Introducción: La conceptualización

Spectralities

María del Pilar Blanco y

Esther Peeren

un espectro no sólo causan tablas séance a su vez, pero conjuntos

cabezales de hilado. 1

Fantasmas, espíritus y espectros han jugado un papel vital en las narrativas orales y escritas a lo largo de
la historia y en todas las culturas, apareciendo como cualquier cosa, desde productos de la imaginación,
mensajeros divinos, ancestros benignas o exigente, y criaturas de otro molestos que pueblan loci
particulares a cifras preocupantes regresaron de la inclinación muerto en venganza exigente, dejando al
descubierto los crímenes ocultos, continuando con una historia de amor o simplemente la búsqueda de
una forma de transmitir. Sus funciones de representación y socio-culturales, significados y efectos han
sido al menos tan variados como sus formas-o no-formas, como puede ser el caso, y se extienden mucho
más allá de los rituales, tradiciones, historias de fantasmas, cuentos populares y leyendas urbanas
pueblan.

Es parte de este más allá de eso El lector Spectralities trata de abordar, centrándose en cómo, al
final del siglo XX, una metamorfosis específica ocurrió a los fantasmas e inquietante de las posibles
entidades reales, los dispositivos de la trama, y ​los clichés de lenguaje común ( “él es un fantasma de
sí mismo”, “ estamos obsesionados por el pasado”) en metáforas conceptuales influyentes que
impregna la cultura global (popular) y la academia por igual. Una metáfora conceptual, Mieke Bal
sugiere, difiere de un proceso ordinario en la evocación, a través de una interacción comparativa
dinámica, no sólo otra cosa, la palabra o idea y sus asocia- ciones, sino un discurso, un sistema de
producción de conocimiento. 2 Además de cumplir una función estética o semántica, pues, una metáfora
conceptual “realiza un trabajo teórico”. 3 estado emergente del fantasma como una herramienta analítica
que

hace teoría-y, por tanto, como Derrida observa en el epígrafe anterior, “conjuntos de cabezales de
hilado” -¿Fue señalado y delineado por la preferencia repentina
2 EL LECTOR SPECTRALITIES

expresada en 1990 la crítica cultural de los términos un tanto arcaicas “espectro” y

“espectralidad” sobre el “fantasma” más mundanos y “Liness Ghost-.” 4 “Espectro” y
“espectralidad” no sólo tiene un anillo más serios, estudiosos a ellos, pero evocan
específicamente un enlace etimológico de la visibilidad y la visión, a la que es a la vez mirado ( como
fascinante espectáculo) y mirando
(En el sentido de examinar), lo que sugiere su idoneidad para explorar e iluminar fenómenos
distintos del retorno putativa de los muertos. En su nuevo aspecto espectral, ciertas
características de los fantasmas y que frecuenta, tales como su posición liminal entre la
visibilidad y la invisibilidad, la vida y la muerte, ality materializarse e inmaterialidad, y su
asociación con el potente afecta como el miedo y la obsesión-rápidamente llegaron a ser
empleado en toda las ciencias humanas y sociales de teorizar una variedad de cuestiones
sociales, éticas y políticas. Estas preguntas incluyen, entre otros, el la sedimentación
temporal y espacial de la historia y la tradición, y su impacto sobre las posibilidades de
cambio social; las complejidades de la memoria y el trauma, personal y colectiva; el
funcionamiento y los efectos de los procesos científicos, tecnologías y medios de
comunicación; y la exclusión,

La publicación de Jacques Derrida Espectros de Marx en 1993 (y su traducción Inglés, Espectros

de Marx, en 1994) se considera comúnmente el catalizador de lo que algunos han llamado el “giro
espectral”, que marca la aparición de una nueva área de investigación de los cuales las dos últimas
décadas representan un apogeo y de la cual esta Lector recoge una serie de textos ential
influencias, elegidos para mostrar el grado de alcance crítico de espectralidad en la teoría cultural
contemporánea. Antes de trazar esta área aún en desarrollo con más detalle y especificando las
trayectorias distintivos de espectralidad explorados en las seis partes que constituyen este Lector, primero
es necesario mirar hacia atrás más allá de la década de 1990 con el fin de pedir lo que ha cambiado
en este tiempo con respecto a la percepción crítica de los fantasmas e inquietante, y cómo se
precipitó este cambio.

El fantasma como actualidad, la metáfora,

y el concepto

Como se ha señalado, la figura del fantasma ha perseguido la cultura humana y la imagi- nación
durante mucho tiempo, tal vez incluso para siempre, aunque con más insistencia en ciertas
sociedades y periodos que en otros. Uno de sus días de gloria en el mundo occidental se produjo a
finales del siglo XIX, cuando la moda literaria de historias de fantasmas (desarrollado en el
Romanticismo y los géneros del gótico y el fantástico) se cruzaron con el esfuerzo para
desbloquear otros mundos y dimensiones material, psíquica y sobrenatural-que caracterizó tanto
espiritualismo, en su enredo con los nuevos movimientos religiosos, la
 Introducción: la conceptualización SPECTRALITIES 3

disciplina emergente de la psicología y la profesionalización de la ciencia en general, y la

invención de penetrar aún intangibles nuevos medios, como la telegrafía, la fotografía y el
cine. 5 En esta época, el fantasma ya operaba como una poderosa metáfora de encuentros
con formas inquietantes de la otredad (incluida la contenida en el interior del auto, la casa, y
la patria), las confusiones inherentes a la producción capitalista de mercancías (como se
indica por Marx y Engels) , y las operaciones inasibles de partículas y microbios
recientemente descubiertos, así como procesos tecnológicos tales como los rayos X. Este
uso figurado, sin embargo, se mantuvo a tierra, hasta cierto punto, en realidad posible del
fantasma como un fenómeno sobrenatural empíricamente verificable, lo que hace menos de
una herramienta para obtener una idea de algo más que sí mismo un objeto de
conocimiento y experimentación científica (como, por ejemplo, , en la fotografía de espíritus
y las hazañas de la Sociedad para la Investigación Psíquica, fundada en 1882). En cierto
sentido, clarividencia impedido potencial figurativa del fantasma de emancipar plenamente.

A pesar de la tendencia a tomar el fantasma literalmente disminuido en gran medida en el

transcurso del siglo XX, convirtiendo creer en fantasmas reales (como el muerto volvió a la vida o es
capaz de comunicarse con los vivos) en una especie de excentricidad franja, su prolongada
asociación con tales nociones parece haber hecho que el fantasma algo tóxicos para los estudiosos
que tratan de ser tomado en serio. Un ejemplo de ello es famoso ración 1919 elabo- de Freud de la unheimlich
o extraordinaria, el cual busca meticulosamente para evitar la contaminación de este concepto con
cualquier cosa potencialmente sobrenatural. Si bien admitió que “los espíritus y fantasmas” habría
sido una partida adecuado y lógico punto- “Hemos hecho podría haber comenzado nuestra
investigación con este ejemplo, tal vez el más sorprendente de todo, de algo extraño” - Freud observa
cómo se decidió en contra de esto en para evitar el entremezclado de lo siniestro con “lo que es
puramente horrible.” 6 Aparentemente, a continuación, los fantasmas y los espíritus se difieren a causa
de su falta de ambigüedad y horror singular, una posición bastante extraña a tomar dada la variedad
de formas y reacciones afectivas estas cifras podrían ser vistas a asumir y suscitar en la literatura,
otras artes, y la sociedad de la época (como, por ejemplo, la bienvenida, a menudo reconfortante
fantasmas del espiritismo). Desde el resto del texto de Freud, podríamos suponer que lo que
encuentra verdaderamente “espantosa” es el hecho de que muchas personas siguen siendo
susceptibles a la actitud hacia atrás de considerar los fantasmas de una posible realidad. Si bien esta
susceptibilidad persistente no se considera sorprendente, se marca como algo que debería, en el
tiempo, al pasar:

En nuestras grandes ciudades, carteles anuncian conferencias que se comprometen a decirnos

cómo entrar en contacto con las almas de los difuntos; y no se puede negar que no pocos de los
más capaces y penetrante mente entre nuestros
4 EL LECTOR SPECTRALITIES

hombres de ciencia han llegado a la conclusión, especialmente hacia el final de su vida, que un contacto
de este tipo no es imposible. Dado que la mayoría de nosotros todavía piensan como salvajes hacen
sobre este tema, no es una cuestión de sorpresa que el miedo primitivo de los muertos es todavía tan
fuerte dentro de nosotros y siempre listo para salir a la superficie en cualquier provocación. 7

