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Evolución del término “Ofiolita” y su

proceso de obducción

Claudia Marcela Navia Cárdenas

Presentado a:
PhD. Jhon Jairo Sánchez Aguilar
Ing. Humberto González Iregui

Universidad Nacional de Colombia


Facultad de Minas, Departamento de Geociencias y Medioambiente
Medellín, Colombia
2018
Evolución en la semántica de las ofiolitas
El término de Ofiolita es derivado del griego “ophi” que significa serpiente y “lithos” de
roca. Primeramente, se utilizó éste para designar las hoy conocidas serpentinitas.
El proceso de obducción asociado al emplazamiento de las ofiolitas ha sido un tema de
discusión desde principios del Siglo XIX cuando el Ingeniero y mineralogista Alexandre
Brongniart del Cuerpo Imperial de Minas en Julio de 1813 en la edición 199 de la Revista
de Minas nombra por primera vez la definición de ofiolitas como: “Especie. Ofiolita: Patina
de serpentina envuelta de magnetita u otros minerales accesorios diseminados-
Estructura compacta” (Brongniart, 1813) así como una clasificación de algunas
variedades dependientes de su composición, por ejemplo, Ofiolita Ferrifera (granos de
magnetita diseminados), Ofiolita Cromifera (Granos de hierro cromado diseminados) ,
Ofiolita Diallagique (variedad de la augita de granos finos diseminados) y Ofiolita
Granitifera (Granates disemimados) Luego, en 1821 el mismo autor hace un análisis más
profundo del origen de la palabra así como la inclusión de rocas ultra-máficas, gabros,
diabasas y rocas volcánicas.
Es a partir de este primer acercamiento al concepto que se comienza con una larga
investigación de la geología y los procesos asociados a este término, ya a partir de finales
de 1800’s los geólogos Fouqué y Michel-Levy usaron este nombre para describir lo que
hoy en día se conoce como diabasa.
En 1926 el australiano W.N. Benson interpretó la ocurrencia de peridotitas y serpentinitas
en zonas orogénicas como intrusiones plutónicas dentro de sinclinales estratificados de
tipo sedimentario, a lo que llamó Peridotitas “Tipo Alpino”, sin embargo, esta
interpretación sería controversial con la definición de Steinmann de 1927 lo que llevaría
a un retraso en el entendimiento de este proceso intrusivo.
Fue durante el XIV Congreso Geológico Internacional en Madrid de 1926 que el
investigador Gustav Steinmann es el que a través de sus observaciones en las cadenas
montañosas del Mediterráneo interpretó una secuencia diferencial en estos cuerpos de:
Peridotitas (serpentinitas), gabros y diabasas espelitizadas en asociación con
sedimentos consolidados del fondo oceánico como arcillas, cherts y limolitas. Esta
interpretación sería conocida como la “Trinidad de Steinmann” radicada en una
secuencia de serpentinitas, diabasa espelitica y chert.
Imagen 1: Caricatura ilustrativa de la Trinidad de Steinmann Fuente: Coleman R.G.
(1977) What is an Ophiolite?
A través de trabajos de laboratorio, el científico N.L. Bowen en 1927, 1928 y en conjunto
con O.F. Tuttle en 1949 argumentó que las peridotitas alpinas y las serpentinitas debían
formarse por procesos inyectivos de olivino y enriquecidos en piroxeno en estado sólido,
sin embargo, Bowen no se refiririó al termino ofiolitas en ninguno de sus trabajos, sus
conclusiones llevaron a una discusión entre los geólogos del viejo continente y los
estadounidenses durante mucho tiempo.
El geológo Harry. H. Hess cuestionó fuertemente los resultados de Bowen, dado que él
estudió la ocurrencia de rocas ultramáficas y serpentinitas en las montañas Apalaches,
él propuso que las peridotitas pudieron haber sido emplazadas por magmas ultramáficos
hidratados a bajas temperaturas y que las serpentinitas eran magmáticas en su origen;
en el trabajo de Bowen y Tuttle de 1949 sobre el sistema MgO-SiO2-H2O evidenciaron
que la serpentina era únicamente estable a temperaturas inferiores a los 1000°C. Sin
embargo, ambos, Bowen y Hess no pudieron explicar de manera concreta el origen de
las serpentinitas en conjunción con la evolución de rocas ultramáficas.
Ya entrada la mitad de 1950 Hess propone sus ideas acerca del origen de las peridotitas
y serpentinitas argumentando que las rocas de la “Trinidad de Steinmann” son
