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INTRODUCCION

1.- Objetivos

El objetivo general del presente trabajo es avanzar en el conocimiento de lo que


llamamos "naturaleza humana" a través de la etología, para así tener una visión
mucho más crítica y veraz sobre el comportamiento del ser humano con sus pares
El objetivo específico es comprender las líneas generales del método de la etología,
cuáles son las limitaciones de éste, de cuáles herramientas se vale para afirmar que
este es un conocimiento certero y verdadero, con el fin último de entender su objeto de
estudio.
Además, es necesario entender las diferencias entre las disciplinas que se
encargan de estudiar el comportamiento humano como la antropología, la psicología y
la etología humana; éstas suelen confundirse por tener el mismo objeto de estudio.

2.- Concepto y alcances

La etología humana es el estudio del comportamiento humano desde el punto de


vista de la biología. Irenäus Eibl-Eibesfeldt, uno de sus fundadores, la define de la
siguiente forma:

La etología humana puede definirse como la biología del comportamiento humano.


Al igual que la etología, disciplina de la que proviene, también se divide en
especialidades, ya que la pregunta de por qué los seres humanos se comportan de
una manera en lugar de otra se puede definir y responder de diferentes modos.
(Eibl-Eibesfeldt, 2007, pg 4)

En concreto, la etología busca los mecanismos fisiológicos que producen el


comportamiento, trata de encontrar las diferentes funciones de éstos, cuáles son sus
patrones y cuál es su “valor selectivo”, es decir, los relaciona a presiones selectivas
que deben haberlos producido. Por ejemplo, las mujeres suelen sentir nauseas
durante los primeros meses del embarazo; una explicación para esto podría ser que es
un subproducto de los cambios hormonales; otra, que tiene valor selectivo:

Los estudios que demuestran que las náuseas en el embarazo disuaden del
consumo de café, pero sólo frenan ligeramente el consumo de alcohol y no
disuaden al tabaquismo, respaldan la hipótesis de que las náuseas del embarazo
son provocadas por indicios de toxinas del Pleistoceno en lugar de toxinas
modernas.
(Profet, 1995, pg 352)

Al tratar con un comportamiento determinado, la etología trata de identificar la


ontogenia (es decir, su origen y desarrollo), la filogenia (su lugar en el árbol
genealógico de las especies) y su historia cultural. Por ejemplo, en el caso de las
facultades cognitivas (la habilidad para procesar información) se identifica el desarrollo
de esta habilidad en los niños (ontogenia), el grado de desarrollo en otros animales
(filogenia) y cómo es afectada por las diferencias culturales (historia cultural). Por
ejemplo, en un experimento en el que había que abrir una caja/rompecabezas para
obtener una golosina, “los chimpancés imitaron solo los pasos necesarios para abrirla,
mientras que los niños sobreestimaron la necesidad de los movimientos, copiando
también superfluos.”(Sapolsky, 2017, pg 490). Sin embargo, hay que tomar en cuenta
que muchas comparaciones con otras especies son difíciles de hacer, “hay muchas
adaptaciones filogenéticas que son específicas sólo para el Homo sapiens. Considere,
por ejemplo, nuestra propensión innata al habla o la expresión de llanto.” (Eibl-
Eibesfeldt, 2007, pg 4).
La etología humana, aunque adapta legítimamente conceptos y métodos
desarrollados por la etología animal, siempre toma en cuenta las particularidades del
ser humano, apoyándose en la psicología, la antropología y la sociología. "Cuando un
bosquimano de Kalahari lanza sus discos de oráculo antes de cazar para saber en qué
dirección debe dirigirse, esto no se debe a ningún programa biológico. Sin embargo,
todavía podemos plantear la cuestión biológica sobre la función selectiva de esta tarea
en particular" (Eibl-Eibesfeldt, 2007, pg 519). En muchos casos el patrón de
comportamiento cultural está determinado por la selección, como en el caso de la
tolerancia a la lactosa, que cambió las formas de producción de alimentos en
determinados lugares del mundo.

Cuando el alelo de persistencia de la lactasa se hizo común, de modo que la


mayoría de la población adulta podía tomar leche, fue posible un nuevo tipo de
pastoreo, en el que las personas criaban ganado principalmente por su leche en
lugar de por su carne.(…) Los protoindoeuropeos podrían criar y alimentar a más
guerreros en la misma cantidad de tierra, y esa es una receta para la expansión.
(Cochran, 2009, pg 181)

La evolución cultural casi nunca es planificada, razón por la que los etólogos tratan
de observar las costumbres sin comprender su significado; los objetivos de los
comportamientos culturales necesariamente no deben interferir con las ventajas
adaptativas, o eventualmente esos comportamientos desaparecen, como en el caso
de la comunidad religiosa Shaker, en Estados Unidos, fundada en 1776, quienes
creían en el celibato obligatorio para todos sus miembros y crecían por adopción o
conversiones. La comunidad llegó a tener 6,000 miembros en 1840. Hacia mediados
del siglo XIX, no se les permitió adoptar niños. Actualmente quedan menos de diez.
(Britannica, 2016).

2.- Métodos.

