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Introducción a

la Teoría del
Delito

Yasna Rodríguez Rivas

Prof. Martín Besio

Segundo Semestre 2017

1
Concepto y características 1
Carácter Público

Carácter Subsidiario o
Concepto secundario
Características
Derecho Penal
Carácter Frangmentario

Carácter personalísimo

El derecho penal es “un conjunto de normas que regulan la potestad punitiva del Estado, asociado a
ciertos hechos, estrictamente determinados por la ley, como presupuesto, una pena o una medida de
seguridad o corrección como consecuencia, con el objetivo de asegurar el respeto por los valores
elementales sobre los cuales descansa la convivencia humana pacífica”.

Se caracteriza primordialmente porque sus consecuencias constituyen las formas de reacción más
severas con las que cuenta el Estado. Es por esta razón que el derecho penal debe ser empleado como
recurso de última ratio.

Debemos tener en cuenta que el derecho penal no siempre supone la existencia de un delito en sentido
estricto, a qué nos referimos con esto, es que por ejemplo, tenemos una persona que cometió un delito
pero no es imputable, en este caso se emplean las llamadas “medidas de seguridad y corrección” que se
imponen usualmente como consecuencia de la ejecución de un delito que no conlleva por algún motivo
que iremos evaluando a la atribución de una pena. Debe quedarnos claro si, que tanto las penas como
las medidas de seguridad y corrección tienen por objeto asegurar el respeto por los valores elementales
sobre los que descansa la convivencia humana.

Ahora bien, debemos saber cómo actúan estas penas, quién las dicta o dentro de qué esfera se
desarrollan, para eso debemos distinguir primeramente entonces entre, derecho penal subjetivo y
derecho penal objetivo

El Derecho penal subjetivo (ius puniendi) consiste en la facultad del Estado de prohibir o mandar
ciertos hechos bajo la amenaza de sancionar la transgresión una pena. Este es el derecho del estado de
crear y aplicar el derecho objetivo.

El Derecho penal objetivo (Ius poenalis) consiste en la manifestación del derecho penal subjetivo en
el derecho positivo2

Ya pasando a un lado de lo que se entiende por derecho penal y sus principales rasgos, debemos atender
a las características fundamentales del Derecho Penal, que son, su carácter público, subsidiario,
fragmentario y personalísimo.

El carácter público del DP se puede entender en dos sentidos, el primero se relaciona con quién tiene la
facultad de consagrar el carácter delictivo de una conducta y establecer la pena aplicable a quien la

1 Para entender la información de cada materia, debajo de cada mapa conceptual se irá explicando esquemáticamente los
conceptos y análisis de la materia. Mayoritariamente textos.
Primero el esquema y luego la explicación.
2 Hasta culpabilidad nos desenvolveremos dentro del derecho penal objetivo.

2
ejecuta, que sería el poder legislativo –el legislador (un órgano público)3. El otro sentido seria en miras
de quién ejecuta o realiza el cumplimiento del derecho penal en el caso concreto, que sería el poder
judicial (órgano público).

La segunda característica del derecho penal es el carácter subsidiario o secundario, esto quiere decir
que la pena (de los delitos) solo debe ser empleada cuando el ataque al bien jurídico no pueda
sancionarse de manera apropiada acudiendo a los medios de solución que disponen las otras ramas del
ordenamiento jurídico, ya que, como dijimos anteriormente, la pena es el mecanismo de control social
más violento del que puede servirse el Estado.

La idea con esta característica subsidiaria es que primero deben utilizarse los medios desprovistos de un
carácter de sanción, por ejemplo una política de concientización. Luego, cuando ya se ha llevado a cabo
esta medida, empleamos las sanciones no penales, estas son, las sanciones civiles, indemnizaciones, etc.
Entonces, solo cuando ninguna de las anteriores medidas ha sido suficiente para subsanar la afectación
al bien jurídico debemos recurrid al DP.

La tercera característica –el carácter fragmentario del DP– se refiere a que el DP no pretende abarcar a
todo el ordenamiento jurídico con sus sanciones sino solo a aquellas que constituyen ataques
intolerables en contra de bienes jurídicos cuya subsistencia en capital para la preservación de la
convivencia pacífico.

Y la última característica es el carácter personalísimo del derecho penal, este carácter puede también
ser entendido en dos sentidos, personalísimo en el sentido de que la pena o medida de seguridad y
corrección solo puede imponerse al que ha participado en el hecho punible sin afectar a terceros. Y en el
segundo sentido respecto al sujeto que ha participado en el hecho punible es quien debe sufrir los efectos
de la pena. No admite representación.

Hay una pregunta que debemos dejar clara respecto a si las personas jurídicas pueden ser sujetos
activos de un delito, para esta respuesta existen dos teorías, la primera es la teoría de la ficción que
indica que a las PJ no se les puede dirigir un reproche de culpabilidad porque los actos que realizan son
producto no de la personalidad jurídica sino de las personas que la administran. La otra teoría es la de
la personalidad colectiva real, que señala que la PJ posee capacidad para cometer culpablemente un
hecho injusto y por tanto ser imputable.

En chile conforme a la primera teoría solo puede hacerse efectiva la responsabilidad penal a aquellas
personas que hayan participado o intervenido en el hecho punible.

3Este sentido está estrechamente relacionado con el principio rector del derecho penal que veremos más adelante, el principio de
nullum crimen, nulla poena sine lege.

3
Fines de la Pena

Teoría de la Retribución

Teoría de la Prevención
Teorías especial

Teoría de la Prevención
Funciones del Derecho
general
Penal / Fines de la Pena

Teoría unificadora
retributiva
Otras teorías
Teoría unificadora
preventiva

Como uno de los supuestos principales del derecho penal es su subsidiaridad, y que solo protege una
parte de los bienes jurídicos junto con el libre desarrollo del individuo y el mantenimiento del orden
social, se disputan en este contexto tres interpretaciones al fin de la pena.

1. Teoría de la retribución: mediante la imposición de un mal merecido se retribuye, equilibra y


expía la culpabilidad del autor por el hecho cometido. La duración e intensidad de la pena que se emplea
en esta teoría, se corresponderá con la gravedad del delito que se compense.
Esta teoría desempeñó un papel muy importante hasta tiempos muy recientes, proporcionaba un
baremo para la magnitud de la pena, ya que, como sabemos, la pena pude ser proporcionalmente mayor
al delito cometido por lo que tener este baremo, limita al poder punitivo del estado. Pese a eso, en la
actualidad la creencia del ojo por ojo ya no puede ser sostenida porque la imposición de un mal no puede
reparar los daños a la sociedad.

