Vous êtes sur la page 1sur 9

CONCEPTO DE HECHO SOCIAL Sin duda, la problemática de los sectores populares para América Latina, posee

El sociólogo Emilio Durkheim estudió y precisó el concepto de hecho social, definiéndolo como aquellos hechos que particularidades que obligan a repensar las categorías planteadas por los clásicos del
consisten en modos de actuar, de sentir y de pensar, que se le imponen al individuo humano en forma coactiva, marxismo desde una mirada propia. Sin embargo, consideramos un buen punto de partida la
siendo exteriores a sí mismo. revisión de la obra gramsciana, ya que algunas de sus categorías nos ayudan a problematizar
Los hechos sociales son conductas humanas habituales, no dependientes de la constitución biológica ni psíquica de tanto la forma de comprender la sociedad en su conjunto, como también las formas de
las personas, sino de la sociedad que integran, que tiene una existencia singular y propia. acercamiento a ciertas problemáticas específicas, como la de la cultura popular.
Si bien a la sociedad le interesan todas las acciones de una persona, como dormir, comer o hacer gimnasia, ya que se
necesita que la población esté sana psíquica y físicamente para que la suma de los individuos saludables de
por resultado un conjunto social óptimo, esos hechos no pueden calificarse como sociales, pues esos hechos no son Si bien, tanto el concepto de cultura como el de popular, aparecen especialmente escurridizos
impuestos (si lo fueran sí serían hechos sociales, como por ejemplo cuando se reúnen a comer un grupo de para su definición –aspecto que se potencia cuando van juntos–, un recorrido histórico por
ejecutivos y lo hacen en forma protocolar). sus diversas acepciones, nos da la posibilidad de aproximarnos a alguna de las formas que
resultan más útiles para el presente trabajo.
Hecho social es lo que es realizado en forma independiente de uno mismo, aunque se adhiera conciente o
inconcientemente a ellos. Son ejemplo de hechos sociales, pagar impuestos, cumplir con un contrato, cumplir los Resulta pertinente considerar la cultura popular, como el conjunto de “ formas y actividades
deberes conyugales o los paterno filiales. Estos hechos que el individuo ejecuta los concibe como obligatorios pues cuyas raíces estén en las condiciones sociales y materiales de determinadas clases, que hayan
así ha sido educado, él no los ha inventado. A un niño se le enseña a escribir, a leer, a ser respetuoso, a comer con quedado incorporadas a tradiciones y prácticas populares. Lo que aquí define la cultura
cubiertos, a que debe ir a la escuela, que cuando sea mayor deberá trabajar, que debe pagar lo que compra con popular, son las relaciones en tensión continua (relación, influencia, antagonismo) con la
dinero etcétera. Los hechos sociales son impuestos por la sociedad para lograr que sus miembros estén unidos por cultura dominante” .2
una similar forma de pensar y de actuar. Cada hecho social es explicado por otro hecho social que se constituye en su
causa.
Con esto se pretende considerar como aspectos de la cultura popular a los modos y prácticas
Al ser externos a los individuos, los hechos sociales
que surgen como respuesta a las demandas de grupos de personas que comparten una
GRAMCSI situación social y económica de dominación. Estas formas no suponen exclusivamente a las
que poseen una génesis popular “ pura” , sino que se incluyen en ellas aspectos propios de
otros sectores sociales que son incorporados a las prácticas de los sectores subalternos.
Introducción
Esto, desde ya, no implica desconocer la situación de dominación a la que dichos sectores se
Pueden encontrarse importantes antecedentes sobre los abordajes de la cultura popular, en ven expuestos, ni tampoco sobredimensionar las capacidades culturales (en un sentido que
las corrientes románticas del siglo XIX en Europa, las cuales señalaron la importancia de la incluya lo político–social) de los mismos. Más bien consideramos el campo de la cultura
diversidad cultural, con el propósito de integrar la variedad de culturas hacia un proyecto de popular como un terreno siempre dinámico en el que se cruzan intereses y proyectos
unificación nacional, acorde al liberalismo emergente. Por ello prefirieron hablar de opuestos. Allí es donde los sectores populares viven la dominación en su propio terreno, pero
“ culturas” , en plural: las culturas específicas y variables de diferentes naciones y períodos, también donde encuentran las herramientas –saberes, prácticas, discursos, visiones, etc.–
pero también las culturas específicas y variables de los grupos sociales dentro de una misma para estructurar formas de participación, de protesta, de resolución de conflictos, etc.
nación. Posición que los distanciaba de la caracterización despectiva del pueblo propia de la
cosmovisión ilustrada1.
La importancia de Gramsci para el estudio de la cultura popular

De los románticos a esta parte las formas de aproximación al problema se han multiplicado,
Antonio Gramsci (1891-1937) como militante y pensador comunista, se preocupó por darle
dando por resultado una diversidad de marcos teóricos disponibles y no siempre
visibilidad a la cultura subalterna, superando las visiones economicistas preponderantes en las
complementarios. En el presente artículo nos interesa ocuparnos de aquellas propuestas que
corrientes marxistas de su época, que sólo percibían expresiones de sumisión en las formas
se originan al interior de la tradición del materialismo histórico, y, más precisamente, de la
populares y, en sus prácticas, un mecánico reflejo del lugar ocupado en la estructura
visión del pensador y político italiano Antonio Gramsci, representante del llamado marxismo
económica.
occidental heterodoxo.

