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Ejecución de sentencia: el caso PUCP (RTC Exp.

N° 00322-2011-Q/TC)

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Omar Sar
University of San Martín de Porres
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EN LA BIBLIOTECA NACIONAL DEL PERU
DIRECTOR DE PRODUCCIÓN 2008-02771 (f, 01)
Boritz Baluarte Gómez
ISSN VERSIÓN IMPRESA: 1997-8812
REGISTRO DE PROYECTO EDITORIAL 31501221200141

\ ' ~: - < ' ~ ~ '¡ -;

GACETA CONSTITUCIONAl (T. 50) ' " - PROHIBIDA SU REPRODUCCIÓN TOTAL O PARCIAL
PRIMERA EDICIÓN 1 FEBRERO 201 2:1 ~ Derechos reservados. D. Leg. No 822
2, 770 EJEMPLARES ' , - ' ..._ •
@COPYRIGHT GACETA,-JURÍDICA ' • ' •, '' ;:;-, Gaceta Jurídica S.A. no se solidariza necesariamente con las opiniones
• PRIMER NÚMERO, ENERO 2008 ' '·' _. ~ '(l vertidas por ws autoras en los articulos publicados en esta edición.
, IMPRESO EN:· ' . ' ,-: ~ ~ ..~-¡·; .
~ ,'JMPRENTAEDITOR1AL:.'Et.•BÚfi0 E.J.R.l> ~ ·..!,. '

',,·:~ s:N~LBE~!O~:ó1 =~~~~~~~O~-~~:~rZ)r.~~:~1~:-~

TENDENCIAS DE Facultades de los gobiernos regionales y locales 268
JURISPRUDENCIA
ADMINISTRATIVA l. Competencias asignadas a los gobiernos regionales
11. Autonomía de gobiernos regionales
111. Límites de la autonomía regional y local
IV. Coordinaciones con los otros niveles de gobierno

ii»RBNCIPA!.ES TC convalidó violación del derecho a la consulta previa en la resolución acla-

IRESOLIJICBONIES
IDEl MIES Y VOCES ratoria del caso Majes Siguas 11
AUTORIZADAS
Juan Carlos Ruiz MoHeda 27 4

Li!.NÁLISIS Y CRÍTICA Ejecución de sentencia: el caso PUCP (RTC Exp. No 00322-2011-0!TC)

Omar Sar Suárez 279
Juntos para siempre. A propósito de la STC Exp. No 02023-2011-PNTC y la
cosa juzgada en los procesos de alimentos
Alfredo Guipa Pineda 284
La validez de la relación procesal en la ejecución de garantías en función
del emplazamiento del deudor y el garante. Una mirada al contexto previo al
Decreto Legislativo No 1069
Franco Montoya Castillo 295

TENDENCIAS DE Iniciativa probatoria del juez y admisión de prueba por hechos nuevos 301
JURISPRUDENCIA
CIVIL l. Prueba de oficio y debido proceso
11. Pertinencia para invocar hechos nuevos

PRBNCIPALIES "Lo resuelto por el TC es totalmente coherente y lógico: no solo en el fallo

