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Modelos para la evaluación del error humano en estudios de fiabilidad de


sistemas

Article  in  Anales de Psicologia · October 2012


DOI: 10.6018/analesps.28.2.148941

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2 authors, including:

Humberto Manuel Trujillo Mendoza


University of Granada
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anales de psicología, 2012, vol. 28, nº 3 (octubre), 963-977 © Copyright 2012: Servicio de Publicaciones de la Universidad de Murcia. Murcia (España)
http://dx.doi.org/10.6018/analesps.28.3.148941 ISSN edición impresa: 0212-9728. ISSN edición web (http://revistas.um.es/analesps): 1695-2294

Modelos para la evaluación del error humano en estudios de fiabilidad de sistemas


Juan M. Ruiz-Moreno1* y Humberto M. Trujillo2
1 Torraspapel, S.A. Grupo LECTA
2 Facultad de Psicología. Universidad de Granada

Resumen: El análisis probabilístico de riesgos aplicado a sistemas indus- Title: Models for assessment of human error in system reliability studies.
triales o técnicos complejos demuestra que el error humano es un elemen- Abstract: The probabilistic analysis of risks applied to complex industrial
to muy importante del riesgo total, aunque su cuantificación exacta es du- systems demonstrates that human error is a very important part of the to-
dosa. Por otra parte, las técnicas actuales para el modelado y cálculo de los tal risk, although its exact quantification is doubtful. On the other hand,
errores humanos presuponen, de manera más o menos explícita, la elec- the current techniques for modeling and calculating human errors presup-
ción de algún modelo de comportamiento humano; de tal manera que pose, in a way not always explicit, the election of a certain pattern of hu-
buena parte de las limitaciones que en esas técnicas refleja la literatura man behavior; in such a way that many limitations revealed by the scien-
científica parecen debidas al empleo de los modelos de comportamiento tific literature seems due to the use of so named ‘partial’ behavior models,
denominados parciales, mientras que los modelos denominados generales, while the ‘general’ models, that are more ambitious, still need better meth-
más ambiciosos, adolecen aún de desarrollo metodológico. El presente odological development. The present work describes the methods applied
trabajo describe los métodos aplicados actualmente en los estudios de fia- currently to human reliability studies and it points out the relationship that
bilidad humana y señala la relación que subyace entre éstos y los modelos underlies between these and the models for human behavior representa-
de representación del comportamiento humano, poniendo de manifiesto tion, showing the investigation lines ongoing for covering methodological
las líneas de investigación en curso para cubrir las carencias metodológicas. lacks. We declare the protagonism of Psychology about defining the hu-
Para el avance de los estudios sobre fiabilidad humana, se manifiesta el man behavior models that underlie the reliability analysis techniques, and
protagonismo de la Psicología, tanto en la fundamentación de los modelos also about criticizing these techniques, especially on the simplifications
de comportamiento humano que subyacen en las técnicas de análisis de la that, to make them more governable, they have the perverse effect of hid-
fiabilidad, como en la crítica de estas mismas técnicas, en especial hacia las ing psychological mechanisms of errors.
simplificaciones que, por hacerlas más manejables, tienen como efecto Key words: reliability analysis; human error; human behavior.
perverso un encubrimiento de los mecanismos psicológicos del error.
Palabras clave: análisis de fiabilidad; error humano; comportamiento
humano.

Introducción fiabilidad de sistemas, tuvieron un antes y un después a par-


tir del famoso accidente nuclear de Three-Mile Island, en
Los estudios sobre análisis probabilístico de riesgos (Aposto- 1979. Antes de ese momento, la inclusión del análisis especí-
lakis, Bier, y Mosleh, 1988; Williams, 1989; Kirwan, 1994; fico del error humano quedaba a criterio de los analistas, en
CSNI, 1998; Rea y Sandoval, 2000; Pyy, 2000; Creus, 2001; función de la apreciación o de los prejuicios que tuvieran
Johnson, 2003; Maluf, Gawdiak, y Bell, 2008) reflejan que la respecto a las posibles causas de fallo del sistema. Pero, a
contribución de los errores humanos es muy significativa y, partir de ese accidente, el análisis de la fiabilidad humana se
de forma casi unánime, exponen que las cantidades estima- hizo obligatorio en la industria nuclear y, por extensión, a
das para estas contribuciones incluyen grandes incertidum- cualquier actividad susceptible de fallo catastrófico.
bres. Por otra parte, las técnicas de modelado y cálculo de Durante los años ochenta se produjo el desarrollo de las
los errores humanos, incluidas en los estudios de fiabilidad primeras técnicas específicas; pero ha sido a partir de los no-
de sistemas, guardan relación, más o menos explícita, con los venta cuando, además de continuar el desarrollo de nuevos
modelos de comportamiento humano que subyacen en ellas métodos, se ha pretendido profundizar en los mecanismos
(Quesada, 1999; EATMP, 2002). causantes del error humano.
En la mejora de la fiabilidad de los sistemas industriales, De las distintas técnicas para cuantificar y predecir el
el punto clave se encuentra en la interacción hombre- error humano -véase una relación amplia en (CSNI, 1998)-,
máquina (Creus, 1992; EATMP, 2002; Johnson, 2003; Kim y la metodología THERP es la más antigua y, con las adapta-
Seong, 2004; Kennedy, Siemieniuch, Sinclair, Kirwan, y Gib- ciones realizadas en los años ochenta más la incorporación
son, 2007; Forester y cols., 2009); pero es obvio que resulta de la variable temporal a los errores de diagnóstico, sigue
mucho más complicado analizar el comportamiento del siendo la más utilizada en la práctica y puede considerarse
hombre que el de la máquina, y ésta es una dificultad que ha como el método paradigmático respecto de los puntos fuer-
dado pie a muchas líneas de investigación multidisciplinar, tes y deficiencias que caracterizan a las técnicas de fiabilidad
especialmente en aquellos sectores industriales donde el im- humana en vigor: buen análisis cualitativo de los modos de
pacto de los posibles errores humanos es más fuerte: energía error y buena computabilidad y verificabilidad de los resul-
nuclear, aviación e industria química. tados, frente a los elementos de subjetividad en la aprecia-
Los estudios de fiabilidad humana, como parte de los de ción de cada analista y al hecho de ignorar los mecanismos
psicológicos del comportamiento.
Dirección para correspondencia [Correspondence address]: Juan En los últimos años el avance de los estudios sobre fiabi-
M. Ruiz-Moreno. Torraspapel, S.A. Grupo LECTA. Camino de la lidad humana va muy de la mano de las aportaciones en el
Vía, s/n. 18600 Motril (Granada) (España). campo de la Psicología: por un lado, en la fundamentación
E-mail: ojmruiz@torraspapel.es

- 963 -
964 Juan M. Ruiz-Moreno y Humberto M. Trujillo

de los modelos de comportamiento humano que subyacen N s (t ) N (0) N f ( t ) N f (t )