Aquí, la incapacidad universal a captar la idea de la propia mortalidad es en lo que podría ser
visto como una desautorización redoblado desplazada hacia un “miedo primitivo igualmente
reprimidos de los muertos ”Que sitúa la desaparición fuera del yo en la otra y explica por qué los
fantasmas tan sólo puede ser mortal. Paradójicamente, donde la represión se presenta
generalmente por Freud como la retención de algo importante que debe ser visitada y trabajó a
través de, el rechazo de la creencia “de que los muertos pueden hacerse visibles como espíritus”
se considera un signo de elogio de haber superado el animismo salvaje y narcisismo primario .
En este caso, el contenido de lo reprimido se identifica como una falsedad risible, el
sobreseimiento definitivo de los cuales sólo se le impide, por el momento, por la biología, que
“aún no ha sido capaz de decidir si la muerte es el destino inevitable de todos ser vivo o si es
sólo un evento regular, pero aún quizá evitable en la vida”, y por la religión y el gobierno, que se
benefician de mantener intacta la expectativa de una vida futura. 8 Una vez que la racionalidad
prevalece y creencias animistas son superados por todos, lo extraño asociado con el
resurgimiento de creencias- animista consideró claramente inferior a la que procede de
“complejos infantiles reprimidos, desde el complejo de castración, útero fantasías, etc.” y que
implica “una real la represión de parte del contenido del pensamiento y el retorno de este
contenido reprimido, no un cese de creencia en la realidad con un contenido de tales”felices -Will
ser entregado. 9

Freud ilustra la extraña sensación que surge “cuando algo que hemos considerado hasta ahora
como imaginario aparece ante nosotros en realidad” con una historia acerca de un joven
matrimonio alojarse en una casa con una mesa, las tallas en el que cobran vida por la noche como
“fantasma cocodrilos “. Este ejemplo particular de la extraña se asocia con un‘elemento infantil’que
consiste en‘la sobre-acentuación de realidad psíquica en comparación con la realidad material’,
mientras que la historia en sí, que Freud aparentemente encuentra en Strand Magazine, se llama
“lo suficientemente ingenuo”, sin embargo, capaz de producir un “notable” sentido de lo siniestro. 10 Aquí,
la susceptibilidad a la extraña se relaciona explícitamente a no creer en la realidad de los hechos
fantasmales, porque si ellos fueron reconocidos como real, no habría represión (ningún elemento
de saber realmente mejor que creer en los fantasmas) y por lo tanto ningún efecto extraño. Sólo
alguien que ha superado al menos parcialmente, lo que se consideran las nociones primitivas o
infantiles, a continuación, tiene acceso a lo siniestro, por lo que es, como señala Brian McCuskey
“una marca de la educación superior” servir, en particular, para distinguir los servidores
supersticiosas de sus amos sofisticados: “... que hace falta decir-y Freud hace
 Introducción: la conceptualización SPECTRALITIES 5

sin que una persona supersticiosa, cuya mente se acomoda fácilmente fenómenos ocultos, no va a
experimentar el escalofrío de lo siniestro, sensación de cambio sólo el fatalismo o el miedo “. 11 Al
final, para la teoría de Freud para ser aceptado como racional y adecuadamente científica, tiene que
disociarse a fondo no sólo de fantasmas literales (permitiendo de mala gana una creencia
persistente en ellos, ya templado por la racionalidad y destinado a desaparecer), pero igualmente de
el fantasma como metáfora de ahí pesar de Freud de que el alemán “una

unheimlich casa”no se puede traducir de otro modo, en Inglés, que como‘una casa encantada.’ 12 Para
que el estudio serio estética de la subida extraordinaria el espectro crudo de fantasmas reales y la
cosmovisión animista asociado, no puede de ninguna manera ser vinculado con ellos.

Desde un punto de vista diferente, pero en la misma línea, Theodor Adorno rechaza la
fantasmal en sus “Tesis contra el Ocultismo,” donde el ocultismo se declara “un síntoma de una
regresión en la conciencia”, que conduce a una mezcla ilícito de la condicional y la incondicional. 13 Para
Freud, también, lo extraño tiene que ser-limpiado exorcizado los fantasmas, precisamente porque,
para mantener su estatus como una experiencia normal, incluso privilegiada, no puede, al menos
no de forma exclusiva, se asocia con la (no reprimidos) primitiva “ concepción animista del
universo “. 14 Para Adorno, es de hecho un “animalismo renacer” de tal manera que, en un barrido
de “pánico”, deshace las ganancias de la iluminación y establece, a raíz de la muerte de Dios, una
“segunda mitología.” 15 En la sociedad precapitalista, afirma, el ocultismo puede haber tenido una
función válida para explicar los elementos insondables de la naturaleza asignándoles una
subjetividad antropomorfo; Ahora, sin embargo, se ha convertido en más que otra manera de
ocultar la alienación producida por la cosificación del sujeto en la producción capitalista:

El ocultista llega a la conclusión definitiva del fetichismo caracteres de los productos básicos:
el trabajo objetivado amenazante le asalta en todos los lados de los objetos demoníacamente
muecas. Lo que se ha olvidado en un mundo congelado en productos, el hecho de que se ha
producido por los hombres, se separa y misremembered como un ser-en-sí añade a la de los
objetos y equivalente a ellos. Dado que los objetos han congelado en la fría luz de la razón,
perdió su animación ilusoria, la calidad social que ahora los anima se da una existencia
independiente tanto naturales como súper natural, una cosa entre las cosas. dieciséis

En lugar de recordar, de buena manera marxista, que el obrero es el que produce el objeto y su
valor (añadido), el ocultista toma el objeto de un agente autónomo, la mejora de su condición de
fetiche mientras que la búsqueda de negarlo. Los procesos históricos y el hecho de que se trata de
personas que oprimen a la gente está ofuscado, Adorno sugiere, por adivinos, los investigadores
psíquicos, y “abracadabra astrológico,” todos los que trabajan para transferir la agencia y la
responsabilidad de una, no material externo inasible, fuerza. 17
6 EL LECTOR SPECTRALITIES

diatriba en lugar hiperbólica de Adorno contra las prácticas ocultas que eran, en el momento de la escritura
en la década de 1940, ya bastante marginal, pero que son Ello no obstante, semejante al fascismo y visto a
ejercer un poder totalitario, deja poco espacio para la comprensión de las razones por las la gente invierte a sí
mismos en estas creencias. Él va tan lejos como para que desaparezca el miedo a la muerte, al igual que
Freud, noce recono- podría ser la base de “la idiotez lamentable que practican” como sí “burdo”. 18

El diagnóstico de material elidido de la sociedad de la catástrofe colectiva se dirige hacia que se ve a

invalidar cualquier deseo personal para la esperanza o la comodidad como una indulgencia infantil,
generando más de una bocanada de la misma elitismo que impregna la discusión de lo siniestro de
Freud. Si los medios transmiten “nada más significativo que los saludos de la abuela muerta y la
profecía de un viaje inminente,” esto puede tener ningún valor posible para Adorno. 19 Simplemente se
marca a los que ellos toman en serio como “burros”, que, en lugar de cuestionar la manera capitalismo
priva de su existencia de la pena, se deleitan en su “monotonía cotidiana.” 20

Mientras que el ocultismo es condenado para mezclar el condicional e incondicional,

