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Por coerción penal se entiende la acción de contener o de reprimir que el derecho penal ejerce sobre los individuos
que han cometido delitos, esta es, la coerción materialmente penal. Hay una coerción formalmente penal, que
abarca la anterior y excede sobradamente, se ocupa de todas las medidas que dispone la ley penal, para los casos
en que no hay más que una exterioridad del delito, tambien de otras consecuencias del delito que por su naturaleza
no pertenecen al derecho penal.
La punibilidad.
Nos preguntamos si la “punibilidad” es un elemento que integra el concepto del delito o si queda fuera del mismo.
En los tiempos de Liszt con la afirmación de que el delito era una conducta antijurídica y culpable no se lo
caracterizaba suficientemente. Belling introdujo el concepto de tipo, siguió definiendo al delito como “punible”.
Posteriormente se destaca la tautología de la expresión punible (Max Ernest Mayer), la punibilidad surge como un
resultado del delito y no como uno de sus elementos o componentes conceptuales. Que sea punible es cosa que
depende de que sea típico, antijurídico y culpable, y antes que nada que sea conducta.
Hay casos en que pese a la existencia de una conducta típica, antijurídica y culpable, no se aplica pena. En esos
supuestos afirman que existe un carácter negativo del delito que llaman “excusas absolutorias”.
a) Punibilidad puede significar merecimiento de la pena. Ser digno de pena, todo delito por el hecho de
serlo, es punible. No siempre puede satisfacerse en el sentido.
b) Punibilidad puede significar posibilidad de aplicar pena. No a cualquier delito se le puede aplicar pena,
es decir, no a todo delito se le puede dar lo que tiene merecido. No obedece a que falte ningún carácter del
delito, sino a una cuestión que tiene lugar y opera dentro de la misma teoría de la coerción penal.
Estas condiciones no son siempre penales pueden depender de disposiciones de carácter procesal.
Las que tiene carácter penal, pueden consistir en causas personales que excluyen la penalidad, impiden
que la coerción penal se ponga en funcionamiento, por ejemplo la disposición del art. 185 .
Las causas personales que cancelan la penalidad, dependiendo de un acto o de una circunstancia
sobreviniente al delito, hacen cesar la coerción penal que hasta ese momento se había puesto o podía
haberse puesto en movimiento.
Las causas personales que cancelan la penalidad, la prescripción de la pena (art.65), el indulto (art.68), el perdón
del ofendido (art.69) y algunos casos especiales (art.132).
Las condiciones de operatividad de la coerción penal de naturaleza procesal suelen llamarse requisitos de
perseguibilidad, el divorcio previo por causa de adulterio para la operatividad de la coerción penal de ese delito
(arts. 118 y 74) refieren a las condiciones de ejercicio de las acciones procesales en general. Un tercer grupo que
consiste en la ausencia de impedimentos de perseguibilidad, de causas de extinción de la acción penal, previstas en
el art. 59
Causas personales que excluyen la penalidad.
Se trata de causas personales que excluyen solo la penalidad de la conducta y que se establecen por puras
consideraciones político-penales.
Ejemplo
Art. 185 “están exentos de responsabilidad criminal, sin perjuicio de la civil, por los hurtos, defraudaciones o daños
que recíprocamente causen”:
Pueden considerarse causas personales de exclusión de pena, algunos supuestos de menor de edad y que
beneficia a la mujer que intenta su propio aborto. En estos casos, ab intitio la coerción penal no puede ponerse en
movimiento, se trata de causas que solo benefician al que se encuentra comprendido en ellas, el autor o cómplice
en forma individual, sin extenderse a otros concurrentes.
a) El desistimiento de la tentativa.
b) La retractación en delitos contra el honor.
c) El matrimonio posterior con la ofendida en ciertos delitos contra la honestidad.
d) La muerte del cónyuge ofendido en el adulterio.
