Helen Keller

Nació en 1880, en Alabama, Estados Unidos, en una pequeña población de dos mil
habitantes junto al río Tennesse, lugar con buen clima, grandes pastos verdes y
bosques rodeados por montañas. Su familia vivía de las plantaciones de algodón y
su papá trabajaba como editor en un diario.

Nació como una niña normal llena de vitalidad y de carácter fuerte, a los seis meses
empezó a hablar; al año empezó a caminar, pero a los 19 meses contrajo una
enfermedad que los doctores describieron como una congestión aguda del estómago
y el cerebro y aunque no la padeció por mucho tiempo no se supo exactamente qué
había sido lo que le provocaba altas fiebres, que de repente desapareció dejando a
la niña sorda y ciega. Debido a la temprana edad en que sufrió la enfermedad no
pudo desarrollar el habla normal debido a la sordera, aunque su intelecto
permaneció intacto, por lo que esta situación le afectó mucho en la parte emocional.
Así que después de esta enfermedad Helen quedó ciega, sorda y en consecuencia
muda, sin poder articular palabras para comunicarse por este medio.

Sin embargo a pesar de esta situación y sufriendo un cambio muy brusco en su

vida, la niña era como un niño salvaje que hacía berrinches porque no la entendían,
porque se sentía impotente y sola en un mundo obscuro y silencioso. Inicialmente
aprendió a comunicarse por medio de señas con la hija de la cocinera de la familia,
y a los siete años ya había inventado muchas señas para comunicarse con sus
padres, pero era una niña muy berrinchuda que hacía lo que quería y no tenía
límites, si encontraba un obstáculo a sus deseos lloraba, pegaba, se revolcaba de
coraje y aventaba las cosas y las rompía. Sus padres siempre estuvieron al
pendiente de ella y la consentían demasiado y quizá por estar al pendiente de ella
no tuvieron otra hija, sino hasta después de siete años.

Durante su infancia Helen pasaba el tiempo sentada en el regazo de su madre y la

acompañaba a donde fuera, aprendía tocando todos los objetos y percibiendo olores
y sensaciones. Su mundo era muy distinto al de los demás.

Siendo una niña muy inteligente, captaba con rapidez lo que había a su alrededor,
aunque no pudiera verlo, a través de las vibraciones que podía percibir y ayudando
a su mamá en lo que le enseñara. Cuando se dio cuenta de que no era como los
demás y que se comunicaban de manera diferente aprendió a tocar las bocas de
otras personas y a imitarlas moviendo sus labios.

Hasta que un día, después del nacimiento de su hermanita, sus padres le

contrataron una instructora para que le enseñara a comunicarse y convivir con los

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demás por indicaciones de Alexander Graham Bell, quien se dedicaba a enseñar a
los sordos.

Así fue como en 1887 Anne Sullivan fue contratada como instructora de Helen
Keller. Ella sabía lo que era la obscuridad porque había recuperado la vista después
de varias operaciones, así que por muchos años acompañó a Helen y fue su maestra
y amiga.

Con Anne Sullivan, Helen aprendió el alfabeto manual y a los 10 años aprendió a
hablar mediante un sistema aplicado para sordos por medio del cual percibían las
vibraciones de la garganta mediante el tacto, el movimiento de los labios y las
emisiones del aire.

Helen no se quedó ahí, sino que motivada por su deseo de estudiar como los
demás, en 1888, asistió al instituto para ciegos Perkins y en 1894 en la escuela
para ciegos Wright-Humason de Nueva York. En 1886 estuvo en la escuela de
Cambridge para señoritas e incluso llegó a la universidad en 1900, convirtiéndose
en la primera persona sorda y ciega con estudios universitarios, graduándose en
arte en 1904.

Siempre acompañada de su institutriz Anne Sullivan, se dedicó muchos años a

escribir sobre su vida de superación y a dar conferencias en todo el mundo, siendo
una gran activista de los derechos de los ciegos, del sufragio femenino, los derechos
de los trabajadores y otros movimientos socialistas.

A partir de 1924 se retiró de la actividad política y se dedicó a trabajar con personas

con discapacidad visual, ya que era miembro de la Fundación Americana para
Ciegos, realizando labores como profesora y promoviendo el cambio en el trato
hacia las personas con ceguera, quienes en aquélla época eran puestas en asilos o
encerradas en casa particulares y educadas incorrectamente.

En 1961 sufrió un derrame cerebral que le impidió seguir con su vida pública y se
retiró a descansar en su casa de Connecticut y en 1968 murió mientras dormía.

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Sitios electrónicos

Mujeres en la historia. (2012). La superación, Helen Keller. Consultado el 13 de mayo

de 2016 de http://www.mujeresenlahistoria.com/2012/10/la-superacion-helen-keller-
1880-1968.html

Ven a mi mundo. (s. f.). Grandes personajes. Consultado el 13 de mayo de 2016 de

http://www.venamimundo.com/GrandesPersonajes/Keller.html

Wikipedia. (2016). Helen Keller. Consultado el 13 de mayo de 2016 de

https://es.wikipedia.org/wiki/Helen_Kelle