Gramsci desarrolló marcos categoriales nuevos para intentar una aproximación más compleja
La elección de Gramsci no es casual. Su aporte para la renovación del marxismo– por
y enriquecedora a lo que ocurría en el interior de las clases sociales – no sólo en el
ejemplo, en lo referido a la cuestión nacional o la relación entre los distintos sectores que
proletariado, sino en el resto de los sectores subalternos y en las clases dominantes–. Para
conforman las clases sociales– mantiene vigencia a la hora de realizar una lectura de la
ello desplegó una serie de conceptos, anclados en la experiencia histórica y en su propio
cultura popular en América Latina. Esto es, entre otras razones, porque permite abordar a
aprendizaje como político, que ayudan a comprender las formas concretas que adquieren las
sectores de la sociedad que no “ cuadran” en las categorías de proletarios o burgueses, muy
negociaciones, enfrentamientos y alianzas entre sectores de la sociedad, es decir, la lucha de
apropiadas para pensar algunas sociedades europeas industrializadas de fines del XIX y
clases. Surgen así, conceptos creados o reformulados desde una visión novedosa. Hegemonía,
mediados del XX, pero insuficientes hoy para agotar la complejidad de nuestras sociedades.
bloque histórico, intelectual orgánico, etc., aparecen como los aportes más fructíferos y útiles
para el análisis histórico y social, con fuerte anclaje en lo nacional –aspecto no profundizado
anteriormente por el marxismo–. Ahora bien, la riqueza de estos conceptos y su capacidad de
utilización en la exploración de la realidad concreta, ha opacado, a nuestro entender, otras Aparece aquí, la idea de un saber “ inherente” , “ natural” , “ innato” , que se gesta y utiliza
nociones igualmente importantes para el análisis histórico y político. Este es el caso de los en la vida cotidiana, y que si bien no tiene la complejidad del conocimiento científicamente
conceptos de filosofía espontánea y sentido común, que se presentan como núcleos estructurado – propio de quienes se dedican profesionalmente a pensar – es igualmente digno
significativos del pensamiento de Gramsci, en lo relativo a la cultura popular. Y todo ello sin de reconocimiento. Esto nos permite ubicar, en el interior de esta filosofía espontánea, el
olvidar, además, que constituyen conceptos axiales en la tesis gramsciana de la construcción concepto que desarrollaremos en el siguiente apartado: el sentido común.
de contrahegemonía como estrategia central para estructurar otra sociedad.
El sentido común como parte integrante de la filosofía espontánea
Filosofía espontánea: el conocimiento al alcance de “ todo el mundo”
El sentido común, al decir de Gramsci, es un “ concepto equívoco, contradictorio,
Contra la idea, profusamente aceptada, de una práctica filosófica exclusiva de determinados multiforme” que “ es un producto y un devenir histórico” por lo que no existe una única
“ pensadores” o “ intelectuales” , el político italiano presenta una noción novedosa en versión de él8. Definido como una “ expresión de la concepción mitológica del mundo (que) no
muchos aspectos: todos los hombres son filósofos, “ en cuanto obran prácticamente y en sabe establecer los nexos de causa a efecto (… ) su rasgo más fundamental es el de ser una
cuanto en su obrar práctico se halla contenida implícitamente una concepción del mundo” 3. concepción disgregada, incoherente, conforme a la posición social y cultural de las
Subyace aquí, una noción de filosofía entendida como concepción del mundo que permite multitudes” 9.
obrar, comprender y proyectar acciones en cierta dirección (y que por tanto, lo impide en
otras). Podríamos decir que el sentido común –como parte fundamental de la filosofía espontánea–
es un saber “ inmediato” , ligado a la resolución de conflictos o necesidades ocurridos en la
La idea de la existencia de la filosofía –o de la capacidad filosófica– en todos los hombres, vida cotidiana y que, por su cercanía a lo mundano, obstruye la reflexión profunda, crítica,
como integrantes de grupos concretos que portan cierta visión del mundo, no impide sin trascendente que permitiría conocer causas mediatas e inmediatas de los sucesos10.
embargo, la diferenciación entre sus formas. Las hay “ espontáneas” y “ profesionales” , y
su principal distinción reside en la profundidad que la reflexión adquiere en cada caso: en Otras características del “ sentido común” que apunta Gramsci en sus escritos es la de ser
aquella, casi inexistente; en ésta, sistemática y consciente. adoptado acríticamente, sin conciencia teórica clara, ni mayor problematización. De allí se
concluye que “ que las masas, en cuanto tales, sólo pueden vivir la filosofía como una fe” , es
Es así que “ en cada época coexisten muchos sistemas y corrientes filosóficas” 4, por lo que decir, con un “ carácter no racional” 11.
no podría hablarse de una visión del mundo pura o exclusiva de un determinado grupo social
que se impone, sin más, al resto. Más bien se trata de la mixtura de miradas –con la A nuestro entender, nos aproximamos a una acepción (que no es la única, por cierto) del
preeminencia de una de ellas– que conforman la visión del mundo de una época y que sentido común, en la que la palabra sentido se refiere a lo que “ experimentan los sentidos”
“ culmina en una determinada dirección y (...) se torna norma de acción colectiva, esto es, –no la conciencia ni la razón–, una “ intuición” . Por su parte, la idea de común se vincula
deviene ‘ historia’ concreta y completa (integral)” 5, esto es, abarcadora de toda la aquí, a la noción de “ simple” o “ no compleja” . Es decir, sentido común como una
sociedad. “ intuición no compleja” , que no conlleva un gran esfuerzo intelectual; que sólo requiere de
confianza o fe para justificarse.
Aquí reside la importancia de considerar a la filosofía como una visión del mundo conformada
por diversas miradas, aunque siempre una de ellas prevalezca. Ello nos permitirá por un lado, Sin embargo, Gramsci, no utiliza el concepto sentido común en forma peyorativa o
tomar en cuenta otras visiones que no son dominantes; y por otro, resaltar el displicente. Por el contrario, incluso atribuye ciertas ventajas al sentido común respecto de las
condicionamiento que implica la imposición de una de las visiones, si se considera a la demás formas de conocimiento. “ En una serie de juicios, el sentido común identifica la causa
filosofía dominante como matriz de comprensión y acción de una época. exacta y simple al alcance de la mano (...) En el ‘ sentido común’ (hay) cierta dosis de
‘ experimentalismo’ y de observación directa de la realidad (si bien empírica y limitada)” 12.
Si las masas ven dificultada su capacidad reflexiva, no es por causas naturales o ajenas a la
La noción de “ filosofía espontánea, propia de todo el mundo” , debe delimitarse y
forma social dominante, sino que por el contrario, la imposibilidad de la conciencia profunda
caracterizarse para su análisis y comprensión. Para Gramsci se trata de la filosofía contenida:
es parte imprescindible para el mantenimiento del sistema. Es por ello que se interesa por
indagar este sentido común, al punto de descubrir en él –como veremos más adelante– la
“ 1. en el lenguaje mismo, que es un conjunto de nociones y conceptos determinados; base necesaria para la transformación del orden que lo condiciona.

2. en el sentido común, y en el buen sentido6; En definitiva, si bien pueden establecerse diferencias entre el tipo de conocimiento que aporta
el sentido común y el que procede de la ciencia, se los piensa como formas complementarias
de comprensión de la realidad.
3. en la religión popular y, por consiguiente, en todo el sistema de creencias, supersticiones,
opiniones, maneras de ver y de obrar que se manifiestan en lo que se llama generalmente
folclore” 7. La posibilidad de error en el análisis social
El análisis situado en un mecanicismo extremo, podría llevar a buscar una total más o menos enérgica, que puede llegar hasta un punto en que la contradictoriedad de la
correspondencia entre el lugar que ocupan los sujetos en la estructura económica y su forma conciencia no permita acción alguna, ninguna decisión, ninguna elección, y produzca un
de pensar y actuar (como parte de la superestructura). De este modo, quienes en el análisis estado de pasividad moral y política” 16.
se ubican en los sectores dominados, tendrían prácticas y discursos determinados por esa
estructura, lo que daría como resultado, nociones y acciones falsas o propias de los intereses
La importancia del predominio de una visión del mundo es doble. Por un lado, reside en “ el
de la clase dominante.
logro de una unidad ‘ cultural social’ , por la cual una multiplicidad de voluntades
disgregadas, con heterogeneidad de fines, se sueldan con vistas a un mismo fin, sobre la base
Contrariamente, Gramsci quiebra esta lógica –que menosprecia las capacidades de las masas de una misma y común concepción del mundo” ; y por otro, en el “ logro de un mismo
e impide toda iniciativa “ hasta que las condiciones objetivas estén dadas” – al poner de ‘ clima’ cultural colectivo” 17.
manifiesto la existencia de incongruencias entre lo dicho y lo actuado, donde se puede
encontrar:
Por todo esto, lejos de intentar encontrar prácticas rebeldes en todo lo que a primera vista se
oponga al orden dominante, el ocasional desfasaje entre “ el pensar y el obrar” de los
“ Contraste entre el pensar y el obrar, esto es, la coexistencia de dos concepciones del sectores subalternos, debería obligarnos a profundizar nuestra atención en las causas que
mundo, una afirmada en palabras y la otra manifestándose en el obrar mismo [y que] no se impiden que una otra visión del mundo emerja como aglutinadora de las clases subalternas y
debe siempre a la mala fe. Dicho contraste sólo puede ser la expresión de contradicciones consiga posicionarse de modo que pueda disputar la hegemonía a los grupos dominantes.
más profundas de orden histórico social. Significa ello que un grupo social tiene su propia
concepción del mundo, aunque embrionaria, que se manifiesta en la acción, y que cuando
Del mismo modo, pensar que la simple evocación de valores, discursos o prácticas opuestos al
irregular y ocasionalmente, por razones de sumisión y subordinación intelectual, toma en
orden dominante representa en sí misma una garantía de transformación, puede acarrear
préstamo una concepción que no es la suya, una concepción de otro grupo social, la afirma de
graves equivocaciones teóricas y políticas. Inclusive, estas prácticas incongruentes con la
palabra y cree seguirla, es porque la sigue en ‘ tiempos normales’ , es decir, cuando la
visión dominante, pueden llevar –como advierte Gramsci– a la inacción.
conducta no es independiente y autónoma, sino precisamente sometida y subordinada” 13.