en las técnicas de análisis de la fiabilidad y, por otro, en la R( t ) 1 (1)
N (0) N (0) N (0)
crítica de estas mismas técnicas, en especial hacia las simpli-
ficaciones de tipo operativo, que tienen como efecto perver- en la que:
so un encubrimiento de los mecanismos psicológicos del Ns(t) = Número de elementos que continúan funcio-
error, y ello, a su vez, impone una limitación fuerte al desa- nando.
rrollo de mejoras a los sistemas. La aportación más prome- Nf (t) = Número de elementos que han fallado.
tedora corresponde a los llamados modelos generales (Ras- N (0) = Número de elementos ensayados.
mussen, Norman, Shallice...) de representación del compor- En términos de probabilidad, R(t) se denomina tam-
tamiento humano, como solución a los defectos de los mo- bién función de supervivencia. Si llamamos T al momento
delos mecanicistas. en que falla la unidad:
R(t) = P (T > t)para t > 0
Fiabilidad de sistemas. Revisión metodológi- Y derivando la ecuación (1) respecto a t, obtenemos la
ca función de densidad de probabilidad de no fallo:
dR( t ) 1 dN f ( t )
(2)
Para situar el campo del análisis del error humano, dentro dt N (0) dt
del espectro metodológico de los estudios de fiabilidad de En consecuencia, la probabilidad de fallo (infiabilidad)
sistemas, empezaremos con un recorrido por los conceptos será:
y herramientas matemáticas de uso más frecuente. Q(t) = 1 — R(t) = P (T ≤ t)
Y la función de densidad de fallos:
Conceptos generales
dQ( t ) dR( t )
f (t )
El objetivo de partida es la necesidad de garantizar la fia- dt dt
bilidad y seguridad de los sistemas complejos, mediante pro- Despejando dNf(t)/dt en la ecuación (2) y dividiendo por
cedimientos con suficiente respaldo científico. Y denomi- Ns(t), obtenemos la tasa instantánea de fallos:
namos sistema a toda entidad formada por elementos o com- 1 dN f ( t ) N (0) dR ( t ) 1 dR( t ) f ( t )
ponentes discretos que interactúan mutuamente (Creus, z(t )
N s ( t ) dt N s ( t ) dt R ( t ) dt R( t )
1992). Por tanto, su complejidad estará directamente relacio-
nada con la cantidad de elementos que lo componen y con la (3)
cantidad o variedad de interacciones que puedan darse entre e integrando y despejando R(t):
t
ellos. z ( t )dt
R( t ) e 0 (4)
Es esencial en la definición del sistema, que se delimiten:
• El contorno externo, también denominado alcance u objeto que es la expresión general de la fiabilidad en función de
del análisis. Define el criterio por el cual se determina la tasa instantánea de fallos.
claramente la pertenencia o no de los elementos al siste- Sustituyendo en (3) y despejando f(t), queda la expre-
ma. sión general de la función de densidad de fallos:
t
• El contorno interno, que establece el nivel de detalle o reso- z ( t )dt
f ( t ) z ( t )e 0
lución con que se definen los elementos constitutivos del
sistema; considerando que cada elemento podría ser, a su Cuando la tasa instantánea de fallos es constante
vez, un subsistema formado por subelementos; estos a z(t)=λ, tenemos la conocida función exponencial
su vez compuestos de otros subelementos, y así sucesi- R( t ) e t para la función de fiabilidad,
vamente. y
f (t ) e t para la densidad de fallos.
Una vez definido el sistema, interesa analizar la fiabilidad
individual de cada elemento componente. Y entendemos por
Funciones de distribución de fallos
fiabilidad la probabilidad de que un elemento (aparato, dispositivo, per-
sona...) desarrolle una determinada función, bajo ciertas condiciones y
durante un período de tiempo determinado (entre 0 y t). Es por ello Como análisis probabilístico de riesgos, en los estudios
que su análisis se denomina análisis probabilístico de riesgos. de fiabilidad se emplean varios tipos de distribuciones es-
Se suele representar por R(t) la fiabilidad (Reliability) hasta tadísticas (Bunday, 1991; Creus, 1992; Hoyland y Rausand,
el instante t, y partimos de la seguridad de que el elemento 1994; Birolini, 2007), las más importantes de las cuales se
funciona en el instante 0: R(0)=1. Con la misma seguridad, describen a continuación. La adopción de una o de otra de-
predecimos que en un tiempo largo el elemento habrá falla- penderá del grado de ajuste de los datos a la función consi-
do: R(∞)=0. Si analizamos una cierta cantidad N de elemen- derada.
tos iguales, la fiabilidad en el instante t vendrá dada por: Distribución normal. Se dice que una variable T tiene una
distribución normal de media µ y varianza σ 2 , N(µ,σ 2 ),

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Modelos para la evaluación del error humano en estudios de fiabilidad de sistemas 965

cuando la función de densidad de fallos es ción típica nqr , donde r =1—q.


1 2 2
f (t ) e ( t ) /2 para -∞<t<∞ Distribución exponencial. Si asumimos que el tiempo T
2 hasta el fallo de una unidad está exponencialmente distri-
A la distribución N(0,1) se le denomina distribución normal buido con parámetro λ, la densidad de probabilidad será
estándar y habitualmente se le denota por Φ(·). entonces
La función de distribución de N(µ,σ 2 ) puede escribirse e t para t 0 y 0
como f (t )
0 en cualquier otro caso
t
F ( t ) P(T t ) La función de supervivencia o fiabilidad es
t
Para aplicar la distribución normal en los estudios de R( t ) P(T t) f ( u )du e para t > 0
0
fiabilidad, habremos de considerar que la variable está Y la tasa de fallos:
truncada por la izquierda en el punto T=0; por tanto, la
función de supervivencia habría de adoptar la forma f (t ) e t
z(t )
(( t )/ ) R( t ) e t
R( t ) P(T t |T 0) para t ≥
( / ) En general, esta distribución representa la fase normal
0 de operación del componente y es la más utilizada en los
Distribución binomial. Llamando q a la probabilidad de estudios de fiabilidad.
que un componente sea defectuoso y r a la de que no lo Distribución de Weibull. El tiempo T hasta el fallo res-
sea, y siendo n el número de componentes, la probabili- ponde a una distribución de Weibull de parámetros α(>0)
dad de que x de ellos sean defectuosos se representa por: y λ(>0) si la función de distribución viene dada por
n x n x 1 e ( t) para t 0
Q( x ) q r F ( t ) P(T t)
x 0 en cualquier otro caso
que es la llamada distribución binomial, o de Bernouilli, y La correspondiente densidad de probabilidad es
puede aproximarse a una distribución normal cuando n es
d ( t) 1
e ( t) para t 0
grande. f (t ) F (t )
La media y desviación estándar de la distribución dt 0 en cualquier otro caso
son, respectivamente: donde λ se denomina factor de escala y α es el factor de forma.
nq nqr Mayor f l exibilidad obtenemos si, en lugar de dos, con-
Distribución de Poisson. Si consideramos que el tiempo de sideramos la distribución Weibull de tres parámetros (α, λ,
reparación o sustitución de un dispositivo es despreciable, µ), que se expresa como
el evento ‘fallo del dispositivo’ puede tratarse como even- 1 e [ (t )] para t
to A de un proceso de Poisson en un intervalo de tiempo F ( t ) P(T t)
dado. 0 en cualquier otro caso
Si denotamos N(t) el número de veces que sucede el La función de densidad correspondiente es
evento A en el intervalo (0, t], y P(N(t)=n) la probabili- d
dad de que A suceda exactamente n veces en el interva- f (t ) F (t ) [ (t )] 1 e [ ( t )] para t
dt
lo (0, t], puede demostrarse (Hoyland y Rausand, 1994)
Al tercer parámetro µ se le denomina parámetro de posi-
que:
ción inicial o de garantía, puesto que la probabilidad de que
( t )n t ocurra un fallo en un tiempo anterior a µ es 0.
P( N ( t ) n) e para n = 0, 1, 2, . . . (5) Distribución log-normal. Se dice que el tiempo T hasta el
n!
fallo tiene una distribución log-normal si la variable Y = ln
Esta es la llamada distribución de Poisson de parámetro λt,
T tiene una distribución normal. Si µ y σ son, respectiva-
cuya media es
mente, la media y la varianza de Y, entonces la función
( t )n t densidad de T es
E( N ( t )) n e t
n 0 n! 1 1 1 (ln t )2 /2 2
El número de ocurrencias de A por unidad de tiem- e para t
f (t ) 2 t
po (t=1) es λ, la intensidad del proceso.
0 en cualquier otro caso
La distribución de Poisson puede representarse tam-
bién como un caso particular de la distribución binomial La función de fiabilidad o supervivencia resulta
cuando el número de componentes defectuosos es peque- R( t ) P (T t ) P (ln T ln t )
ño, caso frecuente en los estudios de fiabilidad. También ln T ln t ln t
puede aproximarse a la normal de media λ=nq y desvia- P

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966 Juan M. Ruiz-Moreno y Humberto M. Trujillo

La distribución log-normal se emplea habitualmente y que los fallos de componentes individuales son sucesos
como distribución del tiempo de reparación y en el análisis independientes. Entonces, en un instante dato t, la variable
de fallos por fatiga. Y (t )
n
X i ( t ) tendrá una distribución binomial (n,p(t)):
i 1