2. Teoría de la prevención especial: Aquí la misión de la pena consiste únicamente en hacer


desistir al autor de futuros delitos, por lo que apunta a la prevención de la pena.
Esta prevención puede actuar de tres formas, asegurando a la comunidad a través del encierro de los
delincuentes; intimidando al autor mediante una pena o preservándolo de la reincidencia mediante su
corrección.
A lo que apunta esta teoría es la resocialización, se preguntaran por qué, porque el delincuente al ser
persona, es portador de derechos fundamentales entre ellos, el de incorporarse a la sociedad, por lo que
esta corriente doctrinaria se enfoca en esa resocialización en cuanto que el DP no solo se obliga a cuidar
del individuo y de la sociedad, sino también en ayudar al autor.
El problema está en que no proporciona un baremo para la pena, la duración se encontraría
indeterminada hasta que la persona se “resocialice”, “se eduque”, lo que puede ser o muy pronto o
después de mucho tiempo, lo que de forma más que obvia acarrea problemas.

3. Teoría de la prevención general: tiene como fin evitar que la comunidad cometa delitos, esto
mediante las amenazas penales y la ejecución de las penas, instruye a la comunidad sobre las

4
prohibiciones apartándola de su violación. Pero el gran problema es que no funcionará esta intimidación
con quienes cometen delitos a diarios, ellos no se sienten intimidados por las penas4.
Lo que si se rescata de esta teoría es que comúnmente busca conservar y mantener la confianza al
ordenamiento jurídico por parte de la comunidad.
La gran ventaja de esta teoría respecto a la preventivo-especial, es que aclara que dejar delitos sin
consecuencias para el autor de esta, incitan a la imitación por parte de la sociedad, por lo que la pena es
necesaria.
Sin embargo, y al igual que la preventivo-especial, no subsana la indeterminación de la duración de la
pena. Y como deficiencias propias de esta teoría tenemos que el mirar las penas con fines preventivos
atenta contra la dignidad humana (al usar al sujeto como medio para un fin) porque el castigo para el
autor solo se realiza por motivos sociales.

Frente a las carencias de estas teorías, aparecen las unificadoras; la unificadora retributiva y la
preventiva.
La teoría unificadora retributiva, incluye las tres que estudiamos recién, pero su unión no trae ninguna
solución a las carencias anteriores, ya que no las colma, solo las suma y nos conduce a un ir y venir
sinsentido entre los diferentes fines de la pena 5.

La teoría unificadora preventiva por su parte, establece que el fin de la pena solo puede ser
preventivo.
Previamente (y según lo que explica la te teoría) debemos entender que una pena que solo pretende
compensar los defectos de socialización del autor solo puede ser pedagógica y terapéuticamente eficaz
cuando se establece una relación de cooperación con el condenado, ya que, como es obvio, no se puede
forzar a este a resocializarse6
En cuanto a la duración de la pena, esta teoría indica en razón de la preventivo-especial, que la pena no
puede ser reducida hasta tal punto de que la sanción ya no se tome en serio; pues esto quebrantaría la
confianza en el ordenamiento jurídico y por ende estimularía la imitación del hecho. Por lo que esta
teoría unificadora se esmera en equilibrar ambas teorías preventivas concluyendo las siguientes
cuestiones.

Que la retribución no puede entrar en consideración ni siquiera como fin atendible junto a la
prevención, nos preguntamos entonces cómo se limitará la pena si hemos renunciado a la retribución; lo
que hace la teoría unificadora preventiva es prohibiendo que las penas reblasen la culpabilidad del
sujeto, este principio (el de culpabilidad) tiene una función liberal que como medio psicológico-social es
el más propicio para la restricción de la coerción; la magnitud de la pena sin embargo, puede incluso
quedar por debajo de la culpabilidad y eso es algo que debemos tener en cuenta.

El empleo de esta teoría y una de las cosas más rescatables es que elimina las objeciones que tenían las
teorías preventivas respecto a tratar a los sujetos como medios para un fin, atentando en contra de la
dignidad humana.

4 Para que se entienda, existe un principio que se desarrolla en ámbitos del derecho a la protesta, las movilizaciones, etc. En que
se intenta responder porque las personas infringen las normas, respondiendo a esto en que “si no tienes nada que perder, tampoco
tienes una razón para respetar la ley”
5 No tiene sentido hondar en ella, solo entender que intenta sumar todas las teorías y en vez de entregar una solución a sus

deficiencias, las junta todas en una misma teoría.


6 Hasta este punto la teoría mejora una de las carencias que tenían por si solas las teoría preventivas.

5
Principio de legalidad y las Fuentes del DP
Ley PREVIA

Principio rector: Principio de Ley ESCRITA


legalidad o reserva de ley

Ley ESTRICTA
Fuentes del
Fuentes Inmediatas
Derecho penal
Ley CIERTA

Fuentes Mediatas

Nullum crimen. Nulla poena sine lege.

Comenzamos del principio de reserva legal de que todas las decisiones fundamentales competen
exclusivamente a la ley. Por una parte no hay delito sin ley ni tampoco pena sin ley.

El principio de reserva legal tiene varios dignificados formuladas sistemáticamente en la siguiente


formula “Nullum crimen, nula poena sine lege PREVIA, SCRIPTA et STRICTA (no hay delito sin
ley previa, escrita, estricta y cierta7)

Previa implica una prohibición de irretroactividad; Escrita quiere decir de que solo puede ser fuente
del derecho penal una ley propiamente tal; Estricta implica una prohibición de analogía, de no recurrir
a normas que no estén contenidas en una ley formal; y Cierta en cuanto a su máxima determinación.

El ppio de legalidad se encuentra consagrado en los Arts. 6 y 7 CPR. En cuanto a que indica que
“ningún delito se castigará con una pena que la que señala una ley promulgada con anterioridad a la
perpetración de los hechos a menos que una nueva ley favorezca al afectado”

Ahora, para atender a la importancia de este principio debemos ahondar justamente en sus fuentes, es
decir, debemos responder a la pregunta de ¿Cómo cuidamos el cumplimiento de este principio?

LA LEY8 ES LA ÚNICA FUENTE INMEDIATA DEL DERECHO PENAL, nos referimos a aquella
que se formado con sujeción a las normas constitucionales sobre la materia. Es fuente incluso aunque no
revista el carácter penal de forma expresa.

NO SON LEYES EN SENTIDO ESTRICTO y por consiguiente no constituyen fuentes del derecho
penal: (1) Los DFL ni los DL.

No obstante, el derecho penal tiene fuentes mediatas, es decir, que pueden existir e incluirse actos
cuya jerarquía sea inferior a la ley pero igualmente válidos, esto ocurre cuando el precepto punitivo se
remite a ordenamientos cuya materia es susceptible de ser regulada en parte por decretos, ordenanzas o
incluso por la costumbre.

7 Lo de cierta se agregada por la doctrina, específicamente por Jescheck para otorgarle la máxima determinación a la ley.
8 Y que no hayan dudas al respecto

6
Ahora precisemos la Costumbre nunca puede ser fuente del DP en el sentido de fundamentar
una pena, puede servir de fundamento (al igual que un simple decreto o una ordenanza) pero no puede
fundamentar la pena.

