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TEMA: LA IGLESIA Y LA CULTURA

TEXTO:
Introducción

El papel de la iglesia en la cultura es un tema de reciente estudio y debate. El primer


acercamiento se concentró en la relación de la iglesia con la cultura en el sentido d que ésta
es contracultura.

La iglesia siempre ha sido contra cultura:


1. Se les acuso de revelarse en contra de Roma
2. Se les acusó de ser caníbales
3. Se les acuso de fomentar la sensualidad

y cuando lo encontró, lo trajo a Antioquía. Y se reunieron con la iglesia por todo un año, y
enseñaban a las multitudes; y a los discípulos se les llamó cristianos por primera vez en
Antioquía. Hechos 11:26

Condenando la cultura
1. Cuando se habla de la iglesia siendo contracultura lo primero que viene a la mente
es la tarea de señalar y condenar la cultura o algunos aspectos de ella. Si tenemos a
Jesús como un modelo encontraremos que a menudo Él condenó directamente la
cultura religiosa de su época, particularmente las actitudes y las acciones de los
líderes religiosos. Por ejemplo, al leer el Sermón del Monte encontramos
repetidamente la expresión “no seáis como los hipócritas…” (Mt. 6:2, 5, 16)

2. En Mt. 23 Jesús condena de nuevo al liderazgo religioso en sus actitudes y


acciones, especialmente la opresión a la que sometían a la gente (23:4-7), para
luego emitir los famosos “ayes” que no son más que severos juicios en contra de ese
liderazgo (23:13-36).
3. En Lucas 22:24-27 Jesús enseña a sus discípulos sobre el poder y el liderazgo,
contrastando lo que sucedía en la cultura política de su época con lo que debería
suceder entre los discípulos. Mientras los valores de la cultura política no solamente
de aquella época, sino de todas las épocas, son la ambición personal, el uso y abuso
del poder y la manipulación de las personas, los valores del liderazgo entre los
discípulos deben ser el servicio, el sacrificio y la humildad. Jesús dice enfáticamente
“no será así entre vosotros” (vr. 26), emitiendo así una condena clara, directa y
abierta en contra de los valores de la cultura política de todos los tiempos.1

Cosas condenables de nuestra cultura:


1. La violencia
2. La corrupción
3. El libertinaje
4. El materialismo

1
López, La misión liberadora de Jesús, 145-167.
5. La sensualidad

Consumiendo cultura
El tercer elemento de la relación entre a iglesia y la cultura es el consumo de la
misma. De los aspectos más negativos pasamos a los más positivos en la relación entre
iglesia y cultura. Hay elementos los podemos consumir, teniendo cuidado de no violentar
los valores bíblicos del reino de Dios.

Sin embargo, hay otros elementos de la cultura que consumimos sin tener que
preocuparnos por evaluarlos teológicamente. Más bien, deberíamos gozar y disfrutar las
muchas buenas cosas que nuestra cultura produce.2 Podemos pensar en la comida, en el
vestuario, en los artefactos electrodomésticos que tanto facilitan nuestra vida, en la
tecnología digital (teléfonos celulares, internet, equipo de computación, instrumentos
musicales, etc.). Las iglesias casi ni podrían funcionar hoy sin estos elementos.

Lo único que tenemos que vigilar son nuestras propias actitudes hacia estos elementos,
porque como dicen Jesús y los apóstoles, podríamos llegar a ser esclavos de las cosas.

En el Nuevo Testamento se ve a Jesús y a los apóstoles consumiendo este tipo de elementos


de la cultura: comida, vestuario, transporte, monedas, servicios gubernamentales, etc. Por
ejemplo, Pablo mismo, quien criticó duramente las incongruencias del sistema romano de
justicia (Hechos 16: 35-39), apeló al mismísimo emperador para someterse a ese sistema de
justicia (Hechos 25:6-12).3

Viajo en barco
Camino los caminos de roma (400 vías, 70,000 kl de longitud)
El calzado
“Todos los caminos conducen a roma”

En el caso de Jesús es notoria su presencia frecuentemente en fiestas y comidas, que


eran parte de la cultura de su época. Hasta fue acusado de “ser fiestero” porque pasaba
mucho tiempo con la gente comiendo y bebiendo.

 Vino el Hijo del Hombre, que come y bebe, y dicen: He aquí un hombre
comilón, y bebedor de vino, amigo de publicanos y de pecadores. Pero la
sabiduría es justificada por sus hijos.

2
Ibid.,
3
Justo L. González, Hechos de los Apóstoles en C. René Padilla, Moisés Silva y Luciano Jaramillo,
eds. Comentario Bíblico Iberoamericano. Buenos Aires: Ediciones Kairós, 2000: 415-416.
Creando cultura

El último aspecto de la relación entre iglesia y cultura es la creación de cultura. Al aspecto


creativo innato del ser humano como un rasgo de la imagen de Dios. La postura más
completa con respecto a la relación entre el Evangelio y la cultura es, precisamente, la de
transformación y creación de la cultura.

 La iglesia cristiana transformó la cultura greco-romana de los primeros siglos de la


Era Cristiana y creó una nueva cultura con rasgos de esa cultura, de la cultura
judía y los nuevos elementos incorporados por la iglesia misma.4

 El otro ejemplo histórico de gran impacto es la Reforma Protestante del siglo XVI.
Este movimiento transformó la cultura de los países que lo abrazaron al grado que
los países protestantes de Europa central y del norte fijaron el rumbo del mundo de
los siglos siguientes.

 Al no encontrarlos, arrastraron a Jasón y a algunos de los hermanos ante las


autoridades de la ciudad, gritando: Esos que han trastornado al mundo han venido
acá también; Hechos 17:6

Quiero terminar, sin embargo con un ejemplo bíblico que viene del ministerio misionero
del apóstol Pablo. Cuando Pablo llegó a la ciudad griega de Filipos, él y sus acompañantes
fueron acusados de “alborotar” la ciudad (Hechos 16:20-21), es decir, cambiar la cultura.5
Esa fue la acusación que sirvió de base para llevarlos a la cárcel. Parece que la
transformación de culturas es algo peligroso, porque se tocan intereses y prácticas
arraigadas

Algo similar les sucedió a Pablo y sus acompañantes en Efeso (Hechos 19:23-41). Pablo y
sus acompañantes se habían ganado la fama de estar “trastornando” el mundo (Hechos
17:6).

Los cristianos de hoy no tenemos esa fama, porque no estamos en el negocio de transformar
culturas. pero no estamos transformando ni creando.

Conclusión
Ser contracultura es un imperativo para todos los cristianos. No obstante, la meta debería
ser la transformación de las culturas y la creación de nuevas que reflejen los valores del
reino.

1 Corintios 9:20-22 Reina-Valera 1960 (RVR1960)


20Me he hecho a los judíos como judío, para ganar a los judíos; a los que
están sujetos a la ley (aunque yo no esté sujeto a la ley) como sujeto a
la ley, para ganar a los que están sujetos a la ley;

4
Jaeger, Cristianismo primitivo y paideía griega.
5
Suazo, “El poder de la verdad para transformar culturas…”
21a los que están sin ley, como si yo estuviera sin ley (no estando yo sin
ley de Dios, sino bajo la ley de Cristo), para ganar a los que están sin
ley.

Me he hecho débil a los débiles, para ganar a los débiles; a todos me


22

he hecho de todo, para que de todos modos salve a algunos.

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