QUINTA RESEÑA: EL ESPÍRITU SANTO EN LA HISTORIA DE LA HUMANIDAD

El doctor Horton, Stanley nació en mayo 6 del 1916 y partió a morar con Dios en
julio 12 del 2014, este recibio una educacion en Los Angeles City College [1935],
University of California-Berkeley [1937], Gordon College [1944], Harvard University
[1945] y como final en el Central Baptist Theological Seminary su Th.D [1959]. Este fue
profesor de varios institutos y seminarios por más de 46 años y su obra más elocuente
fue El Espíritu Santo en la Biblia (Miami, Florida: Editorial Vida, 1992), además fue
Doctor en teología, es altamente respetado en círculos evangélicos y educativos de todo
el mundo.
El P. Fray Antonio Royo Marín nació en Morella, Castellón (1913 - 2005). Para el
1939 se hizo parte de la Orden de Predicadores, donde expuso sus estudios de Filosofía y
de Teología. El estuvo en los tiempos de la posguerra y fue atraído por la formación de
los dominicos. En sus procesos fue ordenado como sacerdote en 1944. Obtuvo una
condecoración del Papa de Pro ecclesia et Pontifice. Este acto lo hizo famoso. Siguió en
su desarrollo como fray, luego fue un prolífico escritor y este escribió varios libros. Una
de las casas publicadoras que lo prolifera mucho son BAC(Biblioteca de Autores
Cristianos).

El Doctor Horton en este documento arranca de la siguiente forma cuando viene

el reunir de los apóstoles en el llamado aposento alto. En referencia a esta clasificación el
muestra como en la carta de lucas extendida puede verse la cobertura y movimiento del
Espíritu Santo en estas acciones que expone el libro cabe destacar a Pablo y otras
actividades con lo ocurrido de parte de esta persona de la Trinidad. Esta carta hace un
hincapié para que vivamos unas vidas entregadas a Dios sin adulterar o seguir en nuestras
vida pasada o carnal. El autor deja ver que mejor es esta circunstancia es no hay que
seguir las reglas de la ley y que ahora se vive con un corazón lleno como el lugar
Santísimo que la presencia de Dios mismo estaba allí. Mientras tanto esta nueva relación
de Dios con el hombre fue palpable por medio del Espíritu Santo, así las expuso Pablo en
sus escritos accesibles al deleite de nosotros. Sobre esta base Pablo fue el comisionista
por Dios a deber y exponer bien los dones y que provienen del Altísimo. El punto o
enfoque que Horton da a los donde que se estipulan en las escrituras el mismo Dios los da
a rebelarse por medio de la historia y hasta los días de hoy se siguen manifestando.
Dando seguimiento a lo expuesto por el autor toda manifestación es simbolizado por la
justicia, paz y gozo del Espíritu Santo. Todo esto está puesto en nuestras manos para
presentarle la promesa a todo aquel que no a visto y conocido esta maravillosa obra de
Dios. Como dice el libro de Jeremías así él puso la ley en nuestros corazones, y será
nuestro Dios y seremos su pueblo, gracias a las acciones de Cristo rompiendo el velo que
nos separaba de Dios y el Espíritu Santo como columna en el Tabernáculo es
representante de nuestra presencia continua con Dios. El énfasis del autor es que debemos
coaccionar todo esto para que el cielo sea manifestado a todo ser humano por medio del
Espíritu Santo.
El fray Antonio Royo al comienzo de su escrito plantea un enunciado de uno de

sus colegas Dom Columba Marmion, él lo utiliza para comenzar su andamiaje para el

tratado que propone del Espíritu Santo y este como se manifestó en Pentecostés para el

bienestar de la iglesia. En su desarrollo plantea que el Espíritu es el que nos edifica,

estimula como motor a los hijos de Dios. Como puede observarse este mensaje está muy

sugestivo y toca a las dos partes en cuanto lo enseñado por la Iglesia. Podemos ver como

en su misiva este nos sorprende con su elocuencia tan fácil de digerir del Espíritu Santo.

En este propósito para Royo la gracia que Dios permite es un don que nos permite

adquirir por su esencia, lo cual no hace aceptó y herederos con Cristo. Esto a su vez nos

hace clamar Abba Padre dándonos el epíteto de hijos, y recibidores de todo don que fue

inferido a Cristo. Como cabe ir aclarando esto nos hace hermanos e parte del cuerpo de

Dios mismo en su Iglesia viva. Siendo parte de Dios por medio del Espíritu Santo.

El escrito del Doctor Horton envite una buena exponencial de los dones pues estos
se nos van desarrollan como cristianos e hijos de Dios. Su escrito es comprensible a cada

lector el es un maestro del tema en cuanto al Pentecostalismo. Tal cual como un buen

Teólogo. Este en sus exposiciones hay que darle su mérito como todo buen Doctor que

hace su estudio bien minucioso. El propósito del documento en cuanto a Horton fue

bueno adecuado en cuanto a lo estudiado en clase. La teoría que se ve es un pensamiento

organizado y bien dirigido. En los conceptos que plantea el autor se puede ver como se

desvive por ese parakletos que nos ayuda cada dia. En su argumento, método y evidencia

lo empleo bien y todo lector capta su exposición. Con este documento no me identifico
por completo. Pero fue explicativo, conciso y aquí se puede apreciar su comprensión

temática.

El Fray Royo, en su entorno planteado uno puede quedar impactado por su

objetividad, que no es de esperar por ese tipo de pensamiento. En su marco no es de

esperarse pero, puede ser útil para cada lector reflexionar en su exposición. El argumento

evocado en su escrito es el revivir de una pasión al paracletos dejado por el Cristo y lo

hizo de un formato cónsono y preciso. Su método es muy perspicaz sacudiendo a su

misma etnia a que se afinque bien en la palabra. Ante la situación planteada lo evidencia

muy bien y presenta los juicios de valor para que sean internalizados y trabajados. Su

literatura es cómoda al lector, el lenguaje que se utilizó en su escrito es universal en

cuanto a lo español. Este documento es algo cómodo para la lectura muy amena para

reflexionar y dar a muchos de nosotros en las congregaciones aunque sea dirigido solo a

los católicos. Por ende muy de acuerdo con lo planteado porque puede enfrentarnos a

nuestra realidad como Iglesia en el 2018.