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La Neumatología.

Por Nicolas Otero Rubiano

INTRODUCCION

Para empezar a hablar sobre el tema del espíritu santo o pneumatología, hay que tener en cuenta
la terminología que aparece en la biblia, puesto que uno es el termino hebreo Ruah y otro es el
termino griego Neuma, los dos hacen referencia al Espíritu de Dios. Ahora bien, Ruah es más
utilizado en el Antiguo testamento, mientras que Pneuma lo es en el Nuevo Testamento, el
primero por la tradición hebrea en los libros canónicos, y el segundo por la tradición Griega, ello va
a influir en la misma comprensión del termino aun cuando expresan la misma realidad y divinidad.

Cuando se habla en el Antiguo Testamento de Ruah se hace referencia a: soplo, aliento, aire,
viento, alma. Pero hay que tener en cuenta que “soplo” también aparece en el nuevo testamento.
Ruah en el antiguo testamento es entendido como la animación de un cuerpo, es aquello que lo
mueve, es la vitalidad. Por ello ya desde el libro del Génesis se observa desde la creación el influjo
que tiene el espíritu, pero no solo que se queda en un ámbito creacionista sino que continua
manifestándose a través de las promesas, las cuales en diversas ocasiones se llevan a cabo a través
de teofanías, teniendo un gran influjo en la ley del pueblo de Israel así como en toda la acción
profética, la cual siempre va a estar marcada por el espíritu de Dios.

En el nuevo testamento la acción del espíritu santo, esta en relación a que el pueblo de Dios
conozcan la vida del hijo, del Cristo, por ello gran parte de los textos están en mira a ello, ya que la
creación, las promesas, la ley y la acción profética tendrán pleno cumplimiento en el Mesías, en el
Hijo de Dios, el cual cumple la promesa de enviar a un paráclito para que acompañe a la iglesia
hasta su regreso.

En el trascurso de la historia de la iglesia luego de la resurrección del Señor y de pentecostés


surgen varias herejías y entre ellas se destaca la de la divinidad del Espíritu Santo, con lo cual
Teodosio convoca un concilio en la ciudad de Constantinopla donde se tratara este tema. Ahora
hoy luego del ultimo concilio se observara el influjo del Espíritu santo en este encuentro
ecuménico.

1. EL ESPIRITU EN EL ANTIGUO TESTAMENTO


1.1. Como acción creadora.

En el libro del Génesis los capítulos 1 y 2 muestran la acción creadora, allí se observa como el
Espíritu-soplo se convierte en el que da la animación, la vida de la creación; “esta animación del
Espíritu es la que actúa y hace actuar al hombre” (Congar, 1991, pág. 30)1, puesto que para el
pensamiento judío la categoría de espíritu va a estar marcada por la fuerza, la energía y el
principio de acción, por ello se recuerdan las palabra de Dios a Noé, 6, 3 “No permanecerá para

1 Congar, Y. El Espíritu Santo. Ed. Herder, 1991.


siempre mi espíritu en el hombre, porque no es más que carne”. Pero también se debe tener en
cuenta que este aliento, soplo, es el que comunica la vida en el hombre, Ex. 15, 8.10.

Para el pueblo de Israel no piensa que el espíritu de Dios este solo en los acontecimientos
extraordinario ni incomprensibles sino que puede llegarse a pensar que esta en todos los
acontecimientos de la vida del pueblo, por ello se resalta la experiencia del soplo como una
experiencia donde Dios se deja sentir, así el salmo 147, 18. Describe lo que ocurre cada primavera,
cuando el deshielo hace correr las aguas: “Hace soplar viento (el espíritu) y manan las aguas”. En el
viento cálido de la primavera, el israelita ve la actuación de Dios y de su Espíritu que derrite el
hielo y la nieve. Lo mismo dice Is 27, 8 de los enemigos de Dios: “echándoles con un soplo
impetuoso en día de viento solano” (Schweizer , 1984, pág. 28)2.