RESOLUCIONES
DEl. MES V VOCES existen mandatos a ser cumplidos, sino también en la fundamentación si
AUTORIZADAS
contiene situaciones jurídicas o conductas por cumplir"
Nata/e Amprimo Pla 305
"Las sentencias del Tribunal Constitucional son obligatorias solo en el ámbito
de sus competencias. Si se pronuncia sobre un tema que no le compete, ello
no es vinculante"
Heber Joel Campos Berna/ 306
"Para determinar la paternidad de una persona fallecida el juez puede acudir a
la prueba de ADN. Si es necesaria una exhumación para realizar esta prueba,
el competente es el juez especializado y no el de paz letrado"
Clara Celinda Mosquera !lásquez 307
"La labor del juez no se acaba con la emisión de una sentencia, en etapa de
ejecución debe adoptar todas las medidas necesarias y oportunas para que
se cumpla lo ordenado"
Emilia Bustamante Oyague 308
 STC IEx¡o. No 04425-2009-PHD/lC, caso Ricardo Marn!.llei Ucedla IPérez, sobre ~al posibilidad
de acceden- al ilflformadólll eiaborZJda pon- abogados o asesores jmidkos de ia Adlminis·ím-
dónl PÚJbika
Publicada en la página web del Tribunal Constitucional el27/0l/2012.
Mediante esta decisión nuestro Supremo Intérprete de la Constitución desestimó la demanda
interpuesta contra el Ministerio de Relaciones Exteriores exigiendo la entrega de una copia del
informe elaborado sobre aspectos jurídicos internacionales de la situación del ex Presidente
de la República Alberto Fujimori, a cargo del abogado Roberto Mac Lean Ugarteche. El Cole-
giado recordó que, dentro de la regulación legislativa de! derecho de acceso a la información
pública, se tiene que el artículo 17, numeral4, del TUO de la Ley de Transparencia y Acceso a
la Información Pública se establece que la información preparada u obtenida por asesores ju-
rídicos o abogados de las entidades de la Administración Pública, cuya publicidad pudiera re-
velar la estrategia a adoptar en el trámite o defensa en un proceso administrativo o judicial, o
cualquier información protegida por el secreto profesional que debe guardar el abogado res-
pecto de su asesorado; es confidencial, y que esta restricción concluye al terminar el proce-
so. Aplicando esta normativa al caso concreto, y considerando que el proceso de extradición
del ex mandatario desde Japón concluyó con el viaje que este hiciera a Chile (donde, como se
recuerda, fue arrestado), el Tribunal Constitucional entendió que aún no se podía afirmar que
haya concluido la restricción de acceso a este informe, en la medida en que contiene detalles
sobre los actuados en los casos Barrios Altos y La Cantuta, así como opiniones técnicas que
pueden ser utilizadas en dichos procesos, los que están actualmente en sede judicial.

"El acceso a la información y la libertad de prensa son garantías de todo sistema

1 democrático, por ello sus limitaciones deben interpretarse restrictivamente"
1.

Un reconocido periodista ya está finiquitada (aunque no haya sido traído

de investigación solicita a
la Cancillería peruana un documento jurídico
que se refiere a la estrategia para obtener la
extradición del ex presidente Alberto Fujimo-
ri desde Japón.
El último párrafo del artículo 15.8.4 de la Ley
N" 27806 establece que la excepción que con-
tiene "termina al concluir el proceso". La extra-
dición a la que se refería el informe solicitado,
desde Japón sino desde Chile) y la condena
penal también se encuentra firme. Por estas
razones opino que debió declararse fundada
la demanda.
El derecho de acceso a la información como la
libertad de prensa son garantías fundamenta-
les de cualquier sistema que pretenda ser cali-
ficado como democrático y las limitaciones de-
berían interpretarse restrictivamente.

Abogado. fVíagister y Doctor en Derecho Constitucional por la Pontificia Universidad Católica del Perú. Profesor de Dere-
cho Procesal Constitucional en la Universidad de Lima, la Universidad San Martín de l'orrcs. la Academia de la Magistra-
tura y el Centro de Estudios Constitucionales del Tribunal ConstitucionaL ~

