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Dinámica Estacional del Banco de Semillas en una Sabana en los Llanos Centro-

Orientales de Venezuela
Author(s): Elizabeth M. Pérez and Emilia T. Santiago
Source: BIOTROPICA, 33(3):435-446.
Published By: The Association for Tropical Biology & Conservation
DOI: http://dx.doi.org/10.1646/0006-3606(2001)033[0435:DMEDBD]2.0.CO;2
URL: http://www.bioone.org/doi/full/10.1646/0006-3606%282001%29033%5B0435%3ADMEDBD%5D2.0.CO
%3B2

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BIOTROPICA 33(3): 435–446 2001

Dinámica Estacional del Banco de Semillas en una Sabana en los


Llanos Centro-Orientales de Venezuela1

Elizabeth M. Pérez2 y Emilia T. Santiago


Instituto de Estudios Cientı́ficos y Tecnológicos (IDECYT), Universidad Simón Rodrı́guez, Apartado 47.925,
Caracas 1041-A, Venezuela

ABSTRACT
Little is known about seed bank dynamics in Neotropical savannas. We studied temporal variation in seed density,
species richness, species composition, seed mass, and seed number in the topsoil seed bank of a savanna on ‘‘La Iguana’’
Experimental Station, Guárico State, Venezuela. Total soil surface sampled was 57,600 cm2, in 400 cm2 units, at four
times of the year. Seeds from 124 plants from 20 families were encountered. Species composition varied seasonally,
but grass seeds dominated almost all the year, both numerically and in species number. Seed density and species
richness were highest in the dry season and declined to a minimum in early wet season. Mean density was 1702 seeds
/m2, with a range of temporal variation from 235 to 4624 seeds/m2. Average seed mass across species by date ranged
from 0.97 to 2.53 mg, but because tiny seeds were most numerous throughout the year, the abundance-weighted
averages only varied from 0.8 to 1.19 mg. We found a high spatial variability in the seed distribution in the soil
throughout the year. There were also substantial changes in the topsoil seed bank among seasons, as a consequence
of herbaceous plant phenology and germination strategies, which are tightly coupled with hydroperiodism in Vene-
zuelan savannas. Based on the species-area curves, we concluded that the minimal sampling effort needed to adequately
estimate the species richness in the topsoil of this savanna is 11 fold higher than that used in most seed bank studies
in tropical environments.

RESUMEN
Poco se conoce sobre la dinámica del banco de semillas en las sabanas Neotropicales. Nosotros estudiamos la variación
temporal en la densidad de semillas, riqueza de especies, composición taxonómica, masa y número de semillas, en el
banco de semillas en la superficie del suelo en una sabana en la Estación Experimental ‘‘La Iguana’’, Estado Guárico,
Venezuela. La superficie total de suelo muestreada fue de 57,600 cm2, en unidades de 400 cm2, en cuatro momentos
del año. Se encontraron 124 especies y 20 familias de plantas. La composición taxonómica varió estacionalmente, pero
las semillas de gramı́neas predominaron casi todo el año, tanto en abundancia como en número de especies. La
densidad de semillas y la riqueza de especies fueron máximas en la estación seca y declinaron a un mı́nimo al inicio
de la estación lluviosa. La densidad promedio fue de 1702 semillas/m2, con una variación estacional entre 235 y 4624
semillas/m2. La masa promedio de las semillas de las especies halladas por fecha varió de 0.97 a 2.53 mg, pero debido
a que las semillas pequeñas fueron más numerosas durante todo el año, el promedio ponderado por la abundancia
sólo varió entre 0.8 y 1.19 mg. Se halló una variabilidad espacial alta en la distribución de semillas en el suelo durante
todo el año. También hubo cambios sustanciales en el banco superficial de semillas entre estaciones, como consecuencia
de la fenologı́a de las plantas herbáceas y las estrategias de germinación, las cuales están estrechamente acopladas al
hidroperiodismo en las sabanas venezolanas. En base de las curvas especies-área, concluimos que el esfuerzo muestral
mı́nimo necesario para estimar adecuadamente la riqueza de especies en el banco superficial de semillas en esta sabana
es 11 veces mayor que el usado en la mayorı́a de los estudios sobre bancos de semillas en ambientes tropicales.

Key words: Neotropical savanna; soil seed bank; seed density; species richness; seed mass; species composition; temporal
variability; sampling size; Venezuela.

EL ESTUDIO DE LA DINÁMICA DE LAS SEMILLAS en el efecto decisivo en la dinámica de la vegetación


suelo es esencial para comprender algunos procesos (Roberts 1981) y de las comunidades animales que
ecológicos, al igual que para definir pautas de ma- se alimentan de ese recurso (Price & Joyner 1997).
nejo sostenible y de recuperación de los ecosiste- El banco de semillas actúa como un reservorio de
mas. La abundancia, composición taxonómica y la diversidad genética vegetal que puede ser usado
distribución de las semillas en el suelo tienen un para restaurar zonas perturbadas o recuperar espe-
cies de la flora en vı́as de extinción (Levin 1990,
1 Received 11 May 1999; revision accepted 20 April
Chambers & MacMahon 1994). En agronomı́a, el
seguimiento de las semillas presentes en el suelo
2000.
2 E-mail: eperez@mail.unesr.edu.ve; eliperez@reacciun.ve permite evaluar los efectos de las prácticas agrı́colas

