Académique Documents
Professionnel Documents
Culture Documents
5
TEMA
TEMA 5 – Esquema
Esquema
La postproducción audiovisual
Ideas clave
Para estudiar este tema lee las Ideas clave que te presentamos a continuación.
La historia del montaje diferencia tres grandes etapas en los orígenes del cine (periodo
de cine mudo) y que se articulan en torno a una serie de nombres: Lumiére, Meliès,
Porter y Griffith.
La segunda etapa la consolida Edwin S. Porter con The great train robbery (1903). El
montaje articula en esos momentos un sentido «narrativo» porque Porter entrecruzó en
una misma película diferentes hilos argumentales.
La tercera y última etapa del montaje en el cine está condicionada por la figura de David
Wark Griffith que exprimió el potencial tecnológico del cine para contar historias Esta
tarea se plasma en películas como The birth of a Nation (1915) o Love´s struggle through
the ages (1916) más conocida como Intolerancia.
La evolución internacional del cine entre la mitad de la década de los veinte hasta finales
del siglo XX lo hace, principalmente, en torno a tres cuestiones principales:
Por una lado, una clara evolución de la complejidad narrativa que tiene que ver
con las producciones audiovisuales para diferentes tipos de pantallas y diferentes tipos
de públicos.
Por ejemplo, Cómo ser John Malkovich, Pulp Fiction, Memento y un largo etcétera. Por
supuesto, esto no supone la ausencia de películas dirigidas al gran público dentro de la
lógica del blockbuster como John Carter, Independence Day o E.T.
El fundido: se emplea en planos que abren o cierran sobre un color. Ya sea para inicio
o fin de la película o cambios de secuencia. Usualmente se utiliza el negro para este
tipo de fundidos, iluminando u oscureciendo el plano sin otra intención que la de
cambiar a un nuevo plano introduciendo un cambio de escenario o tiempo, pero en
ocasiones se emplea cualquier otro color con un sentido narrativo detrás.
El cambio de plano por corte es la transición más utilizada en el cine, pues se trata
de la unión más limpia y sin artefactos, pasando casi desapercibido para el ojo
humano que interpreta el corte de manera natural, frente a otro tipo de cortinilla que
interrumpe la narración y el tiempo o espacio de la historia. Esta transición era la más
sencilla de realizar en el formato cinematográfico sobre negativo, ya que se trataba
únicamente de unir con adhesivo el último fotograma deseado el plano A con el
primero del plano B.
Hoy en día, la tecnología y el vídeo digital hace que sea mucho más sencillo, además
de ofrecer más posibilidades, necesitando únicamente software de edición que
ofrecen dichas posibilidades.
Otros directores (en la actualidad casi ninguno) montan durante el rodaje (ruedan en
orden) con la intención de que la película salga montada de cámara. Aquí la unión física
de un plano y otro se crea en el acto de rodar. Pero lo normal es montar después de filmar.
Lo que sí se utiliza hoy en día es lo que llamamos combo, donde se van capturando los
planos en un formato de baja calidad y bajo coste (en ocasiones solo de menor calidad y
alto coste) y se va realizando un premontaje en bruto, lo que también se llama primera
continuidad, para ir reflexionando sobre cuestiones de ritmo, el efecto entre planos, etc.
Antiguamente se mandaban a positivar las tomas buenas y al final de la jornada de rodaje
se realizaban visionados con el director, el director de fotografía, etc.
Existen diversas teorías en torno al montaje que pueden agruparse en tres: modo de
representación primitivo, modo de representación institucional y las primeras
vanguardias.
El MRI responde a la idea del montaje clásico que busca un montaje invisible y en el que
se inscribe Bazin, bajo la idea de que el montaje no debe aportar significado al film más
allá del respeto a lo real y el montaje alternativo que busca el choque entre los diferentes
planos, donde Eisenstein (cineasta ruso) es uno de los máximos representantes,
planteando la importancia del montaje como creador de significados.
El antagonismo entre estas dos formas de plantear el montaje lleva a los autores a
inscribirse en una corriente u otra en función a su forma de considerar el montaje,
aunque, si bien parecen opuestos convivieron en algunas películas y autores que
apostaban por coger ciertas características de cada uno, como Edwin S. Porter.
