Académique Documents
Professionnel Documents
Culture Documents
Pues bien, las características de este desafío - no tengo claro si fue realizado en clases o
formulado como tarea (lagarto, lagarto)- implican que "el alumno o alumna" (tributo a los
genios progresistas de la educación, aunque sin el beneplácito de la RAE), debían
formularse una pregunta inusitada y planteársela a algunos interlocutores, para recabar
de ellos las posibles respuestas. Luego ellos mismos debían ensayar sus propias
soluciones a la interrogante para, finalmente, buscar una justificación a la existencia de la
pregunta. En definitiva, algo así:
Un alumno se preguntó por qué las cosas "se llaman como se llaman".
Algunas respuestas que recopiló:
"Yo igual me he preguntado lo mismo"
"¡Las cosas tontas que preguntas!"
"Me das lástima, tan..."
"Nunca me imaginé que me preguntarías algo tan estúpido".
"No sé. Es cuática esa pregunta".
Respuesta propia:
-" Lo único que se me ocurre decir es que desde que las cosas se crearon, vienen con su
nombre".
Tomemos en cuenta que estas son inquietudes expuestas por niños de primero o
segundo medio.
Por último, presentamos el pequeño trabajo de una niña, cuya inquietud es:
¿Por qué tenemos que crecer?
Respuestas que recabó:
-" Es un proceso normal"
-"Todos tenemos que crecer"
- "Debemos ser adultos algún día"