435
436 Pérez and Santiago

como rotación de cultivos, técnicas de siembra y


control de malezas (Roberts 1981). A pesar de la
importancia teórica y aplicabilidad de esta infor-
mación, los estudios sobre bancos de semillas son
muy escasos, particularmente en ambientes tropi-
cales (Garwood 1989, Westoby et al. 1992, Vás-
quez-Yanes & Orozco-Segovia 1993). Uno de los
factores que desalienta la realización de estos estu-
dios es la heterogeneidad espacial altı́sima en la
densidad y diversidad de semillas, aún a muy pe-
queña escala (Thompson 1986, Henderson et al.
1988, Coffin & Lauenroth 1989), lo que obliga a
usar tamaños muestrales muy grandes para lograr
una estimación confiable de esos parámetros y eleva
los costos y el tiempo de realización del estudio a
niveles que pueden ser prohibitivos.
En este trabajo se evalúa parte de la informa-
ción recolectada en una investigación más extensa
sobre utilización y disponibilidad de recursos ali-
mentarios para la comunidad de aves granı́voras en
el ecosistema sabana. Debido a la conducta alimen-
taria de esas aves, el muestreo se limitó a los pri-
meros 5 mm del suelo, a diferencia de la mayorı́a
de los trabajos sobre bancos de semillas en los que
se colectan al menos los tres primeros centı́metros
de suelo (Garwood 1989). Los cambios estacionales
en el banco de semillas a nivel superficial pueden
diferir marcadamente de los que ocurren en los es-
tratos inferiores (Dalling et al. 1997), debido a que
ésta es la vı́a de entrada de las semillas a ese com-
partimiento y es allı́ donde se produce la germi-
nación (Baskin & Baskin 1989, Vásquez-Yanes &
Orozco-Segovia 1993), se pierde el mayor número
de semillas por depredación (Price & Joyner 1997)
y son más intensos los efectos de la quema y de los
FIGURA 1. (a) Precipitación mensual promedio entre
cambios de humedad (Roberts 1981), dos factores 1969 y 1996. Datos de la Estación Metereológica Alta-
recurrentes en el ecosistema sabana. mira (8⬚ 35⬘ N, 65⬚ 34⬘ O), próxima al sitio de estudio.
En el presente trabajo se analiza: (a) La varia- (b) Número de semillas por metro cuadrado, y (c) nú-
bilidad estacional en la densidad, composición tax- mero promedio de especies por muestra (400 cm2) en las
onómica y riqueza de especies del banco superficial cuatro fechas evaluadas. En (b) y (c) el intervalo de con-
fianza (P ⫽ 0.05) de cada estimación se representa con
de semillas, (b) El ingreso, egreso y permanencia una lı́nea vertical.
de especies en la superficie del suelo, (c) La heter-
ogeneidad espacial en la distribución de semillas en
el suelo, (d) La masa promedio y la abundancia de
65⬚28⬘37⬙O), ubicada en la Región Sur-Oriental
acuerdo a su masa de las semillas en la superficie
del Estado Guárico, Municipio Santa Marı́a de Ipi-
del suelo, en cuatro momentos del año. Además,
re, Venezuela. La temperatura media anual en el
se analiza el problema del tamaño muestral requer-
área es de 27.9⬚C con máxima de 30.1⬚C en marzo
ido para lograr estimaciones aceptables de la rique-
y mı́nima de 26.6⬚C en enero. La precipitación es
za total y estacional del banco de semillas en la
sabana. marcadamente estacional con media anual de
1154.4 mm. Más del 90 por ciento de la precipi-
tación cae entre mayo y noviembre, quedando un
MATERIALES Y MÉTODOS perı́odo de sequı́a claramente demarcado entre di-
EL SITIO DEL ESTUDIO.—Este estudio se efectuó en ciembre y abril (Fig. 1a). El relieve varı́a entre plano
la Estación Experimental ‘‘La Iguana’’ (8⬚23⬘30⬙N, y suavemente ondulado, con pendientes que nunca
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exceden el 3 por ciento. Ese leve gradiente topo- individuos de los que se disponı́a y de su tamaño
gráfico, unido a la alta diversidad de substratos edáf- unitario. En los casos de semillas muy escasas en
icos en la región, ha dado lugar a una gran heter- las muestras de suelo o en la colección de plantas,
ogeneidad espacial de la cubierta vegetal (Hernán- se pesaron juntos todos los ejemplares disponibles.
dez 1993). Para el estudio se eligió un área de
aproximadamente cinco hectáreas, la mayor parte ANÁLISIS ESTADı́STICO.—Se usó un ANOVA de una
cubierta por una sabana inarbolada rala, de altura vı́a y la prueba de comparación de medias a pos-
inferior a los cuarenta centı́metros, donde dominan teriori de Newman-Keuls para determinar si la den-
