Vous êtes sur la page 1sur 8

CORTE SUPERIOR DE JUSTICIA DE LA LIBERTAD

PRIMERA SALA ESPECIALIZADA LABORAL

EXPEDIENTE Nº : 00485-2015-0-1601-SP-LA-01
DEMANDANTE : OLIVER GONZALO CHAVEZ MOSQUEIRA
DEMANDADO : EMPRESA AGROINDUSTRIAL CASA GRANDE SAA.
Y OTRAS
MATERIA : INCUMPLIMIENTO DE DISPOSICIONES Y NORMAS
LABORALES

RESOLUCIÓN NÚMERO SIETE.-


Trujillo, diez de agosto de dos mil dieciséis.-

VISTOS.- En audiencia pública la Primera Sala Especializada Laboral de esta Corte


Superior de Justicia de La Libertad, expide la siguiente SENTENCIA:

I. PRETENSIÓN IMPUGNATORIA
1. Es objeto de apelación, la sentencia de fojas 509-519, de fecha 19 de diciembre de
2014, en la que se declaró FUNDADA la demanda interpuesta por OLIVER
GONZALO CHAVEZ MOSQUEIRA contra la EMPRESA CASA GRANDE
SAA, COOPERATIVA DE TRABAJO Y FOMENTO DEL EMPLEO SANTO
DOMINGO LTDA, COOPERATIVA DE TRABAJADORES DE PRODUCCIÓN
ESPECIALES T-GERENCIA LTDA Y ADECCO PERU SA., sobre cumplimiento
de normas laborales, desnaturalización de intermediación laboral, contratación a
tiempo indeterminado; en consecuencia, DECLARESE desnaturalizada la
intermediación laboral, entendiéndose que su único empleador es la empresa
Casa Grande SAA., desde el 10 de setiembre 1998, sujeto a un contrato a tiempo
indeterminado bajo el régimen laboral común. FUNDADA la demanda de
reposición por despido incausado, y se ORDENA que CASA GRANDE SAA
cumpla con reponer al actor en su puesto de trabajo que venía desempeñando al
momento del cese o en otro de similar categoría. Con costos en S/. 1,500.00 soles.
Infundada la oposición a la exhibicional del Manual de Organización y Funciones
del Departamento de Recursos Hídricos, Fertilización y Siembra. La sentencia es
apelada únicamente por el demandante.

2. El demandante, mediante escrito de apelación de fojas 522 a 526, solicita la


modificación de los costos del proceso, alegando básicamente lo siguiente:
a. El Juez erróneamente ha ordenado el pago diminuto de los costos del proceso
en la suma de S/. 1,500.00 soles, en tanto no se ha tenido en cuenta la
naturaleza de las pretensiones materia de juzgamiento.
b. La determinación de los costos del proceso debe tener relación directa con la
calidad de la defensa, a efecto de incentivar las defensas de alta calidad.
c. Así, se ha amparado la pretensión de desnaturalización de intermediación y el
reconocimiento de un contrato de trabajo con Casa Grande. Asimismo, hay una
buena intervención de la defensa letrada en el juzgamiento. Por lo tanto, los
costos deben ser establecidos en la suma de S/. 3,500.00 soles.

II. CONSIDERANDOS:

1. Que, este Colegiado en aplicación del principio de personalidad del recurso de


apelación, recogido implícitamente en el artículo 370 del Código Procesal Civil -en
adelante CPC-, según el cual el Juez Superior sólo puede conocer de aquellos
extremos que le son sometidas por las partes mediante apelación y en la medida del
agravio sufrido en la sentencia de primera instancia (expresado en el aforismo
Tantum devolutum quantum appellatum), sólo absolverá los extremos que han sido
objeto de la debida fundamentación y precisado el error de hecho y de derecho en
que ha incurrido la sentencia, exigencias que no son puramente formales, pues ellas
constituyen el thema decidendum del Órgano Superior, esto es la base objetiva del
recurso, la misma que determina los alcances de la impugnación y las facultades que
goza la instancia superior para resolver el tema, siendo esto así este Colegiado sólo
absolverá las impugnaciones que han sido suficientemente fundamentadas en el
recurso y que se han resumido ut supra en el acápite sobre pretensión impugnatoria.