En definitiva, la posibilidad de hallar acciones o discursos que no reflejen automáticamente la


De modo que pueden producirse acciones que no coinciden con lo expresado en palabras, es
situación de dominación que viven las clases subalternas, debería servirnos para ampliar
decir con la concepción del mundo que se exterioriza o se pone de manifiesto, y que es la
nuestra posibilidad de comprensión. Si por un lado, son indicadores de la existencia de otros
visión predominante14. Esto se debe a que, en realidad, en las prácticas de los sectores
valores, modos o miradas, por el otro nos advierten sobre el peligro de sobrevalorar esta
subalternos puede cristalizarse una filosofía distinta a la dominante (otra filosofía), que logra
visión propia de los sectores dominados. Se trata, entonces, de utilizar el hallazgo de
filtrarse en determinados momentos históricos y resquebrajar la ideología hegemónica,
aparentes incongruencias, en un doble sentido: por un lado, como herramienta de análisis
muchas veces reproducida acríticamente en el lenguaje de los dominados. “ Casi se puede
que permita complejizar la perspectiva teórica para comprender la multiplicidad de variables
decir que [el hombre de masa] tiene dos conciencias teóricas (o una conciencia
que posee la realidad; por otro, de apropiarse de elementos teórico–prácticos que permitan
contradictoria): una implícita en su obrar y que realmente lo une a todos sus colaboradores
reorientar la acción política en el sentido de colaborar en la concientización de las masas e
en la transformación práctica de la realidad; y otra superficialmente explícita o verbal, que ha
impedir que la contradictoriedad señalada refuerce el sistema de dominación, por no hallar los
heredado del pasado y acogido sin crítica” 15.
canales necesarios para su desarrollo.

Lo interesante de esta observación de Gramsci, es que permite analizar ciertas acciones,


En esta línea debe interpretarse la advertencia realizada por Gramsci cuando critica las
ocurridas al interior de las clases subalternas, como expresión concreta de una (otra) visión
versiones mecanicistas del materialismo vulgar. A propósito del tema de la posibilidad del
del mundo. Si bien, estas prácticas subalternas no tienen siempre un carácter “ consciente”
error, Gramsci resalta que nunca es contemplada en un análisis de tipo reduccionista que
(debido justamente al condicionamiento impuesto por los sectores dominantes) o se
“ considera a todo acto político como determinado por la estructura, inmediatamente, o sea,
contradicen con los significados efectivamente articulados como lenguaje, podrían a nuestro
como reflejo de una modificación real y permanente (adquirida) de la estructura” 18.
entender, ser comprendidas y valoradas en su carácter intrínsecamente ruptural respecto a lo
hegemónico.
Esta consideración resulta muy apropiada para pensar en ciertas acciones de oposición o
protesta que encabeza un sector de las clases subalternas; pero también puede aplicarse a
De todas formas, sería grave restarle importancia a la concepción del mundo “ dicha en
manifestaciones de crisis en las capas dominantes.
palabras” , es decir, la que los hombres expresan oralmente más allá de que sus acciones se
correspondan absolutamente con ellas. Lo que los hombres dicen que son (como
exteriorización de la conciencia teórica que poseen), limita sus posibilidades de acción No queremos con esto dar a entender que dichos actos sean invenciones proyectadas por
concreta. Esta es una de las características fundamentales de la hegemonía lograda por las teóricos malintencionados. Por el contrario lo que se intenta, a partir del abandono del
clases dominantes: lograr que los dominados sientan que no lo son, y expresen esta mecanicismo extremo, es ponderarlas en su total extensión, sin desconocerlas ni
(errónea) convicción no sólo en palabras sino en hechos concretos. Como advierte Gramsci: sobredimensionarlas. No es la existencia de eventos de oposición, lo que está en duda, sino,
su valoración. Es decir, que el “ error” estaría en el análisis y comprensión desde visiones
deterministas, que impiden vislumbrarlas como manifestaciones de otra visión, al
“ Esta conciencia ‘ verbal’ no carece de consecuencias: unifica a un grupo social
considerarlas pruebas concretas de quiebres en la estructura.
determinado, influye sobre la conducta moral, sobre la dirección de la voluntad, de manera
Es por esto que muchas expresiones de resistencia o de simple descontento de las clases Por ello, lejos de esperar resultados favorables a partir del simple adoctrinamiento, por parte
subalternas (por ejemplo, protestas individuales o grupales o las mismas “ incongruencias” de los sectores ilustrados y comprometidos con su causa, las clases populares deberán ellas
de las que hablamos anteriormente), no implicarían necesariamente la existencia real de mismas, vivir el proceso del paso del “ sentido común” a la “ filosofía de la praxis” . Esto no
todas las condiciones necesarias para la transformación del orden establecido, ni la conciencia supone la imposibilidad de participación de sujetos “ externos” al pueblo, sino más bien, la
clara de la necesidad de un cambio por parte de la totalidad de las masas. Más bien, nuestro necesidad de una comunión de intereses en la que se respeten los tiempos, necesidades y
análisis debería tener en cuenta, tanto posibles decisiones erradas por parte de un líder formas de las masas.
político, como disputas en el interior del grupo dominante, ya que para Gramsci puede
tratarse de “ un impulso individual por cálculo errado, o también de una manifestación de las
Puede decirse que lo que debe eliminarse no es, simplemente, el sentido común; sino un
tentativas de determinados grupos (...) de asumir la hegemonía en el interior del
sentido común, que prevalece en estos sectores y que lo obligan a detentar una cosmovisión
agrupamiento dirigente19.
que no le es propia, sino impuesta, que obstaculiza cualquier forma de cuestionamiento o de
reclamo, y que llega a experimentarse subjetivamente “ como una fe” . Ante esto, lo que se
Nos permitiremos aportar una tercera causa de error en el análisis de hechos políticos y propone es el predominio de un nuevo sentido común, de carácter popular (en, desde y para
sociales, que no implicaría una correspondencia directa con aparentes transformaciones el pueblo), en el que ya no reinan las posiciones acríticas y la fe ciega, sino una visión
impostergables: los intentos de algunos sectores de las clases subalternas, que con mayor o problematizadora y consciente.
menor suerte, logran poner en jaque durante un tiempo, a la clase dominante. Estamos
pensando aquí, en aquellas manifestaciones organizadas o semi organizadas20, que parten de
“ Necesidad de nuevas creencias populares, de un nuevo sentido común y de una nueva
las clases subalternas, pero que por diversos motivos no logran estructurarse en verdadera
cultura y de una nueva filosofía que se arraiguen en la conciencia popular con la misma
alternativa. Si bien esto no apunta a restarles importancia ni a desestimar su estudio –como
solidez e imperatividad de las creencias tradicionales” 23.
tampoco a despreciar su práctica–, debería servir de advertencia al momento de su análisis.
En este sentido, la aparición de expresiones de protesta o crisis de las clases dominantes, no
tendría que ser evaluada como un “ anuncio” de la inminente y paulatina caída del sistema. Lo que se plantea es que el sentido común que portan los sujetos sirva de base sobre la cual
erigir un nuevo sentido común; que “ de la ganga popular” surja “ el metal de una nueva
clase” 24, despojada finalmente de los factores que limitan e impiden la conciencia crítica.
Lo que intentamos decir aquí es que, si bien existen hechos que entran en contradicción con
“ No se trata de una ciencia que es introducida desde fuera en al clase obrera; se trata más
la concepción dominante, esto no debería llevarnos ni a desconocer su importancia (por no
bien de renovar y hacer más crítica una actividad intelectual ya existente. La ideología
ser conscientes) ni a sobrevalorarla (por su carácter cuestionador). Caer en alguno de estas
marxista no sustituye a una conciencia defectuosa, sino que expresa un deseo colectivo, una
interpretaciones extremas conduciría, según nuestro entender, a alguno de los dos errores
orientación histórica presente en la clase” 25.
analíticos planteados: o bien descuidar la capacidad transformadora implícita en ciertas
acciones –más allá del grado de conciencia alcanzado–, o bien, en el otro extremo, encontrar
indicios de cambios irreversibles en todas partes. La filosofía de la praxis, está intrínsecamente ligada al pueblo, no sólo por su interés en lograr
la transformación del orden que lo mantiene sumido en la explotación y la dominación, sino
por su relación con el sentido común: lo retoma para superarlo y –junto con otros elementos–
La filosofía de la praxis como superación del sentido común
transformarlo en uno nuevo. Es decir, que no se trata de la producción de algo absolutamente
“ original” , sino más bien, de una mixtura de lo nuevo y lo viejo, que permite una mirada
Sin lugar a dudas, lo que Gramsci plantea al desmenuzar este tipo de eventos y advertir novedosa.
sobre posibles “ errores” en su análisis, es la necesidad de comprender y valorar la situación
concreta de las clases subalternas y poner de relieve la necesidad de unir teoría y práctica,
Otro aspecto por el cual el materialismo se relaciona con el sentido común, positiva y
para lograr así la acción consciente y una correcta interpretación de la acción. Esta es la
estrechamente, lo encontramos en el hecho de que éste no se “ deja desvariar por enredos y
posibilidad (y dificultad) que ofrece, como ninguna otra, la filosofía de la praxis21, que supone
obstrucidades seudoprofundas, seudocientíficas, etc.” 26. Una condición necesaria –aunque no
la “ igualdad o ecuación entre “ filosofía y política” , entre pensamiento y acción” 22. Así, el
suficiente– para el desarrollo de la filosofía de la praxis en toda su magnitud, que no debería
programa de la filosofía de la praxis lleva a Gramsci a desarrollar una estrategia que permita
desconocerse. Son muchas las ocasiones en las que personas que adhieren a un proyecto
la progresiva toma de conciencia de las masas populares, en un proceso de abandono del
transformador desestiman lo que surge desde el pueblo por considerarlo un razonamiento
viejo sentido común y acercamiento a un “ nuevo sentido” cuya base se encuentra en el
“ falso” o “ errado” , propio de sujetos dominados.
materialismo histórico.