las gramı́neas de los géneros Trachypogon y Axono- sidad y el número de especies por muestra difiere
pus. El estrato leñoso es escaso y está dominado por significativamente entre muestreos. El balance de
la especie Curatella americana (Dilleniaceae). entradas, salidas y permanencias de especies en el
banco superficial de semillas se realizó comparando
EL MUESTREO.—Se realizaron en total cuatro mues- cada muestreo con el anterior. Se dice que una es-
treos, al inicio, mediados y final del perı́odo lluvio- pecie ingresó al banco si está representada en ese
so (agosto y octubre 1993, junio 1997) y al final muestreo pero no en el anterior; en la situación
de la época seca (abril 1994). En cada muestreo se inversa se considera que salió del banco y, si está
tomaron al azar 36 muestras de suelo de 400 cm2, representada en los dos muestreos, se dice que ha
usando un marco de metal de 20 ⫻ 20 cm, con permanecido en el banco. Se utilizó la prueba de
sólo tres lados. En el lado abierto se colocó una correlación r de Pearson para determinar si hay re-
pala en ángulo, hacia la que se barrió con una bro- lación entre la riqueza de especies de cada familia
cha la hojarasca y toda la superficie del suelo con- en el suelo y su abundancia promedio para los cua-
tenida en el cuadrado, después de ser ligeramente tro muestreos, ası́ como entre la masa de las sem-
raspada con una espátula hasta 5 mm de profun- illas y su abundancia promedio. Como medida de
didad. Cada muestra fue rotulada y secada en una la heterogeneidad espacial en la distribución de
estufa a 70–80⬚C dentro de las seis horas siguientes semillas en el área se utilizó el ı́ndice de agrupa-
de ser recogida. miento [(S2/x) ⫺ 1] (IA) y la prueba de significan-
cia asociada a ese ı́ndice para determinar si el pa-
EXTRACCIÓN E IDENTIFICACIÓN DE LAS SEMILLAS CON - trón de distribución de las semillas difiere entre
TENIDAS EN LA MUESTRA .—Cada muestra fue lavada muestreos (Greig-Smith 1964). Se definieron 11
bajo agua corriente luego de ser colocada sobre un categorı́as de número de semillas por muestra y 12
tamiz de malla de abertura de 10 mm apoyado de masa de las semillas; cada una de ellas abarca el
sobre otro de 0.25 mm. Los tamices, junto con su doble del rango comprendido en la categorı́a an-
contenido, se secaron en una estufa a 80⬚C y se terior, lo que equivale a hacer una transformación
revisaron bajo lupa con aumento de 10⫻ para ex- de los datos usando logaritmo natural en base dos.
traer todas las semillas presentes. A toda especie Para construir las curvas especies-área se eligieron,
encontrada se asignó con un número y se contó el al azar y sin reposición, grupos de tres muestras
número de ellas aparentemente en buen estado. Se hasta acumular el total de muestras por muestreo.
consideró que una semilla estaba en buen estado si Cada punto de la curva es la suma del número de
su apariencia exterior no mostraba signos de de- especies que aparecieron por primera vez en las ul-
predación o fractura y resistı́a una ligera presión de timas tres muestras examinadas y las halladas en las
una pinza sin sufrir ruptura. Este criterio coincide muestras previamente acumuladas.
con la clasificación de semillas ‘‘aparentemente’’ vi-
ables usado en diversas investigaciones (Roberts
RESULTADOS
1981, Crist & MacMahon 1992, Price & Joyner
1997). DENSIDAD, NÚMERO TOTAL DE ESPECIES Y COMPOSI -
Más del 99 por ciento de las semillas fueron CIÓN TAXONÓMICA DEL BANCO DE SEMILLAS .—La den-
identificadas a nivel de especie, usando una colec- sidad promedio de semillas en el área de estudio
ción de referencia de plantas en fructificación re- fue de 1702 semillas/m2 y varió significativamente
cogidas en la zona del estudio y la colección del entre muestreos (F ⫽ 13.51, P ⬍ 0.001), excepto
Herbario Nacional de Venezuela, Caracas. El peso entre junio y agosto. La menor densidad de sem-
de cada especie se determinó con una balanza an- illas/m2 se obtuvo al comienzo del perı́odo lluvioso
alı́tica Marca Mettler de 10⫺5 g de precisión, pro- (235 semillas/m2), y de allı́ en adelante incrementó
mediando el peso de tres grupos con un número sostenidamente, haciéndose máxima (4623 semil-
variable de semillas, dependiendo del número de las/m2) en la sequı́a (Fig. 1b). Se hallaron en total
438 Pérez and Santiago

