CAPÍTULO 1.

INTRODUCCIÓN

1.1.Generalidades
1.1.1. Contaminación atmosférica

Existen varias definiciones de contaminación atmosférica de las cuales se citarán

a continuación únicamente dos:

Kennet (1992) define a la contaminación como la presencia en la atmósfera

exterior de uno o más contaminantes o sus combinaciones, en cantidades tales y con

tal duración que sean o puedan afectar la vida humana, de animales, de plantas o de la

propiedad, que interfiera el goce de la vida, la propiedad o el ejercicio de las

actividades.

Tulas (2003) define a la contaminación como la presencia de sustancias en la

atmósfera, que resultan de actividades humanas o de procesos naturales, presentes en

concentración suficiente, por un tiempo suficiente y bajo circunstancias tales que

interfieren con el confort, la salud o el bienestar de los seres humanos o del ambiente.

Según la Universidad de Murcia (2009), la atmósfera o lo que es la envoltura de gases que

se forma por la desgasificación que sufrió el planeta durante su proceso de enfriamiento desde

las primeras etapas de su formación, así como también formado por cantidades de gases y

polvo emitidos por los volcanes y de fuentes antropogénicas mediante la quema de

combustibles fósiles y la deforestación. Formado mayoritariamente por nitrógeno, oxígeno,

argón, vapor de agua y dióxido de carbono. Los restantes componentes se encuentran en partes

por millón, como por ejemplo el neón, criptón, xenón, metano, etc. Entre sus funciones, tiene

el de mantener el balance de la radiación solar que ingresa y sale de la tierra, actuar como filtro

protector y regular la variación del albedo (reflejo de la radiación por la superficie terrestre),

efecto invernadero y la circulación general del aire. Es así como las cosas de los movimientos

de las.

Según Ross (1972), la contaminación del aire se ha definido de muchas maneras, pero

de forma general, se trata de la adición a nuestra atmósfera de cualquier material que tenga

un efecto perjudicial en los seres vivos. Ya sea que la introducción haya sido de forma

natural o no, pueden cambiar de forma significativa la composición de la atmósfera o puede

disminuir la cantidad de oxígeno. Existen muchas clases de contaminantes que no solo

pueden afectar el contenido de oxígeno en el aire, sino que al ser inhalados puede llegar

hacer tan nocivos para la salud.

Entre las diferentes fuentes de contaminantes, entre ellos tenemos el transporte,

calefacción doméstica, la producción de energía eléctrica, la incineración de desechos y la

combustión de las industrias y emisiones de estos procesos.

Aunque no existan muchos estudios sobre los efectos de la contaminación en los animales,

no es difícil suponer que gases como el monóxido de carbono, el anhídrido sulfuroso o el

bióxido de carbono provocan efectos en la constitución fisiológica; además que es posible que

muchas especies propias de zonas cercanas a las grandes ciudades, han ido disminuyendo,

desapareciendo o desplazándose hacia otros sitios. Un estudio en los Estados Unidos,

demostró que los cuerpos de aves y mamíferos que se encuentran cerca de zonas urbanas,

contenían altos porcentajes de plomo.

 Así también hay una gran afectación a la vegetación, el departamento de agricultura de

los Estados Unidos, el cual realiza un informe anual, declaró que existieron aproximadamente

50000000 de anuales de pérdidas.