Cuando se reconoce una fuente mediata, esta operará bajo límites por la riguridad que requiere el DP.
Hay que dejar en claro que ni la doctrina ni la jurisprudencia constituirán jamás ni una fuente mediata
ni inmediata del derecho penal, ni tampoco aquellas cláusula que establecen sanciones a
incumplimientos en los contratos (la cláusula penal enorme).

Dentro de este mismo ámbito de las fuentes, tenemos las leyes penales en blanco.

La ley penal en blanco es aquella que determina la sanción y la acción u omisión a la que bajo
determinados presupuestos se impondrá, pero abandona la precisión de estos últimos a una norma
distinta. Sin embargo, se exige que la ley en blanco determine en general, cuál será la acción u omisión
que en ciertas circunstancias especiales se castigará.

Se empleara solo (1) cuando el legislador advierta que la materia sobre la cual versan las prohibiciones
y mandatos puede experimentar cambios sucesivos. O (2) cuando se estima oportuno amenazar con la
misma pena una variedad de conductas9.

Se clasifican en leyes penales propias e impropias, las primeras son aquellas en que el complemento se
halla contenido en otra ley que emana de otra instancia legislativa; y las segundas refieren a aquellas
en que su complemento se encuentra en una ley distinta pero de igual jerarquía.

Cuando una ley penal remite la determinación de estos últimos a disposiciones situadas en otros
ámbitos del ordenamiento, introduce un cuerpo extraño a la estructura de derecho criminal que provoca,
necesariamente, dificultades a su organización y funcionamiento.

Las leyes penales en blanco impropias pueden ser a su vez con reenvío interno el complemento se
confía a otro artículo del mismo texto legal) o externo (la disposición complementaria se encuentra en
otra ley formal).

El problema está cuando se cuestiona el cumplimiento de este tipo de leyes con el principio de legalidad;
En efecto, la cuestión radica en decidir si estas normas satisfacen la exigencia de que las conductas
delictivas deben encontrarse descritas y las penas correspondientes establecidas en una ley penal
previa, escrita y estricta.

Para una parte de la literatura, el problema es más aparente que real, pues desde que la ley penal en
blanco se remite al precepto complementario, el contenido de este se incorpora al de aquella. Por
consiguiente, el ppio de nulla poena permanece a salvo pero, no podría compatibilizárselo con la
disposición del Art. 19 Nº3 inciso 8 de la Cº ya que, la nulla poena se formaliza de tal manera que cesa
de cumplir la función de garantía en la cual radica su fundamento. El problema se agudiza en que el
Art. 19 nº3 inciso 8 pareciera vedar la posibilidad de crear leyes penales en blanco; pero podemos
entender que el artículo enunciado no excluye la posibilidad de sancionar una ley en blanco, sino que
tan solo la limita.

Para evitar las dificultades la ley penal en blanco debe cumplir con:

1. La descripción de la conducta (acción u omisión) esencial prohibida por la ley y reenvío a norma
complementaria solo respecto de circunstancias accidentales. El núcleo central de lo prohibido debe
estar descrito en la ley, su complemento solo debe ser una especificación.
2. La ley es la que debe establecer la pena o sanción aplicable.

9 Única y exclusivamente en esos casos.

7
3. La publicidad, es decir, que el complemento debe publicarse bajo los mismos mecanismos que la ley a
la que complementa, en la práctica es la publicación en el diario oficial

Respecto a la integración de la Ley penal en blanco, debemos hacernos cargo de otra cuestión que
presupone una situación en la que no existe precepto expreso para resolver el conflicto, sin embargo,
aunque no haya criterio, el juez debe resolver con alguna norma “puesta” por sí mismo. En estas
situaciones lo que hace el juez es recurrir a los principios del derecho, aquellos que determinan la forma
de integrar una ley, como el espíritu general, la historia fidedigna, la equidad natural, etc.

La analogía justamente deriva del principio de equidad natural, esta echará mano al principio de
“donde existe la misma razón debe existir la misma disposición”; pero como es obvio, esta expresión
presenta inconvenientes con nuestra legislación respecto al principio de nulla poena.
El primero problema es respecto a la dificultad para distinguir entre lo que entendemos por analogía y
lo que se denomina interpretación extensiva; la primera es respecto a la aplicación de una ley penal a
un supuesto no comprendido dentro del sentido literal posible; y la segunda, refiere a la determinación
del sentido literal que admite el tenor literal de la ley.
Lo importante de esta distinción es frente a lo que se permite o no, ya que, en la práctica a
interpretación extensiva es siempre licita (en favor o en contra del imputado) y en cambio, la analogía
solo es lícita en favor del imputado (prohibida en su perjuicio) 10

Ahora bien –y en razón del Art. 19 Nº3 Inciso 7º y 8º CPR–, si se consagra la retroactividad de la ley
penal más favorable, entendemos que es una excepción al principio de reserva, y esto nos hace pensar
que se debe a que el legislador quiso hacerlo de esta manera; entonces aceptar la analogía bonam parten
coincide con los fundamentos más profundos del nulla poena. Si, como afirma Novoa el derecho penal
está encargado de proteger al individuo entonces parece lógico evitar que se sorprenda a este mediante
la imposición de una pena no prescrita en la ley.

Entendemos ahora que constituir agravantes por analogía viola el principio de legalidad; sin embargo,
justifica la inclusión de una clausula analógica en materia de atenuantes que considera indispensable
para evitar la rigidez ocasionada por una casuística inflexible.11

10 Entendemos con esto que la analogía es relativa, es decir, que será prohibida cuando perjudica al autor (analogía malam
partem) y es lícita cuando beneficia al autor (analogía bonam partem)
11 Y si entonces es lícita la analogía también lo será la aplicación de la equidad natural o el espíritu general de la ley cuando se

haga bonam partem.

8
Efectos de la ley penal en el tiempo 12

Por regla general como sabemos, la ley dispone solo para lo futuro y no puede tener jamás efecto
retroactivo consagrado no solo en el Art. 9 del CC sino también en el Art. º9 Nº3 inciso 7 CPR en cuanto
a las disposiciones penales y en el Art. 18 del código penal.

Sin embargo, existe una excepción al principio de irretroactividad de la ley cuando la que se dicta es
más favorable para el reo, consagrada en el mismo artículo 18 del CP; de acuerdo con este artículo en
sus incisos 2º, 3º y 4º”si después de cometido el delito y antes de que se pronuncie sentencia de termino,
se promulgare, otra ley que exima tal hecho de toda pena o que le aplique una menos rigurosa, deberá
arreglarse a ella su juzgamiento. Si la ley se promulga posterior a la sentencia esta solo podrá apelarse
aunque como es obvio esto último genera problemas”.

Todos entendemos a rasgos generales lo que implica que una ley sea más favorable, pero qué pasa
cuando esas leyes (la nueva y la que estaba juzgando al reo) son de distinta naturaleza, cómo
determinamos cuál es la “más favorable” si bien ña respuesta requiere de un análisis, es importante
para determinar esto, considerar la situación personal del afectado.

