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CATEDRÁTICO
CESAR AUGUSTO AGUIRRE LEÓN
ASIGNATURA
FILOSOFÍA DE LA CIENCIA
Introducción
Mario Bunge nos ilustra cómo vivimos rodeados de objetos desarrollados a partir de sistemas
de ideas generadas por el conocimiento racional, sistemático, verificable, refutable, falible,
que bajo la rigurosidad de la investigación científica da inicio a la reconceptualización del
mismo en pro de la generación de bienestar. Este proceso que se alimenta de la creatividad,
la producción de ideas tratadas con características particulares y puestas al servicio de la
transformación del conocimiento en tecnologías, artefactos o herramientas sociales que
concretan y precisan el objeto de estudio, recreando lenguajes artificiales, inventando
símbolos, erradicando discrepancias, verificando, refutando, reconociendo hallazgos,
estimulando nuevas teorías, es decir, generando conocimiento como actividad propia de la
ciencia, inacabada y tendiente a mejorar como el propio ser humano.
A su vez nos muestra la ciencia al servicio de la humanidad como bien social, provisorio de
ideas que se combinan, se niegan, se convierten en fuente de descubrimientos, hallazgos,
experimentos que al ser auténticos abren el camino a nuevas teorías.
A la par el autor nos dice que en matemática se usan herramientas para la reconstrucción de
relaciones complejas que se interpretan en términos de hechos (enunciados fácticos). En este
proceso se recurre a la lógica formal y específicamente a la lógica proposicional bivalente
para derivar en pensamientos (entidades psíquicas) que se justifican por el éxito, la
conveniencia o la ignorancia, superponiendo reglas de correspondencia. Debido a que se
pueden dar ilimitadas interpretaciones (modelos), usando sistema de proposiciones que
pueden ser verdaderos o falsos dentro del mismo y cuya conclusión se presenta en teoremas
que respetan la coherencia lógica. Estas observaciones relacionadas con la ciencia formal
se recrean con el método que permite la demostración mediante definiciones, postulados,
reglas de inferencia deductiva, la que asegura que sus premisas garantizan la verdad de sus
conclusiones proporcionando criterios de corrección altos y tiene éxito si sus premisas
proporcionan apoyo completo e indudable para la conclusión. La inferencia deductiva es un
todo o nada que procede de lo general a lo particular.
En contraste con las ciencias formales están las ciencias fácticas, aquellas que parten de los
hechos, que requieren observación, verificables por experimentos u observación; si son
indirectamente verificados se llega a hipótesis general y directamente por consecuencias
singulares de las hipótesis. Otra de sus particularidades es la necesidad de emplear símbolos
interpretados, que para confirmar sus conjeturas requieren de la experimentación, pruebas de
verificación empírica conduciendo al conocimiento fáctico. De esta forma para aseverar que
un enunciado probablemente sea verdadero requiere datos empíricos, observaciones,
experimentos que permiten la inferencia científica como red de inferencias deductivas
(demostrativas y probables).
Otro rasgo del conocimiento racional es la ausencia de sensaciones, parte de hechos y vuelve
a ellos independiente del valor emocional. Este conocimiento está constituido por conceptos,
juicios y raciocinios que al usar el sistema de ideas se deben combinar con reglas lógicas
como conjunto ordenado de proposiciones (teorías)
Ahora bien, debemos considerar las características de la ciencia fáctica que coloca al servicio
de la investigación para alcanzar la elaboración teórica:
Es fáctica porque describe los hechos tal y como son.
Trascendental no aceptan nuevos hechos a menos que sean auténticos.
Es analítica, intenta descubrir los elementos que componen un totalidad, descubrir el todo
a partir de las partes interconectadas, por medio de la descomposición, la investigación
comienza con descomposición de objetos en partes más simples.
Es especializada como consecuencia del enfoque analítico, por ende la multiplicidad de
técnicas y diversas divisiones de la ciencia.
Es clara y precisas así las definiciones guardan igual características precisas, exactas,
libres de error, contrarias a la vaguedad y superficialidad.
Es comunicable porque es expresable, público e informativo.
Verificable a condición y consecuencia del análisis, porque es necesariamente empírico.
Es metódica porque procede conforme a las reglas y técnicas que han resultado eficaces
en el pasado.
Sistemática porque establece conexiones lógicas entre sí, lo que quiere decir e implica es
un saber fundado, ordenado y coherente.
Es general, sigue las pautas generales y ubica los hechos particulares en esquemas
amplios.
Es legal porque busca las leyes y las aplica en medida esencialista.
Explicativa, no solo describe de forma detallada sino que busca el porque para explicar
leyes científicas y principios.
Es predictiva, aplicada bajo reglas empíricas pasadas y futuras.
Abierta porque no reconoce barreras basadas en la experiencia a priori o a posteriori que
limiten el conocimiento, las nociones no son finales se encuentran en movimiento.
Útil en la medida que se emplea en la formación de las concepciones del mundo que se
constituyen como fundamento de la tecnología.
La ciencia es valiosa como una herramienta construida por el hombre para poder domar a la
naturaleza y remodelar a la sociedad, Como se ha dicho anteriormente, toda teoría debe ser
resistente a su refutación, sin embargo, una teoría que no puede ser refutada por ningún hecho
concebible, no es científica. La imposibilidad de refutación de una teoría científica no es una
virtud sino un vicio.
El conocimiento científico requiere dar razón de sus postulados y enunciados fácticos; de sus
hipótesis y sus teorías, y aún de sus principios más generales. La verdad es una cuestión de
proposiciones y, para ser científicas, deben ser verificadas. La verificación implica la
confrontación de las proposiciones con otras, así como procedimientos empíricos tales como
el recuento o la medición.
Ahora bien, no todas las proposiciones son verificables, las hay nominales o realizadas sobre
fenómenos sobrenaturales que a pesar de ser reales no cuentan con mecanismos de
verificación.
En el caso de los métodos teóricos, la constatación del comportamiento real se da con base
a la generación de modelos conceptuales de los hechos, dentro del marco más amplio de un
determinado cuerpo teórico, estos apuntan a la descripción de los mecanismos que no siempre
corresponden con la realidad perceptible en forma directa, sino sobra algunas relaciones
teóricas postuladas, con cierto grado de confirmación bien sea empírica o por contrastación
con otras teorías.
Las hipótesis científicas pueden tener soporte no necesariamente empírico, mientras que los
soportes empíricos y racionales de las hipótesis fácticas son objetivos, los soportes
extracientíficos son, en gran medida, materia de preferencia individual, de grupo o de época.
En este sentido, el método experimental no agota el proceso que conduce a la aceptación de
una suposición fáctica.
CONCLUSIÓN
La ciencia trata con entes reales –hechos o fenómenos- pero también con entes
extracientíficos cuando se trata de dar soporte a hipótesis y teorías. Tales entes son
psicológicos y culturales.
La contrastación empírica o con otras teorías viabiliza la verificabilidad del conocimiento
científico. En el caso de las ciencias formales, su verificabilidad se da en términos de
demostración.
Desde una perspectiva más general – y la búsqueda de mayor generalidad es lo que dinamiza
el desarrollo de la matemática, es decir, hablar de verdad relativa –y, por tanto, de verdad
absoluta- en ciencias formales, particularmente en Matemáticas, no parece ser adecuado.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
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