INSTITUTO TECNOLÓGICO DE MÉRIDA

DEPARTAMENTO DE INGENIERÍA ELÉCTRICA Y

ELECTRÓNICA

INGENIERÍA ELÉCTRICA

MATERIA:

Taller de lectura

GRUPO:

Viernes de 3:00 pm a 5:00 pm

ENSAYO:

“LOS 7 HÁBITOS DE LOS ADOLOSCENTES ALTAMENTE

EFECTIVOS” DE SEAN COVEY.

ALUMNO:

Alejandro Eliezer Novelo Tamayo

FECHA: 16 de noviembre de 2018

Introducción

El libro los 7 hábitos de los adolescentes altamente efectivos, es una obra

realizada especialmente para los jóvenes con la finalidad de que estos puedan lidiar
con los problemas que se les pueda presentar a diario.

En el presente ensayo me he dado a la tarea de analizar su contenido para

poder reconocer los pasos que nos llevarán al éxito.

Toda persona basa su vida en hábitos. El éxito o fracaso de tu vida dependerá

de los hábitos que apliques para el desarrollo de la misma. En mi opinión este libro es
una excelente guía, principalmente para los adolescentes.

Este ensayo trata en sí de esta excelente guía práctica, así como de los temas
tratados en el libro, y de una manera más precisa, de los hábitos que nos ayudarán
a ejercer una vida más plena.

Todos son esenciales y sin uno, no podemos realizar el otro. Es como una
cadena, así que se logrará paso a paso.

Desarrollo

Comenzaré con su clasificación, ya que se encuentra dividido para

comprenderlo:

Los preparativos, la victoria privada, la victoria pública y la renovación.

Cada persona nos creamos paradigmas a veces sin conocer a los demás y sus
razones que adoptan para ciertas formas de comportamiento, tal vez nos guiamos
por un grupo social y creemos pertenecer también nosotros, no permitiendo a más
ingresar, pero todo esto nos podría afectar durante nuestra vida ya que nos
centramos en lo que creemos y no en lo que debe ser, así que este libro me parece
una guía idónea para saber más acerca de nuestros centros de vida en los que
muchas veces no estamos a gusto.

En los primeros tres hábitos se menciona una cosa muy importante, tal vez no
vista por muchos de nosotros “La cuenta de banco personal” pero que es eso,
bueno, es cumplir promesas hechas, ser honesto, quererse como somos y sobre todo
confiar en nosotros y en los logros que obtengamos en todos los aspectos.

Necesitamos componernos a nosotros mismos antes de poder componer a los

demás. Si quieres producir un cambio en tu vida, el lugar inicial está en ti mismo, y no
en tus padres, tu pareja o tu profesor. Todo se inicia en ti, todo va de adentro hacia
afuera.

El primer hábito es “Ser proactivo” somos todas aquellas personas que

razonamos y controlamos la manera de comportarnos con los demás dependiendo
de la situación que enfrentemos. Una persona proactiva no culpa a los demás por lo
que le está pasando, es consciente de que fueron sus decisiones las que la llevaron
donde está pero no se queda en el simple reconocimiento de sus acciones, tiene el
poder para decir "estoy aquí por las decisiones que tomé, pero mañana quiero estar
allá".

La proactividad se basa en guiarnos por nuestros valores, en no entregar a

otros el control sobre nuestras decisiones y en trabajar continuamente en nuestro
desarrollo buscando influenciar a quienes se encuentran en nuestro entorno
cercano. A diferencia de las personas reactivas que explotan en la más mínima
situación difícil por pequeña que sea, este hábito nos dice que no hay por qué
preocuparse por lo que no se pude controlar, como el clima, los padres, comentarios
que nos disgusten o el marcador final de algún partido; sino todo lo contrario
convertir las fallas en triunfos y ser parte del grupo “lo puedo hacer”.

El segundo habito “Comenzar con el fin en la mente” no dejes que otros

controlen tu vida, hablando de vida en ella se encuentran muchos caminos, los
cuales son muy difíciles de elegir por qué no todos llegan a donde se quiere, por lo
tanto es bueno hacer un enunciado de misión que servirá de guía para cuando
existen desviaciones, y así poder llegar a la meta establecida en el enunciado. Si
empezamos cada día de nuestras vidas sabiendo lo que queremos hacer y hacia
dónde nos dirigimos, seguro que llegaremos al liderazgo personal.
 Para desarrollar este hábito existe una herramienta fundamental LA MISIÓN
PERSONAL, que es una declaración basada en nuestros principios y valores, de
manera que nos permite tomar decisiones.

El tercer hábito “Poner primero lo primero” es la organización de nuestras

actividades tanto en la escuela como en la familia, hacer un diario y sobre todo
atreverse a salir de la zona de comodidad en la que todos nos sentimos seguros y
pasar a la zona de valentía para ser fuertes en los momentos más difíciles.

Éste hábito te recomienda llevar una agenda para así ir anotando lo que
realmente importa, te recomienda organizarte y te pide que tomes en cuenta tus
propósitos.