Adorno elogia las religiones tradicionales para hincapié en la “inseparabilidad de lo espiritual y
lo físico”: el alma y el cuerpo no se debe pensar el uno del otro, ya que la supuesta libertad del
alma ( o la mente) sólo sirve para ocultar la falta de libertad del cuerpo en trabajo de parto. 21 Sólo
por pensar en lo espiritual como parte de la física, subsumido en él, ¿será susceptible de
crítica materialista. Al igual que en Freud, entonces, no es sólo la supuesta existencia de
fantasmas reales que Adorno se burla, sino también el uso figurativo del espíritu, de la que se
ve la peligrosa creencia en la realidad material autónoma del fantasma y el alma por igual para
originar: “la doctrina de la existencia del Espíritu, la exaltación final de la conciencia burguesa,
... llevaba teleológicamente dentro de él la creencia en espíritus, su máxima degradación.” 22 La
única conclusión posible, dibujado en última frase de Adorno, es que no debe haber alguna fantasma
o espíritu, real o

metafórica: “No existe ningún espíritu.” 23

¿Cómo puede el cambio de esta renuencia a apelar a la figura del fantasma para Derrida
y abrazo others'-sincero de que al final del siglo XX se explica? Lo llamativo en este sentido
es que la rehabilitación del fantasma de Derrida se inspira precisamente los dos sistemas de
pensamiento representadas por Freud y Adorno: el psicoanálisis y el marxismo. Este último,
como es bien sabido, proporciona el impulso principal para

Espectros de Marx, que trata de evocar no sólo los múltiples legados del pensamiento de Marx en el
presente, su supervivencia inquietante allá de la caída del muro de Berlín y el anuncio del “fin de la
historia”, pero también propia supuesta obsesión de Marx con deshacerse de los fantasmas, de
Francis Fukuyama. Siguiendo esta línea de pensamiento, el despido de lo oculto como de Adorno occultus,

como ocultar el secreto que es la condición real del mundo material, se puede ver para proseguir con la
postura cazar fantasmas de Marx, que, según Derrida, está dirigido de manera similar a hacer visible lo
que está realmente presente:
 Introducción: la conceptualización SPECTRALITIES 7

Marx es muy firme: cuando se ha destruido un cuerpo Phantomatic, el cuerpo real se mantiene.
Cuando el fantasmal cuerpo ( morir gespenstige Leibhaftigkeit)
del emperador desaparece, no es el cuerpo que desaparece, simplemente su
fenomenalidad, su phantomality ( Gespensterhaftigkeit). El emperador es entonces más real
que nunca y se puede medir mejor que nunca su poder real ( wirkliche Macht). 24

Mientras relectura de Derrida del trabajo, especialmente su afirmación de Marx de que la deconstrucción
“se ha mantenido fiel a un cierto espíritu del marxismo, a por lo menos uno de sus espíritus” y permite a
su “radicalización” 25 -Can (y ha sido) criticado, 26 su sugerencia de que en lugar de ser expulsado, el
fantasma debe permanecer, ser vivida con, como una señalización de la desarticulación definitiva de la
ontología, la historia, la herencia, la materialidad y la ideología metáfora conceptual, ha sido
ampliamente adoptado. En relación con “el pensamiento deconstructivo de la traza, de iterabilidad, de la
síntesis de prótesis, de carácter suplementario, y así sucesivamente,” el fantasma deja de ser visto como
oscurantista y se convierte, en cambio, una figura de la clarificación con un potencial específicamente
ético y político . 27

El segundo, psicoanalítica locus de inspiración para Derrida

Invocación de la espectral se encuentra en los dos prólogos que escribió en la década de 1970 a
Nicolas Abraham y Maria Torok de El hombre lobo de Word Magic: Un Cryptonymy y Abraham,
“The Shell y el Kernel”, respectiva- mente, titulado “Fors” y “Me-Psicoanálisis”. 28 Lo que le atrae en
el trabajo de estos psicoanalistas origen húngaro es su desvinculación del sentido de lo que está
presente o presentable: además de la capa visible, el núcleo, como aquello que es “inaccesible” y
marcado “con absoluta no presencia” también se convierte en un portador de sentido. 29 Por otra
parte, los significados contenidos en las formaciones psíquicas similares a los granos de la cripta
(un traumático secreto incorporada o la pérdida del yo) y el fantasma (un traumático secreto
incorporada o la pérdida de la otra) son heterogéneos y, consecuentemente, no susceptible de
sistemática, instantánea descodificación; en cambio, requieren múltiples, laboriosas y creativas
procesos de traducción o “la transcripción analítico-poético.” 30

Es fácil ver cómo estas ideas repican con la elaboración de Derrida, por ejemplo, différance, a
pesar de que, como Colin Davis explica en el artículo reimpreso en este Lector, dentro de
orientación clínica Abraham y de Torok se supone que el proceso de significado diferido para
llegar a un eventual stand-aún en el momento curativa. Si bien hay una mención explícita de
espectralidad se hace por Derrida, ya sea en el prólogo, la apreciación de la indicada
radicalmente no presente (acional) figura de “el fantasma que heterocryptic devoluciones del
inconsciente de la otra, de acuerdo con lo que podría llamarse la ley de

otra generación ” 31 prefigura fuertemente Espectros de Marx 'S discusión del espectro como una
figuración de la presencia-ausencia, la negociación de la cual obliga a una “ política de la memoria,
de la herencia y de las generaciones “. 32

Abraham mismo, en “Notas sobre el fantasma: Un Complemento para metapsicología de

Freud,” no vacila en emplear fantasmas metafórica,
8 EL LECTOR SPECTRALITIES

confianza ya que es de su última irrealidad: “Es un hecho que el 'fantasma', cualquiera que sea su forma,
no es más que una invención de los vivos.” 33 A pesar de la necesidad de indicar de forma explícita y su
elección para colocar el término “fantasma”
- sinónimo de fantasma más íntimamente asociado con el ilusorio - entre comillas puede indicar un
elemento de cautela, la formación psíquica que se describe descaradamente dice que persiguen. De
hecho, encarnados fantasmas se ven derivar de una figuración psíquica más fundamental: “Los
fantasmas de folclore más que objetivan una metáfora activo dentro del inconsciente: el entierro de
un hecho incalificable dentro del ser querido. ” 34 Esto se asemeja a la insistencia de Adorno de que Geist
( espíritu) se convierte en fantasma, sólo que aquí lleva a la conclusión positiva de que mirando
fantasmas objetivados y sus payasadas puede dilucidar el funcionamiento de la mente: “Aquí
estamos en medio de la clínica psicoanalítica y todavía envuelto en la oscuridad, una oscuridad, sin
embargo, que el ser nocturno de los fantasmas (aunque sólo sea en el sentido lógico metapsycho-)
puede, paradójicamente, ser llamado a aclarar “. 35 Lo que sigue es una consideración del trauma
intergeneracional como una fuerza inquietante, donde la noción de inquietante, como el sitio de
comparación, aclara tanto los aspectos temporales y espaciales de la aflicción, mientras que su
resolución es descrito como el fantasma de ser “exorcizado con éxito.” 36

Sin embargo, otro compromiso temprano por parte de Derrida con el fantasma se encuentra en

Del Espíritu: Heidegger y la pregunta desde 1987. En contraste con la acusación del uso
metafórico del Espíritu como la generación de sus homólogos consagrados de
Adorno-ocultismo que él llama “la niño terrible del momento místico en Hegel” 37 -Derrida insiste
en que los dos no pueden separarse por completo (que, por cierto, no equivale a su
ecuación). vacil- de Heidegger entre lating negarse espíritu como anti-ontológica y apelando a
él como una forma no-religiosa de la espiritualidad que funda el mundo, sin ser capaz de
mantener los diferentes significados de Geist infecte entre sí, se describe mediante el recurso
al vocabulario del fantasma e inquietante:

Geist Siempre es perseguido por su Geist: un espíritu, o en otras palabras, en francés [e

Inglés] como en alemán, un fantasma, siempre sorprende volviendo a ser ventrílocuo del
otro. La metafísica siempre vuelve, me refiero en el sentido de una revenant [ fantasma], y Geist
es la figura más fatal de este revenance [ regresar, inquietante]. Del doble que nunca puede
ser separado de la única. 38

