El segundo principio básico de la Naturaleza establece que la tierra es un sistema
viviente, construido por dos subsistemas: subsistema físico y subsistema biológico. 1.2.1 Subsistema físico
El subsistema físico esta integrado por la atmosfera (aire), la hidrosfera (agua) y la
litosfera (suelo). La atmosfera es una cubierta protectora de la Tierra, sin ella la temperatura terrestre alcanzaría mas de 75 °C durante el día y 130 °C bajo cero durante la noche. La atmosfera protege la superficie de la Tierra de la radiación solar de alta energía (ultravioleta, rayos gamma y rayos X), que es dañina para los seres vivos. La atmosfera actúa como una cubierta térmica, que se asemeja a un invernadero. La hidrosfera es el agua en estado liquido que cubre la Tierra esta integrada por los mares, océanos, lagos, ríos y otros cuerpos de agua superficiales y subterráneos, además de agua en estado solido o congelada en los casquetes polares, los glaciales y el agua en estado gaseoso o vapor, gotas de lluvia y cristales de hielo presentes en la atmosfera. El agua es importante porque es un elemento esencial para la vida y constituyentes de los seres vivos. Otro factor importante de la hidrosfera son las corrientes oceánicas, que contribuyen en la determinación del clima.
La litosfera es la porción solida de la corteza terrestre, esta formada por una
compleja muestra de materiales inorgánicos (arena, limo y arcilla, aire y agua) y materia orgánica. El suelo es el sustrato sobre el que se desarrollan la mayoría de los organismos que viven sobre o dentro de la litosfera, es el hogar de billones de macroorganismos, a igual que de microorganismos. El suelo es uno de los cuatro recursos naturales mas preciados ya que integra todas las otras partes del ecosistema. 1.2.2 Subsistema biológico
El subsistema biológico esta integrado por los organismos productores,
consumidores (primarios, secundarios y terciarios) y desintegradores. En este subsistema se encuentran los materiales y sustancias orgánicas y ocurren las interrelaciones bióticas entre organismos.
Las interacciones y procesos abióticos-bióticos que ocurren entre los dos
subsistemas constituyen un sistema ecológico llamado biosfera. En la biosfera, los seres vivos autorregulan estas interacciones e intercambios (de energía y materia) y se caracterizan por ser complejas, de amplia escala temporal y amplia distribución espacial. Los intercambios de sustancias químicas en la biosfera ocurren vía ciclos, llamados ciclos biogeoquímicos, los cuales se caracterizan por presentar dos fases: la fase ambiental, donde el elemento químico está en forma inorgánica en el suelo, agua y aire; y la fase orgánica, donde el elemento forma parte de los seres vivos (plantas y animales)