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Shock séptico
F. VALENZUELA SÁNCHEZ, R. BOHOLLO DE AUSTRIA, I. MONGE GARCÍA
Y A. GIL CANO

Servicio de Cuidados Críticos y Urgencias. Hospital del SAS de Jerez. Jerez de la Frontera. Cádiz. España.

El shock séptico es un estado de hipoperfu- puesto que están en íntima relación con el pro-
sión tisular en el contexto de un síndrome de nóstico.
respuesta inflamatoria sistémica, caracterizado
clínicamente por vasodilatación excesiva y el re- PALABRAS CLAVE: shock séptico, soporte hemodinámico,
querimiento de agentes presores para mantener monitorización hemodinámica.
la presión de perfusión de los órganos.
La típica respuesta cardiovascular hiperdiná-
mica no está presente en todos los enfermos, SEPTIC SHOCK
por lo que su presencia o ausencia no debe Septic shock is a state of tissue hypoperfusion
usarse para el diagnóstico del shock séptico. in the context of a systemic inflammatory res-
El tratamiento exige la normalización de la vo- ponse syndrome, characterized clinically by ex-
lemia y la administración de agentes inotropos cessive vasodilatation and the requirement of
para normalizar el gasto cardíaco si se encuen- vasopressor agents in order to maintain the per-
tra bajo, y aumentar la presión de perfusión de fusion pressure of organs system.
los tejidos. El tratamiento debe ser guiado por The typical hyperdynamic cardiovascular res-
una adecuada monitorización. Es preferible el ponse is not present in all the patients, which
uso de técnicas que permiten valorar la precar- means that its presence or absence should not
ga del ventrículo derecho, más que mediciones be used for the diagnosis of septic shock.
aisladas de presiones de llenado ventricular (que The treatment requires the normalization of
no se relacionan con la precarga ni con la res- volemia and the administration of inotropic
puesta del individuo a la sobrecarga de fluidos). agents in order to normalize the cardiac output if
Recientemente, se ha puesto de manifiesto que it is low, and to increase the perfusion pressure
la variación de la presión de pulso está en rela- of tissues. The treatment should be guided by an
ción con la respuesta del gasto cardíaco a una adequate monitoring. The use of techniques that
sobrecarga de fluidos y con la consiguiente me- make possible to assess right ventricle preload
joría en la hemodinámica, más que mediciones is preferable, more than isolated measurements
de presión de llenado del ventrículo derecho o of ventricular filling pressures (that are not rela-
izquierdo. ted to preload nor to the response of the patient
Otras mediciones sensibles a la perfusión de to fluids overload). Recently, it has been shown
los órganos, incluyendo la monitorización de la that the variation of pulse pressure is related to
acidosis láctica y de la lactacidemia, deben tam- the response of the cardiac output to fluid over-
bién usarse para guiar la resucitación con fluidos. load and to the consequent hemodynamic im-
La precocidad del tratamiento y la rapidez con provement, more than measurements of right or
que se resuelven los signos de hipoperfusión ti- left ventricle filling pressures.
sular son aspectos fundamentales del manejo, Other measurements sensitive to the organs
perfusion should be also used to guide resusci-
tation with fluids, including monitoring of lactic
acidosis and lactacidemia.
Correspondencia: Dr. F. Valenzuela. Speed of treatment and speed with which the
Servicio de Cuidados Críticos y Urgencias. sings of tissue hypoperfusion are resolved are
Hospital del SAS de Jerez.
Carretera de circunvalación, s/n. 11407 Jerez de la Frontera. Cádiz. España. fundamental components of management be-
Correo electrónico: pacovaes@yahoo.es cause are closely related to prognosis.