Su evolución mantiene la idea del teatro con actores que miran a cámara, saludan y dejan
constancia de la existencia de un actor detrás del mundo diegético de la película. Pocos
años después, 1906, esto va evolucionando hasta respetar el mundo diegético creado por
la película, dejando a un lado todos esos aspectos que dejan claro la existencia de un actor
y una cámara.
Se empiezan a desarrollar historias lineales donde se empieza a romper con las tres
unidades del teatro. Todos estos cambios vienen dados por la idea del decoupage, la
noción del montaje y la posibilidad de construir escenas.
Autosuficiencia del cuadro: aunque la película rompe ya con las tres reglas de oro
del teatro (un espacio, un tiempo y una acción), los diferentes cuadros o planos siguen
cumpliendo esas reglas. Incluso cuando las películas se componen de varias escenas
(compuestas cada una por un único plano) estás escenas que no carecen de
continuidad entre ellas, desarrollan una única acción autoconclusiva sucediendo esta
en un único lugar y tiempo.
Véase como ejemplo Éclipse de soleil en pleine lune. El eclipse: El cortejo entre el sol
y la luna de George Méliès (1907). Esta autosuficiencia del plano incluso lleva a
repetir el final de una escena en la siguiente a modo de inicio de la próxima acción,
como si de pequeñas películas se trataran.
Fotogramas de L´arroseur arrosé, Lumière (1895) y plano medio del jefe de la banda en The great train
Robbery, Edwin S. Porter (1903).
Fuente: youtube.com
No solo es la cámara la que se sitúa frontal a la acción, sino que los propios actores
actúan como si representaran una obra teatral, ubicándose entre ellos y respecto al
escenario de manera que la cámara captara todo, lo que hoy en día se vería forzado en
una película y sin embargo se ve como algo lógico en una obra de teatro.
Fotogramas de Le voyage dans la Lune (1902) y Le Mélomane (1903), ambas películas de George Méliès.
Ausencia del primer plano: otro de los efectos de esa herencia del teatro es la casi
total ausencia del primer plano. Si bien caben planos americanos junto a esos planes
generales teatrales (el modo de representación primitivo fue el primero en utilizar este
tipo de plano), son contados los primeros planos que se encuentran en las películas
del modo de representación primitiva y nunca con carácter narrativo, sino con la
intención de que el espectador pueda ver algo que en un plano general perdería.
Con la invención de la regla de los 180º se respeta lo que se llama el eje de miradas y
el rácord de dirección, además de dejar clara la confrontación de plano y contra-plano
así como de campo contra-campo, para que el espectador visualice mentalmente el
espacio y las acciones que se dan en él.
Un espectador que acepta lo que sucede frente a él, sobre todo por la naturalidad con
que se da, una continuidad y transparencia espacial y temporal por el uso del plano
único.
La clave de este montaje está en crear una transición entre planos apenas perceptibles
que no generen choque en el espectador. Para ello se tienen en cuenta una serie de
características: la iluminación, el color, la escala del plano, el contenido y el propio
ritmo de montaje. De esta forma un plano general debe permanecer en pantalla más
tiempo que un plano detalle, ya que el espectador necesitará más tiempo para
visualizar y comprender todo el contenido.
Continuidad espacial: viene dada por la regla de los 180º. Esta regla viene de
delimitar la posición de cámara teniendo en cuenta la necesidad de construir un
espacio comprensible para el espectador. De esta forma se establece un eje de acción,
se escoge uno de los lados que quedan divididos por este eje y esos son los 180º donde
se puede ubicar la cámara para realizar los diferentes planos de la secuencia,
representando la acción siempre desde un mismo punto de vista y de existir un
movimiento este mantendría la dirección.
De ser una secuencia donde hay dos personajes que mantienen una conversación, el
eje vendría dado por la dirección de sus miradas, de este modo los personajes
mantendrían una posición en pantalla a lo largo de toda la conversación y con puntos
de vista enfrentados, dando la sensación de mirarse mutuamente, respetando la
dirección de las miradas aunque los planos varíen de escala y posición.
