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ALBACEAS

Nombramiento de albacea: El testador puede encomendar a una o varias personas,


a quienes se denomina albaceas o ejecutores testamentarios, el cumplimiento de sus disposiciones de
última voluntad.
Formalidad del nombramiento
El nombramiento de albacea debe constar en testamento.
Pluralidad de albaceas
Cuando hay varios albaceas testamentarios nombrados para que ejerzan el cargo conjuntamente, vale lo
que todos hagan o lo que haga uno de ellos autorizado por los demas. En caso de desacuerdo vale lo que
decide la mayoría.
Ejercicio concurrente o sucesivo del albacea
Si el testador no dispone que los albaceas actuen conjuntamente, ni les atribuye funciones especificas a
cada uno de ellos, desempeñaran el cargo sucesivamente, unos a falta de otros, en el orden en que se
les ha designado.
Albaceazgo por personas juridicas
Pueden ser albaceas las personas juridicas autorizadas por ley o por su estatuto.
Excusa y renuncia del albacea
El albacea puede excusarse de aceptar el cargo, pero si lo hubiera aceptado, no podra renunciarlo sino
por justa causa, a juicio del juez.
Plazo para aceptacion del cargo
Mientras el albacea no acepte el cargo o no se excuse, el juez al que corresponda conocer de la
sucesion, a solicitud de parte interesada, le señalara un plazo prudencial para la aceptacion, transcurrido
el cual se tendra por rehusado.
Obligaciones del albacea
Son obligaciones del albacea:
1.- Atender a la inhumacion del cadaver del testador o a su incineracion si este lo hubiera dispuesto asi.
2.- Ejercitar las acciones judiciales y extrajudiciales para la seguridad de los bienes hereditarios.
3.- Hacer inventario judicial de los bienes que constituyen la herencia, con citacion de los herederos,
legatarios y acreedores de quienes tenga conocimiento.
4.- Administrar los bienes de la herencia que no hayan sido adjudicados por el testador, hasta que sean
entregados a los herederos o legatarios, salvo disposición diversa del testador.
5. Pagar las deudas y cargas de la herencia, con conocimiento de los herederos.
6.- Pagar o entregar los legados.
7.- Vender los bienes hereditarios con autorizacion expresa del testador, o de los herederos, o del juez, en
cuanto sea indispensable para pagar las deudas de la herencia y los legados.
8.- Procurar la division y particion de la herencia.
9.- Cumplir los encargos especiales del testador.
10.- Sostener la validez del testamento en el juicio de impugnación que se promueva, sin perjuicio del
apersonamiento que, en tal caso, corresponde a los herederos.
Carácter personal del cargo
El albaceazgo es indelegable; pero pueden ejercerse en casos justificados algunas funciones mediante
representantes, bajo las órdenes y responsabilidad del albacea.
Albacea dativo
Si el testador no hubiera designado albacea o si el nombrado no puede o no quiere desempeñar el cargo,
sus atribuciones seran ejercidas por los herederos, y si no estan de acuerdo, deberan pedir al juez el
nombramiento de albacea dativo.
Remuneracion del albacea
El cargo de albacea es remunerado, salvo que el testador disponga su gratuidad.
La remuneracion no sera mayor del cuatro por ciento de la masa liquida.
En defecto de la determinacion de la remuneracion por el testador, lo hara el juez, quien tambien señalara
la del albacea dativo.
Rendición de cuenta del albacea
Aunque el testador le hubiera eximido de este deber, dentro de los sesenta dias de terminado el
albaceazgo, el albacea debe presentar a los sucesores un informe escrito de su gestión
Tambien cumplira este deber durante el ejercicio del cargo, con frecuencia no inferior a seis meses,
cuando lo ordene el Juez Civil a pedido de cualquier sucesor.
El informe y las cuentas se entienden aprobados si dentro del plazo de caducidad de sesenta dias de
presentados no se solicita judicialmente su desaprobacion, como proceso de conocimiento.
Remocion del albacea
Puede solicitarse, como proceso sumarísimo, la remocion del albacea que no ha empezado la faccion
de inventarios dentro de los noventa dias de la muerte del testador, o de protocolizado el testamento, o de
su nombramiento judicial, lo que corresponda, o dentro de los treinta dias de haber sido requerido
notarialmente con tal objeto por los sucesores.
Cese del cargo del albacea
El cargo de albacea termina:
1.- Por haber transcurrido dos años desde su aceptación, salvo el mayor plazo que señale el testador, o
que conceda el juez con acuerdo de la mayoria de los herederos.
2.- Por haber concluido sus funciones.
3.- Por renuncia con aprobacion judicial.
4.- Por incapacidad legal o fisica que impida el desempeño de la funcion.
5.- Por remocion judicial, a peticion de parte debidamente fundamentada.
6.- Por muerte, desaparicion o declaracion de ausencia.
Obligacion de albacea de cumplir con la voluntad del testador
El albacea está facultado durante el ejercicio de su cargo y en cualquier tiempo después de haberlo
ejercido, para exigir que se cumpla la voluntad del testador. Carece de esta facultad el que ceso por
renuncia o por haber sido rem