La etología humana usa diversos métodos para analizar el comportamiento


humano. A continuación haremos una breve exposición de los mencionados por Eibl-
Eibesfeldt en su libro “Human ethology”

2.1 La percepción gestáltica y la cognición

Es el comportamiento analizado a través de las percepciones de los individuos y


sus procesos de cognición. A pesar de que no existen las percepciones totalmente
objetivas ―pues el mismo observador está sometido a adaptaciones filogenéticas―
se puede corregir éstas mediante la actitud crítica. “Podemos detectar la deficiencia
resultante de la interpretación analizando la realidad desde diferentes ángulos. (…)
Así, cuando los científicos hablan de la virtud de la observación imparcial, quieren
decir principalmente la separación de los prejuicios individuales que resultan de la
experiencia personal.” (Eibl-Eibesfeldt, 2007, pg 106)

2.2 Recolección de datos, observación y descripción

La etología humana utiliza este método en contextos “naturales" y pone especial


énfasis a la observación a distancia. Cuenta con nomenclaturas específicas y
protocolos de investigación que evitan la contaminación de la data recolectada. Un
estudio sobre desarrollo de la amistad entre niños cuantifica “el contacto corporal, la
cercanía, miradas, sonrisas, ofrecer, tomar y compartir juguetes, y agresión dirigida
por la pareja.” (Eibl-Eibesfeldt, 2007, pg 109)

2.3 Documentación de imágenes y sonidos

Las descripciones casi nunca son suficientes, el análisis requiere revisión continua,
además del uso de cámara lenta para encontrar detalles sutiles y cámara rápida para
identificar patrones en grupos grandes. Los problemas producto de la timidez ante una
cámara se resuelven usando aparatos especiales, con lo que se logra observar el
comportamiento espontáneo. “Algunos comportamientos que se documentan en
película son el saludo en diversas culturas, el comportamiento afectivo de las madres,
el flirteo y la resolución de la agresión infantil.” (Eibl-Eibesfeldt, 2007, pg 112)

2.4 El Enfoque Comparativo

Con frecuencia encontramos similitudes que requieren explicación; esto puede


darse en especies con ancestros comunes o no (serían comportamiento homólogos o
análogos) u otros criterios. Por ejemplo, las similitudes en las expresiones faciales
entre humanos y otros primates es homóloga; la alimentación de las crías mediante la
boca en análoga entre aves y primates. Esta búsqueda genealógica o funcional se
hace para identificar qué tanto de adaptativo tiene el comportamiento, y qué tanto tiene
de accidente o simple herencia. “Las expresiones faciales son un buen ejemplo de
homología filogenética. Expresiones similares ocurren en todas las culturas en
situaciones similares y con consecuencias similares.” (Eibl-Eibesfeldt, 2007, pg 141)

2.5 Modelos

Los modelos permiten identificar patrones mediante la visualización de las relaciones


complejas en un sistema. El ejemplo más conocido es el diagrama de flujo, en el que
se pueden ordenar las relaciones causales entre las distintas variables y aplicarlas a la
predicción de casos específicos. “Varias variables determinan si un niño se retirará de
su madre, qué tan cerca se acerca a los extraños, si explora y más.” (Eibl-Eibesfeldt,
2007, pg 163)

3.- Límites y puntos de contacto con otras ciencias

En el libro “¿Mono desnudo u Homo sapiens?”, los autores ―preocupados por el


éxito comercial de “El mono desnudo” (Morris,1967) y, en general, por el uso en los
humanos de métodos para el estudio de animales― hacen el siguiente comentario:
“Se nos alienta sin cesar a creernos exentos de culpa en relación a todo lo reprensible,
y se alega que estamos respondiendo simplemente a ‘las llamadas de nuestra
naturaleza’” (Lewis, 1969, pg 15) En todo caso, esa debería ser una crítica a todas las
ciencias. Por ejemplo, dentro de la antropología, el trabajo de los etnólogos es
“identificar y explicar las diferencias y similitudes culturales, poner a prueba hipótesis,
y construir teorías para mejorar nuestra comprensión de cómo funcionan los sistemas
sociales y culturales." (Kottak, 2011, pg 11) En “Introducción a la psicología”,(Kalat,
2010) se usa la siguiente definición: “Definamos la psicología como el estudio
sistemático del comportamiento y la experiencia. La palabra ‘experiencia’ nos permite
discutir sus percepciones sin implicar que una mente existe independientemente de su
cuerpo.” Es decir, toda ciencia busca relaciones causales; el libre albedrío no es un
tema concerniente a la ciencia.
Una segunda objeción es si es posible estudiar al hombre desde el
comportamiento. Es decir, la etología, ante el fenómeno del comportamiento, se
pregunta “¿de dónde viene?” y “¿para qué sirve?”. ¿Es posible entender el
comportamiento del ser humano sin tomar en cuenta las preguntas que se hace, por
ejemplo, la psicología (“¿qué piensa?), o la antropología (“¿qué significa?”) ¿Hay algo
fundamental en estas preguntas que es soslayado por la etología humana? En el
artículo “¿Es posible la etología cultural?”, el autor señala: “Cuando los etólogos
humanos recurren a secuencias más complejas, por ejemplo, las instrucciones
culturales, tienden a subestimar la ‘plasticidad’ implícita del comportamiento.” (Cloak,
1975, pg 173). Como respuesta, podemos tomar el caso presentado por Sapolsky:
babuinos en Sudáfrica que en sólo una generación cambian de comportamiento
debido a un cambio en la trasmisión cultural del comportamiento. “Básicamente, si los
babuinos muestran inesperadamente tanta plasticidad social, nosotros también
podemos. Cualquiera que diga que nuestros peores comportamientos son inevitables
sabe muy poco acerca de los primates, incluyéndonos a nosotros.” (Sapolsky, 2017,
613)

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