REGLA DE 180º
Continuidad temporal: este tipo de montaje busca una narración con continuidad
cronológica, sin romper el tiempo con flashbacks o flash-forward que se verán
también en su momento cronológico o que no pertenecen a la cronología de la historia
contada, es decir, un recuerdo o una anticipación de algo que sucede en la película o
un recuerdo o anticipación que queda fuera del tiempo narrado en la historia de la
película.
El caso más normal es el de una película cuyo discurso narrativo es menor que la
historia narrada, es decir, una duración de 120 minutos de película que nos cuente
una historia que se desarrolla en, por ejemplo, 10 años.
Y aunque menos raro que las películas de grado cero, también son inusuales las
películas en las que el discurso narrativo es superior a la historia narrada, un ejemplo
es la película Corre, Lola, corre, de Tom Tykwer (1998), que respeta la fragmentación
de una acción por secuencia, pero juega con el tiempo contando tres historias
diferentes de las que solo una puede ser válida, otra opción común para este tipo de
narración es la de contar historias simultáneas en el tiempo pero en diferentes
espacios.
Estas dos técnicas, junto a la falta de elipsis muestran que la duración entre escenas
es continua. El uso de elipsis temporales viene marcado por el tipo de transición, un
encadenado o fundido muestran un periodo de tiempo omitido entre corto y medio.
Mientras que para mostrar elipsis temporales de larga duración se suele hacer uso de
secuencias completas: ver el cambio de estación, las hojas caer de un árbol, alternar
días y noches, o el desgaste de algo por el paso del tiempo.
Por último, existe una forma de respetar el orden cronológico sin hacer uso de elipsis
que puede alterar el discurso narrativo, es decir, la duración de la película. Se trata del
uso del tiempo bala (bastante reciente) o lo contrario, cámara rápida. Sin embargo, el
montaje continuo apuesta por un montaje espacio-temporal fácil de entender e
invisible para el espectador, por lo que hará poco uso de este tipo de montaje.
Así establece otras formas, además de las vistas hasta ahora, para crear esa ilusión de
realidad continuada, entre ellas la continuidad de rácord, de miradas, de movimiento, de
un gesto y del eje.
Del mismo modo Bazin, ante el montaje de una de las películas de Orson Wells en las
que este hacía uso del plano secuencia y de la profundidad de campo para contar varias
cosas a la vez pero sin realizar cortes, consideraba el uso de estas técnicas como el triunfo
del realismo en el cine.
MRP MRI
Autarquía Continuidad.
Distancia Proximidad.
Existen varias clasificaciones del montaje, entre ellas destacan los cinco tipos de
montaje que Eisenstein planteaba en 1989, en los cuales cada uno era una evolución del
anterior, sumando un aspecto o elemento más a tener en cuenta.
Del mismo modo, cada autor de la época, entre los que encontramos a Bazin, Balázs,
Arnheim, Kuleshov, Vertov, Pudovkin, Mitry o Aumont, tenía diferentes formas de ver el
montaje, estableciendo clasificaciones propias.
Montajes mecánicos: que dan valor a lo físico, como la duración del plano y el ritmo
del montaje.
Montaje narrativo: cuyo peso recae en la historia.
Montaje expresivo: que se preocupa más por el significado de la unión entre planos.
Algunos de estos autores tienen en cuenta los tres tipos, como Eisenstein (cineasta ruso
que dio gran valor al montaje llegando a crear una clasificación que a día de hoy sigue
siendo un referente). Esta comienza con tipos de montaje más mecánicos y termina
añadiendo valores expresivos e intelectuales a su clasificación.
Montaje rítmico: este tipo de montaje además de atender a la duración del plano
tiene en cuenta la composición y el encuadre. Como ya se ha planteado un plano
general requiere de más tiempo de lectura que un plano detalle al contener más
información que procesar, por lo que para el montaje rítmico se tendrá en cuenta que
su duración en pantalla debe ser mayor para compensar con el plano detalle que de
un solo vistazo podrá leerse toda la información.
