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Clínica y Salud

ISSN: 1130-5274
clin-salud@cop.es
Colegio Oficial de Psicólogos de Madrid
España

MILLANA CUEVAS, LUIS; PORTELLANO PÉREZ, JOSÉ A.


Deterioro y evaluación neuropsicológicos en pacientes con infección por el virus de inmunodeficiencia
humana (VIH-1): estado de la cuestión
Clínica y Salud, vol. 13, núm. 1, 2002, pp. 57-87
Colegio Oficial de Psicólogos de Madrid
Madrid, España

Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=180618083003

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Clínica y Salud, 2002, vol. 13 n°. 1 - Págs. 57-87

ARTICULOS
Deterioro y evaluación neuropsicológicos en
pacientes con infección por el virus de
inmunodeficiencia humana (VIH-1): estado de
la cuestión
Neuropsychological impairment and
assessment of patients infected with human
immunodeficiency virus (HIV-1): state of the
question
LUIS MILLANA CUEVAS
JOSÉ A. PORTELLANO PÉREZ 1
RESUMEN

El VIH-1 es el agente causal del síndrome de inmunodeficiencia adquirida


(sida). Una de sus características más destacadas es su neuro t ro p i s m o ,
infecta el SNC, dando lugar a diferentes trastornos neurológicos, aparte de
infecciones y neoplasias oportunistas. El trastorno cognitivo-motor menor
(TCMM) y el complejo demencia sida (CDS) son los dos trastornos principa -
les, uno de carácter leve y otro grave. En este artículo, presentamos seis
baterias para para la evaluación neuropsicológica (entre ellas La Batería
Neuropsicológica del Centro de Investigación Neuroconductual sobre el VIH
de San Diego y las Batería Neuropsicológica de Screening) de los pacientes
con VIH, cuyo objetivo es realizar un diagnóstico precoz de estos dos tras -
tornos y contribuir al diagnóstico neurológico, con el fin de mejorar la cali -
dad de vida de estos pacientes. El objetivo de este trabajo es revisar los
conocimientos actuales médicos, neurológicos y neuropsicológicos sobre la
infección producida por el VIH-1y el sida y sobre la evaluación neuropsico -
lógica de estos pacientes.

1 Departamento de Psicobiología. Facultad de Psicología. Universidad Complutense de Madrid.

28223 Madrid, España.

CLÍNICA Y SALUD 57
Deterioro y evaluación neuropsicológicos en pacientes con infección por el VIH-1

ABSTRACT

HIV-1 is the causal agent for the acquired immunodeficiency syndrome


(AIDS). One of its most outstanding characteristics is the neuro t ro p i s m .
Shortly after the virus has entered the organism, it infects the CNS, causing
different neurological disorders, apart from opportunistic infections and neo -
plams. The Minor Cognitive-Motor Disorder (MCMD) and the Aids Dementia
Complex (ADC) are the major disorders, the former being mild in nature, the
latter being severe. Here, we discuss six batteries for neuropsychological
assessment of HIV-1 positive patients –including the Neuropsychological Bat-
tery of San Diego Neurobehavioral Research Center, and the Neuropsycholo -
gical Screening Battery- intended at achieving early diagnosis of the above-
mentioned neurological disorders and to contribute the neurological diagno -
sis. The goal is to improve patients’ quality of living. The aim of this paper is
to review the current knowledge about medical, neurological and neurological
aspects of HIV-1 infection and AIDS, and to review the neuropsychological
assessment of these patients.

PALABRAS CLAVE

ViH-1, sida, demencia, déficit cognitivo, evaluación neuropsicológica, tests


neuropsicológicos.

KEY WORDS

HIV-1, Dementia, Cognitive Impairment, Neuropsychological Assessment,


Neuropsychological Tests.

