Guía informativa patrimonial arqueológica:

Definiciones, medidas de protección y guía para la denuncia de daños.

Adrian Oyaneder R.
Francisco Espinoza R.
AUTORES DISEÑO Y DIAGRAMACIÓN
Adrián Oyaneder R. Piero Boggioni R.
Francisco Espinoza R.
Obra financiada por María Mamani en el marco de

©2017
EDICIÓN medidas de mitigación y remediación de daños de
Álvaro Romero G. sitios arqueológicos, sector Las Riberas, Arica.
Según la ley 17.288 de Monumentos Nacionales
¿Qué es un Monumento Arqueológico?

El artículo 1º señala que “Son monumentos nacionales y quedan

bajo la tuición y protección del Estado, los lugares, ruinas, construcciones
u objetos de carácter histórico o artístico; los enterratorios o cementerios u otros
restos de los aborígenes, las piezas u objetos antropo-arqueológicos,
paleontológicos o de formación natural, que existan bajo o sobre la
superficie del territorio nacional o en la plataforma submarina de sus aguas
jurisdiccionales y cuya conservación interesa a la historia, al arte o a la
ciencia; los santuarios de la naturaleza; los monumentos, estatuas,
columnas, pirámides, fuentes, placas, coronas, inscripciones y, en general,
los objetos que estén destinados a permanecer en un sitio público, con
carácter conmemorativo. Su tuición y protección se ejercerá por medio del
Consejo de Monumentos Nacionales, en la forma que determina la presente ley”.

Según el Artículo 21º “Por el solo ministerio de la ley, son

Monumentos Arqueológicos de propiedad del Estado los lugares, ruinas,
yacimientos y piezas antropo-arqueológicas que existan sobre o bajo la
superficie del territorio nacional. Para los efectos de la presente ley quedan
comprendidas también las piezas paleontológicas y los lugares donde se
hallaren”.

Monumentos Arqueológicos

Ante el Estado de Chile el Consejo de Monumentos

Nacionales (CMN) es la institución técnica encargada de velar por la
protección y resguardo de monumentos y bienes patrimoniales.
Asimismo, el CMN cumple un rol de peritaje, fiscalización y asesoría
técnica en el marco de otros cuerpos legales, como lo es la Ley Nº
Ejemplo de un Bien Paleontológico: Fósil de cetáceo hallado junto a otros
19.300 sobre Bases Generales del Medioambiente. 84 especímenes en el sitio “Cerro Ballena”. Ruta 5 norte, cercanías de Caldera.

En el contexto específico de la Ley Nº 17.288, son

Monumentos Arqueológicos (MA) las evidencias muebles e
inmuebles de carácter arqueológico y/ paleontológico. Bajo esta
definición son entonces bienes arqueológicos elementos como:
“piezas, lugares, ruinas o yacimientos con vestigios de ocupación
humana, que existen en un contexto arqueológico y que no estén
siendo utilizados por una sociedad viva o en funcionamiento. Entre
ellos destacan: lugares donde habitaron o fueron sepultados grupos
indígenas prehispánicos, pukaras o lugares defensivos, piedras
tacitas, conchales, geoglifos, petroglifos y una variedad de vestigios
provenientes de asentamientos coloniales españoles, fuertes
españoles en desuso, barcos antiguos hundidos, entre otros […]”.
Ejemplo de un Bien Arqueológico: Túmulo parcialmente excavado. Se
Extracto consultado desde la web del Consejo de Monumentos Nacionales compone por sucesivas camadas de cañas y vegetales palustres intercaladas con
http://www.monumentos.cl/consejo/606/w3-article-11139.html (Abril de 2017). capas de sedimento. Sitio Az-67, sector Cerro Moreno Valle de Azapa, Arica.