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KEY WORDS: septic shock, hemodynamic support, hemodyna- Actualmente, el tratamiento de la sepsis grave y
mic monitoring.
del shock séptico lo podemos dividir en control de
la infección, estabilización hemodinámica, trata-
miento específico de la disfunción orgánica, modu-
lación de la respuesta inflamatoria y tratamiento de
la disfunción hormonal. A pesar de ser la estabiliza-
INTRODUCCIÓN
ción hemodinámica, tras el control de la infección,
El shock séptico es un estado de hipoperfusión ti- la parte más habitual del tratamiento de la sepsis
sular grave desencadenado por la respuesta inflama- grave y que más reuniones de expertos y artículos
toria sistémica de origen infeccioso. La conferencia de revisión ha generado3-5, algunos aspectos funda-
consenso de ACCP/SCCM en 19921 definió el shock mentales como los objetivos terapéuticos, modos de
séptico como el estado de hipotensión inducido por monitorización y el inicio y/o cantidad de volumen
la sepsis, a pesar de un adecuado aporte de líquidos, y fármacos vasoactivos, se encuentran en debate
junto con alteraciones en la perfusión tisular. La hi- permanente (fig. 1).
potensión se definió como una presión arterial sistó-
lica < 90 mmHg o el descenso de ≥ 40 mmHg de la
OBJETIVOS TERAPÉUTICOS
presión sistólica normal. Los trastornos de perfusión
se definieron como el aumento del ácido láctico > 2 A finales de los años ochenta se preconizó maxi-
mEq/l, oliguria < 30 ml/hora, y trastornos mentales mizar algunos parámetros hemodinámicos y meta-
agudos, como agitación, obnubilación o confusión. bólicos, como el transporte de oxígeno (TO2) y el
En cuanto a los pacientes que, a pesar de estar trata- consumo de oxígeno (VO2), con el objetivo de me-
dos con fármacos vasoactivos y/o inotropos y estar jorar la supervivencia de distintos grupos de pacien-
normotensos, mantienen un trastorno de perfusión o tes críticos, incluidos los sépticos. Shoemaker et al6
fallo de algún órgano, se consideraron en situación propusieron valores de índice cardíaco > 4,5
de shock séptico. l/min/m2, índice de TO2 > 600 ml/min/m2, e índice
Un estudio epidemiológico reciente mostró un de VO2 > 170 ml/min/m2, encontrando mayor su-
aumento en EE.UU. del 8,5% en la incidencia anual pervivencia en aquellos pacientes críticos en los
de shock séptico2. Este aumento parece estar condi- que se conseguía alcanzar estas metas. Hayes et al7
cionado por la mayor edad de los pacientes, el au- estudiaron la supervivencia en un grupo de pacien-
mento de la invasión e instrumentación médica, la tes críticos cuyo tratamiento estaba enfocado a ma-
inmunosupresión de la quimioterapia, trasplantes, ximizar los indicadores metabólicos, encontrando
alta incidencia de sida y el incremento de resisten- mayor supervivencia en el grupo control. En sus
cias a los antimicrobianos. A pesar de la incorpora- conclusiones estos autores sugirieron que el empleo
ción de nuevos tratamientos, la mortalidad permane- de dosis elevadas de fármacos inotrópicos puede te-
ce alta, alrededor del 50%-60%. ner efectos deletéreos, a pesar de mantener valores

Figura 1. Esquema de trata-


miento de la sepsis grave. AT
III: antitrombina III; PCA:
proteína C activada.