Fiabilidad de sistemas n
P(Y ( t ) y) p( t ) y (1 p( t ))n y
y
Después de considerar los conceptos de fiabilidad y
probabilidad de fallos para los elementos individuales, es En estas condiciones, la fiabilidad es
necesario analizar su interacción en sistemas complejos
n n
pS ( t ) P ( Y ( t ) k ) p( t ) y (1 p( t ))n y (10)
(Hoyland y Rausand, 1994; Birolini, 2007), teniendo en y k y
cuenta las relaciones entre esos elementos. Análisis cuantitativo del árbol de fallos. Veremos ahora
Función estructura de un sistema. Supongamos que el sis- cómo puede analizarse una estructura que haya sido mo-
tema está formado por n componentes y que el estado de delada mediante un árbol de fallos, muy frecuente en el
cada componente i está descrito por la variable Xi (t), análisis de la fiabilidad humana.
que toma el valor 1 si funciona y el valor 0 si no funciona Sea n el número de eventos básicos diferentes en el
en el instante t. El vector de estado y la función estructura las árbol de fallos. Diremos entonces que el árbol es de or-
denotaremos mediante den n y los diferentes eventos (fallos) pueden representar-
X(t) = (X1 (t), . . . , Xm (t)) y φ(X(t)) se por variables de estado Yi (t), y el vector de estado pa-
Son de interés, las siguientes probabilidades: ra la estructura en el instante t es
P (Xi (t) = 1) = E[Xi (t)] = pi (t) para i = 1, 2, . . . , n Y(t) = (Y1 (t), . . . , Ym (t))
(6) El propósito del “ análisis cuantitativo” de un árbol
P (φ(X(t)) = 1) = E(φ(X(t))) = pS (t) (7) de fallos es determinar la probabilidad del evento superior
Las expresiones (6) y (7) son las funciones de supervivencia, (fallo del sistema), evento que puede describirse mediante
respectivamente, del componente i y del sistema. una variable binaria ψ(Y(t)) denominada función estructu-
Sistemas en serie. Los sistemas en serie se caracterizan ra del árbol de fallos.
porque sólo funcionan si lo hacen todos y cada uno de Sea qi (t) la probabilidad de que el evento i suceda en
sus componentes. En este caso, la función estructura del el instante t, para i = 1, . . . , n. Y sea Q0 (t) la probabilidad
sistema es de que el evento superior ocurra en el instante t. Entonces
n
( Χ( t )) X i (t ) QO (t) = P (ψ(Y(t)) = 1) = E(ψ(Y(t)))
i 1 y
Considerando que los eventos de fallo en cada com- P (Yi (t) = 1) = qi (t) = 1 — pi (t)para i = 1, . . . , n
ponente sean independientes, la fiabilidad del sistema es donde pi (t) es la probabilidad de que el componente i
n n n esté funcionando en el instante t. A qi (t) se le denomina
E( ( Χ( t ))) E X i (t ) E( X i ( t )) pi ( t ) (8)
i 1 i 1 i 1
infiabilidad del componente i en el instante t, mientras que
Q0 (t) representa la infiabilidad del sistema en el mismo instan-
Sistemas en paralelo. Los sistemas en paralelo se caracte-
rizan porque fallan sólo si todos sus componentes fallan a te.
la vez. La función estructura del sistema es, por tanto, Árbol con una puerta tipo AND. Si el evento superior su-
n n cede si y sólo si suceden los eventos básicos simultánea-
( Χ( t )) X i (t ) 1 (1 X i ( t )) mente, la función estructura será
i 1 i 1 n

Y la fiabilidad, ( Υ( t )) Y1 ( t ) Y2 ( t ) Yn ( t ) Yi ( t )
n n n i 1
E( ( Χ( t ))) 1 (1 E( X i ( t ))) 1 (1 pi ( t )) pi ( t ) (9) Y si los eventos básicos son independientes,
i 1 i 1 i 1
Q0 ( t ) E( ( Υ( t ))) E( Y1 ( t ) Y2 ( t ) Yn ( t ))
Estructuras k-de-n. Se denominan estructuras “k-de-n”
n
a aquellas compuestas por n elementos y que funcionarán
q1 ( t ) q2 ( t ) qn ( t ) qi ( t )
mientras estén en funcionamiento al menos k de ellos. Su i 1
función estructura será, por tanto, Árbol con una puerta tipo OR. Si el evento superior suce-
n
1 si X i (t ) k de si sucede al menos uno de los eventos básicos, la fun-
i 1 ción estructura será
( Χ( t )) n n

0 si X i (t ) k ( Υ( t )) 1 (1 Yi ( t ))
i 1 i 1

Consideremos, para simplificar, que todos los elemen- Y con los eventos básicos independientes,
tos tienen la misma fiabilidad, pi(t)=p(t) para i = 1, . . . , n,

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Modelos para la evaluación del error humano en estudios de fiabilidad de sistemas 967

n Modelado de sistemas en red


Q0 ( t ) E( ( Υ( t ))) 1 E(1 Yi ( t ))
i 1
Redes de Petri. Se trata de una herramienta gráfica para
n n
1 E(1 Yi ( t )) 1 (1 qi ( t )) modelar las interacciones entre componentes de sistemas
i 1 i 1
complejos y se usa en combinación con otras herramientas
gráficas como los diagramas de bloques o los árboles de fa-
Modelos de Markov llos.
Una red de Petri consta de los siguientes elementos:
Los modelos de Markov describen las probabilidades de . P = {pl , p2 ,…, pnp } es el conjunto de np nodos, de-
los distintos estados posibles de un sistema en función del nominados asentamientos y dibujados como círculos.
tiempo. Las variables significativas son, por tanto, estado y . T = (tl , t2 ,…, tnt ) es el conjunto de nt transiciones, dibu-
tiempo; pudiendo éstas, a su vez, ser discretas o continuas, lo jadas como barras.
que implica la existencia de cuatro tipos diferentes de mode- . I = entradas de transición, representadas por flechas
los de Markov. que salen de los asentamientos y se dirigen a las tran-
En un sistema, cuya fiabilidad se esté estudiando, los dis- siciones.
tintos estados posibles representan la situación de fallo u . O = salidas de transición, representadas por flechas
operación en que se encuentre cada uno de los componentes que salen de las transiciones y se dirigen a los asen-
del sistema; y el cambio de un estado a otro viene determi- tamientos.
nado por los valores de régimen de transición que represen- . M = (ml , m2 ,…, mnp ) es la representación de una
tan las tasas de fallo y de reparación de esos componentes, marca.
configurando las denominadas ecuaciones de estado, cuya solu-
ción expresa la probabilidad de que el sistema esté en un de- El estado dinámico se representa mediante una o varias
terminado estado y el tiempo de permanencia en cada uno “fichas” que pueden ir saltando entre los nodos, siguiendo
de ellos. las reglas:
Ecuaciones de estado. Denotaremos por X(t) la variable es- 1. Un estado de transición en una marca M es permitido
tado del sistema en el instante t. Supongamos que el sis- si todas las entradas disponen de al menos una ficha.
tema tiene r+1 estados posibles, numerados 0, 1, 2, . . . , r. 2. Una transición permitida es disparada extrayendo una
El evento X(t)=j significa que el sistema se encuentra en el ficha por arco de cada asentamiento de entrada y
estado j en el instante t, para j=0, 1, 2,…,r. La probabilidad añadiendo una ficha por arco a cada posición de sa-
de este evento es lida.
Pj (t) = P (X (t) = j) para j = 0, 1, 2, . . . , r Aunque inicialmente aplicadas en la descripción de
La transición entre estados puede ser descrita mediante sistemas electromecánicos, la capacidad de adaptación de
un proceso estocástico y, en muchos casos, con la propie- las redes de Petri ha quedado ampliamente demostrada,
dad de Markov: en las últimas décadas, en prácticamente todas las áreas
Dado un sistema en un estado i en el instante t (es de conocimiento, incluida la fiabilidad humana.
decir, X(t)=i), los estados futuros X(t+v) no dependen de Redes neuronales artificiales. Las redes neuronales artificia-
los estados previos X(u), u<t. En otras palabras: si cono- les (RNA) son, en esencia, modelos matemáticos simples,
cemos el estado actual, la probabilidad de cualquier com- sobre la base de funciones f : X→Y. Cada tipo de RNA
portamiento futuro del sistema no estará condicionada por se caracteriza por la clase de funciones que utiliza.
el comportamiento pasado. El concepto de red, en este caso, se corresponde con
Si el proceso satisface la propiedad de Markov se le el hecho de que las funciones f (x) están compuestas por
denomina proceso de Markov, y a las probabilidades condi- otras funciones gi (x) que, a su vez, pueden estar com-
cionales P(X(t+v)=j | X(t)=i) para i, j = 0, 1,…, r se les puestas de otras funciones. Estas composiciones pueden
denomina probabilidades de transición, que satisfacen: representarse mediante una estructura en red.
Pij(t) > 0 para t > 0 (11) Un tipo de composición usado con frecuencia en redes
r acíclicas es la suma ponderada no lineal, donde
Pij ( v ) 1 para t > 0 (12)
j 0
f (x ) K wi g i ( x )
r i
Pij ( t v ) Pik ( t ) Pkj (v ) para t, v > 0 (13) siendo K alguna función no lineal predefinida.
k 0
Definimos la tasa o coeficiente de transición desde el estado i En el caso de redes recurrentes la función f se hace de-
al j como pender de sí misma, aplicando alguna dependencia tempo-
ral.
P( X (t t) j | X (t ) i ) Pij ( t )
a ij lim lim Pij (0) (14) Una aplicación interesante del formalismo de RNA es
t 0 t t 0 t la posibilidad de modelar procesos de aprendizaje; lo cual
significa que, dada una tarea a realizar y una clase de fun-

anales de psicología, 2012, vol. 28, nº 3 (octubre)