GACIE'lf'A CONSTITIJCEONAl No 50 77
r¿jNÁLISIS CONSTITUCIONAl Y !PROCESAL CONSTITUCIONAl _ _ _ _ _ _ __

STC Exp. N• 00928-2011-PA[fC, caso José Manuel Campero lara en re¡m:!seni:adón d

Ricardo Luis Salas Soler y otra, respecto al acto formal de abandono de una reiigión (solic;
tud de excomunión) y al ejercido del derecho a la libertad religiosa
Publicada en la página web del Tribunal Constitucional el 08/02!2012.
El Tribunal Constitucional desestimó la demanda de amparo interpuesta por los padres e
un menor de edad, quienes solicitaban se ordene al Obispado del Callao, realizar la excom1
nión de su hijo a través del mecanismo de la apostasía, establecido en el Códex Canónico,
que se expida la correspondiente partida de bautismo con la anotación de dicha excomunió
La decisión, en la que también se desarrollan interesantes temas como el derecho a la libE
tad religiosa, el abandono de una religión y la autonomía de las entidades religiosas, se su
tentó en que -si bien el derecho supuestamente afectado sería el de cambiar de religión o <
creencias (entendido como una rrmnifestación del derecho a la libertad religiosa)- el aband
no de una religión no requiere de la intervención de ninguna instancia de su jerarquía y, ad
más, que el libro de bautismo es un registro histórico de la administración de un sacramer
en una fecha determinada y no un conjunto de datos personales de los miembros de la rE
gión católica que impida al allí registrado abandonar dicha confesión. El Colegiado termina ,
fundamentar su decisión argumentando que el no formalizar el abandono de la Iglesia católi
no impide que los recurrentes eduquen a su hijo dentro de sus convicciones morales y relig
sas; y, segundo, que formalizar el abandono de una confesión religiosa es una cuestión int•
na de cada religión, por lo que acceder a este pedido significaría vulnerar la libertad religic
de la Iglesia católica en su dimensión colectiva o asociada, la laicidad del Estado consagra
en el artículo 50 de la Constitución y la independencia y autonomía que reconocen a esta ig
sia tanto la Constitución como el tratado internacional contenido en el Acuerdo entre el Es
do peruano y la Santa Sede de 1980; es decir, el pedido de los recurrentes iría contra el m
co constitucional y supranacional.

"La organización, funcionamiento y credo corresponden al orden interno

de cada confesión; lo contrario lesionaría el principio constitucional de in-
dependencia y autonomía"

Estamos de acuerdo con la decisión del Tri-
bunal de declarar infundada esta demanda, al
no haber encontrádo afectación al derecho de
cambiar de religión o de creencias, y valora-
mos muy positivamente el razonamiento que
utilizó, al situar en el orden interno de cada
confesión las cuestiones de organización, fun-
cionamiento y credo, como no podría ser de
otro modo. Hacer lo con-
trario hubiese supuesto
una lesión al principio constitucional de ir
pendencia y autonomía recogido en el artí1
50 del Texto Constitucional, que es la guié
rectriz para el modelo de cooperación que
las relaciones entre el Estado y las confE
nes religiosas en el Perú.

2 Doctora en Derecho con mención de doctorado europeo con especialidad en Derecho Eclesiástico por la Universida(
Coruña. Profesora en la Universidad de Piura.

78
 !Eje«:tuJdóru d® S)~nítefl11~8a~ ®~ «:<BJ§O PIUHC~
(RlfC !E~~o No @((]3522=2011=QITCr

Ornar SAR SUÁRIEZ""

Ante la queja interpuesta en el expediente No 00322-2011-QíTC, el autor ana-

liza si, mediante la apelación por salto planteada en el presente caso, puede
anularse un pronunciamiento de la judicatura ordinaria contrario a /as interpre-
taciones realizadas por el Tribunal Constitucional. Al respecto, el autor desta-
ca la fuerza vincu/atoria que ostentan /as decisiones de este Tribunal para el
Poder Judicial -aún cuando suceda que por la propia acción del demandan-
te (PUCP), este resultase vencido en el proceso- y sostiene, finalmente, que
este tipo de resoluciones resultarán anuladas si la judicatura ordinaria no se
adecúa a /as interpretaciones realizadas por el Tribunal Constitucional.

RNTIROIDlUtCCRÓN propiamente dicho 2 y no es una cuestión se-

Las sentencias del Tribunal Constitucional tie-
nen el propósito de garantizar la supremacía
de la Constitución, ya sea asegurando el or-
den jerárquico de las normas o garantizando
la eficaz defensa de los derechos fundamen-
tales, ello le ha permitido afirmar que son, "en
buena cuenta, Constitución viviente de la so-
ciedad plural" 1 .
En la doctrina se debate si el órgano de control
de la Constitución debe ser considerado como
un mero legislador negativo, como vocero
del poder constituyente o somo constituyente
cundaria, pues de lo que decidamos al respec-
to dependerá que interpretemos como legíti-
mo, o no, el contenido material de lo resuelto.
La revisión de las resoluciones judiciales, aún
cuando se desarrolle en clave de tutela de de-
rechos fundamentales y control de regulari-
dad, genera tensiones con la justicia ordina-
ria aquí y en cualquier otro sitio donde exista
esta opción.
Para muestra basta un botón: Evan Hughes, ex
Presidente de la Corte Suprema de los EE.UU.,
en la década de 1930 sostuvo que "vivimos