Sitios Arqueológicos

Como seres humanos desarrollamos una notable diversidad

Foto
de prácticas y actividades durante nuestras vidas, en distintos
lugares (hogar, establecimientos educativos, lugares de trabajo,
visitas, vacaciones, lugares de esparcimiento, etc.) las cuales de
algún modo reflejan nuestra identidad como parte de un grupo
humano, tales como poblaciones, ciudades, países y culturas.
Dentro de esta variedad de prácticas y actividades, sólo algunas de
ellas dejan “vestigios” materiales que logran ser preservados
posterior a nuestro deceso o al abandono del lugar. Es así como los
desechos, basuras, descartes y elementos que durante el ciclo vital
dejan de tener importancia, con el pasar del tiempo adquieren un
valor histórico si se estudian arqueológicamente.
Esquema de patrones de mobilidad: Los puntos negros indican grupos
Bajo la lupa arqueológica es entonces que los elementos humanos en su completitud y los grises segmentos de un grupo. Extraído de
materiales (muebles o inmuebles) cobran una importancia 'The Archaeology of Mobility" (Barnard y Wendrich 2011, figura 3).
patrimonial, porque desde estos se hace posible conocer una amplia
gama de actividades y costumbres de los grupos humanos
pretéritos.

Contexto Arqueológico
La ubicación específica de los bienes muebles o inmuebles,
junto a otros elementos que se encuentran en la superficie y en el
subsuelo constituyen el sitio arqueológico y su contexto. En particular,
el concepto de sitio arqueológico corresponde a una acepción
técnica que nos permite diferenciar e individualizar lugares
específicos donde se desplegó algún tipo de actividad humana,
desde grandes ciudades, cementerios y caminos hasta acotados
talleres de producción artesanal. Asimismo, el contexto arqueológico
se refiere al conjunto de evidencias culturales (derivadas de la
actividad humana), evidencias naturales y el lugar de emplazamiento,
que al estar agrupados nos permiten obtener detalles de la
cronología, tipo de actividad humana realizada, alimentos
consumidos, condiciones climáticas, eventos tectónicos, crecidas de
ríos, por nombrar algunos.
En la dimensión de actividades humanas
pretéritas que se pueden llegar a reconocer gracias al
estudio de los sitios arqueológicos con contextos
íntegros, se encuentran talleres de manufactura de
artefactos y herramientas, lugares de aprovisionamiento
de materias primas, de procesamiento de alimentos, de
caza, campamentos, casas, estructuras de pernocte
(paskanas), paraderos de arrieraje, enterratorios,
cementerios, complejos habitacionales o poblados,
caminos troperos, caminos de carreta, entre una amplia
gama de actividades desarrolladas por las socieda-des
que habitaron el pasado.

Esta información es útil y altamente informativa cuando no es

alterada o modificada, pues, por el contrario, si un sitio arqueológico
es escarbado, removido, transitado por vehículos motorizados o
incluso si se recolecta una peque ña pieza de cerámica, este va
sumando pérdidas irreparables a nivel de ‘contexto’.

Tipos de Monumentos Arqueológicos

De momento, se cuenta con dos tipos generales de

clasificación de las evidencias que son, las de carácter mueble
(móvil o portable) y las de carácter inmueble (conjuntos de
elementos que constituyen un elemento compuesto, que de ser
movido pierde su sentido y significado). Como ejemplo de bienes
muebles se encuentran los artefactos y utillaje que comúnmente se
almacena en museos, como por ejemplo: recipientes (vasijas, ollas,
platos), armas (para la caza o enfrentamientos), vestimenta,
adornos, restos de alimentación y herramientas. En paralelo, se
tiene la clasificación de bienes inmuebles, los cuales pueden ser
locaciones, elementos arquitectónicos, cuevas, aleros, geoglifos,
petroglifos, basurales, conchales, caminos y en general cualquier
tipo de evidencia que mantiene significado en su locación y
configuración material.

Material arqueológico hallado en las ceracnías de la localidad de Cuya, Valle de Camasrones. Las piezas corresponden a distintas herramientas confeccionadas a partir piedras talladas.