968 Juan M. Ruiz-Moreno y Humberto M. Trujillo

ciones F, el sistema ha de encontrar la f


*
F que solu- Tipos de fallos. En las operaciones que realiza el hombre
pueden presentarse los siguientes tipos de fallos:
ciona la tarea de forma óptima (en algún sentido). En ge- 1. Error de omisión. Por olvido de alguna acción a efectuar.
neral, la utilidad de las RNA se basa en la posibilidad de 2. Error de comisión. Consistente en realizar mal alguna ac-
inferir una función a partir de un conjunto de observacio- ción y que puede producirse como: error de tiempo, cuando
nes; lo que resulta particularmente interesante en aplicacio- la acción no se realiza en el momento adecuado; error de
nes a partir de una cierta complejidad. selección del control erróneo o elección de procedimiento
incorrecto; error de secuencia, acciones llevadas a cabo en
Evaluación del error humano
orden incorrecto; error cualitativo, acción llevada a cabo en
mucho o en poco.
El factor humano siempre se ha considerado de la
3. Errores de tipo extraño. Cualquier otro caso no asimilable a
mayor importancia a la hora de determinar las posibili-
los anteriores.
dades de éxito o fracaso de cualquier empresa, en el am-
plio sentido del término. Los estudios sobre la contribu-
ción del hombre al fallo del sistema calculan una respon- Métodos específicos de análisis del error
sabilidad entre el 50 y el 80 % de los casos de accidentes humano
importantes. En la aviación, por ejemplo, un 70 % de los
accidentes se estima que son causados por actuaciones in- Para el análisis de la seguridad de los sistemas hombre-
debidas (Creus, 1992). máquina el primer intento sería aplicar los métodos de estu-
Por similitud con la definición general de fiabilidad, dio de la fiabilidad técnica al estudio de la fiabilidad humana;
consideraremos la fiabilidad humana como: sin embargo eso sería olvidar las características del ser
humano descritas anteriormente. Por otra parte, es necesario
La probabilidad de que el comportamiento humano o su efecto sobre el sistema considerar la variabilidad de conducta de la persona (en función
excedan el límite de aceptabilidad. de su resistencia a la fatiga, sus características psicológicas,
afectivas y cognitivas, sus actitudes, su formación y su expe-
Y, por tanto, el error humano se presenta cuando el riencia) y la variabilidad interpersonal, que pueden manifestarse
comportamiento humano o su inf l uencia sobre el sistema como elementos de infiabilidad difícilmente controlables.
exceden el límite de aceptabilidad, pero este límite debe Todo ello hace que las posibilidades de transferir los
definirse claramente, junto con los factores capaces de métodos de la fiabilidad técnica a la fiabilidad humana sean
influir en el comportamiento humano. limitadas y resulte necesario emplear métodos específicos.
Por contraposición al papel de la persona como fuente
de error, debemos considerar también el componente de Cuantificación de los errores humanos
sobrefiabilidad que representa, ya que es capaz de anti-
cipar y recuperar las desviaciones no previstas del sistema. Como hemos indicado, el error humano se presenta
En este sentido, el ser humano aventaja a la mayoría de cuando el comportamiento humano o su influencia sobre el
los dispositivos técnicos por: sistema exceden el límite de aceptabilidad prefijado, su cuan-
. Su capacidad de adaptación ante situaciones no previ- tificación puede hacerse mediante la llamada tasa de error:
sibles. N ED N EP
; o bien
. Por su capacidad de aprendizaje, es capaz de construir ND
D
T
de varias maneras una estrategia de resolución y de donde
adaptarla para el futuro. NED =número de errores por demanda
. Por la posibilidad de anticipar los acontecimientos y,
ND =número de demandas
por tanto, de modificar su estrategia inicial.
. Y por la facultad de corregir sus propios errores. NEP =número de errores en el período de observación
T = período de observación
Factores de forma. Para el estudio de las variaciones En los próximos apartados describimos los métodos de
en el rendimiento humano, se definen los llamados factores análisis y valoración del error humano más destacados:
de forma del comportamiento (PSF, Performance Shaping
Factor), cuya relación simplificada (Creus, 1992) es la si- THERP
guiente:
. Situación del entorno de trabajo Esta técnica (iniciales de Technique for Human-Error Rate
. Forma de las instrucciones de trabajo Prediction) fue ideada por Swain, Rook y su equipo en el La-
. Circunstancias de la tarea boratorio Sandia en 1962. La técnica ha evolucionado y ha
. Factores de estrés psicológico sido perfeccionada (Swain y Guttman, 1983; Bladh, Holm-
. Factores de estrés fisiológico berg, y Pyy, 2009), de tal modo que constituye un estándar
. Factores orgánicos mayoritariamente aceptado.

anales de psicología, 2012, vol. 28, nº 3 (octubre)


Modelos para la evaluación del error humano en estudios de fiabilidad de sistemas 969

La hipótesis de base de THERP es que se puede consi- . Tipo 4: Acciones incorrectas tras un incidente, que em-
derar a la persona como fuente de fallos, de manera similar peoran la situación.
a un dispositivo técnico. Las tareas de la persona se descom- . Tipo 5: Durante la secuencia de un incidente, acciones del
ponen en actividades elementales y su secuencia se visualiza operador, no procedimentadas, con las que puede recupe-
en un árbol de eventos, juntamente con sus posibles desviacio- rar el control.
nes en forma de error de omisión o de comisión del opera-
dor. El evento básico que representa el error humano puede Paso 2: Selección. Consiste en elegir, de entre las acciones
representarse como un subconjunto de nudos del árbol; de identificadas en el paso anterior, las más importantes para la
modo que para calcular su probabilidad basta multiplicar las seguridad del sistema, en dos fases: cualitativamente al prin-
probabilidades que se encuentran a lo largo del camino que cipio del análisis y cuantitativamente después.
conduce hacia él. Para la determinación cuantitativa se aplicarán unos valo-
La técnica THERP es ampliamente aceptada en diversos res preliminares o genéricos, en función del tipo de tarea y
campos de actividad por su capacidad de integrarse en un del nivel de actuación requerido (rutina, reglas o conoci-
análisis probabilístico de riesgos y ha influido en el desarro- miento). Se seleccionarán para el análisis en los pasos si-
llo de otras técnicas de análisis; pero presenta dificultades, ya guientes aquellas acciones humanas que aparezcan con una
que es de aplicación muy laboriosa y los análisis tienen un contribución al fallo del 1 % o más.
componente de subjetividad importante, a causa de las
múltiples elecciones de valores que se deben realizar en ta-
blas de datos, de modo que frecuentemente no hay unifor-
midad entre distintos analistas en la identificación de errores
y en los PSF a considerar.
Las críticas más fuertes (Arquer, 2007; Quesada, 1999) se
centran en dos aspectos:
. En el desglose de la tarea en acciones elementales, porque
ello no siempre es coherente con la organización psicoló-
gica de la tarea.
. En el origen y la aplicabilidad a situaciones diversas de los
datos que se dan en las tablas. Figura 1. Procedimiento SHARP de análisis de fiabilidad humana.

Los críticos de orientación cognitiva exigen un modo de Paso 3: Análisis cualitativo. Los dos objetivos de este paso,
análisis del error más afianzado teóricamente y son escépti- son: a) detallar los conocimientos del operador y qué tipo de
cos sobre la asignación de probabilidades razonables a ac- acciones puede realizar en una determinada situación; b)
ciones relacionadas con situaciones muy específicas. identificar cómo el comportamiento de un operador puede
Además, para las tareas de diagnóstico o que requieran un ser modificado por una disfunción del sistema.
cierto nivel de decisión, esta técnica no permite identificar Paso 4: Representación. Para la inclusión de los resultados
recomendaciones para disminuir la probabilidad de fallos del análisis de fiabilidad humana en el análisis global del sis-
humanos de este tipo. Sólo una persona experta en fiabilidad tema, los modos de fallo humano requieren una representa-
humana puede determinar con criterio las modificaciones ción de las acciones, que refleje cómo pueden afectar a la
ergonómicas necesarias para incidir sobre las causas psicoló- operación del sistema (Faig, 2007).
gicas de algunos errores. Paso 5: Evaluación del impacto. Las acciones del paso ante-
rior deben revisarse con el objeto de verificar que la repre-
SHARP sentación no afecta a ningún suceso más en el modelo.
Paso 6: Cuantificación. El propósito ahora es establecer, en
(Systematic Human Action Reliability Procedure) Es un méto-
todas aquellas acciones a las que se le haya requerido un aná-
do (Hannaman y Spurgin, 1984) que define una estructura
lisis detallado, el valor de la probabilidad de fallo para cada
basada en la experiencia y el análisis sistemático de las inter-
acción humana. Para ello (Faig, 2007):
acciones. El método aplica siete pasos, que pueden verse en
. Para los errores tipo 1, se aplicará la metodología
la figura 1 con sus interacciones.
THERP.
Paso 1: Definición. Se trata de identificar y asegurar que to-
. Para los tipo 3, 4 y 5, la cuantificación se realizará me-
das las acciones humanas importantes se han incluido en el
diante el modelo TRC (ver más adelante) para la parte
análisis. Para ello, en primer lugar se clasifican como:
cognoscitiva y THERP para la manual.
. Tipo 1: Relacionadas con pruebas y mantenimiento, ante-
. Para acciones fuera del ámbito de aplicación de los mo-
riores al incidente.
delos mencionados, se utilizarán bases de datos, estima-
. Tipo 2: Acciones que, a partir de un error, generan ano-
ciones de expertos, o la comparación con análisis ante-
malía del sistema.
riores.
. Tipo 3: Acciones con las que, de acuerdo a un procedi-
miento, el operador puede recuperar control del sistema.

