Vous êtes sur la page 1sur 6

León, Guanajuato a 4 de octubre de 2018.

Lic. Andrés Manuel López Obrador


Presidente Electo de los Estados Unidos Mexicanos
PRESENTE

Estimado Licenciado López Obrador, los familiares de personas desaparecidas en el Estado


de Guanajuato agradecemos el interés mostrado por su persona para llevar a cabo estos foros
nacionales, en los cuales tenemos la posibilidad de ser escuchados. Sabemos del limitado
tiempo en que esta gigantesca labor debe ser concluida, por lo que nos permitimos distraer
su amable atención para poner por escrito las siguientes consideraciones:

Guanajuato ocupa el lugar número 14 entre las entidades de nuestro país por número de
casos reportados de desaparición de personas. Al día 1 de diciembre de 2017 se habían
registrado un total de 1,260 casos, de los cuales prácticamente la cuarta parte son mujeres
de entre 12 y 18 años y en los hombres la mayor parte de los casos se da en las edades de
mayor productividad, es decir entre los 15 y 39 años1. En la gráfica siguiente se puede
observar claramente que el crecimiento en el número de desapariciones en nuestro Estado se
comporta de manera exponencial, iniciando desde el año 2006, coincidiendo con el inicio de
la llamada “Guerra contra el Narcotráfico”.

1
Datos tomados de la página web www.personasdesaparecidas.org.mx

1
En Guanajuato han ocurrido recientemente algunos casos que por sus particulares
características llaman la atención, a continuación, los enlistamos.

El primero es el conocido caso de los Cazadores del Coecillo, otro es el de los Migrantes
desaparecidos de San Luís de la Paz, un tercer caso notable es el de la Familia de Celaya y
también quisiéramos mencionar el caso de las Fosas de Villagrán.

1. Los Cazadores del Coecillo es un grupo de 10 hombres originarios del barrio de El


Coecillo de la Ciudad de León, Guanajuato, que fueron “levantados” el 6 de diciembre
de 2010 por personal de Policía del Municipio de El Plateado de Joaquín Amaro,
Zacatecas, para posteriormente entregarlos a un grupo delictivo –presuntamente “Los
Zetas” – en una gasolinería a la salida de la capital zacatecana. El grupo original era de
10 personas, de las cuales uno logró escapar durante el ataque, un menor de edad fue
liberado por los criminales al día siguiente y los 8 hombres restantes fueron
desaparecidos. Hasta la fecha, más de siete años después, no se ha dado con el paradero
de los desparecidos, a pesar del apoyo del Centro de Derechos Humanos Vitoria Diez AC
y peticiones directas al entonces Gobernador del Estado de Guanajuato Miguel Márquez
Márquez, inclusive la entrevista en marzo de 2013 por el Grupo de Trabajo de
Naciones Unidas que visitó el país2.

2. Los Migrantes de San Luís de la Paz son un grupo de 23 hombres, que salieron en
autobuses el día 21 de marzo de 2011 de Dolores Hidalgo y de San Luís de la Paz, con
rumbo a los Estados Unidos, con el objetivo de buscar trabajo y no se volvió a saber de
ellos. Las esposas y madres de los desaparecidos han esperado durante años una noticia
de las autoridades. En sus diligencias son apoyadas por la Fundación para la Justicia y
el Estado Democrático de Derecho, una organización nacional dedicada a la promoción
del acceso a la justicia de víctimas. Gracias al acompañamiento de la Fundación, las
mujeres han acudido a talleres y después de 5 años, la mayoría lograron ser incorporadas
al Registro Nacional de Víctimas, aunque aún falta el 20%, y quiénes ya reciben
fondos se enfrentan a trabas burocráticas, ya que no hay coordinación entre la oficina
central y la delegación de Guanajuato. La Procuraduría General de la República ha hecho
esperar durante siete años a los familiares de estos 23 migrantes desaparecidos; sus
esposas y madres presionan en las investigaciones, que son inconsistentes y
contradictorias. Fue hasta la tercera ocasión que acudieron a iniciar la denuncia, que se
abrió el expediente por parte de las autoridades.