Nota de Gaceta Constitucional: La RTC Ex p. No 00322-20 11-Q/TC, objeto de comentarios, ha sido publicada en Gaceta
Procesal Constitucional. Tomo 2, Gaceta Jurídica, Lima, rebrero de 2012, p. 171 y ss.
** Doctor en Derecho Constitucional por la Pontificia Universidad Católica del Perú, Profesor Principal del Doctorado en De-
recho Universidad San Martín de Porres y ele Derecho Procesal Constitucional en la Universidad ele Lima. Miembro delCo-
mité Consultivo de la Revista Gaceta Constitucional.
STC Ex p. W 00048- 2004-AI/TC, r .j. 1O.
2 La primera tesis es la que se ha sostenido en el proyecto de ley 3930-2009-CR presentado por la Comisión de Justicia del
Congreso de la República y antes en el 14321-2005-CR. La segunda tesis liJe sostenida por el propio Tribunal Constitucio-
nal en la STC Ex p. No 00050-2004-Al y es mayoritaria en la doctrina nacional, al respecto puede verse LANDA ARROYO,
César, Tribunal Constitucional y Estado Democrático, 3" Edición, Lima, 2007. La tercera tesis es desarrollada por la doctri-
na espm1ola, al respecto puede verse DE OTTO PARDO. Ignacio. La Constitución como norma y el Tribunal Constitucio-
nal, Ed. Civitas, Madrid, 2001.

GACETA CONSffiUCIONAL N" 50 279

 FJNÁLISIS CML, COMERCIAL Y PROCESAL CML - - - - - - - - - - - -
bajo una Constitución, pero la Constitución es
lo que los jueces dicen que es". Dicha postu-
ra fue respondida por Franklin D. Roosevelt,
quien tras ver frustradas las iniciativas legis-
lativas de su partido en la sede constitucional,
sentenció que "hemos ( ... ) alcanzado un pun-
to en que, como Nación, debemos tomar me-
didas que salven a la Constitución de la Cor-
te y a la Corte de sí misma( ... ) queremos una
Corte Suprema que imparta justicia sujeta a la
Constitución, no por encima de ella" 3 .
Por nuestra parte, suscribimos la posición ma-
yoritaria en cuanto a la naturaleza del órgano
y entendemos que, cuando concreta el conte-
nido constitucional de un derecho o decide so-
bre su vulneración, está actuando conforme a
sus atribuciones.
l. EL CASO DE LA PONTIFICIA UNIVERSI-
DAD CATÓLICA DEL PERÚ (PUCP)
La demanda pretendía que el representante
del Episcopado en la Junta Administradora de
la herencia de don José de la Riva Agüero y
Osma se abstenga de intervenir en su derecho
de propiedad y también de solicitar la revisión
del acuerdo que excluía a la Junta de la admi-
nistración de los bienes.
El fondo de la controversia puede reducirse a
11 determinar cuál de los testamentos del cau-
sante debe prevalecer. Esta materia aparece,
prima facie, como propia de la justicia ordina-
ria pero el demandante entendió que se afec-
taba el derecho de propiedad y el órgano de
control resolvió que:
"( ... ) la interpretación de los testamentos,
así como el control de su contenido, por
regla general, son materias reservadas a
los procesos civiles y, por ende, una la-
bor propia de la jurisdicción ordinaria, en
algunas situaciones, cuando se encuen-
tre comprometida las garantías de confi-
guración constitucional directa que la inte-
gran, así como la vigencia efectiva de los
ALEINIKOFF, Alexander. El Derecho Constitucional en/a era de la ponderación. Palestra, Lima, p. 39.
4 STC Ex p. N° 03347-2009-PA/TC, f. j. 19.
Este concepto fue utilizado por primera vez en la STC Exp. N° 03283-2003-AA/TC.
280
derechos fundamentales o la supremacía
de la Constitución, la jurisdicción consti-
tucional puede asumir, excepcionalmente,
dicha función" 4 •
El Tribunal Constitucional declaró infundado
el recurso de agravio constitucional al enten-
der que la propiedad recibida, de acuerdo con
el testamento de 1938, debía ser administrada
por la Junta, disponiendo en consecuencia la
nulidad del acuerdo que la aparta.
La sentencia es desestimatoria pero se pronun-
cia por el fondo del asunto de modo que exis-
te al respecto cosa juzgada constitucional y la
interpretación realizada en torno al derecho de
propiedad, al derecho a la herencia y, en con-
creto, respecto de los testamentos, resultaría en
consecuencia vinculante para el Poder Judicial.
Lo que queda por resolver es si un pronuncia-
miento de la justicia ordinaria en el proceso ci-
vil que se sigue entre las partes, que contenga
una interpretación diferente, puede ser anula-
do por la vía de la ejecución de la sentencia
desestimatoria de amparo.
11. EL DERECHO A LA TUTELA PROCESAl
EFECTIVA
La tutela procesal efectiva (TPE) no es sinó
nimo de debido proceso, es un concepto má
amplio y, además, comprensivo de aquel.
El debido proceso comprende un aspecto fo
mal y otro material. El primero está compue:
to por el derecho al juez natural, el dered
de defensa, el derecho al plazo razonable,
motivación, etc. El segundo supone la razon
bilidad y proporcionalidad de las resolucion,
judiciales.
La TPE, por su parte, es un derecho no er
merado cuyo contenido y nomenclatura fuer
determinados por vía jurisprudencial 5 y e
engloba el acceso a la jurisdicción, el jUZ!
miento conforme al debido proceso y tamb
la eficacia de lo decidido.
_ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ _ ANÁLISIS Y CRÍTICA