No está de más aclarar, que para Gramsci, la filosofía de la praxis no puede ni debe
De lo que se trata entonces, para las masas populares, no es de una lisa y llana “ adquisición
estancarse en un ejercicio mental, sino que incluye la práctica consciente de los sujetos
de una conciencia” –como si tuvieran su mente en blanco–, sino de un proceso más complejo
sociales.
de “ reemplazo” de concepciones, que las ponga en posición de convertirse en hegemónica
(dirigente de los aliados y dominantes de los opositores). Nos referimos a la superación
dialéctica de un estado de cosas, que no deshecha lo viejo, sino que lo utiliza de base para la Por todo esto, creemos que la propuesta gramsciana deber ser dimensionada en toda su
construcción de lo “ nuevo” . riqueza política y teórica. El planteo de la necesidad de partir desde el sentido común (y no
hacia, lo que supondría “ bajar” al nivel de las masas), para su transformación, sumado a las
virtudes que se le reconocen (su capacidad para identificar la causa exacta y para evitar el
seudocientificismo) y a la idea de que todos los hombres son filósofos, constituyen Lo que queremos destacar de este texto, es el planteo de Marx de la “ necesidad de
definiciones filosófico–políticas fundamentales al interior del pensamiento materialista. comunidad” – a la que podríamos describir como un grupo organizado y consciente de su
situación32 – para la existencia de la clase como tal. En cierta forma, esto puede ser vinculado
con la propuesta gramsciana de transformación dialéctica de los sectores populares, a partir
Para Gramsci, la transformación del orden establecido, es impensable sin el involucramiento
de su vinculación con la filosofía de la praxis, como condición necesaria aunque no suficiente,
directo del propio pueblo; y aunque no desestima el rol de los intelectuales, advierte sobre lo
para una paulatina transformación social.
improductivo de una separación respecto a las masas. Las clases subalternas no son sólo las
beneficiarias directas del cambio, sino que deben ser sus ideólogos y ejecutantes 27.
En resumen: la comunidad es la base indispensable sobre la que se erige la clase. Esa
comunidad supone –además de condiciones económicas de existencia comunes– un modo de
Estas, que a primera vista podrían parecer aclaraciones innecesarias, constituyen nítidos
comprender la realidad compartida, que es resultado de las disputas entre visiones opuestas.
posicionamientos en los debates de su época (en cierta forma muy actuales aún hoy) sobre la
Allí es, entonces, donde además de encontrarse aspectos claramente impuestos, pueden
manera de transformar la sociedad. La posición del italiano no coincide con la de la mayoría
hallarse formas propias de los sectores subalternos y donde la filosofía de la praxis puede
de los políticos de izquierda de la época, e incluso choca en algunos aspectos, con las
interactuar con mayor claridad. La conjunción entre dichas formas y el materialismo histórico
concepciones más divulgadas del propio Lenin28.
darán como resultado un nuevo sentido común, superador del anterior debido a sus aspectos
críticos, conscientes y políticos.
La filosofía de la praxis se posiciona habitualmente de modo paradójico y confrontativo porque
debe problematizar (sin negar) el sentido común, pero también porque enfrenta y combate a
Los Intelectuales[editar]
las ideologías dominantes que condicionan ese sentido común. Si por un lado, debe ser
herramienta de superación para las masas –por lo que debe buscar formas no complejas de
difusión–; por el otro, necesita servirse de refinadas armas teóricas y políticas, para Para Gramsci, todos los hombres son intelectuales, considerando que “no hay actividad humana de la cual
confrontar con los defensores más sagaces de la ideología dominante.
se pueda excluir de toda intervención intelectual, no se puede separar al homo faber del homo sapiens” en