La palabra Albacea deriva del término árabe ALWACI que significa ejecutor, ejecutante.

DEFINICIÓN.-

Para el maestro Enrique Holgado Valer, el albacea es la persona encargada de hacer


cumplir en todo o en parte las disposiciones testamentarias sean en cuanto a la
distribución del patrimonio hereditario, al reconocimiento de un derecho o de una
obligación para que surtan sus efectos después del fallecimiento del testador

Según el ponente del libro IV Rómulo Lanatta, el albacea es la persona o personas


encargadas de hacer cumplir las disposiciones de última voluntad del testador.

Nuestro código civil define al albacea en su art. 778 de cuyo tenor se desprende que
recoge la definición doctrinaria de Rómulo Lanatta.

De lo expuesto tenemos que el albacea es la persona natural o jurídica nombrada por el


testador por los herederos o por el juez, encargado de hacer cumplir las disposiciones de
última voluntad del causante contenidas en el testamento

El albacea es pues el ejecutor del Testamento.

NATURALEZA JURÍDICA

Entorno a este tema existe diversa posición en la doctrina:

1- Así tenemos que un sector considera que la Naturaleza Jurídica del albacea es la de
ser un representante, según el jurista Stolfi, tal representación es del testador;
para Aubry Et Rau esa representación es de los herederos; y para Zachariase, la
representación de la herencia.

2- Por su parte el jurista argentino Dalmacio Vélez Sarsfield considera que la


naturaleza jurídica del albacea es la de ser un mandatario.

3- Para Guillermo Cabanellas, la Naturaleza Jurídica del albacea es la de que esta


persona desempeña un oficio.
4- La doctrina contemporánea es de opinión que la Naturaleza Jurídica del Albacea es la
de personificar a una institución llamada Alabaceato. Es pues a través del albacea que la
institución del albaceato, desempeñe la función del ejecutor testamentario.

CARACTERES

Singularizan a la albacea las notas peculiares siguientes:

1- El Albacea ejerce el cargo en Forma Voluntaria por que así que haya sido nombrado
por el testador, por los herederos o por el juez, puede o no aceptar el cargo. No está
obligado a asumir las funciones de Albacea.

2- Sin embargo, una vez que es aceptado el cargo, el albacea no puede renunciarlo.

3- El ejercicio del cargo de albacea es de orden personal y por lo tanto es indelegable.


Empero algunas de sus funciones puede ser ejercidos por otras personas mediante la
institución de la Apoderantía. En efecto, el albacea puede nombrar apoderados para un
concreto acto jurídico o negocio jurídico.

4- El albacea percibe una remuneración de conformidad con lo previsto por el art. 793
del C.C. Tal remuneración no funcionará siempre y cuando el albacea sea un coheredero.

5- El ejercicio del cargo de albacea es temporal porque lo desempeña hasta que se


hayan cumplido las disposiciones testamentarias.

CAPACIDAD PARA SER ALBACEA

La Persona Natural que ejerza el cargo de albacea tiene que gozar de plena capacidad
(goce y ejercicio).

Según nuestro ordenamiento civil, el albacea puede ser:

1- Por el Origen de su Nombramiento:

a- Albacea Testamentario.- Cuando es nombrado por el causante en el testamento


conforme es de verse en el art. 779 del C.C.

b- Albacea Legal.- Que es aquel nombrado por los herederso según lo previsto por el
art. 792.

c- Albacea Dativa.- Que es aquel nombrado por el juez según el mismo art. 792.