anales de psicología, 2012, vol. 28, nº 3 (octubre)


970 Juan M. Ruiz-Moreno y Humberto M. Trujillo

Paso 7: Documentación. La metodología SHARP postula cia. SLI es el índice de fiabilidad, calculado como se ex-
documentar adecuadamente los pasos realizados, de forma pone más adelante, en la técnica SLIM.
que se asegure la trazabilidad de las hipótesis, datos, y mode- Reducción de los errores. Los resultados del análisis jerárqui-
lo seleccionado. co de tareas y del análisis de los errores humanos deberían
posibilitar la propuesta de recomendaciones para mejorar los
SHERPA procedimientos de trabajo, la formación y adiestramiento del
personal, el diseño del equipo, etc.
(Systematic Human Error Reduction and Prediction Approach) Valoración. Al ensayo de las recomendaciones le debe se-
Esta otra técnica (Embrey, 1986) pretende evaluar cualitativa guir el control de su eficacia mediante una fase de evaluación
y cuantitativamente la fiabilidad humana y elaborar reco- del resultado.
mendaciones concretas para reducir la probabilidad de erro- La técnica SHERPA se ha aplicado en sectores de activi-
res humanos, especialmente en lo que se refiere a procedi- dad de alto riesgo (nuclear) y en sectores de servicios (corre-
mientos, formación de personal y diseño de equipos. os). Sus principales ventajas son:
Está basada en el análisis funcional de la conducta . La aplicación de modelos cognitivos facilita la comprensión y
humana según el modelo de Rasmussen (ver más adelante) y reducción de los errores.
se desarrolla en varios módulos de análisis: . Su orientación hacia la propuesta de recomendaciones.
Análisis jerárquico de las tareas. Se trata de un método sis- . Trata el error de modo positivo, como elemento de infor-
temático de identificación de las diferentes subtareas, de sus mación.
objetivos respectivos y de la forma en que estos objetivos se
combinan para alcanzar un objetivo global. Se obtiene en- Esta técnica resulta adecuada para tareas en las que la ac-
tonces una lista detallada de actividades y objetivos elemen- tividad humana está en el nivel de funcionamiento basado en
tales que pueden clasificarse en cuatro categorías de proce- habilidades (automatismos) o en la aplicación reglas. Sin em-
sos mentales: bargo, los errores que se producen en el nivel de conocimientos
1. Basado en habilidades o automatismos. son poco predecibles. Otras limitaciones son:
2. De diagnóstico basado en reglas. . Escasa madurez de algunos módulos.
3. Basado en reglas del tipo: si x, entonces y. . Su inserción en el análisis probabilístico de riesgos está aún
4. Basado en conocimientos. en desarrollo.
. No consideración de los efectos temporales.
La técnica predictiva de los errores sólo es aplicable para . Los resultados están muy influidos por el criterio del ana-
las tres primeras categorías; para la cuarta, están en fase de lista.
desarrollo otras técnicas.
Juicio de expertos
Análisis de los errores humanos. Consiste en una búsqueda
sistemática de los posibles errores, en varias etapas: Es una técnica aplicable junto con cualquier otra, como
1. Definición de los pasos de una tarea que no pueden ser método alternativo al uso de tablas para la estimación de
omitidos o modi cados, sin perjudicar el objetivo. probabilidades de error humano. Se recurre a ella cuando,
2. Análisis de la fiabilidad de la tarea. para conocer la probabilidad de error, hay que considerar la
3. Análisis del impacto del error sobre los elementos rela- influencia de muchos factores interdependientes que afectan
cionados con él. a la respuesta de la persona; también se emplea cuando en
4. Recomendaciones para reducir los errores. las bases de datos no se encuentran puntos de referencia
aplicables. Combina las aproximaciones analíticas y los
Cuantificación. Este módulo es discrecional. Cuando es su- métodos de estimación subjetiva de probabilidades desarro-
ficiente con una evaluación cualitativa, la técnica SHERPA llados conforme a las reglas de la teoría de la decisión.
puede ir directamente al módulo de reducción de errores. El Los resultados del juicio de expertos pueden estar afec-
análisis cuantitativo se realiza mediante Success Likelihood In- tados por algunos sesgos de origen diverso. Principalmente
dex Methodology (SLIM), con la que se obtienen índices de por la mayor facilidad para considerar los sucesos o errores
probabilidad de éxito para las tareas (considerando los PSF más conocidos y por la posibilidad de que uno de los exper-
correspondientes): tos arrastre a los demás hacia su propia opinión. También
log( p ) a SLI b pueden surgir conflictos por motivos personales.
donde:
log( p1 / p2 ) TRC
a
SLI 1 SLI 2
(Time Reliability Curve) Se trata de una técnica (Dougherty
b log( p1 ) a SLI 1 y Fragola, 1988) especialmente aplicable a las acciones post-
SLI1 , SLI2 , p1 y p2 son parámetros tabulados co- accidente. Se basa en suponer que la disponibilidad de tiem-
rrespondientes a situaciones límite tomadas como referen- po, o la posibilidad del operador de poder pensar, es el fac-
tor determinante en la probabilidad de fallo de la acción.

anales de psicología, 2012, vol. 28, nº 3 (octubre)


Modelos para la evaluación del error humano en estudios de fiabilidad de sistemas 971

T0,5 = T0,5/nomimal (1+K1 ) (1+K2 ) (1+K3)


donde K1 , K2 y K3 son, respectivamente, los coeficientes
para la experiencia del operador, para nivel de estrés y para
la calidad de la interfaz operador/planta.

HCR/ORE

(Human Cognitive Reliability / Operator Reliability Experi-


ments). Es una revisión (Spurgin, 1990) de la técnica HCR,
basada en experimentos de fiabilidad de operadores e inclu-
ye la posibilidad de cuantificar acciones de recuperación de
errores.

SLIM

(Success Likelihood Index Methodology). Este método (Em-


brey, Humphreys, Rosa, y Rea, 1984) sólo tiene en cuenta
factores de forma (PSF) para ajustar las probabilidades de
error; en particular, el tiempo que dispone el operador para
realizar una tarea es también tratado como PSF.
Figura 2. Curvas nominales en el modelo TRC La suma ponderada de esos PSF da un índice de fiabili-
dad, denominado SLI:
La figura 2 muestra las curvas de correlación tiempo- n
probabilidad de la TRC. Existen dos pares de curvas, un par SLI ( wi x i )
se aplica a los errores basados en reglas, por ejemplo en dia- i 1