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L. Millana y J.A. Portellano

INTRODUCCIÓN Skillman, Gomatos, Kalter y Gendel-


man, 1990). Este grupo de virus pro-
Los objetivos de este trabajo son voca una serie de enfermedades que
revisar los conocimientos actuales, tienen su origen en la multiplicación
médicos (parte I), neurológicos y directa del virus en las células y en
neuropsicológicos (parte II) y sobre los tejidos, así como en infecciones
la evaluación neuropsicológica del oportunistas y neoplasias que sur-
déficit cognitivo producido por las gen como resultado del estado de
alteraciones cerebrales en estos inmunodepresión del huésped. Las
pacientes (parte III). Asimismo, enfermedades causadas pueden ser
hemos intentado presentar las que, agudas o crónicas, y con frecuencia
en nuestra opinión son las seis están asociadas con infiltración de
baterias neuropsicológicas princi- monocitos/macrófagos en los órga-
pales actualmente utilizadas para la nos afectados. Las manifestaciones
evaluación de estos pacientes. Esta clínicas de la infección producida por
presentación se hace a título infor- los lentivirus son: glomerulonefritis,
mativo y por lo tanto, hemos obvia- anemia hemolítica, hemorr a g i a ,
do cualquier comparación entre las caquexia y encefalitis. Una vez acti-
distintas baterías. vados los macrófagos, se produce la
activación de la función immunitaria
I. ASPECTOS CLÍNICOS DE LA que correlaciona con la gravedad de
INFECCIÓN POR EL VIRUS DE la enfermedad neurológica (McArthur
LA INMUNODEFICIENCIA y Kieburtz, 2000).
HUMANA TIPO 1 (VIH-1)
La enfermedad producida por el
El virus de la inmunodeficiencia VIH se caracteriza por un deterioro
humana tipo 1 (VIH-1) es el agente gradual y persistente del sistema
causal del sida. Pertenece a una inmunitario. Los linfocitos CD4+
subfamilia neurotrópica de retrovirus desempeñan un papel fundamental
conocidos como lentivirinae (Gonda en la respuesta inmunitaria ya que
et al., 1985). Además de su neurotro- son las células principalme nte
pismo, todos los lentivirus compar- infectadas por el virus, resultando
ten la capacidad de infectar las célu- inhabilitadas y eliminadas progresi-
las del sistema inmunitario, especial- vamente durante el curso de la
mente los monocitos/macrófagos, y infección (Fahey et al., 1990). Ade-
dan lugar a la enfemedad después más, se observa una serie de pato-
de periodos latentes que oscilan logías que no están directamente
entre varios meses y algunos años ligadas a la enfermedad, aunque
(Gendelman, Narayan, Kennedy- están frecuentemente asociadas a
Stoskopf y Kennedy, 1985; Meltzer, la m isma, entre ellas, tumore s

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Deterioro y evaluación neuropsicológicos en pacientes con infección por el VIH-1

malignos y diversos síndro m e s los siguientes factores: volumen de


neurológicos. La existencia de una la carga viral inicial, tropismo y
o varias de estas patologías en pre- cepa viral, tipo y eficacia de la res-
sencia de la infección por el VIH puesta inmunitaria de huésped y
son definitorias del síndrome de susceptibilidad de éste a la infec-
inmunodeficiencia adquirida (sida). ción.