2- Por su Función:

a- Universal o General.- Cuando está designado para ejecutar una parte del
Testamento o determinadas funciones que le ha encomendado el testador.
b- Albacea Particular o Especial.- cuando esta designado para ejecutar una parte del
testamento o determinada función que le ha encomendado el testador.

3- Por su número:

a- Singular.- Cuando el albaceazgo lo ejerce una sola persona natural o jurídica.

b- Plural.- Cuando esa función es ejercido pro varias personas, el albacea plural a su
vez puede ser:

v Albacea mancomunada: Cuando la función la ejerce en forma conjunta pero


respondiendo cada albacea por la parte ejecutada.

v Albacea Solidaria: Cuando todos los que ejercen el albaceazgo responden


solidariamente.

OBLIGACIONES DEL ALBACEA:

Señalados en el Art. 787 del C.C.

RESPONSABILIDAD DEL ALBACEA:

El albacea puede incurrir en ilícitos Administrativos, civiles y/o penales en el ejercicio de su


función por lo tanto puede incurrir en responsabilidad Administrativa, Civil y/o Penal
particularmente puede incurrir e responsabilidad en torno al tema de rendición de cuentas
regulado por el Art. 794.

FENECIMIENTO DEL CARGO:

Termina con el presupuesto que contiene el Art. 796 del C.C.

EXP. N.° 837-98-AA/TC

LIMA

MANUEL ALBERTO PAREDES PAREDES Y

OTRA

SENTENCIA DEL TRIBUNAL CONSTITUCIONAL


En Lima, a los veinte días del mes de agosto de mil novecientos noventa y
nueve, reunido el Tribunal Constitucional en sesión de Pleno Jurisdiccional, con
asistencia de los señores Magistrados: Acosta Sánchez, Presidente; Díaz Valverde,
Vicepresidente; Nugent y García Marcelo, pronuncia sentencia:

ASUNTO:

Recurso Extraordinario interpuesto por don Manuel Alberto Paredes Paredes y otra
contra la Resolución de la Sala Corporativa Transitoria Especializada en Derecho Público de la
Corte Superior de Justicia de Lima, de fojas quinientos treinta y dos, su fecha diez de agosto de
mil novecientos noventa y ocho, que revocando la apelada declaró improcedente la Acción de
Amparo.

ANTECEDENTES:

Don Manuel Alberto Paredes Paredes y doña Blanca Rosa Paredes Córdova, con fecha
diecisiete de marzo de mil novecientos noventa y ocho, interponen demanda de Acción de
Amparo contra don Eduardo Eloy Anduaga Muñoz y don Segundo Ruiz Aguilar, para que se
suspendan las funciones y la gestión administrativa del Directorio de la Sociedad Anónima
Comercial Industrial Peruana-SACIP el mismo que está conformado por los demandados.
Refieren que: a) Entre otras personas, han sido instituidos herederos de su padre don Mario
Dionicio Paredes Cueva, por testamento otorgado mediante Escritura Pública ante la Notaria
doña Ana María Vidal Hermoza, inscrito en la Ficha N.º 24729 del Registro de Testamentos de
los Registros Públicos de Lima; b) En el mencionado instrumento público se nombró como
albacea a su cónyuge, doña Nora Luz Ruiz Aguilar, la cual en la Junta General de Accionistas del
nueve de octubre de mil novecientos noventa y siete, actuando como ejecutora testamentaria,
procedió al nombramiento del siguiente Directorio de SACIP: doña Nora Luz Ruiz Aguilar,
Presidenta del Directorio; don Eduardo Eloy Anduaga Muñoz, Director, y don Segundo
Gregorio Ruiz Aguilar, Director, ejerciendo la primera el cargo de Gerente General; c) Con
fecha tres de enero de mil novecientos noventa y ocho, la ejecutora testamentaria, Presidenta
del Directorio Gerente General de SACIP, falleció en la ciudad de Lima, no habiendo
actualmente quien ejerza la administración de los bienes de la herencia indivisa
correspondiente a la sucesión testamentaria de don Mario Dionicio Paredes Cueva; d) La
empresa Sociedad Anónima Comercial Industrial Peruana-SACIP se encuentra actualmente sin
gerente y sin Presidente del Directorio, administrada por los demandados, quienes no vienen
ejerciéndola con diligencia, responsabilidad, transparencia debida, sino ejerciendo actos que
de manera evidente atentan contra sus derechos e intereses patrimoniales y sucesorios; e) La
actual administración de SACIP ha dejado de cumplir con las obligaciones tributarias, con las
obligaciones a favor de terceros; f) Encontrándose el porcentaje de acciones que les
corresponde indiviso, no pueden reunirse en Junta General de Accionistas a afectos de
nombrar un Directorio y Gerente General; y g) Ante la falta de un administrador judicial, no se
puede ejercer la administración del porcentaje de acciones; además, manifiestan que
interponen la presente acción de garantía a fin de salvaguardar sus derechos constitucionales
a la propiedad y a la herencia.

