Procesos de aprendizaje: Adquisición de las habilidades comunicativas
2º Doble Grado de Magisterio de Educación Primaria y Educación Infantil
Anabel Peña Alonso
LA EDUCACIÓN PRIMARIA BILINGÜE
Desde hace más de 10 años nuestro país se enfrenta a un gran reto, crear una sociedad bilingüe en inglés. El dominio de idiomas extranjeros del resto de países de la unión europea, en comparación con España, han llevado al gobierno a implantar medidas para paliar esta situación. Exigir cada vez niveles más altos de inglés, o exigir un mayor abanico de idiomas en nuestro currículo, ha hecho que la sociedad comience a sumergirse en el mundo del aprendizaje de nuevas lenguas. Ahora bien, la raíz de todo este cambio se encuentra en las escuelas, y es por eso que cada vez son más los colegios que cuelgan el cartel de “centro bilingüe” en sus puertas. Pero, ¿Está preparado nuestro país para hacer frente a este nuevo sistema bilingüe?
La educación, como muchos otros ámbitos en nuestro país, se encuentra
limitada por un cinturón que cada vez aprieta más, los recortes. En primer lugar, lo ideal en los programas bilingües es que el equipo docente estuviese formado, en gran parte, por profesores nativos ingleses. Ahora bien, como la realidad en los centros no es esa, se ha de formar a los profesores para alcanzar un nivel de inglés suficiente que permita impartir sus asignaturas en esta lengua. A esto se suma el hecho de que a pesar de que el currículo es igual, el temario y la manera de darlo en una lengua diferente a la lengua materna de los alumnos, no puede ser igual. En el periódico El País muchos profesores relatan que ante la falta de recursos, supone un esfuerzo extra conseguir sacar adelante las clases en la segunda lengua. Mientras antes disponían de varias horas semanales para prepararse, ahora cuentan con escasos minutos, por lo que el trabajo traspasa el horario laboral.
Por no hablar de los profesores que nos encontramos en proceso de formación.
Comenzamos con nivel mínimo de inglés correspondiente a un B1, como requisito para obtener el título universitario. Hoy en día, exigen un nivel C1 para trabajar en la mayoría de los colegios. La intención de estos es que los docentes estén capacitados para hacer de estos programas bilingües un éxito, y evitar los problemas que suponen la formación de los docentes ya en práctica, como he mencionado anteriormente. Y aunque, es cierto que no todos los colegios son bilingües, la idea de futuro es que sí lo sean.
Por otro lado, la implantación de estos programas ha generado cierta
segregación, acentuando de manera brusca la diferencia entre clases sociales. En muchos de los centros públicos que han puesto en marcha el bilingüismo, solo se lleva a cabo en ciertas clases dentro de un mismo ciclo. Es por ello, que se han producido guetos dentro del propio centro, otorgando un estereotipo de educación inferior a aquellos que no pertenecen a la sección bilingüe. De la misma manera, en los centros en los que todas sus clases están dentro de estos programas, también se produce desigualdad. Si analizamos los perfiles de los alumnos, muchos de ellos no llegan al nivel de inglés que se exige y por tanto, a la dificultad que ya supone el aprendizaje de una materia, se le añade la falta de compresión en el aula de lo que se explica. En nuestro país poseemos un alto porcentaje de fracaso escolar, y en muchas ocasiones, este hecho hace plantearse la importancia del bilingüismo. Además, debido a las Procesos de aprendizaje: Adquisición de las habilidades comunicativas 2º Doble Grado de Magisterio de Educación Primaria y Educación Infantil
Anabel Peña Alonso
diferentes situaciones familiares no todos los alumnos pueden acceder a profesores
particulares, a academias, o incluso el nivel académico de los padres imposibilita la ayuda en casa.
Una vez estos alumnos han conseguido superar asignaturas como
Matemáticas o química en inglés, cuando quieren acceder a la universidad se encuentran con que han de hacer la prueba de acceso en español. Algo que les es realmente complicado debido a la cantidad de vocabulario especifico que posee estas asignaturas, y que ellos han aprendido en inglés. Además, según profesores universitarios los alumnos y alumnas comienzan la universidad con niveles académicos inferiores a los esperados. ¿Quizás nos centramos demasiado en el aprendizaje del inglés, y nos olvidamos de aprender realmente matemáticas, lengua o ciencias naturales?
A pesar de todo, no debemos olvidarnos de los beneficios que supone
implantar programas bilingües en los colegios. Está demostrado, a través de estudios, que el proceso de aprendizaje en dos idiomas tiene efectos positivos en los procesos cognitivos de los niños y niñas.
En conclusión, considero que los programas bilingües son beneficiosos para
todos, siempre y cuando se lleven a cabo de manera correcta. Y lo cierto, es que en España no es el caso. Creo que la vergüenza de ocupar puestos bajos en niveles de inglés dentro de nuestra sociedad, en comparación con países importantes de la unión europea, ha llevado a nuestro país a implantar estos programas sin los medios ni los recursos suficientes. Se han implantado de forma rápida, pero sobretodo desigual entre las comunidades autónomas, algo que tiene poco sentido. Es por ello, que no es solo responsabilidad de los centros ni de los profesores buscar medidas para adaptar estos programas en nuestra sociedad, sino que a nivel de estado se deben buscar soluciones que de verdad lo hagan posible.