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Universitat de Lleida

Quinto Programa de Doctorado


en el IEDE, Escuela de Negocios, Chile

Trabajo Monográfico de
Metodología de la Investigación

FRANÇOIS LE CALVEZ,
ALUMNO DOCTORADO V
“GESTIÓN AVANZADA DE NEGOCIOS INTERNACIONALES”
SEPTIEMBRE 2005
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CAPITULO 2 : La encuesta, un ejemplo de instrumento de recolección de la


información.

Como lo menciona Heriberto López Romo16, “la encuesta se ha convertido en una


herramienta fundamental para el estudio de las relaciones sociales. Las
organizaciones contemporáneas, políticas, económicas o sociales, utilizan esta
técnica como instrumento indispensable para conocer el comportamiento de sus
grupos de interés y tomar decisiones sobre ellos.”

Desde varias décadas se ha desarrollado una verdadera “cultura de encuesta”. Esta


técnica salió del campo estricto de la investigación para “invadir” nuestra sociedad,
desde los sondeos de opiniones hasta las agresivas campañas de marketing. Si la
palabra utilizada sigue siendo la misma, existen todavía diferencias notables entre
las encuestas en el campo de la investigación científica y las populares encuestas
que aparecen regularmente en los medios de comunicación.

2.1. La elaboración de la encuesta.

Primero que todo, en el ámbito que nos interesa, es fundamental para la elaboración
de la encuesta tener claridad del problema, objetivos e hipótesis de la investigación.
Además, conocer las características de la población u objeto de estudio. Buscar
cuestionarios previos sobre el mismo tema o temas semejantes. Elegir las preguntas,
ordenarlas, probar el cuestionario haciendo una prueba piloto. Por último, redactar
el cuestionario definitivo previendo el procesamiento.

El cuestionario es un conjunto de preguntas diseñadas para generar los datos


necesarios, para alcanzar los objetivos del proyecto de investigación. Las preguntas
deben ser adecuadas a lo que se busca realmente comprobar o investigar.

2.2. ¿Cómo formular las preguntas en un cuestionario?

León y Montero (2002) proponen preguntarse una serie de cuestiones en relación a


contenido, lenguaje y ubicación. Por otro lado, Hilda Gambara17 (2002) presenta
una pequeña guía, adaptada de los planteamientos de Shaughnessy y Zechmeister en

16
LOPEZ R., Heriberto. Técnicas de investigación en sociedad, cultura y comunicación. Pearson Educación,
México, 1998. p. 33.

17 GAMBARA, Hilda, op. cit., p 118.


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1997. Veamos las recomendaciones :

1. Las preguntas deben estar formuladas con un vocabulario simple, directo y


familiar para los participantes. Se debe adecuar el lenguaje a la población a la
que va dirigida la encuesta.
2. Las preguntas deben ser claras y específicas.
3. No deben plantearse preguntas directivas, es decir, que sugieran de alguna
manera la respuesta.
4. No deben plantearse preguntas ambiguas o que aludan a dos cuestiones
simultáneamente.
5. Tampoco deben plantearse preguntas que impliquen una carga emocional ni
con contenido racista, sexista, etc.
6. Las preguntas deben ser los más breves posibles.
7. Es aconsejable incluir toda la información condicional de manera previa a la
idea principal.
8. El cuestionario debe presentarse de manera que sea comprensible para los
encuestados, sobre todo si este se va a autoadministrar. Una presentación
atractiva favorecerá que éste se complete.
9. Las instrucciones del cuestionario deben ser claras y simples.
10. En cuanto al orden de presentación de las preguntas si el cuestionario se
autoadministra, es recomendable comenzar con las preguntas de mayor interés
para captar la atención del encuestado. Si se encuesta a través del teléfono,
puede ser conveniente comenzar con las preguntas más rutinarias para ir
ganando confianza.
11. Se aconseja seguir un procedimiento de embudo en la presentación de las
preguntas : de la más generales a la más específicas.
12. Si las preguntas presentan varias opciones, éstas deben recoger todas las
posiciones alternativas.
13. Si las preguntas presentan varias opciones de respuestas, se debe procurar
que tengan una extensión similar.
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2.3. La importancia de la confiabilidad y de la validez.