La variación genética del VIH-1 2. FASE ASINTOMÁTICA


es muy alta, con un ritmo rápido
de renovación de los viriones del Después de la primoinfección y
VIH-1. de la consiguiente respuesta inmu-
nitaria, la carga viral se estabiliza y
FASES DE LA INFECCIÓN comienza el periodo asintomático
de la infección que puede durar
1. PRIMOINFECCIÓN varios años y, si no se administra
medicación antirretroviral, el pro-
Una vez que el VIH penetra en el medio es de 10 a 12 años. Una de
organismo se replica muy rápida- las razones de esta larga persisten-
mente, produciendo una explosión cia del virus en el organismo es que
viral que infecta a muchos linfocitos el VIH es capaz de mutar incluso en
CD4 y afecta a todos los ganglios el caso de una respuesta inmunita-
linfáticos. La carga viral en esta pri- ria masiva. Se sabe que la carg a
mera fase de la infección puede viral total es de 1012, con un volu-
alcanzar millones de viriones por men de 1010 viriones por día (Ho,
centímetro cúbico de sangre. Los 1997). A este ritmo de renovación
viriones están presentes a una den- viral las mutaciones que protegen
sidad elevada en todos los ganglios al virus de ataques pueden ocurrir
y tejidos linfáticos. En esta fase la aleatoriamente, y puede producirse
infección da lugar a un síndrome de esa va riación cada 4 horas.
tipo gripal: fiebre, sudora ción, Mediante un proceso de selección
malestar general, mialgias, anore- natural, el virus que sobrevive, es
xia, náuseas, diarrea e irritación de hasta cierto punto, resistente a la
garganta, y menos frecuentemente respuesta inmunitaria del sujeto. El
dolor de cabeza, sensibilidad a la virus escapa por tres vías: en pri-
luz, y también dolor y rigidez cervi- mer lugar mediante la mutación y el
cal). Este síndrome aparece entre 1 desarrollo de resistencia a la pre-
y 6 semanas después de haberse sión inmunitaria; en segundo térmi-
producido la infección. La progre- no mediante la eliminación directa
sión de la enfermedad varía mucho de los linfocitos CD4+ re s p o n s a-
de un paciente a otro, influyendo bles de la organización y de la cola-

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boración de las células que elimi- ción preventiva son: candidiasis


nan las células infectadas viralmen- esofágica, toxoplasmosis cerebral,
te; por último, a través de la activa- tuberculosis pulmonar, leucoence-
ción policlonal que conduce a la falopatía multifocal pro g re s i v a ,
apoptosis y a la muerte celular pre- encefalopatía por VIH, etc. (Gattel
coz tanto de los linfocitos CD4+ et al., 1998).
como de los CD8. El cuadro clínico
principal que pueden presentar los FACTORES QUE INTER V I E N E N
pacientes es el de una linfoadeno- EN LA PROGRESIÓN DE LA
patía persistente generalizada. ENFERMEDAD

3. FASE SINTOMÁTICA Las clasificaciones realizadas en


1986 y 1987 (C.D.C.), se basan en
Los síntomas de la infección cró- manifestaciones clínicas, mientras
nica por el VIH se consideran dis- que la de 1993 además de estas,
tintos a los de la linfoadenopatía se basa en el recuento de linfocitos
persintente generalizada, y que no CD4+ y añade otras categorías clí-
son lo suficientemente graves para nicas nuevas junto a las aceptadas
ser definitorios de sida. Los sínto- con anterioridad. Estas categorías
mas más frecuentes son: fatiga, son mutuamente excluyentes y el
mialgias, sudoración nocturna, pér- paciente ha de ser clasificado en la
dida de peso, candidiasis oral y más avanzada (Tabla 1). Existen
vaginal recurrentes, leucoplasia oral distintos factores que influyen en la
pilosa, herpes zoster fiebre y dia- velocidad de pro g resión de la
rrea prolongada, entre otros ( Gattel e n f e rmedad, siendo el periodo
et al., 1998). Estos síntomas son medio desde que se produce la
indicativos de síndrome constitu- infección hasta la aparición del sida
cional y de inmunosupresión pro- de 10 a 12 años (Levy, 1993). Sin
gresiva. embargo, el 9% de los pacientes
tiene un recuento elevado y estable
4. SIDA de CD4+ al cabo de 10 años de
infección, y el 10% muere en los
La mayoría de los adultos infec- primeros años. Por lo tanto, la velo-
tados por el VIH presentan enfer- cidad de progresión es muy varia-
medades definitorias de sida una ble. En esta variabilidad, entre
vez que el recuento de linfocitos otros, influyen los siguientes facto-
demuestra un descenso por debajo res:
de 200 linfocitos/mm3. Las enfer-
medades más frecuentes en los A. Coinfección. Se ha demostra-
pacientes que no toman medica- do que los pacientes que tienen