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normales o supranormales de TO2. Gattinoni et al8 Inicialmente se debe asegurar una precarga "ade-
valoraron la mortalidad, morbilidad y días de estan- cuada", con el objeto de mejorar el gasto cardíaco.
cia en una Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) en La medición de presiones de llenado (presiones en
762 pacientes críticos distribuidos aleatoriamente la aurícula derecha, PVC) o presiones de enclava-
en tres grupos según el objetivo terapéutico: uno miento en la arteria pulmonar (PAPo) proporciona,
para conseguir un índice cardíaco (IC) normal (2,5- además de una referencia de la precarga y de la vo-
3,5 l/min/m2) (grupo control), el segundo dirigido a lemia eficaz, un límite de seguridad en el aporte de
maximizar el IC (> 4,5 l/min/m2) y el tercero a opti- líquidos en la resucitación.
mizar la saturación venosa mixta de oxígeno Se ha considerado en la práctica diaria la PAPo
(SvmO2) (> 70%). No encontraron diferencia signi- como indicador de la precarga del ventrículo izquier-
ficativa de supervivencia en los pacientes en los do. Sin embargo, entre la PAPo, la presión en la aurí-
que se consiguieron niveles supranormales de IC o cula izquierda (PAI) y la presión telediastólica del
de SvmO2. ventrículo izquierdo (PTDVI) puede haber obstácu-
Recientemente, Rivers et al9 compararon en pa- los y/o alteraciones que impidan esta equivalencia.
cientes con shock séptico la eficacia de optimizar Así, circunstancias como la colocación de la punta
precozmente valores hemodinámicos y metabólicos del catéter de arteria pulmonar en zona I o II de
con un tratamiento estándar. Los pacientes ingresa- West, aumento de áreas con zona I o II por hipovole-
ron en la UCI tras 6 horas en Urgencias en las que mia, presión positiva al final de la espiración (PEEP)
en el grupo de tratamiento se debía de alcanzar los elevada (o auto-PEEP), lesiones como la obstrucción
siguientes objetivos: presión venosa central (PVC) de las venas pulmonares, la afectación mitral y aórti-
entre 8 y 12 mmHg, mediante un aporte de volu- ca, y el aumento de la presión torácica o intraabdo-
men, vasopresores hasta conseguir presión arterial minal, provocan mediciones de precarga erróneas.
media (PAM) superior a 65 mmHg, vasodilatadores La PAPo se utiliza como presión límite de seguri-
si la PAM era superior a 90 mmHg, corrección del dad al considerarse una aproximación a la presión
hematocrito hasta alcanzar un 30% y, si la satura- hidrostática capilar pulmonar (PCP), factor decisivo
ción venosa central de oxígeno (SvcO2, medida en la en la producción del edema pulmonar. La PAPo es
aurícula derecha) era inferior al 70%, se utilizaba la medida de la presión en las venas pulmonares
dobutamina hasta conseguir los niveles de SvcO2 que, con frecuencia, puede corresponder con la PAI
deseados. Con esta estrategia, el 99% de los pacien- y, en condiciones normales, se corresponde con la
tes con tratamiento optimizado consiguieron los PTDVI13. La PAPo es una estimación a la baja de la
mencionados objetivos y presentaron una mortali- PCP, de tal forma que ambas presiones sólo son su-
dad hospitalaria del 30,5%, significativamente me- perponibles cuando las resistencias venosas pulmo-
nor que los tratados de forma estándar, que fue del nares son, prácticamente, nulas. Al contrario de lo que
46,5%. Algunas críticas vertidas sobre este estudio ocurre en la circulación sistémica, las resistencias
han señalado diferencias en la mortalidad del grupo venosas contribuyen en un 40% a las resistencias to-
placebo comparadas con las publicadas en otros es- tales pulmonares y esta proporción aumenta en si-
tudios similares, en la reposición de volumen, en el tuaciones de sepsis e hipoxia, que cursan con intensa
tiempo de estancia en el área de urgencias entre los venoconstricción pulmonar. Garr et al determinaron
grupos, y en la utilización de transfusiones de hema- en 1967 la siguiente ecuación que relaciona la PAPo
tíes, factor con impacto negativo en el pronóstico de con la PCP: PCP = PAPo + 0,4 (PAP media-PAPo).
pacientes sépticos según otros estudios publicados Esta relación entre PCP y PAPo, que en individuos
con anterioridad. Pero es importante reseñar la aso- sanos no representa una diferencia superior a
ciación en las series estudiadas entre inicio tardío 2-3 mmHg, en pacientes graves con síndrome de
del tratamiento y fracaso del tratamiento7,8,10,11 o, por distrés respiratorio agudo (SDRA) secundario a
el contrario, efectos beneficiosos del tratamiento si sepsis puede llegar a ser ≥ 10 mmHg, ya que el
se aplica de forma precoz6,9,12. Sólo dos estudios9,10 componente venoso puede llegar a representar más
incluyen pacientes exclusivamente sépticos, otros del 60% del valor total de las resistencias vascula-
tres pacientes críticos mixtos7,8,11 y dos estudios pa- res pulmonares14.
cientes quirúrgicos. De los dos estudios en pacientes La utilización de las presiones como guía de segu-
sépticos uno no encuentra diferencia en cuanto a su- ridad en el aporte de líquidos y como valoración de
pervivencia y otro sí. los parámetros de función cardíaca necesitan de un
Básicamente, el primer objetivo debe ser lograr gran conocimiento de la técnica para saber interpre-
una presión arterial normal. De forma arbitraria, ba- tar los datos obtenidos, destreza en la realización de
sándose en estudios experimentales, se ha conside- la misma cumpliendo un riguroso protocolo de medi-
rado que la presión de perfusión es adecuada a partir das (calibración, calidad de trazados, ausencia de ar-
de una presión arterial sistólica de 90 mmHg o una tefactos y posición correcta del catéter), y conocer
PAM de 60 mmHg. La PAM valora mejor la presión los factores externos que pueden influir sobre el cero
de perfusión, por lo que es preferible a la presión ar- de referencia o presión transmural, como son el au-
terial sistólica. Una PAM por encima de 60 mmHg mento de las presiones tanto en el tórax como en el
asegura habitualmente la perfusión tisular. La perfu- abdomen, haciendo las correcciones pertinentes.
sión tisular es igual de adecuada con PAM entre 60 Al comienzo del aporte de volumen, la monitori-
mmHg y 85 mmHg4. zación debe realizarse a través de la PVC. Aunque