Una nueva ley es más favorable para el procesado no solo cuando suprime o disminuye directamente la
punibilidad del hecho por el que se lo juzga, sino también cuando consagra eximentes de
responsabilidad penal o atenuantes que lo benefician, cuando suprime agravantes que lo perjudicaban,
cuando reduce los plazos, etc.

Del Art. 18 CP extremos varias cosas –además de las anteriores– que solo se exige para la aplicación de
la ley más favorable, su promulgación; también se extrae la aplicación que tendrá la retroactividad, si se
aplicará a juicios pendientes, con sentencia de términos, ya ejecutados, etc. Según las modificaciones
que se le ha hecho a la normativa, entendemos que su campo de aplicación es amplísimo 13 que incluye
incluso caso en que a se ha pronunciado sentencia de termino.

Por esa misma amplitud está sujeto a algunas limitaciones, la primera es que no modificarán las
sentencias que tengan relación con indemnizaciones pagadas o cumplidas; ni tampoco modificará
inhabilidades.

Ahora debemos analizar la aplicación de los distintos tipos de leyes:

Ley intermedia, aquella que se ha promulgado después de ejecutado el acto y ha cesado antes de que
se pronuncie su sentencia de termino. ¿Cuál es su aplicación en la retroactividad? R: como el Art. 18 solo
exige que la ley haya sido promulgada, se entiende que esta ley temporal debe ser aplicada de igual
manera en beneficio del reo.

Ley temporal, aquella que se dicta para que rija en un periodo de tiempo determinado. ¿Se aplica? R:
el propio Art. 18 inc. 2 y 3 presuponen la promulgación de una nueva ley más favorable al reo. En el
caso de las leyes temporales esa promulgación no existe: cuando ellas cesan de regir, recupera
simplemente su vigencia el derecho común contenido en la ley antigua que nunca ha sido derogada. Por
lo tanto, la ley temporal no produce efectos retroactivos, ya que, de hacerlo perdería su naturaleza.

A modo de conclusión el principio de retroactividad de la ley penal más favorable, es un


imperativo para el juez, por lo que siempre debe ser aplicada. No existe sin embargo,
retroactividad de las medidas de seguridad y de corrección, porque estas no constituyen una sanción
propiamente tal, sino que obran en beneficio del afectado.

12 Ya estamos hablando de un punto diferente, se saneo el tema de la analogía.


13 Demasiado para algunos autores.

9
Efectos de la ley penal respecto a las personas
Por el principio de igualdad ante la ley (principio rector) Art. 14 CC y 5º CPR, no deben existir
individuos que se excluyan de la aplicación de la ley penal. Solo existen claras y muy precisas
excepciones una del derecho internacional y otra del nacional.

En el derecho internacional se establece que la ley penal Chilena no es aplicable a los jefes de Estado
que se encuentren de visita en el territorio nacional (Art. 297 C. Bustamante).

Y en el derecho nacional el Art. 58 CPR, establece que los senadores y diputados solo son inviolables por
las opiniones que manifiesten y los votos que emitan en el desempeño de sus funciones en sala o en
comisión.

10
Principios
Principio de culpabilidad

La Cº Chilena del 80 no contiene ninguna referencia expresa al ppio de culpabilidad. Aun cuando por
ejemplo se ha argumentado que el ppio de culpabilidad es consecuencia obligada del reconocimiento
constitucional de la dignidad humana (Art. 1 CPR). Vemos un indicio en el inciso sexto del Art. 19 nº3
que consagra que la ley penal no podrá presumir de derecho la responsabilidad penal.

Para la Cº política la culpabilidad es en efecto un presupuesto necesario de la responsabilidad penal,


pero esto es demasiado incompleto para fundamentar la consagración del principio en la Constitución.

Si no le asignamos relevancia al estado de inimputabilidad del sujeto, implicaría presumir de derecho la


imputabilidad y, en consecuencia, presumir de derecho la culpabilidad y la responsabilidad penal, que
es precisamente lo que la constitución proscribe. Y aunque podamos extraer el principio por medio de
una interpretación conforme a la Constitución, este no es suficiente para evidenciar su importancia.

¿Por qué es tan importante el principio de culpabilidad y qué implica o qué significa?

Este ppio supone que el hombre es libre de actuar, y por ser libre de actuar es responsable de sus actos.
Este ppio es el fundamento de la pena.

Principalmente este principio cumple una función limitadora, en cuanto a que (1) no hay pena sin
culpabilidad, lo que quiere decir que, la sociedad no puede hacer un reproche social al individuo que no
ha cometido la conducta típica y antijurídica; y (2) la pena no puede sobrepasar la medida de la
culpabilidad14

El Art. 19 Nº3 Inciso 6º CPR presume de manera indirecta la responsabilidad por caso fortuito en el Art.
10 Nº8 CP. Incluso, es posible afirmar que el código penal nacional consagra de modo general como una
presunción de culpabilidad en el Art. 1º “es delito toda acción u omisión voluntaria penada por la ley”

Existen por otra parte, negaciones a este ppio, alguno de estos ejemplos son: el Art. 313 del CP….”Se
impondrán….” Junto con la agravante por reincidencia de delitos regulada en el Art. 12 Nº14, 15 y 16
CP que presumen la culpabilidad.

Principio de proporcionalidad:

El estado debe reaccionar frente a un ataque efectuado a bienes jurídicos socialmente relevantes, pero,
la gravedad de la pena dependerá de la gravedad del hecho injusto cometido.

Para la fijación de las penas se deberá tomar en cuenta: (1) Magnitud de la lesión del bien jurídico
protegido; (2) La intensidad del reproche del autor y (3) la nocividad social del comportamiento al
sentimiento de seguridad y a la conciencia jurídica de la sociedad.

Principio de proporcionalidad en el derecho nacional:

La legislación Chilena fija al poder judicial reglas estrictas para valorar circunstancias modificatorias
de responsabilidad. Una de las normas que permite ejercer limitadamente este ppio es el Art. 69 CP,
pero nuestros tribunales tienden a hacer escasa aplicación de ella.

14Aunque puede verse alterado por ppios de prevención general o especial que pueden imponer una pena por debajo de la
culpabilidad

11
Estructura de delito

Acción/ Omisión

Típicidad

Estructura del Delito

Antijurídica

Culpable

El delito es una acción u omisión típicamente antijurídica y culpable15

Según su estructura entendemos que delito es toda acción u omisión (Art. 1 CP) pero no toda acción u
omisión es delito, sino solo aquella que se adecúa al tipo penal 16; Tampoco constituye delito, la acción u
omisión que esté autorizada por el derecho17

Los delitos se clasifican según su gravedad en Crímenes, simples delitos y faltas: El Art. 3 CP indica
que Cada uno de esto se calificará con la escala general del Art. 21 CP.

Como esta clasificación solo cumple con funciones técnicas, no es lícito servirse de criterios materiales
para interpretarlos.

No debemos olvidar que esta clasificación también ha sido objeto de críticas, que incluso han intentado
reducirlos a una clasificación bipartita entre delitos y faltas.