2. Que, atendiendo a las pretensiones impugnatorias de la única parte apelante, solo es


objeto de cuestionamiento el extremo de la sentencia que establece los costos
procesales en la suma de S/. 1,500.00 soles. Siento esto así, la decisión del A quo de
declarar la existencia de un contrato de trabajo a plazo indeterminado entre el actor y
Casa Grande SAA desde el 10 de setiembre de 1998 en el régimen común, así como el
extremo que ampara la pretensión de reposición por despido incausado, al no haber
sido materia de cuestionamiento conforme lo dispuesto en el artículo 366 del CPC,
han quedado consentidas, estando impedido por tanto este Colegiado de emitir
pronunciamiento respecto de dicho extremo, en atención al Principio de Limitación
de la Apelación; por lo que, debe entenderse que respecto del punto antes señalado
ha operado la cosa juzgada, de conformidad con lo prescrito en el numeral 2 del
artículo 123 del CPC1.

3. En relación a los costos del proceso, los cuales se encuentran regulados por el
artículo 411 del CPC2, cuya fijación en el marco del nuevo proceso laboral, en el que
existe una especial relevancia el evaluar la performance del abogado patrocinante de
la parte vencedora a efectos de premiar e incentivar las defensas de buena calidad,

1 Que señala: “(…) 2. Las partes renuncian expresamente a interponer medios impugnatorios o
dejan transcurrir los plazos sin formularlos (…)”.
2 Artículo 411.- Son costos del proceso el honorario del Abogado de la parte vencedora, más un cinco por ciento
destinado al Colegio de Abogados del Distrito Judicial respectivo para su Fondo Mutual y para cubrir los
honorarios de los Abogados en los casos de Auxilio Judicial.
debe obedecer a una estimación razonable del conjunto de factores y parámetros
legales y fácticos que lo rodean, tales como:

3.1. Sencillez y consistencia de la demanda.- Este aspecto no ha sido tenido en


cuenta por el abogado defensor, básicamente porque la demanda es ampulosa,
extensa y eso resiente el valor de sencillez que debe caracterizar al proceso oral
no solo en las actuaciones orales sino también en las escritas. En efecto, la
demanda de fojas 281 cuenta con 56 folios, lo cual resulta excesivamente extenso
atendiendo a la pretensión demandada. No se necesitan 56 folios para señalar
que existe un contrato de trabajo a plazo indeterminado con la empresa usuaria
por encontrarse desnaturalizada la intermediación laboral y que por tanto la
invocación del vencimiento del contrato equivale a un despido incausado. Lo
único que denota la excesiva ampulosidad de la demanda es falta de calidad
técnica en la defensa letrada. Inclusive, conforme se observa de folios 287, en la
demanda se dedica todo un apartado para consignar citas jurisprudenciales y
doctrinarias lo cual es totalmente innecesario, pues lo que debe aportarse con
motivo de la demanda son los hechos jurídicamente relevantes para el amparo de
las pretensiones demandadas. La demanda laboral debe ser clara, sencilla y
concreta, sin embargo, en el escrito de demanda de autos se han dedicado 29
folios, de 287 a 326, para realizar citas jurisprudenciales y doctrinarias, lo cual
debe tenerse en cuenta como factor negativo para la cuantificación de los costos.
En esa virtud debe reiterarse la recomendación al abogado de la parte
demandante de redactar escritos sencillos, breves concretos, claros, sin citas
jurisprudenciales y doctrinales innecesarias, la que pueden quedar reservadas
para el alegato final del juzgamiento3.