Montaje armónico: este montaje se caracteriza por añadir a la importancia del tono
de plano la armonía visual del fragmento. La idea es unificar o crear un ritmo válido
entre lo que ha llamado montaje tonal y lo visual. Unifica todos los tipos de montaje
anterior, dando valor a la duración y ritmo que busca una emoción y un sentido detrás
de las uniones, con la importancia de lo estético.
Con estos cinco tipos de montaje Eisenstein explicaba un cine en el que el montaje forma
parte importante de la película, tanto o más que la propia historia, al introducir
significados diferentes y con expresión propia. Otro ejemplo de gran importancia
respecto al montaje, también de la escuela rusa lo tenemos en Lev Kuleshov.
Este cineasta, demostró con un pequeño montaje lo que ahora conocemos como efecto
Kuleshov, es decir, la importancia de la relación entre planos para otorgar de significado
un todo. En este experimento Kuleshov utilizó un plano del actor Iván Mozzhujin en el
que salía con una expresión neutra y lo intercaló con un plato de sopa, un ataúd con una
niña y una mujer en una pose sugerente. El público que vio el metraje estaba convencido
de que Mozzhujin tenía una expresión diferente en cada secuencia, expresando hambre,
tristeza y lujuria, sin saber que estaban ante la misma toma.
Técnicas
Este tipo de montaje se caracteriza por lo artesanal del proceso, que se traduce en un
incremento de tiempo respecto a la edición no lineal, a la hora de realizar las mismas
tareas.
En cine, una transición por corte es literalmente, el trabajo que se realiza, al cortar la
película y volverla a juntar en el fotograma que se desea y una transición por encadenado
supone la superposición de los fotogramas de ambos planos. Técnicas que en la edición
no lineal, no solo nos permiten saltar de un fotograma a otro sino realizar dichas
transiciones con un simple efecto propio del software.
Para este tipo de edición se dispone de un hardware que es el que nos obliga a esta
edición lineal, en el caso del vídeo analógico si bien es algo más sencillo, se sigue
necesitando de mayor trabajo y tiempo que la edición no lineal.
Del mismo modo se pueden agregar ciertos efectos de audio y vídeo en función al
hardware del que dispongamos.
Las cintas con todo el material original son las fuentes, el hardware que nos permite
realizar el montaje editor, manejado por un controlador de edición u operador, la
cinta o el metraje con la edición final se conoce como master.
Una evolución del editor de vídeo permite al hardware crear un control track o time
code, es decir, una pista de control en la que se graban las referencias de cada
fragmento de las cintas originales y que quedan anotados en el editor.
La información sirve para ubicar los puntos de manera rápida automáticamente y hacer
la edición individual. Conlleva que el operador realice primero un visionado de todo el
material original para realizar dichas anotaciones y se deben realizar otorgando a cada
punto de control un número, si ese número es erróneo o se mueve la edición no sería
correcta.
Otro problema de este tipo de edición es la incapacidad de estos editores para memorizar
este control track, que se guarda en la memoria volátil, por lo que si después de apagarlo
se quieren realizar cambios respecto al master, se tendrá que realizar de nuevo todo el
proceso.
Mientras que para el vídeo la edición lineal no es un tipo de montaje que siga
realizándose, ya que el uso de vídeo analógico no es muy común, no sucede lo mismo con
el formato cinematográfico, para el que el hardware ha cambiado pero la necesidad de
ensamblar el negativo sigue siendo física.
Etalonaje
A pesar del buen trabajo que se pueda realizar, siempre es necesario un proceso en el que
se ajusta el color, contraste y brillo del negativo filmado. Se trata en parte de ajustar el
color a los criterios y gustos del director de fotografía y el director, alternando la imagen
con una finalidad estética en la que se puede cambiar completamente el tono de la
secuencia.
Pero también se trata de realizar primero una corrección de color que iguale el color entre
los planos de la película para que no choquen visualmente. De todo esto se ocupa el
etalonador, encargado de todo este proceso de laboratorio con los químicos y la
película ya positivada.
