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Jean Jacques Rousseau. (2016). El Contrato Social: México, Col. Centro.

Cuauhtémoc, 06020, D.F. Editores Mexicanos Unidos, S.A.

El Contrato Social:

Desde 1745 Rousseau, Venía trabajando, lo que debía ser un gran tratado, sobre
las instituciones políticas.

Análisis:

En mi perspectiva, nos muestra como el hombre desde que decide vivir en


comunidad o sociedad, busca la forma de una vida en la cual sea merecedor de su
libertad y vivir en una igualdad para con sus semejantes, se hace mención de que
la sociedad perfecta seria aquella en la que la voluntad de todos fuera la voluntad
general, pero siempre surgen intereses personales o individuales, lo cual hace
sucumbir esta misión de vivir en una naturaleza libre, en la cual todos y cada uno
se hagan responsables de los beneficios, obligaciones y derechos que a todos nos
corresponde por el simple hecho de ser hombres libres. Pero el hombre siempre ha
ido más allá de su naturaleza buscando su bienestar personal, ambicionando el
interés de sus semejantes o querer dominar la voluntad del otro.

Basta decir que el hombre. Se corrompe cuando entra en sociedad y deja atrás la
idea de querer ser uno más por igual, de esta nueva institución, tomando como
referencia que en primer lugar se nace en una familia y desde ahí se tiene que
buscar la conservación como parte de un pequeño grupo social, en la cual se tiene
que acatar los lineamientos para vivir en cordial armonía con los demás miembros
de la familia, no olvidando el rol que cada uno desempeña, el cual nos brinda
obligaciones y beneficios que nacen por costumbres de esta manera uno se hace
acreedor y a su vez merecedor de los méritos que se brinda como tal, y para llegar
a este fin se tiene que acatar lo antes mencionado tomando en cuenta que es un
convenio para sentirse parte de esta misma, y contar con la protección de los
miembros que incluyen esta institución familiar.

Lo que Rousseau, plasmo en su libro hace reflexionar el cómo no somos capaces


de llevar una vida de respeto y mutuos acuerdos hacía con los demás, siendo que
somos libres al nacer. De aquí nace un contrato hacia la sociedad, donde uno cede
su soberanía individual y sus derechos a la comunidad, haciendo nacer una
institución, el Estado, el cual recoge los poderes individuales y los concentra por
encima de las voluntades individuales a lo cual con este contrato se tiene como fin
el regular las conductas de los particulares y aquellos lineamientos que nacen de la
necesidad de crecer en sociedad, en el cual cada particular goce de los beneficios
que ofrece este contrato social, en donde la voluntad general sea un paso a la
soberanía, efecto de este mismo naciendo la necesidad de tener un mediador entre
estos hombres, el cual tiene que tener poder suficiente para gobernar y administrar
el orden y la paz en esta nueva visión, tener que renunciar a sus interés particulares
y someter la voluntad del pueblo como ya se ha mencionado que el pueblo equivale
a Estado, de aquí al nacer como ciudadano tenemos dos valores; el primero como
súbditos en el cual tenemos que acatar fielmente al soberano y el segundo nos hace
participes del poder al ser parte de un todo.

Aquí se parte hacia la idea que con el simple hecho de votar o tener la edad
suficiente, me hace una persona consiente, y de que estoy parado frente a una
sociedad, la cual nace del simple hecho de estar vivo y emerger hacia ella, por lo
consiguiente aunque no sea mi decisión tengo que ceder toda mi persona al Estado,
y tengo que hacerme merecedor de su yugo, que dictara como tengo que llevar mi
vida para poder tener una estancia y llamarme ciudadano, a su vez este mismo
tendrá que dictar mi comportamiento y proceder ante esta institución, que nace de
la necesidad de tener una identidad dentro de mi estado o país, por otro lado me
protegerá como ciudadano dándome las armas y recurso necesarios para ser un
hombre de provecho y velar por mis intereses, claro siempre y cuando no rompa
este contrato porque sería un traidor a mi patria y no sería sino un problema social
dejando de gozar de mis derechos lo cual ya no sería más un ciudadano.
Lo antes mencionado se formula como algo simple, siempre y cuando el gobernante
como el pueblo tengan un equilibrio y orden social, donde se tenga esa disposición
de conservar la naturaleza del pacto, sin sobreponerse uno ante el otro así mismo
que en conjunto o como hace mención de, un todo, marche hacia una misma
dirección que uno atienda las necesidades del otro, eso sería algo democrático,
pero es aquí donde se pierde la esencia de lo que debería ser, ya que no hay una
democracia perfecta, rompiendo el esquema con los intereses personales, con la
ambición de tomar lo que al pueblo le corresponde a través del poder transferido,
es donde la estabilidad ya no existe menciona Rousseau a través de la visión
Aristotélica, que la democracia se degenera a oclocracia (gobierno de la
muchedumbre), yo más diría que se convierte en una dictadura reprimiendo la
naturaleza del derecho ante el pueblo, creando distractores en los cuales el pueblo
se sumerge haciéndolos ciegos ante diferentes sucesos de interés público o
simplemente creando un estado de pánico, en el cual no se pueda razonar ante lo
ocurrido, aquí deja de ser una Republica (todo estado regido por las leyes) .