Como lo plantea el profesor César Bernal18, “toda medición o instrumento de


recolección de datos debe reunir dos requisitos esenciales : confiabilidad y validez.”
La confiabilidad de un cuestionario, se refiere a la consistencia de las puntuaciones
obtenidas por las mismas personas, cuando se le examina en distintas ocasiones con
los mismos cuestionarios. La pregunta clave para determinar la confiabilidad de un
instrumento de medición es : si se miden fenómenos o eventos una y otra vez con el
mismo instrumento de medición, ¿se obtienen los mismos resultados u otros muy
similares? Si la respuesta es afirmativa, se dice que el instrumento es confiable.

Se dice que un instrumento de medición es válido cuando mide aquello a lo cual


está destinado. La validez, indica el grado con que pueden inferirse conclusiones a
partir de los resultados obtenidos. Se puede examinar desde diferentes perspectivas :
validez real, validez de contenido, validez de criterio y validez de constructo.

18 BERNAL, César, op. cit., p. 218.


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2.4. Siete etapas para la realización de una encuesta.

Heriberto López Romo19 propone una secuencia de siete etapas para la realización
de una encuesta. Son las siguientes :

Identificación del Problema



Selección de la técnica



Diseño de muestra



Diseño del instrumento





Recolección de la información



Procesamiento y análisis de la información





Generación de informes


Parece importante mencionar que entre cada etapa, debe existir una verdadera
coherencia para evitar falsear el proceso pero también la interpretación misma de la
encuesta. Por ejemplo, si el diseño de la muestra está bien realizada pero el

19 LOPEZ R., Heriberto. Técnicas de investigación en sociedad, cultura y comunicación. Pearson Educación,
México, 1998. p. 35.
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instrumento de medición no es el adecuado, es evidente que la metodología


utilizada no será las más adaptada a la población concerniente. En consecuencia,
será imposible sacar conclusiones válidas y científicas.

2.5. La representatividad de la muestra.

Siempre según Heriberto López Romo20, “el tipo de muestreo utilizado para
seleccionar a las personas es uno de los criterios más usados para describir a las
encuestas. Desde un punto de vista técnico, los resultados de una encuesta deberían
ser representativos de la población… Para lograr esta característica la muestra debe
ser elegida de manera probabilística. Sin embargo, cuando se busca solamente
explorar un fenómeno sin obtener estimaciones precisas, la encuesta no
probabilística es de mucha utilidad”.

Para que una muestra sea representativa del universo es necesario cumplir con dos
principios fundamentales :
1. Todos los elementos del universo deben tener la probabilidad de ser
incluidos en la muestra.
2. La probabilidad de cada elemento de ser incluido en la muestra debe ser
conocida.

Para diseñar una muestra representativa que cumpla con los criterios señalados, es
necesario definir los siguientes tres aspectos :
- Definición del universo o población de estudio.
- Determinación del tamaño de la muestra.
- Forma de selección de la muestra.

Por ejemplo, para el sujeto que nos interesa, “el aprendizaje del liderazgo”, será
importante definir claramente la población de estudio. ¿Se requieren líderes del
mundo entero, de un país específico como Chile, un sector profesional en particular
o del mundo político, por ejemplo?. Para determinar el tamaño de la muestra,
también es fundamental elegir los criterios para seleccionar los líderes. Esto implica
responder, por una parte, a la siguiente pregunta : ¿quiénes son líderes?; ¿cómo
elegir el universo y la población representativa?; ¿a quienes incluir y a quiénes
excluir?

20 LOPEZ R., Heriberto., op. cit., p. 46 y 48.


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Para algunos, el atributo del liderazgo es muy visible, admitido y reconocido en la


sociedad o en un grupo importante de personas, mientras que en otros individuos,
más discretos, podrá ser más difícil de visualizar, pero igualmente interesante de
incluirlos dentro de la población o muestra de estudio. Espero, en un futuro cercano,
con mi director de tesis, poder delimitar mejor la población a estudiar y las variables
a medir.

Sin embargo, es conveniente precisar que, como lo plantea López R., Heriberto21,
“prácticamente no existe el marco muestral perfecto. Con frecuencia éstos incluyen
elementos que no responden a la definición del universo, excluyen a los elementos
que sí deberían de estar o duplican a otros. Estas características se llaman
sobrecobertura, subcobertura y duplicidad, respectivamente… Debido al alto costo
que significa verificar y actualizar, es difícil encontrar un marco muestral perfecto.
Al diseñar una muestra, es necesario partir del hecho de que el marco muestral tiene
algún grado de error”.

En consecuencia, el investigador deberá estar consciente del grado de error y tratar


de minimizarlo al máximo. Esto debe pensarse tanto al nivel de la población
elegida, como al nivel de las verificaciones y actualizaciones de las bases
entregadas, puesto que se deberá proporcionar un esfuerzo adicional para no ver sus
resultados y conclusiones falseadas a causa de una muestra que no es la más
representativa.