15 Se extrae del Art. 1 CP y reviste un carácter descriptivo y formal.


16 Se deduce de la frase “penada por la ley” del Art. 1CP y se contempla expresamente en el Art. 19 Nº3 inciso 8º CPR.
17 Se puede extraer del Art. 10 Nº4, 5, 6, 7, 10 y 12 primera parte CP.

12
Accion/ Omision

Movimiento corporal
Objetivos
Cambio en el mundo exterior
Elementos
Conciencia
Subjetivos
Voluntad

Causalista
Teorías en torno
Acción Fuerza física irresistible
a la Acción
Finalista
Casos
indiscutidos Actos reflejo

Movimientos realizados
durante el sueño

Casos de ausencia
de acción Menores y enfermos
mentales
Casos
Dudosos El sueño hipnotico

Actos habituales y
pasionales

La acción es el movimiento corporal realizado con la intervención de la conciencia y voluntad del sujeto
que produce un cambio en el mundo exterior y que se realiza con la intervención de la conciencia y de la
voluntad de la acción.

De esta definición se extraen dos elementos; el objetivo y el subjetivo.

El elemento objetivo nos indica que tiene que haber un movimiento corporal y además este debe
producir un resultado (cuando dice que cambia el mundo exterior), en algunos casos el resultado es
imperceptible, sin embargo este debe suceder.

El elemento subjetivo indica que tiene que existir conciencia y voluntad presentes en el movimiento
corporal, sin ellos, no habría acción.

Existen dos teorías sobre la acción, en ambas el elemento objetivo es el mismo pero distinguen el
elemento subjetivo.

La teoría causalista indica que para que se produzca el resultado basta simplemente con la presencia
de la voluntad, es decir, que el movimiento corporal que indica el elemento objetivo sea producido
voluntariamente.

La teoría finalista en cambio, dice que no basta con la sola voluntad, debe además haber voluntad
respecto al resultado, la finalidad del sujeto tiene que producir el resultado.

13
¿Cuándo no estamos en presencia de acción? R: No hay acción18 cuando puede afirmarse que el sujeto
solo ha tomado parte físicamente en el hecho, pero sin intervención de su voluntad en la conducción del
mismo hacia un fin. Por el contrario, existe una acción si la voluntad del agente orientó los cursos
causales aunque lo hiciera para dirigirlos hacia una meta distinta de la que alcanzó (en caso de error) o
porque se habría formado anormalmente, bajo la presión de circunstancias extraordinarias (caso de
inculpabilidad).

Frente a la ausencia de acción tenemos casos indiscutidos y casos dudosos.

Los casos indiscutidos son:

1. La fuerza física irresistible: Aquí el movimiento corporal s producto de un acontecimiento ajeno al


sujeto, este acontecimiento ha doblegado no solo su voluntad sino también a su cuerpo. La fuerza que
lo obliga puede proceder de la naturaleza o de un tercero, cuando el acto es forzado por elementos de
la naturaleza, no hay acto en absoluto, en cambio, cuando esa fuerza irresistible es causada por un
tercero, existe acción de ese.
2. Los actos reflejos: son respuestas automáticas del sistema nervioso.
3. Los movimientos realizados durante el sueño tampoco constituyen acción.

Los casos dudosos son:

1. Los realizados por menores o enfermos mentales: por ejemplo un niño de 10 años (Art. 10 Nº2 CP) o
un paranoico (Art. Nº1 primera parte CP). En estos actos no hay ausencia de voluntad, sino que,
decimos que su formación es anormal19.
2. El sueño hipnótico: aquí el sujeto ejecuta una acción pero como el proceso de formación de su
voluntad ha sido interferido por el sugestionador, no es libre, y, en consecuencia, no se le puede
reprochar de problemas relativos a la culpabilidad.
3. Actos habituales o pasionales: estos actos son finales y constituyen una acción, lo que pasa es que esa
voluntad se produce o puede producirse sin siquiera necesitar una reflexión previa. Este es con
probabilidad el caso más dudoso de ausencia de acción.

Ahora para que quede todo más claro, atenderemos la diferencia que existe entre la ausencia de acción y
la omisión.

Los delitos de omisión se verifican cuando el sujeto no ejecuta la acción exigida por el tipo penal; por
ejemplo el sujeto que mira como alguien se ahoga y no hace anda para salvarlo, el delito es no salvar, ,
omitió el tipo penal que exige la ley.

La omisión requiere que la acción que se ejecuta en vez de la exigida del tipo penal sea voluntaria (al
igual que en la acción tiene que ser voluntaria). El no cumplir un mandato penal omitiendo es lo mismo
para la ley penal que haber efectuado una conducta positiva.

Esto distingue distintos tipos de delitos respecto a la ausencia o presencia de acción.

1. Delitos de omisión pura o simple: son delitos de mera actividad, que no exigen que se haya producido
un resultado, como por ejemplo la omisión del deber de socorro, no exige que se produzca la muerte
de alguien.
Requisitos (Art. 494 CP)
 La existencia de una situación típica: por ejemplo una persona se encontrare en un lugar
despoblado, herida, maltratado en peligro de perecer.

18 No confundir con omisión, no son lo mismo.


19 Recae en un problema de culpabilidad

14
 La existencia de una ausencia acción exigida por el tipo penal que en el ejemplo sería
socorrer a la persona.
 Y que bajo el supuesto del ejemplo la persona que no socorre tenga capacidad para realizar la
acción: en nuestro ejemplo quiere decir de que haya podido socorrer

2. Delitos de comisión por omisión: no solamente exige un comportamiento típico, no ejecutar la acción
salvadora, sino que además exige el resultado, la muerte. También puede ser frustrado
a. Delito de acción de mera activada: solamente exige el cumplimiento, como el delito de
falso testimonio.
b. Delito de resultado: los de resultado exigen que se lleve a cabo el resultado separado de
la conducta, como por ejemplo el homicidio, no solamente son punibles cuando se ejecuta
el resultado también puede ser tentado o frustrado como por ejemplo cuando le dispare y
no le achunte

Requisitos:

 Que la situación practica se sume a la posición de garante


 Que la ausencia de acción exigida por el tipo penal se sume a la producción del resultado
 Y que la capacidad de acción se sume a la idoneidad de evitar el resultado

15
Teoría de la tipicidad
Garantísita

Funciones Motivadora

Sistemática

Descriptivos y Normativos

Positivos y Negativos
Tipicidad
Elementos
- Tipo
Genéricos y Específicos

Objetivo y subjetivos
Conducta

Resultado
Faz
objetiva
Causalidad
Imputación
Dimensione objetiva
s del tipo Dolo

Faz
Culpa
Subjetiva

Otros

Antiguamente en la ley Chilena se hablaba en sentido amplio del tipo, como (1) sinónimo de delito.
Como (2) una garantía que aseguraba la descripción legal del hecho al que la ley asociaba una pena (de
ahí deriva el principio nulla poena sine lege), aquí exigía que el hecho típico y no solo la pena fueran
exactamente y claramente descritos.