igualmente comunes en arcos de islas lo cual representaba una fase primaria de un
sistema montañoso tipo Alpino, sin embargo, en este trabajo no acepta la concepción
europea de ofiolitas, ya en 1962 a través del uso de herramientas de geofísica y análisis
de geología marina sugiere que aproximadamente el 70% de la corteza oceánica estaba
constituida por serpentinitas que serían para él peridotitas hidratadas, en este estudio se
acerca mucho más a lo observado por Steinmann en los Apenninos.
El primero en proponer un origen mántico de las peridotitas, el emplazamiento tectónico
de ofiolitas y la relación de rocas máficas y algunas ultramáficas fue W.P. De Roever en
1957, lo cual se oponía a lo propuesto tanto por Hess como por Bowen, así como también
sugirió que la “Trinidad de Steinmann” era producto de una fusión del manto lo cual
producía las rocas basálticas en la parte superior del complejo y las rocas ultramáficas
en el piso de este. Dos años después J.H Brunn a través de la investigación de la dorsal
del medio-atlántica propuso que estos cuerpos fueron generados por una diferenciación
de extrusiones en el piso oceánico a manera de sinclinal, idea que luego sería propuesta
por Aubouin en 1965.
Durante la primera mitad de los 60’s distintos trabajos se realizaron alrededor de todo
Europa (Brunn, Dubertret, Aubouin y Ndojaj) considerando las ofiolitas como sistemas
de expulsión de magma basáltico en el piso oceánico, de acuerdo a estos autores este
magma se había diferenciado después de su intrusión al océano como una acumulación
de minerales tales como Olivino y Piroxeno cristalizados en una fase más temprana, lo
que haría que se produjera una apariencia de estratificación comenzando desde
peridotitas hasta gabros y lavas basálticas en el techo.
El artículo publicado T.P. Thayer en 1967 sobre la química y las relaciones estructurales
en rocas ultramáficas y rocas feldespáticas en intrusivos Alpinos complejos enfatizaba
en cómo los gabros, diabasas y otras rocas leucocráticas provenían de un mismo magma
peridotítico, lo que llevó a los geólogos americano a reconsiderar el concepto europeo
de Ofiolita.
Con la llegada de la teoría de tectónica de placas hacia finales de 1960 se llega a un
mayor consenso entre los geólogos de ambos continentes, lo que ayudó a concluir de
manera prácticamente simultánea que las intrusiones de diques diabásicos en los flancos
de las zonas de divergencia oceánica generaban un movimiento de la placa; que las
ofiolitas son partes de la antigua litosfera compuesta de corteza oceánica y manto
superior, muestra de esto serían la harzburgita y las dunitas como representación del
manto parcialmente fusionado que también muestra procesos de tectónica dada la
orientación y desplazamiento del ortopiroxeno y granos de espinela; que las secuencias
de rocas plutónicas en estos cuerpos representan antiguas cámaras magmáticas y
finalmente, se utilizará por primera vez el término “obducción” por Coleman en 1971 para
explicar el proceso de emplazamiento de fragmentos de la litosfera oceánica en
márgenes continentales.
Después de esto, en 1972, Jackson y Thayer distinguen dos tipos de peridotitas alpinas,
la harzburgita que representaría la parte superior del manto oceánico y la lerzolita que
correspondería al manto subcontinental o a la zona más profunda del manto oceánica en
donde la fusión parcial es mucho menos intensa.
En el mismo año durante septiembre se realizaría la Conferencia de Penrose en ofiolitas
se generó una aprobación general de los participantes acerca de la definición: “Ofiolita
se refiere a un complejo distintivo de rocas máficas a ultramáficas. No debe ser utlizado
como nombre de una única especia de roca o como una unidad litológica en la
cartografía. En un desarrollo ideal y completo de ofiolitas, los tipos de rocas ocurren en
la siguiente secuencia, empezando desde la base hasta el techo:
1. Complejo ultramáfico: consiste en proporciones variables de harzburgita, lerzolita
y dunita, usualmente con una fábrica metamórfica (más o menos serpentinizada)
2. Complejo Gabroico: Con una textura tipo Cumulus comúnmente contiene cúmulos