Al poner en práctica los hábitos antes descritos, se puede decir que se dio la
transición de la dependencia a la capacidad de yo hacer por mis propios medios,
de no necesitar de otro para lograr lo que se quiere, a la libertad, a lo que el Dr.
Covey denominó “la actitud del yo”.

Así llegamos a la segunda parte del libro, con la victoria pública, “La cuenta de
banco de las relaciones”, cumplir promesas que se hicieron a los amigos, padres o
profesores, ser leales, escuchar a los demás y disculparse si se es culpable.

Cuarto hábito: “Pensar ganar-ganar”, básicamente hay cuatro situaciones en

este hábito las cuales son: ganar- perder, piensas en ganar y que los demás pierdan,
pero al final estarás muy arriba de todos pero sin amigos y personas para disfrutar tus
logros por tu actitud.

Perder-ganar, ser el tapete de los demás no es una manera de vivir que le

guste a las personas o ¿sí?, otro es perder-perder, la actitud más dañina para quien
opta por seguirla, la venganza jamás ha sido buena; y la mejor de todas pensar
ganar-ganar como lo dice el hábito, ayudar a que los demás ganen junto contigo
sin duda es una recompensa para tu interior.

Éste hábito te dice que en todo lo que realices busques equidad, que no sólo
tú ganes sino que también los demás para que todos terminen contentos. Con la
cooperación se puede lograr el éxito nuestro y que los demás también logren sus
metas.

El hábito cinco: “Busca primero entender, luego ser entendido”, sin duda uno
de los mayores problemas que las personas enfrentamos porque es muy difícil
entender primero sin antes emitir un juicio pero no es imposible lograr erradicar este
mal hábito de los prejuicios. Solo no te distraigas en una conversación, fingir que
escuchas, escuchar lo que te interesa solamente o solo algunas palabras y escuchar
egocéntricamente. Si cambias estas prácticas te comprenderán cuando hables.

Lo que se busca en éste hábito es la comprensión hacia los demás por el

medio de escuchar, muchas personas sólo quieren ser escuchadas. Tú así
comprenderás a la persona y al entenderla ésta misma te pedirá ayuda, ahí es
donde puedes actuar, no antes y no después.

El hábito seis “Sinergizar”, este hábito es un desafío que consiste en aplicar en

nuestras interacciones sociales los principios de la cooperación creativa que nos
enseña la naturaleza.

Esto quiere decir que cuando uno se comunica con sinergia, simplemente
abre su mente, su corazón y sus expresiones a nuevas posibilidades. Cuando nos
comprometemos con la comunicación sinérgica no estamos seguros de cómo
saldrán las cosas o cuál será el resultado, pero interiormente experimentamos una
sensación de entusiasmo, seguridad y aventura; confiamos en que todo será mejor
después del proceso. Y ése es nuestro objetivo en el que pensamos. Las partes
implicadas obtendrán más comprensión, y el estímulo de ese aprendizaje creará un
impulso hacia una mayor comprensión. Celebrar las diferencias, trabajar en equipo,
no echar en saco roto las ideas de los demás para lograr un mejor trabajo. No es
más que el trabajo de equipo para lograr el doble de tus expectativas tomando en
cuenta tu cuenta bancaria de relaciones.

El último es el hábito siete: “Afilar la sierra”, es el hábito que se encarga de que

todos los hábitos anteriores se realicen correctamente manteniendo el equilibrio.
Significa que debemos preocuparnos por nosotros mismos y así renovar nuestras
cuatro dimensiones; la física, la espiritual, la mental y la social.

Es decir, mantener viva la esperanza, cuidar tu cuerpo, mente, alma y corazón

con actitudes positivas en las que te sientas bien cuando las apliques y poner en
práctica “LOS 7 HÁBITOS DE LOS ADOLOSCENTES ALTAMENTE EFECTIVOS” DE SEAN
COVEY. No dice más que al renovarte constantemente aumentas tu efectividad y
que la renovación debe de ser en todos tus aspectos.

Conclusión

Me resta decir que los siete hábitos son esenciales para contribuir al proceso
de desarrollo de los adolescentes proporcionándoles las herramientas para que
puedan enfrentar con seguridad y creatividad la vida, teniendo el poder sobre su
futuro, con base en valores y principios.

Los adolescentes al entrar en esta etapa recién comienzan a tomar el control

de su vida, esta obra literaria nos da referencia esencial para tomar decisiones
informadas, logrando sobresalir en la escuela, estableciendo amistades positivas,
tener buenas relaciones interpersonales, evitar confusiones con el sexo y el amor,
evitar adicciones o excesos, desarrollar autoestima y trabajar en equipo.

Más que un libro, es una guía para los momentos en los que tengamos duda
de para dónde nos debemos dirigir, porque ahí estará esperando ser consultado
para corregir el camino, e ir hacia adelante. No solo debemos conformarnos con
estar en algún lugar solo porque debe ser así, porque después solo recordaremos
que estuvimos ahí por lo que se haya vivido, al contrario debemos lograr cosas
grandiosas que sin duda dejarán huellas que jamás se borrarán de nuestra mente
por más tiempo que pase.

Es importante reconocer que los siete hábitos dependerán uno del otro de
forma correlativa y todos juntos formarán una persona exitosa y feliz.