“Hay una actuación en la naturaleza que se puede medir y determinar como viento y tempestad;
pero esta actuación se concibe como la actuación de Dios mismo, la cual no puede, sin más,
determinar o medir.” (Schweizer , 1984, pág. 29)

Por ello se dice que para el pueblo de Dios hay cosas que son tan naturales y comprensibles que
no se requiere de una explicación ya que para ellos el relato de de la creación en el génesis es toda
una profesión de fe, donde se manifiesta el poder de Dios sobre la creación del mismo hombre.
“es el viento de Dios o el Espíritu de Dios el que subyace en el hacerse de la creación. El actúa en la
separación de la luz y de las tinieblas, del día y de la noche, de seco y del mar… Lo que se ha dicho
aquí en el principio de la biblia, se amplia en el libro de los salmos a todo el universo. “Por la
palabra de Yahvé fueron hechos los cielos, y todo su ejercito por el aliento de su boca 33, 6”
(Schweizer , 1984, págs. 29-30)

1.2. En los Profetas

En el simbolo de la fe de nicea-constantinopla se dice que el espiritu hablo por los profetas, y ello
parte de toda la expierncia que tuvo el pueblo de Israel, y que aparece en la antigua economia de
salvacion:

“Se atribuye la palabra profetica a un soplo de Dios, a una “inspiracion”, si no en los siglos IX-VIII
antes de jesucristo, al menos durante la época deuteronomista, pero de manera clara en el exilio,
especialmente en ezequiel, y posteriormente en el judaismo postexilico, en el judaismo helenistico
y en los rabinos. Jeremias no invoca jamas tal “inspiracion”” (Congar, 1991, pág. 34)

De los profetas nos vamos a centrar en tres solamente en Isaias, ezequiel y joel. En ellos aparece
de forma clara la experiencia del espiritu ya que en Is. Aparece la palabra ruah unas 40 veces,
mientras que en ezequiel aparece unas 46 veces, esto ya marca de entrada toda una experiencia
del espiritu de Dios.

Isaias, Ezequiel y Joel.

2 Schweizer, E. El Espíritu Santo. Ed. Sigueme, 1984.


En medio de la catastrofe que implica la caida del pueblo de israel, Isaias predice: “saldra un
renuevo del tronco de Jesé, un tallo de sus raíces brotará. Reposará sobre él el espiritu de yahveh,
espiritu de sabiduría y de inteligencia, espiritu de consejo y de fortaleza, espiritu de ciecia y de
temor de yahveh (Is. 11, 1ss) se trata del Mesías. Recibirá del Espiritu todos los dones
necesariospara reinar según la justicia” (Congar, 1991, pág. 35).

El soplo que aparece en el primer cantico del siervo en el deutero isaias, permite observar que es
para gobernar las naciones, con lo cual Dios busca realizar su plan. A través de su soplo se va a
llevar a cabo la realidad liberadora, ya obtenida en una primera ocacion con Moisés y ahora con la
salidad del exilio.

Con lo cual se va a comprender mejor el acontesimiento en el trito isaias cuando dice “el espiritu
del yahveh esta sobre mi, puesto que me ha ungido. Para dar la buena nueva a los humildes me
envio (Is. 61, 1)” (Congar, 1991, pág. 35)

Con Ezequiel se da la prediccion de la ruina de Jerusalén, la destruccion del templo y la


deportacion a babilonia. (Cf. Congar, 1991, pág. 36) Por ello se encontrará en este profeta el
anuncio de un cambio a partír de un nuevo espiritu. “Os rociaré con agua limpia y quedaréis
limpios; os limpiaré de todas vuestras manchas y de todos vuestros idolos. Os dare un corazon
nuevo, y pondré en vuestro interior un espiritu nuevo; quitaré de vuestro cuerpo el corazon de
piedra y os dare un corazón de carne. Pondré mi espiritu en vuetro interior para que procedáis
según mis leyes. (Ez. 36, 25-27).