21 LOPEZ R., Heriberto., op. cit., p. 48 y 49


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2.6. Guía para la elaboración de un cuestionario.

Para completar lo anterior podemos usar la guía para la elaboración de un


cuestionario propuesta por el profesor César Bernal22 :

Tener claridad respecto del problema,


objetivos e hipótesis de la investigación.

Conocer las características de la
población de estudio.


Indagar sobre la existencia de
cuestionarios previos sobre el tema de
estudio.

Determinar el tipo de preguntas que se
van a formular.
Elaborar las preguntas y ordenarlas.
Elaborar el cuestionario inicial y probarlo.
Redactar el cuestionario definitivo.


Fuentes de errores posibles:

La observación como la experimentación puede revelar en el observador o el


investigador un cierto grado de subjetividad. Esta misma, puede ser fuente de error
a la hora de diseñar una investigación o de sacar conclusiones sobre hipótesis y
resultados. En su libro Métodos de Investigación, Cuaderno de Prácticas, Hilda
Gambara23 presenta un ejercicio y ejemplo de posibles fuentes de error. Se trata de
ratas “brillantes” y de ratas “torpes”.

“En un estudio clásico, Rosenthal y Fode (1963) pidieron a un grupo de estudiantes


con conocimientos en psicología experimental que hicieran de experimentadores

22 BERNAL, César, op. cit., p. 230.

23 GAMBARA, Hilda, op. cit., p 69 y p. 209.


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con el fin de evaluar el rendimiento de un grupo de ratas al recorrer un laberinto. A


los experimentadores se les dijo que uno de los grupos pertenecía a una raza de ratas
que podía considerarse como “brillante”, mientras que el segundo grupo de ratas
pertenecía a una raza que podía considerarse como “torpe”. Los experimentadores
evaluaron el rendimiento de las ratas y encontraron que la raza “brillante” era mejor
que la “torpe”. Sin embargo, las ratas pertenecían todas a una misma raza y fueron
asignadas de manera aleatoria a cada uno de los dos grupos”.

Los autores trataron de poner de manifiesto el hecho de que las expectativas del
investigador pueden influir sobre los resultados experimentales. Puesto que la ratas
pertenecían todas a la misma raza y fueron asignadas aleatoriamente a los dos
grupos, es claro que las diferencias encontradas en la VD24 no se debieron al
comportamiento de las propias ratas, sino a las expectativas de los estudiantes.”

En el tema del Liderazgo, el mismo tipo de error podría ser cometido por el
entrevistador u observador a la hora de realizar las encuestas, entrevistas y
recolección de datos. Las expectativas, por ejemplo el simple hecho de encontrar un
líder o una persona considerada como tal, pueden sesgar no solamente la formalidad
del encuentro pero también su conducción y la interpretación de las respuestas. Por
ende, es fundamental para la persona que está realizando la investigación estar
atento a los riesgos, conscientes o inconscientes, de generar una desviación en la
realización y los resultados de la investigación.

Tal como lo menciona el profesor Luís Jesús Galindo Cáceres25, “la perspectiva
perceptual configura una estructura cognitiva que construye lo observado según sus
parámetros de observación.” “Dime cómo está configurada tu percepción y te diré
cómo actúas y observas. El peligro de la forma conservadora de investigación es
que inhibe a la percepción de su potencial configurador creativo”.

Como ha sido señalado anteriormente las expectativas, conscientes o inconscientes


del investigador, pueden orientar la conducción de la investigación y la lectura de
los resultados. Existen otros tipos de “trampas” que acechan a la persona a cargo del
proceso. A continuación señalaremos las más usuales :

- Existe confusión en la utilización de palabras o de variables. Se usan

24 VD: Abreviación de variable dependiente, en este caso el rendimiento registrado por los sujetos de las
ratas, que puede medirse por el número de errores cometidos al recorrer el laberinto o el tiempo que tardan en
recorrelo.
25 GALINDO C., Luís Jesús, op. cit., p 11.
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palabras cercanas pero que pueden ser interpretadas de maneras distintas por
el investigador y la población estudiada. En caso de encuesta o entrevista por
ejemplo esta problemática suele ser frecuente. Por ejemplo, ¿es lo mismo
usar las palabras “educación” y “aprendizaje”, o “emoción” y
“sentimiento”?. A la vez, una misma palabra puede albergar varios
significados dependiendo de las personas. Por ejemplo “preocupación” puede
referirse a “angustia”, “problema” o simplemente a “pensamiento”, tener en
la mente algo, estar pensando en algo.

