Vous êtes sur la page 1sur 7

Cómo elaborar un estado

financiero
3 partes: Elaborar el balance general Elaborar el estado de resultados Elaborar el estado de flujos de efectivo

Un estado financiero registra formalmente la actividad financiera de una empresa.


Está conformado principalmente por el balance general, el estado de resultados y
el estado de flujos de efectivo. En el balance general figuran los activos, los
pasivos y el patrimonio de los accionistas en un determinado momento. En el
estado de resultados, por otra parte, figuran los ingresos, los gastos y las
ganancias o pérdidas durante un periodo de tiempo determinado, el cual suele ser
un mes, un trimestre o un año. En el estado de flujos de efectivo figuran el saldo
de efectivo al inicio de un determinado periodo, las entradas y salidas de efectivo
durante este periodo y el saldo de efectivo final. En lo que respecta a las
empresas públicas, el contenido de estos estados suele estar regulado por la
comisión local de bolsa y valores conforme a las Normas Internacionales de
Información Financiera (NIIF) establecidas por la Junta de Normas Internacionales
de Contabilidad. Si no conoces bien estos estándares lo mejor es contratar a un
profesional para tener la certeza de ceñirte a ellos.

Parte 1
Elaborar el balance general
1.
Comprende los conceptos básicos de un balance general. Este documento
recibe su nombre porque en él figura el balance entre los activos y los pasivos de
una empresa. La ecuación básica de contabilidad, constituyen la base subyacente
principal del balance general. Si reorganizas la ecuación, encontrarás que el
patrimonio equivale a la resta de los pasivos a los activos y esta relación se ve
reflejada en el balance financiero. En él, se incluye una lista de todos los activos y
pasivos para luego sumarlos y restar los pasivos a los activos. Esto da como
resultado una cifra correspondiente al patrimonio del accionista.[1]

 Puedes elaborar estados financieros con software de contabilidad o simplemente


emplear una hoja de cálculo o hacer una lista escrita con dos columnas para que
puedas encontrar el total de los activos y pasivos según su categoría. .
2; Determina cuáles son tus activos. Los activos abarcan todo lo que poseas,
hasta el dinero en efectivo que tengas a tu disposición. Se suele dividir a los
activos en "activos actuales" y "activos fijos".[3]
 Los activos actuales abarcan el dinero en efectivo que tengas a la mano y todo lo
que podría liquidarse rápidamente, por lo general en el espacio de un año.
También podrías incluir en esta categoría tus cuentas por cobrar (lo que se le
deba a tu empresa), los valores que vayan a vencer en el espacio de un año
(como los bonos o las cuentas de ahorros) y el inventario. Asimismo, los pagos
previos o los depósitos que hayas realizado con anticipación (como tu seguro para
el año siguiente) también pueden incluirse como activos.
 Los activos fijos son los activos tangibles, conocidos como propiedades, planta y
equipo. Estos activos tienen una vida útil de más de un año.
 También existen activos intangibles que pueden incluirse en un balance general,
como las patentes, la imagen de marca y los derechos de autor, así como también
otros activos que no sean físicos.[4]
 Cada uno de estos activos debe estar asociado a una cifra en tu moneda local en
el balance general, la cual puedes calcular de forma exacta o bien estimar
basándote en las convenciones del sector (y asegurándote de ceñirte a ellas).

3; Redacta toda la información. Debes disponer toda esta información


detalladamente para poder redactar el balance general, lo que quiere decir
etiquetar cada uno de los activos junto con su valor monetario y dividirlos en
activos fijos y actuales. Luego, para encontrar el total, debes sumar todos los
activos.[5]

4; Determina cuáles son tus pasivos. Esto se refiere a lo que tu empresa deba o
haya pagado a otras empresas o personas, como a sus empleados. Visto de otro
modo, constituyen las deudas de una empresa. Los pasivos también se dividen en
categorías: "pasivos actuales" y "pasivos de largo plazo".[6]

 Los pasivos actuales abarcan lo que debas en líneas de crédito o tarjetas de


crédito y todo lo que debas a otras empresas a cambio de productos o
suministros, así como también los ingresos y sueldos que les hayas pagado a tus
empleados, lo que debas en impuestos y el alquiler y servicios públicos por
pagar.[7]
 Los pasivos de largo plazo abarcan los préstamos de largo plazo por pagar, los
bonos por pagar y otro tipo de pasivos que vayas a reembolsar a lo largo de un
periodo de más de un año.[8]

5;Registra tus pasivos. Debes registrar cada uno de tus pasivos como lo hiciste
con los activos, dividiéndolos en categorías generales, como préstamos,
hipotecas, etc. En el balance general, los pasivos también deben estar divididos
en pasivos actuales y de largo plazo. Cada uno de ellos debe figurar en la lista por
categoría y, junto a su nombre, debes incluir su valor monetario. Para obtener el
total, suma todos los pasivos.[9]