“ La filosofía de la praxis es la coronación de todo este movimiento de reforma intelectual y cuanto, independientemente de su profesión específica, cada quien es a su modo “un filósofo, un artista,
moral, dialectizado en el contraste entre cultura popular y alta cultura; es una filosofía que
un hombre de gusto, participa de una concepción del mundo, tiene una consciente línea moral” pero no
también es una política que es también una filosofía” 29.
todos los hombres tienen en la sociedad la función de intelectuales.
En el momento en que escribe, Gramsci considera que la filosofía de la praxis, se encuentra
aún en su “ fase populachera” , más vinculada con la crítica del sentido común, que con la Históricamente se forman categorías particulares de intelectuales, “especialmente en conexión con los
tarea de disputar el predominio a la ideología dominante. Sin embargo, es este el camino que
debe recorrer “ una nueva cultura en incubación que se desarrollará con la evolución de las grupos sociales más importantes y sufren elaboraciones más extensas y complejas en conexión con el
relaciones sociales” 30.
grupo social dominante”. Un grupo social que tiende a la hegemonía lucha “por la asimilación y la conquista

De lo que se trata, salvando las redundancias, es de darle al sentido común un nuevo sentido. ideológica de los intelectuales tradicionales... tanto más rápida y eficaz cuanto más el grupo dado elabora
Dejar de lado su acepción de intuición no compleja y – a partir de la filosofía de la praxis –
simultáneamente los propios intelectuales orgánicos”.
lograr una doble transformación: que sentido se transforme en sinónimo de aquello que se
siente por ser conciente y vivido en carne propia, y que común se relacione con lo que un
grupo humano comparte, con lo que tiene en común (idad). El intelectual tradicional es el literato, el filósofo, el artista y por eso, nota Gramsci, “los periodistas, que

retienen ser literatos, filósofos, artistas retienen también ser los verdaderos intelectuales”, mientras
Así, sentido común será aquello que se siente (piensa y practica) en conjunto.
modernamente es la formación técnica la que sirve para formar la base del nuevo tipo de intelectuales, un
Retomamos aquí, una posible lectura de un texto fundamental de Karl Marx, para profundizar “constructor, organizador, persuasor”, que debe llegar “de la técnica-trabajo a la técnica-ciencia y a la
aspectos mencionados:
concepción humano-histórica, sin la cual permanece especialista y no se vuelve dirigente”. El grupo social

“ En la medida en que millones de familias viven bajo condiciones económicas de existencia emergente, que lucha por conquistar la hegemonía política, tiende a conquistar la propia ideología
que las distinguen por su modo de vivir, por sus intereses y por su cultura de otras clases y
las oponen a éstas de un modo hostil, aquéllas forman una clase [...] Por cuanto existe entre intelectual tradicional mientras, al mismo tiempo, forma sus propios intelectuales orgánicos.
los campesinos parcelarios una articulación puramente local y la identidad de sus intereses no
engendra entre ellos ninguna comunidad, ninguna unión nacional y ninguna organización La organicidad del intelectual se mide con la mayor o menor conexión que mantiene con el grupo social al
política, no forman una clase” 31.
cual se refiere: ellos operan, tanto en la sociedad civil – el conjunto de los organismos privados en los
Creemos que las mismas pueden ser abordadas en forma integral a partir de un enfoque
cuales se debaten y se difunden las ideologías necesarias para la adquisición del consenso que inscripto en el materialismo histórico, a condición que se lo entienda como caja de
aparentemente surge espontáneamente de las grandes masas de la población a las decisiones del grupo herramientas –y no como molde en el que lo que no encaja no existe– para el análisis teórico
de la realidad social e histórica y para la práctica.
social dominante – que en la sociedad política o estado, donde se ejercita el “dominio directo o de mando

que se expresa en el Estado y en el gobierno jurídico”. Los intelectuales son algo así como “los La idea de una filosofía al alcance de todos implica un abordaje complejo que supone la
distinción entre diferentes tipos de “ concepciones del mundo” . De este modo, la filosofía
apostadores del grupo dominante para el ejercicio de las funciones subalternas de la hegemonía social y espontánea –propia de las masas populares– emerge como punto de partida para la
comprensión del pensamiento y la acción de las mismas. La falta de profundidad y crítica que
del gobierno político”. en ella prevalece, la limitan a la resolución y entendimiento de asuntos “ menores” de la
vida cotidiana, obstruyendo la posibilidad de la reflexión causal profunda.
Como el Estado, en la sociedad política, tiende a unificar a los intelectuales tradicionales, con aquellos

orgánicos, así en la sociedad civil y el partido político, todavía más completa y orgánicamente que el El sentido común asoma, por su parte, como la expresión fundamental de esta filosofía
espontánea, y deviene la base necesaria para su transformación en un “ nuevo sentido
Estado, elabora “los propios componentes, elementos de un grupo social nacido y desarrollado como común” , capaz de vincularse con nuevos valores, con una “ nueva moral” .

económico, hasta convertirlos en intelectuales políticos calificados, dirigentes, organizadores de todas las
Aquí se evidencia la preocupación de Gramsci por establecer vínculos entre los sectores
actividades y las funciones inherentes al desarrollo orgánico de una sociedad integral, civil y política populares y los intelectuales que adhieren a la filosofía de la praxis. La intención, es lograr
una amalgama de acciones y saberes que permitan construir una nueva sociedad.
El sentido común, dice Gramsci, es un nombre colectivo como "religión"; no existe solo un sentido común, pues
también éste es un producto y un devenir histórico.' El "sentido común" de una sociedad determinada, está hecho de la El aporte de cada uno de los sectores –desde distintos lugares, pero con la misma
sedimentación de diversas concepciones del mundo, de tendencias filosóficas y tradiciones que han llegado importancia–, es fundamental. Aquellos con sus prácticas y conocimientos de sentido común,
fragmentadas y dispersas a la conciencia de un pueblo. De ese "sentido común" se tomarán referencias y éstos con el objeto de transformar el materialismo histórico en una “ nueva fe” , basada en
ordenamientos que justifiquen o reprueben los actos de la vida pública y privada. Se puede pensar de un modo y actuar un conocimiento crítico y superador de la situación de dominación
de otro, pueden unas normas dirigir el pensamiento y otras la acción. La pluralidad del sentido común en su devenir,
ofrece amplias posibilidades de mutación que parecen caprichosas.

