicación y la capacidad de mostrar los sen- res. Sólo existe la sexualidad si hablamos de la
timientos. Los hombres, sin embargo, al verse su reproducción y es el papel que deben cumplir las
género constituido en base a otras condiciones mujeres, lo que en otro sentido también nos ha-
materiales, son precisamente aquellos sujetos bla del control de la fuerza de trabajo que realiza
que carecen de esa capacidad de cuidar y de co- el Patriarcado.
municación en relación a lo que sí hace el género
de las mujeres. La identidad de género, los roles y com-
portamientos referidos a ella, todo es aprendido
Las oprimidas, las mujeres, el género mu- por la persona que se va desarrollando dentro de
jer, son las cuidadoras, los sujetos capaces de dar la cultura. Las identidades de género son proto-
cuidados, aquellas actividades que se realizan tipos, son ideales. Para ser una mujer hay que
fundamentalmente para el mantenimiento de cumplir con las normas que la sociedad impone
la vida y la salud, relegados al ámbito doméstico para que se te considere como una mujer (no ser
que trae como reivindicación feminista de ac- lesbiana, no ser masculina, no ser agresiva, es
tualidad el reparto igualitario de dichas tareas, decir, no ser «tránsfuga» del género, no tener
por ejemplo. El tema de los cuidados cumple hoy un atisbo de género hombre). Pero la realidad es
día una función fundamental dentro del ámbito que no existe un verdadero hombre ni una ver-
de la economía feminista. dadera mujer, aunque por la imposición del pa-
triarcado por ejemplo, los transexuales también
Es necesario cambiar nuestra concepción se obsesionan con llegar a ser una verdadera
del trabajo doméstico como trabajo al margen mujer.
de la producción. El trabajo doméstico es trabajo
reproductivo, trabajo que crea indirectamente, El feminismo desde Simone de Beauvoir,
pues asegura la subsistencia y reproducción am- considera que no se nace hombre ni mujer, sino
pliada de la fuerza de trabajo tradicional. que son procesos y siempre que no se cumple
con la norma, se te castiga (a las “maricas” se les
Al margen de ello, la habilidad de cuidar dice «debes comportarte como un hombre»).
configura identidad, y la identidad de género
de las mujeres se basa en ello, en la capacidad de
dar cuidados, y por tanto en tener una capaci-
dad emocional más empática y mas exterioriza-
da que pueden tener los hombres, precisamente
porque su ámbito material de actuación no ha
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4. LGTBI.
Sistema heteronormativo y sistema heteropatriarcal que se han realizado
tanto en España como a través del movimiento
binómico. internacional.
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5. Violencia sistémica.
Violencia de género. Todo esto se da dentro del entramado de
la violencia simbólica (como apuntaba Bordieu),
Entendemos por violencia de género es decir, la violencia física no es una respuesta
cualquier acción o conducta basada en el géne- inmediata, sino que se debe a un proceso por el
ro, que cause daño y/o sufrimiento psicológico, cual se infravalora el papel de las mujeres, natu-
sexual o físico, así como cualquier tipo de acción ralizando los roles femeninos adquiridos social-
simbólica que produzca este tipo de daños, sea mente y a través de la imposición de los este-
cual sea el ámbito donde se desarrolle la agre- reotipos de género. Esta violencia es ejercida
sión. a través de los agentes de socialización como la
educación, las parejas, los medios de comunica-
Estas agresiones se insertan dentro de ción y especialmente a través de la familia.
la violencia simbólica que genera un imaginario
legitimador de todas ellas y que pone en una po- Para entender este problema es impor-
sición particularmente vulnerable a las mujeres. tante realizar nuevos enfoques sobre la víctima
Además, resaltamos el hecho de que los roles im- y sobre el agresor que sean capaces de situar-
puestos por el heteropatriarcado son asumidos los sobre un contexto socioeconómico. La inde-
también por las parejas del mismo sexo, hacien- pendencia económica de las mujeres es una de
do que surja lo que se conoce como “violencia in- las herramientas principales para escapar de la
tergénero”. dependencia de los maltratadores. Aunque no
la única para acabar con la violencia patriarcal,
Especial énfasis merecen las agresiones pues el sistema patriarcal, aún con empleo sub-
físicas y psicológicas que atentan gravemente siste y con él sus roles, valores, doble jornada la-
contra la integridad física y emocional de las mu- boral etc. Nuestro papel es dotar al discurso de
jeres (el maltrato en la pareja o relativo a ella), las la violencia de género de un nuevo análisis, que
violaciones y otras manifestaciones contunden- no se reduzca al ámbito de lo doméstico o que no
tes del terrorismo machista. Las cifras ponen de caiga todo el peso sobre la víctima, denunciando
manifiesto cómo, tanto en la vida pública como la violencia en el ámbito público como las agre-
en el ámbito privado, se producen distintas for- siones sexuales o el acoso laboral, entre otros.