Sincronía audio-vídeo
Con la llegada del cine sonoro llega la complicación de registrar el sonido en otro formato
y la necesidad de sincronización posterior. Al comienzo, la reproducción de audio en las
salas se realizaba sincronizando ambas pistas en el momento de la proyección, ya que ese
sonido se reproducía desde discos y la película desde la copia máster. Si bien surgieron
una serie de inventos que permitían la reproducción sincronizada al utilizar un mismo
motor para el paso de la película y la reproducción del disco, la sincronización se perdía
si la película se partía (algo no del todo inusual en los inicios) o el disco se rayaba.
Película sin exposición con banda de sonido óptico. Positivo con sonido óptico (fuente:
telecinepab.blogspot.com).
Para facilitar la sincronización se usa la claqueta. Esta no solo nos da información sobre
la toma filmada sino que al filmar el golpe de la barra articulada con la parte fija nos da
el golpe de sonido que en montaje podremos sincronizar fácilmente con la pista de audio.
Técnicas
El primer paso es realizar un volcado de todo el material a los discos duros e importar el
material al software de edición elegido. De esta forma nuestra edición no es sobre un
material físico que se va duplicando o del que debemos realizar copias para proteger el
original sino que todo se realiza de manera virtual sobre una copia digital de la que el
ordenador no necesita crear copias sino referencias de acceso que se quedan grabadas en
lo que se conoce como lista de reproducción (edit decission list -EDL), uno de los
elementos más importante en la edición no lineal.
El software va creando una lista con las referencias de todo lo que hacemos, por ejemplo:
corte en el fotograma número X (punto de salida) del archivo Y que une con el fotograma
número X (punto de entrada) del archivo Z.
De esta forma quedan registradas las tomas seleccionadas, el orden, las transiciones o
efectos aplicados y se puede visualizar desde una grabación virtual que en realidad no
existe y que reduce el tamaño de archivos o material físico con el que trabajar y los
cambios son solo correcciones en esta lista de decisiones. A diferencia de
Todas estas ventajas hacen que el montaje no lineal sea mucho más fácil de realizar, en
menos tiempo y por segmentos fácilmente modificables una y otra vez. Suponía tal
avance respecto a las técnicas de edición anterior que para la industria el avance del
software y la capacidad de digitalización de las cintas o el negativo se convirtieron en
uno de los pasos más importantes en postproducción.
Para todo el proceso de edición no lineal el editor se apoya en el software de edición con
el que interactúa a través de la interfaz gráfica, que ofrece en pantalla las mismas
opciones que las mesas de edición analógicas.
La evolución de los diferentes programas de edición (Avid, Premiere, Final Cut, etc.) ha
llevado a que, tanto visualmente como en el modo de trabajo sean bastante similares o
compartan áreas de trabajo.
Si bien todos los programas permiten modificar esta combinación moviendo, abriendo y
cerrando las diferentes ventanas disponibles, si se quiere trabajar con el sonido o
correcciones de color podremos configurar la interfaz para que se ajuste a las necesidades
del momento.
Almacenamiento: en esta área se importan los clips originales con los que se va a
trabajar, esta área se ubica normalmente arriba a la izquierda. En esta área además
de ver un listado o iconos de cada clip importado se puede obtener información de
cada clips (ubicación en el disco duro, formato de archivo, información de vídeo y
audio, etc.). Se pueden modificar los nombres de los archivos para identificarlos mejor
e incluso hacer grupos de archivos a través de carpetas. Estos clips pueden
introducirse desde un archivo digital importándolos al programa desde su ubicación
en el disco duro o realizando una captura con un hardware que al ser reconocido por
el programa de edición permite capturar la cinta desde el propio software.
Visualización: esta área normalmente se presenta con una doble ventana de vídeo
que se corresponden a la visualización del material fuente o clips de origen, el material
que queremos añadir a nuestro montaje y el monitor de destino o master, donde se
reproduce el montaje que vamos realizando.
En algunos programas, el monitor de visualización del material fuente se convierte,
mediante pestañas, en una ventana de herramientas y configuración de efectos para
el clip ya introducido en la línea de tiempo.