Las causas personales que cancelan la penal, tambien la excluyen, la excusión es aposteriori y no ab intitio. La
conducta es punible hasta el momento en que se desiste, recién con el desistimiento aparece la impunidad de la
misma. La retractación en delitos contra el honor, el art.117 dispone “el culpable de injuria o calumnia contra un
particular o asociación, quedará exento de pena, si se retractare públicamente, la coerción penal se cancela por
efecto de una conducta posterior del autor del hecho”.
El trascurso del tiempo sin que la pena se ejecute, hace que cese la coerción penal. Se extingue también la acción
procesal cuando no se ha llegado a la sentencia. El fundamento de la prescripción es distinto según sea la posición
que asuman los autores respecto de la “teoría de la pena”, sobre su concepto mismo del derecho penal.
La teoría de la prevención general afirma que el fundamento de la prescripción es el que el tiempo borra el recuerdo
del delito y sus consecuencias morales para la sociedad. Si la resocialización se produce sola, sin intervención de la
coerción penal, esta carece de sentido.
Para el código penal argentino, todas las penas prescriben. El art.65 dispone: “las penas se prescriben en los
siguientes términos”:
La prescripción de la pena presupone que la misma no se haya cumplido o no se haya cumplido totalmente, que
medie una sentencia condenatoria. El art. 66 dispone “la prescripción de la pena empezará a correr desde la
medianoche del día en que se notificare al reo la sentencia firme o desde el quebrantamiento de la condena”.
1) Que la pena no se haya ejecutado nunca. Se requiere que una sentencia haya resuelto la aplicación de la
pena, en cuanto se notifica al reo comienza a cumplirse.
2) Que haya comenzado a ejecutarse y se haya quebrantado su cumplimiento. Requiere que se haya
interrumpido el cumplimiento de la pena. Si se trata de pena privativa de libertad, desde que el sujeto se
evade en caso de estar privado de libertad o desde que quebranta la liberad condicional o no se reintegra al
instituto en caso de salida anticipada. La pena de multa comienza a prescribirse desde que el sujeto debía
pagar.
Interrupción de la prescripción.
La prescripción se interrumpe, es decir cae todo el tiempo trascurrido, determinado que a partir del momento que su
advenimiento se inicie una nueva cuenta, por la comisión de otro delito o por la secuela del juicio (art. 67).
La facultad de indultar o de conmutar, es decir, extinguir la pena o de reemplazarla por otra menor, procede de la
prerrogativa real de perdón o gracia, que ejercían los monarcas en nombre de piedad.
El art. 68 CP establece: “el indulto del reo extinguirá la pena y sus efectos, con excepción de indemnizaciones
debidas a particulares”.
En la actualidad el indulto o conmutación de la pena elimina la pena anterior a los efectos de la reincidencia, la
reincidencia actual requiere como procedente una pena anterior privativa de la libertad cumplida en forma total o en
medida que supere los dos tercios. Lo único que elimina el indulto es la pena.
El indulto es un acto de gobierno, no puede ser rechazado por el beneficiaron del mismo. Este solo puede dar lugar
a responsabilidad política del poder ejecutivo en caso que haga uso arbitrario del mismo. Las garantías deben ser
tuteladas en concreto y no en abstracto, no puede decirse que el indulto en ningún caso pueda darse a procesados,
sino que el procesado indultado que se considera lesionado en su derecho de defensa enjuicio tiene derecho a
acudir a la vía jurisdiccional para exigir la revisión del mismo, porque solo él es el juez de su propio derecho de
defensa.
El indulto puede ser concedido a condenados por sentencia firme, no puede ser revisado, tambien a procesados,
estos pueden exigir la revisión jurisdiccional del mismo en caso en que se consideren que les priva de la garantía de
defensa en juicio.
El perdón del ofendido como causa personal que cancela la penalidad.