El espíritu, en su enlace léxica al fantasma, exhibe una “duplicidad espectral”, un

auto-inquietante que “permite un análisis ni la disolución en la simplicidad de una percepción.” 39 No
sólo puede la metafórica y el sentido literal de Geist No se mantienen separados, el fantasma
metafísico y su inclinación por la inquietante ahora se convierte en la base para el concepto de
esta inseparabilidad, por el sencillo que es siempre ya doble, el “ origen heterogéneo ”[ hétérogène
à l'origine]. ” 40 La última voluntad, en Espectros de Marx, donde el
 Introducción: la conceptualización SPECTRALITIES 9

fantasma completa su transición de la realidad ordinaria potencial de la metáfora a la metáfora

conceptual, re-emerger como el “ más de una / uno no más [le
plus d'un]”de hauntology. 41
Para Derrida, como señala Frederic Jameson, “espectralidad no implica la convicción de
que existen los fantasmas.” 42 En su calidad de figuración
hace teoría, se critica precisamente lo tanto Adorno, en su búsqueda de la materia, y Freud, en
su deseo de definir sin ambigüedades la ambigüedad de lo siniestro, buscan preservar: “el 'sin
mezclar': lo que es de alguna manera pura y autosuficiente o autónoma, lo que es capaz de
desacoplarse del desorden general de fenómenos mixtos, híbridos a su alrededor y nombrado
con la satisfacción de un solo nombre propio conceptual “. 43 Por lo tanto, a pesar de que utiliza el
fantasma literal del padre de Hamlet como un ejemplo paradigmático y vitupera eruditos
tradicionales por no creer en fantasmas, cuando Derrida propone la posibilidad de “otro"
experto”abierto a espectralidad, esto no es alguien que confía en el retorno de los muertos; más
bien, se trata de alguien “capaz, más allá de la oposición entre la presencia y la no presencia, la
realidad y inactualidad, la vida y no vida, de pensar la posibilidad de que el espectro, el espectro
como posibilidad.” 44 Creer o no creer en fantasmas ya no implica una determinación acerca de la
posibilidad empírica (im) de lo sobrenatural, sino que indica que contrasta actitudes -un
validados dar la bienvenida a verse como ética y propicio, y un rechazo considera poco ético y
desposeer-hacia la incertidumbre, la heterogeneidad , la multiplicidad, y la indeterminación que
caracterizan el lenguaje y ser causa de su enredo tabla inevitable con la alteridad y la
diferencia. Derrida, entonces, lejos de ser un cazafantasmas como Freud, Adorno, y Abraham y
Torok, utiliza la figura del fantasma para perseguir (sin nunca aprehender completamente) lo
que refugios como un fantasma y, a través de este inquietante, exige la justicia, o al menos una
respuesta.

Esta búsqueda no se puede llamar una ciencia, o incluso un método, como el fantasma o espectro
se ve a mostrar precisamente que escapa la cognición completa o comprensión: “No se sabe: no por
ignorancia, sino porque este no-objeto, esta no presente la actualidad, este ser-ahí de un ausente o ha
salido ya no pertenece al conocimiento “. 45 Por lo tanto nuestra pluralización de “spectralities” en el
título de este Lector y nuestra indecisión en la presentación de las investigaciones espectrales reunidos
aquí como un nuevo campo o disciplina (ambos de los cuales implica la delimitación y control). El
fantasma, incluso cuando se convirtió en una metáfora conceptual, sigue siendo una figura de
indisciplina que apunta a la tangiblemente ambigua. Si bien tiene una visión que ofrecer,
especialmente en aquellas materias que son comúnmente considerados no a la materia y en el propio
ambigua, su propia condición de discurso o la epistemología nunca es estable, ya que el fantasma
también cuestiona la formación del propio conocimiento e invoca específicamente lo es colocado fuera
de ella, excluidos de la percepción y, en consecuencia, tanto del archivo como el depositario del
sancionado, reconocieron pasado y la política como la (re) imaginaron presente y futuro.
10 EL LECTOR SPECTRALITIES

A pesar de que Espectros de Marx se ve a menudo, hasta situarse en el origen de la llamada

“giro espectral” (un giro de la frase cuya idoneidad y los riesgos que están en juego en la primera
parte de este Lector), que iría en contra del espíritu de la elaboración del espectro y de Derrida que,
para asignar una génesis unitaria a lo que era en realidad una difusa, extendida momento cultural.
Ya hemos visto que las ideas de Derrida se remonta a por lo menos la década de 1970 y se basan
en el trabajo de otros. 46 Además, la elaboración de espectralidad coincidió con nuevas
investigaciones conceptuales de fantasmas e inquietante que se abrieron diferentes vías de
investigación. Un ejemplo es el castillo de Terry El apparitional Lesbianas ( 1993), el cual, mediante
la exploración de la desmentida culturales penetrante de lesbianismo a través de actos de “efecto
fantasma” (renderizado sexualidad lesbiana invisible al asociarlo con lo efímero) y por lo tanto
haciendo hincapié en la asociación del fantasma con el despojo, desaparición, y el borrado
sociales, proporciona una importante contrapeso al énfasis de Derrida en el espectro como una
poderosa fuerza inquietante. 47 Otra exploración conceptual temprana del fantasma se encuentra en
Anthony Vidler de

Lo siniestro arquitectónico ( 1992), de la que se incluye una sección aquí. A modo de consideración
arquitectónica de las nociones de casa y el hogar, Vidler trae lo siniestro (presentada como una
metáfora o tropo que excede su elaboración freudiana) junto con el fantasma para sugerir que “lo
siniestro podría recuperar una connotación política como la condición misma de inquietante
contemporánea “. 48 Los proyectos arquitectónicos específicos analizados, que exploran la posibilidad de
hacer presente a través de la ausencia de materializaciones bilidad invis-, translucidez y transparencia,
concretizan lo que Derrida llamaría el “no sensible sensual.” 49 Por otra parte, la atención de Vidler para
la dimensión espacial de la inquietante: su asociación con el desplazamiento y las de desembolso de
lugar marca un camino diferente al de Espectros de Marx 'S se centran en la temporalidad del fantasma,
su tendencia a poner el tiempo de espera de la articulación.

El interés renovado en los fantasmas conceptuales e inquietante que caracterizarse la década de

1990 también se ha relacionado con una mayor (y un poco antes), gire a la historia y la memoria,
concentrándose en particular, sobre el tratamiento de trauma personal y colectiva. Jeffrey Andrew
Weinstock, por ejemplo, se conecta “discurso espectral” con “la reciente preocupación por el 'trauma' en
el que la presencia de un síntoma demuestra la incapacidad del sujeto para internalizar un evento
pasado, en el que algo del pasado emerge para interrumpir el presente. ” 50 La siguiente sección explora
cómo ciertas elaboraciones de espectralidad de hecho encajan con las preocupaciones de los estudios
de trauma, mientras que al mismo tiempo insistir en que, como concepto transversal utilizado para
hacer frente a una amplia variedad de fenómenos, que va más allá de ellos.
 Introducción: la conceptualización SPECTRALITIES 11

Los estudios espectralidad y trauma

Ya en su Semántica culturales a partir de 1998, Martin Jay estaba hablando acerca de los “noventa
extrañas”, un particular, espíritu de la época que describe la “obsesión actual con la interfaz con
problemas entre historia y memoria” y la preocupación por “la forma en el pasado hace que las
demandas culturales de nosotros tenemos dificultades para cumplir.” 51 En este entorno académico de
fantasmal saturado, Jay percibe un problema en el colapso de la “metafórica e lo real, lo simbólico y lo
literal,” alegando que era “ahora la altura de astucia para comercializar lo siniestro”. 52 El desdén por
cualquier creencia persistente en retornados reales de las entidades sobrenaturales muertos, y otras
que llevaron a Freud y Adorno a alejarse de los usos metafóricos incluso aparentemente se había
invertido en una aceptación acrítica e indiferenciada de cualquier y todos los fantasmas figurativas.
Esta inquietante penetrante de la academia, de acuerdo con Jay, tuvo eco en los “últimos debates
sobre la supuesta memoria reprimida” que ocupaban los estudiosos en el campo de la psicología. 53 Como
Abraham y Torok noción del fantasma (como inconscientemente heredó la pérdida o secreta) ya se ha
indicado, la metáfora conceptual de espectralidad está profundamente arraigado en el discurso de
pérdida, duelo y recuperación que delineó el proyecto multidisciplinario de los estudios de trauma
como se puso de manifiesto en el 1980. Para ser traumatizado, como Cathy Caruth ha explicado, es
que “poseído por una imagen o un evento” que se encuentra en el pasado. 54 Para ser “poseído” -
agarrado indefinidamente por un evento-también anacrónica describe la condición de ser perseguido,
ya que ha sido comúnmente interpretado. En otras palabras, cuando pensamos en las historias de
fantasmas (los tradicionales, por lo menos), es la obsesión del presente por el pasado que emerge
como la narrativa más insistente. El modo de expresión que muchos estudiosos utilizan para describir
lo espectral, entonces, es similar, si no es del todo compatible con los términos utilizados para
describir las cualidades afectivas de trauma. Tomemos, por ejemplo, el capítulo de Ulrich Baer de La
evidencia espectral reproduce aquí, en la que discute fotografías sorprendentemente análogas Dirk
Reinartz de Mikael Levin y de los paisajes contemporáneos que crecen en las zonas en las que los
campos de concentración nazis utilizan para estar de pie. Estos son lugares que “[han] no han sido
totalmente dominado y contenidos,” caracterizarse por su “estructura enigmática”, y que nos
confrontan con los límites de historización. 55 Baer se ocupa de estas fotografías como traumático y
fantasmales, dado que, como espectadores, hemos llegado tarde a la escena de un “retenido pasado”
que, sin embargo, nos recuerda su ausencia en nuestro presente. 56