3.2. Dominio de su teoría del caso en la audiencia 4.- En relación a este parámetro el
abogado defensor presentó consistencia y claridad en su teoría del caso, la cual
3 En esa medida la demanda debe ser un relato breve pero altamente TÉCNICO; para lograr esto último, el
abogado debe filtrar los hechos jurídicamente relevantes (tomados del supuesto de hecho de la norma que
resuelve el caso), a los que debe adicionar algunos hechos complementarios, pero a la vez necesarios para
presentar al Juez un cuadro fáctico completo; así por ejemplo, en una demanda de reposición, un hecho
jurídicamente relevante es sin duda la existencia de una relación laboral en el régimen privado, pero ese a ese
hecho PRINCIPAL es necesario aunar otros hechos inherentes a aquel como la fecha de ingreso, cese, tiempo de
servicios, cargo o función y monto de la remuneración; todos ellos son necesarios para sustentar fácticamente
aquel hecho jurídicamente relevante denominado “relación laboral” en el ejemplo que ponemos. A esos hechos
principales o jurídicamente relevantes, Michelle Taruffo los denomina HECHOS INSTITUCIONALES y a los
hechos complementarios o adicionales les denomina HECHOS BRUTOS. Pero más allá de las nomenclaturas,
ambos tipos de hechos deben ser cuidadosamente elegidos por el abogado al elaborar su teoría del caso y deben
ser descritos en forma concreta, clara y sencilla en la demanda. El resultado debe ser una demanda de poca
extensión, con fundamento jurídico pero con una alta calidad en la elección y exposición de los hechos.
Recuérdese que iura novit curia, por lo cual el juez necesita fundamentalmente un planteo técnico de los hechos
como condición necesaria para un proceso de ALTA CALIDAD. También abona a la calidad de la demanda un
juicio sobre la calidad ESTRATÉGICA del planteo de la demanda (teoría del caso); así por ejemplo, cabe evaluar si
el abogado ha promovido pruebas que perjudican la propia postura de su patrocinado, como por ejemplo ofrecer
la exhibicional de planillas, cuando la prueba del pago atañe a la parte demandada; o cuando el abogado plantea
demandas meramente declarativas, como es el caso de la desnaturalización, cuando la Corte Suprema ha dejado
sentado en doctrina casatoria obligatoria, que la desnaturalización es un hecho y no una pretensión, entre otros
ejemplos.
fue expresada con un orden lógico y secuencial, tal como se observa del registro
de audio y video de la audiencia de juzgamiento, contenido en el CD-ROM de
folios 506.

3.3. Eficiente oralización de los medios probatorios5.- Tal y como se desprende del
análisis de la audiencia de juzgamiento, la participación de la defensa letrada
durante la actuación probatoria ha sido bastante modesta, pues durante la
declaración de parte realiza preguntas poco claras, que no se encuentran
orientadas a un fin específico; asimismo, durante la actuación de la prueba
documental la defensa del demandante se ha limitado a indicar cuál es la
finalidad de los documentos ofrecidos, indicando genéricamente que éstos tienen
por finalidad acreditar la desnaturalización de la intermediación laboral, empero
no especifica por qué es que dichas documentales acreditan tal hecho, lo cual
también debe ser tenido en cuenta al cuantificar los costos del proceso.

3.4. Correcto balance de lo probado en los alegatos finales.- balance que fue
presentado en forma clara y consistente, haciendo referencia principalmente a la
naturaleza permanente y principal de las labores prestadas por el demandante,
como prueba principal de la desnaturalización pretendida, y como consecuencia
de ello, la existencia de un despido incausado al haberse invocado el vencimiento
de contrato como causal de extinción del contrato.