El art. 69 establece que “el perdón de la parte ofendida extinguirá la pena impuesta por delito de los enumerados en
el art.73”
Solo es admisible en los delitos de acción privada y es una causa personal de cancelación de la penalidad que no
tiene nada que ver con la renuncia del agraviado, es una causa de extinción de la acción penal, ni con el perdón con
cónyuge ofendido en el adulterio del segundo párrafo del art. 74. El art. 69 se refiere concretamente a la “pena
impuesta”, no puede ser efectivo como tal en caso de faltar una sentencia firme condenatoria, es presupuesto
incluible.
“Ofendido” solo es el que ha ejercido la acción penal, quienes no hayan ejercido la acción penal no pueden otorgar
el perdón. La circunstancia de él perdón concedido a uno de los concurrentes en el hecho se extienda a los co-
autores y a los cómplices e instigadores, puede hacer pensar que no es una causa personal de cancelación de la
pena, ello es inexacto.
No es el delito el único requisito para que opere la penalidad, en ocasiones, no es una causa personal la que impide
la operatividad de ésta, se llego a afirmar que hay condiciones objetivas de penalidad o punibilidad.
Las llamadas condiciones objetivas de punibilidad se nos esfuman en una serie de elementos heterogéneos y la
pretensión de su existencia unitaria choca fuertemente con el principio de culpabilidad, porque afecta el principio de
que no hay delito si por lo menos no tiene forma típica culposa. Hay tal violación del principio de culpabilidad y no se
cae en la responsabilidad objetiva, porque estas condiciones servirían para restringir el campo de la punibilidad y en
tanto que se las une con ese objetivo no se les puede formular objeciones. El argumento no es sostenible, porque si
la falta de las mismas da lugar a impunidad su presencia también fundamenta la punición.
Algunas de las llamadas condiciones objetivas de punibilidad son elementos del tipo objetivo que deben ser
abarcados por el conocimiento (dolo) o por la posibilidad de conocimiento (culpa), otras son requisitos de
perseguibilidad, condiciones procesales de operatividad de coerción penal.
El poder jurídico de promover la actuación jurisdiccional a fin de que el juzgador se pronuncie acerca de la
punibilidad de hechos que el titular de aquella reputa constitutivos del delito. Es el poder de poner en
funcionamiento la actividad del órgano que dice el derecho (el tribunal, juez) para lograr que se pronuncie (dicte
sentencia) sobre hechos que el que tiene ese poder estima que son delitos.
La acción penal es de carácter público y oficial, que la acción tiene carácter público quiere decir que la lleva
adelante un órgano del Estado (Ministerio público o fiscal), que la acción tiene carácter oficial significa que el
órgano público tiene el deber de promoverla y llevarla adelante.
El principio de que las acciones penales son publicas está consagrado en el art. 71 del CP, “deberán iniciarse de
oficio todas las acciones penales, con excepción de las siguientes”:
a) La muerte del autor: Puede operar como causa personal de cancelación de la pena si se produce después
de la sentencia y mientras esta se está ejecutando. Si la muerte del autor se produce durante el proceso, la
misma extingue la acción penal.
b) El perdón de ofendido: es una causa personal de cancelación de la pena cuando tiene lugar después de la
sentencia condenatoria, la renuncia del agraviado extingue la acción penal en los delitos de acción privada,
lo que es inherente a la naturaleza misma de la acción privada. El art. 60 aclara la renuncia de la persona
ofendida al ejercicio de la acción penal, “solo perjudicará al renunciante y a sus herederos”, si son varios
los ofendidos, la renuncia de uno de ellos no perjudica a los restantes.
c) El perdón del cónyuge ofendido: el consentimiento del adulterio por parte del mismo, le impide iniciar
acción penal. El consentimiento, no se trata de un impedimento de operatividad de la coerción penal de
orden procesal, el cónyuge que consiente en que otro cometa adulterio está incurriendo el mismo en una
conducta contraria a la ética matrimonial legalmente reconocida y no puede argumentar luego que esa
conducta del consorte afecta su bien jurídico.
d) En caso de adulterio, el art.74 dispone que la muerte del cónyuge ofendido, producida antes de la
sentencia, extingue la acción penal.
e) El art. 1° de la le 23.077 establece la extinción de la acción por delito penado con multa. Se trata de una
forma de “desjudicialización” del conflicto social por una vía conciliatoria.