mas de violencia que se explican principalmente También es importante visibilizar el problema
por razones de género, es decir, por una cons- no como un hecho aislado sino como un común
trucción social que se caracteriza por la subor- en la sociedad, pues estos actos se dan por una
dinación, la dominación y la subvaloración de la educación y unos valores concretos, normaliza-
mujer frente al hombre. dos en nuestra sociedad y deben ser cuestiona-
dos y reformulados, a través de una educación
con nuevos valores basados en la igualdad de
género y con la ruptura de las bases materiales
Violencia “doméstica”. que sustentan el patriarcado.
La dependencia económica juega un pa-
pel importante en la violencia “doméstica”. Esto
se debe a que en muchas ocasiones las mujeres Estereotipos de género.
dentro del ámbito familiar no cuentan con un
empleo, dependiendo del hombre, creando una Se trata de las creencias sobre las caracte-
dependencia que mantiene a las mujeres dentro rísticas de los roles típicos que los hombres y las
de la situación de violencia y con menos posibili- mujeres tienen que tener y desarrollar en una
dades de escape. No es una cuestión que sea in- etnia, cultura o en una sociedad. Sirven para de-
herente a la violencia doméstica, se da indepen- finir metas y expectativas para ambos géneros,
dientemente a la violencia afectiva y emocional. marcando una evolución diferente para hombres
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y mujeres. Son una herramienta ideológica de la hombre. En otros anuncios se las presenta como
que se sirve el patriarcado para justificar la dis- esposa/ama de casa y madre solamente; no tra-
criminación que sufren las mujeres, como hemos baja fuera del hogar. Y en la mayoría se presen-
apuntando anteriormente. Todo ello se realiza ta como un objeto sexual, es decir, el cuerpo es
a través de la socialización del género, o lo que presentado como reclamo esencial para la venta
es lo mismo, a través de un proceso por el cual, de cualquier producto. Sin embargo, los hombres
desde la infancia, aprendemos a pensar, sentir suelen ser representados en profesiones de más
y comportarnos como hombres o como mujeres estatus social: políticos, deportistas o empre-
según las normas sociales, creencias y valores sarios, muy pocas veces aparecen en anuncios
que cada cultura dicta para cada sexo, desem- relacionados con el mantenimiento del hogar.
peñado por los agentes socializadores de los que Se transmite la posición de autoridad masculina
hablábamos anteriormente (familia, escuela, usando su voz en “off” en cortos comerciales, pe-
lenguaje, medios de comunicación, etc). Enten- riodísticos, etc.
deremos todo esto con algunos ejemplos:
Se supone y se muestra que las mujeres
Estereotipos Estereotipos toman la decisión de compra en productos poco
masculinos. femeninos. costosos y relacionados con el hogar (lo opues-
to a los hombres), lo que trata de reflejar que las
Estabilidad emocional. Inestabilidad emocional.
mujeres no deciden en cosas importantes. En los
Dinamismo. Intuición.
Agresividad. Falta de control.
programas dramáticos se establece como va-
Tendencia al dominio. Aspecto afectivo muy lor que el matrimonio y la maternidad son más
Objetividad. Racionalidad. marcado. importantes en la vida de la mujer que en la del
Aspecto afectivo poco Pasividad. hombre. La presencia de los hombres en las no-
definido. Irracionalidad. ticias difundidas es casi cuatro veces superior
Valentía. Frivolidad. a la de las mujeres, que cuando protagonizan
Cualidades y aptitudes Ternura. las informaciones lo hacen principalmente en
intelectuales. Sumisión. calidad de víctimas o en ámbitos banales como
Franqueza. Miedo. famosos, moda y entretenimiento. Las mujeres
Aptitud para las ciencias. Dependencia. reclamadas para ejercer como expertas apenas
Eficacia. Debilidad.
representan el 2%. En ocho de cada diez infor-
Amor al riesgo. Aptitud para las letras.