Línea de tiempo en Final Cut Pro con dos pistas de audio y dos de vídeo (Fuente: Apple.com)
A diferencia del montaje lineal se suele realizar una edición en bruto de la secuencia o
fragmento con la que se está trabajando para después ir ajustando o modificando lo
necesario, así como la inclusión de efectos o correcciones de imagen.
Cuando se termina el montaje de las diferentes secuencias se exporta una EDL para
reconstruir el montaje en cualquier ordenador desde el material original, que puede ser
con el que se ha trabajado o no, si se ha estado trabajando con una copia de calidad
reducida para que el sistema nos permita trabajar más rápidamente, sobre todo si se
trabaja con imagen en alta definición o el formato cinematográfico.
Tras el montaje en bruto y el ajuste de los fotogramas exactos llega el ajuste de la imagen
o la introducción de efectos de imagen, sobreimpresión de imágenes o títulos, efectos de
velocidad y otras opciones que vienen dadas por los diferentes programas de edición.
Para ello, como ya se ha comentado, los diferentes programas tienen lo que llaman
espacios de trabajo o workspaces que configuran la interfaz para ajustes de diferentes
tipos: sonido, imagen, tituladora, color, edición, etc.
Es uno de los procesos que más tiempo conllevan al tener que generarse un clip real,
mientras no se puede realizar ninguna otra función con el programa y además hay que
tener en cuenta que genera un clip que ocupa un espacio real en el disco duro y cada
variación que se realice de dichos efectos supondrá la necesidad de crear un nuevo clip.
Por otra parte la aplicación de nuevos efectos sobre la imagen no significa la pérdida de
calidad ni la alteración real de un negativo o una copia de la que sacar ese nuevo clip
renderizado. Y modificar un efecto ya aplicado no requiere de una nueva copia de
negativo que ha sido modificado por la aplicación de un efecto.
Sincronía audio-vídeo
Como sucede en la edición lineal, el primer paso para la sincronización de audio y vídeo
es la utilización de una claqueta, esto unido a la visualización gráfica en el timeline de los
fotogramas y la onda de audio hace muy fácil la sincronización de ambas pistas.
Lo + recomendado
No dejes de leer…
Artículo que desarrolla, desde una perspectiva semiótica, cuáles fueron los diferentes
recursos que los pioneros del cine tuvieron a su disposición, cómo los desarrollaron y qué
sentido se les otorgaba dentro de la lógica del montaje.
No dejes de ver…
Película de 1903 que inaugura la segunda etapa que hemos planteado en la que el cine
trata de contar historias, no solo de mostrarlas. La escena final conmocionó tanto a los
espectadores como la llegada del tren de los Hermanos Lumière.
No solo el nacimiento de una nación sino el nacimiento del cine dentro de la concepción
moderna que hoy disfrutamos. Por supuesto, en su versión más incipiente y con una
duración de algo más de tres horas. Sin embargo, cualquier persona que quiera conocer
los orígenes del montaje cinematográfico debería ver esta película (aunque no la vea
completa).
Programa de televisión muy ameno y muy bien presentado sobre el papel del montaje en
el cine.
+ Información
A fondo
El Etalonaje
Si quieres mejorar tus conocimientos sobre el mundo del etalonaje puedes visitar la web
de videodeport que tiene una guía muy interesante sobre el mismo.
Lara, A. (2005). El cine ha muerto. Larga vida al cine. Pasado, presente y futuro de la
postproducción. Madrid: T&B Editores.
Actividades
Objetivos
Tendrás que observar particularmente el uso de los encuadres subjetivos y del montaje.
Deberás analizar el uso del montaje en la narración no lineal de la trama y el uso de los
encuadres para reflejar el punto de vista de quien cuenta la historia cada vez.
Criterios de evaluación
Deberás reflejar en el trabajo cómo se cuenta el suceso del asesinato desde distintos
puntos de vista usando el montaje. Aspectos a tener en cuenta: uso de encuadres
subjetivos para indicarnos quién cuenta la historia en cada momento, cómo contamos la
historia de una manera no lineal a diferencia del teatro gracias al montaje, etc. Se
descontará 0,1 puntos por cada elemento no comentado (elipsis temporales, continuidad
narrativa y temática, etc…).
Extensión máxima
Test