FIGURA 2. Número total de especies por familia que se encontraron en el banco superficial de semillas en los
cuatro muestreos. La categorı́a ‘‘otras’’ incluye las especies de las quince familias con menos de cinco especies en el
banco.

124 especies pertenecientes a 20 familias de plan- comenzar las lluvias, pero luego incrementa rápi-
tas. Por muestreo, se encontraron 38 especies en damente, duplicándose de junio a agosto. Las
junio, 36 en agosto, 54 en octubre y 98 en abril quince familias agrupadas en la categorı́a otras, ti-
(Apéndice). El número promedio de especies por ene un comportamiento como grupo similar al de
muestra también difiere significativamente entre las gramı́neas. En el caso de las ciperáceas y leg-
muestreos (F ⫽ 22.7, P ⬍ 0.001) y sólo las difer- uminosas, la desaparición de especies al comienzo
encias entre junio y agosto no son significativas. de las lluvias es menos notoria y se agudiza durante
Como las otras variables descritas, el menor valor la primera mitad del periodo lluvioso (Fig. 2).
se halló al comienzo de las lluvias (3.9 especies/ Las familias con mayor número de especies en
muestra), aumenta a 7.2 especies/muestra en oc- el banco de semillas tienden también a ser las más
tubre y a 11.1 en abril (Fig. 1c). abundantes (r ⫽ 0.51, N ⫽ 20, P ⬍ 0.05). En
Las familias Gramineae, Leguminosae y Cyper- promedio, para las cuatro fechas evaluadas, las gra-
aceae son las mejor representadas en el banco de mı́neas constituyen el 48.3 por ciento del total de
semillas de esta sabana, con 26, 23 y 22 especies semillas en el banco, las ciperáceas el 17.1 por cien-
respectivamente (Apéndice). Siguen en importancia to, las leguminosas el 13.9 por ciento, y las familias
Malvaceae (7 especies) y Euphorbiaceae (5 espe- restantes el 20.7 por ciento. La abundancia relativa
cies), mientras que las 15 familias restantes repre- de cada familia en el banco superficial de semillas
sentan sólo el 32.5 por ciento de la riqueza total cambió notoriamente entre las fechas evaluadas
de especies. La figura 2 muestra el número de es- (Fig. 3). Durante la temporada de lluvias, las gra-
pecies por taxa que se hallaron por muestreo; se mı́neas dominan ampliamente en el banco de sem-
agrupan las familias con menos de 5 especies en illas, representando el 86.8 por ciento del total de
una única categorı́a. Para todos los taxa, el máximo semillas en agosto y el 62.7 por ciento en octubre
número de especies en el banco superficial de sem- (Fig. 3). En abril, por el contrario, las abundancias
illas se encontró en abril (Fig. 2). Nótese que el relativas de las gramı́neas, cipéraceas, leguminosas
número de especies de gramı́neas en el banco su- y rubiáceas son mucho más similares entre sı́, al
perficial de semillas se reduce abruptamente al mismo tiempo que se hace más significativa la pre-
Dinámica del Banco de Semillas en una Sabana 439

FIGURA 3. Contribución porcentual de los taxa de


plantas más abundantes en el banco superficial de semillas
para las cuatro fechas de muestreo. En la categorı́a ‘‘otras’’ FIGURA 4. Número de especies nuevas (hatched bars),
se suma la contribución porcentual de las 12 familias con de especies que permanecen (solid bars) y de especies que
abundancia promedio inferior al 3 por ciento. salieron (open bars) del banco superficial de semillas entre
fechas de muestreo.

sencia de otros taxa que en conjunto aportan el


28.6 por ciento del total de semillas (Fig. 3). El de semillas por muestra para los cuatro momentos
banco superficial de semillas en junio se distingue evaluados. La forma de la distribución difiere apre-
por el mayor predominio de las ciperáceas y las ciablemente entre fechas y la frecuencia de muestras
leguminosas y la marcada reducción de otros taxa con abundante número de semillas va en aumento
que estuvieron bien representados en la época seca. de junio a abril (Fig. 5). En junio todas las mues-
tras tuvieron menos de 40 semillas y la forma de
ENTRADA, PERMANENCIA Y SALIDA DE ESPECIES DEL la distribución se asemeja a una log-normal. En
BANCO SUPERFICIAL DE SEMILLAS .—Se detectó un ci- agosto tiende a una distribución uniforme, con un
clo anual de entrada y salida de especies en el banco rango en el número de semillas por muestra entre
superficial de semillas, caracterizado por la salida cero y 136 semillas. En las otras dos fechas, la dis-
de un gran número de ellas durante los primeros tribución tiene forma bimodal: en octubre con un
meses de lluvias, seguido por una progresiva acu- claro predominio de muestras con más de 16 sem-
mulación de especies en el banco durante la segun- illas, mientras que en abril son frecuentes las mues-
da mitad de la estación lluviosa y la sequı́a (Fig. 4). tras con más de 500 semillas y las que tienen entre
En junio no aparecieron 69 de las especies que se 8 y 32 semillas (Fig. 5).
encontraron en abril y solo se detectaron siete nue-
vas especies. En agosto, el número de especies que MASA PROMEDIO DE LAS SEMILLAS Y DISTRIBUCIÓN DE
salieron del banco siguió superando a los nuevos ı́
FRECUENCIAS POR CATEGOR AS DE MASAS .—La masa
ingresos. Por el contrario, en octubre y abril hubo promedio de las semillas en el suelo, ponderado por
un elevado número de ingresos de nuevas especies la frecuencia, es muy similar en las cuatro fechas
de semillas y un escaso número de egresos, lo que evaluadas y próximo a 1 mg (Fig. 6). Si no es pon-
en suma dá como resultado la riqueza mucho may- derado por la frecuencia, el promedio incrementa
or del banco de semillas en esos dos muestreos. desde mediados de lluvias hasta el final de la sequı́a,
cuando es 2.6 veces mayor que en el mes de agosto
DISTRIBUCIÓN DEL NÚMERO DE SEMILLAS POR MUES- (Fig. 6). No hay relación entre la masa y la abun-
TRA.—Se encontró una elevada heterogeneidad es- dancia de las semillas en la superficie del suelo (r
pacial en la distribución de las semillas en el suelo, ⫽ ⫺0.09, N ⫽ 124, P ⬎ 0.05), ni siquiera dentro
mı́nima en junio (Indice de Agrupamiento, IA ⫽ de una misma familia (Poaceae, r ⫽ ⫺0.03, N ⫽
8.12), progresivamente en aumento durante el per- 26, P ⬎ 0.05; Leguminosae, r ⫽ ⫺0.21, N: 23, P
ı́odo lluvioso (agosto, IA ⫽ 43.3; octubre, IA ⫽ ⬎ 0.05; Malvaceae, r ⫽ ⫺0.48, N ⫽ 7, P ⬎ 0.05;
58.5) y máxima en sequı́a (abril, IA ⫽ 348.6). Sólo Euphorbiaceae, r ⫽ 0.84, N ⫽ 5, P ⬎ 0.05), ex-
las diferencias entre agosto y octubre no fueron sig- ceptuando la familia Cyperaceae (r ⫽ 0.41, N ⫽
nificativas. En la figura 5 se representa la frecuencia 22, P ⬎ 0.05). Nótese que las semillas de peso
440 Pérez and Santiago