4 En este punto lo que el órgano jurisdiccional laboral necesita –en el marco del actual proceso oral- es la
intervención de un abogado bien informado, es decir, que haya estudiado a profundidad el caso, antes de ir a la
audiencia y que sus intervenciones propendan a la defensa de los intereses de la parte que lo contrató, pero a la
vez que faciliten la exposición de los HECHOS y el desahogo eficiente de los MEDIOS DE PRUEBA. Por lo tanto,
el paradigma de una buena defensa, otra vez, es la de aquel abogado que hace defensas orales claras, concretas,
sencillas y breves. Estas cualidades deben estar en todas las fases del juzgamiento, desde la confrontación de
posiciones hasta el alegato final. Pero además, una buena defensa es aquella que promueve activamente la
actuación de la prueba de su parte y la de la contraria, bajo la fórmula del “debate oral de posiciones” del artículo
12 de la ley 29497. Esta iniciativa es transversal a toda la prueba del proceso, pero con mayor énfasis en el debate
de la PRUEBA COMPLEJA, por la abundancia de datos que importa, como ocurre con la prueba del pago, la
prueba del registro de la jornada de trabajo u otros datos similares de abundante data. Sin duda, un abogado que
no ha promovido activamente el debate de los aspectos más relevantes de la prueba del proceso, sea de su parte o
de la contra parte, no puede predicarse que él que haya realizado una buena litigación oral. Ello incluye también
una participación inteligente y creativa en los exámenes y contra-exámenes (interrogatorios) a los órganos de
prueba (partes, testigos y peritos).
5 Dicha oralización debe entenderse como una actividad dinámica, creativa e informal, es decir con clara
prevalencia del fondo sobre la forma; se trata por tanto de una actividad también altamente técnica, en tanto el
abogado debe desplegar todas sus habilidades y talento, para exponer en el tiempo limitado de una audiencia de
pruebas, los contenidos significativos de los principales medios de prueba, en especial, los documentos, dado el
gran valor que estos tienen para la solución del conflicto laboral y de seguridad social. Se trata de un esfuerzo
singular, en el que se exige el despliegue de habilidades descriptivas, pero a la vez analíticas, de modo que el
abogado ni lea, ni se limite a proferir la finalidad de la prueba expuesta en el acto postulatorio, sino que extracte
del documento lo importante, lo relevante, lo útil de aquella parte del documento que realmente interesa a su
teoría del caso, pero también que rebata la teoría del caso contraria.
3.5. Correcta denuncia de errores en el recurso de apelación6.- en el caso de autos,
únicamente se encuentra apelado el extremo que fija los costos del proceso en la
suma de S/. 1,500.00 soles. sin perjuicio de ello, debemos advertir que, la
extensión de la apelación (5 folios) termina siendo igual de excesiva si lo único
que se quería sostener es que los costos aprobados por el juez son diminutos
atendiendo a la calidad de la defensa letrada, lo que denota nuevamente falta de
tecnicidad al momento de elaborar el escrito.

3.6. Los costos del proceso en casos de reposición por despido. Que, en casos
similares en los que se ha amparado la pretensión de reposición por despido
incausado como consecuencia del establecimiento de un contrato de trabajo a
plazo indeterminado, este Colegiado ha establecido los costos del proceso u
honorarios profesionales en montos que oscilan entre los S/. 4,000.00 soles y S/.
8,000.00 soles, según las particularidades de cada caso. Sin embargo, en el caso de
autos, aun cuando la pretensión amparada también versa sobre reposición por
despido incausado, existen deficiencias en la calidad de la defensa técnica del
demandante que no pueden pasar por desadvertidas, conforme se precisó
precedentemente.

3.7. Siento esto así, debe modificarse los costos del proceso y establecerse en la suma
de S/. 3,000.00 soles, lo cual resulta prudente y razonable atendiendo a la
naturaleza de la pretensión así como a la calidad de la defensa técnica de la parte
demandante. Insistimos, el monto que se establece por costos debe tener en
cuenta todas las incidencias ocurridas en el proceso, motivo por el cual este
Colegiado -con criterio prudente y razonable- decide establecerlo en el monto
antes indicado. Se deja expresa constancia que el monto fijado por este
concepto, compromete legal y éticamente la participación de la defensa letrada
en la fase de ejecución, bajo responsabilidad. Asimismo, se recomienda al Juez
de primera instancia que cuando la parte demandante acuda a hacer efectivo el
cobro de los costos, debe presentar indispensablemente el recibo por honorarios
profesionales donde se indique el monto a cobrar y sus datos personales,
conforme lo dispone el artículo 418 del CPC.

4. En relación a la legitimidad para obrar de las tercerizadoras (en procesos como el


presente, en los que se discute la desnaturalización de la tercerización).- Sin
perjuicio de lo señalado supra, en tanto solo constituye materia de apelación el
extremo de los costos del proceso, cabe hacer también una RECOMENDACIÓN al