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Deterioro y evaluación neuropsicológicos en pacientes con infección por el VIH-1

t u r b e rculosis, hepatitis B o C, o con mejores estrategias de afronta-


herpes simple comórbidos progre- miento tienen mejor desenlace que
san más rápidamente que aquellos los pacientes más pesimistas
sin coinfección activa. La coin-fec- (Antoni y cols., 1991). Los sujetos
ción puede también acelerar la con más síntomas depresivos y
replicación viral (Nelson, Reynols- más graves tienen más conductas
K o h l e r, Oldstone y Wi l e y, 1988; de riesgo (por ejemplo compart i r
Laurence, 1990). agujas y jeringuillas) que los que
tienen menos síntomas depresivos
B. Genéticos. Existen individuos (Hawkins, Latkin, Hawkins y Chow-
que nacen con un co-receptor dife- dury, 1998). En la calidad de vida
rente que obstaculiza la entrada del influye el estado emocional y el
virus en las células e impide que deterioro neurocognitivo (Osowiecki
éste se fusione con la membrana et al., 2000). Así mismo, influye el
celular. grado de adhesión del paciente al
tratamiento, especialmente cuando
C. Edad. Las personas de más se trata de régímenes complejos
edad presentan una mayor veloci- compuestos por de 3 o 4 fármacos
dad de progresión que los adultos distintos.
más jóvenes. Una explicación de
este hecho podría ser que el sujeto, II. DETERIORO NEUROLÓGICO Y
c o n f o rme va envejeciendo, tiene NEUROPSICOLÓGICO
cada vez menos células no infecta-
das y más linfocitos CD4+ con ASPECTOS
memoria, que constituyen la diana NEUROANATOMOPATOLÓGICOS
preferida por el VIH (Becherer et al.,
1990). El virus se detecta en el sistema
nervioso central (SNC) poco tiempo
D. Cepa viral. Los estudios de después de la infección sistémica
laboratorio demuestran que algu- por el VIH; el trastorno neurológico
nas cepas del VIH son más virulen- más frecuente en esta fase de la
tas que otras y tienen más capaci- enfermedad es la meningitis asépti-
dad de formar sincitios mediante ca. Es posible que el virus se distri-
un proceso de fusión de membra- buya a través del líquido cefalorra-
nas (Alcamí, 1992). quídeo. Se ha detectado, por ejem-
plo, en el plexo coroideo en fase
E. Conducta y rasgos de perso - latente (Harouse et al., 1989). La
nalidad del sujeto infectado. Dife- predilección del virus por los espa-
rentes estudios han demostrado cios perivasculares en los ganglios
que los pacientes más optimistas y basales y en el tronco cere b r a l

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sigue la distribución del líquido 1988; Aylward et al., 1995; Price y