FIGURA 6. Porcentaje de semillas en cada una de las


FIGURA 5. Distribución del número de semillas por doce categorı́as de masas usadas en este trabajo para las
muestra para las cuatro fechas de muestreo. cuatro fechas de muestreo. Arriba y a la derecha de cada
gráfico se señala el peso promedio de las semillas pon-
derado por su frecuencia numérica (Xp) y el peso pro-
medio no ponderado (X).
superior a 6.4 mg sólo constituyen una proporción
relevante en el muestreo de abril y es su presencia
la que hace que se duplique el promedio no pon- de 1.6 a 3.2 en agosto y octubre. Abril se distinguió
derado, en comparación con octubre. Al agrupar por ser el único muestreo en el que se detectó un
las semillas de acuerdo a su masa se obtuvieron abundante número de semillas con peso inferior a
distribuciones bimodales (Fig. 6). El primer máxi- 0.05 mg o superior a 32 mg.
mo coincide con la categorı́a entre 0.1 y 0.2 mg
en las cuatro fechas; el segundo máximo se obtuvo TAMAÑO MUESTRAL NECESARIO PARA ESTIMAR ADECU -
en la categorı́a de 0.8 a 1.6 mg en junio y abril, o ADAMENTE EL NÚMERO DE ESPECIES EN EL BANCO DE
Dinámica del Banco de Semillas en una Sabana 441

como las leguminosas y malváceas, entre otros, que


requieren más tiempo de hidratación (Baskin &
Baskin 1989, Vásquez-Yanes & Orozco-Segovia
1993). La suma de esos factores debió ocasionar el
empobrecimiento abrupto y el cambio en compos-
ición taxonómica del banco superficial de semillas
en junio. No se descarta que a esos factores se sume
la variabilidad interanual, ya que ese muestreo se
realizó cuatro años después que los otros. Sin em-
bargo, el ciclo de lluvias y sequı́a previo al muestreo
se ajustó al patrón promedio para el área, de ma-
nera que es probable que lo encontrado refleje en
buena medida lo que sucede anualmente en esa
FIGURA 7. Curvas especies-área para las cuatro fechas fecha.
de muestreos. El reinicio de las lluvias también activa el cre-
cimiento vegetativo y la fase reproductiva de la
mayor parte de las plantas de la sabana (Monasterio
& Sarmiento 1976). Simultáneamente, con este es-
SEMILLAS.—Las curvas especies-área difieren entre tudio se evaluó la producción de semillas en el es-
fechas de muestreo (Fig. 7). En junio y octubre las trato herbáceo, encontrándose el mayor número de
pendientes de las curvas se hacen cero a partir de especies fructificando y la mayor densidad de sem-
las 27 muestras (10,800 cm2); en cambio, en abril illas/m2 en agosto (Pérez & Santiago en prensa).
y agosto aún aparecieron especies nuevas en las úl- Esto contrasta con lo hallado en el banco de semilla
timas tres muestras examinadas. Las curvas indican donde los cambios más apreciables en riqueza y
que el esfuerzo de muestreo requerido para estimar abundancia se produjeron en la segunda mitad del
con precisión el número de especies en el banco de perı́odo lluvioso y en la sequı́a. Existen evidencias
semillas de las sabanas varı́a entre épocas del año y que en los ambientes tropicales estacionales las sem-
debe ser alrededor de un 40 por ciento mayor en illas que caen al suelo a principios o mediados de
la sequı́a si queremos estimar la riqueza de especies la época lluviosa suelen germinar sin demora, mien-
con una precisión similar en ambas estaciones. tras que las que son diseminadas al final de esa
estación o en la sequı́a tienden a permanecer en
DISCUSIÓN latencia facultativa o fisiológica hasta el reinicio de
las lluvias (Garwood 1983, Coffin & Lauenroth
El banco superficial de semillas en la sabana estu- 1989). De allı́, entonces, que más y más semillas
diada sufrió cambios estacionales apreciables en su se acumulen en el suelo hacia el final de las lluvias
composición taxonómica, riqueza de especies y y en la sequı́a. Aunque en este estudio el máximo
abundancia de semillas. Al comienzo de las lluvias en especies y semillas en el suelo se obtuvo en abril,
hubo una súbita caı́da en riqueza y abundancia de es probable que el verdadero máximo anual ocurra
semillas, junto con un cambio sustancial en la com- en los primeros meses de la sequı́a que no fueron
posición taxonómica del banco. Durante el resto evaluados. Sólo los árboles, y un reducido grupo
del perı́odo lluvioso y en la sequı́a, la densidad y de plantas herbáceas o arbustivas con mecanismos
riqueza del banco de semillas incrementó gradual- muy eficientes para la obtención y almacenamiento
mente, con cambios moderados en la composición de agua, son capaces de fructificar en la fase mas
taxonómica. Este patrón es consecuencia de las fen- severa de la sequı́a (Monasterio & Sarmiento
ologı́as y estrategias de germinación de las plantas 1976), por lo que el ingreso de nuevas semillas casi
herbáceas de las sabanas neotropicales, las que a la se detiene en ese periodo, mientras que la extrac-
vez están estrechamente vinculadas a la hidroper- ción por depredación, que es muy alta en ambien-
iodicidad (Monasterio & Sarmiento 1976). tes herbáceos (Henderson et al. 1988), se mantiene
El comienzo de las lluvias en ambientes esta- en el tiempo.
cionales empuja algunas semillas hacia capas más En la sabana estudiada se halló una altı́sima
profundas (Chambers & MacMahon 1994) y inicia heterogeneidad espacial en la distribución espacial
la germinación inmediata de la mayorı́a de las sem- de las semillas en el suelo, al igual que en otros
illas en el suelo (Garwood 1989, Vásquez-Yanes & ecosistemas (Reichman 1984, Thompson 1986,
Orozco-Segovia 1993), exceptuando algunos taxa Henderson et al. 1988, Garwood 1989, Navie et
442 Pérez and Santiago