2
Fuentes consultadas:
• https://www.proceso.com.mx/334025/cazadores-desaparecidos-en-zacatecas-donde-estan-que-les-
ocurrio
• https://www.proceso.com.mx/282496/identifican-a-uno-de-los-ocho-cazadores-que-desaparecieron-
en-zacatecas
• https://periodicocorreo.com.mx/familiares-cazadores-desaparecidos-exigen-justicia/

2
La Comisión Ejecutiva de Atención a Víctimas (CEAV) tardó 5 años en reconocerlas, y
lo hizo mal. La espera continúa en la región más pobre del estado de Guanajuato3.

3. La Familia de Celaya es el caso de 6 personas que celebraban una reunión de


cumpleaños en su domicilio en la colonia Valle de los Naranjos de Celaya, Guanajuato,
el pasado día 29 de abril de 2018, cuando por la madrugada desconocidos los atacaron
y secuestraron. Se abrió una carpeta de investigación: 44166/2018 de la Unidad
Especializada. La Procuraduría del Estado de Guanajuato dijo en el mes de mayo
haber encontrado los restos de las personas en las recientemente descubiertas “Fosas de
Villagrán”, sin embargo, los cuerpos encontrados no corresponden a los de la familia,
cuyo paradero aún se desconoce4.

4. Las Fosas de Villagrán son un reciente hallazgo de sitios de inhumación clandestina de


cadáveres, localizados entre las comunidades de Los Ángeles y Santa Rosa de Lima,
municipio de Villagrán. En una primera fosa localizada en la comunidad de Los Ángeles,
el 5 de mayo de 2018 se localizaron 12 cuerpos enterrados en un socavón asignándoles
la carpeta de investigación 00046274/2018-UEIH-IV. Pero también se precisó que, al
siguiente día, en el mismo lugar, se agregaron ocho cuerpos más. Mientras comenzaron
a realizarse otras excavaciones, pues las sospechas de fosas mayores eran una realidad
para los agentes asignados al caso. El 7 de mayo la información se comenzó a acotar. El
mismo día de la publicación de la revista Proceso, el procurador Carlos Zamarripa dijo
que la identidad de la familia desaparecida en Celaya, tendría que ser confirmada en un
par de días más y acusó a los medios de comunicación de mal interpretar la información
dada a conocer en el comunicado 5. Hoy en día no se han dado a conocer a la opinión
pública la cifra total ni la identidad de los cuerpos de las personas encontradas en las
fosas de Villagrán, información extraoficial señala que se podría tratar de cerca de 40
cuerpos.

Quisimos poner los mencionados casos como antecedente, para comentarle las diversas
problemáticas que nosotros, los familiares de las personas desaparecidas enfrentamos día a
día en la búsqueda de solución, acompañamiento y apoyo por parte de las instituciones del
Estado.

3
Fuentes consultadas:
• http://enelcamino.piedepagina.mx/ruta/la-indolente-busqueda-por-23-migrantes-desaparecidos/

4
Fuentes consultadas:
• https://www.excelsior.com.mx/nacional/cuerpos-no-corresponden-a-ellos-dice-pariente-de-
familia-desaparecida-en-celaya/1237227
• https://www.proceso.com.mx/533049/una-tragedia-tras-otra-suman-al-menos-12-cuerpos-en-una-
fosa-en-guanajuato-los-de-la-familia-aun-no-son-plenamente-identificados

5
Fuentes consultadas:
• https://aristeguinoticias.com/1109/mexico/gobierno-de-guanajuato-oculto-informacion-de-3-fosas-
clandestinas-zona-franca/