Los demandados contestan la demanda solicitando que ésta sea declarada infundada,
por cuanto: a) No han incurrido en ningún acto que produzca la inminente amenaza de agravio
o violación de los derechos constitucionales que los demandantes mencionan en su demanda,
por lo tanto, no existe razón alguna para que se les suspenda en las funciones y la gestión
administrativa de directores de acuerdo con la ley y el Estatuto de SACIP; b) Fueron
nombrados directores de la empresa mencionada en la Junta General Extraordinaria de
Accionistas del nueve de octubre de mil novecientos noventa y siete, de conformidad con lo
establecido en los artículos 24º y 26º del Estatuto Social; c) Habiéndose producido la vacancia
de uno de los directores por fallecimiento, de conformidad con lo establecido en al artículo
157º de la Ley General de Sociedades, procedieron a elegir al reemplazante para completar su
número; y, por último, d) SACIP está cumpliendo con el pago de sus obligaciones tributarias, de
servicios y, en general, otras obligaciones con terceros.

El Juez del Primer Juzgado Corporativo Transitorio Especializado en Derecho Público, a


fojas doscientos sesenta y cinco, con fecha tres de abril de mil novecientos noventa y ocho,
declaró fundada la demanda, por considerar que: a) Carece de amparo legal que los directores
demandados hayan procedido a designar a una persona reemplazante de la albacea fallecida,
doña Nora Luz Ruiz Aguilar, porque mientras la herencia permanezca indivisa, los únicos que
pueden administrarla son la albacea o, en su defecto, por un apoderado común o por un
administrador judicial, habiéndose incurrido en la comisión de actos que lesiona el derecho de
propiedad y de herencia de los demandantes.

La Sala Corporativa Transitoria Especializada en Derecho Público de la


Corte Superior de Justicia de Lima, a fojas quinientos treinta y dos, con fecha
diez de agosto de mil novecientos noventa y ocho, revocó la apelada que
declaró fundada la demanda; reformándola la declaró improcedente, por
considerar que: a) La presente acción de garantía carece de sustento, ya que
por tratarse de una relación sucesoria en estado de indivisión, ésta se rige de
acuerdo con el régimen de la copropiedad, y b) No debe confundirse la
Sucesión del extinto don Mario Dionicio Paredes Cueva con la Sociedad
Anónima Comercial Industrial Peruana SACIP, en la cual los demandados han
sido elegidos conforme a los Estatutos Sociales. Contra esta resolución, los
demandantes interponen Recurso Extraordinario.

FUNDAMENTOS:
1. Que los demandantes, mediante la presente acción de garantía, pretenden la suspensión
de las funciones y gestión administrativa del Directorio de la Sociedad Anónima Comercial
Industrial Peruana-SACIP, fundándola en cuestiones de naturaleza testamentaria y de
administración de una sucesión indivisa.

