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El Código Hammurabi

El Código Hammurabi fue un conjunto de leyes que rigieron a los habitantes


de Mesopotamia datado hacia 1692 a.c. Fue escrito por el rey Hammurabi, que
subió al poder gracias a sus habilidades como líder militar, conquistando varias
ciudades pequeñas durante su imperio. El creía que los dioses lo eligieron para
traer justicia y orden a su gente, y se tomo esa tarea muy en serio. No fue mucho
después que ascendió al poder que promulgó su código, 282 leyes escritas para
definir todas las relaciones y aspectos de la vida en el reino. Estas leyes,
presentadas en una estela de basalto de 2.25 mts de alto, fueron entonces
expuestas en espacios públicos para que todas las personas tuvieran la
oportunidad de estudiarlas y así homogeneizar jurídicamente todas partes del
imperio facilitando el trabajo. El uso de estas estelas, desde el punto de vista
arquitectónico, tal vez fueron incluso un recordatorio constante de la rigurosa
autoridad a la que estaban sometidos los habitantes del reino, lo que amplificaba
la relevancia del código. La manera de escribirlo fue también muy significante,
pues permitía entenderlo a cualquier miembro promedio de la sociedad.

Como uno de los primeros y más complejos conjunto de leyes, sienta las
bases de la legislación actual. Las leyes de Hammurabi se aplicaban a todos,
aunque la aplicación de estas y los castigos diferían de acuerdo con la clase
social, algo que se ha perdido teóricamente al día de hoy, y sin embargo bastante
presente en la práctica. El principio del código era el “ojo por ojo, diente por
diente”, también conocido como ley de Talión. Esto aseguraba que una persona
atrapada cometiendo un crimen nunca más deseara cometerlo de nuevo.
Actualmente para la mayoría de las personas es discutible la efectividad de este
acercamiento y sus castigos, algunos realmente injustos, pero para la sociedad de
babilonia de ese entonces parecía la manera más eficiente de lidiar con el crimen
sin ser exageradamente cruel. El código era ciertamente severo desde el punto de
vista de la sociedad contemporánea pero del otro lado de la moneda podemos
observar las ventajas que conllevaba. Por ejemplo, en la antigua babilonia, si un
carpintero realizaba un trabajo pobre construyendo un techo y este se desplomaba
resultando en la muerte del propietario, este sería acusado de homicidio. Bajo la
política del “ojo por ojo”, el carpintero en cuestión sería sentenciado a muerte. Esto
aseguraría que sus colegas se enteraran o incluso presenciaran el destino de lo
que le sucede a un hombre con habilidades mediocres. Ellos serian testigos de
exactamente lo que enfrentarían si su trabajo no era de buena calidad. Como
consecuencia, la sociedad gana unos carpinteros muy “motivados”, que no
dudarán en realizar e inspeccionar su trabajo tantas veces como sea necesario
para comprobar que esté bien hecho.

Los crímenes contra los niños también eran sentenciados con la muerte.
Los antiguos babilonios hicieron esto para que los más jóvenes pudieran jugar
afuera sin preocupaciones y total libertad. Así las calles eran seguras para los
niños, como debería ser. El número de secuestros que ocurren actualmente,
probablemente no se habría extendido tanto bajo este aspecto del código. Se
podría decir que el principal objetivo de estas leyes se sentaba sobre el concepto
de responsabilidad.

Si bien es cierto que algunas personas consideran el código Hammurabi


muy cruel, difícilmente alguien pueda argüir de su eficiencia. Con el movimiento de
los derechos humanos en alza, hoy seria definitivamente imposible introducir
algunos capítulos del código en la ley contemporánea. Entonces, solo podemos
deducir y cuestionarnos, qué tipo de cambios habría traído la aplicación de las
leyes de Hammurabi sobre la sociedad y el entorno en que vivimos.

El código, en la mayoría de los casos, sí es extremadamente severo,


incluso para contemplar usarlo en escala nacional. Algunos de sus puntos son
claramente inaplicables, ya que uno no puede simplemente culpar de igual manera
a un equipo de obreros, ingenieros, y fabricantes de materiales, quienes tal vez
fueron indirectamente responsables por un accidente ocurrido y por ello llevados a
muerte. Sin embargo, algunos aspectos del código deberían ser definitivamente
revisados y considerados para su uso futuro, por lo mismo, es estudiado aun por
historiadores debido a sus contribuciones en los orígenes de la civilización.

Stefany Urbina.

C.I. 22.822.717

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