3
Estas son algunas de ellas:
• Indolencia y falta de oficio en primera atención. Personal de agencias del Ministerio
Público sigue negándose a recibir denuncias e iniciar investigaciones antes de haber
transcurrido “las 72 horas” de la desaparición de las personas. Esto a pesar de no existir
disposición oficial o ley alguna que especifique ese tiempo de espera para iniciar la
búsqueda, sobre todo en casos tan urgentes y en los que el tiempo es un factor clave para
la vida o muerte de las víctimas, como los de desaparición de personas. Más bien, la
nueva Ley prevé la búsqueda inmediata.
• Inacción por parte de los agentes investigadores. En algunos casos el abogado de
oficio no revisa frecuentemente el expediente del caso. Somos las familias de las víctimas
quienes tenemos que revisar lo que se va sumando en la carpeta y cuando por fin nos
recibe el servidor público, en lugar de darnos noticias nos pregunta “¿Qué me traen?”, tal
como si el trabajo de investigación no fuera la obligación del propio servidor público,
sino de nosotros los familiares, quienes terminamos haciendo su trabajo.
• Falsos resultados de investigaciones. En el caso de los Migrantes de San Luís de la Paz,
en una ocasión el agente investigador nos citó para “entrega de cuerpos”. Cuando nos
presentamos los familiares a la cita, primeramente, nos pidió reconocer algunas prendas
de vestir, sin embargo, nuestra pregunta hacia él fue “si nos van a entregar cuerpos
supuestamente calcinados, ¿cómo es que las prendas de vestir existen y no están
carbonizadas?”. El notable nerviosismo del agente nos hizo deducir que solamente estaba
buscando la forma de dar “carpetazo” al caso, la diligencia se canceló y el caso aún sigue
sin resolver.
• Carpetazos y “desaparecer dos veces”. En el momento de ir a denunciar, de manera
deliberada y en mala fe los funcionarios públicos en los Ministerios Públicos
“desaparecen” dos o más veces las denuncias presentadas por los familiares,
revictimizándolos y obligándolos a cambiar de MP y de ciudad para ser atendidos. Se les
hace perder tiempo precioso o, en varias ocasiones, no se quiere aceptar una denuncia por
desaparición, aunque se tengan todas las condiciones.
• Vista gorda. Aun cuando los familiares tenemos indicios, evidencias y posibles
responsables, conseguidos con grandes riesgos para nuestra seguridad, no se profundizan
las investigaciones y menos se llega a alguna acusación formal. Además de buscar e
investigar y señalar, juntando pruebas, hay que presionar para el ejercicio de alguna
acción penal. Esto muestra simulación y engaño por parte de las autoridades.
• Poca institucionalidad. No se da una relación institucional con quienes debería
investigar los casos, sino que mucho, demasiado, depende de las relaciones personales
entre las familias y uno que otro funcionario. De este modo, todo avance parece ser un
“favor”, no un derecho o fruto de un trabajo realmente comprometido por parte de la
autoridad.
• En el estado de Guanajuato, el organismo público de derechos humanos, denominado
Procuraduría de Derechos Humanos del Estado de Guanajuato es prácticamente
inoperante y no constituye un apoyo para los casos de desapariciones forzadas y por
particulares.
• Obstáculos para la incidencia internacional, tal como sucedió cuando algunas familias
quisieron tramitar visas para viajar a Washington, a la Comisión Interamericana de
Derechos Humanos (CIDH).

4
• El registro de personas extraviadas y desaparecidas (RNPED), cerrado en abril de
2018, no daba y no da cuenta correctamente de este terrible crimen en muchos sentidos6.
Por ejemplo, no se conoce el número de personas que “entran y salen” de los registros en
cada corte, y así no se tiene la información correcta sobre las personas desaparecidas.
• Omisión legislativa estatal, desde este año entró en vigor la Ley General en Materia de
Desaparición Forzada de Personas, Desaparición cometida por Particulares y del Sistema
Nacional de Búsqueda de Personas, misma que tendría que haber sido armonizada por el
Congreso local. El Congreso no lo ha hecho, por tanto, no se ha creado la Comisión
Estatal de Búsqueda, lo que dificulta el acceso a la justicia a nuestras familias.
• Finalmente, señalamos que en Guanajuato no existe una Comisión de Atención a
Víctimas, ni un fondo de reparaciones, ni medidas de reparación integral del daño. Por
lo que urgimos al Gobierno Federal para que presione al Legislativo estatal para la
creación de las medidas pertinentes para la reparación del daño.

En resumen, los familiares de las víctimas de desaparición y desaparición forzada nos


enfrentamos a una múltiple victimización durante los meses y años en los que nuestras vidas
se han convertido en un calvario de burocracia, indolencia, falta de interés por parte de las
autoridades y satanización por parte de los gobernantes, en sus discursos antes los medios de
comunicación.