6 En este punto lo que se evalúa es la originalidad de la apelación, la que de ninguna manera puede ser una
transcripción del acto postulatorio; la apelación debe ser necesariamente un “diálogo” del apelante con los
argumentos de la resolución impugnada. Por ello, las premisas de la apelación difieren radicalmente de las
premisas fácticas o jurídicas del acto postulatorio, pues éstas pretenden un diálogo entre las partes, mientras que
los argumentos de la apelación plantean una relación comunicacional de clara confrontación con los errores de
hecho y de derecho de la resolución impugnada. Por ello, se premiarán con mejores honorarios o costos las
apelaciones que contengan argumentos claros y concretos pero en todo momento referidos a algún error de hecho
o de derecho (material o procesal) del razonamiento impugnado y se hará exactamente lo contrario con las
apelaciones cuyos argumentos sólo repiten lo ya expresado a lo largo del proceso.
órgano jurisdiccional de primer grado, en orden a optimizar el control de
admisibilidad y procedencia de la demanda (artículo 17 de la Nueva Ley Procesal del
Trabajo -Ley 29497, en adelante NLPT-).

4.1. En efecto, es deber del juez verificar la concurrencia de los presupuestos


procesales y las condiciones de la acción, pues se trata de requisitos de validez
de la relación procesal (artículo 17 de la NLPT; artículos 123, 128, 426 y 465 del
CPC).
4.2. Este control debe efectuarse tempranamente, desde la calificación de la demanda,
pero también puede hacerse a lo largo de todo el proceso (saneamiento procesal
como actividad). De la eficiencia con la que el juez laboral despliegue este deber
funcional depende la calidad de los resultados del proceso y la concreción de los
principios y valores que lo inspiran, como la economía, la celeridad, en suma la
oralidad como nuevo paradigma de concreción del derecho fundamental a una
tutela procesal efectiva.
4.3. En autos, la demanda fue dirigida contra la empresa usuaria y tres
tercerizadoras7 y el Juez calificó positivamente la demanda respecto de todas, sin
fundamentar por qué las citadas tercerizadoras deberían participar en el proceso,
desde el punto de vista de la legitimidad para obrar.
4.4. Ésta es una condición de la acción, por lo tanto es controlable de oficio por el
Juez, en la medida que la ausencia de este requisito torna improcedente la
demanda, según el artículo 427 del CPC.
4.5. Ahora bien, dado que la legitimidad para obrar es un presupuesto lógico que
permite correlacionar a los titulares de la relación procesal respecto de los titulares de la
relación jurídica material que da origen a la relación procesal, en el presente caso, las
citadas tercerizadoras no tendrían legitimidad para obrar pasiva, precisamente
porque no son titulares de la relación jurídica material que da origen a la relación
procesal.
4.6. En efecto, según la demanda, la relación jurídica material que da origen al
presente proceso, es la afirmación de la existencia de un contrato de trabajo, por
primacía de la realidad, entre el actor y la empresa usuaria. De donde se
desprende que los titulares de la relación material alegada en la demanda son
únicamente el actor y la empresa usuaria. Esto se corrobora con los artículos 4 de
la Ley de Productividad y Competitividad Laboral, aprobado por Decreto
Supremo 003-97-TR, y artículos 5 –coincidentemente- de la Ley de
Intermediación Laboral 27626 y de la Ley de Tercerización 29245 –normas que
resuelven el caso-, las cuales confirman que la relación material alegada en la
demanda sólo tiene por titulares al demandante y a la empresa usuaria, más no a
las tercerizadoras o intermediadoras.

7 Usamos este término genérico en el que englobamos a la intermediación que es una forma especial de
tercerización, entendida ésta no en sentido estricto, sino en sentido amplio.
4.7. Queda claro que la norma material no establece ninguna consecuencia jurídica
contra las tercerizadoras; y ello concuerda con la propia teoría del caso del
demandante, cuando afirma que la verdadera empleadora es la empresa usuaria.
4.8. Establecer una relación procesal con personas no legitimadas, además la
invalidez de la relación procesal que importa, supone una grave afectación del
principio de economía procesal y una vulneración del principio de dirección del
proceso a cargo del Juez (rol protagónico del Juez). El consumo de los escasos
recursos con que se cuenta se multiplica (papel, tinta, equipos informáticos, luz
eléctrica, infraestructura, etcétera; pero también el tiempo), elevando los costos
del proceso para las partes y para el órgano jurisdiccional, que bien podría
invertirlos en la oportuna atención de otros conflictos que verdaderamente
ameriten usar esos recursos.
4.9. Obsérvese, además, que tanto en éste como en otros casos similares, el proceso
llevado con la irregularidad anotada, siempre tiene el mismo resultado:
infundada la demanda respecto de las tercerizadoras (en rigor debería ser
improcedente por ausencia de legitimidad para obrar pasiva). Y no podría ser de
otra manera si consideramos que la norma que resuelve el caso –ya anotada- sólo
establece consecuencias jurídicas contra la usuaria. Por tanto, se recomienda al
juez del proceso controlar la legitimidad para obrar de las tercerizadoras en casos
como el presente –en los que se discute la desnaturalización de la tercerización-
al momento de calificar la demanda, e inclusive en momentos posteriores, en
virtud a sus facultades de saneamiento procesal, expresando los fundamentos
que justifiquen su eventual participación en el proceso, desde el punto de vista
de las condiciones de la acción.