Como Roger Luckhurst ha descrito en El trauma pregunta, la historia de este trastorno se

remonta a sus orígenes físicos en la década de 1600, con el surgimiento de la psicología en el
período victoriano, y, más tarde, su reaparición a finales de la década de 1970 con la acuñación
del término “estrés post-traumático trastorno”(TEPT) -a diagnóstico utilizado para veteranos de
Vietnam que sufren de alucinaciones, neurosis, y otras formas de estrés post-combate. 57
12 EL LECTOR SPECTRALITIES

Los críticos dentro de los estudios de trauma han ampliado en este paradigma para hacer frente a las
experiencias personales y colectivas catastróficas, y los actos de testimonio y testimonios relacionados
con ellos. Que van desde la violencia colonial y los genocidios que ocurrieron, por ejemplo, durante el
Holocausto y en Ruanda durante principios de 1990, a los eventos del 9/11, estas experiencias son
vistos como elidiendo y, literalmente, rompiendo la comprensión; son actos pasados ​de los que nos
gustaría acceder de nuevo con el fin de intentar cambiarlas y que los traumatizados a menudo revivir
compulsivamente, pero que permanecen encerrados en su inaccesibilidad y la repetición incesante.

Eruditos como Caruth han llegado a comprender coacción postraumático no simplemente como
un “síntoma de lo inconsciente”, sino “un síntoma de la historia” también. 58 Aquí podemos ver cómo la
condición de la persona traumatizada es catapultado en el más grande, experiencia multi-subjetiva
de una cultura global en el que el sueño de vanguardia del nuevo y revolucionario está siendo
reemplazado con, siguiendo Dominick LaCapra, la “memoria de trabajo ”de los estudios del pasado
realizada en serio durante las últimas décadas del siglo pasado y comienzos del XXI. 59 Por lo tanto,
Caruth describe individuos traumatizados como sujetos históricos, en el sentido de que, al igual que
Abraham y pacientes fantasmas cargados de Torok, que “llevan una historia imposible dentro de
ellos o se convierten en sí mismos el síntoma de una historia que no pueden poseer por completo.” 60 Trauma,
tal como lo describe Caruth, está siempre comprometida en la búsqueda de una respuesta, una
verdad evanescente. Tal es el caso con los fantasmas que llegan del pasado, que buscan
establecer un diálogo ético con el presente. Fantasmas, en este caso, son parte de una
sintomatología de trauma, a medida que estén tanto los objetos de metáforas y de una experiencia
histórica heridos.

Dentro de los campos de cultivo de estudios de la memoria y el trauma, diferentes y divergentes

argumentos han surgido, especialmente con respecto a las posibilidades paliativos de memoria de
trabajo (que tiende a imaginar un conjuro de la verdad del pasado, principalmente a través de dar
voz a sus víctimas, lo cual se deposita posteriormente a descansar como repetición traumática es
ejecutada y la memoria integrada en una cuenta de la narrativa 61). Como Richard Crownshaw ha
señalado recientemente, la dependencia de ciertas ramas de los estudios de trauma en
“definiciones psicológicas y psicoanalíticas individuales de experiencia” puede conducir al campo
en un “overpersonalisation” y, posteriormente, “dehistoricis [ción]” de la experiencia colectiva. 62 Uno
de los críticos más abiertos estudios de trauma se ha Andreas Huyssen. En “Pasados ​Presentes:
Medios, Política, Amnesia,” habla de una “paradoja globalización” de los eventos traumáticos como
el Holocausto, en el que este evento se ha convertido en un absoluto “cifrado para el siglo XX en su
conjunto.” 63 Lo Huyssen describe aquí es un modelo singular de un trauma (y su potencial de
resolución) que se aplica posteriormente a otras situaciones que, si bien puede ser similar en
algunos aspectos, son, sin embargo, históricamente, culturalmente y políticamente retirados de las
experiencias de los Judios bajo el nazismo. Este riesgos “totalización”
 Introducción: la conceptualización SPECTRALITIES 13

borrando especificidad del Holocausto, así como otras experiencias de bloqueo de la catástrofe y la
pérdida dentro de un distante, universaliza y universalizante, modelo. En su lugar, Huyssen argumenta a
favor de una concepción de la memoria en la que la memoria y el trauma no son tratados como
sinónimos:

Ha sido demasiado tentador para algunos a pensar de un trauma como el núcleo oculto de toda la
memoria. Después de todo, tanto la memoria y el trauma se basan en la ausencia de lo que se
negocia en la memoria o en el síntoma traumático. Ambos están marcados por la inestabilidad, la
transitoriedad, y las estructuras de repetición. Pero al colapso de memoria en el trauma. . .
indebidamente limitar nuestra comprensión de la memoria, marcándolo demasiado exclusivamente en
términos de dolor, sufrimiento y pérdida. 64

El peligro de que marca toda recordar con los registros afectivos de la melancolía es que
podemos llegar a entender la memoria como trabajar únicamente sobre la base de la
repetición y la negatividad, más que en su (futuro) la productividad progresiva. Aquí,
podemos recordar igualmente singular asociación de Freud del fantasma con la espantosa y
comenzar a ser recordado de la innovación inherente a la conceptualización del espectro, lo
cual es siempre tanto de Derrida Revenant ( invocando lo que fue) y arrivant

(Que anuncia lo que vendrá) -Como operar en una serie de planos temporales, lo más crucial el
futuro y sus posibles interacciones con el presente y el pasado. espectro de Derrida no sólo
“señales de la imposición unbidden de partes del pasado en el presente, y la forma en que el futuro
está siempre ya rellena con ciertas posibilidades derivadas del pasado”, sino también, a través de
su asociación con el mesiánico, o, menos enigmáticamente, la danza de los espíritus de Gayatri
Spivak como futuro anterior, el potencial de diferentes rearticulaciones de estas posibilidades. sesenta y
cinco A diferencia de la repetición traumática, después de todo, el fantasma es una figura de la
sorpresa que no necesariamente vuelven a aparecer exactamente de la misma forma o apariencia.
Por otra parte, provoca el que persigue a una respuesta o reacción, lo que lleva a Avery F. Gordon
en cuenta que “inquietante, a diferencia de un trauma, es distintiva para producir un ser hecho
algo-a-”. 66

El análisis de los problemas de la historiografía contemporánea, LaCapra busca una salida del dilema
melancólica del discurso trauma mediante la separación de la pérdida de ausencia. En su referencia
persistente al objeto faltante, la pérdida puede transformar en la nostalgia o, peor aún, una “política utópica
en busca de una nueva totalidad o una comunidad totalmente unificado” cuando se combinó con una
concepción de la ausencia. 67 En pocas palabras, la ausencia que se interioriza como la pérdida conlleva un
proceso de duelo y la melancolía incesante, así como una superposición de los planos de la continuación
con los del mismo. Ausencia describe algo relacionado, pero muy diferente, a la pérdida: podemos
entenderlo como un trauma transhistórica (estructural), de acuerdo con LaCapra, mientras que la pérdida
debe conservar su especificidad histórica. Como él mismo explica:
14 EL LECTOR SPECTRALITIES

