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CAPÍTULO 3: POLIS GRIEGA Y REPÚBLICA ROMANA,

MODELOS CLÁSICOS

Etapas Históricas de Roma y del Derecho Romano.


La larga vida del régimen político de Roma (catorce siglos) y su influencia en la
Historia se debe no sólo al genio político romano que, con un perfecto sentido
del realismo y de la oportunidad, supo realizar y armonizar los diferentes
órganos de gobierno y adecuarlos a las cambiantes circunstancias históricas,
sino también al Derecho que constituyó su sustrato y basamento.

El Derecho Romano por el que se rigió el pueblo romano comprende un largo


período histórico que va desde la fundación de la ciudad de Roma a mediados
del siglo VIII a.C. hasta la caída del Imperio de Occidente en el último tercio del
siglo V d.C.; o bien, si consideramos la vigencia del Imperio de Oriente, hasta el
siglo XV d.C. en que desaparece como consecuencia de la toma de su capital
Constantinopla, la antigua Bizancio, por el Imperio otomano.

En este largo tiempo de vigencia, la organización política de Roma pasó por


distintas y sucesivas formas de gobierno que condicionaron el sistema de
fuentes del Derecho, dada la clara interrelación en Roma entre Derecho y
política.

Desde el punto de vista cronológico, con fines didácticos, y fijándonos en un


punto de vista político, pueden distinguirse las siguientes etapas históricas:
 Etapa monárquica del año 753 a.C. al 509 a.C.
 Etapa republicana del año 509 a.C. al 27 a.C.
 Etapa del Principado del año 27 a.C. al 284 d.C
 Etapa del Dominado en Occidente del año 284 hasta el 476 d.C
 Etapa del Dominado en Oriente hasta Justiniano, 565 d.C.
Nos detenemos en el Emperador Justiniano al considerar que la realización de
su magna obra compiladora pone, de alguna manera, fin a la gloriosa etapa de
producción jurídica romana.

La concepción y el modelo político imperante en cada momento histórico han


condicionado, como hemos señalado, el sistema de fuentes del Derecho. Así,
fijándonos en las etapas desde un punto de vista jurídico, podemos distinguir
los siguientes periodos históricos:

 periodo de derecho antiguo o quiritario: del 753 a.C. al 450 a.C. - coincide
con la Monarquía y la fase de inicio y consolidación de la República.
 periodo de derecho preclásico; del 450 a.C. al 130 a.C. - se inicia con la
promulgación de la Ley de las XII Tablas y se extiende hasta bien entrada
la República.
 periodo de derecho clásico: del año 130 a.C. al 230d.C. - corresponde al
final y crisis de la República y Principado y expansión del Imperio
romano.
 periodo de derecho postclásico: del año 230d.C. al 527 d.C. - coincide
con el Dominado
 periodo de derecho justinianeo: del 527 al 565 d.C. - coincide con el
periodo de gobierno del Emperador Justiniano.

Constitución Republicana romana. Rasgos fundamentales.


Conviene comenzar señalando que en Roma no puede hablarse de
Constitución, en sentido estricto, como si se tratase de un Texto escrito en el
que se organiza el poder político y los distintos órganos que lo encarnan. Ello
no obsta para que pueda hablarse de Constitución republicana romana, al igual
que en la actualidad también puede hablarse, en sentido amplio, de Constitución
política británica. Si bien el Reino Unido no ha tenido, asimismo, en su historia
política ningún Texto escrito en el que se concrete y materialice su forma de
organización del poder, sí puede afirmarse que existe una evidente Constitución
no escrita, que organiza la vida pública y el reparto de poder político.
Por otra parte, es evidente que la Res publica Romana en cuanto a su
organización del poder político es muy tributaria de la concepción teórica y de
la concreción práctica de la organización política griega en general y ateniense
en particular. Aristóteles, aunque no llegó a formular una teoría constitucional,
es paradigmática su triple división entre lo que denomina formas puras y formas
impuras de gobierno. Son las primeras: monarquía, aristocracia y democracia;
siendo las segundas: tiranía, oligarquía y demagogia, como alteración o
perversión de las primeras.

En las puras, gobierne un individuo, un selecto grupo o todos, lo que, en los tres
modelos se persigue es alcanzar el interés general de los gobernados. En las
formas pervertidas, el ejercicio del poder se corrompe bien por la búsqueda del
interés particular de quien ejerce el propio poder (así, el rey o el grupo) o bien
porque aunque gobiernen todos, el mal ejercicio del gobierno lleva al caos y al
desgobierno (demagogia).

Es preciso resaltar que tanto en Grecia como en la Roma republicana la


democracia era directa, es decir votaba directamente el ciudadano y no sus
representantes, como ocurre en la actualidad en los sistemas democráticos que
son de democracia indirecta o representativa. Otros conceptos y categorías que
el mundo clásico ha legado y siguen vigentes en nuestro tiempo podrían ser: el
concepto de ciudadanía; la participación popular en la elección directa de los
cargos públicos; el derecho de voto y el sufragio, aunque un sufragio censitario
y no universal; la votación y aprobación de la ley por consulta popular; la
responsabilidad de los cargos en el ejercicio de las funciones públicas.

La constitución republicana romana se caracteriza por ser una constitución


sólida y dúctil. La solidez la demuestra por su permanencia frente a los avatares
de las duras guerras exteriores e interiores junto a las convulsiones sociales,
políticas y económicas. La ductilidad la demuestra en la capacidad de
adaptación que siempre presentó frente a las nuevas necesidades políticas,
sociales y económicas que se iban creando con las nuevas conquistas bélicas
y la consiguiente necesidad de reestructuración del poder político.

Constitución republicana sólida y dúctil que ya en su tiempo despertaba la


admiración de los extranjeros, así, es muy conocido el asombro del historiador
y politólogo griego Polibio al no poder encuadrar la Constitución republicana
romana en ninguna de las tres categorías aristotélicas. En este sentido, señala
al estudiar la constitución romana: Si nos paramos a examinar el poder de los
Cónsules, el régimen se nos antoja monárquico, si nos detenemos a contemplar
la influencia en el poder que ejerce el Senado, entonces nos parece aristocrático
y si por último reparamos en el poder legislativo y electoral que poseen y ejercen
los Comicios, entonces creemos que nos encontramos ante una auténtica
democracia.

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