Las pruebas dificiles hacen que los profetas aparescan en escena e interpreten los
acontesimientos, por ello llevaron a una vision del Espiritu (soplo) de Dios que purifica los
corazones, que penetra en la interioridad y santifica un pueblo de Dios. (Cf. Congar, 1991, pág. 36)
Esto traerá consigo una renovación en el mismo pueblo, con lo cual el caminar hacia la presencia
de Dios estará marcada por toda una experiencia del espiritu, que comunica vida y santidad para
Israel.

Con Joel se abre la puerta al universalismo del espiritu, ya que por medio de él se profetizará, se
soñará y se tendrá visiones (Joel 3, 1-2), este universalismo, no va a disgtiguir de personas ya que
el camino hacia Dios es para todos, el espiritu que él anuncia, desenderá sobre cada uno y
realizará una obra salvifica. Esto tendra cumplimiento con el anuncio de pedro sobre pentecostes
(Congar, 1991, pág. 37).

2. El espiritu santo en el nuevo testamento.

2.1 en los evangelios.

Con los evangelios da inicio a un nuevo tiempo escatologico, esto se encuentra de entrada en el
inicio del evangelio de Marcos, el cual deja ver de entrada que este tiempo se va a caracterizar por
la donacion del Espíritu sobre el pueblo de Dios con vocación universal (Cf. Congar, 1991, pág. 42).
Asi uno aspecto que va a resaltar en los evangelios seran el bautismo, la concepcion y la vida de
Jesús.
Dice congar que:

“En su bautismo por juan, Jesús es designado y consagrado como aquel por cuya palabra, sacrificio
y acción el Espírituentra en una historia como don mesianico y, al menos en arras, como don
escatologico. Sin duda el Espíritu había actuado con anterioridad y ya en la disposición antigua. Por
su mediación, María concibio a Jesús mismo, al que Lc 1, 35 nos presenta como “Hijo de Dios”,
refiriendo este titulo no a la preexistencia, sino a su concepción por el Espíritu. Sin embargo, ni
Lucas y ni Mateo, que nos hablan del nacimiento de Jesús, derivan de ese nacimiento el que Jesús
actura por el Espíritu y finalmente lo comunicara, sino que lo relacionan con su bautismo. Antes de
él, Jesús no aparece como obrando por la fuerza del Espíritu y sus compatriotas de Nazaret no
vieron anteriormente en él nada excepcional.” (Congar, 1991, pág. 42)

Esto muestra que toda la obra de Jesús, esta impregnada por la presencia del Espíritu de Dios.
Desde su concepción, pasando por el bautismo y realizando su obra salvadora, con lo cual se ve
que el espíritu es un acto de Dios, por medio del cual expresa su amor y engendra una union
correspondiente con él. (Cf. Congar, 1991, pág. 42).

Con el bautismo de Jesús se da una nueva minifestacion de Dios, los evangelios lo narran de
distintas formas, pero llegan al mismo punto. Mt 3, 17 “este es mi Hijo amado, en quien me he
complacido”; Mc 1, 11 dice “tu eres mi Hijo amado; en ti me he complacido” esto dice Congar “no
se trata de un llamamiento como en el caso de los profetas o de Pablo; estamos ante una
declaracion que resuena en la conciencia de Jesús, es la confirmación de una condición que califica
a Jesús en lo que es” (Congar, 1991, pág. 44). Es el envio de Jesús como Mesías ya anunciado
anteriormente en el profeta Is. 42, 1 “He aquí mi siervo a quien yo sostengo, mi elegido en quien
se complace mi alma. He puesto mi espíritu sobre él: dictará ley a las naciones”.

El acontesimiento de su bautismo, su encuentro con Juan el bautista, la venida del Espíritu sobre
él, la palabra que le acompaña, representa ciertamente un momento decisivo en la explicación de
la conciencia que él tuvo, en su alma humana, de su calidad de elegido, enviado, Hijo de Dios y
Siervo-cordero de Dios. Actualmente parece llegarse a un consenso en este punto: por la unión
hipostática, el Verbo o Hijo de “Dios” es el principio de existencia de Jesús y el sujeto metafisico de
atribución de sus actos, pero deja a su verdadera y plena humanidad el juego de sus facultades de
conocimiento y de voluntad.” (Congar, 1991, pág. 45).