El artículo 4 del Código Procesal Constitucio- El Tribunal Constitucional tiene resuelto que
nal confirma esta afirmación al disponer que: este es un:
"Se entiende por tutela procesal efectiva "[D]erecho constitucional de naturaleza
aquella situación jurídica de una persona procesal en virtud del cual toda persona o
en la que se respetan, de modo enuncia- sujeto justiciable puede acceder a los ór-
tivo, sus derechos de libre acceso al órga- ganos jurisdiccionales independientemen-
no jurisdiccional, a probar, te del tipo de pretensión formu-
de defensa, al contradicto- lada de la eventual legitimidad
rio e igualdad sustancial en U [E]I derecho a la eje- que pueda o no acompañarle
el proceso, a no ser des- cución de sentencias no a su petitorio ( ... ) la tutela ju-
viado de la jurisdicción pre- se satisface simplemente dicial efectiva permite tam-
determinada ni sometido removiendo los obstácu- bién que lo que ha sido deci-
a procedimientos distintos los iniciales para la mis- dido judicialmente, mediante
ma, sino que también hay
de los previstos por la ley, una sentencia, resulte eficaz-
que remover los posterio-
a la obtención de una reso- res, aquellos que se deri- mente cumplido. En otras pa-
lución fundada en derecho, van de una desobediencia labras, con la tutela judicial
a acceder a los medios im- disimulada ... ' ' efectiva no solo se persigue
pugnatorios regulados, a asegurar la participación o ac-
la imposibilidad de revivir ceso del justiciable a los diver-
procesos fenecidos, a la actuación ade- sos mecanismos (procesos) que habilita el
cuada y temporalmente oportuna de las re- ordenamiento dentro de los supuestos es-
soluciones judiciales y a la observancia del tablecidos para cada tipo de pretensión,
principio de legalidad procesal penal". sino que se busca garantizar que, tras el
resultado obtenido, pueda verse este últi-
En doctrina se divide la efectividad en cuatro
mo materializado con una mínima y sensa-
tipos, de acuerdo con el nivel de formalidad:
ta dosis de eficacia" 7 .
1. "Garantiza la obtención de una respuesta
del órgano jurisdiccional. Esta exigencia de mínima y sensata eficacia pa-
rece resultar insuficiente a la luz de lo estableci-
2. La respuesta del órgano jurisdiccional debe do por el artículo 22 del Código Procesal Consti-
realmente resolver el problema planteado. tucional en cuanto establece que las sentencias
3. Garantiza que la solución al problema deben ser cumplidas "en sus propios términos".
planteado sea razonable y extraída del or-
denamiento jurídico. m. LA EJECUCIÓN DE SENTENCIAS
4. Asegura la ejecución de la decisión El derecho a la ejecución de sentencias está
tomada" 6 . regulado constitucionalmente en el inciso 2 del
artículo 139 que reza:
Queda claro entonces que ninguna tutela po-
dría ser calificada como efectiva si existe una "Son principios y derechos de la función
tardía o insuficiente ejecución de lo decidido, jurisdiccional: Ninguna autoridad pue-
naturalmente que la situación es mucho peor de (... ) modificar sentencias ni retardar su
si existe lisa y llana inejecución. ejecución".