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esta medición representa únicamente la presión de nistración de fluidos en el enfermo crítico fue utili-
aurícula derecha y, normalmente, la presión tele- zada hace más de una década por Mitchel et al17. Es-
diastólica del ventrículo derecho, la interrelación de tos investigadores demostraron el efecto beneficioso
ambos ventrículos, sobre todo en los casos de dis- de su utilización disminuyendo la duración de la
función cardiovascular, justifica su uso. La curva de ventilación mecánica y de la estancia en UCI en un
función del ventrículo derecho alcanza su plateau grupo de enfermos críticos.
con presiones entre 8 y 12 mmHg, los intentos de Las dos medidas volumétricas que se pueden me-
aumentar el gasto cardíaco sobrepasando este nivel dir con el PiCCO, el volumen torácico intravascular
son inútiles ya que el corazón izquierdo sólo es ca- y el volumen cardíaco telediastólico (global end-
paz de bombear lo que recibe del ventrículo dere- diastolic volume) han mostrado más fiabilidad para
cho, y además el exceso de líquido suele producir estimar la precarga ventricular que las medidas de
efectos indeseables15. Por otra parte, un aumento de presión habitualmente utilizadas en la clínica (PVC
presiones conlleva una dilatación de las cámaras de- y PAPo). Recientemente, Michard et al18 han inves-
rechas y una reducción de la compliancia del ven- tigado la utilidad del volumen cardíaco telediastóli-
trículo izquierdo por el fenómeno de interdependen- co para estimar la precarga ventricular comparándo-
cia. Así se limita de forma importante la necesidad la con la PVC en un grupo de enfermos con shock
de utilizar el catéter de arteria pulmonar. Cuando no séptico. Estos investigadores concluyen que en los
se alcanzan los objetivos es conveniente insertar un enfermos en shock séptico, y al contrario de lo que
catéter de Swan-Ganz, porque cualquier patología sucede con la PVC, el volumen cardíaco telediastó-
del ventrículo derecho modifica su curva de función lico es un indicador fiable de la precarga ventricular.
ventricular. La monitorización con el PiCCO nos permite co-
En la actualidad se están desarrollando otros méto- nocer de forma continua dos medidas, la variabili-
dos de monitorización de la precarga y la volemia, dad de la presión de pulso y la variabilidad del volu-
distintos a la determinación de presiones de llenado, men sistólico, que pueden ser especialmente útiles
que se pueden considerar complementarios. Los para detectar aquellos enfermos en los que se puede
avances en ecocardiografía doppler, sobre todo con esperar un aumento del gasto cardíaco en respuesta
sonda transesofágica (ECO-TE) y el cálculo de volú- a la administración de fluidos intravenosos, lo que
menes mediante la técnica de termodilución transpul- algunos autores denominan estado "precarga-depen-
monar simple (PiCOO), se están demostrando útiles. diente". La utilidad de estas medidas ha sido única-
La ecocardiografía doppler (ECO) facilita no sólo mente investigada en enfermos en ventilación mecá-
imágenes estructurales del corazón y grandes vasos, nica controlada.
sino también información funcional, derivada de En los pacientes sépticos el gasto cardíaco se en-
cálculos de las dimensiones (áreas) de las cavidades cuentra aumentado normalmente, pero al inicio del
cardíacas en distintos momentos del ciclo cardíaco, cuadro, y tardíamente se puede encontrar disminui-
del análisis del flujo transvalvular y de los diámetros do. El objetivo del aporte de volumen es aumentar el
de los grandes vasos. Con la ECO no podemos me- gasto cardíaco y la mayoría de las veces es suficien-
dir presiones directamente, pero se han descrito va- te. Los valores de 2,5-3 l/min/m2 de índice cardíaco
rias fórmulas producidas del análisis de la regresión se consideran suficientes, ya que en estudios clíni-
lineal múltiple entre los parámetros derivados de los cos se ha demostrado la ineficacia de forzar el trata-
flujos transmitral y venoso pulmonar, obtenidos por miento para la consecución de índices cardíacos su-
doppler, y las distintas presiones de llenado medidas periores8.
con catéter de arteria pulmonar. Varios estudios de Es conveniente que la monitorización del gasto
metodología diversa han sido publicados con la in- cardíaco sea continua y para ello se ha utilizado un
tención de ofrecer una forma fácil y fiable de calcular catéter de arteria pulmonar con termodilución. Si
las distintas presiones de llenado, obteniendo eleva- está canalizada una arteria sistémica se puede calcu-
das correlaciones (0,85-0,95), tanto con ecocardio- lar el gasto cardíaco continuo mediante el análisis
grafía transtorácica (ECO-TT) como con ECO-TE. del contorno de la presión de pulso19. Si el enfermo
Estudios realizados en pacientes sépticos han de- está en ventilación mecánica, es posible la determi-
mostrado la eficacia de la ECO en su manejo hemo- nación del gasto cardíaco continuo mediante técnica
dinámico, tanto en la valoración de la precarga, de de reinhalación parcial del CO2 basada en el princi-
la contractilidad y de la compliancia del ventrículo pio indirecto de Fick (NICO®)19, o mediante la medi-
izquierdo, así como la respuesta al aporte de volu- da del volumen latido por sonda eco-doppler esofá-
men mediante exploraciones repetidas16. gica (HEMOSONIC®).
La utilización de PiCCO permite monitorizar de La sonda de ecografía-doppler esofágica (HE-
forma continua el gasto cardíaco, la variabilidad de MOSONIC®) permite una monitorización hemodi-
la presión de pulso y del volumen sistólico. Así mis- námica mínimamente invasiva mediante la medición
mo, estima de forma intermitente la gravedad del continua del diámetro y del flujo aórtico. La obten-
edema pulmonar, el volumen intratorácico intravas- ción continua del volumen sistólico (VS), del gasto
cular y el de las cavidades cardíacas, dos medidas cardíaco y de una serie de parámetros derivados de
relacionadas con la precarga ventricular. la morfología de la onda de flujo aórtico permiten,
La determinación sucesiva del edema pulmonar teóricamente, tener una idea de la situación hemodi-
(ELW: extravascular lung water) durante la admi- námica del paciente (precarga, contractilidad y re-