En prescripción de la acción no sólo reconoce como fundamento el trascurso del tiempo que hace inútil la pena, una
inactividad, un cierto desinterés del Estado en la perseguibilidad del delito, los plazos de prescripción de la acción
suelen ser inferiores a los de la prescripción de la pena. Los plazos de prescripción de la acción procesal se
establecen en el art. 62:
1) A los quince años, delitos con pena de reclusión o prisión perpetúa.
2) Trascurrido el máximo de duración de la pena señalada para el delito, si se tratare de hechos reprimidos
con reclusión o prisión.
3) A los cinco años, hecho reprimido únicamente con habilitación perpetúa.
4) Al año un hecho reprimido únicamente con inhabilitación temporal.
5) A los dos años, hechos reprimidos con multa.
Cuando se trate de penas que se hallan conminadas en forma alternativa o conjunta, habrá una sola prescripción.
La forma de computar los términos en que se opera la prescripción de las acciones.
El art. 63 establece que “la prescripción de la acción empezara a correr desde la medianoche del día en que se
cometió el delito o si fuere continuo en que ceso de cometerse”. Por tiempo de comisión del delito, debe entenderse
el tiempo en que se realizo la acción delictiva, sin que ello deba tomarse en cuenta el tiempo de la producción del
resultado.
Hay conminación separada cuando solo se conmina una de las penas: prisión de uno a cuatro años en el art.83.
Hay conminación alternativa cuando se conminan dos penas, entre las que el juez debe elegir. La conminación
alternativa puede ser paralela, en el caso en que la cantidad de pena es la misma cambiando solo la calidad. Puede
ser tambien no paralela cuando las penas alternativamente conminadas cambian en cantidad y calidad, como
cuando se conmina prisión o multa. La conminación conjunta es por ejemplo el art. 84.
Tambien se hallan las penas accesorias, son las que se derivan de la imposición de las principales. Son la
inhabilitación absoluta del art. 12 y el decomiso del art.23
Se establecen legalmente en forma relativamente indeterminada, fijando un mínimo y un máximo y dejando que el
juez determine en concreto la cuantía de la misma conforme a las reglas de los arts. 40 y 41.
La legislación argentina: La pena de muerte tuvo vigencia en el código Tejedor y en 1886 había caído en desuso.
En lo que va del siglo se aplico una sola vez y durante la vigencia del código anterior. Su aplicación está
seriamente dificultada en la práctica, el art. 11 del código de procedimiento exige que sea impuesta solo por
unanimidad de votos del tribunal integro que conozca de la causa en última instancia.
La pena de muerte no es una pena. La pena de muerte queda fuera del concepto de pena. La llamada “pena de
muerte” cumple la función de suprimir definitiva e irreversiblemente a un hombre.
Es inconstitucional porque:
El párrafo 2 del art. 4 de la CA prohíbe extender la pena d muerte a delitos para los que no estuviese conminada y
el párrafo 3 prohíbe restablecerla en los países que la hayan abolido. En la actualidad el restablecimiento de la
llamada pena de muerte está vedado al Estado argentino.
La corte interamericana emitida en 1983 expreso “no se trata de rodear de condiciones rigurosas la excepcional
imposición o aplicación de la pena de muerte, se trata de ponerle un límite definitivo, a través de un proceso
progresivo e irreversible destinado a cumplirse tanto en los país que no han resuelto aun abolirla, como en aquellos
que si han tomado esta determinación.”
-Formas constitucionales excluidas. Todas las formas de castigo corporal quedan excluidas de nuestra legislación
penal por parte del art. 18 CN
El art. 17 de la CN proscribe tambien la confiscación de bienes “la confiscación de bienes queda borrada para
siempre del código Penal argentino”.