Fragmento de Cerámica Inka local hallada en el Valle de Lluta. Posiblemente correspondio a un pequeño cuenco.


Avance agrícola en el valle de Azapa
Para la arqueología local e internacional, el valle de Azapa es
considerado como una locación de relevancia. Desde inicios del siglo
XX se han efectuado un sinnúmero de investigaciones que han
establecido que desde hace 3000 años se ha desarrollado la
agricultura de manera ininterrumpida. Junto con la agricultura, existen
otras manifestaciones del pasado que nos permiten conocer
elementos simbólicos y espirituales de las personas que allí vivieron.
Con esto último nos referimos a la existencia de manifestaciones
artísticas como los geoglifos y manifestaciones espirituales con la
existencia de numerosos cementerios y tumbas, destacando los
túmulos, una especie de mausoleos de piedra y deshechos vegetales
que marcan significativamente los territorios cultivables.
La producción de alimentos es de vital importancia para el
desarrollo de la vida humana, y ha permitido por siglos dar sustento
económico a muchas familias Azapeñas.
Hasta tiempos prehispánicos, la agricultura en Azapa se
desarrollaba como pequeños oasis discontinuos que florecían en
lugares donde afloraba agua en un cauce de río casi siempre seco.
Posteriormente, durante la época colonial hispana se inició el
aprovechamiento de las aguas subterráneas mediante la excavación
de pozos, lo que permitió que el valle se convirtiera en un continuo
verde.
Con la canalización de las aguas del río Lauca,
en las décadas de 1970 el área cultivable del valle se
amplió hacia terrenos pedregosos de Pampa Algodonal y
Alto Ramírez. Finalmente, con las nuevas tecnologías de
bombeo de agua, en las últimas décadas se están
aprovechando las terrazas desérticas sobre el cauce del
río, ampliándose aún más las hectáreas cultivables del
valle de Azapa.
Sin embargo, el desarrollo agrícola ha tenido
como consecuencia siempre la destrucción de nume-
rosos sitios arqueológicos. Es bien sabido que ante el
hallazgo de una tumba o de objetos arqueológicos
durante el trabajo agrícola, los agricultores prefieren
mantener en secreto el hecho, o incluso destruir cual-
quier testigo de esto para así evitar sanciones o demo-
ras en su trabajo. Ante lo cual, creemos que como
ciudadanos debemos cambiar este tipo de comporta-
miento, pues lo que se destruye no son simples basu-
ras antiguas o pedazos de huesos, sino que son testi-
monios de los primeros colonizadores y agricultores,
sean nuestros antepasados directos o no.

 N

Km
0 3 6 9 12
Avance agrícola del Valle de Azapa, fotografía satelital obtenida el año 1980.

Km
0 3 6 9 12
Avance agrícola del Valle de Azapa, fotografía satelital obtenida el año 2016.


¿Qué hacer en caso de exponer o encontrarse con evidencias arqueológicas?

El Artículo 26º de la Ley Nº 17.288 señala que “toda persona natural o jurídica que al efectuar excavaciones en
cualquier punto del territorio nacional y con cualquier finalidad, encontrare ruinas, yacimientos, piezas u objetos de carácter
histórico, antropológico, arqueológico o paleontológico, está obligada a denunciar inmediatamente el descubrimiento al
Gobernador Provincial, quien ordenará a Carabineros que se haga responsable de su vigilancia hasta que el Consejo se haga
cargo de él. La infracción a lo dispuesto en este artículo será sancionada con una multa de cinco a doscientas unidades
tributarias mensuales, sin perjuicio de la responsabilidad civil solidaria de los empresarios o contratistas a cargo de las obras,
por los daños derivados del incumplimiento de la obligación de denunciar el hallazgo.”

Bajo el marco legal mencionado las autoridades competentes a las cuales se debe dar aviso en caso del hallazgo
fortuito o destrucción de Monumentos Arqueológicos en Arica son la Brigada de Delitos Medioambientales de la Policía de
Investigaciones (PDI BIDEMA) , y la Oficina Técnica Regional del Consejo de Monumentos Nacionales (CMN OTR).