al. 1996). La magnitud de esa heterogeneidad y la la necesidad de ser muy cautos en las compara-
forma de la distribución espacial de las semillas var- ciones entre sitios.
ió estacionalmente. Hacia el final de lluvias y en la Tanto la masa promedio de las semillas en la
sequı́a se encontró una distribución bimodal en el superficie del suelo (1.03 mg), la amplia gama de
número de semillas por muestra, lo que sugiere que masas (0.01–55 mg), como el valor modal de la
algo más que el azar influye en la distribución de distribución de masas (0.8 a 1.6 mg), concuerdan
semillas en el suelo. La germinación, movimientos con lo hallado en otros ambientes de vegetación
horizontales por efecto del viento, de la actividad herbácea (Westoby et al. 1992). La masa promedio
animal o de la escorrentı́a, migración a las capas de las especies en el banco es más del doble en la
interiores del suelo, muerte de la semilla por div- sequı́a que en el periodo lluvioso. Estudios en am-
ersas causas y granivorı́a son las causas de esa alta bientes tropicales estacionales sugieren que las es-
heterogeneidad (Leck et al. 1989), pero poco se pecies con semillas grandes fructifican más hacia el
conoce sobre la importancia relativa de cada uno final de las lluvias (Foster 1982). Bajo condiciones
de esos factores en los diversos ecosistemas. La de estrés temporal, la sobrevivencia de las plántulas
granivorı́a ha sido considerado uno de los factores procedentes de semillas grandes es mayor que la de
causales más importante de esa heterogeneidad es- aquellas desarrolladas de semillas pequeñas (Wes-
pacial del banco de semillas en desiertos, pastizales, toby et al. 1996). Siendo ası́, la producción de sem-
chaparrales y bosques tropicales (Leck et al. 1989). illas grandes le confiere ventajas competitivas a las
Lamentablemente, hasta la fecha no se han publi- especies que germinan en un periodo de lluvias er-
cado estudios donde se haya cuantificado la grani- ráticas y con alta probabilidad de sufrir un estrés
vorı́a en sabanas neotropicales. hı́drico temporal como es el final e inicio de la
Las gramı́neas superaron en especies (21%) y época de lluvias y le permite establecerse en el lapso
en semillas (48.3%) a las otras 20 familias de plan- anual en el que la competencia por espacio es men-
tas halladas en el suelo. La frecuencia relativa de las or. La densidad de cada especie en el suelo es in-
dependiente del tamaño de su semilla. La densidad
gramı́neas en los bancos de semillas en pastizales es
total de semillas detectada en esta sabana (235–
extraordinariamente disı́mil entre sitios, oscilando
4624 semillas/m2, promedio 1702 semillas/m2) se
entre un 2 por ciento y un 65.9 por ciento (Roberts
ubica en el extremo inferior del extenso rango de
1981, Rice 1989). Era esperable una alta frecuencia
valores (204–31,344 semillas/m2) que han sido hal-
de gramı́neas en el banco evaluado, dado que la
lados en pastizales alrededor del mundo (Rice
mayorı́a de las semillas de este taxa se mantiene en
1989, O’Connor & Pickett 1992). Esa baja den-
el suelo a escasa profundidad (O’Connor & Pickett
sidad de semillas en el banco podrı́a ser resultado
1992). Las leguminosas ocuparon el segundo lugar
de la pobreza de nutrientes y escasa capacidad de
en número de especies (18.6%), pero su abundan- retención de agua de los suelos en la región donde
cia (13.9%) se debió fundamentalmente a Indigo- se efectuó el estudio, lo que limita severamente el
fera hirsuta que por sı́ sola constituye el 10.1 por desarrollo de la vegetación y la diversidad florı́stica
ciento del total de semillas. Esta especie fue introd- (Sarmiento 1990, Hernández 1993).
ucida en la E. E. La Iguana como forraje para el En contraposición con lo que sucede con la
ganado y se ha convertido en una invasora exitosa densidad de semillas, la cifra de 124 especies en-
en la sabana abierta. Las ciperáceas constituyeron contradas en total en el banco de semillas de esta
el 17.9 por ciento de las especies y el 17.1 por sabana supera por mucho el rango de 7 a 62 es-
ciento de las semillas halladas; la diversidad y abun- pecies hallado en pastizales alrededor del mundo
dancia de este taxa en el área de estudio resulta de (Rice 1989, Ortega et al. 1997) y de 4 a 67 especies
su capacidad para explotar eficientemente suelos en diversos ambientes tropicales (Garwood 1989).
pobres en nutrientes (Sarmiento 1990). Todas estas En el área del estudio se han identificado 176 es-
cifras son valores promedio para las cuatro fechas pecies de plantas, un 70.5 por ciento de ellas apa-
evaluadas, pero la composición y abundancia rela- recieron en el banco de semillas. Esta sabana es
tiva de las especies fueron muy distintas para cada menos rica en especies que muchas otras del con-
fecha, y de haber limitado el estudio a sólo un tinente americano, a consecuencia de la pobreza de
muestreo, nuestras conclusiones serı́an muy difer- los suelos mencionada previamente. Probable-
entes dependiendo de la fecha escogida. Esto hace mente, las diferencias metodológicas de esta inves-
pensar que parte de las diferencias en los resultados tigación fueron las que nos permitieron detectar un
entre diversos estudios en pastizales podrı́a deberse mayor número de especies. Tres aspectos metodol-
a las fechas de muestreo escogidas y nos recuerda ógicos distinguen este estudio de muchos otros
Dinámica del Banco de Semillas en una Sabana 443