5. En relación a las demandas como la presente en las que se plantea la


“desnaturalización” de la tercerización como petitorio y no como hecho.-
5.1. Asimismo, debemos reiterar la recomendación al juez, para que califique las
demandas en las que se formula la “desnaturalización” como pretensión
autónoma, declarándolas improcedentes, pues, tal como lo ha establecido la
casación laboral 7358-2013-Cusco, del 15 de noviembre de 2013, la
desnaturalización no es una pretensión, sino un HECHO; por lo tanto, es
suficiente con esgrimirla como parte de la causa de pedir (fundamentación
fáctica de la demanda), quedando el Juez vinculado a pronunciarse sobre
cualquier supuesto de desnaturalización laboral.
5.2. La admisión de demandas de “desnaturalización” de cualquier institución
laboral también, constituye una irregularidad de la que el juez laboral es
responsable dada su calidad de director del proceso. Esta mala práctica
distorsiona la litigación –escrita y oral- y supone el desperdicio de los escasos
recursos o energías procesales (tanto los que suponen dinero como los que
suponen tiempo y otros intangibles).
5.3. Dado que la casación citada tiene calidad de doctrina jurisprudencial, por lo que
es obligatoria, según el artículo 22 de la Ley Orgánica del Poder Judicial, el Juez
laboral está habilitado para ejercer control de admisibilidad y procedibilidad de
tales pretensiones, exigiendo o la reformulación de la demanda o resolviendo su
rechazo liminar, por las razones antes esbozadas. Se trata, pues, en todo
momento, de elevar la calidad de la eficiencia del proceso laboral, como medio de
optimizar el derecho fundamental a la tutela procesal efectiva, lo que exige al
juez controlar la legalidad de la relación procesal, ejerciendo sus poderes de
control de admisibilidad y procedencia de la demanda; se trata de un deber
jurisdiccional irrenunciable, pues de esta manera se garantiza el correcto ejercicio
del derecho de acceso a la justicia.

POR ESTOS FUNDAMENTOS:

CONFIRMARON la sentencia de fojas 509-519, de fecha 19 de diciembre de 2014, en


la que se declaró FUNDADA la demanda interpuesta por OLIVER GONZALO
CHAVEZ MOSQUEIRA contra la EMPRESA CASA GRANDE SAA,
COOPERATIVA DE TRABAJO Y FOMENTO DEL EMPLEO SANTO DOMINGO
LTDA, COOPERATIVA DE TRABAJADORES DE PRODUCCIÓN ESPECIALES
T-GERENCIA LTDA Y ADECCO PERU SA, sobre incumplimiento de normas
laborales; MODIFICARON los costos del proceso y los ESTABLECIERON en la
suma de S/. 3,000.00 (TRES MIL Y 00/100 SOLES), más el 5% de dicha suma a favor
del Colegio de Abogados de La Libertad. RECOMENDARON al Juez de primera
instancia tener en cuenta lo dispuesto en la considerativa 3.7, relativo a la exigencia
de la presentación del recibo por honorarios profesionales. Asimismo, invocaron al
Juez tener en cuenta las recomendaciones realizadas en el fundamento 4 y 5 de la
presente resolución. LA CONFIRMARON en lo demás que contiene; y, los
devolvieron al Primer Juzgado de Trabajo de Ascope. PONENTE: CASTILLO
LEÓN.-

S.S.
CASTILLO LEÓN.
REYES GUERRA.
PERALTA GARCÍA.

Vous aimerez peut-être aussi