Las autoridades mencionadas según sea el caso estudiarán y evaluarán las acciones a seguir, las cuales podrán ser,
efectuar medidas de mitigación para minimizar el impacto o daño, o bien solicitar los rescates arqueológicos necesarios para
evitar el daño al Monumento Arqueológico. En caso de corresponder una situación que puede reunir las características de
delitos se derivarán los antecedentes a la fiscalía regional para iniciar un proceso judicial de investigación.

 Asimismo, cabe recalcar que cualquier persona puede
denunciar el daño y/o destrucción de monumentos arqueológicos.
Esta denuncia puede ser de carácter anónimo, y según
corresponda el denunciante puede percibir parte de la multa
aplicada: “Se concede acción popular para denunciar toda
infracción a la presente ley. El denunciante recibirá, como apremio,
el 20 por ciento del producto de la multa que se aplique” (Ley Nº
17.288 artículo 42).


¿Se puede excavar un sitio arqueológico?
¿Se puede “liberar” un terreno que tenga este
tipo de evidencia en su interior?
Quiénes
Artículo 22º Ninguna persona natural o jurídica chilena
podrá hacer en el territorio nacional excavaciones de carácter
arqueológico, antropológico o paleontológico, sin haber obtenido
previamente autorización del Consejo de Monumentos Nacionales,
en la forma establecida por el reglamento. La infracción a lo
dispuesto en este artículo será sancionada con una multa de diez a
quinientas unidades tributarias mensuales, sin perjuicio del
decomiso de los objetos que se hubieren obtenido de dichas
excavaciones.
Cómo
El marco legal vigente en Chile, no permite explícitamente el
rescate de evidencias arqueológicas en caso que dificulten el
desarrollo de algún proyecto productivo o de otro tipo. Cuando nace
nuestra legislación en el año 1970 buscaba sancionar las prácticas
de saqueo, los daños por acción de terceros y regular
las excavaciones con fines científicos.
Sin embargo, desde hace casi 20 años con la
legislación ambiental, estas mismas leyes se han
ajustado a la situación de compatibilizar la protección
de las evidencias arqueológicas y el desarrollo de
proyectos productivos. De esta forma, se ha permitido
excavar con técnicas científicas o recolectar los
materiales superficiales de un porcentaje significativo
de los sitios arqueológicos. Bajo la idea de que esta
muestra permitirá tener el conocimiento suficiente y
adecuado para que el resto pueda ser intervenido para
el desarrollo del proyecto minero, energético, civil,
según sea el caso.
Estas excavaciones de rescate deberán ser
solicitadas por un arqueólogo profesional en la forma
indicada en la Ley, quien deberá indicar la
metodología, el tipo de análisis de los materiales
recuperados y el depósito final de éstos. Es el Consejo
de Monumentos Nacionales quien indicará el
porcentaje adecuado y posteriormente autorizará la
intervención del sitio arqueológico.

¿Existen infracciones si se interviene un Monumento Arqueológico sin los permisos
correspondientes?

En nuestro marco legal, existen dos delitos tipificados relacionados con los Monumentos Arqueológicos. Por un lado,
está el daño a Monumento Nacional, indicado en el Artículo 38º de la Ley Nº 17.288. Por otro lado, está el delito de apropiación
de Monumento Nacional, relativa al robo, usurpación y receptación indicado en el Artículo 38º bis de la citada ley.