El concepto del tipo ha ido evolucionando progresivamente en el tiempo.

En sus orígenes el concepto del tipo se refería al conjunto de características fácticas del hecho punible
que constituían el fundamento de todo juicio criminal y cuya comprobación era el primer objeto al que
debían tender las investigaciones del sumario20.

Luego de esto el concepto del tipo ha ido evolucionando progresivamente, indicando que el tipo solo
contiene una descripción del aspecto objetivo del hecho punible y la culpabilidad se relaciona con el
aspecto subjetivo, aunque la antijuricidad también es objetiva no se relaciona con la tipicidad, ambas
son independientes.

Actualmente el concepto del tipo está constituido por la descripción legal del conjunto de las
características objetivas y subjetivas (externas o internas o psíquicas) que constituyen la materia de la
prohibición para cada delito específico21.

20 Beling
21 Los que apoyan la noción tradicional rechazan esta por incluir un criterio subjetivo al tipo.

16
Entendamos que el tipo es la descripción de un hecho, es decir, de un acontecimiento que se
desarrolla en el ámbito de los fenómenos causales. Se encarga entonces de describir un
hecho voluntario22.

La descripción del tipo se constituye por un conjunto de elementos que veremos a continuación:

1. Elementos descriptivos o normativos del tipo: formalmente el tipo contiene la descripción de un


hecho voluntario al cual se asocia la pena, esto no siempre se puede lograr y en muchas
oportunidades se acude a nociones normativas.
Cuanto más descriptivo sea el concepto, es decir, cuanto más firme sea la base ontológica sobe la cual
descansa la valoración jurídica, más limitadas son las posibilidades judiciales de interpretar el
concepto y por ende más sencillo hacerlo.
2. Elementos positivos y negativos del tipo: Los elementos positivos aluden a lo que tiene que ocurrir en
el hecho concreto para que este sea punible; y lo elementos negativos refieren a aquello que no debe
darse en el caso concreto para que el hecho sea sancionado.
3. Elementos específicos y genéricos: se trata de describir el hecho típico con la mayor precisión posible,
debiendo incorporar a la descripción cada uno de los componentes específicos que distinguen el hecho
a que se refiere tanto de cualquier otro hecho típico como se los hechos atípicos en general. Siempre a
la descripción concurrirán elementos genéricos.
4. Elementos objetivos y subjetivos: los primeros aluden a las características que deben cumplirse en el
mundo exterior y los segundos a la actitud psicológica del sujeto respecto del hecho.

La idea de estos elementos es que la descripción típica determine con entera precisión los contornos del
hecho punible, ya que, debemos entender que el lenguaje no es ni puede ser jamás un instrumento con
la precisión necesaria para realizarla, por lo que requerimos de mayor precisión por parte del legislador.

Tipo y tipicidad

El tipo es una descripción abstracta y formal de aquello en que el delito consiste esencialmente. El
hecho bien se adecúa al tipo pero no es el tipo, por lo que el elemento categorial del delito no es el tipo
sino la tipicidad, es decir, la cualidad del hecho concreto de conformidad a la descripción abstracta
trazada por el legislador.

En la estructura del tipo veremos que se encuentran dos fases, la faz objetiva y la faz subjetiva 23.

En la faz objetiva la acción constituye el movimiento corporal que se manifiesta en la voluntad final de
realización.

Principalmente dentro de la faz objetiva y respecto a la acción, cualquier sujeto puede ser sujeto de una
acción aunque a veces se le atribuye una calidad determinada 24 y que debemos distinguir entre el objeto
material de la acción del objeto material del resultado, el primero es aquella persona o cosa sobre la cual
recae la acción; y la segunda, aquella persona o cosa sobre la cual recae el efecto de la acción y en la que
se materializa la modificación del mundo exterior.

Aunque lo decisivo para la construcción del delito es la acción 25, hay casos en que el resultado es
cofundante de la descripción. En estas ocasiones el tipo alude expresamente al resultado, entendido
como aquel cambio en el mundo exterior causado por una acción, en que se concreta la lesión o puesta
en peligro del bien jurídico tutelado.

22 A pesar de que no toda acción constituye un hecho típico, nunca un hecho típico puede estar ausente de acción, si falta la acción
entonces no tiene sentido seguir ahondando en la tipicidad de esta.
23 Por el momento solo veremos la fase objetiva, ya que la subjetiva pertenece a culpabilidad
24 Ejemplo de un delito como sujeto activo calificado.
25 Delitos de acción y delitos de resultado

17
Ahora atenderemos a la relación causal26 que indica que la acción debe ser causa del resultado,
y este, correlativamente efecto de ella.

La causalidad es la base de atribución del resultado a la conducta que intenta responder a la pregunta
de cuál es la causa de un resultado o si el resultado ocasionado ha sido clave de la conducta 27.

Teorías respecto del Nexo Causal:

"El aleteo de las de una mariposa puede provocar un tornado al otro lado del mundo" - Efecto mariposa;
Teoría del caos.

1. Teoría de la equivalencia de las condiciones: “conditio sine qua non” se pregunta por cuáles de
las distintas circunstancias concurrentes en la producción de un resultado son condiciones del
mismo.
Para determinar cuál de esas circunstancias es, recurrimos a la fórmula de la supresión mental
hipotética, en donde se nos indica que es condición del resultado toda circunstancia
concurrente a su producción que, al ser suprimida mediante una operación mental
hipotética, determina la supresión del resultado. Luego debemos determinar cuáles de ellas son
causa del resultado con la misma fórmula, es decir, sabremos que debe considerarse causa toda
condición de resultado que no pueda ser suprimida sin que desaparezca el resultado concreto.

El problema (el gran problema) de esta teoría es que extiende desmesuradamente el vínculo causal,
ya que todos resultan ser responsables de todo; porque en la jurisprudencia lo que importa no es la
totalidad de las condiciones, sino sólo comprobar la conexión o nexo entre un determinado acto
humano con el resultado.

La fórmula misma de la teoría de la equivalencia que parece inútil, nos conduce además a variados
errores, como los que ocurren en ciertos casos de causalidad hipotética y alternativa.

Es justamente por esos variados problemas que presenta la teoría de la equivalencia (junto con la
cadena infinita que le da al curso de la causalidad) se ha impuesto ña fórmula de la “condición
conforme a leyes28” que atiende a los cursos causales que son dudosos y que no pueden ser
resueltos por cualquier forma, sino que, deben ser resueltas por métodos científicos-naturales
exactos, pero cuando la causalidad no es dudosa, la fórmula de la causalidad conforme a leyes
permite reconocerlo claramente y no induce a error al juzgador 29.