gnosis incorrectas, mala previsión o incorrecta toma de de- con


cisiones en el seguimiento de las reglas (procedimientos), n

una de las curvas se utiliza cuando no hay ambigüedad, la wi 1


i 1
otra cuando la toma de acción se realice con dominio de las donde:
dudas. El segundo par de curvas se utiliza cuando la diagno- xi = grado o efecto de incremento de fiabilidad que
sis se realiza en ausencia de reglas, este es el caso de recupe-
produce el PSF i en la acción investigada;
raciones después de un incidente no procedimentadas.
wi = peso relativo del PSF i;
HCR n = número de PSFs relevantes.
Los cálculos de las probabilidades se realizan en base a
(Human Cognitive Reliability model). Trata también (Han- dos modelos:
naman, Spurgin, y Lukics, 1885) de una correlación tiempo- 1. Calculando la probabilidad q de no fallo (q=1—p):
fiabilidad en las acciones de diagnosis o identificación. Para log( q ) a SLI b
ello, maneja tres tipos de eventos (A1, diagnosis correcta; log((1 p1 )/(1 p2 ))
A2, diagnosis errónea; A3: falta de diagnosis o diagnosis a ; b log(1 p1 ) a SLI1
tardía), de forma que la suma de probabilidades: SLI 1 SLI 2
P (A1) + P (A2) + P (A3) = 1 2. O calculando la probabilidad p de fallo:
La función de distribución del tiempo requerido para log( p ) a SLI b
realizar una tarea es representada mediante una distribución log( p1 / p2 )
de Weibull (ver modelo psicológico de Rasmussen). Y la a ; b log( p1 ) a SLI1
SLI 1 SLI 2
probabilidad de error en función del tiempo es:
t
b SLI1 , SLI2 , p1 y p2 son parámetros tabulados correspon-
a
T0 ,5 dientes a situaciones límite tomadas como referencia válida
c para el caso en estudio.
P(t ) e
donde: INTENT
(a, b, c) = coeficientes representativos del tipo de compor-
tamiento. Trata (Gertman, Blackmann, Haney, Seidler, y Hahn,
Por su parte, el tiempo promedio TO,5 resulta de un 1992) de la estimación de probabilidades de error humano
en casos de errores basados en procesos de decisión (errores
nominal estimado TO,5/nomimal y modificado por tres
de intención), como complemento de otros métodos que no
parámetros de forma (PSF): consideran este tipo de procesos. INTENT tabula 20 tipos

anales de psicología, 2012, vol. 28, nº 3 (octubre)


972 Juan M. Ruiz-Moreno y Humberto M. Trujillo

de errores nominales, para cada uno de los cuales aporta un n

límite inferior (LB) y un límite superior (UB) de probabilidad p p0 [1 ( K i 1)x i ]


i 1
de ocurrencia. Adicionalmente, se definen 11 factores de
donde:
forma (PSFs).
p = probabilidad de error humano en el evento;
De forma similar al método SLIM, la toma en consi- p0 = probabilidad nominal;
deración ponderada de los PSFs lleva al cálculo de un índice
Ki = máximo efecto multiplicativo del EPC i;
de fiabilidad, SLI. No obstante, difiere en el cálculo de la
probabilidad de error: INTENT asume que p es igual al xi = tasa estimada de inf l uencia del EPC i;
cuantil (1-SLI )100 % de una distribución log-normal en la n = número de EPCs considerados.
que LB es el cuantil 5 % y UB es el cuantil 95 %.
1 Resumen comparativo
ln( p ) (1 SLI )
ln(UB / LB ) ln(UB LB ) A modo de resumen comparativo, hemos compuesto el
; Cuadro 1, indicando las ventajas y limitaciones que, sobre las
3, 29 2
distintas técnicas de análisis del error humano, se ponen de ma-
OAT nifiesto en la literatura técnica.

(Operator Action Type / Operator Action Tree). Es un méto- Modelos de representación del comportamiento
do (Hall, Fragola, y Wreathall, 1982) que caracteriza cada
una de las partes de la acción humana y sirve para cuantificar En cada una de las técnicas descritas en los apartados ante-
los errores, en particular cuando el tiempo desempeña un riores subyace una forma de entender el comportamiento
papel importante. El método se basa en modelos de accio- humano, más o menos mecanicista, que está siendo criticada
nes humanas ligadas a la detección del evento, su razona- desde la Psicología, por su escasa profundización en las causas
que desencadenan el error humano. Por ello, en este punto va-
miento, su diagnóstico y a la respuesta requerida.
mos a repasar los distintos modelos de representación del com-
EdF's PHRA portamiento, para exponer sus ventajas e inconvenientes cara al
análisis de la fiabilidad humana.
(Method of Electricité de France for Probabilistic Human Reli- Los modelos para representar la actividad o el comporta-
ability Analysis). Esta técnica (Mosneron, 1989) da prioridad miento humano pueden clasificarse, en primer lugar, en parciales
al análisis cualitativo más que a la cuantificación de las pro- y generales. Los primeros se limitan a analizar una actividad con-
babilidades de error. No obstante, esta cuantificación es creta, por ejemplo la detección de una señal, mientras que los
segundos intentan analizar en conjunto todas las causas posibles
también tenida en cuenta como función del tiempo disponi-
del error y hacer propuestas de mejora. Estos últimos los sepa-
ble, mediante curvas basadas en datos de simulador, para ac-
raremos a su vez entre los basados en teorías psicológicas y los
ciones de diagnóstico. basados en el análisis de la tipología de los procesos humanos.
Para acciones post-diagnóstico, aplica el llamado “mode-
lo de ejecución”: Modelos parciales

PE = PB· KF · PNR Se limitan, como hemos dicho, a analizar una actividad ele-
donde: mental concreta entre las que podemos considerar, como para-
PE = probabilidad de que falle la ejecución de la acción; digma, el modelo de la detección de señales que distingue dos tipos de
PB = probabilidad básica de fallo; error:
KF = factor para considerar el contexto de la acción; 1. Omisión: una señal presente no ha sido percibida y
PNR = probabilidad de que falle la recuperación. 2. Falsa alarma: una señal ausente es percibida como presente.

HEART Presupone un mecanismo de respuesta de la persona que


conjuga la discriminabilidad de la señal y el criterio de decisión
(Human Error Assessment and Reduction Technique). Es otro adoptado.
método (Williams,1988) basado exclusivamente en el trata- Para la estimación de las probabilidades de error de las acti-
miento de los PSF (aquí llamados EPC, error producing vidades elementales se usan tablas de probabilidades, obtenidas
a partir de juicios de expertos y/o de datos históricos. El ins-
conditions) y se utiliza fundamentalmente para el análisis a
trumento de base para el análisis, cuando la actividad puede re-
nivel de tareas complejas, más que en el nivel de acciones presentarse en tareas o actividades más simples (p.e. en la meto-
elementales. El modelo es multiplicativo y tiene la siguiente dología THERP), es un tipo de árbol de sucesos llamado diagrama
forma: en árbol de probabilidades.

anales de psicología, 2012, vol. 28, nº 3 (octubre)


Modelos para la evaluación del error humano en estudios de fiabilidad de sistemas 973

Cuadro 1. Resumen de técnicas de análisis del error humano.


Técnica Ventajas Limitaciones Observaciones
THERP Estándar aceptado. Importante componente de subjetividad. Aplicable a todos los sectores industriales.
Integrable en un análisis de probabilida- Excesivo énfasis en los errores externamen-
des de riesgos. te observables.
Amplia base de datos disponible. Difícil aplicación de los datos en tablas a si-
tuaciones distintas.
No permite hacer recomendaciones de me-
jora para errores de diagnóstico.
SHARP Adaptable a la experiencia de los analis- Sólo la pueden aplicar expertos en la acti- Marco útil para la integración de diversos
tas. vidad analizada. métodos.
Buen tratamiento de las interacciones.
Buena integración en el análisis proba-
bilístico de riesgos.
SHERPA Utilización sencilla para no especialistas. Escaso tratamiento de los errores basados Se ha aplicado, tanto en sectores industria-
Uso de modelos cognitivos. en conocimientos. les, como en servicios.
Orientado a la propuesta de recomenda- Falta de madurez.
ciones. Escasa integración en el análisis de probabi-
lidades de riesgos.
No considera los aspectos temporales.
Excesiva subjetividad.
Juicio de Sencillez de uso. Posibilidad de sesgo por influencia de unos Aplicable a todo tipo de actividades sim-
expertos Posibilidad de recoger información expertos en otros. ples. Imprescindible en ausencia de datos
complementaria para proponer mejoras. asimilables.
TRC Considera el factor tiempo. Aplicable a acciones post-accidente.
Integrable como parte de cualquier otra
técnica.
HRC Aplicación del modelo cognitivo de No hay amplia aceptación sobre los pará-
Rasmussen. metros aplicables. Pendiente de mayor de-
sarrollo.
SLIM Orientado al tratamiento de los PSF. Poco validada.
Flexible. Desprecia las interrelaciones entre PSFs.
Precisa de sofisticadas estimaciones de ex-
pertos.
OAT Técnica pionera en el tratamiento de Integración poco clara en el análisis proba-
errores de diagnosis y en el efecto tem- bilístico de riesgos.
poral.
HEART Aplicación simple. Aislamiento excesivo de las distintas tareas.
INTENT Especializada en errores de decisión. Falta de madurez.