Fuerza. Aptitudes manuales.
maciones, los expertos son hombres.
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tiempo de los últimos años del Instituto Nacional de la familia es el escenario privilegiado para la
de Estadística para la realidad española. subordinación de la mujer, la cual refuerza estas
diferencias de las que venimos hablando y res-
Hay que entender que las mujeres cuentan con palda el sistema patriarcal.
menos tiempo libre. Dedican más tiempo al tra-
bajo para sostener la sociedad, que además no La lucha de la Juventud Comunista
está remunerado. Y en relación a los cuidados y del feminismo de clase por tanto, debe
personales, el reparto del tiempo es también ir encaminada hacia los siguientes obje-
desigual. tivos:
Al trabajar menos tiempo fuera de casa 1.- La visualización del trabajo domésti-
se perpetúan las desigualdades de género, au- co que históricamente han desempeñado, y lo
mentando la diferencia salarial y por tanto la de- siguen haciendo, las mujeres, y que ha signifi-
pendencia frente al marido. El acceso un merca- cado un gran volumen de trabajo sumergido im-
do laboral desigual impide ampliar la jornada, no prescindible para el mantenimiento del sistema.
realizar cursos, no participar en actividades sin- Una tasación económica que ponga en valor a
dicales, lo que reduce las posibilidades de ascen- la aportación que históricamente han hecho las
so o realizar una carrera dentro del ámbito pro- mujeres, a través de un sistema de contabiliza-
fesional), etc. La carencia de adecuados servicios ción nacional. Sin embargo, ello no debe implicar
de atención a niños y niñas fuerza a las mujeres la exigencia de su remuneración, pues entonces
a buscar empleos con un horario reducido. estaríamos propiciando la pervivencia de la divi-
sión sexual del trabajo. En su lugar proponemos
El disponer de un menor tiempo para “una un reparto equitativo de las tareas.
misma” crea una crisis de identidad que termina
desembocando en una actitud que identifica 2.- Las medidas de recorte de servicios
la actividad laboral femenina, en el intento por sociales públicos (en el ámbito de la dependen-
combinar empleo y su función dentro de la fami- cia, a la atención de la violencia de género, aten-
lia, a veces a costa de ser una “superwoman” y ción y apoyo a la comunidad LGTBI, etc. ) supo-
de en una situación difícilmente insostenible. En nen por tanto una mayor carga de trabajo para
este sentido, también es importante reflexionar las mujeres. El carácter familiar de las escasas
sobre la visión auxiliar que se da del salario fe- prestaciones del Estado , refuerzan la idea de
menino dentro del matrimonio. Entendido como que las mujeres sigan haciendo su papel de cui-
complemento del salario familiar. Se concibe el dadoras. La socialización de las tareas domés-
trabajo del hombre como el “verdadero” frente al ticas (mediante la creación de una vasta red de
“no trabajo” que desempeña la mujer. servicios públicos) es una exigencia central de
nuestras reivindicaciones feministas. Aunque
El modelo de trabajo de las mujeres, des- esto no suponga automáticamente la liberación
pués del matrimonio, viene estructurado por las de la mujer, supone un avance.
exigencias del cuidado de los hijos e hijas, y su
tasa de actividad económica como empleadas 3.- La necesidad de romper la visión pa-
viene frecuentemente marcada por limitaciones triarcal de las políticas de conciliación de la vida
reales relacionadas con sus funciones de espo- laboral y familiar. El capitalismo y sus conse-
sas y madres. cuencias (paro, precariedad, etc..) hace que sea
un sistema irreconciliable con el resto de facetas
Es necesario entender que estas des- de la vida, y con la realización misma del ser hu-
igualdades son básicamente el resultado de las mano. Hemos de plantear nuevas formas de or-
estructuras políticas, económicas y sociales. Si ganización del tiempo y de la vida.
bien, para el movimiento feminista, la institución
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6. Organización feminista.