de peridotitas y piroxenitas, usualmente menos deformado que el complejo
ultramáfico.
3. Complejo de diques máficos laminados
4. Complejo volcánico máfico: Comúnmente basaltos almohadillados
5. Rocas asociadas pueden incluir una secuencia sedimentaria de cherts, lutitas y
limonitas menores, cuerpos podiformes de cromitas generalmente encontradas
con las dunitas y rocas félsicas sódicas intrusivas como extrusivas.
Los contactos fallados entre unidades cartografiables son comunes. Las secciones
completas pueden no aparecer. Una ofiolita puede estar incompleta, desmembrada o
metamorfoseada. A pesar de que la ofiolita es generalmente interpretada como
corteza oceánica y manto superior, el uso del término debe ser independiente de su
supuesto origen.”
Esta estratificación sería observada por datos sísmicos tomados directamente en el
campo de la litosfera a la cual se le daría el nombre de “estratificación de Penrose”
Esta definición fue un gran impulso para continuar con las investigaciones sobre
ofiolitas, el simposio hecho en la Unión Soviética desde mayo 31 hasta junio 14 de
1973 reunió grandes investigadores en aras de discutir el concepto ofiolita en el
marco de la teoría de tectónica de placas, así como examinar la ocurrencia de estas
en la Asia central soviética y el Cáucaso menor. En estas zonas las secuencias
extrusivas eran muy pequeñas o nulas. La finalidad mayor del simposio fue entender
el proceso de emplazamiento a lo largo de márgenes continentales y dentro de los
cinturones montañosos.
Iniciada esta gran investigación, el programa de correlación geológica internacional
“IGCP” por sus siglas en inglés comienza en 1974 con fondos de la UNESCO a
recolectar información en Norte América, lo que luego sería compilado por Coleman
en 1977.
Fue este autor el que propuso que los procesos vistos hoy en día no eran
necesariamente los mismos que emplazaron la corteza oceánica antigua, decía que
la mayoría de ésta se perdía por medio de subducción y que la obducción es un
evento único y particular en la historia del planeta.
De igual manera, en 1973 el investigador Akiho Miyashiro mostró que cerca de un
tercio de las pillow lavas y rocas estratificadas de dique que evaluó en las áreas de
subducción en Japón, presentaban una tendencia calco-alcalina en la llamada ofiolita
de Troodos. Esto hizo que sugiriera que este complejo tenía su origen en un volcán
basáltico en un arco de isla con una corteza oceánica delgada más que una dorsal
interoceánica. Esto generó que se evaluara de nuevo la hipótesis propuesta en
Penrose acerca de la configuración tectónica y la génesis de las ofiolitas que continúa
hoy en día.
El entendimiento de la geoquímica vino de los resultados en las expediciones
oceánicas a las regiones de subducción del Pacífico hacia mediados de los 70’s con
muestras recolectadas de los arcos de Lau y Mariana, así como las zonas más
profundas de Yap y las fosas de las Marianas. Los paradigmas que se generaron a
partir del estudio en continentes y en la zona oceánica llevó a que entrados los 80’s
se evaluara el concepto de suprasubducción como origen de las ofiolitas.
Fue Alabaster en 1982 quien da el primer modelo de que las ofiolitas se podían formar
como focos de esparcimiento encima de las zonas de subducción; este concepto fue
reforzado por Pearce en 1984 que demostró la hipótesis de Miyashiro.
Durante finales de los 80’s Jamieson evidenció en estudios sistemáticos de
geocronología que los complejos ofiolíticos se encontraban encima de rocas
metamórficas de tipo anfíbolitas en la parte superior y esquistos verdes en un orden
descendiente.
Ya en los 2000 Wakabashi y Dilek usando métodos de precisión radiométrica e
isotópica de distintos tipos de ofiolitas y sus asociaciones metamórficas mostraron
que la diferencia de edad es de menos de 10 Ma (en promedio 5 Ma
aproximadamente). Esto llevó a Dilek a corroborar su hipótesis de que las rocas
ígneas habían sido desplazadas desde su punto de origen hacia los márgenes
continentales entre 5 y 10 Ma desde su formación.
Esto explicaría la no existencia de edificios volcánicos en arco en zonas de obducción
de ofiolitas dado el corto tiempo de la subducción y su rápido agotamiento (Shervais,
2001)