publicados: (a) el tamaño muestral usado fue mu- muestral usado en promedio en los estudios hechos
cho mayor; (b) se evaluó el banco de semillas en en el trópico, habrı́amos detectado menos de la mi-
cuatro fechas, mientras que otros se limitan a un tad de las especies presentes en la superficie del
sólo muestreo; y (c) se utilizó la técnica de extrac- suelo durante la temporada de lluvias y sólo un
ción directa de las semillas, a diferencia de muchos sexto de ellas durante la sequı́a. Muchas de esas
otros que emplearon la técnica de germinación. especies sólo estuvieron representadas por una o
Mientras que la extracción directa de las semillas unas pocas semillas, y es imposible saber cuantas
del suelo tiende a sobrestimar el número de semillas de ellas tenı́an semillas efectivamente viables. Sin
viables, la técnica de germinación subestima el nú- embargo, si uno considera que una semillas en
mero de semillas y de especies en el banco pues 10,000 cm2 de suelo evaluado significa que debe
sólo alrededor de un 20 por ciento de las semillas haber unas 10,000 semillas de esa especie por hec-
presentes en el suelo germinan en el laboratorio tárea, parece factible que todas esas especies tuvier-
(Roberts 1981) y las plántulas suelen identificarse an algunas semillas viables en el suelo. Eso nos hace
a nivel de género o aún de familia (Garwood pensar que la técnica de extracción directa nos ac-
1989). De esos aspectos, probablemente el más de- erca más a la verdadera riqueza en especies del ban-
cisivo para explicar la elevada riqueza de especies co de semillas que la técnica de germinación. In-
encontrada en esta investigación, sea las diferencias vestigaciones futuras en este tópico deberı́an con-
en los tamaños muestrales. tinuar estudiando el problema del tamaño mues-
Varios autores han advertido anteriormente que tral, pero en principio, pareciera que deben usarse
el tamaño muestral usado en muchos estudios es tamaños muestrales mucho mayores que los em-
insuficiente para estimar adecuadamente la riqueza pleados hasta ahora si pretendemos obtener una
de especies en el banco de semillas (Whipple 1978, imagen real de la riqueza y la dinámica del banco
Thompson 1986, Garwood 1989). El tamaño de semillas. Lamentablemente esto significa hacer
muestral promedio en 43 estudios en el trópico es mucho más laboriosa, larga, y costosa este tipo de
de 959 cm2 (Garwood 1989); en 11 estudios re- investigaciones.
visados por Whipple (1978) es de 4453 cm2. Hay-
ashi y Numata (1971) proponen un volumen mı́n-
AGRADECIMIENTOS
imo de muestra de suelo entre 500 y 600 cm2 para
detectar la mayor parte de las especies presentes en Esta investigación fue financiada por el CDCHT de la
el banco de semillas de los pastizales. Cualquiera Universidad Simón Rodrı́guez (Proyecto S1-93-003). Par-
de esos volúmenes de muestra hubiera sido insufi- ticularmente estamos en deuda con Luis Bulla por sus
comentarios crı́ticos en las distintas etapas del proyecto y
ciente para obtener una estimación aceptable de la su asesorı́a en el análisis estadı́stico de los resultados.
riqueza del banco de semillas en la sabana estudi- Agradecemos a Carlos Bravo y Prudencio Chacón sus
ada. De habernos limitado a tomar el tamaño comentarios sobre una versión preliminar del manuscrito.

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APÉNDICE. Clasificación taxonómica y densidad por metro cuadrado de las semillas encontradas en la superficie del
suelo en una sabana en Venezuela.

Densidad (/m2)
Semillas (FAMILIA/Nombre cientı́fico) Agosto Octubre Abril Junio
ALISTAMATACEAE
Echinodorus sp. 1.39
ASTERACEAE
Chomolaena inifolia 11.81
Synedrella nodiflora 514.58
Trichospira verticillata 140.97
BIGNONIACEAE
Godmania sp. 0.69
BORAGINACEAE
Heliotropium filiforme 114.58
Heliotropium indicum 8.33
COMMELINACEAE
Murdania nudiflora 1.39
Murdania sp. 1.39
CONVOLVULACEAE
Convolvulus nodiflorus 1.39
Ipomea trifida 2.78
Dinámica del Banco de Semillas en una Sabana 445

APÉNDICE. Continued.