Algo del pasado siempre se mantiene, aunque sólo sea como una presencia inquietante o revenant.
Por otra parte, las pérdidas son específicos e implican determinados eventos, como la muerte de
seres queridos a nivel personal o, en una escala más amplia, las pérdidas provocadas por el
apartheid o por el Holocausto en sus efectos sobre Judios y otras víctimas del genocidio nazi ,
incluyendo tanto las vidas y culturas de los grupos afectados. Creo que es engañosa la pérdida de
situar en un nivel transhistórico, algo que ocurre cuando se combinó con la ausencia y la concibe
como constitutiva de la existencia. 68

En un argumento que resuena con la crítica del paradigma de trauma Huyssen, LaCapra
argumenta a favor de una comprensión de trauma como a tierra en el caso específico, y las
experiencias que lo rodean.
la prescripción de LaCapra a trabajar a través de la dialéctica de la ausencia y la pérdida, y por lo
tanto para producir “una condición de posibilidad de la historicidad,” 69 en muchos aspectos se hace eco
de medida cautelar de Derrida para aprender a “vivir de otro modo, y mejor” aprendiendo “a vivir con fantasmas
“, y la insistencia de este último que una historia concebida como espectral requeriría un reflejo de
cómo el pasado es a la vez ausente y presente en el momento presente, sino también cómo el pasado
puede abrir las posibilidades para el futuro. 70 Sin embargo, al mismo tiempo, Derrida podría decirse
que es culpable de una fusión dehistoricizing similar a la que existe entre la pérdida y la ausencia.
Hauntology, como una ontología alternativa desarticulada, no fundacional, rivaliza noción de ausencia
en su tendencia a la universalidad y transhistoricism de LaCapra, como se hace evidente cuando
Derrida afirma que “es necesario introducir inquietante en la construcción misma de un concepto. De
todos los conceptos, a partir de los conceptos de ser y el tiempo “. 71 Sin lugar a dudas, tal noción
generalizada de que frecuenta tiene su utilidad, al igual que la idea de un trauma estructural. Una
distinción, sin embargo, debe mantenerse entre el fantasma como “único en una serie de tropos
deconstructivas”, un meta-concepto que llega a poseer prácticamente todo, y sus conceptualizaciones
más específicos, donde los fantasmas e inquietante se toman como histórica y culturalmente en
particular, y en los que pueden incluso ser re-supernaturalized. 72

Para Derrida, hauntology nueva forma a la historia mediante la interrupción de su estructura convencional de
la cronología: “inquietante es histórico, para estar seguro, pero no es
anticuado, nunca se da dócilmente una fecha en la cadena de los regalos, día tras día, de acuerdo con el orden
establecido de un calendario “. 73 Esto puede servir para contrarrestar la sobredeterminación histórica (la
búsqueda de la verdad en un punto fijo de origen) que caracteriza a ciertas encarnaciones de los estudios de
trauma, sino que también hace que los espectros que evoca a permanecer extrañamente sin amarras de los
contextos históricos, como todos los fantasmas, al estar reducido a sus características más generales,
convertido esencialmente en el mismo (al igual que todos los exorcistas). Fantasmas, entonces, no sólo son
aptos realizaciones y figuraciones de trauma, pero la teoría del trauma también proporciona lecciones valiosas
ya que responde a las críticas y adquiere la junta igualmente aplicable a determinadas elaboraciones de
espectralidad. Como
 Introducción: la conceptualización SPECTRALITIES 15

los textos recogidos en este Lector espectáculo, una gran parte del esfuerzo en la estela de Espectros de
Marx ha sido para especificar potencial conceptual del fantasma en relación con la historia y la memoria,
señalando, por ejemplo, que los acontecimientos históricos o recuerdos, incluso cuando aparentemente
similares en especie, pueden dar lugar a muy diferentes apariciones, y que incluso el mismo evento no puede
volver de manera idéntica a través del tiempo. Toda la historia y la memoria pueden de hecho ser espectral
en algún sentido, pero la comprensión de los efectos de los casos particulares requiere contextualización
cuidadosa y delimitación conceptual.

Después de haber esbozado la zona de contacto entre los estudios de trauma y las teorías de la
espectralidad, es importante para evitar la impresión de que el fantasma como metáfora conceptual se
limita a dilucidar los problemas de memoria y la historia (ya sea traumática o no); mientras que éstas
son aún dominantes-áreas de investigación tal vez importante-, espectralidad ha demostrado ser útil en
el tratamiento de muchas otras cuestiones, hasta el punto de que parece omnipresente. Si bien la
magnitud de su alcance académico se pondrá de relieve al final de esta introducción, la penúltima
sección explora el peligro familiar de un concepto académico nuevamente popular se convierta en un
carro.

Estirar el fantasma

La aplicabilidad multidisciplinar de la beca trauma, y ​los estudios espectralidad un sentido más amplio,
significa que los términos desarrollados dentro de un campo de estudio se emplean en otros. Esta
transferencia, mientras que la apertura de oportunidades interdisciplinarios, también puede dar lugar a
interpretaciones más cíclicos, si no sobrecargados, de los usos, significados y posibilidades de
inquietante. Recientemente, Roger Luckhurst ha señalado que “el fantasma como figura de trauma ha
convertido casi en un cliché, como lo fue reforzada a lo largo de la década de 1990 por un discurso
crítico elaborado de espectros y 'espectralidad'”. 74 Ya en su crítica de “la vuelta espectral” de 2002
(extractado en este volumen), que describe un conjunto de obras con sede en Londres de ficción, no
ficción, y la crítica que él llama “el London gótica” (marca otro importante intersección para estudios
espectrales) en los siguientes términos:

Incapaces de discriminar entre instancias y en gran parte desinteresado en historicidad (más allá de
su interrupción espectral), el discurso de riesgos modernidad spectralized invierten en las repeticiones
compulsivos de una estructura de atrapamiento melancólica. En este modo, para sugerir un duelo de
trabajo inevitablemente historizada que en realidad podría tratar de poner un fantasma para
descansar sería el colmo de la mala educación. Y debido a que los infiltrados espectrales del mismo
acto hermenéutico, el trabajo crítico sólo puede replicar tropos de fuentes textuales, juegos de
palabras animadamente en torno a los términos centrales de la gótica para producir una curiosa forma
de meta-gótica que elude objeto y el instrumento. 75
dieciséis EL LECTOR SPECTRALITIES

Si el lenguaje narrativo y el lenguaje de los traumatismos son compañeros de cama íntimas, ya que ambos
pueden jugar y experimentar con la idea de superar las aporías dejadas por el pasado, entonces debería
ser ninguna sorpresa que los tropos de textos literarios deben encontrar un hogar en el el cuerpo de la
crítica que lo acompaña. Lo Luckhurst describe en el pasaje anterior, sin embargo, no va al corazón de la
evolución del campo de los estudios espectralidad. Esta área de interés académico se considera a
menudo como una respuesta, y el antídoto, a nuestra supuesta edad de la amnesia, y su énfasis en el
deber de recordar y reconocer el pasado (para mantener los fantasmas vivos) de hecho puede parecer
demasiado crítico de los procesos de cierre y olvidar. Sin embargo, al mismo tiempo, viviendo con fantasmas
no tiene por qué implicar “atrapamiento melancólica,” desde el retorno espectral, como se señaló
anteriormente, es capaz de superar la replicación pura. Familiarizados con los estudios nostalgia, sin
embargo, otra corriente dentro de la teoría cultural contemporánea, 76 Los estudios de fantasmas y que
frecuenta pueden hacer más que recordar obsesivamente un pasado fijo; en un compromiso activo,
dinámico, que pueden revelar la insuficiencia del momento presente, así como los disconsolations y
borrados del pasado, y una esperanza provisional para futuras resoluciones.