c e f a l o rraquídeo. Everall, Luther y Sidtis, 1996). Datos recientes ava-
Lantos (1991) encontraron una pér- lan la hipótesis de que el daño
dida de neuronas y de sinapsis y sinaptodendrítico subyace al déficit
una simplificación de las dendritas neuropsicológico y puede preceder
en áreas del cortex frontal (38% en a la pérdida neuronal y a otras
la circunvolución frontal superior). características anatomopatológicas
O t ro tipo de daño neuronal es el más características de la encefalitis
p roducido por las neuro t o x i n a s producida por el VIH. (Grant, Mar-
liberadas por los macrófagos acti- cotte y Heaton, 1999).
vados o infectados dentro o fuera
del SNC que pueden atravesar la ASPECTOS
b a rrera hematoencefálica. La NEUROPSICOLÓGICOS DE LA
mayor concentración de glucopro- INFECCIÓN POR EL VIH
teína gp41 se observa en el globo
pálido, tálamo, cuerpo estriado y Se pueden distinguir dos tipos
núcleo dentado (Lopez y Becker, de trastornos neurológicos asocia-
1998). El antígeno p24 se ha detec- dos con la infección producida por
tado en macrófagos, microglías y el VIH: el trastorno cognitivo motor
en células multinucleadas, con fre- menor (TCMM) y el comp lejo
cuencia alrededor de los vasos demencia sida (CDS).
sanguíneos (Bre w, Rosenblum,
Cronin y Price, 1995). Esta prefe- TRASTORNO COGNITIVO
rencia por las áreas subcorticales y MOTOR MENOR (TCMM)
por los sistemas fronto-subcortica-
les explicarían los distintos patro- Los pacientes presentan una
nes de déficit cognitivo observ a- afectación cognitiva que no tiene la
dos. En el complejo demencia sida, gravedad que se observa en los
los cambios anatomopatológicos individuos con demencia. Incluye
incluyen gliosis, palidez de la sus- alteraciones neuro p s i c o l ó g i c a s
tancia blanca, encefalopatía por sutiles y subclínicas que se
células multinucleadas, mielopatía encuentran en algunos pacientes.
vacuolar, cambios espongiformes La diferencia más importante radica
focales o difusos de la sustancia en el grado en el cual las alteracio-
blanca cerebral, reducción del volu- nes cognitivas influyen en las activi-
men de la sustancia gris en los dades cotidianas. Los pacientes
ganglios basales y en el córt e x pueden presentar tendencia al olvi-
posterior y una reducción generali- do, lentificación del pensamiento,
zada de la sustancia blanca (Navia, dificultades de concentración, tor-
Jordan y Price, 1986; Price y Brew, peza en la marcha y en los movi-

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Deterioro y evaluación neuropsicológicos en pacientes con infección por el VIH-1

mientos, disminución de sus intere- el Instituto Nacional de la Salud


ses y dificultad en el aprendizaje y Mental de los EEUU. El estado de
en la recogida de nueva informa- ánimo fue evaluado mediante la
ción. También se observa labilidad Escala de Depresión de 20 items
emocional o apatía (Ayuso Mateos, del Centro de Estudios Epidemioló-
1997). A menudo se quejan de gicos. La evaluación funcional se
incapacidad para organizar bien llevó a cabo con las Escalas de
sus actividades. Estos trastornos Actividades Instrumentales de la
n e u ropsicológicos más leves se Vida Diaria de Lawton y Bro d y
observan con frecuencia en sujetos (Lawton y Brody, 1969), la Escala
positivos para el VIH en fases más de Automantenimiento Personal de
avanzadas de la enfermedad (cate- Lawton y Actividades de la Vi d a
gorías B y C de la clasificación pro- Diaria de Katz (Katz, Ford y Mosko-
puesta por los Centros para el Con- witz, 1963) y los Items de Funcio-
trol y la Prevención de Enfermeda- namiento en Tareas de los Estudios
des de Atlanta (CDC). Sin embargo, sobre Resultados Médicos (Stewart
hay también un subgrupo de suje- y Ware, 1993). Asimismo, se realizó
tos con VIH en una fase relativa- una exploración neurológica, prue-
mente inicial de la infección (grupo bas de laboratorio (recuento de
A de los CDC) que sufren TCMM, a CD4+, hemoglobina, hematocrito,
pesar de que su enfermedad médi- niveles de microglobulina b 2 ) y
ca no esté aún muy avanzada (Hea- anamnesis. Estas evaluaciones se
ton et al., 1994). utilizaron para desarrollar un algo-
ritmo con el cual clasificar a los
En 1996 se comprobó la utilidad sujetos, bien como sujetos que no
del algoritmo para el diagnóstico satisfacían los criterios de la ANN
del TCMM y del CDS de la AAN de déficit cognitivo importante o
cuando se realizó una evaluación bien como sujetos que presentaban
n e u ropsicológica, estandarizada, déficit con TCMM o CDS (Dana
neurológica, psiquiátrica y funcional Consortium, 1996) (Tabla 5).
de 271 sujetos. Se llegó a la con-
clusión de que es infrecuente tener Este algoritmo indica que es muy
déficit tanto funcional como cogni- infrecuente que las personas que
tivo sin que existan déficits com- reúnen los criterios de inclusión y
p o rtamentales y/o neuro l ó g i c o s exclusión para el estudio antes
asociados. También es improbable citado tengan déficit tanto funcio-
que se observe únicamente déficit nales como neuropsicológicos, sin
funcional. Se incluyeron en la medi- tener al mismo tiempo alguna alte-
da de lo posible las pruebas neu- ración comportamental o neurológi-
ropsicológicas recomendadas por ca. El 21% de los sujetos no