El sentido común se va construyendo con una historiadelaquela memoria popular toma sus referencias y sus juicios. LECTURA
Las clases subalternas construyen un mundo heteróclito y abigarrado, terriblemente contradictorio. Sin embargo, todo CAPITULO I DEL SERVICIO SOCIAL EN GENERAL
pensamiento, por asistemático y contradictorio que se presente, guarda una coherencia y un sentido desde el punto de
I – INTRODUCCION
vista de su elaboración. Para entender la "coherencia" del sentido común, hay que estudiarla como un conjunto de
respuestas conceptuales y de acción que se han ido formulando para adaptarse a esas circunstancias. Las adaptaciones Muchas veces caemos en serios errores cuando, al comenzar el desarrollo de un tema cualquiera, lo
que se sucedieron en el pasado de un pueblo y se han ido sedimentando en su actuar y pensar, constituyen recursos hacemos a partir de un nivel mínimo de abstracción que creemos conocido, debatido, claro y compartido
culturales de los que ese pueblo puede echar mano. "El comienzo de la elaboración crítica es la conciencia de lo que para, desde él, desarrollar las nuevas ideas conducentes a nuevos debates, a nuevas respuestas y a nuevas
realmente se es, es decir, un `conócete a ti mismo' como producto del proceso histórico desarrollado hasta ahora y que
conclusiones a un nivel más elevado de teorización. El error se produce porque ese nivel mínimo del que se
ha dejado en ti una infinidad de huellas, recibidas sin beneficio de inventario. Es preciso efectuar, inicialmente , ese
inventario".3 El sentido común se ha ido plasmando en el lenguaje, en los ritos , en las supersticiones, los proverbios, parte –y que creemos conocido y compartido por todos- no es tal, y la meta de la ciencia, que es “agregar
las historias, y en toda una gigantesca gama de representaciones. Todas ellas tienen su coherencia histórica. Para algo nuevo al conocimiento ya disponible sobre determinado aspecto o asunto” no se alcanza por faltar a la
Gramsci todos los hombres son filósofos, aunque su filosofía sea espontánea e inmediatista , "porque incluso en la más base de sustentación. Algo de eso nos ha venido sucediendo a un número creciente de asistentes y
mínima manifestación de una actividad intelectual cualquiera , la del `lenguaje', está contenida una determinada trabajadores sociales con cada vez más asiduidad (y por cierto es frustrante) en la mayoría de los congresos,
concepción del mundo".'
seminarios y reuniones profesionales a que hemos asistido últimamente (regla de la que escapan, en alguna
medida, los Seminarios Regionales 17 Latinoamericanos de Servicio Social y los Cursos y Seminarios del
Conclusión
Instituto de la Solidaridad Internacional, realizados hasta 1970). Otro tanto ocurrió en las conferencias que,
no hace mucho, hemos tenido la oportunidad de desarrollar en diversos lugares de Latinoamérica. Y a raíz
Hemos intentado, en este recorrido por algunos escritos gramscianos, descubrir en toda su
de ese mismo problema –como ejemplo más directo aún- lo mismo ha sucedido con la serie que hemos
riqueza analítica ciertos conceptos que consideramos útiles para producir una lectura de la
cultura popular atenta a las especificidades que adquieren los sectores subalternos en venido publicando a partir del nº 12 de la revista “Hoy en el Servicio Social” bajo el título “Qué es el ECRO”:
América Latina. los artículos que se han convertido –no pocas veces- en material inentendible para una enorme cantidad de
colegas, especialmente de nuestro país. Esto sucedió, simplemente, porque –como expresamos al
comienza- iniciamos la elaboración de los mismos a partir de una nivel de conocimiento y de manejo de
conceptos que ya creíamos compartidos, y claros para la generalidad de los colegas, casa que ahora lo dedicado esencialmente a los jóvenes estudiantes. Y, también, a quienes no siendo “jóvenes estudiantes”
hemos llagado a comprobar, no es así: El tiempo y la continua compulsa de opiniones, que nuestros viajes hacen lo que hacen y dicen lo que dicen porque no han tenido oportunidad de aprender otra cosa. II-DEL
a diversos centros profesionales nacionales y extranjeros nos permite, nos han posibilitado darnos cuenta SERVICIO SOCIAL EN GENERAL Tan sólo hacer un bosquejo de la historial del Servicio Social de una
que ni en las cosas más elementales y básicas del Trabajo Social (cual es su historia, por ejemplo) existe un extensión adecuada a las posibilidades de un artículo es tarea casi imposible. Pero hay un instrumento –
conocimiento adecuado (a veces por simple y casi total desconocimiento de la historia de nuestro 18 creado por las Ciencias Sociales- que, de alguna manera, nos va a ayudar en la tarea: es el “Método
quehacer profesional, y otras veces porque, aunque se “dominan” una cantidad de conocimientos, los Dialéctico” y lo emplearemos en esta oportunidad* . Hay quienes sostienen que el Servicio Social es una
mismos no son veraces y sí –por el contrario totalmente distorsionados). Fácil resulta mostrar (y demostrar) “FORMA DE ACCION SOCIAL” que viene evolucionando a lo largo de casi * La aplicación del “método
las raíces responsables de esta anomalía y, aunque ya no tiene demasiada importancia tenerla en cuenta, dialéctico” para hacer el desarrollo y la interpretación de la Historia del Servicio Social, ha sido hecha por el
las vamos a detallar brevemente: sucede que la “historia del Servicio Social” ha sido escrita –en lo poco que colega Herman C. Kruse, y de las conferencias que el mismo diera en diversos países latinoamericanos en
está escrita- y es generalmente enseñada en la mayoría de las escuelas de la especialidad, por asistentes una gira que recientemente compartiéramos, hemos tomado las ideas centrales de este trabajo. 22 toda la
sociales ancianos (las de “cabelleras canosas y voces cascadas” según una muy gráfica caracterización historia de la humanidad: estamos abiertamente en contra de tal afirmación. Sostenemos, por el contrario,
hecha por H. Kruse) que llevan en sí –firmemente adherido a sus personalidades- un lastre gravoso de que a lo largo de casi toda la historia de la vida humana sobre el planeta han existido “DIVERSAS FORMAS
elementos permitidos e inoperantes, resabio que les ha quedado de sus pasados de agentes de la DE ACCION SOCIAL”, es decir, “modos” en que la sociedad y la organización social imperante en cada
beneficencia, de la claridad o, en el mejor de los casos, de la “Asistencia” Social y que no pueden dejar de momento, dio (o intentó dar) respuestas a las situaciones de necesidad y vulneración que mayores o
hacer pesar subjetivamente en cuento dicen o escriben. Y sin querer –o quizás queriéndolo- distorsionan la menores estratos de la población sufrían. Y el Servicio Social (o Trabajo Social) es la última y más
narración del proceso histórico del Servicio Social y su consecuente interpretación, en un afán desesperado desarrollada “forma de acción social” que la humanidad ha creado. Hay muchos que –consecuentes con la
de dar alguna suerte de prevalencia en el tiempo a ese quehacer ya inútil a que se ha abocado durante todas postura que no compartimos – cuando se les pide que desarrollen la “Historia del Servicio Social” hacen
sus vidas y a cuya superación por el Servicio 19 Social (o Trabajo Social) modernamente entendido se interminables relatos del desarrollo de las diversas formas de acción social que existieron a lo largo de siglos
resisten o no aceptan. Es así que, de buenas a primeras, nos vemos obligados a “parar” bruscamente en el y siglos. Nosotros entedemos que es no es la historia del Servicio Social. Podemos admitir que sea la historia
desarrollo de nuestras reflexiones y pensamientos profesionales y, enseguida, volver bruscamente para atrás de los “antecedentes” del S. S. pero nada más. Y esto con serias reservas ya que, si somos estrictos, el
(haciendo una especie de “borrón y cuenta nueva” ) y recomenzar la cosa hablando de la “historia del Servicio antecedente directo del Servicio Social es la Asistencia Social, que es la anteúltima forma de acción social