Una forma común de pena hasta el siglo pasado era la picota, consistente en exponer al condenado a la vergüenza
pública con carteles, vestimentas especiales, sea paseándolo por las calles o exhibiéndolo en una plaza atado a un
poste. Esta forma de punir no está expresamente excluida por nuestra CN, es inconstitucional por importar una
especie de tormento.
En función del principio de humanidad debe considerarse que nuestra legislación penal no admite ninguna pena
irracionalmente cruel, la proscripción del tormento y de los azotes no es limitativa, sino indicativa del principio de la
racionabilidad y del principio de humanidad. Las penas crueles estarán constitucionalmente proscriptas. Está
proscripta cualquier pena que importe una incapacitación física u orgánica del sujeto, tambien cualquier pena
verdaderamente perpetua y cualquier consecuencia perpetua de un delito.
- Otras penas excluidas de nuestro sistema. Hay penas que no serian inconstitucionales pero que nuestro sistema
no ha recogido. Por ejemplo: el confinamiento, asignar al condenado un lugar fijo de residencia, del cual no
puede salir. Se desconoce el llamado “destierro local”, la prohibición de residir en determinado lugar. El
sometimiento a vigilancia policial, ni otras penas menores, como el apercibimiento y la amonestación judiciales.
- Penas recientemente propuestas. Los sistemas penales s mueven dentro de una férrea disyuntiva; pena privativa
de libertad o pena patrimonial. Se ha propuesto la privación de cierto derecho que en la vida moderna suelen ser
apreciado, ejemplo la licencia para conducir, el permiso de caza, etc. Una forma de privar al sujeto de su tiempo
libre a través de un trabajo de fin de semana, de forma gratuita por un número de horas en lugares como el
hospital, escuelas, etc.
- Las penas privativas de libertad en nuestra legislación. El código Tejedor contenía las siguientes penas
privativas de libertad: presidio, penitenciaria, prisión, arresto, división que se mantuvo en el código de 1886.
El código vigente redujo las penas privativas de libertad a dos: reclusión y prisión.
a. El arresto domiciliario sustantivo no se aplica a la reclusión. El art. 10 CP establece que cuando la prisión no
excediera de 6 meses podrán ser detenidas en sus propias casas las mujeres honestas y las personas mayores
de 70 años o valetudinarias. Mujer honesta s la que no es prostituta, valetudinaria es la persona enferma,
delicada de salud. Al sujeto se le puede privar de libertad locomotiva, reduciéndole la misma a su propio
domicilio de residencia.
b. Diferente tiempo de cumplimiento para la obtención de libertad condicional por parte del que hubiera sido
condenado a 3 años o menos. Conforme al art.13 del CP puede obtener la libertad condicional después de
cumplir un año, el que hubiera sido condenado a pena de reclusión por tres años o menos.
c. Computo de la prisión preventiva. Se llama asi a la privación de libertad que sufre quien aun no ha sido
condenado, está procesado porque todavía no ha habido sentencia, su carácter preventivo tiene por objeto
asegurar la presencia del procesado, evitar su fuga ante la concreta amenaza de una pena. Se computara por
un día de prisión preventiva uno de prisión y por dos días de prisión preventiva uno de reclusión.
d. La reclusión no se puede imponer condicionalmente. Queda reservada para las penas de prisión de tres años o
menos, según dispone el art.26.
e. Las escalas de reducción por tentativa y participación son diferentes para la reclusión y para la prisión perpetua.
El art. 44 dispone “si la pena fuese de reclusión perpetua, la pena de tentativa será de reclusión de 15 a 20
años” “si la pena fuese de prisión perpetua, la de la tentativa será prisión de 10 a 15 años
f. La reclusión y la prisión tienen distintos mínimos, en cuanto al máximo la prisión no se distingue de la reclusión,
ambas pueden imponerse a perpetuidad, su máximo puede ser 25 años en casos temporales. En cuanto a las
medidas mínimas, la prisión mínima prevista en el CP es de 15 días (art.243), la medida mínima de reclusión es
de 6 meses (lesiones graves en un estado de emoción violenta, art. 93).