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sistencias vasculares sistémicas), facilitando de este


modo la detección inmediata de cambios hemodiná- Ácido láctico (mEq/l)
micos, el tratamiento precoz y la evaluación en 7
tiempo real de la respuesta al mismo. Las medicio- p < 0,001
6
nes de gasto cardíaco obtenidas mediante esta sonda
se correlacionan aceptablemente con otras técnicas 5
de monitorización y su empleo intraoperatorio en 4
pacientes quirúrgicos conlleva un aumento en la su-
pervivencia20. 3
Las principales limitaciones de este sistema de 2
monitorización son fundamentalmente las arritmias 1
cardíacas y las malformaciones o dificultades que
impidan la inserción de la sonda a través del esófa- 0
go. Asimismo, se requiere un período mínimo de Inicial 2 horas 12 horas
aprendizaje para que las mediciones obtenidas sean Vivos Fallecidos
fiables, aunque este período de entrenamiento no es
mucho mayor que el de otras técnicas convenciona-
les de monitorización. Queda aún por determinar la Figura 2. Evolución de los niveles de ácido láctico en 62 pacien-
utilidad práctica de esta técnica en los pacientes de tes con sepsis grave. Se comparan los grupos de supervivencia y
se observa diferencia significativa de los niveles de ácido láctico
UCI y concretamente en los sépticos graves. a las 12 horas. Med Intensiva 1997;21S:22.

PERFUSIÓN/OXIGENACIÓN TISULAR
La obtención de los objetivos hemodinámicos an-
regional de O2 por ser la mucosa intestinal, debido a
tes citados, aunque imprescindible, no asegura una
su característica vascularización, muy sensible a la
adecuada perfusión y oxigenación tisular. De forma
inestabilidad hemodinámica y propensa al desequili-
indirecta y fácil podemos valorar en la clínica el es-
brio entre la oferta y la demanda de O2. Por otra par-
tado de perfusión mediante la diuresis horaria, el re-
te, su alta actividad metabólica, la importante activi-
lleno capilar, la temperatura de la piel, la existencia
dad inmunológica y su función "barrera" se ha
de livideces o el estado mental del paciente. La utili-
relacionado con el origen del fallo multiórgano.
dad de la SvmO2 como índice de perfusión global no
La hipercapnia tisular es un fenómeno universal
ha sido demostrada, siendo más bien un índice de
de los tejidos hipóxicos por hipoperfusión durante
los cambios del gasto cardíaco.
los estados de shock. La tonometría gástrica consiste
en la monitorización del pH de la pared gástrica me-
Determinación de ácido láctico diante su determinación a través de la ecuación de
Henderson-Hasselbalch. Su utilización como indica-
Los niveles de ácido láctico están aumentados
dor temprano de disoxia regional y predictor de
con frecuencia en los pacientes sépticos y, sin em-
mortalidad ha sido referenciado en la bibliografía,
bargo, este hallazgo se considera inespecífico. Ade-
pero sin embargo no se ha demostrado su utilidad
más de aumentar como consecuencia de la hipoxia
como guía de tratamiento en el shock séptico22.
celular y metabolismo anaerobio, otros factores
como el hipermetabolismo, el déficit de piruvato
deshidrogenasa y la disminución del aclaramiento
Capnografía sublingual
hepático, pueden aumentarlo, y todos ellos se pue-
den dar en la sepsis grave. El cociente láctico/pirú- Recientemente se ha determinado que el descenso
vico mayor de 15 es más adecuado que la determi- de flujo sanguíneo a nivel sublingual es paralelo al
nación aislada de ácido láctico para diferenciar la observado en el territorio mesentérico en situación
hiperlactacidemia por hipoxia, del aumento de la de shock, y que la determinación de PCO2 sublin-
glucólisis aeróbica en situaciones de gran estrés me- gual (PSLCO2) se correlaciona significativamente
tabólico, como es la sepsis grave. A pesar de su con la PCO2 de la mucosa gástrica. La facilidad de
inespecificidad, la persistencia de niveles altos de abordaje y determinación hace que sea una técnica
lactato ha sido descrito como un buen marcador pro- no invasiva, y ha despertado gran atención como
nóstico metabólico21 (fig. 2). técnica de monitorización de la disoxia regional. Se
ha mostrado como un buen indicador pronóstico, so-
bre todo la diferencia entre la PCO2 sublingual y la
Monitorización regional de oxígeno
PCO2 arterial medidas simultáneamente (PSLCO2-
La inexistencia de un trastorno en la perfusión PaCO2). Su utilización como objetivo terapéutico, al
global no descarta la presencia de alteraciones re- igual que la tonometría gástrica, en los pacientes
gionales (disoxia regional), por lo que su conoci- con shock séptico no ha sido demostrada en estudios
miento sería de gran ayuda para prevenir la disfun- clínicos amplios, pero la facilidad de utilización y la
ción orgánica. La monitorización de la perfusión ausencia de algunas de las limitaciones de la tono-
esplácnica ha sido el objetivo de la monitorización metría gástrica aumentan sus expectativas23.