Esto anterior deja entrever que con la venida del Espíritu Santo, Jesús emprende su ministerio
evangelico, un misniterio que va a estar marcado por el anuncio del reino de Dios a los más
necesitados, y que luego va a ser donado a los apostoles y a su Iglesia, para continuar con la obra
salvifica, la mision de Jesús., llevar un testimonio de salvacion para el mundo entero. Este va a
tener lugar el día de pentecostes.

2.2 en los hechos de los apostoles

“Para los Hechos de los apostoles, el espiritu santo es esencialmente el principio dinámico del
testimonio que asegura la expansión de la Iglesia.” (Congar, 1991, pág. 71). Lucas en su narracion
ubica la venida del Espiritu santo en la fiesta de pentecostes, con este acontesimiento, se va a dar
entonces el inicio de un nuevo templo en jesucristo, el cual por medio del Espiritu Santo dara
testimonio a todas las naciones.

Por lo tanto el Espíritu Santo ya presente en los apostoles jugara un papel muy importante dentro
de la comunidad cristiana ya: “Según los Hechos, el papel del Espíritu consiste en actulizar y
extender la salvacion, lograda en y por Cristo, por medio del testimonio. Siempre se atribuye la
salvación a Cristo. Se nos comunica “en nombre” de Cristo, es decir, por su virtud; él es quien la
realiza. El espíritu anima a sus discipulos para anunciarla. Guia su testimonio hasta en el detalle de
sus planes e itinerarios”. (Congar, 1991, pág. 72).

Si bien este papel del Espíritu Santo tiene una gran relevancia dentro de la historia de salvación,
los apostoles evidenciaron varios pentecostes, puesto que si bien el primero fue el mas
determinante, con el no se comprendio en su totalida la misión que se tenia que realizar, por ello
en este libro de los hechos se encuentran otros momentos de pentecostes de venida del espiritu
santo, tales como: jerusalen 2, 4.25-31; en Samaría 8,14-17; cesarea con cornelio 10, 44-48; 11,
15-17. E incluso en Efeso 19, 1-6. En cada uno de estos pasajes se da la manifestacion del Espíritu
Santo.

Asi con estos pasajes y teniendo en cuenta toda la narracion de los hechos de los apostoles, Lucas
afirma que Cristo da el Espíritu, lo cual trae un dinamismo en la fe del critiano, por ello con este
dar el Espiritu se emprende la tarea misionera y profetica, dejando de lado la vida nueva, tema
que se trabajara en San Pablo, por ello se veia que en el Antiguo testamento se trabaja los dos
aspectos la vida nueva y la misonera-profetica, en Joel 3, Ezequiel 36, 26ss; Jeremias 31, 31-34. (Cf.
Congar, 1991, pág. 74)

2.3 En San Pablo

Para hablar del Espíritu en San Pablo, se debe tener en cuenta que él no conocio a Jesús en su
carne, si lo conocio por medio del testimonio que se dio en la Iglesia, lo conocio por medio del
acontesimiento pascual. Esto ya marca de entrada que el conocimiento fue de testimonio, por la
palabra, pero reconoce que esta se da bajo el influjo del Espíritu santo, asi lo expresa a los
tesalonicenses:

“ya que os fue predicado nuestro Evangelio no sólo con palabras sino también con poder y con el
Espíritu Santo, con plena persuasión. Sabéis cómo nos portamos entre vosotros en atención a
vosotros. Por vuestra parte, os hicisteis imitadores nuestros y del Señor, abrazando la Palabra con
gozo del Espíritu Santo en medio de muchas tribulaciones.” (1 Tes. 1, 5-6)