Tocando el tema de las leyes; Cita Rousseau, el poder legislativo se debe al pueblo
donde la libertad e igualdad son los principales, lo cual en algunos países esta
concepción no está clara porque siempre hay convenciones de los más poderosos,
hacia su propio interés, se han hecho las leyes para beneficio de los poderosos y
en perjuicio de la clase baja, históricamente se ha visto este tipo de desigualdad en
la diferentes culturas o países donde siempre hay una división de clases sociales,
se menciona que todo hombre tiene derecho de arriesgar su vida para conservarla,
tocando este tema se tiene que tener una idea clara y concreta, haciendo mención
a lo anterior Rousseau menciona que todo hombre tiene derecho a arriesgar su
propia vida para conservarla, también que todo malhechor al atacar el derecho
social se convierte por su delito en rebelde y traidor a la patria dejando de ser
miembro de ella, y es aquí donde hay una contrariedad en la sociedad que me tocó
vivir, se vela más por los derechos de los delincuentes que de la persona mancillada
o en efecto el ciudadanos, todo aquel ser capaz de quebrantar el contrato deja de
ser un ciudadano y no tiene la capacidad de llamarse como tal, ni tener los privilegios
de gozar de lo que ofrece este contrato social, y si uno se defiende ante alguien que
amenace tu integridad o la de tu familia, todo el peso de la ley cae sobre tu persona
aquí es donde hay que diferenciar de qué forma uno está arriesgando su vida, para
poder ser un hombre libre, hay que hacer un enfoque claro de cómo, se puede
defender en lo que por derecho es nato, y la conservación de la integridad de un ser
en peligro y más cuando se amenaza a un ser de la familia.

Se tiene que tener en cuenta el tipo de población y como es esta, para poder
redactar estas leyes, siendo así que cada país o población tiene diferentes
necesidades y problemas, por los cuales se pueden dictaminar las leyes que regulen
las conductas de los ciudadanos o particulares, aquí se tiene que atender que
necesita el Estado para poder vivir en este acuerdo establecido, tenemos que
interesarnos más por las letras y las artes así veríamos mas el valor de un Estado,
lleno de razonamiento dejaríamos de ser incrédulos ante lo que es un sistema
político y entenderíamos con firmeza el fin de sostener un gobierno bien sólido. Pero
esto se tendría que aplicar desde una estructura social, más allá de un bien
colectivo, donde cada uno sería un particular y el Soberano como se hace mención
atendería las necesidades tanto del gobernante, como del legislativo y el ejecutivo
como resultado se establece un acuerdo mutuo y por consiguiente no sería
necesario crear tantas figuras políticas, porque los particulares tendrían por lo
menos un interés colectivo, se aria mención de un verdadera democracia, pero no
hay un valor tan merecido más que en pocos hombres a los cuales se les hace
llamar sabios.

El contrato social tiene que ser leal, tiene que estar bien establecido, desglosando
qué papel desempeña tanto el gobernante hacia sus particulares, el legislativo hacia
sus ciudadanos y el ejecutivo hacia la soberanía, se expresa que no hay gobierno
simple, es preciso tener un jefe único y este a su vez un magistrado y subalternos,
se tiene que estructurar bien un estado para poder por lo menos vivir de una forma
lo más digna que se pueda. Todo esto hace notar que los romanos tenían un
sistema en el cual ya estaban establecidas las bases del derecho y la importancia
de escribirlas, tener un estado centralizado en el cual las leyes fueran respetadas y
una división de los barrios, en el cual las leyes se aplicaban de acuerdo con sus
costumbres, se tenían jefes de aldeas, estos tenían la facultad de dirigir o gobernar
sobre los que consideraban su familia o semejantes eran los encargados de aplicar
la justicia, de ahí que perdure el derecho romano en nuestros días y se reconozcan
sus rasgos y solides siendo en diferentes países la base de sus constituciones o
derecho, lo cual tiene que ser cambiante y adaptarse a las necesidades que surgen
al ver cómo nacen nuevas condiciones sociales para tener esa disponibilidad de
seguir con las estipulaciones y lineamientos dirigidos a lo que se me exige como
ciudadano.

También se menciona que la religión es otro modo de como el hombre tiene ciertos
vicios de que enajena su supuesta libertad, y es atreves de una religión y esto no
es útil para el Estado ya que se persiguen diferentes propósitos, ya que está enfoca
a un pensamiento filosófico toda justicia viene de Dios y si aplicáramos esta forma
de percibir algo divino, no habría necesidad ni de leyes, pero incluso en la religión
hay leyes a seguir lo cual castiga el alma, pero también hay un guía espiritual que
dirige esta iglesia, de ahí que el hombre en su estado de naturaleza no puede regir
su propia conducta o doctrina, no somos capaces de ser libres, ni tener una igualdad
que nazca como algo consecuente de vivir en sociedad, somos capaces de razonar
pero de no aplicar la razón.

Sometiéndonos a la necesidad de conformar leyes, de ser parte del contrato social,


que se tenga que anunciar y estructurar una constitución, un Estado, dando paso
que con el pensamiento y crítica de todos estos grandes pensadores e ilustres,
naciera como tal una constitución que se adapte a cada sistema de gobierno para
regular la convivencia como esencia del interés de los ciudadanos, con las fallas
existenciales, pero tratando de cumplir un bien interno en las sociedades.
Gobernaría la anarquía al no existir un orden social, sea el fin perseguido hay que
prevalecer y buscar la conservación a nuestra integridad como parte del contrato
social.

Uno mismo se somete al contrato social, ya que sin este, el hombre pierde la esencia
del ser, sería un animal, que sin hacer uso de la razón, pasaría encima de la demás
como única ley de convivencia daría paso a la fuerza del hombre por el hombre.

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