El proceso de emplazamiento de las ofiolitas


Como se explicó durante la conferencia de Penrose en 1972 la secuencia del
complejo de ofiolita consta desde rocas ultramáficas hasta sedimentos marinos como
se muestra a continuación: (Dilek, 2014)
Figura 1: Columna ideal de Ofiolita. Fuente: Dilek and Furnes, Ophiolites and their origins, 2014.

Ahora bien, el problema mayor para explicar este proceso de obducción es entender
cómo una placa que es más densa no se subduce bajo la placa menos densa que es
la continental, para que esto sea posible es necesario que se genere una subducción
primaria de un material menos denso que el de la futura ofiolita, a continuación, se
muestra las ideas del emplazamiento ideal de las ofiolitas en el mismo sentido de la
subducción y en sentido contrario a esta.
Figura 2: Modelo preferente de emplazamiento de una ofiolita sobre un margen continental (mismo sentido de subducción)
contrastado con el emplazamiento en sentido antitético de la subducción. Fuente: Wakabayashi y Dilek, 2003

La ocurrencia y clasificación de las ofiolitas se determina a partir de dos factores


primordiales: la tectónica, magmatismo y procesos geoquímicos en la formación de
estas; y la preservación del complejo ofiolítico después del proceso mecánico de
emplazamiento.
A partir de esto se pueden diferenciar las ofiolitas relacionadas a la subducción y las no
relacionadas.
Aquellas que no fueron afectadas por procesos de subducción son: Margen continental
(CM), dorsal medio oceánica (MOR) y de tipo Plumas (P) y aquellos que se relacionan
con zonas de subducción incluyen Zona de suprasubducción (SSZ) y de arco volcánico
(VA)
Orden de cristalización de
Tipos de ofiolitas y configuraciones tectónicas Ejemplos actuales
minerales

Ligurian y el oeste de
las montañas de las Olivino, plagioclasa y
De margen continental
Alpinas, Jormua clinopiroxeno
(Finlandia)

Pluma distal Dorsal de Macquarie,


Olivino y plagioclasa
MOR Masirah (Oman)

No relacionados De dorsal medio Pluma proximal Olivino, plagioclasa y


Islandia
a subducción oceánica MOR clinopiroxeno (puede faltar)

Fosa proximal Olivino, plagioclasa y


Taitao (Chile)
MOR clinopiroxeno

Olivino, plagioclasa,
Nicoya (Costa Rica);
De pluma clinopiroxeno y ortopiroxeno
Bolívar (Colombia)
(puede faltar)

Olivino, plagioclasa,
Troodos (Chipre);
clinopiroxeno y ortopiroxeno.
Kizildag (Turquía);
Antearco También se puede dar
Semail (Oman); Betts
Olivino, clinopiroxeno y
Cove (Canada)
De zona de plagioclasa.
suprasubducción
Olivino, plagioclasa y
Retroarco Rocas verdes
Relacionados a clinopiroxeno.
(continental y (Chile); Solund-
subducción También puede darse Olivino,
oceánico) Stavfjord (Noruega)
clinopiroxeno y plagioclasa

Olivino, plagioclasa y
Smartville clinopiroxeno.
De arco volcánico (California); Itogon También se puede dar
(Filipinas) Olivino, clinopiroxeno y
plagioclasa.
Tabla 1: Tipos de ofiolitas con ejemplos y orden de cristalización, adaptado de: Dilek y Furnes, 2014.
Existen distintos tipos de mecanismos para generar el emplazamiento de las ofiolitas, en
2003 Dilek y Wakayabashi reconocen cuatro (4) prototipos distintos de ofiolitas basados
en su forma de emplazar, así como la naturaleza del basamento subyacente tectónico;
ya en 2014 definirán cinco (5) prototipos principales con su mecanismo asociado,
distribuidos de la siguiente manera:
No relacionadas con subducción
Se hablará de ofiolitas no relacionadas a subducción cuando su construcción magmática
no se vea afectada por procesos de subducción y se pueden dividir en:
1. Ofiolitas de margen continental:
a. Ofiolitas del mar de Ligur: Estas se formaron durante el jurásico medio en
los Apeninos septentrionales y los Alpes occidentales durante y después
de la separación de Adria y África de Europa, lo que llevó a la apertura del
mar de Piemont-Ligur descrito por Manatschal y Müntener en 2009. Luego
de este proceso las ofiolitas de margen continental fueron emplazados con
depósitos de fosas llamados esquistos lustrosos en los Alpes/Apeninos;
estas ofiolitas precipitaron por fallas de empuje al final del cretácico como
resultado de una zona de subducción desarrollada cerca al margen
continental de Adria. En los Alpes occidentales, un continente extensivo
(Sesia-Margna) y la corteza de la zona transicional oceáno-continente
subdujeron parcialmente debajo de Adria, lo que generó un metamorfismo
a facies de eclogita que fueron exhumadas luego del choque continental
que daría origen a la orogenia alpina.

