El planteamiento del problema es la fase inicial en todo proceso investigador y
es además la más importante, porque determina y encauza todas las acciones que habrán de seguirse posteriormente. Un planteamiento mal delimitado hará engorrosa e interminable la búsqueda de datos “Es común decir que no hay investigación sin un “problema” y que un problema bien planteado es mejor que cualquier solución gratuita. Pero ¿de qué estamos hablando? ¿Qué es un “Problema”? Analicemos las siguientes definiciones, tomadas como muestra, y decidamos luego hasta qué punto es claro o evidente el sentido de la palabra: El Problema o la proposición problemática es una proposición principal que enuncia que algo puede ser hecho, demostrado o encontrado. Problema es una proposición práctica demostrativa por la cual se afirma que algo puede o debe ser hecho. Problemas son proposiciones demostrativas que necesitan pruebas o son tales como para expresar una acción cuyo modo de realización no es inmediatamente cierto. Problema es el desacuerdo entre los pensamientos y los hechos o el desacuerdo de los pensamientos entre sí (Mach). Una buena formulación del problema implica necesariamente la delimitación del campo de investigación, establece claramente los límites dentro de los cuales se desarrollará el proyecto. Cuando esto ocurre las probabilidades de <<no perderse>> en la investigación tienden a maximizarse. Los criterios para un planteamiento adecuado son: 1. El problema debe expresar una relación entre dos o más variables. 2. El problema debe estar formulado claramente y como pregunta. 3. El planteamiento implica la posibilidad de prueba empírica, es decir debe poder observarse en la realidad. El planteamiento-delimitación del tema o problema se fundamenta en lo siguiente: Todo problema no surge aislado, está condicionado por una multiplicidad y variedad de factores, forman parte de una totalidad más amplia: histórica, social, económica, política, ecológica, etc. El problema constituye “el punto de partida” pero también es el “punto de llegada” y entre ambos extremos se esconde una gama de aspectos teóricos y empíricos que hay que identificar. El planteamiento-delimitación del problema es el juego de la totalidad global versus la totalidad parcial, por cuanto que el problema o el fenómeno objeto de estudio es una totalidad global en sí mismo, constituido por totalidades parciales que lo caracterizan; pero también más amplio de los elementos de la realidad en la cual está inmerso. En dicha vinculación se encuentran relaciones de contradicción, determinación, subordinación, simplicidad o complejidad, etc. Tan importante es este aspecto en el diseño, que de un adecuado planteamiento-delimitación del tema o problema, depende el éxito de toda investigación; porque en esta parte es donde se encuentra el resumen de los componentes y características del tema o problema estableciendo la dirección del estudio a realizar.
La delimitación de la investigación es un proceso que implica, bajar de los
niveles abstractos, a los más concretos y operativos en la investigación. Para ello se debe tomar en cuenta lo siguiente: Señalar los límites teóricos del problema mediante su conceptualización Fijar los límites temporales de la investigación Establecer los límites espaciales de la investigación Situar el problema en el contexto socioeconómico, político, histórico y ecológico respectivo