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TRATAMIENTO por la supraestimación derivada del aumento de pre-


sión transmural. La PAPo hasta 18 mm Hg4. Es inte-
Las guías de tratamiento coinciden en que el pri- resante tener en cuenta que muchos pacientes ten-
mer paso debe ser una administración de volumen drán una patología abdominal, quirúrgica o no, que
precoz e intensa. Posteriormente, si no se consigue aumente la presión intraabdominal (PIA). Es obliga-
normalizar la presión arterial, se debe administrar un torio ante esta situación medir la PIA mediante una
fármaco vasoconstrictor. sencilla técnica a través de la sonda vesical, porque
si está aumentada, parte de esa presión se transmite
al tórax disminuyendo el retorno venoso, la precar-
Volumen
ga, el gasto cardíaco y la PAM, y supraestimando la
Analizando el estudio de Rivers et al9 se observa precarga y el gradiente hidrostático transcapilar por
que la administración de líquidos fue superior en el las cifras de PVC y PAPo, ya que eleva la presión
grupo optimizado (+ 1,5 l de media). Por tanto, una cero de referencia24. Por tanto tendremos que tener
rápida e intensa administración de volumen contri- en cuenta esta supraestimación y aumentar el nivel
buye a la disminución de mortalidad. de seguridad de la presión de llenado e incluir otros
La primera incógnita es determinar qué tipo de lí- parámetros complementarios como el índice de vo-
quidos se debe utilizar, cristaloides o coloides. Des- lumen telediastólico global, medido mediante la téc-
graciadamente en el trabajo de Rivers el tipo de lí- nica de termodilución transpulmonar17.
quido se dejó a criterio del investigador. Ambos
tipos de soluciones son utilizadas en la actualidad,
Vasopresores
no existiendo diferencia significativa a favor de nin-
guno de los dos tipos en los trabajos publicados3-5. Tras la adecuada repleción de volumen, y si no se
Aunque no se han comunicado diferencias en los re- ha conseguido el objetivo de perfusión deseado, el
sultados entre coloides y cristaloides, la administra- siguiente escalón debe ser la utilización de fármacos
ción de los primeros necesita de 2 a 4 veces menos con efecto vasoconstrictor, siendo aconsejable reali-
volumen que los segundos, con el consiguiente aho- zar la monitorización de la presión arterial de forma
rro de tiempo de infusión4. En cuanto al suero salino invasiva5. La utilización de un fármaco vasocons-
hipertónico no existen pruebas por ahora que justifi- trictor induce a pensar en su potencial efecto deleté-
quen su utilización en el shock séptico. reo sobre la distribución de flujo, concretamente a
En los pacientes en shock séptico se aconseja nivel mesentérico y renal. Así, a pie de cama mane-
mantener niveles de hemoglobina entre 8-10 g/dl jamos el principio de utilizar ampliamente el volu-
(28%-30% de hematocrito), no aconsejando trans- men y la menor dosis de noradrenalina que nos per-
fundir hasta los 7 g/dl si no existen problemas en el mita conseguir una PAM > 65 mmHg. Sin embargo,
TO23-5. Por encima de esta cifra no se han demostra- se han publicado estudios no controlados que no en-
do ventajas y sí complicaciones derivadas del au- cuentran efectos desfavorables con el tratamiento de
mento de la viscosidad e inmunodepresión. Durante noradrenalina en pacientes sépticos graves4,5.
la administración de líquidos se espera un descenso La noradrenalina es una catecolamina natural con
de la hemoglobina de entre 1 y 3 g/dl4. un potente efecto α-adrenérgico y un pronunciado
Los volúmenes deben administrarse de forma rá- efecto ß-adrenérgico. Por tanto, es un potente vaso-
pida, en forma de "carga" cada 15-30 minutos. Para constrictor que eleva la presión arterial y la poscarga
los cristaloides el volumen de las cargas se reco- cardíaca, y aumenta la contractilidad cardíaca sin im-
mienda de 500 ml, de los que sólo permanecen el portantes variaciones de la frecuencia cardíaca. Es un
10%-20% en el compartimento intravascular a partir fármaco de probada eficacia, solo o acompañado de
de la primera hora. Por otra parte, los coloides se ad- otros vasoactivos3-5. Las dosis son muy variables,
ministrarán mediante cargas de 250 ml. Un litro de desde 0,01 µg kg-1min-1 a 3,3 µg kg-1min-1, aunque las
coloide aumenta el volumen plasmático de 700 a dosis medias oscilan entre 0,2 y 1,3 µg kg-1min-1. La
1.000 ml, de los que el 40% se mantienen intravas- noradrenalina aumenta las resistencias vasculares pe-
cularmente a las 24 horas. Durante las 24 primeras riféricas y la PAM, con pequeños cambios sobre la
horas las necesidades de aporte de volumen pueden frecuencia cardíaca y el gasto cardíaco. El efecto so-
oscilar entre 6 y 10 litros, de los cuales una gran bre el gasto cardíaco en los pacientes puede ser va-
parte se alojará en el intersticio, sobre todo si lo que riable, dependiendo de que predomine el aumento de
se ha administrado son cristaloides3-5. la poscarga o el efecto inotropo positivo.
Tras cada carga debe monitorizarse el objetivo te- Al contrario que en otros tipos de shock, en los
rapéutico (PAM, signos de hipoperfusión, SvcO2, que la noradrenalina tiene un marcado efecto vaso-
gasto cardíaco) y el nivel alcanzado en las presiones constrictor renal en detrimento de la perfusión renal,
límites de seguridad (PVC, PAPo). La infusión de en la sepsis grave, al normalizar la resistencia vas-
líquidos tiene como objetivo restaurar la presión de cular, mejora el flujo renal y el nivel de filtración4,5.
flujo normal, lo que se debe conseguir con una PAM En pacientes en shock séptico en los que la noradre-
entre 65-75 mmHg. La PVC como guía de la admi- nalina corrige la hipotensión, no se han encontrado
nistración de líquidos debe llevarse hasta un valor lí- efectos perjudiciales sobre la perfusión y oxigena-
mite de 12 mmHg en ventilación espontánea y en ción intestinal, mejorando los parámetros si se aso-
pacientes ventilados mecánicamente hasta 15 mmHg, cia a dobutamina4,5. De esta forma se considera a la