Social”. No podemos hacer otra cosa: cuando vemos que no nos podemos poner de acuerdo en los (ya con ciertas bases científicas) a que se llegó a lo largo de la historia de la humanidad. ¿Cuál es la
conceptos más básicos del quehacer profesional, tales como el nombre mismo de la disciplina; cuando hay diferencia entre “Asistencia” Social y “Servicio” Social? La veremos 23 enseguida pues, precisamente, a
alumnos de algunas escuelas que sostienen (porque así se lo han enseñado) que están estudiando partir del surgimiento de la “Asistencia” Social como forma de acción social válida vamos a iniciar el desarrollo
“Asistencia Social” en lugar de “Servicio (o Trabajo) Social”; cuando, por otra parte, muchas veces, dada la de la historia del Servicio Social. RECAPITULANDO PARA CONTINUAR: Siempre, a lo largo de toda la
desactualización de la enseñanza y planes de estudio de algunas escuelas es absolutamente cierto que en historia de la humanidad, existió gente desamparada. Siempre existieron pobres y ricos; sanos y enfermos;
ellas los alumnos están estudiando “Asistencia” Social, el único camino válido es dar marcha atrás y amparados y desamparados. Para resumir: en todas las épocas existieron individuos vulnerados y siempre,
comenzar nuestra prédica desde el cero. Cabría preguntarse el porqué de nuestra “desmedida” preocupación la organización social imperante en cada momento, ideó modos de atender de alguna manera esas
por este asunto. Tenemos que aclarar que no son objeto principal de nuestro desvelo las ancianas colegas situaciones de necesidad, es decir, siempre ideó formas de acción social. Un somero análisis de los últimos
(no necesariamente ancianas en edad cronológica) sostenedoras de la 20 desubicación señalada, (aunque siglos de la era cristiana nos permite comprobar que, generalmente, las acciones destinadas a atender las
nosotros sí somos preocupación de ellas). En realidad lo único que nos preocupa en la actualidad –y que situaciones de necesidad y de desamparo estuvieron en manos de personas u organizaciones de dos tipos:
nos impulsa a escribir esto- son las Escuelas y los alumnos que en ellas se forman y que pueden constituirse a) Las de inspiración religiosa (cristianas en grado apreciable) motivadas en su trabajo por la frase “hacer el
en herederos continuadores de una mentalidad que, desde fines de la década del 50, lastra decisivamente bien por amor a Dios”: es lo que se conoce con el nombre de “Caridad” o “Beneficencia”; y, b) Las de
el desarrollo, la imagen del rol, el prestigio y el status de nuestra profesión en estas latitudes. Las otras están inspiración no religiosa (la masonería y la burguesía, por ejemplo) inspiradas por el lema “hacer el bien por
condenadas a un proceso irreversible de desaparición: seguirán por el momento manejando algunos hilos 24 amor al hombre”: es lo que se conoce con el nombre de “Filantropía”. Ambas fuentes de inspiración para
de poder de la comunidad profesional; continuarán poniendo “motes”, haciendo persecuciones y lanzando la acción social, pueden ser caratuladas con la frase “hacer el bien por el bien mismo”. Pero a fines del siglo
injurias de todo tipo (como las que detallamos en el anexo de la revista “Hoy en el Servicio Social”, nº 16 XVIII un hecho inusitado sacude al mundo: en Inglaterra se inventa la máquina de vapor, lo que señala el
/17) y las más honestas seguirán “racionalizando” y diciendo que “nada se puede hacer”, que “la culpa del inicio de lo que se ha dado en denominar “la Revolución Industrial”. La máquina irrumpe con prepotencia en
estado de deterioro y desprestigio en que se encuentra la profesión la tienen los demás” (los médicos, los el escenario del acontecer humano y comienza a inundar al mundo con sus productos. El primer producto
abogados, los funcionarios, etc.) “que le niegan al profesional de S.S. el lugar y la jerarquía que le de la máquina es UNA NUEVA CLASE SOCIAL: la “CLASE OBRERA” o “PROLETARIADO” y son sus
corresponde”, etc. Ellas seguirán aferradas al pseudos.gratificante trabajito de casos y buscando –nos consta productos secundarios, entre otros, la formación de los grandes y hacinados conglomerados humanos en
que en 1970 aun lo buscan- “tener un programa de Caso Social Individual actualizado”. Y nos hemos torno a los grandes centros industriales, la miseria, la explotación, la salida de las mujeres a vender el
convencido –una década bastó para demostrarlo hasta el hartazgo- que nada se puede hacer por ellas… esfuerzo de sus brazos, etcétera, etc. Esta avalancha masiva, esa erupción explosiva de problemas sociales,
Vamos a hacer, entonces, un bosquejo histórico –y la correspondiente interpretacióndel Servicio Social, hacen que – de la noche a la mañana- todos los métodos utilizados para atenderlos basados en el “hacer el
bien por el bien mismo” se tornen irrisoriamente ineficaces para tratarlos o mitigarlos. Al verse estas formas de guerra, con todas las secuelas ampliamente conocidas por todos, posibilita la irrupción violenta y masiva
de acción social ampliamente superadas por la mencionada avalancha masiva de situaciones de vulneración de las ideas freudianas en el mundo. Significan el surgimiento de un nuevo centro de atención: el individuo
y de desamparo, surge como 25 contrapartida, a la tesis “hacer el bien por el bien mismo”, su ANTÍTESIS: como ser psíquico. La síntesis anterior (Escuela Sociológica) convertida en tesis se ve enfrentada por la
el NO. No basta con las buenas intenciones no basta con hacer el bien (ni por amor a Dios ni por amor al antítesis que podemos denominar, precisamente, ESCUELA PSICOLÓGICA. La Escuela Psicológica, con
Hombre). El amor solo no alcanza: hace falta el método, hace falta la técnica. Hay que hacer el bien, pero sus dos conocidas ramificaciones (diagnóstica y funcional) tuvo una amplia repercusión en el Servicio Social.
“hay que hacerlo bien”. Y esto es lo que se denomina “ASISTENCIA SOCIAL”. Aparecen así, como A tal punto fue su influencia que las Escuelas estadounidenses se plegaron abiertamente a una u otra
contrapartida al escenario de problemática social masiva derivada de la revolución industrial, los grandes tendencia psicologista. Del enfrentamiento de la tesis “Escuela Sociológica” por la antítesis “Escuela
programas (grandes para esa época) de asistencia a los necesitados, cada vez más rigurosamente Psicológica” surge –como síntesis- lo que 29 podemos denominar ESCUELA ECLECTICA, cuyo principal
controlados. Como resultado de la tesis “hacer el bien por el bien mismo” enfrentada por la antítesis “hacer responsable es el Pbro. S. Bowers. El Padre Bowers se tomó el trabajo de recolectar, ordenar, tabular y
el bien pero hacerlo bien” surge la síntesis que podemos denominar “PIONEROS”. Dicen los pioneros (de analizar todas las definiciones habidas hasta ese momento de Servicio Social (cerca de medio centenar) y
los cuales la Organización de la Caridad de Londres es un acabado ejemplo): “hay que ASISTIR –pero con terminó elaborando su propia definición, según la cual el Caso Social Individual (es decir el individuo
conocimientos técnicosal vulnerado”. Esta mentalidad asistencialista, se mantiene así (sin mayores vulnerado) debía ser, el centro de atención. Fuertemente psicologizado por las influencias de la época, pero
modificaciones) hasta fines del siglo XIX y principios del siglo XX, en los agentes de la “Asistencia Social” buscando una restauración de la importancia perdida por la Escuela Sociológica, concebía al ser humano
(en el caso particular americano los supervisados por Mary Richmond) comienzan a caer en cuenta de que relacionado con un medio social que le era inseparable. No obstante, para él, lo decisivo, era el hombre
los problemas tantas veces “asistidos” de su clientela, eran 26 decurrentes de anomalías mucho más tomado individualmente, inmerso en un medio socio-cultural, sí, pero al que no le atribuía efectos decisivos