Además, tenemos sanciones por no dar aviso oportuno de algún hallazgo de carácter arqueológico a las autoridades,
las cuales están indicadas en el Artículo 26º de la Ley Nº 17.288: Toda persona natural o jurídica que al hacer excavaciones en
cualquier punto del territorio nacional y con cualquier finalidad, encontrare ruinas, yacimientos, piezas u objetos de carácter
histórico, antropológico, arqueológico o paleontológico, está obligada a denunciar inmediatamente el descubrimiento al
Gobernador Provincial, quien ordenará a Carabineros que se haga responsable de su vigilancia hasta que el Consejo se haga
cargo de él. La infracción a lo dispuesto en este artículo será sancionada con una multa de cinco a doscientas unidades
tributarias mensuales, sin perjuicio de la responsabilidad civil solidaria de los empresarios o contratistas a cargo de las obras,
por los daños derivados del incumplimiento de la obligación de denunciar el hallazgo.

Daño accidental, sitios arqueológicos sector Las Riberas

El año 2008 la señora María Mamani Yampara realiza una solicitud

de terrenos fiscales al Ministerio de Bienes Nacionales. La cual incluyó una
inspección arqueológica del lugar, definida como Certificado Arqueológico,
que entre varios aspectos permite previo a la solicitud formal conocer la
existencia o ausencia de sitios arqueológicos. Como resultado del
reconocimiento se identificaron 11 sitios adyacentes a los terrenos en
cuestión, estableciéndose a modo de protección de los sitios arqueológicos
un área de reserva arqueológica que no autorizaba el uso de los terrenos
con evidencias arqueológicas para ningún fin productivo.

Sin embargo, entre 2010 y 2013 tras reiteradas visitas rutinarias al

lugar por parte de personal del CMN de Arica, se da cuenta que las zonas
cultivadas por María Mamani sobrepasan el límite originalmente
establecido, generando así una afectación parcial de dos sitios
arqueológicos y la destrucción total de un sitio arqueológico.

En consecuencia, a estos eventos de alteración de sitios

arqueológicos, se inició un proceso judicial por daño a Monumento
Nacional que terminó en una salida alternativa relacionada a labores de
mitigación y compensación de daños. Los cuales como requerimiento
obligatorio consideraron la ejecución y planificación de dichas actividades
por un Arqueólogo. Plano de los terrenos solicitados por Maria Mamani


Daño accidental, sitios arqueológicos sector
Las Riberas: Medidas de compensación y
Mitigación

En particular, la compensación de daños se refiere a la

ejecución de acciones que de algún modo sean equiparables
materialmente a la destrucción total o irreparable de monumentos
arqueológicos, en tanto que, la mitigación se refiere a acciones de
reversión de daños causados a sitios arqueológicos parcialmente
afectados.

De este modo, se consideró como acciones de mitigación

la construcción de un cercado permanente en los límites de los
terrenos aptos para trabajo agrícola, y la limpieza de basura y
rastrojos acumulada en los sitios arqueológicos.

En tanto que, las acciones de compensación consideraron

el cercado de los sitios arqueológicos parcialmente afectados, la
instalación de letreros que indiquen la existencia de sitios
arqueológicos en el lugar, la recolección y análisis de material
arqueológico visible en la superficie y la redacción del presente
documento informativo.

Registro fotográfico de las medidas de mitigación y compensación de daños ejecutadas en los terrenos solicitados por la señora María Mamani.


¿Se conoce el número exacto de monumentos
arqueológicos en Arica y Parinacota?

La Región de Arica y Parinacota cubre un área de

1.663.387 hectáreas, de la que sólo un pequeño porcentaje ha sido
investigado con técnicas arqueológicas.

Las investigaciones, en general, requieren de largos

periodos de tiempo para entregar resultados científicamente
válidos. Bajo este concepto, no existen profesionales suficientes ni
financiamiento que nos permita conocer a plenitud el potencial del
componente arqueológico de la región o incluso de un valle en
específico.

Solo en Azapa entre 2012 y 2017 se han identificado 100

nuevos sitios arqueológicos.

Según estadísticas entregadas por la Oficina Técnica

regional del Consejo de Monumentos Nacionales en Arica y
Parinacota en los últimos 7 años se han recibido 31 denuncias por
daño y/o destrucción de monumentos arqueológicos.