Esta predicación es la que sucito en los gentiles, el conocimiento de Jesucristo y así la venida del
Espíritu Santo sobre ellos, lo cual trajo consigo la fe y el bautismo en las personas, allí se empieza a
dar el influjo del Espíritu sobre los cristianos, al punto tal de descubrir que este los lleva a vivenciar
una vida de hijos de Dios, ya que el Espíritu habla a nuestro espiritu y le permite al cristiano decir:
¡Abba Padre! Rom 8, 14-17.
Pablo en sus cartas se dedica en gran medida a hablar del tema de la justificacion por la fe, en ellas
Pablo hace todo un desarrollo del tema de la lucha entre la carne y el Espíritu, donde resalta las
dos formas de existencia, “Si vivís según el Espíritu, no daréis satisfacción a las apetencias de la
carne. Pues la carne tiene apetencias contrarias al espíritu, y el espíritu contrarias a la carne, como
que son entre sí antagónicos, de forma que no hacéis lo que quisierais.” (Gal. 5, 16-17) además
resalta los frutos del espiritu, destacando el amor como el principal de todos, ya que este es
generador y envolvente, porque lleva a cumplir en totalidad la ley. (Cf. Congar, 1991, pág. 58).

Para Pablo el Espíritu reviste una tarea importante en todo cristiano, porque desde este, Dios
construye su Iglesia. Esta iglesia Pablo va a decir que esta contituida por cada uno de los
bautizados los cuales en su union forman un solo cuerpo. “todos fuimos bautizados en un solo
Espíritu para formar un solo cuerpo” (1 Cor. 12, 13). Por el bautismo nos hacemos hijos adoptivos
de Dios, con lo cual empezamos a ser parte del cuerpo de Cristo.

Pablo observando este cuerpo mistico de Cristo, resalta los dones de Dios como gracias que: ,
estodos dones que son fruto del Espíritu Santo, dice que: 1) son distribuidos por el Espíritu “según
su voluntad”; 2) que son diversos: da diversas listas de ellos que no coinciden entre sí ni pretenden
ser exhaustivas; 3) que el Espíritu los da diferentes con vistas al bien de todos; es decir, para que
sirvan a la construcción de la comunidad eclesial o a la vida del cuerpo de Cristo. Por último 4)
coloca el don o carisma del amor por encima de todos los restantes y sitúa en su justo lugar dos
“dones del Espíritu” o pneumatika(12,1; 14, 1) altamente apreciados por los corintios: el hablar
lenguas y la profecía. (Congar, 1991, págs. 63-64)

En conclusion “La teologia paulina sobre el espiritu, toma las dos formas concretas siguientes: por
un lado, los dones espirituales, (1 Cor 12), que se miden por el amor (1 cor 13) pues de esta
manera es como el espíritu mueve y determina a los hijos de Dios en el cuerpo de Cristo, y por
otro, el comportamiento del “hombre nuevo”, que el catalogo de Gal 5, 22 menciona como fruto
del espíritu; y, tambien éste en el fonde se mide por el amor”

En san pablo se van a dar tres aspectos que resaltaran a lo largo de sus ecritos:

1. Pablo ve la influencia del Espíritu Santo sobre la iglesia, de forma tal que el Espíritu influye en
ella hacia adentro, hacia la vida comunitaria.
2. Para Pablo la accion del Espiritu Santo es objeto de fe al menos tanto como de experiencia y
sabe él que gran parte de los cristianos no tienen esa experiencia, por ello la invitacion
continua a experimentar la pascua de Cristo.
3. En Pablo, el Espíritu realiza en cada cristiano su ser en Cristo. (Cf. Congar, 1991, pág. 74)

2.4 En los escritos joanicos

la pneumatoligia de Juan esta muy bien elaborada, por su forma mediatica la hace menos
compleja que Pablo y los Hechos de los Apostoles. En los escritos de juan el Espíritu tiene como
caracteristica que el mensaje de que Jesús es “camino, verda y vida” y por consiguiente luz del
mundo. (jn 6, 63) este mismo espritiru es el que van a recibir los discipulos con la vuelta del Jesús
al Padre, solo con su ida al Padre ellos podran recibir al paraclito, con su muerte, con s glorificación
(jn 7, 39). (Coenen , Beyreuther , & Bietenhard, 1980, pág. 144)3