6;Resta los pasivos a los activos. Debes restar lo que debas a lo que tengas
para determinar cuál es el patrimonio del accionista (también llamado capital del
accionista). Si este monto es positivo, esto quiere decir que la empresa empleó su
propio dinero o el dinero de inversionistas para financiar sus operaciones en lugar
de depender demasiado de la deuda.
 En una línea aparte, coloca el total de los activos y, debajo de ella, coloca el total
de los pasivos. Resta el segundo al primero para encontrar cuánto es el patrimonio
del accionista.

6; Expláyate sobre el patrimonio del accionista. El balance general también


debe incluir una sección en donde se muestre qué constituye el patrimonio del
accionista, incluyendo ítems que representen los intereses que los accionistas
tengan en la empresa. Algunas categorías comunes del patrimonio del accionista
son las acciones comunes, las acciones preferentes, el capital que exceda el valor
nominal y las ganancias retenidas.
 Después de hacer una lista de todas estas categorías, debes sumarlas para
obtener el patrimonio total del accionista.[10]
 Compara este total con el resultado de la resta de los pasivos a los activos que
calculaste anteriormente. Si no obtuviste la misma cifra, esto indica que tú o el
contador que se ocupa de la teneduría de libros de la empresa cometieron un error
en algún punto del proceso.
 Muchos balances generales están dispuestos de manera que el total de los activos
se encuentre a la izquierda y el total de los pasivos y el patrimonio del accionista
se encuentren a la derecha. De esta forma, la ecuación básica de contabilidad se
representa de una forma más literal.[11]

Parte 2
Elaborar el estado de resultados

1:Empieza por las ventas netas. Como regla general, la primera cifra que se
incluye en un estado de resultados son las ventas netas de una empresa durante
un determinado periodo. Se utiliza la cifra equivalente a las ventas netas a pesar
de que podría figurar en el estado simplemente como "ventas" o "ingresos". La
ventas netas se refieren a las ventas brutas (es decir, el total de ventas durante un
periodo) después de restarles las devoluciones, los descuentos o los márgenes
por la pérdida o el daño de los productos. Esto constituye los ingresos netos de la
empresa y es la representación más veraz de las ventas a lo largo de un periodo
de tiempo.[12]
 El estado de resultados, a diferencia del balance general, abarca la actividad
financiera a lo largo de un periodo determinado, ya sea un mes, un trimestre o un
año.
 La organización del estado resultados muestra la disminución gradual de las
ventas netas debido a diversos gastos en los que haya incurrido la empresa hasta
obtener los ingresos netos, también conocidos como ganancias netas o resultado
final.[13]

2:Calcula las ganancias brutas. En el estado de resultados, lo primero que


calcularás serán las ganancias brutas, las cuales constituyen las ganancias de la
empresa después de tener en cuenta el costo de los productos vendidos o de las
ventas o los servicios prestados. Dentro este costo, se incluye también el costo de
todos los materiales y mano de obra que se hayan empleado directamente en la
fabricación de los productos que se hayan vendido durante este periodo. Calcula
el total de esta cantidad y réstala a las ventas netas. Esto te dará las ganancias
brutas.[14][15]

3:Haz una lista de los costos operativos de la empresa. Los gastos en el


estado de resultados se dividen en dos categorías principales: los costos
operativos y los costos no operativos. Los costos operativos se ciñen a la misma
filosofía que los costos de los productos vendidos; es decir, tienen una relación
directa con las operaciones de la empresa. Estos costos abarcan los costos de la
venta y la publicidad de los productos, los costos administrativos y los sueldos que
se les pague a los empleados que pertenezcan a estos departamentos, así como
también abarcan los gastos generales, como los servicios públicos, el alquiler y el
sueldo de los gerentes.[16] Ten en cuenta que aquí no debes incluir los costos de
los materiales y la mano de obra, ya que estos ya están considerados dentro del
costo de los productos vendidos.
 Divide todos estos gastos en tres categorías: costos de venta, costos generales y
costos administrativos. Escribe el monto correspondiente a cada una de estas
categorías y luego súmalas para obtener los costos operativos.
 Resta estos costos operativos a las ganancias brutas. Esto te dará los ingresos
operativos.[17]

4: Incluye los costos no operativos. Estos constituyen la otra categoría de


gastos en el estado de resultados y abarcan los gastos que no tengan una relación
directa con las operaciones. Entre ellos se encuentran los intereses, la
amortización, la depreciación y los gastos por impuestos. En esta sección, también
tienes suficiente espacio para registrar una "ganancia o pérdida extraordinaria".
Esta podría ser ocasionada, por ejemplo, por un robo de grandes cantidades del
inventario.[18]