Hay casos de reincidencia previstos en el art.52 que corresponde agravar la pena de la ultima condena con el
agregado de una pena de “reclusión por tiempo indeterminado mo accesoria de la ultima condena”. Esta reclusión
accesoria por tiempo indeterminado puede tambien imponerse en el caso del art.80. Las diferencias que tiene esta
pena respecto de la reclusión común con su indeterminación y el régimen especial de libertad condicional.
El art. 53 dispone que “los condenados con la reclusión accesoria por tiempo indeterminado deberán cumplirla en
establecimientos federales”. Esta disposición es inconstitucional, porque son las provincias las que deben
establecer quién es el juez natural de la ejecución de la pena, ninguna ley nacional puede sacar a los penado de
sus jueces naturales de ejecución.
La deportación se convirtió en un expediente automático para agravar las penas de los reiterantes, conforme a
expresa jurisprudencia plenaria de la Capital Federal. Se disimulaba el carácter de la deportación, afirmándose que
no se trata de una pena, sino de una “medida de seguridad”.
Las diferencias entre la reclusión accesoria por tiempo indeterminado del art. 52 del CP y las penas ordinarias
privativas de libertad son las siguientes:
El art. 2 CC “el día mas es el intervalo entero que corre de media noche a media noche; y los plazos de días no s
contarán de momento a momento, ni por horas, sino desde la media noche en que termina el día con su fecha.”
Igual criterio debe tenerse en cuenta cuando se interrumpe la ejecución de la pena. La prisión preventiva se
computa igualmente desde la cero hora del día en que el sujeto fue detenido, calculándose en la forma en lo estable
el art. 24 CP, un dia de prisión por cada dia de prisión preventiva y un dia de reclusión por cada dos días de prisión
preventiva
El art. 25 del CP establece que “si durante la condena el penado se volviere loco, el tiempo de locura se computara
para el cumplimiento de la pena, sin que ello obste a lo dispuesto en el apartado 3 del inc. 1 del art. 34”.
Hay un error de remisión, nada dice de la locura que sobreviene mientras el sujeto se encuentra sometido a proceso
es decir, después del hecho y antes de la condena. Esta situación deben resolverla los códigos procesales. A partir
del momento en que se interrumpe el avance de la causa en razón de la locura del procesado, comienza a correr la
prescripción de la acción penal.
El estudio de la legislación de ejecución penal corresponde al derecho penitenciario o de ejecución penal. Se llama
“régimen penitenciario” al conjunto de normas que regulan la vida de los reclusos en los establecimientos penales.
Por sistema penitenciario se entiende las directrices y elementos esenciales de la ejecución de las penas privativas
de libertad.
La libertad condicional.
Los arts. 13, 14, 15, 16, 17 y 53 del CP regulan la posibilidad de que el condenado de una pena privativa de libertad
pueda recuperar su libertad anticipadamente y por resolución judicial.
El art. 13 CP establece “el condenado a reclusión perpetua que hubiere cumplido 20 años de condena, el
condenado a reclusión temporal o a prisión por mas de 3 años que hubiere cumplido, los dos tercios de su condena,
y el condenado a reclusión o prisión por tres años o menos hubiese cumplido un año de reclusión u 8 meses de
prisión, observando con regularidad los reglamentos carcelarios, podrán obtener la libertad por resolución judicial
previo informe de la dirección del establecimiento.
La libertad condicional es un derecho que tiene el penado, siempre y cuado se han reunido los requisitos legales.
Cuando el penado se encuentra en las condiciones exigidas por los arts. 13, 14 y 17 la formula “podrán obtener” no
faculta a la autoridad a decidir por si o por no, sino que faculta al penado a acogerse al beneficio.