2. Que las cuestiones en materia testamentaria han sido sometidas por los demandantes
para su dilucidación ante el órgano jurisdiccional, tal como lo acreditan los documentos de
fojas doscientos veintiocho, doscientos veintinueve, doscientos treinta, doscientos treinta
y dos, doscientos treinta y tres, doscientos treinta y cuatro, trescientos setenta,
trescientos setenta y uno, trescientos setenta y dos y trescientos setenta y tres, solicitando
la designación de un Administrador Judicial de las acciones de su causante ante el
Cuadragésimo Sétimo Juzgado Civil de Lima, Expediente N.º 48522-1997. Así como
también lo prueban los documentos de fojas cuatrocientos setenta y uno a cuatrocientos
ochenta de autos, mediante los cuales los demandante y otros formulan contradicción
contra la solicitud de Administración Judicial de Bienes interpuesto por don Giovanni
Mario Paredes Ruiz y otros ante el Vigésimo Cuarto Juzgado Civil de Lima, Expediente N.º
10173-97. En tal virtud, habiendo ejercido los demandantes las acciones que le franquean
la norma sustantiva y adjetiva para el nombramiento del Administrador Judicial en
reemplazo de la albacea testamentaria, es decir, para que éste represente y administre los
bienes de la sucesión indivisa de don Mario Dionicio Paredes Cueva, que, entre otros,
incluye las acciones de su extinto padre en la Sociedad Anónima Comercial Industrial
Peruana-SACIP, no se acredita que los demandados hayan violado sus derechos de
propiedad materia de su pretensión.

3. Que el hecho controversial que sustenta la pretensión de los demandantes surge a partir
del fallecimiento de doña Nora Luz Ruiz Aguilar, nombrada albacea por el extinto don
Mario Dionicio Paredes Cueva mediante Escritura Pública de Testamento del veinticuatro
de julio de mil novecientos noventa y siete, otorgada ante la notaria doña Ana María Vidal
Hermoza, la cual estando en vida, ejerciendo su nombramiento y, por ende, el de
Presidenta del Directorio de la Sociedad Anónima Comercial Industrial Peruana-SACIP,
convoca a Junta General Extraordinaria de Accionistas para designar a los nuevos
directores de la sociedad.

4. Que la Junta General Extraordinaria de Accionistas del nueve de octubre de mil


novecientos noventa y siete, conforme es de advertirse del documento de fojas ochenta y
nueve a noventa y dos de autos, se celebró a solicitud de quien estuvo autorizado para
hacerlo, habiendo sido válidamente convocada, en estricta observancia de los artículos 16º
y 17º del Estatuto de la empresa mencionada en el fundamento que precede.
Consecuentemente, la designación de los directores efectuada en la mencionada junta se
hizo de acuerdo con el mencionado estatuto y la ley.
5. Que, siendo esto así, a tal Directorio –prescindiendo de todo asunto en materia sucesoria–
, como órgano colegiado elegido por la junta general, le corresponde la administración de
la sociedad, conforme lo establecen los artículos 152º y 153º de la Ley N.º 26887 (Ley
General de Sociedades).

6. Que la mala gestión y administración de los demandados, las irregularidades, los daños
que ocurran en la sociedad y los daños que se originan tanto en el campo civil como penal,
expuestos por los demandantes contra los miembros del directorio, tanto en su demanda
como en los recursos y diversos escritos presentados en autos, en caso de ser ciertos,
éstos originan la responsabilidad de los directores en la forma que lo establecen los
artículos 177º, 179º y 180º de la Ley General de Sociedades, la misma que, de ser el caso,
debe ser dilucidada ante el órgano jurisdiccional y no por el Tribunal Constitucional.

7. Que, no habiendo acreditado los demandantes en autos que se haya violado o amenazado
ninguno de los derechos constitucionales materia de sus pretensiones, no es de aplicación
al presente caso los artículos 1º y 2º de la Ley N.º 23506 (Ley de Hábeas Corpus y
Amparo).

Por estos fundamentos, el Tribunal Constitucional, en uso de las


atribuciones que le confieren la Constitución Política del Estado y su Ley
Orgánica;

FALLA:

CONFIRMANDO la Resolución de la Sala Corporativa Transitoria Especializada en Derecho


Público de la Corte Superior de Justicia de Lima, de fojas quinientos treinta y dos, su fecha diez
de agosto de mil novecientos noventa y ocho, que revocando la apelada,
declaró IMPROCEDENTE la Acción de Amparo. Dispone la notificación a las partes, su
publicación en el diario oficial El Peruano y la devolución de los actuados.

SS.

ACOSTA SÁNCHEZ

DÍAZ VALVERDE

NUGENT
GARCÍA MARCELO

Por Gilberto Mendoza del Maestro, abogado y docente de Derecho Civil


de la Pontificia Universidad Católica del Perú.

Las personas naturales pueden disponer de parte o todo su patrimonio


en vida, así como pueden dejar establecido como se van a disponer de
sus bienes luego de su fallecimiento a través del testamento[1].