2. Teoría de la causa adecuada: Se parece un poco a la anterior pero en esta teoría, causa es solo
aquella condición que aparece como generalmente adecuada a la producción del efecto. Por ende, la
acción es causa del resultado cuando, conforme a la experiencia general, aparece como una condición
adecuada a su producción.
“Solo es causal una conducta que posee una tendencia general a provocar el resultado
típico”.
La teoría de la adecuación permite la tan deseada eliminación de los nexos causales totalmente
inusuales, evitando también el regreso infinito de la causalidad. Entonces, según ella, es condición
adecuada si la misma ha aumentado la posibilidad del resultado de modo no irrelevante.

26 Todavía dentro de la faz objetiva.


27 La causalidad hace un primer filtro de las causas del resultado; luego de determinar los nexos causales es que nos referimos a
la teoría de la imputación objetiva que selecciona dentro de esas causas cual es la jurídico relevante de causación de resultado.
No debemos olvidar que la imputación al tipo objetivo debe producirse en dos pasos sucesivos: la teoría del nexo o relación causal y
los restantes presupuestos de la imputación.
28 Redactada por Jescheck
29 Aparte de los problemas que se indicaron debemos recordar que se mencionan muchos más, por ejemplo en la causalidad

alternativa, en los cursos anómalos, etc.

18
Para poder determinar la adecuación de la conducta a la producción del resultado, debemos seguir el
siguiente procedimiento, que llamamos juicio de adecuación.
Lo que se hace es que El juez debe colocarse en el proceso en el punto de vista de un
observador objetivo que juzgue antes del hecho y disponga de los conocimientos de un
hombre inteligente del correspondiente sector del tráfico y además del saber especial del
autor (EX ANTE).

La teoría de la adecuación persigue un propósito justificado que intenta dar respuesta a qué
circunstancias causales son jurídicamente relevantes y le pueden ser imputables a un agente. Para
dar respuesta a esta pregunta es que tenemos que, primero, verificar la existencia de un nexo
condicional conforme a leyes y, segundo, si ese nexo es típicamente relevante 30. Sin embargo, a pesar
de que aparentemente soluciona los problemas de la teoría anterior, puede excluir la imputación en
los cursos causales anómalos o inusuales y esto es un problema.
Lo rescatable es que identifica los cursos causales relevantes para la imputación. .

30 Se dice que esta teoría es más bien un complemento de la teoría de la equivalencia.

19
Imputacion objetiva

Disminución del riesgo


Hipotesis en donde
Creación del NO HAY
riesgo NO Falta de creación del riesgo
Creación del riesgo
permitido
No permitido
Riesgo permitido

Falta de realización del


peligro -Curso causal
imprevisible

Hipotesis en donde Falta de realización del


Imputación Realización del NO HAY riesgo No permitido
Objetiva riesgo en el Realización del
resultado tipico riesgo en el Fin de protección
resultado típico de la norma

Conducta alternativa
conforme a derecho

Cooperación en la autopuesta
en peligro Dolosa

Hipotesis en
Alcance donde NO HAY Autopuesta en peligro
del tipo consentida
Alcance del tipo

Esfera de responsabilidad
de un tercero

El primer cometido de la imputación al tipo objetivo es indicar las circunstancias que hacen de una
causación una acción típica.

Lo primero que debe ocurrir es la creación de un riesgo no permitido y que ese peligro se realice en el
resultado concreto.

La imputación al tipo objetivo supone la realización de un riesgo creado por el autor y no cubierto por un
riesgo permitido dentro del alcance del tipo.

Concepto tradicional Complemento Teoría de la imputación objetiva


Acción típica Creación del riesgo penalmente relevante.
Nexo causal (entre acción Realización del riesgo en resultado (concreto producido) lo que
y resultado) determina la consumación del delito.
Resultado típico Resultado dentro de la esfera de protección del tipo penal.

20
El cuadro anterior nos hace una comparación de los elementos comunes del tipo y los que componen la
imputación objetiva.

Creación de un riesgo NO permitido 31:

Para entender el riesgo No permitido primero debemos saber cuándo hay riesgo permitido o qué es el
riesgo permitido.

Los riesgos permitidos son conductas que son inherentemente peligrosas, pero que las tolera el
sistema normativo porque son relevantes para el progreso y desarrollo de la sociedad pero lo controla. El
caso más ejemplificador es conducir32.

¿Cómo determinamos entonces cuándo hay superación del riesgo permitido? Normalmente
podemos saber que existe superación del riesgo permitido por ejemplo cuando yo infrinjo las reglas
que regulan el riesgo permitido, y por tanto generan un riesgo jurídicamente relevante no
cubierto por un riesgo permitido.

Existen 4 hipótesis en las que NO hay creación del riesgo; estos son:

1. Disminución del riesgo: cuando se modifica un curso causal de manera que aminora o disminuye el
peligro ya existente para la víctima. Estas son acciones que mejoran el estado en que se está
exponiendo al bien jurídico.
Ciertamente esto no es lo mismo que sustituir ese peligro por otro, cuya realización en definitiva es
menos dañosa para el sujeto de lo que hubiera sido el peligro inicial; el problema está en que el hecho
de cambiar un peligro por otro33 es que el autor realiza acciones típicas de in delito, que le son
imputables como realización del tipo, pero sin embargo pueden estar justificadas. A diferencia de las
primeras que simplemente no crean un riesgo no permitido.

2. Cuando falta la creación del riesgo: cuando el autor ciertamente no ha disminuido el riesgo de lesión
de un bien jurídico pero tampoco lo ha aumentado de un modo jurídicamente considerable34
El principio de imputación de la creación o aumento del riesgo coincide en lo sustancial con la teoría
de la adecuación, por ende, todo depende de si un observador inteligente antes del hecho (ex ante)
hubiera considerado que la correspondiente conducta es arriesgada o aumenta el peligro. Y para ello
también hay que dotar aquí al observador del eventual saber especial del autor concreto.

3. En los cursos causales hipotéticos: sabemos que para la causalidad en los delitos comisivos los cursos
causales hipotéticos son irrelevantes, esto no obsta claro, que se les pueda atribuir un efecto
excluyente de la imputación.
El principio de asunción nos indica que la imputación de una realización antijurídica del tipo no
puede excluirse porque estuviera dispuesto un autor sustitutivo, que en el caso de fallar el agente
hubiera asumido el hecho. Ello se sigue de la idea de que el ordenamiento jurídico no puede retirar
sus prohibiciones porque hubiera otro que también estuviera dispuesto a infringirlas. De lo contrario
se produciría a impunidad sólo porque en vez de un sujeto decidido a ejecutar el hecho hubiera varios
dispuestos a ello.
La imputación se excluye sin embargo cuando el autor únicamente modifica una causalidad natural,
sin empeorar la situación de la víctima en su conjunto.
Lo importante es entender que los cursos causales hipotéticos a veces influyen sobre la creación del
peligro y con ello sobre la imputación al tipo, pero que en la mayoría de los casos las dejan intactas.

31 Se evalúa en una posición EX ANTE


32 Conducir dentro del límite de velocidad por ejemplo, es actuar dentro del riesgo permitido
33 Caso de bombero
34 Son mínimos riesgos a los que el derecho no hace caso.