6 CHAMORRO BERNAL, Francisco. La tute/ajudicia! efectiva, Bosch, Barcelona, p. 278.

7 STC Ex p. W 00763-2005-PA/TC, f. j. 5.

GACETA CONSmUCIONAL N" 50 281

mNÁLISIS CIVIL, COMERCIAL V PROCESAL CML _ _ _ _ _ _ _ _ _ __
El proceso no termina cuando es satisfecho el
interés procesal sino cuando se concreta en la
práctica el interés material de quien obtuvo el
reconocimiento de su pretensión.
Los tratados internacionales recogen como
obligación del Estado [el] garantizar el acceso
"( ... ) a un recurso efectivo, ante los tribunales
nacionales competentes, que la ampare con-
tra actos que violen sus derechos fundamen-
tales reconocidos por la Constitución o por la
ley" (artículo 8 de la Declaración Universal de
los Derechos del Hombre); en el mismo sen-
tido, la Convención Americana de Derechos
Humanos dispone que "toda persona tiene de-
recho a un recurso sencillo, rápido o a cual-
quier otro recurso efectivo ante los jueces o
tribunales competentes, que la ampare contra
actos que violen sus derechos fundamentales
reconocidos por la Constitución, la ley o la pre-
sente Convención" (artículo 25.1 ).
Como podrá apreciarse, además del acceso
irrestricto y de la celeridad, el compromiso al-
canza también a la eficacia de lo decidido.
Debe tenerse en cuenta por último que el dere-
cho a la ejecución de sentencias no se satisfa-
ce simplemente removiendo los obstáculos ini-
ciales para la misma, sino que también hay que
remover los posteriores, aquellos que se deri-
van de una desobediencia disimulada (incum-
plimiento aparente o defectuoso, reproducción
de nuevos actos que anulan lo ejecutado al ser
incompatibles con su cumplimiento, etc.)B.
Naturalmente que la remoción de los obstácu-
los, tanto iniciales como posteriores a la eje-
cución, no debería obligar a la parte a instar
un nuevo procedimiento, sino que esta tiene
el derecho constitucional a que se resuelva en
un incidente de ejecución.
Sin perjuicio de lo dicho en el caso de la apela-
ción por salto introducida en el Exp. W 00004-
2009-PA/TC, al que haremos referencia en el
punto siguiente, el justiciable puede optar por
la vía del amparo a favor de la ejecución aun-
que parece difícil concebir un escenario donde
al justiciable le convenga un nuevo proceso.
8 CHAMORRO BERNAL, Francisco. Ob. cit., p. 307.
282
IV. lA EJECUCIÓN DE LA STC EXP. No 0334j
2009-PA/TC
La solicitud de ejecución, en este caso, es e:
traordinaria porque aunque lo normal es qL
el demandante vencedor sea quien recurre
este mecanismo, aquí es el demandado quie
lo hace.
El juzgado de ejecución (aquel que conoció '
primera instancia del proceso) rechazó la soli
tud invocando que la sentencia de autos "no pL
de restarle eficacia a la resolución judicial cu
inaplicación se solicita" y como esa resoluci
es desestimatoria de la ejecución, el deman<
do vencedor interpuso el recurso de apelac
por salto que introdujera el Tribunal Constituc
nal en el Exp. No 00004-2009-PA/TC.
En dicho caso el órgano de control de la Co
titución verificó la existencia de dilaciones
debidas en la fase de ejecución, cuando
inejecuciones lisas y llanas por lo que enl
dió que la solución a ese problema pasa:
"( ... ) por exonerar a las Salas Superi<
del Poder Judicial de conocer el rec1
de apelación interpuesto contra la ret
ción del juez de ejecución que declare