Entonces, vía testamento puede encargarse al albacea o albaceas[2],


siendo éstos personas naturales o jurídicas[3], el cumplimiento de las
disposiciones de la última voluntad.

Vamos a comentar brevemente cuáles son las facultades que tienen los
albaceas y su inscripción en el registro, entre otras cosas.

¿QUÉ PUEDE HACER EL ALBACEA?

El albacea es la persona designada por el testador para ejecutar las


disposiciones testamentarias bastando su sola intervención en los actos
destinados a dar cumplimiento al testamento[4][5], por ejemplo la
formalización del reglamento interno, independización del predio,
formalizar la transferencia de propiedad hecha por el testador en
vida,[6] entre otros.[7]

Así pues, sobre el último caso y en segunda instancia, el Tribunal


Registral se ha pronunciado en el siguiente sentido:

FORMALIZACIÓN DE LA TRANSFERENCIA CON POSTERIORIDAD AL


FALLECIMIENTO DEL ADQUIRENTE. La regla general será que la
transferencia deberá ser formalizada por todos los sucesores, pues en
principio los derechos y obligaciones del causante se transmiten a todos
los sucesores en la proporción que corresponde a cada uno. Sin
embargo, en el caso de sucesión testamentaria debe tenerse en cuenta
que el testador puede encargar, en su testamento, la formalización de la
transferencia al albacea o a uno o más sucesores, caso en el que
únicamente se requeriría de la participación de éstos.[8]

No obstante lo antes mencionado, en sede registral también se ha


indicado que:

“El albacea testamentario cuenta únicamente con facultades de


administración, salvo que el testador le hubiese autorizado
expresamente para el ejercicio de facultades dispositivas.”[9]

Los albaceas particulares sólo están facultados[10] para cumplir los


encargos determinados en el testamento por el causante[11], siendo
que si no ha sido determinado específicamente el encargo no puede
arrogarse dicha calidad a persona distinta.[12]Ejemplo de esto es
cuando se faculta expresamente al albacea la transferencia de un bien.
No puede realizarse la transferencia por la sucesión testamentaria dado
que será objeto de denegatoria de inscripción.[13]

El encargo debe cumplirse tal cual lo ha indicado el testador, no


pudiéndose contravenir éste. Por ejemplo, no puede acceder al Registro
el contrato de arrendamiento de bien inmueble otorgado por albacea
testamentario cuando dicho bien ha sido adjudicado por el testador.[14]

En principio, el encargo del albacea es indelegable[15]; solo en


casos justificados puede encargarse a terceros, lo cual queda librado al
libre arbitrio del albacea, siendo éste responsable por la naturaleza del
caso y la conveniencia de la delegación. Debe indicarse que este acto no
corresponde ser calificado por el Registro.[16]

Debe tenerse en cuenta que mientras el albacea no acepte el cargo o no


se excuse, el juez al que corresponda conocer de la sucesión, a solicitud
de parte interesada, le señalará un plazo prudencial para la aceptación,
transcurrido el cual se tendrá por rehusado.[17] Debe tenerse en cuenta
que el albacea puede excusarse de aceptar el cargo, pero si lo hubiera
aceptado, no podrá renunciarlo sino por justa causa, a juicio del
juez.[18]

En caso que no se haya designado albacea, tomando en cuenta el


artículo 792[19] del Código Civil, sus atribuciones serán ejercidas por
sus herederos, pudiendo incluso enajenar bienes.[20]

OBLIGACIONES DE LA ALBACEA

El Código Civil en su Art. 787 dispone como obligaciones del albacea


atender a la inhumación del cadáver del testador o a su incineración si
éste lo hubiera dispuesto así.

Inicialmente la inhumación y los temas análogos serán vistos por el


cónyuge del difunto, sus descendientes, ascendientes o hermanos, de
manera excluyente, salvo que se le haya facultado de forma
expresa.[21]

Asimismo, puede ejercitar las acciones judiciales y extrajudiciales para la


seguridad de los bienes hereditarios; hacer inventario judicial[22] de los
bienes que constituyen la herencia, con citación de los herederos,
legatarios y acreedores de quienes tenga conocimiento.