La consideración de la inf l uencia de algunos factores partiendo del supuesto, no siempre cierto, de que el carácter
(PSF) sobre el desempeño de la persona es la única mane- anómalo de la situación es detectado de forma evidente. Por otra
ra en que las técnicas basadas en el análisis de tareas tie- parte, la obtención de información y la elaboración de bases de
nen en cuenta la naturaleza humana del individuo, en tan- datos útiles presentan problemas ocasionados, entre otras razo-
to que fuente de error. Estos factores (experiencia, nivel de nes, porque:
estrés, etc.) se utilizan para modificar las probabilidades . sólo se suele informar de los errores humanos que se
nominales de error. Específicamente la metodología traducen en consecuencias no deseables; sería necesario
THERP ofrece veintisiete tablas de probabilidad de erro- asegurar el registro de todos los errores;
res humanos cuyos valores son probabilidades nominales. . existen limitaciones a causa de las diferencias entre unas
En resumen, la probabilidad P (E) de un error ele- situaciones y otras;
mental se obtiene por la fórmula: . puede ser difícil def i nir el límite exacto entre la conduc-
P (E) = P1 · K · P2 ta humana adecuada y la errónea.
en la que:
P1 = Probabilidad nominal de error. Una alternativa para soslayar en parte las limitaciones
K = Coeficiente de corrección. del uso de bases de datos consiste en la estimación de
probabilidades de error mediante juicios de expertos.
P2 = Probabilidad de no recuperación del error.
Para tareas de diagnóstico, se establece la probabilidad de fra- Modelos generales basados en teorías psicológicas
caso en función del tiempo disponible para realizarlo. Se trata de
un cálculo sencillo, pero sin información sobre la causa del error y Rasmussen. El modelo de Rasmussen es, entre los mode-

anales de psicología, 2012, vol. 28, nº 3 (octubre)


974 Juan M. Ruiz-Moreno y Humberto M. Trujillo

los generales, el más utilizado (casi el único) y distingue ocho quema apropiado no es viable.
etapas en el proceso de tratamiento de la información y toma de decisio- Norman y Shallice proponen que el sistema supervisor
nes: activación, observación, identificación, interpretación, debería ser activado para:
evaluación, selección de objetivo, elección del procedimiento 1. Situaciones que involucren planificación o toma de de-
y ejecución. También diferencia tres niveles de comportamiento de cisiones.
la persona, según base su actividad en: automatismos, reglas 2. Situaciones que involucren corrección de errores.
o procedimientos y conocimientos. Dichos niveles corres- 3. Situaciones donde la respuesta es nueva y no está bien
ponden a grados decrecientes de familiaridad con el entorno aprendida.
y la tarea. 4. Situaciones que se juzgan como difíciles o peligrosas.
En la figura 3 se representa el esquema de 8 etapas del
tratamiento de la información y se indica los saltos que se En el modelo, el procesamiento automático puede referirse
dan entre ellas, en función del nivel de comportamiento: a procesos en los cuales la selección de esquemas implica
cuando una persona tiene un comportamiento basado en au- tan poca activación que la conducta puede ser realizada en
tomatismos pasará de las etapas de “activación y observa- paralelo con otras actividades. De manera alternativa, se
ción” directamente a la de “ejecución”; cuando tiene un puede referir a procesos controlados por su propio es-
comportamiento basado en las reglas y procedimientos, el quema individual, disparados directamente por algún
salto hacia la “ejecución” se hará desde la etapa de “identifi- estímulo. El procesamiento controlado podría corresponder a
cación” y, por último, cuando el comportamiento se basa en procesos que requieren seleccionar más de un esquema
los conocimientos, la persona recorre las ocho etapas men- de la agenda de contenidos. No obstante, dado que un
cionadas. esquema sobreaprendido puede, según la teoría, ser selec-
La ventaja de este modelo cognitivo es que conjuga la cionado mientras esté funcionando un segundo esquema
identificación del origen funcional del error (etapa de trata- más potentemente activado, la selección puede ocurrir en
miento) con el nivel de funcionamiento implicado y así per- un continuo de valores de activación. Por lo tanto, la dis-
mite reparar los errores por etapas de tratamiento y propo- tinción entre procesos automáticos y controlados se con-
ner medidas de prevención adaptadas al nivel de comporta- vierte en una cuestión de grado más que en una dico-
miento de la persona. tomía.

Figura 3. Etapas de tratamiento de información y toma de decisiones


según Ramussen.
Figura 4. Esquema de atención para la acción de Norman y Shallice.
Norman y Shallice. D. Norman y Shallice (1980) quisie-
ron establecer una teoría de la acción humana que fuese Las explicaciones para los errores derivadas del marco
adecuada tanto para explicar la ejecución correcta como las de Norman y Shallice se basarían en que los procesos au-
variedades más predecibles del error humano. Las formas tomatizados pueden prescindir, y de hecho prescinden en
sistemáticas de error y la ejecución correcta se enfocan muchas ocasiones, del control consciente, y esto puede
como caras de la misma moneda. hacer que las situaciones que son novedosas por alguna
El modelo se denomina ‘Atención para la acción’ y se característica sutil sean tratadas, erróneamente, como si-
pensó básicamente para explicar las diferencias entre el tuaciones conocidas.
procesamiento automático y el controlado. Propone dos Teorías basadas en el concepto de esquema. Bartlett (1931) in-
componentes para describir los distintos niveles de con- vocó la noción de esquema para explicar los errores sistemá-
trol necesarios para llevar a cabo varias secuencias de ac- ticos en el recuerdo de material pictórico y verbal. Las re-
ción o pensamiento. El primero, la agenda de contenidos, producciones hechas de memoria de esos materiales eran
controla la ejecución de actos rutinarios y habilidades so- más regulares, más significativas y más convencionales que
breaprendidas: los “esquemas de acción”. Éstos son con- los dibujos o las historias originales. Las características poco
juntos de respuestas asociadas con un estímulo ambiental comunes del material a recordar se sometían a las expectati-
específico para el que el esquema es activado. El segundo vas y hábitos de pensamiento de la persona.
componente es el sistema supervisor, la unidad de planifica- Enfatizó tres aspectos fundamentales de los esquemas:
ción general necesaria para resolver problemas no rutina- 1. que eran estructuras mentales inconscientes,
rios, proveyendo un control atencional consciente para 2. que estaban compuestas de conocimiento (de experien-
modular la ejecución. Se activa cuando el proceso de se- cias pasadas) y
lección por la agenda de contenidos falla o cuando un es- 3. que la memoria a largo plazo consiste en estructuras ac-

anales de psicología, 2012, vol. 28, nº 3 (octubre)


Modelos para la evaluación del error humano en estudios de fiabilidad de sistemas 975

tivas de conocimiento y no en imágenes pasivas. las condiciones ambientales, estrés, etc.