La condena condicional es una suspensión parcial de la privación de libertad, pero no una suspensión de la
ejecución de la pena. Es una forma de suspensión parcial de la privación de la libertad por que se otorga después
de cierto tiempo de privación total de la libertad, porque no es una suspensión total de la privación de la libertad,
queda sometido a una serie de limitaciones, ejemplo la de residencia, es una pena independiente en la legislación
comparada.
La libertad condicional no implica una modificación de la condena, sino una forma de cumplimento de la misma.
- Condiciones a que queda sometida la libertad del sujeto una vez concedida.
1) Obliga al penado a residir en el lugar que determine el auto de soltura. No es necesariamente el domicilio
habitual de penado.
2) Impone al liberado de la condición de “observar las reglas de inspección que fije el mismo auto,
especialmente la obligación de abstenerse de bebidas alcohólicas”. Cuando el tribunal lo ordene, que será
cuando el alcohol haya tenido algo que ver con la criminogenisis del delito cometido, pero no cuando sea
totalmente ajeno al mismo, lo que constituiría en absurdo puritanismo legal.
3) La obligación de adopta en el plazo que el auto determine, oficio, arte, industria o profesión si no tuviere
medios propios de subsistencia.
4) La condición de no cometer nuevos delitos.
5) La obligación de someterse al cuidado de un patrono, indicado por las autoridades competentes.
Efectos de la violación de las condiciones a que queda sometida la libertad del condenado:
Conforme al art.15 la revocación de la libertad se impone cuando el penado cometiere un nuevo delito o violare la
obligación de residencia. El penado no podrá pedirla hasta cumplir el resto de la pena o un tiempo igual al mismo en
caso de unificación de penas.
Multa
La multa, tiene un propósito resocializador. Su aplicación puede dar lugar a notorias injusticias, para algunos puede
ser realmente sentida como una disminución patrimonial, y una motivación para rectificar su conducta d vida, otros
de mayor capacidad económica pueden no sentirla.
El art. 21 establece que la multa obligara al reo a pagar la cantidad de dinero que determine la sentencia, teniendo
en cuenta la situación del penado. La multa penal es, el pago al Estado de una suma de dinero fijada en la
sentencia condenatoria. Su importe se destina al patronato de liberados. Es una pena principal que puede
conminarse como pena única, pena conjunta, penal alternativa.
Si el reo no pagare la multa en l termino que fije la sentencia, sufrirá prisión que no excederá de año y medio. Una
vez agotadas las posibilidades de obtener cumplimiento de la pena. Tiene tres variables diferentes;
a) El tribunal, antes de transformar la multa en prisión procurar la satisfacción de la primera haciéndola efectiva
sobre los bines, sueldos u otras entradas del condenado.
b) La posibilidad de autorizar al condenado a amortizar la pena pecuniaria, mediante el trabajo libre, siempre
con ocasión para ello.
c) Autorizar al condenado a pagar la multa en cuotas.
El art. 24 es el que establece el mínimo y máximo diario para la conversión de multa en prisión.
Inhabilitación.
Es una privación de derechos que puede ser perpetua o temporal y que los derechos que afecta puede ser absoluta
o especial.
b) La inhabilitación especial esta reglada en el art. 20 y tiene por efecto la privación del empleo, cargo, profesión
o derecho que recayere y la incapacidad para obtener otro del mismo género durante la condena.
La rehabilitación.
Es la potestad de ejercer los derechos de que se había privado por la condena que se le restituye al condenado. Se
encuentra reglada por el art. 20
“el condenado a inhabilitación absoluta puede ser restituido al uso y goce de los derechos y capacidades de que fue
privado, si se ha comportado correctamente durante la mitad del plazo de aquella o durante 10 años cuando la pena
fuere perpetua, y ha reparado los daños en la medida de lo posible”.