profundas, generalmente localizables a nivel de estructuras socio-políticos-económicas inadecuadas que (por lo menos en toda a extensión de su justa medida) sobre el bienestar de cada individuo concreto. Fácil
reclamaban, para su tratamiento a fondo, “reformas” estructurales y que, consecuentemente, muy poco o resulta deducir que, para Bowers, el malestar social era algo así como “la suma de los malestares individuales
nada se ganaba con la tarea de “parchar”, de “mitigar”, de “paliar” si no se atacaban –previa o de los componentes de la sociedad” o que, al revés, “el estado de bienestar general” surgiría como resultado
simultáneamente a la tarea “asistencialista”- esas raíces profundas que eran responsables de los problemas de producir y sumar “bienestares individuales”; de ahí la importancia, para este Sacerdote, de tratar –uno a
externos (residuales) que la clientela presentaba. La figura máxima de esta nueva concepción de la acción uno- los problemas de cada individuo vulnerado y, 30 consecuentemente, el pleno auge del Trabajo Social
social es Mary Richmond y ella constituye, consecuentemente la ANTITESIS a la tesis “PIONEROS” de Casos1 . La “Escuela Ecléctica” (que acabamos de ver) no tuvo gran duración en el tiempo sin réplica
(Asistencia Social). Si tuviéramos que “pintar” a esta nueva etapa con una frase, tal como pintamos a los (antítesis). Y esa antítesis estuvo constituida por quienes pensaban que el individuo por importante que sea
antecedentes de la “Asistencia Social” con “hacer el bien por el bien mismo” y a la “asistencia social” como e sí mismo, es humano en la medida en que pertenece a grupos en los que interactúa y que estos grupos, a
“hacer el bien pero hacerlo bien”, ahora podríamos decir “AL QUE TIENE HAMBRE, DADLE UN PEZ…PERO su vez, están en constante interrelación con otros grupos formando áreas funcionales que se denominan
ENSEÑANDLE A PESCAR”. Mary Richmond marca la iniciación de una nueva forma de acción social que comunidades. Como consecuencia, ningún tipo de acción social (el S. S. en nuestro caso) puede perder de
pone el énfasis en la PREVENCIÓN DE LOS DESAJUSTES, antes que en la ATENCIÓN DE LOS vista en su accionar a estas dos dimensiones (grupo y comunidad) inherentes a la esencia misma de la
DESAJUSTES. Para ella es más importante investigar y atacar las raíces profundas responsables de los condición humana. Como resultado, surgen de manera de antítesis, frente a la tesis “Escuela Ecléctica” los
problemas sociales visibles que los problemas visibles en 27 sí. Y esto es lo que se denomina, con absoluta “Métodos de GRUPO y COMUNIDAD”,
propiedad, SERVICIO SOCIAL. Lo demás, lo anterior, no es tal: es una cosa sustancialmente distinta al 1 Nosotros no criticamos estas ideas del Padre Bowers si nos situamos en la época en que él las desarrolló.
Servicio Social y que se denomina “Asistencia Social”. Que el Servicio Social surgió como evolución de la Más aún, las consideramos lógicas para el pensamiento de ese momento y las justificamos. Lo que si resulta
forma de acción social denominada “Asistencia Social”, totalmente de acuerdo. Pero ambas cosas son injustificable es que, ya casi en los albores de la octava década del siglo XX, existan Escuelas de Servicio
totalmente diferentes. Que el profesional de Servicio Social se ve obligado a “asistir” (hacer “asistencia Social que basan sus esquemas de enseñanza –implícita o explícitamente- en este tipo de concepciones y
social”) frente a casos de extrema urgencia que se le presentan, también de acuerdo. Pero ese no es su que hasta haya autores (hace poco tiempo ha aparecido un libro de Introducción a la “Asistencia” Social) en
objetivo principal. La indagación, la investigación que Richmond propone, de las raíces profundas causantes que se las defiende. Mejor dicho, no las defiende; las sostiene como propias.
de los desajustes visibles tantas veces “asistidos” hasta ese momento, lleva a la inequívoca comprobación ………………IMPRESOO….palabras “Alianza para el Progreso”2 . Kennedy mismo se preocupó de no
de que la mayoría de las veces las mismas eran localizables a nivel de estructuras disfuncionales y que, por negar nunca el carácter político de la Alianza… Pero volviendo ahora a nuestro tema central, lo concreto es
lo tanto su tratamiento reclamaba “reformas” a nivel de esas partes disfuncionales de las estructuras que a la sombra política de la Alianza para el Progreso las tesis “desarrollistas” tuvieron su cuarto de hora
vigentes. (Debe quedar bien en claro que, por ese entonces, no era la estructura global lo cuestionado, sino primaveral en estas latitudes. Y, esto sí, es un hecho importante para el Servicio Social y que a continuación
partes de ella para que la misma siguiera funcionando: por eso hablamos de “reforma” y no de explicamos: -El “desarrollismo” implícito en la Alianza para el Progreso, como el “desarrollismo” explícito de
“transformación” estructural. 28 Como consecuencia de esto, el centro de atención para la acción profesional los varios gobiernos latinoamericanos que a su vez florecieron, significan la planificación y puesta en marcha
de los trabajadores sociales pasa a ser el medio; lo social. De la tesis pioneros enfrentada por la antítesis de programas altamente técnicos (este es un hecho objetivo que no implica juicio de valor alguno acerca de
Mary Richmond, surge, como síntesis la denominada ESCUELA SOCIOLOGICA, cuyo predominio se la eficacia y viabilidad de esos programas “altamente técnicos”) y que reclaman, para su elaboración y
extenderá hasta casi la Primera Guerra Mundial. Poco antes de la Primera Guerra Mundial, las ideas del ejecución, de la concurrencia de técnicos adecuados. Entre esos técnicos, los de Servicio Social (tal como
joven Freíd comienzan a salir tímidamente a luz, muy sofrenadas y resistidas al principio. Pero la terminación los concebía la ya explicada postura de Greenwod y sus seguidores), eran indispensables. Es entonces
cuando, por primera vez en la historia, EE. UU. (y los 2 Hay quienes pretenden negar –porque lo ignoran o
porque les conviene- que la “Alianza para el Progreso” fue una respuesta “política” frente a un problema
“político”. A quienes niegan esta verdad por no saberla, los remitimos a la lectura de la Carta de Punta del
Este.
36 gobiernos desarrollistas de varios países latinoamericanos) se comienzan a preocupar por saber si en
Latinoamérica existen y/o se están formando esos profesionales polivalente, munidos de una amplia base
teórica extraída de las demás disciplinas sociales y diestros en el empleo de los seis métodos profesionales
y manejo de todo el espectro de técnicas que ellos implican. Se comprobó que NO; que aquí la enseñanza
del Servicio Social estaba atrasada por lo menos en treinta años y que era imperioso comenzar la formación
de los mismos en cantidades masivas. Es entonces cuando –fines de la década del 50- las Comisiones
técnicas de Naciones Unidas comienzan a abrir a lo largo y ancho de Latinoamérica esas nuevas Escuelas
de Servicio Social, para formar ese nuevo tipo de trabajador social que los desafíos del “desarrollismo”
demandaban y que muy poco de parecido tenían con el profesional de Servicio Social que se formaba 30
años antes en EE. UU., pero que todavía se seguía formando en Latinoamérica. Pero esa parte, como
asimismo las razones por las que las Comisiones Técnicas de la ONU abrieron “nuevas Escuelas” en
Latinoamérica, las veremos en detalle en la segunda parte (del Servicio Social Latinoamericano en particular)
de este trabajo. 37 Pero lo concreto –hasta aquí- es que A LO LARGO Y ANCHO DE LATINOAMERICA SE
COMIENZA A FORMAR UN TIPO DE PROFESIONAL DE SERVICIO SOCIAL, A VECES CON UNA
DENOMINACIÓN DISTINTA (Trabajador Social) EN REEMPLAZO DEL QUE HASTA ESE MOMENTO SE
FORMABA (Asistente Social) Y QUE SE SIGUIO –Y SIGUE- FORMANDO EN MUCHAS ESCUELAS CAMBIORESISTENTES.

Vous aimerez peut-être aussi