Hemos avanzado mucho en la feminiza- Empoderamiento.
ción de la organización, sin embargo, hay que
seguir potenciando espacios de debate, forma- Se trata del aumento de la participación de
ción y trabajo útiles y cómodos para la militan- las mujeres en los procesos de toma de decisio-
cia femenina. Hay que seguir construyendo nes y acceso al poder. Es un proceso a través del
empoderamiento, y debemos profundizar en cual cada mujer se forma, se habilita y desarrolla
la articulación de mecanismos que faciliten la la conciencia de tener derecho a tener derechos
incorporación de mujeres a las filas de la Orga- y a confiar en la propia capacidad para conseguir
nización. Además, debemos analizar las causas sus propósitos. Para Elena Simón, “el empodera-
de la marcha de militancia femenina de nuestra miento sirve para ir subvirtiendo el patriarcado,
organización, si ésta se debe a motivos ideológi- para segarle la hierba bajo los pies, para que la
cos o personales, o si es por sentirse cómodas o cultura feminista -que es una cultura de justicia,
no dentro de la Organización por sus formas de de equidad, de igualdad y de libertad- vaya im-
trabajo y como poder mejorar los aspectos posi- pregnando sectores cada vez más amplios.”*
tivos y atajar los negativos. La necesidad de co-
rregir los comportamientos heteropatriarcarles Esta expresión conlleva también la toma
que, al igual que en todos los ámbitos de la so- de conciencia del poder que individual y colecti-
ciedad, también se dan en nuestra organización, vamente ostentan las mujeres y que tiene que
planteando alternativas que integran y analizan ver con la recuperación de la propia dignidad de
toda la actividad que permite el funcionamien- las mujeres como personas. El empoderamiento
to de la UJCE en su conjunto y seguir trabajando debe darse en los siguientes ejes la cuestión la-
para eliminar todas las actitudes patriarcales. boral y de clase, la salud sexual y reproductiva
y la educación, siendo fundamental potenciar la
El análisis de la realidad con perspectiva solidaridad entre mujeres (“sororidad”), facilitan-
de género debe promover consecuentemente la do la toma de conciencia de la opresión y domi-
transformación de nuestras formas de ser y ha- nación de que han sido y son objeto en el seno
cer, luchando contra el patriarcado en todas sus del patriarcado y el capitalismo articulando los
manifestaciones, pues igual que defendíamos la mecanismos necesarios para superarlo.
necesidad de reforzar la solidaridad obrera, es
fundamental potenciar la solidaridad entre mu- Además creemos fundamental denunciar
jeres (sororidad), facilitando la toma de concien- los pensamientos y valores de la fuerza, el mie-
cia de la opresión y dominación de que han sido do como método de hacerse valer, así como la
y son objeto en el seno del patriarcado y articu- autodefensa feminista como medio hacia el em-
lando los mecanismos necesarios para superar- poderamiento de las mujeres en las distintas es-
lo. Para ello es importante ser conscientes que feras de la vida pública y privada, entendiéndo-
en la organización se reproducen los esquemas la no únicamente como el medio de defensa de
del reparto desigual de los diferentes tipos de una agresión física o sexual, sino como la toma
trabajo, así como los mismos esquemas de poder de conciencia acerca de cómo el miedo y la sumi-
que en la sociedad. De igual modo es necesario sión son inculcados a las mujeres y forman parte
analizar si en los espacios de debate y elabora- de su vida. Para ello es necesario trazar estrate-
ción política, como los órganos de dirección y los gias que hagan frente a la violencia patriarcal en
colectivos, se están dando formas de relación y sus numerosas maneras de expresarse, traba-
de debate “masculinizados” que impiden la par- jando la confianza y la autoestima, la actitud y el
ticipación de las mujeres principalmente. apoyo mutuo.
