Vous êtes sur la page 1sur 6
o R J. POTHIER hhacen adquirir al deudor principal. La razén le veremos infra, part. 2, cap. vi. 90. Nuestro principio sufre todavia otra excepcién relativa 4 Tas sustitueiones producides por un acto de donacién entre vivos; pues en cuanto al suceso a que se deben, las personas llamadas a ddicha substituciones, bien que no hubiescn sido parte en Ia acta que Jas contiene, adquirieron el derecho de pedir al donatario que se {grav6 con ella, o a stt sucesin las cosas en la misma comprendidas. ‘Véase Jo que hemos dicho supra, en el articulo precedente, § 3. Axrfcuro VII REOLAS PARA LA IVTERPRETACION DE LAS CONVENCIONES Débese buscar en las convenciones cul ha sido la comin intencién de las pastes contratantes, mejor que no el sentido gra- ratical de los términos. In conventionibns contrakentium voluitatem potius quam ver- ba specteri plocuit (1, 219, p. de verbor. signif.). ‘Véase un ejemplo de esta regla en la ley citada. He agui otro. Vos me tenéis alquilada una pequefia habitacién en una casa de la que ‘y6 ocupo la parte restante, y yo os hago el nuevo alquiler en los si- guientes términos: Doy en ciguier a un Tat ret casa por tantor aiias, por el frecio del anterior arriendo, ¢TTendrieis motivo para pretender que lo que yo os he alquilado ha sido toda la casa? No; pues bien que por esos términos, mi caso, en su sentido gramatical, fiquen Ia casa entera y no una simple habitacién, es empero visible que nuestra intencién no ha sido otra que In de renovar el arriendo de un euarto que ya os habia alquilados y esta inten- i6n, de Ia que no se puede dudar, debe prevalecer sobre los tér- rminos del arriendo, 92, Cuando una cléusula es susceptible de dos sentidos, se debe mis bien entenderla conforme al que ha podido tener efecto, que no segin aquel sentido que daria por resultado no ser posible estipulacion alguna, Quoties in stipulationibus ambigua oratio est, commodissinnt est id accipi quo res de qua agitur in tuto sit (1. 80, de verb. oblig.). Por ejemplo, si se dice a la fin de una particién: Ha sido convenido entre Pedro y Pablo, que Pablo podria posar por sus he- redades; bien que esos términos sus heredades, segiin al sentido ‘TRATADO DE LAS OBLIGACIONES 61 gramatical, puedan entenderse lo mismo por las de Pablo que por Jas de Pedro; sin embargo, no es dudoso que se trata de las de Pedro, pues de otro modo la cldusula no tendria efecto alguno, puesto que Pablo no tiene necesidad de estipular que podra pasar [por sus propias heredades. 93. Cuando en un contrato los términos son susceptibles de dos sentidos, se debe entenderlos conforme al sentido que meior convenga sla naturaleze del contrato. ‘Por ejemplo, si se hubiese dicho por un acto, que yo os he ataui- Jado por la summa’ de 300 libras, esas términos la wma de 300 lbras, zo se entienden por una sola suma de 300 libras, sino de una suma anual de 300 Hibras por cada uno de los mueve afios que durard el arriendo, siendo de Ja naturaleza del contrato de alquiler que el precio se cuente por anuafidades tra cose sucederd si de una manera evidente constase que Ja suma de 300 libras es el valor de nueve afios de alquiler; puta, por cuanto por los arriendos precedentes la heredad no habia sido arrendada sino por el precio de treinta o cuarenta Wibras anuales de alquiter. ‘Véase otro ejemplo. Por un arriendo de tierras se ha dicho ‘que yo os he alquilado una cierta heredad por 300 libras de renta anual, y reparaciones: esos términos yy reparaciones deben enten- derse’de las locativas, pues los arrendadores y alquilinos no vienen obligados a otras més que a aquellas que estén conforme con la naturaleza del contrat 94. Lo que puede parecer ambiguo en wn contrato se inter- preta por fo que es de costumbre en el pais: Semper in stipulatio- niibus et in cateris contractibus id sequimur quod actum est; aut si non appareat quod actum est, erit consequens ut id sequomur ‘quod in regione in qua octum est frequentatur. (1. 34, D. de regu dis juris.) ‘Segiin esta regla, si yo he hecho un contrato con un viticultor por el que se obliga a cultivar mi vila por una cierta suma al ao, sin explicarme acerca de las labores que deberd ejecutar, se repu- ‘taré que hemos convenido en que se harian aquellas que fueran de uso y costumbre en la tierra. 95. El uso tiene una autoridad tan grande en punto a la in- terpretacién de las convenciones, que en todo contrato se sobre- 2 R J. POTHIER entienden las cldusulas que son de us0, bien que no se hallen expre- sadas: In coniractibus tacite veniunt ea quae sunt moris et consuetudinis. Por ejemplo, en el contrato de alquiler de una casa, bien que no haya sido expresado que el alquiler se pagaré por medias anua- lidades, por San Juan y Navidad, y que el inquilino viene obligado fa hacer las reparaciones locativas, esas cliusulas se entienden so- brentendidas. Tgualmente en un contrato de venta, bien que Ja cldusula de que el vendedor que ha obligado a defender y garantir al compra- dor de evicciones no sea indicado, no por ‘esto deja de sobre- entenderse, 96. Se debe interpretar una cliusula por las otras cldusulas contenidas en el acta, ya precedan o sigan a dicha cldusula. La ley 126 p. de verb. sign. suministra un ejemplo de esta re- gla, Conforme a esa ley, se habia dicho en un contrato de venta, por primera cldusula, que la heredad se habia vendido w#i optimus masimus, es deci, libre de todas las cargas reales: por tina segunda cléusula se habia dicho que el vendedor no entendia salir garante sino por sus hechos. Esta segunda clusula sirve para la interpre- tacién de la primera, y restringe Ia generalidad de los términos a ‘este sentido, que el vendedor por la dicha primera cldusula no ha entendido prometer y asegurar otra cosa, sino que él no habia impuesto carga alguna a su heredad, y que él era libre de todas, aquellas que hubiesen sido impuestas por otros, y de las que no tenia conocimiento alguno, smroua strrca 97, Tin caso de duda, una cliusula debe interpretarse contra aquel que ha estipulado alguna cosa y en descarga del que ha con- traido la obligacién. In stipulationibus cum querritur quid actum sit, verba contra stipulatorem interpretonda sunt (1 38, § 18, v, de verb, oblig.). Fere secundum promissorem interpretamur (1.99, 0, eod. tit). Al acreedor debe imputarse el no haberse expresado mejor Por ejemplo, si por un arriendo de tierras se hubiese dicho que ef arrendador entregard al propietario, en cierto tiempo, una cantidad de trigo de Ia finca anual, sin que se especificara et qué punto la entrega habia de tener lugar, 1a eldusula debe entenderse fen ese sentido, que deberd hacerse en Ia casa del arrendador y a

Vous aimerez peut-être aussi