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noradrenalina como un fármaco vasoconstrictor se- como la dilatación ventricular y la disminución de la


guro en los pacientes sépticos debidamente replecio- poscarga. Habitualmente, la reposición de líquidos
nados de volumen. es suficiente para normalizar el gasto cardíaco y el
La adrenalina no se debe utilizar a no ser que fra- tratamiento con noradrenalina no lo modifica sus-
casen otros agentes vasoconstrictores5. La dopamina tancialmente. Sin embargo, en el caso de encontrar
es el precursor natural de la noradrenalina, tiene valores bajos de gasto cardíaco (< 2,5 l/min) se re-
múltiples efectos clínicos dosis-dependientes, según comienda añadir al tratamiento fármacos inotropos.
los receptores sobre los que actúe. Se ha descrito al- La dobutamina, el fármaco inotrópico más utili-
teración de la circulación esplácnica. También tiene zado, es una amina simpaticomimética que actúa,
efectos sobre la prolactina y las hormonas tiroideas, principalmente, aumentando la contractilidad car-
que pueden tener repercusión sobre la respuesta sis- diaca mediante la estimulación ß-adrenérgica. Peri-
témica a la agresión4. Por estas razones, y sobre todo féricamente tiene efectos ß2 y α1, que son contra-
porque la noradrenalina posee mayor efecto terapéu- puestos, resultando ligeramente vasodilatadora.
tico3-5, la primera elección de vasoconstrictor en la Puede inducir taquicardia y arritmias. Numerosos
sepsis debe ser la noradrenalina. estudios han demostrado la eficacia de la dobutami-
En los últimos años ha tomado relevancia la utili- na en el shock séptico al conseguir aumentar el gas-
zación de vasopresina como vasopresor. Es un fár- to cardíaco5. También se ha descrito su efecto bene-
maco utilizado ampliamente en otras indicaciones, ficioso a nivel del lecho esplácnico, sola o en
como la diabetes insípida y las varices esofágicas, combinación con la noradrenalina. La dosis de ad-
siendo etiquetado de fármaco seguro. No tiene efec- ministración varía entre 2 y 28 µg kg-1min-1.
tos metabólicos directos, pero por la relación con el
eje hipotalámico-hipofisario-adrenal, es secretagogo
Corticoides
de hormona adrenocorticotrópica (ACTH) y aumen-
ta finalmente los niveles de cortisol. Los corticoides tienen un importante papel en la
Los estudios sobre la efectividad de la vasopresi- contractilidad cardíaca y en la regulación del tono
na en el shock séptico son escasos y se limitan a es- vascular normal, ya que intervienen en la síntesis de
tudios observacionales, en los que se emplea la va- catecolaminas endógenas, en la síntesis y función de
sopresina como tratamiento de rescate en pacientes los receptores adrenérgicos y en el bloqueo de los
catecolamin-dependientes, consiguiendo mejoría de receptores de la óxido nítrico sintetasa. Los sínto-
la presión arterial e incremento de la diuresis. Las mas de su déficit, la insuficiencia suprarrenal, son
cifras de mortalidad en estos pacientes oscilan entre inespecíficos, particularmente en pacientes graves y
el 44% y el 85%, difícil de comparar pues se trata de así, el cuadro hemodinámico de la insuficiencia su-
estadios de shock muy tardíos. Sólo existen tres es- prarrenal puede ser superponible al shock séptico.
tudios aleatorios y controlados con un total de 44 Los pacientes sépticos con insuficiencia suprarrenal
casos. Dos de ellos compararon la vasopresina con no responden adecuadamente a la administración de
la noradrenalina y en el tercero se sustituyó la nora- líquidos y son dependientes de vasopresores. En
drenalina por vasopresina a dosis altas, sin encontrar nuestra UCI se realizó un estudio en el que se revi-
beneficio en la mortalidad25. También se han publi- saron 34 autopsias de fallecidos por shock séptico
cado series de casos de pacientes en shock séptico encontrándose alteraciones de las glándulas supra-
en estadios avanzados tratados con derivados sintéti- rrenales en 22 pacientes (67%), siendo la necrosis
cos de la vasopresina, como la terlipresina o la des- suprarrenal la lesión más frecuente. Annane et al
mopresina con resultados prometedores. Por otra han señalado una importante incidencia de disfun-
parte, se han descrito con el tratamiento conjunto de ción suprarrenal (76%) en su estudio sobre 300 pa-
noradrenalina y vasopresina frecuentes lesiones is- cientes en shock séptico. Por esta razón, es preciso
quémicas de la piel, principalmente en los dedos, el asegurar una función suprarrenal adecuada capaz de
tronco y en la mucosa de la lengua. satisfacer las necesidades de cortisol y, de lo contra-
Hasta que no se realice un estudio bien diseñado rio, iniciar un tratamiento sustitutivo26.
y con adecuada muestra de pacientes, no sabremos El shock séptico es un estado de hipoperfusión
cuál es el lugar de la vasopresina en el tratamiento grave de etiología infecciosa que se define por la
del shock séptico. Mientras tanto, dado su papel en presencia de hipotensión arterial. El patrón hemo-
la fisiopatología del shock séptico y los indicios fa- dinámico es normalmente hiperdinámico, aunque
vorables actualmente disponibles como tratamiento, en su evolución puede presentarse como hipodiná-
se podría utilizar en pacientes dependientes de altas mico.
dosis de noradrenalina como medida de rescate y en Para guiar el tratamiento se establecen unos obje-
perfusión continua a dosis de 0,01-0,04 unidades/ tivos de perfusión global hemodinámicos y metabó-
min, para evitar efectos secundarios. licos de los que se consideran especialmente útiles
la presión arterial, el gasto cardíaco, el ácido láctico
y la diuresis. Actualmente, no disponemos del méto-
Inotropos
do idóneo de monitorización de la disoxia regional
La función cardíaca suele estar afectada en la sepsis con validez clínica práctica. La monitorización de
grave, pero el gasto cardíaco se mantiene en valores las presiones de llenado, la PVC y la PAPo, nos fa-
normales o altos por mecanismos de compensación cilita la consecución de los objetivos, proporcionan-