Aún así, a pesar de la presencia de un discurso que, generalizando la experiencia

encantada, puede resonar con y hablar con otras disciplinas, historias y lenguas, el problema
de la especificidad del fantasma y sus futurities localizados sigue a roer la idea misma de la
presente ausente . Al leer la siempre creciente pila de obras sobre inquietante y observar la
manifestación permanente de fantasmas en la cultura popular y la estética y la política del día
a día, hay que preguntarse si el tropo de la inquietante y espectralidad ha alcanzado su
apoteosis, o (más optimismo) si hay nuevas formas en las que podemos seguir creciendo el
campo sin ensayar los registros que hemos estado confiando en los últimos decenios. La
aparición misma de esta

Lector señales de nuestra creencia de que el trabajo académico en espectralidad ha alcanzado una masa
crítica, por lo que anthologization no sólo es posible, pero útil. Este volumen, sin embargo, no se llevó a cabo
en el modo del archivo tradicional; no pretendemos definir definitivamente o delimitar un campo, sino más
bien para mostrar la fertilidad diversa del fantasma e inquietante como metáforas conceptuales más de un
período determinado, con la esperanza de revelar algunas trayectorias influyentes y provocando futuras
innovaciones (a través de la inclusión y omisión; después de todo, como se argumenta en Derrida Mal de
archivo, archivos son perseguidos, inevitablemente, por lo que excluyen). 77 Un poco de esfuerzo de la
discriminación es inevitable, sin embargo, como hemos llegado a un importante (y quizás un poco unheimlich)
momento de autoinspección sobre nuestra fascinación por nuestra condición de recuperación amnésicos e
investigadores de la espectral. Además de preguntar por las oportunidades que ofrece espectrales, este
momento igualmente nos lleva a evaluar sus limitaciones.

el 2010 Haunted: Fotografía / Vídeo / Performance

exposición en el Museo Solomon R. Guggenheim en Nueva York nos pareció chocar con el
punto en que un concepto amenaza con romperse, ya que se estira demasiado delgada.
Curadores Jennifer Blessing y Nat Trotman
 Introducción: la conceptualización SPECTRALITIES 17

canalizado idea de Roland Barthes que el medio de la fotografía (que se extienden a video y
performance), sobre todo en nuestra época post-capitalista, es esencialmente encantada. Sin
embargo, cuando Barthes elabo- cuidadosamente las tasas de la metáfora y, sobre todo, que
distingue a la imagen en movimiento como no-espectral, 78 la propaganda en la portada del
catálogo de la exposición parece convertir cualquier invocación del pasado o la tradición, y
cualquier forma de repro- ducción, en un inquietante: “Gran parte de la fotografía contemporánea
y el vídeo parece frecuentada por la historia del arte, y por el . apariciones fantasmales que
cobran vida en medios de reproducción, en performances en vivo, y el mundo virtual”, al mismo
tiempo, se limita el significado de inquietante a la nostalgia melancólica:“mediante el uso de
recursos estilísticos, la materia desfasados, anticuados o casi extintos, y tecnologías, tales
melancólica arte encarna el anhelo por un pasado irrecuperable “. 79 La tensión entre una
interpretación -no demasiado general todo lo que devuelve o se repite es necesariamente
espectral o extraña, y una lectura restringida de fantasmas como figuras de documentación,
conservación, y el recuerdo impregnado la exposición, que, a pesar de reunir una impresionante
colección de obras desde 1960 hasta la década de 2000, se negó a congelar en torno a su
concepto de titular. Las obras que parecen invocar inquietante sólo a través de su medio,

Figura 1 Félix González-Torres, “Sin título”, 1989. • La Fundación Félix González-Torres. Cortesía de
Andrea Rosen Gallery, Nueva York.
18 EL LECTOR SPECTRALITIES

su representación de algo del pasado, o el uso de la repetición o tecnologías de fecha se

mezclaron con las obras que evocan más concreta, los sentidos complejos de fantasmal, como el
artista plástico de origen cubano americano Félix González-Torres 1989 "Intitulado," un
rompecabezas cromogénico rompecabezas envuelto en plástico (Figura 1).

Esta imagen habla con el fantasma en primer lugar temáticamente, en qué Representa: la figura retroiluminada
sombra en lugar sin forma, deformado aún más por los pliegues de la cortina, aparece como un visitante fantasmal no

identificable capaces, como por efecto de la visera de Derrida (el poder de ver sin ser visto), al mirar a través de la cortina

de nosotros, mientras nos queda más que preguntarse en sus motivaciones. Nuestra propensión a interpretar la imagen

como perturbadora invoca la relación entre los fantasmas y la espantosa (en la que, como hemos visto, Freud insiste), así

como su tendencia a inducir la paranoia y la duda: estamos viendo algo que no está realmente allí ? Mientras que el

visitante podría de hecho ser sobrenatural, la cotidianidad de la cortina y el fragmento de la silla visible en la esquina

inferior izquierda sugiere que las relaciones socio-política del mundo material también pueden producir una sensación de

inquietante. Cuestiones de vulnerabilidad, invasividad, y la hospitalidad se insinuó, sin embargo, ninguna significación

inequívoca es ejecutada por el hecho de que no se puede establecer si la cortina constituye una barrera protectora o

excluyente, y si la figura fantasmal está dentro o fuera, una amenaza o el que está en riesgo de exposición. Como tal, la

imagen en primer plano el entre indecidible o como algo que nos puede provocar perturbaciones pero sin embargo no

pueden ser expulsados ​de nuestras vidas. Esta idea se refuerza a nivel formal, como la bolsa de plástico interfiere con

nuestra capacidad para ver la imagen con claridad, mientras que su com- posición de las piezas del rompecabezas nos

enfrenta simultáneamente con nuestro deseo de integridad e identificación, y con el hecho de que éstos nunca lo hará ser

alcanzados plenamente, los bordes de las piezas expuestas hacen que la imagen siempre interrumpido, fragmentada. sin

embargo, ninguna significación inequívoca es ejecutada por el hecho de que no se puede establecer si la cortina

constituye una barrera protectora o excluyente, y si la figura fantasmal está dentro o fuera, una amenaza o el que está en

riesgo de exposición. Como tal, la imagen en primer plano el entre indecidible o como algo que nos puede provocar

perturbaciones pero sin embargo no pueden ser expulsados ​de nuestras vidas. Esta idea se refuerza a nivel formal, como

la bolsa de plástico interfiere con nuestra capacidad para ver la imagen con claridad, mientras que su com- posición de las

piezas del rompecabezas nos enfrenta simultáneamente con nuestro deseo de integridad e identificación, y con el hecho
de que éstos nunca lo hará ser alcanzados plenamente, los bordes de las piezas expuestas hacen que la imagen siempre

interrumpido, fragmentada. sin embargo, ninguna significación inequívoca es ejecutada por el hecho de que no se puede establecer si la cortina

obra de González-Torres, a continuación, los contadores de la dilución y no diferen- ciación de la

noción de que la inquietante Obsesionado exposición en general facilitada, y también se puede tomar
para visualizar nuestra concepción de este
Lector, que, como la bolsa de plástico, proporciona una tentativa-de ninguna manera
impenetrable-carcasa para una colección de textos que se interconectan y están ordenados, pero bien
podría ser barajado y reorganizado. Las piezas del rompecabezas, a su vez, transmiten nuestro deseo
hacer hincapié en la multiplicidad y heterogeneidad de los últimos conceptualizaciones de espectralidad,
que se originan en diferentes disciplinas y se acercan a los fantasmas y que frecuenta desde numerosos
ángulos con el fin de dilucidar una variedad de objetos culturales, historias, y temas socio-políticos. Esta
multiplicidad, como el esquema de abajo explicates, incluye consideraciones de fantasmas y frecuenta a
nivel general como (algo que, por Derrida

hauntology, es inherente al Ser) y más específicas queridos, pero insiste en que, en ambos casos,
la especificación conceptual cuidado. Fantasmal, inquietante, y espectralidad no son términos de
moda acaba de ser lanzado a la ventura,
 Introducción: la conceptualización SPECTRALITIES 19

pero los fenómenos de difícil alcance que requieren delimitación precisa a medida que entran
diferentes contextos y marcos académicos.

contorno

Con el fin de seguir siendo legible, una Lector requiere algún tipo de agrupación de sus textos recogidos, y
este volumen no es una excepción. Las agrupaciones elegido-después de un proceso de selección que
inevitable para algunas pérdidas-son lamentables no pretenden imponer una estructura singular de los
materiales, pero se deben tomar como postes indicadores flexibles que ofrecen una forma de brochado un
área de pensamiento caracterizado por múltiples intersecciones y convergencias y aún no totalmente
cristalizada (en caso de cualquier área académica, disciplinaria o disciplinario interdis-, siempre lo es).
Cada parte, así como los textos contenidos en ellos, serán introducidos por separado, por lo que aquí nos
limitamos a lo que indica la motivación general para e importación de los seis focos elegido.