Ilustración 1: Margen continental de ofiolitas tipo Ligur entre Europa y Adria. Fuente: Dilek y Furnes, 2014.

2. Ofiolitas de dorsal medio-oceánica:


a. Tipo Macquarie: Cuenta con una edad entre 11.5 a 9.7 Ma (datada con
Argón 40 y 39) que se encuentra expuesta a lo largo del límite de la falla
de transformación entre las placas australianas y del Pacífico según
Meckel en el 2003. La transpersión ha jugado un papel vital en este
proceso, ya que a través de este límite durante los últimos 6 Millones de
años se ha generado el desplazamiento tectónico y la elevación de la
corteza de la dorsal medio-oceánica. El limite de la placa transformada
conecta hacia el norte y el sur con dos fosas activas y se encuentra en
proceso de conversión en una zona de subducción intraoceánica.
En esta isla se puede evidenciar la estratificación de Penrose completa,
hasta los basaltos y los sedimentos asociados, sin embargo, aún se
discute si esta isla hace parte de la definición de ofiolita dado que se
encuentra la antigua corteza oceánica superpuesta a la actual, por lo que
no se hablaría de un emplazamiento sino de una simple exposición de
rocas del manto superior y sus subsecuentes.

Ilustración 2: Dorsal próxima a la ofiolita de Macquarie, Oceano del sur e inicio de la subducción a lo largo del límite de la placa
transformante y transpresionante. Fuente: Dike y Furnes 2014.

b. Tipo Taitao: Situada al sur de Chile esta ofiolita fue emplazada dentro del
margen activo de Sur América como resultado de una interacción dorsal-
fosa, que se caracterizan por una baja presión y un metamorfismo de alta
temperatura de las rocas estructuralmente superpuestas a la ofiolita.
Ubicada en el Mioceno tardío la subducción de la dorsal oceánica pudo
resultar en el emplazamiento de una parte de la corteza más joven y con
menos carga en forma de ofiolita colocada en la placa superior. Hacia 5.6
Ma, momento del ascenso de Chile por la colisión con la fosa Perú.Chile,
una porción de la litosfera oceánica aún caliente se separó de la placa
descendente y se incorporaría al margen continental.

Ilustración 3: Ofiolita de Taitao y su emplazamiento a través de la interacción dorsal-fosa. La ofiolita y las rocas del margen
continental son intruidas por plutones graníticos originados por la subducción de la dorsal. Fuente: Dike y Furnes 2014
3. Ofiolitas de pluma: Occidente de Colombia: Las ofiolitas de alrededor del caribe
expuestas en Venezuela, Colombia, Costa Rica, La Española y Puerto Rico
datadas sobre el cretácico son una representación de la meseta oceánica del
Caribe (Kerr et al, 1998). Esta corteza tenía un espesor de aproximadamente 20
km que se formó en la placa de Farallón sobre la pluma del manto de Galápagos
durante el Cretácico superior. Al igual que las de tipo Taitao, una parte soportó la
subducción y se desacopló de su manto litosférico, generando que las lavas
basálticas, gabros y rocas ultramáficas se acumularan en el margen superior de
la placa. En Colombia, los basaltos, doleritas y gabros se intercalan
tectónicamente con rocas de tipo metasedimentarios del prisma de acreción del
margen norte de Sudamérica.

Un ejemplo de esto es la llamada Ofiolita de Aburrá donde las dunitas y rocas


ultramáficas se generaron en un ambiente de suprazona de subducción que
incluía un arco de islas y una cuenca de retro o antearco que fueron
desplazados lentamente hasta el continente para después avanzar sobre el
borde occidental. Se calcula que esta colisión se generó entre el triásico tardío y
el cretáceo temprano; además, se encuentra evidencia que estas rocas sufrieron
metamorfismo en facies de anfibolitas durante su emplazamiento, aunque
algunas conservan las texturas ígneas gabróicas. (Restrepo, J.J. 2007)

Ilustración 4: Partes de las ofiolitas tipo Pluma del Caribe en un prisma de acreción metamorfico en el occidente de Colombia
Fuente: Dike y Furnes 2014