De igual forma, administrar los bienes de la herencia que no hayan sido


adjudicados por el testador, hasta que sean entregados a los herederos
o legatarios, salvo disposición diversa del testador; pagar las deudas y
cargas de la herencia, con conocimiento de los herederos; pagar o
entregar los legados; vender los bienes hereditarios con autorización
expresa del testador, o de los herederos, o del juez, en cuanto sea
indispensable para pagar las deudas de la herencia y los legados.

Finalmente, procurar la división y partición de la herencia, cumplir los


encargos especiales del testador; sostener la validez del testamento en
el juicio de impugnación que se promueva, sin perjuicio del
apersonamiento que, en tal caso, corresponde a los herederos.
ACTO INSCRIBIBLE

Actualmente dentro del Reglamento de Inscripciones de los Registros de


Testamentos y de Sucesiones Intestadas, aprobado mediante Resolución
N° 156-2012-SUNARP/SN en el artículo 8, literal d) se puede inscribir el
nombramiento del albacea, así como sus facultades.

Este artículo recogió lo dispuesto por el presente de observancia


obligatoria I.9.-EXCUSA, RENUNCIA Y REMOCIÓN DEL CARGO DE
ALBACEA

“La excusa de aceptación del cargo de albacea, así como la renuncia y


remoción judicial de dicho cargo, si bien no se encuentran previstos
como actos de inscripción obligatoria, nada obsta para que puedan ser
inscritos en el Registro de Testamentos, en tanto este registro también
busca otorgar seguridad a quienes contraten con los que aparezcan
inscritos como albaceas”.[23]

El caso que lo sustentó fue el Nº 622-2001-ORLC/TR en el cual se


solicitó la inscripción de la excusa de aceptación de cargo de albacea que
otorga don Enrique Guillermo Marcelo Ferrando Corpancho mediante
Escritura Pública de fecha 31 octubre del 2001 extendido ante el Notario
Público Abraham Velarde Álvarez.

Se dispuso en este caso la tacha sustantiva en los siguientes términos:

“(…) Se tacha el presente título por cuanto la excusa del cargo de


Albacea no es un acto inscribible en este Registro de Testamentos, de
conformidad con el Art. 2039 del Código Civil y el Art. 1 del Reglamento
del Registro de Testamentos. Cabe señalar que el Registro de
Testamentos es un Registro organizado en base al folio personal,
conforme al Art. IV del Título Preliminar del Reglamento General de los
Registros Públicos, esto es que “se abrirá una partida por cada persona
natural, en la cual se extenderán los diversos actos inscribibles”. Siendo
que los actos materia de inscripción sólo pueden estar referidos a la
persona del testador, por tanto no es inscribible el presente acto.”

La Sala concluyó que la excusa de aceptación de cargo de albacea, así


como la renuncia y remoción judicial de éste, si bien no se encuentran
previstos como actos de inscripción obligatoria, nada obsta que puedan
ser inscritos en el Registro de Testamentos, en tanto este registro
también busca otorgar seguridad a quienes contraten con los que
aparezcan inscritos como albaceas.

En aplicación al caso concreto, procede la inscripción del título apelado,


toda vez que don Enrique Guillermo Marcelo Ferrando Corpancho, –
quien aparece inscrito en la partida electrónica Nº 11172105 como
albacea titular de la sucesión Testamentaria del causante Pedro Ferrando
Corpancho -, formula excusa de aceptar el cargo de conformidad con lo
previsto en el Artículo 785 del Código Civil, mediante escritura pública de
fecha 31 octubre del 2001 extendido ante el Notario Público Abraham
Velarde Alvarez, documento que además cumple con el principio de
titulación autentica previsto 2010 del Código Civil. Se revocó la
observación y se dispuso la inscripción del título.

EXTINCIÓN

Finalmente, el cargo de albacea termina por: haber transcurrido dos


años desde su aceptación (salvo el mayor plazo que señale el testador, o
que conceda el juez con acuerdo de la mayoría de los herederos), por
haber concluido sus funciones, o por renuncia con aprobación judicial.

Así también, por incapacidad legal o física que impida el desempeño de


la función; por remoción judicial, a petición de parte debidamente
fundamentada; por muerte, desaparición o declaración de ausencia.

Debe tenerse en cuenta que en caso de traslado de las inscripciones


sobre remoción de albacea obrantes en el Registro de Testamentos, es
improcedente el traslado al Registro de Predios.[24]

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