Por todo lo anteriormente expuesto, nos permitimos hacer ante Usted las siguientes
peticiones:

1. Creación de una Comisión Especial de la Verdad en el Estado de Guanajuato, la


cual sea integrada por personas profesionales, con evidente convicción y suficientes
atribuciones, recursos materiales, humanos y presupuestales para investigar y resolver
hasta sus últimas consecuencias todos los casos de desaparición de personas. Dicha
comisión incluirá la participación de los familiares de las víctimas, así como
representantes de organizaciones nacionales e internacionales especializadas en Derechos
Humanos.
2. Vigilar la creación de una Fiscalía General en Guanajuato que sea autónoma y que
cumpla con los estándares para la selección del titular, para el tránsito de su personal y
que sea sólida en su modelo de investigación. Nos sumamos a la iniciativa de incluir una
Fiscalía especializada en Derechos Humanos al interior de la Fiscalía General.
3. Creación de una Contraloría especializada para vigilar la eficacia de la labor de los
servidores públicos -Investigadores, fiscales, agentes de Ministerio Público, etc.- que
intervengan en todas las fases de las investigaciones de los casos de desaparición de
personas.
4. Creación de la Comisión Estatal de Atención a Víctimas y potenciamiento de la
CEAV Federal. Lo que implica la coordinación entre la eventual Comisión Estatal y su
contraparte federal.
5. Solicitar a municipios y a la entidad la pronta armonización todo marco legal local
(reglamento de la policía municipal, academia de policía, dirección de seguridad

6
Ver estudio completo: http://frayjuandelarios.org/blog/Diagnostico_RNPED.pdf

5
municipal, operación del C4, etc.) con lo dispuesto por la nueva Ley en Materia de
Desaparición y el marco de derechos humanos
6. El apoyo y solicitud para la creación de Observatorios Ciudadanos sobre Desaparición
de Personas, con participación de familiares, periodistas, académicos, defensores de
DDHH, representantes de instituciones y sectores de la ciudadanía, con canales efectivos
de interlocución con las autoridades
7. La apertura de ventanillas de atención ciudadana y asesoría jurídica efectiva,
identificable claramente, presente en la web con sus servicios, y especializada en atención
de casos de desaparición de personas que pueda recibir denuncias (facultad prevista en la
nueva Ley)
8. Activar todos los protocolos y mecanismos de búsqueda inmediata en la entidad y
los municipios, con participación y coordinación de medios masivos de
comunicación, redes sociales, autoridades y ciudadanos.
9. Apoyo en la creación de una Alerta Especial de desaparición para personas de la tercera
edad (eventualmente aplicable a toda la población) en cada municipio, siguiendo el
ejemplo la Alerta Ámber, que se activa cuando una persona menor de edad es
desaparecida.
10. La activación y refuerzo de protocolos especiales de prevención de detenciones
arbitrarias, antesala de posibles desapariciones forzadas, y mecanismos de reparación
del daño cuando en el crimen están involucrados policías municipales o estatales.
11. No es superfluo recordar que los protocolos de búsqueda deben contemplar personal
capacitado, acompañamiento de seguridad confiable, redes para coordinarse y acceso a
todo tipo de instalación.
12. Las víctimas tenemos miedo para denunciar, por lo que pedimos medidas de protección
de acuerdo a estándares nacionales e internacionales.
13. Quisiéramos señalar que políticas de “seguridad” basadas en la militarización de los
territorios y en planes como la Iniciativa Mérida han servido principalmente intereses
particulares y, lejos de controlarlas, han desatado las oleadas de violencia que hemos
vivido en la entidad y la invasión de armas desde Estados Unidos.

Sin más por el momento, agradecemos una vez más el interés demostrado por Usted en
nuestros casos, deseándole el mayor de los éxitos y poniéndonos a sus órdenes para entre
todos los mexicanos sacar adelante a nuestro querido país.

ccp Luis Ernesto Ayala Torres, Secretario de Gobierno de Guanajuato

ATENTAMENTE

Familiares de víctimas de desaparición del Estado de Guanajuato.


(Nombre completo, caso, teléfono de contacto)

Vous aimerez peut-être aussi