Relacionadas con subducción:


Se hablará de relación con el proceso de subducción cuando la construcción
magmática de las ofiolitas se vea afectada por reciclaje de productos durante este
sistema.
1. Ofiolitas de zona de Suprasubducción (SSZ) en antearcos:
a. Ofiolita de Oman: Con características únicas, la ofiolita de Oman con un
espesor de aproximadamente 15 km es un remanente de la litosfera
oceánica de Tethyan. Ha sido considerada por mucho como la mejor
expuesta y la más completa del mundo, sin embargo, aún continúan los
debates sobre el o los mecanismos responsables de su emplazamiento.
Algunos investigadores como Dewey, Hacker, Searle y otros han
propuesto que esta ofiolita fue emplazada sobre una zona de subducción
alejada del margen continental, mientras que otros como Gregory y Gray
consideran que un paso anterior a la subducción bajo el mismo continente
fue seguido por un colapso y posible formación de una nueva zona de
subducción lejos del continente.
Para Wakabashi y Dilek esta última es la explicación más adaptable a la
realidad.

La controversia radica principalmente en la interpretación de la


geocronología asociada a las rocas metamórficas de alta presión que
deben ocurrir estructuralmente debajo de la ofiolita, sin embargo,
muestran gradientes de temperatura y presión inversas, lo que indicaría
un compuesto de láminas de roca formadas a distintas profundidades que
vendrían después a ser acopladas por fallas de empuje (Hacker et al.
1996) así como que las edades Ar/Ar de las eclogitas exceden a las de la
ofiolita por un exceso del mismo elemento lo que resultaría en edades
significativamente más antiguas que las de cristalización real de estas.

Si se llegase a concluir que las rocas metamórficas de alta presión son


más antiguas que la ofiolita que se sobrepone generaría un gran avance
en el entendimiento de estos complejos, dado que, el caso de Oman sería
único en cuestiones de configuración tectónica a comparación de las
demás estudiadas.

Ilustración 5: Zona de suprasubducción: Ofiolita de antearco de Oman y su suelo metamórfico empujado


dentro del margen de la placa de Arabia. Fuente: Dilek y Furnes, 2014.
2. Ofiolitas de arco volcánico: El sistema de arco de isla de Magnitogorsk en los
Urales consiste en un complejo volcánico de inicio de subducción Devónico
temprano, que está compuesto de basalto rico en Magnesio, andesita basáltica,
picrita, lavas y diques boniníticos y rocas volcaniclásticas. Estas unidades están
cubiertas por rocas volcánicas calcoalcalinas del Devónico temprano a medio.
Este complejo volcánico está tectónicamente sostenido por un prisma de
acreción, que incluye láminas de empuje convergente del oeste compuestas de
rocas metapelíticas, mélange de matriz de serpentinita y esquistos azules a
rocas eclogíticas (Brown et al., 2006). Los protolitos de estas rocas de alta
presión fueron las unidades de margen pasivo anterior al margen continental de
Europa del Este parcialmente subducido. El emplazamiento del sistema de arco
Magnitogorsk en el continente europeo oriental se vio facilitado por la
subducción parcial de las rocas del margen continental debajo del antearco.

Ilustración 6: Ofiolita de arco volcánico Magnitogorsk que descansa tectónicamente sobre un prisma de acreción portador de
esquistos azules y el margen continental de Europa del Este. Fuente: Dilek y Furnes, 2014.

Conclusiones:
El término “ofiolita” ha sufrido grandes modificaciones desde que en sus comienzos se
utilizó para nombrar un tipo de rocas máficas y ultramáficas hasta la actualidad donde
se utiliza para denotar un complejo de rocas con características intrínsecas de
representación de la corteza oceánica antigua, es un trabajo increíble conocer todo el
proceso de desarrollo intelectual, académico y práctico que grandes investigadores
llevaron a cabo en busca de un consenso general sobre un proceso tan complicado
como es la obducción, es importante denotar que lo anteriormente mencionado no es ni
se acerca al final de una discusión que se alimentará con más evidencias, por ejemplo,
actualmente la agencia Japonesa de ciencias y tecnología de la tierra y el mar
“JAMSTEC” planea a través de un super taladro llamado “Chikyu” llegar al manto
superior de la Tierra, lo que podría ayudar a entender más la composición, dinámicas y
procesos asociados a la corteza oceánica y su constante unión con el manto superior.
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