Densidad (/m2)
Semillas (FAMILIA/Nombre cientı́fico) Agosto Octubre Abril Junio
CYPERACEAE
Calyptrocarya sp. 0.69
Cyperus amabilis 4.86 0.69
Cyperus compressus 80.56 79.86 16.67
Cyperus flavus 10.41 15.97 81.94 65.97
Cyperus haspan 13.19 2.78
Cyperus odoratus 182.64 6.25
Cyperus polystachyus 0.69
Cyperus sp. 0.69
Eleocharis interstincta 1.39 44.44
Fimbristylis dichotoma 4.86 6.25 54.86 4.86
Fimbristylis miliacea 13.19 115.28 4.17
Fimbristylis sp. 0.69 13.19
Kyllinga odorata 4.17
Rhynchospora brevirostris 0.69
Rhynchospora eximia 2.78 3.47 4.86 25.00
Rhynchospora nervosa 0.69 0.69 4.17
Rhynchospora podosperma 3.47 22.92
Rhynchospora tenella 3.47
Rhynchospora tenerrina 6.94 12.50
Rhynchospora tenuis 0.69 1.39
Scleria interrupta 1.39 31.94 2.78
Scleria reticularis 6.94 2.78
DILLENIACEAE
Curatella americana 9.03
EUPHORBIACEAE
Croton hirtus 4.17 4.86 15.97
Euphorbia dioeca 0.69 0.69 4.17
Euphorbia hirta 7.64
Phyllanthus hyssopifolioides 0.69 1.39
Sebastiana corniculata 1.39 5.56
LAMIACEAE
Hyptis suaveolens 4.86 8.33
Marsypianthes hyptioides 0.69 0.69 131.25
Ocimum micranthum 0.69
LEGUMINOSAE
Caesalpinioideae
Cassia patellaria 0.69 5.56
Cassia rotundifolia 0.69 2.08 8.33
Cassia sp. 1.39
Mimosoidae
Mimosa camporum 13.51 81.25 166.67 18.06
Mimosa debilis 6.25
Mimosa pudica 2.08 2.78
Mimosa tenuiflora 1.39
Schrarkia leptocarpa 0.69 20.8 4.17
Papilionoideae
Aeschynomene filosa 0.69
Aeschynomene histrix 2.08
Aeschynomene paniculata 0.69
Calopogonium mucunoides 7.64
Centrosema venosum 2.08 1.39
Crotalaria stipularia 1.39
Desmodium barbatum 1.39 1.39 11.81 26.39
Desmodium scorpiurus 2.08
Indigofera (hirsuta ⫹ pascuorum) 0.69 31.94 550.69 33.33
Phaseolus diversifolium 0.69
Stylosanthes humilis 0.69 52.08 16.67
Tephrosia cinerea 4.17
Tephrosia sessiliflora 1.39
Zornia curvata 0.69 1.39 15.28 1.39
446 Pérez and Santiago

APÉNDICE. Continued.

Densidad (/m2)
Semillas (FAMILIA/Nombre cientı́fico) Agosto Octubre Abril Junio
LYTRACEAE
Cuphea elliptica 6.94
MALVACEAE
Malachra alceifolia 0.69 1.39
Malvastrum sp. 1.39
Peltacea trinervis 2.78
Sida angustissima 5.56 25.69 14.58 2.78
Sida linifolia 27.08 14.58
Sida salviaefolia 2.08 1.39 43.75
Sida spinosa 22.92 27.78
OCHNACEAE
Sauvagesia sp. 1.39
ONAGRACEAE
Ludwigia decurrens 1.39
Ludwigia octovalvis 49.31
POACEAE
Andropogon condensatus 1.39
Antephora hermaphrodita 4.86 4.86 20.82
Axonopus anceps 67.57 0.69 9.72
Axonopus capillaris 44.59 152.78 40.28
Brachiaria mollis 1.39 24.31
Brachiaria plantaginea 6.94
Dactyloctenium segapti 25.00
Digitaria (ciliaris ⫹ sanguinalis) 20.83 77.08 9.72
Digitaria fragilis 14.86 27.78 11.81 4.86
Digitaria sp. 0.69
Echinolaena inflexa 2.78
Eleusine indica 0.69 0.69 1.39
Eragrostis acutiflora 2.08
Eragrostis maypurensis 45.83 59.72
Eragrostis sp. 12.16 1.39
Hackelochloa granularis 1.39 1.39 25.69 1.39
Lasiacis anomala 0.69
Otachyrium versicolor 1.39
Panicum dichotomiflorum 4.86 1.39
Paspalum convexum 48.65 56.45 295.57
Paspalum multicaule 59.46 22.22 16.63 2.78
Paspalum plicatulum 129.05 454.17 33.33 52.08
Paspalum serpentinum 3.47
Sporobolus jacquemontii 39.86 10.42 71.53 38.89
Trachypogon plumosus 6.08 38.89 0.69
PORTULACACEAE
Portulaca pilosa 1.39 1.39 88.89
RUBIACEAE
Borreria verticillata 54.17 243.75 5.56
Borreria sp1. 2.08 17.36
Borreria sp2. 0.69 16.67 138.89
Diodia sp. 13.89 54.17 293.05 4.17
STERCULIACEAE
Helicteres guazumaefolia 2.78
Melochia villosa 0.69 5.56
Walthera americana 1.39 73.61 27.78
TURNERACEAE
Turnera pumilea 0.69 2.08
Turnera ulmifolia 0.69 2.08
12 ESPECIES NO IDENTICADAS 2.08 3.47 63.88 1.39

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