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Figura 3. Criterios de shock séptico. PVC: presión venosa central; SvO2: saturación venosa de oxígeno; PAM:
presión arterial media; PEEP: presión positiva al final de la espiración; PIA: presión intraabdominal; PAPo:
presiones de enclavamiento en la arteria pulmonar; GC: gasto cardíaco; ECO: ecocardiografía; PiCOO: termo-
dilución transpulmonar simple; VS: volumen sistólico; IC: índice cardíaco; VM: ventilación mecánica; CAP: ca-
téter de arteria pulmonar.

do unos valores de presión límites de seguridad para 2. Martin GS, Mannino DM, Eaton S, Moss M. The epidemio-
logy of sepsis in the United Stated from 1979 through 2000. N
evitar el edema pulmonar. Otros parámetros como Engl J Med. 2003;348:1546-54.
los volúmenes, junto con las presiones de llenado, 3. Dellinger R. Cardiovascular management of septic shock.
nos informan verazmente del estado de precarga. Crit Care Med. 2003;31:946-55.
Se han descrito la utilidad de las variaciones de 4. Task force of American college of critical care medicine.
determinados parámetros (volumen ventricular, pre- Practice parameters for hemodynamic support of sepsis in adult
sión de pulso y volumen sistólico), en relación con patients in sepsis. Crit Care Med. 1999;27:639-60.
el ciclo respiratorio, con el objeto de identificar a los 5. Vincent JL. Hemodynamic support in septic shock. Intensi-
ve Care Med. 2001;27:80-92.
"no respondedores" a la administración de volumen 6. Shoemaker WC, Appel PL, Kram HB, Waxman K, Lee TS.
e iniciar en ellos los vasoactivos precozmente. Prospective trial of supranormal values of survivors as therapeu-
El tratamiento hemodinámico se inicia con aporte tic goals in high-risk surgical patients. Chest. 1988;94:1176-86.
de líquidos de forma intensa y precoz hasta conse- 7. Hayes MA, Timmins AC, Yau EH, Palazzo M, Hinds CJ,
guir una PAM que "garantice" la perfusión tisular. Watson D. Elevation of systemic oxygen delivery in the treat-
Posteriormente, si no se obtiene este objetivo, se ini- ment of critically ill patients. N Engl J Med. 1994;330:1717-22.
cian los vasopresores, preferentemente la noradrena- 8. Gattinoni L, Brazzi L, Pelosi P, Latini R, Tognoni G, Pe-
senti A, et al. A trial of goal-oriented hemodynamic therapy in
lina. Es conveniente la monitorización continua del critically ill patients. N Engl J Med. 1995;333:1025-32.
gasto cardíaco con cualquiera de las técnicas dispo- 9. Rivers E, Nguyen B, Havstad S, Ressler J, Muzzin A, Kno-
nibles a fin de detectar precozmente su descenso e blich B, et al. Early goal directed therapy in the treatment of se-
iniciar el tratamiento con dobutamina (fig. 3). vere sepsis and septic shock. N Engl J Med. 2001;345:1368-77.
La insuficiencia suprarrenal es muy frecuente en 10. Tuchsmidt J, Frield J, Astid M, Rackow E. Elevation of
estos pacientes y su implicación en la función car- cardiac output oxygen delivery improves outcome in septic shock.
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diovascular obliga a diagnosticarla y tratarla.
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