En juan se da una contraposición de lo que significa ser del espiritu y de la carne, esto se puede ver
de una mejor menera en el dialogo que entabla jesus con nicodemo en el capitulo 3. Alli hay una
asignacion de lo que asigna un origen celeste y un origen terrestre. (3, 6; 6, 63) (Cf. Coenen ,
Beyreuther , & Bietenhard, 1980, pág. 144), “se debe a la diferencia que hay insalvableque existe
para él entre Dios, que es Espíritu (4, 24) y el hombre, que vive en un mundo impio” (Coenen ,
Beyreuther , & Bietenhard, 1980, pág. 144).

Porque jesus ha sido enviado, es que nosotros hoy podemos adorarle en Espíritu y en verdad,
porque por medio del Espíritu, que es el que da a conocer la realidad de Dios y así la jesucristo su
hijo, podremos llegar a dar testimonio del acontesimiento salvifico, gracias al haber renacido del
Espíritu. Por este renacer, “ya no somos determinados por la carne, en sentido joaneo, sino por el
Espíritu” (Coenen , Beyreuther , & Bietenhard, 1980, pág. 144). Luego entonces,“Jesús viene de
nuevo a sus discipuls en el paráclito, el intercesor y “espiritu de verdad”, en cuanto que ellos,
gracias a la mediación del espiritu, conocen y custodian la verdad de su mensaje y así le
contemplan como viviente”. (Coenen , Beyreuther , & Bietenhard, 1980, pág. 144)

4. el espiritu en algunos padres de la iglesia

la DIDAJE o doctina de los doce aposoles reconociendo la necesidad del bautismo hace mension a
como se debe bautizar a las personas:

“En cuanto al bautismo, éste es el modo de bautizar: habiendo previamente dicho todo esto,
bautizad en el nombre del Padre, y del Hijo, y del Espíritu Santo, en agua viva. Si no tienes agua
viva, bautiza en otra agua. Si no puedes en (agua) fría, (bautiza) en caliente. Si, empero, no tienes
ni una ni otra, derrama agua sobre la cabeza tres veces en el nombre del Padre, y del Hijo, y del
Espíritu Santo”. (DIDAJE 7, 1-3)

esto va a dar paso a grandes discusiones tanto en la iglesia de Oriente como de Occidente.

4.1 En el oriente.
4.1.1 San Basilio Magno. (330-379)

San Basilio en el 374 uso una doxologia que causo disgusto, él dijo “Gloria al Padre, con el Hijo,
junto con el Espíritu Santo” lo común era decir “Gloria al Padre por el Hijo En el Espíritu Santo”, no
gusto porque colocaba al Espíritu Santo en el mismo plano que el Padre y el Hijo. Ello causo que el
escribiera una obra “sobre el Espíritu Santo” él afirma en esta obra que: “esa nueva doxologia es
tan ortodoxa como la segunda; que al Hijo y al Espíritu Samto, por ser de la misma identica
substancia del Padre, les corresponde igual honor que al Padre, y que esa primera doxologia es

3Coenen , Beyreuther , & Bietenhard, Diccionario Teológico del Nuevo Testamento. Ed.
Sígueme, Salamanca, 1980.
más apropiada porque no solo establece la distincion de las personas divinas sinoque también
atestigua la eterna comunión y perpetua conjunción que existe entre ella” (Lopera , 1993, pág.
207). San Basilio, el Espíritu Santo es consubstancial con Dios, puesto que procede de la misma
substancia que Dios.