La primera parte, titulada “The Turn espectral”, presenta un punto de partida lógico en la
reflexión sobre la propagación de espectralidad como instrumento transversal de análisis en las
ciencias humanas y sociales entre la década de 1990 y el presente, que constituye el razón de
ser para este volumen. Reúne textos de Jacques Derrida, Colin Davis, Jeffrey Andrew Weinstock,
Julian Wolfreys, y Roger Luckhurst que eran o un papel decisivo en la inauguración de la
participación en el fantasma o espectro como metáfora conceptual y el desarrollo de este interés
a través de diferentes campos académicos, o participar con el riesgos de su prominencia recién
descubierta y el estado como una tendencia académica.

“Spectropolitics: Fantasmas del contemporáneo global” se centra en los recientes

exploraciones de espectralidad que hacen hincapié en cómo, si los fantasmas y que
frecuenta han de emplearse como metáforas conceptuales, dos aspectos deben ser tenidos
en cuenta. En primer lugar, está el hecho de que estos fenómenos son culturalmente
específicos, con las tradiciones no occidentales rendimiento considerablemente diferentes
marcos epistemológico y posibilidades críticas que las concepciones occidentales que en un
principio dominaron el turno espectral. En segundo lugar, es vital reconocer que las
nociones de espectralidad pueden facilitar la comprensión y el tratamiento no sólo de las
injusticias históricas y su conmemoración en memoria personal y / o colectiva, sino también
de las situaciones de injusticia y falta de poder que surge en y desde un presente
caracterizado por difusa procesos de globalización se. de o para espectros, diseñado para
abordar cómo, en diferentes partes del mundo, los sujetos particulares vuelven propensos a
ser borrados social, la marginación y la precariedad. Mediante el análisis de cómo estos
procesos se pueden pensar en términos de espectralización o “fantasma”
20 EL LECTOR SPECTRALITIES

y imaginando contra-conjuraciones que se niegan nociones sencillas de rematerialización o

exorcismo, estos críticos apelan a espectralidad como una alternativa a, o reconceptualización
de los marcos del posmodernismo, poscolonialismo, el materialismo, el nacionalismo y la
globalización.
Otra preocupación dominante en las últimas consideraciones de espectralidad ha sido la manera
en la que el funcionamiento y el impacto sociocultural de diversos medios de comunicación (desde el
telégrafo y el de rayos X para el cine, la televisión, la radio y el Internet) y sus sentidos asociados (la
mayoría importante visión y audición) se pueden iluminar mediante la exploración de cómo estos
inventos, establecimiento y consolidación global era -y en cierta medida sigue siendo-íntimamente
vinculados con la circulación de prácticas y discursos de lo sobrenatural. La profundidad y amplitud
histórica cultural de esta zona particularmente fructífera de investigación espectral está representado,
en la tercera parte, “El fantasma en la máquina: Espectral Media,” por Tom Gunning, Jeffrey aplique,
Akira Mizuta Lippit, Allen S. Weiss, y David Toop.

Retomando la dirección indicada por Terry castillo de El apparitional Lesbianas, varios

críticos han participado en la exploración de las consecuencias específicas de espectralidad
para las cuestiones de género, la sexualidad y la raza. No sólo se pueden ver estas
categorías de diferenciación social como ellos mismos espectral, en el sentido de que se
basan en retrospectiva naturalizados distinciones, perfomativamente arraigados que
requieren zación remateriali- continua, pero también espectralidad estratificar, como los
excluidos de la norma es probable que tienen mayores dificultades para hacer valer
realmente a sí mismos como fuerzas inquietantes que, por ejemplo, el sujeto soberano que
es el padre de Hamlet. El intento de remodelar espectralidad como un concepto más
diferenciada y, como tal, más relevante para el pasado específicos, presentes y futuras
luchas por el reconocimiento, el respeto y la justicia de las personas identificadas como
no-masculino, no heterosexual, Lector en “subjetividades espectral: género, la sexualidad y la
raza”, que reúne el trabajo de Gayatri Spivak, Carla Freccero, Sharon Holanda, y Renée L.
Hesse.

La dimensión espacial del fantasma que, aunque el centro de estudios gótico, amenazaba con
convertirse eclipsado por el enfoque en la temporalidad dentro de la obra de Derrida, así como en
la memoria y estudios- trauma se aborda en la quinta parte, titulada “Posesiones: espacios
espectrales, ”donde Anthony Vidler, Ulrich Baer, ​David Matless, y Giorgio Agamben demuestran
cómo inquietante, como una metáfora conceptual, se puede dilucidar la forma en la arquitectura,
el paisaje, la geografía y el turismo mediar presencias y ausencias particulares, tanto materiales
como en la forma menos aprehensible de se trata de un pasado traumático o de opresión.

La quinta parte -en particular los textos de Baer y Agamben-ya deja claro que cualquier
intento de separar rigurosamente el espacio de la dimensión temporal de la espectralidad es
inútil; fantasmas y inquietante implican invariablemente una complicación de ambos reinos, así
como de su interacción.
 Introducción: la conceptualización SPECTRALITIES 21

Por lo tanto, la sexta y última parte, “Haunted Historiografías,” no debe verse como un
contrapunto a la quinta, pero como su continuación, del mismo modo que tiene fuertes vínculos
con las historias-y diferenciadas su inquietante legado- de temas particulares como delineado
en el cuarto. Cuando la parte final pone su propio énfasis, sin embargo, está en su enfoque no
tanto en las historias específicas como en la noción de la historiografía-la fabricación de la
historia y la forma en que este proceso se enreda, que se explican en Judith Richardson, Jesse
Alemán, y Alexander Nemerov, con nociones de posesión, el gótico y misterioso, y de la fina
línea que separa la presencia de la ausencia, la evidencia de la apenas perceptible.

En conjunto, las seis partes muestran la fecundidad de la utilización posterior a 1990 del
fantasma que ya no principalmente un fenómeno literal que requiere la verificación empírica (aunque
algunos permanecen interesados ​en esta posibilidad, como se desprende del hecho de que la
Sociedad para la Investigación Psíquica sobrevive hasta hoy 80), sino una metáfora conceptual capaz
de sacar a la luz y la apertura al análisis oculta, negada, y aspectos del ámbito social y cultural,
pasado y presente descuidado. Como tal, espectralidad busca menos a tomar el lugar de otros
enfoques o conceptos que complementarlos con otra dimensión (una zona de penumbra, si se
quiere), ofreciendo una nueva, verdaderamente

otro perspectiva.

notas
1 Jacques Derrida, Espectros de Marx: El Estado de la deuda, el trabajo del duelo, y la Nueva
Internacional, trans. Peggy Kamuf (1993; Nueva York y Londres: Routledge, 1994), 127.

2 Mieke Bal, “Prácticas de exposiciones,” MPLA 125, no. 1 (2010): 10.

3 Catherine Lord, “a la deriva en el Estilo: The Scholar como ficción y cineasta

en la Sala de Jacob,”en En (ter) la disciplina: Nuevos lenguajes para la crítica, ed. Gillian Beer,
Malcolm Bowie, y Beate Perrey (Londres: LEYENDA, 2007),
92. Teri Reynolds, cuyo trabajo sobre metáforas cognitivas referencias Bal, emplea conceptos de
un campo (física) para dilucidar otra (narrativa), que estipula que “estas teorías no son plantillas
que limitan los textos para corresponder a la física. Lejos de limitarse a ilustrar lo que ya se sabe,
dan forma y articular nuevas posibilidades críticas.”Las‘nuevas posibilidades críticas’descubiertas
por espectralidad como una metáfora cognitiva o conceptual son lo El lector Spectralities busca
presentar. Teri Reynolds, “Espacio-tiempo y imagetext” La revisión germánica 73, no. 2 (2001):
161.

4 los Diccionario de ingles Oxford confina el uso de “fantasma” y

“Espectralidad” para los asuntos relacionados con las apariciones fantasmales a la (tardía) del siglo XIX, con los usos
científicos basados ​en su relación con el “espectro” -en la biología, la química, las matemáticas, la física y que se
extiende hasta la actualidad. Una búsqueda superficial en Google Académico confirma que la reciente popularidad de
espectralidad en