Por otro lado, hacemos hincapié en la
necesidad del desempoderamiento al mismo
* (Visto en http://www.pikaramagazine.com/ -consultado 29/11/2014-)
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Unidad Didáctica #3 - Introducción al Feminismo
tiempo de los camaradas, siendo el proceso por Uso no sexista del lenguaje.
el cual los hombres asumen su rol dominador y
machista y se dotan de herramientas para com- El sexismo no está en la lengua, sino en
batirlo. el uso que se hace de ella. Por eso, no se puede
hablar de “lenguaje sexista” sino de “uso sexis-
ta del lenguaje”, ya que el idioma ofrece muchas
Transversalización. posibilidades para describir una realidad y para
expresar todo lo que nuestra mente es capaz de
Hablamos de la necesidad de incorporar imaginar. El lenguaje, se convierte en sexista
la perspectiva de género en nuestros análisis y cuando a través de él se invisibiliza, se subordi-
en todos los espacios de la UJCE, así como pro- na, se estereotipa o se humilla a las mujeres; dán-
mover la transformación de nuestras formas de dole más importancia al género masculino ante
ser y hacer, luchando contra el patriarcado en el femenino. Por eso se debe utilizar palabras
todas sus manifestaciones. A nivel externo tam- genéricas cuando sea posible, o en su defecto
bién es fundamental hacer uso de esta práctica, el uso completo de ambos géneros, femenino y
debemos incidir en la perspectiva de género y masculino. El androcentrismo también tiene su
de clase en todos los frentes de lucha en los que reflejo en los siguientes usos de la lengua:
participamos, debiendo aportar un discurso que
rompa con el sistema, bajo la idea principal de - Se hace de lo masculino el origen de la
que en el actual es imposible romper con el pa- cultura.
triarcado. Para lograr una verdadera transversa- - Se tratan los femeninos como elemen-
lización de la perspectiva de género deberá exis- tos de segunda categoría
tir un verdadero empoderamiento de las mujeres - La existencia de distintos tratamientos
en las organizaciones. para cada sexo.
- Se definen diferentes cualidades para
mujeres y para hombres.
- Se utiliza el género femenino para des-
Cuotas de género.
calificar y hacer alusiones peyorativas a las mu-
jeres o a los valores, comportamientos y actitu-
Las cuotas o cupos género nos van a per-
des que se les asignan.
mitir cumplir con la política de feminización de
la organización, es decir, llevar el feminismo a la
práctica, incorporando a las mujeres y eliminan-
do dinámicas patriarcales en el funcionamiento Comisión de mujeres y talleres
interno. de masculinidades.
Es una medida que nos permiten la re- Como analizamos la organización no está
distribución del poder simbólico, obligándonos exenta de reproducir conductas patriarcales.
a redefinir qué es estar formadas más allá de la Esto requiere de un análisis íntegro y una serie
concepción masculinizada, así como preocupar- de medidas que pongan fin a esta lacra, con el
nos de que nuestras camaradas formen parte de compromiso de toda la militancia. Es ahí donde
la organización haciendo de ésta un espacio có- entran la Comisión de Mujeres y el Taller de Nue-
modo y libre de espacios sexistas. vas Masculinidades.
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bate interno, así como el autoconocimiento y el tura, aplicando y desarrollando línea ideológica
empoderamiento de las camaradas mujeres de la y política que en cuanto a temas de género e
organización. Esta comisión se reunirá de forma igualdad defienden nuestros documentos. Será
periódica durante todo el año. En ningún caso la persona responsable de Lucha contra el Hete-
esta comisión es exclusivamente una comisión ropatriarcado quién se encargue de que ambos
de trabajo enfocado a las convocatorias del 8 de tipos de comisiones se creen y se reúnan de ma-
marzo o el 25 de noviembre. Reunir una comi- nera individual y conjunta. En caso de no existir
sión de mujeres nos ayuda, entre otras cuestio- responsable de Lucha contra el Heteropatriarca-
nes, a hacer un análisis sobre la situación de las do, el pleno de mujeres elegirá una responsable
mujeres dentro de nuestra organización, sobre para dinamizar el espacio.
los problemas a los que debe enfrentarse en su
militancia diaria y las maneras para solucionar-
los o sobre las herramientas con las que se cuen-
ta. Es un espacio donde se pueden aportar ideas,
experiencias o proyectos en torno a ésta y otras
cuestiones que nos afectan directa o indirecta-
mente.
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Power Point.
- Taller de Género.
Vídeos.
En la Caja de Herramientas y en la web
de formación de la UJCE puedes encontrar los
materiales referentes a esta Unidad Didáctica,
recomendamos lectura del Power Point y el vi-
sionado del video con la ponencia. Así mismo
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