5: Dispón el estado de resultados. Conforme vayas avanzando, debes disponer


cada una de las secciones del estado de resultados. Empieza colocando las
ventas netas en la parte superior y, a continuación, cada una de las secciones
subsiguientes en orden secuencial.[19]
 En una línea, coloca las ventas netas y, debajo, el costo de ventas. Debajo de este
último, obtén las ganancias brutas restando el costo de ventas a las ventas netas.
Deja una línea en blanco y luego pasa a los costos operativos.
 Divide los costos operativos en categorías generales debajo de las ganancias
brutas. Por lo general, se incluyen los costos de venta, los costos generales y los
costos administrativos en una misma categoría, aunque este no siempre es el
caso. Debajo, incluye lo ingresos operativos obtenidos de la resta de los costos
operativos a las ganancias brutas.[20]
 Luego, tanto los intereses como los impuestos deben estar cada uno en una línea
aparte. Puedes restarlos de forma separada o juntos, aunque lo primero es lo que
te brindará resultados más precisos.
 En la última línea deben figurar los ingresos netos.[21]

Parte 3
Elaborar el estado de flujos de efectivo

1: Empieza por los ingresos netos. El flujo de efectivo determina el dinero en


efectivo que tienes realmente a tu disposición, por lo que constituye una cifra
esencial para una empresa. El flujo de efectivo difiere de tus ingresos en el sentido
de que estos últimos incluyen gastos y activos que no se encuentran en efectivo y,
por tanto, no tienen ningún efecto sobre el saldo real de efectivo.[22] Sin embargo,
debes haber terminado el estado de resultados y el balance financiero
correspondientes al periodo actual y al anterior para poder elaborar un estado de
flujos de efectivo.
 El estado de flujos de efectivo está dividido en tres secciones: flujos de efectivo de
las actividades de operación, flujos de efectivo de las actividades de inversión y
flujos de efectivo de las actividades de financiamiento.[23]

2:Empieza a calcular los flujos de efectivo de las actividades de


operación. Esta categoría se enfoca en la cantidad de dinero en efectivo que se
obtiene mediante las operaciones. Esto no es lo mismo que realizaste en los
demás estados debido a que en ellos también se incluyen ítems que no se
encuentran en efectivo. En cambio, este estado solo se enfoca en el efectivo, lo
que significa que debes volver a sumar algunas cifras a los ingresos netos porque
en realidad no fueron gastos en efectivo y, por tanto, no tendrán ningún efecto en
el dinero con el que cuentes en ese momento. Debes empezar sumando los ítems
que no estén en efectivo, como la amortización y la depreciación.[24]
 La amortización se refiere a las ocasiones en las que la empresa, para fines
contables, extiende el costo de algo a lo largo del tiempo. Sin embargo, este costo
en realidad no le resta nada al flujo actual de efectivo, por lo que debes volver a
sumar este gasto a los ingresos netos.[25]
 Lo mismo aplica para la depreciación. Esta cifra se resta al monto total de un
activo debido a que su valor disminuye con el tiempo pero no constituye
técnicamente un problema de flujo de efectivo. Por tanto, también debes volver a
sumar este gasto a los ingresos netos.[26]
 Este es el método indirecto para determinar el flujo de efectivo, mientras que, con
el método directo, en lugar de empezar con los ingresos netos, debes sumar los
flujos de efectivo desde cero.[27]

3: Determina el flujo de efectivo en las demás operaciones. Luego, debes


tomar en consideración los demás ítems que constituyan entradas o salidas de
efectivo mediante las operaciones. Por ejemplo, debes incluir en esta categoría las
pérdidas o ganancias en las ventas de activos fijos, ya que esto constituye una
entrada (o una salida) de efectivo.[28]
 Si vendiste algunos de tus activos fijos dentro de este periodo (por ejemplo, tu
propiedad), debes determinar si esto constituyó una ganancia o una pérdida y
luego sumarla o restarla a los costos operativos.
 También debes tomar en cuenta los cambios en las cuentas por cobrar, ya que
estas constituyen el dinero que otras personas deben pagarle a tu empresa. Por
tanto, si esta cantidad disminuye, esto quiere decir que tu empresa ha ganado
dinero en efectivo, lo cual debes sumar.
 En cambio, si tu empresa compró inventario, esto constituye una disminución en el
efectivo que hay que restar al flujo de efectivo.
 Los impuestos por pagar, el seguro que ya hayas pagado y los sueldos por pagar,
entre otros ítems, también afectan el flujo de efectivo.[29]

Vous aimerez peut-être aussi