- Existe la presencia de una variable extraña. Por ejemplo en una encuesta, una
variable extraña puede ser la letra asociada a cada respuesta. Si los
participantes no distinguen con claridad la opción por su respuesta, es
posible que prefieran una de las letras. Por ejemplo A versus B, o 1 versus 2.
Por ende es fácil confundir la variable “preferencia por la letra” con la
variable independiente vinculada con el sentido de la pregunta. Para limitar
el efecto de esta variable “enmascarada” es posible que a la mitad de los
participantes se entregue una pregunta en un orden específico y a la otra
mitad con un orden inverso, buscando así equilibrar las condiciones.Por
ejemplo, en encuestas de Clima laboral, realizadas en Chile en el periodo
2003–2005 en empresas del rubro bancario, médico y farmacéutico, he
escuchado en varias oportunidades los siguientes comentarios : “No sabía la
respuesta, así que respondí el 1” o “No he tenido el tiempo de leer con
detención todas las preguntas así que en las últimas señalé la alternativa A”.

- Se mezclan diferentes técnicas y procedimientos durante un mismo proceso


de investigación.

- La metodología no es adecuada a las hipótesis. No hay coherencia suficiente


en lo que quiero conocer e indagar con los medios a disposición para llegar a
este conocimiento.

- La población estudiada no es plenamente representativa del objeto de la


investigación. No hay una adecuación entre “qué busco” y “dónde lo estoy
buscando”.

- Los resultados tienen una validez interna, es decir en la población y el lugar a


la cual fue aplicada la investigación. Algunos investigadores podrían dar una
validez externa sin que sea posible hacerlo. Para evitar conclusiones
erróneas, es importante hacerse varias preguntas, por ejemplo: ¿podemos
generalizar los resultados a una población más extensa, a personas de otro
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sexo, otra edad, otra nacionalidad?. Tomemos un ejemplo práctico. En el


caso de una investigación sobre el aprendizaje del liderazgo, es conveniente
preguntar, si el estudio está realizado en España o en Chile, si las
conclusiones son aplicables a otros países y culturas distintas. Si el muestreo
abarca líderes en el ámbito económico y empresarial, ¿es pertinente sacar
conclusiones sobre los líderes en general y especialmente en otro ámbito
como el religioso, militar o artístico?.

- El informe de investigación científica debe responder a algunas reglas. No es


una presentación de “marketing” con muchas letras distintas, muchos colores
y compaginación especiales. Existen, al igual que para la tesis doctoral,
reglas básicas que es recomendable seguir. Dice Hilda Gambara26, “cuanto
más sencillos, mejor; más resaltará la información importante evitando que el
lector se pierda en filigranas.” Por ejemplo el formato de la APA (American
Psychological Association) es muy utilizado. Cabe señalar que reglas
precisas se usan también para la presentación bibliográfica y citaciones. Si
existen varios modelos de reglas, se debe elegir una, y usarla a lo largo del
informe o tesis.
A continuación, se presenta una guía-crítica para leer un trabajo de investigación.
En el siguiente apartado encontraremos algunas de las recomendaciones27 más
relevantes de Hilda Gambara :
En relación a la introducción : ¿está bien planteado el problema?, ¿están claras las
predicciones de las hipótesis?, ¿considera relevante el problema?
En relación al método : ¿existen otros factores distintos de la(s) variable(s)
independiente(s) que pudieran estar causando los efectos observados en la variable
dependiente?, ¿el diseño utilizado es el apropiado para responder a las preguntas
planteadas?, ¿se han hecho los controles adecuados?. Trate de entender la tarea
experimental y el procedimiento imaginando que es uno de los participantes en el
experimento. ¿Hay riesgo de que exista sesgo por las expectativas del
experimentador?, ¿y otro tipo de sesgos?
En relación a los resultados : ¿se presentan los datos claramente en tablas y
gráficos?, ¿se han eliminado sujetos en el análisis?, ¿por qué?
Por último, ¿las conclusiones que se extraen se adecuan a los resultados
encontrados y conectan con las hipótesis planteadas?, ¿cómo avanzaría en esta
investigación si tuviera que realizar un experimento similar?

26 GAMBARA, Hilda, op. cit., p 119.


27 GAMBARA, Hilda, op. cit., p 118.

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