4.1.2 San Gregorio de Nacianceno (329-389)

“… El Espiritu Santo, el que procede del Padre (Jn 15, 26): en cuanto que procede de El, no es
creatura; en cuanto que no es engendrado, no es Hijo; en cuanto que está en medio del ingénito y
del engendrado, ES DIOS… ¿qué es lo que le falta al Espiritu Santo, dicen, para ser Hijo? Si no le
faltara algo, sería Hijo. Decimos que no le falta nada, pues a Dios no le falta nada… ni al Hijo le
falta algo para ser Padre (pues ni la filiación es un defecto) y a pesar de eso no es Padre… Entonces
¿qué? ¿(es) Dios el Espíritu? CIERTAMENTE. ¿Es CONSUBSTANCIAL? Si, porque es Dios.” (Lopera ,
1993, pág. 207)

4.2 En el occidente
4.2.1 San Agustin. 354-430

San Agustin en su libro De Trinitate, hace la siguiente alusion al Espirtu Santo:

" Lo que del Padre nace al Padre solo dice relación, como Hijo, y P o r eso se le llama Hijo del Padre
y no nuestro. Por el contrario, lo que se da dice relación al dador y a aquellos a quienes se da. Así,
el Espíritu.Santo se dice Espíritu del Padre y del Hijo, que lo dieron, y también nuestro, pues lo
recibimos. El que da la salud se llama salud dei Señor, y es también nuestra salud, porque la
recibimos. El Espíritu es Espíritu de Dios, porque lo otorga, y nuestro, porque lo recibimos. No se
trata del espíritu fuente de nuestra existencia, pues éste es espíritu del hombre y en el hombre
vive; mas aquél se dice Espíritu nuestro en un sentido análogo al de aquellas palabras: Danos él
pan nuestro. Aunque, a decir verdad, don es también el espíritu del hombre. ¿Qué tienes,
pregunta el Apóstol, que no lo hayas recibido? Pero uno lo recibimos para existir, el otro lo
recibimos. (Arias , 1956, pág. 423)

según San Agustin, no se puede decir que el Espíritu Santo no proceda del Hijo, ya que se llama
“Espíritu del Padre y del Hijo”, por esoel soplo del Señor sobre los apostoles en jn 20,22 es para
indicar que el Espíritu Santo “no solo procede del Padre sino también del Hijo” (Lopera , 1993, pág.
209)

4.2.2 San ambrosio

Llama al Hijo “fuente de la vida, es decir, fuente del Espíritu Santo”

5. EL CONCILIO DE CONSTANTINOPLA (381) DIVINIDAD DEL ESPIRITU SANTO Y CONCILIO


VATICANO II

todo lo anterior va a acarrear grandes discusiones dentro de la iglesia con lo cual se va a llamar a
un concilio en Constantinopla para tratar entre otros temas el problema del Espíritu Santo.
5.1 concilio de Constantinopla.

Este concilio que se lleva a cabo entre Mayo y julio del 381 fue convocado por el emperador
Teodosio, allí se va a confirmar el símbolo de Nicea, el cual condena el error de Arrio, quien decía
que el Hijo no tenia la misma condición divina del Padre. Por ello el concilio de Constantinopla
confirma el símbolo de Nicea y además define la divinidad del Espíritu santo. Ya que el problema
que surgía en la época era la herejía de Macedonio. El cual admitía la divinidad del Verbo pero
negaba la del Espíritu Santo; decía que era una criatura de Dios, la cual traía las gracias. El concilio
de Constantinopla entonces reafirmó la divinidad del Espíritu Santo. Contra los macedonianos. El
Espíritu Santo es verdadero Dios, como el Hijo y el Padre. Con esto se va a reafirmar el símbolo de
Nicea-Constantinopla.

CREDO DE NICEA-CONSTANTINOPLA

Creo en un solo Dios, Padre Todopoderoso, Creador del cielo y de la tierra, de todo lo visible y lo
invisible.

Creo en un solo Señor, Jesucristo, Hijo único de Dios, nacido del Padre antes de todos los siglos:
Dios de Dios, Luz de Luz, Dios verdadero de Dios verdadero, engendrado, no creado, de la misma
naturaleza del Padre, por quien todo fue hecho; que por nosotros los hombres, y por nuestra
salvación bajó del cielo, y por obra del Espíritu Santo se encarnó de María, la Virgen, y se hizo
hombre; y por nuestra causa fue crucificado en tiempos de Poncio Pilato; padeció y fue sepultado,
y resucitó al tercer día, según las Escrituras, y subió al cielo, y está sentado a la derecha del Padre;
y de nuevo vendrá con gloria para juzgar a vivos y muertos, y su reino no tendrá fin.