tuado, ejecutado o cumplido el mandat
la sentencia de este Tribunal, o que dE
ra fundada la contradicción u observe
propuesta por el obligado. Ello se jus
en la optimización del derecho a la efe
ejecución de lo resuelto, específica!
te, por el Tribunal Constitucional, y pe
el trámite en las salas superiores, er
de contribuir con la realización efecti~
mandato de las sentencias de este ·
nal, genera dilaciones indebidas y rE
ciones denegatorias que, en la mayo1
casos, terminan siendo controladas
rregidas por este Colegiado" (f. j. 14)
En el caso de la PUCP, el recurso de ape
por salto fue rechazado por el juez del r
so toda vez que "habiendo declarado
bunal Constitucional infundado el recur
agravio no hay ejecución que emane de
sentencia".
- - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - - A N Á l i S I S Y CRÍTICA
El Tribunal Constitucional declara fundada la
queja interpuesta contra la resolución que de-
niega el recurso de apelación por salto tenien-
do en cuenta que, el hecho de que se haya
producido el rechazo de la demanda, no se si-
gue necesariamente que no existan obligacio-
nes exigibles de dar, hacer o no hacer.
Ejemplifica recordando los procesos de ampa-
ro en los que se cuestionaba la constituciona-
lidad del ITAN. Señala que:
"Si bien en dichas sentencias se declara in-
fundada la demanda, se precisa que la Su-
nat debe abstenerse de cobrar los intere-
ses moratorias del impuesto mencionado
hasta el1 de julio de 2007, porque en dicha
fecha se publicó la STC Exp. W 03797-
2006-PA/TC, que confirmó la constitucio-
nalidad del impuesto mencionado".
De ello surge claramente que la demanda fue
desestimada, pero que existía una obligación de
no hacer en cabeza del demandante vencedor.
Asumimos que el mero rechazo de la deman-
da no implica inexistencia de obligaciones eje-
cutables pero el ejemplo ofrecido coincide con
el del caso PUCP solo en el aspecto de que la
resolución de fondo es desestimatoria pero no
en cuanto al obligado.
La Sunat fue parte del proceso, pero el Poder
Judicial no lo fue en el caso de la PUCP; sin
GACETA CONSmUCIONAL No 50
embargo, asumimos que debe seguir la inter-
pretación realizada por el Tribunal aún cuan-
do no compartiera sus fundamentos, pero no
porque tenga una obligación de hacer ejecu-
table, sino porque debe acatar la interpreta-
ción realizada por el órgano de control de la
Constitución a tenor de lo que manda el ar-
tículo VI del Título Preliminar del Código Pro-
cesal Constitucional.
V. PERSPECTIVAS
Si el Poder Judicial ha resuelto el proceso ordi-
nario seguido entre las mismas partes con una
interpretación diferente que la que realizara el
órgano de control de la Constitución, no tengo
dudas de que las resoluciones respectivas van
a ser anuladas.
Resulta perfectamente discutible si el TC po-
día pronunciarse sobre la interpretación que
corresponde asignar a los testamentos del
causante, pero al fijar la interpretación cons-
titucional en la materia no parece que haya
margen para el apartamiento de los órganos
jurisdiccionales ordinarios.
Todo parece indicar que la Junta Administra-
dora acabará controlando los bienes con cu-
yas rentas se sostiene la actividad académica
de la PUCP, pero todavía falta ver la resolu-
ción sobre el fondo, de la que no esperamos
mayores sorpresas.
283