21
4. En los riesgos permitidos: nos referimos a esto cuando el autor a pesar de haber creado un riesgo
jurídicamente relevante, la imputación se excluye si se trata de un riesgo permitido 35
Tanto la falta de creación de peligro como la causación dentro del marco del riesgo permitido impiden
por igual la realización del tipo objetivo.

Realización del riesgo NO permitido en el caso concreto 36

Cuando NO hay creación del riesgo, este requisito se cae y por tanto es impune. Ya que, ese riesgo se
debe realizar en el resultado concreto.

Existen 5 hipótesis en las que NO hay realización del riesgo en el caso concreto.

1. Cuando falta la realización del riesgo: La imputación al tipo objetivo presupone que en resultado se
haya realizado precisamente el riesgo no permitido creado por el autor. Por esto está excluida la
imputación, si aunque el autor haya creado un peligro para el bien jurídico protegido, el resultado se
produce, no como efecto de plasmación de ese peligro, sino solo en conexión causal con el mismo 37.

2. Cuando falta la realización del riesgo NO permitido: En los casos de riesgo permitido la imputación
al tipo objetivo presupone que se rebase el límite de la autorización y con ello la creación de un
peligro no permitido. En caso de riesgo no permitido la imputabilidad del resultado depende
adicionalmente de que en el mismo se haya realizado precisamente ese riesgo no permitido38
Puede que se dé el caso de la infracción del deber que rebasa el riesgo permitido ciertamente es
causal para el resultado, pero el riesgo de producción del resultado no se ha aumentado por la
superación o exceso en el caso concreto

3. Cuando NO está cubierto por el fin de protección de la pena: Hay casos en los que la superación
del riesgo permitido de entrada ha aumentado claramente el peligro de un curso de hecho como el que
luego se ha producido, pero pese a ello no puede tener lugar la imputación del resultado ¿Por qué? R:
porque existen casos en que se excluye la imputación del resultado si la evitación de tales consecuencias
no es el fin de la protección que genera la pena, sino solo un reflejo de la protección del deber de
cuidado39

4. Cuando con una conducta alternativa conforme a derecho se hubiera producido de igual manera el
resultado40: Solo se debe excluir la causalidad de la conducta del autor “si existiera la seguridad o
una probabilidad rayana en la seguridad de que el suceso dañoso también se hubiera producido
aunque no hubiera procedido la conducta culpable”.

Si no se está seguro, por el principio in dubio pro reo, no se debe imputar.

5. Cuando el incremento del riesgo y el fin de protección no abarcan el resultado41:

35 Una conducta que crea un riesgo jurídicamente relevante, pero que de modo general (independientemente del caso concreto)
ésta permitida y por ello, a diferencia de las causas de justificación, excluye ya la imputación al tipo objetivo. Prototipo del riesgo
permitido es la conducción automovilística observando todas las reglas del tráfico
36 En este punto se evalúa en un juicio EX POST
37 Recordar ejemplo del incendio en el Hospital donde la persona muere quemada y no por el disparo que lo mando al hospital.
38 Recordar ejemplo del dueño de la fábrica de pinceles de pelos de cabra que no desinfecta
39 Recordar ejemplo de los ciclistas y su falta de iluminación.
40 Recordar caso del chofer de un camión que choca con el ciclista ebrio, por adelantarlo sin la medida requerida.
41se puede subsumir en el numeral 3

22
Alcance del tipo

Con la realización de un peligro no cubierto por el riesgo permitido se da por regla general la imputación
al tipo objetivo. Sin embargo, cada vez se impone más la opinión de que pese a ello en el caso concreto
aún puede fracasar la imputación en que el alcance del tipo, el fin de protección de la norma típica, no
abarca resultados de la clase de los producidos, en que el tipo no está destinado a impedir tales sucesos.

Existen 3 hipótesis en las que NO existe alcance del tipo → NO hay imputación

1. Cuando existe cooperación una autopuesta en peligro dolosa (mi propia intención y conocimiento)42:
existen caso en que alguien puede incitar o cooperar en acciones de otro que son mucho más
peligrosas de la medida de lo normal. Sin embargo bajo el principio de quien puede lo más puede lo
menos, Decimos que no puede ser punible la cooperación de una autopuesta en peligro dolosa. Pues si
se puede provocar impunemente lo más (la autolesión), con mayor razón ha de poderse provocar sin
sanción lo menos (la autopuesta en peligro)

2. Cuando existe puesta en peligro por un 3ro43: Se refiere a la constelación en que alguien no se pone
dolosamente en peligro a sí mismo, sino que se deja poner en peligro por otro con consciencia del
riesgo.

3. Cuando existe una responsabilidad de un tercero: Por último, el fin de protección del tipo tampoco
abarca ya aquellos resultados cuya evitación cae dentro de la esfera de responsabilidad de otro.

La ratio de la exclusión de la imputación en estos casos estriba en que determinados profesionales,


dentro del marco de su competencia respecto de la eliminación y vigilancia de fuentes de peligro, son
competentes de tal modo que los extraños no tienen que entrometerse.
Es decir: ¿Se debe castigar por homicidio imprudente al dueño de la casa que provoca
imprudentemente un incendio?

En síntesis, explicaré rápidamente como se debe proceder con la materia. Primero tenemos el concepto y las características del DP
luego de ellos vienen los principios que sustentan a este derecho, que requieren de leyes, por consiguiente hablamos de las
fuentes del DP, que son las leyes penales, luego se habla de las leyes penales en blanco y su alcance, para terminar con el efecto de
la ley en el tiempo.

Luego entramos a la estructura propiamente tal del delito que se extrae de la definición de delito: “toda acción u omisión….”

Por eso, partimos hablando de la acción, la omisión y los casos en que hay ausencia de acción. Si no hay acción, el caso se nos cae
ahí, si no, seguimos, con lo que seguimos es con la tipicidad.

En la tipicidad, vemos el concepto del tipo, sus elementos y su estructura, dentro dela estructura nos desarrollamos solamente en
la faz objetiva de ella. Sabemos que ya tenemos la acción, entonces debemos conocer el nexo causal con el resultado y para eso
tenemos varias teorías con sus salvedades cada una.

Cuando ya sabemos lo anterior entramos a la imputación del tipo objetivo.

Tenemos como resultado de la faz objetiva, la creación de un riesgo, para que sea imputable, ese riesgo debe estar NO cubierto por
el riesgo permitido – en este punto presentamos hipótesis en las que no se crea el riesgo.

Si tenemos un riesgo no permitido seguimos a que este se realice en el caso concreto –acá también se presentan hipótesis en donde
no hay realización del riesgo en el caso concreto, y si no la hay nuestra imputación se cae.

Por último, si tenemos una creación de riesgo no permitido realizada en el caso concreto, aun puede caerse nuestra imputación si
sucede alguno de los casos en que el alcance del tipo no atribuye imputación.

Eso sería muy muy rápido

42
Hay que mirar si se puede imputar la cooperación
43
Hay que mirar si se puede imputar al tercero

23

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