Por tanto, los esquemas, más que reproducir, reconstru- Para representar estos procesos de decisión y de ejecu-
yen las experiencias pasadas. Y este proceso lleva a unas ción se utilizan con frecuencia lenguajes de inteligencia arti-
predecibles predisposiciones en el recuerdo. ficial (p.e, LISP), siendo la simulación de los mecanismos de
En la década de los 70, las ideas de Bartlett se retomaron error humano objeto de estudio especial, debido a su dificul-
desde distintos campos, como la ‘visión computerizada’, la tad.
‘interpretación de historias’ y el ‘aprendizaje de habilidades
motoras’. Común a estas teorías es la idea de que los esque- Resumen y conclusiones
mas son estructuras de conocimiento de alto nivel que con-
tienen ‘slots informacionales’ o variables. Cada ‘slot’ sólo Los modelos del comportamiento humano revisados ante-
aceptará un tipo particular de información. Si los ‘inputs’ que riormente, y especialmente los denominados modelos par-
provienen del mundo en ese momento no proporcionan la ciales, son el soporte teórico de diversas técnicas (THERP,
información específica para esos ‘slots’, éstos toman valores SHARP,...) que se usan para el análisis y cuantificación del
por defecto: valores estereotípicos derivados de la experien- error humano. Sin embargo, los llamados modelos generales,
cia previa con el ambiente en situaciones parecidas. Esta idea con la excepción del de Rasmussen, tienen todavía una apli-
de volver a los valores por defecto es central en la explica- cación incipiente en esas técnicas de análisis.
ción de los errores humanos.
Modelos parciales
Para estas teorías, la rapidísima manipulación de la in-
formación característica de la cognición humana es posible Hemos visto que los modelos parciales, influidos por la tra-
porque las regularidades del mundo y nuestras rutinas para dición ‘mecanicista’, proceden diseccionando las tareas y li-
afrontarlas han sido representadas internamente como es- mitando el análisis a cada actividad elemental concreta, a la
quemas. El precio que pagamos por este procesamiento au- que se asocian los tipos de error que le son significativos y
tomático de la información es que las percepciones, la me- que, por la propia naturaleza elemental de la actividad, serán
moria, los pensamientos y las acciones tienen tendencia a pocos y aceptablemente bien caracterizados. Considerados
errar en la dirección de lo familiar y lo esperado. como procesos estocásticos, para cada tipo de error se busca
Modelo de Norman
su probabilidad de ocurrencia, aplicando, según sea el caso,
tablas o registros históricos, simulación o juicio de expertos.
Una teoría específica para explicar errores humanos, ba- Este tratamiento mecanicista hemos visto también que
sada en el concepto de esquema, es la de D. A. Norman admite ajustes orientados, por un lado, a la consideración de
(1981), llamada esquema desencadenado por activación (EDA). En los denominados factores de forma (PSF) y, por otro, a la con-
ésta una secuencia de acción es representada por un esque- sideración del factor tiempo; sujetos, en cualquier caso, a la
ma padre y varios esquemas hijos, entre los cuales puede apreciación del analista.
haber activos varios esquemas de acción al mismo tiempo. También se han descrito los problemas para obtener da-
Cada esquema tiene un conjunto de características de activa- tos que sean útiles:
ción y un valor de activación. El camino de la intención a la . por la dificultad de asimilar situaciones distintas,
acción consiste en la activación del esquema padre que co- . por la necesidad de disponer de grandes períodos de tiem-
rresponde a la intención, la activación de los esquemas hijos po y
para las partes que componen la acción, y después el desen- . por la dificultad de encontrar el límite exacto entre con-
cadenamiento de los esquemas cuando se dan las condicio- ducta adecuada y errónea.
nes que requieren para operar. Este sistema permite organi- Pero la crítica fundamental es que, como resultado de la
zar los errores en tres categorías mayores: visión parcial del comportamiento humano, proceden sobre
1. Errores en la formación de la intención. la ignorancia o el tratamiento superficial de los elementos
2. Fallos en la activación de los esquemas. cognitivos que, tal como proclaman las teorías psicológicas,
3. Errores por fallo en el desencadenamiento del esquema. están en la base de los denominados errores de comisión; en
Modelos basados en la tipología de los procesos consecuencia, no aportan información sobre la causas del
humanos error y ayudan poco al objetivo final, que no es otro que re-
ducir su probabilidad de ocurrencia.
Este otro modelo humano se funda en el análisis básico
de los procesos que realiza el hombre: Modelos generales
. Procesos de tipo cognoscitivo, con una toma de decisiones El recurso a modelos generales busca un marco teórico que
de “alto nivel”. englobe los procesos cognitivos presentes en el comporta-
. Procesos de ejecución, que precisan la toma de decisiones miento humano; permitiendo así, no solo tipificar los erro-
de “bajo nivel”. res, sino comprender el mecanismo que los desencadena.
. Errores cometidos en cualquier nivel y que dependen de El modelo de Rasmussen, basado en ocho etapas de tra-

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976 Juan M. Ruiz-Moreno y Humberto M. Trujillo

tamiento de la información y toma de decisiones y tres nive- cognoscitivo y procesos de ejecución. La ventaja de estos
les de comportamiento, es el más utilizado entre los modelos modelos es que admiten representación mediante lenguajes
generales y conjuga la identificación del origen funcional del de inteligencia artificial.
error (etapa de tratamiento) con el nivel de funcionamiento Como crítica global del conjunto de los modelos genera-
implicado (basado en conocimientos, en reglas, o automáti- les, hemos puesto de manifiesto la escasez de desarrollo para
co). constituir métodos aplicables al entorno industrial; por lo
Norman y Shallice proponen una teoría de la acción que existe un amplio campo de trabajo por hacer en el desa-
humana adecuada tanto para explicar la ejecución correcta rrollo y perfeccionamiento de técnicas basadas en estos mo-
como las variedades habituales del error humano. Se deno- delos.
mina ‘Atención para la acción’ y postula la existencia de dos
componentes para describir los distintos niveles de control: Cuadro resumen
la agenda de contenidos, que controla la ejecución de actos ruti-
narios y habilidades sobreaprendidas, denominadas ‘esque- Por tanto, podemos resumir que, aunque los llamados
mas de acción’, y el sistema supervisor, que es la unidad de pla- modelos globales de comportamiento humano atienden a
nificación general necesaria para resolver problemas no ruti- la cuestión de explicar el origen del error, que es el prin-
narios. cipal defecto de los modelos parciales, el uso de éstos si-
Por otro lado, hay un grupo de teorías que profundizan gue siendo, hoy por hoy, imprescindible, puesto que son
en el concepto de esquema, enfatizando, entre otros aspec- la base de técnicas que, como THERP, están bien acep-
tos, que la memoria a largo plazo se compone de estructuras tadas en la industria, y especialmente en las industrias de
activas de conocimiento, en vez de imágenes pasivas. Como alto riesgo.
ejemplo de estas teorías, hemos señalado la de Norman, de- En el cuadro 2 puede verse una comparación es-
nominada esquema desencadenado por activación (EDA). Describe quemática entre los distintos modelos de comportamiento,
el comportamiento humano como un proceso de activación su relación con las técnicas en vigor de análisis del riesgo
y desencadenamiento de esquemas. humano y una referencia sucinta a sus debilidades y forta-
Por último, hemos mostrado la simplificación que repre- lezas en orden a dar un soporte consistente a esas técni-
sentan los modelos basados en la tipología de los procesos cas.
humanos. Estos modelos distinguen entre procesos de tipo
Cuadro 2. Resumen de modelos.
Modelo de representación Técnicas de aplicación Fortalezas y debilidades
del comportamiento
Modelos parciales; p.e.: Arboles de sucesos, aplicados en THERP, OAT... Madurez y aceptación.
detección de señales. Arboles de fallos, aplicados en SHARP. No buscan la causa funcional del error.
Estimaciones de expertos.
Rasmussen Distribución de Weibull (aplicable en todas las técnicas). Explicación del origen funcional del error.
SHERPA. Buenas posibilidades de integración en técnicas actuales.
HCR. Dificultad de ajuste de los coeficientes.
Atención para la acción SHERPA (análisis cualitativo). Explicación del error con el mismo mecanismo que la ac-
(Norman y Shallice) ción correcta.
Poca integración en técnicas cuantitativas actuales.
EDA (Norman) En desarrollo. Explicación del origen funcional del error y de sus rela-
ciones con los facto-res ambientales.
Escasa integración en técnicas actuales.
Tipología de procesos Inteligencia artificial. Buenas posibilidades de modelado mediante esquemas
lógicos.
Incompleta explicación de causas de error.

Conclusiones y líneas de investigación comportamiento humano y las múltiples variables que lo


determinan.
Del conjunto de experiencias e investigaciones publicadas Líneas de investigación. El ámbito de las metodologías de
hasta el momento destaca el hecho de que es la interac- análisis del error humano se trata de un campo multidiscipli-
ción hombre-máquina el factor clave a considerar en la nar en el que se mantienen abiertas muchas líneas de investi-
mejora de la fiabilidad de los sistemas industriales, aun- gación que podrían resumirse en dos grupos:
que resulta mucho más fácil analizar el comportamiento de 1.Investigación metodológica. Se ocupa de la validación y mejora
la máquina que el del hombre. de los actuales métodos de análisis de fiabilidad humana,
En consecuencia, la principal conclusión que extrae- sin poner en cuestión sus fundamentos teóricos, y tratan
mos es que, para mejorar el cálculo de la probabilidad de de buscar solución a los siguientes problemas:
error, habría que incorporar los aspectos cognitivos del . Las diferencias entre los resultados cuantitativos de dife-

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Modelos para la evaluación del error humano en estudios de fiabilidad de sistemas 977

rentes analistas (usando el mismo método) o de diferen- tante de estas investigaciones consiste en extender el ámbi-
tes métodos. to de los estudios probabilísticos de riesgos a los llamados
. El tratamiento superficial que se hace de las dependen- ‘errores de comisión’. Con ello se pretende suplir el defec-
cias entre acciones. to de los actuales métodos de análisis (árboles de eventos y
. El tratamiento superficial de los errores de diagnóstico o árboles de fallos), bien adaptados a los ‘errores de omi-
errores de decisión. sión’, pero no a los de ‘comisión’.
. Falta de tratamiento de las dependencias entre factores
de forma (PSF). Agradecimientos.- Los autores quieren agradecer la revisión y
2. Investigación sobre modelos. Persigue ampliar el ámbito de va- sugerencias realizadas por el prof. Vicente Bargueño (ETS de
Ingenieros Industriales, UNED) en el primer borrador de este
lidez de los análisis de fiabilidad, mediante la propuesta de trabajo.
nuevos métodos y/o nuevos enfoques. Un objetivo impor-

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