Creo en el Espíritu Santo, Señor y dador de vida, que procede del Padre y del Hijo, que con el
Padre y el Hijo recibe una misma adoración y gloria, y que habló por los profetas.

Creo en la Iglesia, que es una, santa, católica y apostólica.

Confieso que hay un solo bautismo para el perdón de los pecados.

Espero la resurrección de los muertos y la vida del mundo futuro.

Amén. (Correa , 2013)

El concilio de Constantinopla, va a ser claro al hablar de la hipostasis del Espíritu Santo. “es cierto
que no utiliza el termino técnico homousia, pero aplica al Espíritu Santo predicados que indican
claramente su divinidad y su igualdad esencial con el Padre y el Hijo” (Müller, 2009, pág. 409) allí
se le van a dar los calificativos de Señor y vivificador.

5.2 el Concilio Vaticano II

Este concilio fue convocado por el papa Juan XXIII en el año 1962 va durar cuatro años en los
cuales se trataran diversos temas de interés mundial. En surgirán cuatro constituciones (Lumen
Gentium, Dei Verbum, Sacrosantum Concilium y Gaudium et Spes), nueve decretos y tres
declaraciones.

Para nuestro tema sobre el Espíritu Santo se van a resalta de manera particular las constituciones
Lumen Gentium y Dei Verbum, aunque en todos los documentos se resalta la importancia de la
concepción trinitaria del Concilio Vaticano II.

En el documento Lumen Gentium se reconoce la importancia del envió del Espíritu Santo el día de
Pentecostés, ya que con su envío la iglesia se santificaría continuamente,a través de los
sacramentos, misterios y virtudes, lo cual permitiría a los fieles acercarse por Cristo al Padre. Este
acercamiento que lleva a la santidad es gracias a los dones que da el Espíritu Santo a la iglesia de
Cristo (Cf. LG 4) ahora bien el Espíritu Santo dice este documento:

“No sólo santifica y dirige el Pueblo de Dios mediante los sacramentos y los misterios y le adorna
con virtudes, sino que también distribuye gracias especiales entre los fieles de cualquier condición,
distribuyendo a cada uno según quiere (1 Co 12,11) sus dones, con los que les hace aptos y
prontos para ejercer las diversas obras y deberes que sean útiles para la renovación y la mayor
edificación de la Iglesia, según aquellas palabras: «A cada uno... se le otorga la manifestación del
Espíritu para común utilidad» (1 Co 12,7).” (LG 12)

Gracias al Don del Espíritu Santo, la iglesia se ha enriquecido, puesto que al recibirlo, se da la
institución de la jerarquía la cual, por medio del Espíritu Santo, se instituyo los doce apóstoles, los
cuales transmitieron las enseñanzas adquiridas por Jesucristo a sus sucesores, los cuales hoy son
conocidos como los obispos, los cuales en calidad de sucesores, continúan formando y educando
en la fe a los files laicos, para lo cual instituyen los presbíteros y los diáconos como dispensadores
de las gracias de Dios a través de los sacramentos.

De esto anterior se da el llamado a la vocación universal a la santidad en la iglesia: “Esta santidad


de la Iglesia se manifiesta y sin cesar debe manifestarse en los frutos de gracia que el Espíritu
produce en los fieles. Se expresa multiformemente en cada uno de los que, con edificación de los
demás, se acercan a la perfección de la caridad en su propio género de vida; de manera singular
aparece en la práctica de los comúnmente llamados consejos evangélicos. Esta práctica de los
consejos, que, por impulso del Espíritu Santo, muchos cristianos han abrazado tanto en privado
como en una condición o estado aceptado por la Iglesia, proporciona al mundo y debe
proporcionarle un espléndido testimonio y ejemplo de esa santidad”. (LG 39)

Bibliografía
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