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reunían ningún criterio de déficit en dem encia asociada con el VIH


las tres áreas. (Becker, Martín y López, 1994), ésta
puede verse afectada en estadios
COMPLEJO DEMENCIA SIDA tempranos. La memoria verbal
(CDS) puede estar deteriorada con pre-
servación del reconocimiento. Las
Inicialmente fue descrito como características clínicas del CDS se
una demencia subcortical. Sin describen en la Tabla 2, y los esta-
embargo, más recientemente se ha dios por los que atraviesa en la
c o m p robado que es un trastorn o Tabla 3. Teóricamente, con esta
mixto córtico-subcortical. Más ade- clasificación se podría diagnosticar
lante en su progresión, afecta tam- una demencia grave sólo con mani-
bién a zonas corticales. Consiste festaciones pronunciadas de pro-
en una serie de alteraciones cogni- blemas motores en ausencia de
tivas, comportamentales, motoras y déficits cognitivos. La Organización
neurológicas que van apareciendo Mundial de la Salud elaboró los
de forma pro g resiva. El aspecto siguientes criterios para lo que
más destacado es un deterioro denominó demencia asociada con
cognitivo progresivo. Los pacientes el VIH-1: disminución de la memo-
con demencia asociada con el VIH ria (que puede ser o no lo suficien-
presentan lentificación psicomoto- temente grave como para afectar a
ra, pérdida de concentración, dete- las actividades de la vida diaria),
rioro de la capacidad de abstrac- disfunción motora y, con menor fre-
ción, déficit mnésicos de leves a cuencia, afasia, apraxia y agnosia,
moderados, alteraciones en la psi- con una duración mínima de los
comotricidad fina, en las habilida- síntomas de al menos un mes. Por
des visoespaciales y en las funcio- último, la Academia Americana de
nes ejecutivas, tales como planifi- Neurología (AAN) ha publicado una
cación, resolución de problemas y definición específica y operativa
formación de conceptos (Janssen para esta enfermedad. Este siste-
et al., 1988; Poutiainen, Livanainen, ma diagnóstico se conoce con el
Elovaara y Lähdevirta, 1988; Perdi- n o m b re de comp lejo cognitivo
ces y Cooper, 1989; Stern et al., motor asociado con la infección
1991; Catalan y Burges, 1996.). producida por el VIH-1. La catego-
Pueden observarse dificultades en ría principal del complejo demencia
el aprendizaje de nuevo material y asociado con el VIH-1 se aplica a
en el recuerdo de información anti- los pacientes que tienen alteracio-
gua (Grant et al., 1990). Aunque no nes predominantemente cognitivas.
es necesario observar un deterioro La subcategoría de mielopatía aso-
en la memoria para diagnosticar la ciada con el VIH-1 se usa para los

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Deterioro y evaluación neuropsicológicos en pacientes con infección por el VIH-1

sujetos que tienen problemas prin- de supervivencia. En un estudio


cipalmente motores. La primera se realizado por Ellis et al. (1997), se
divide a su vez en una serie de demostró que aquellos sujetos con
fases (Tabla 4) e incluye las catego- deficit neuropsicológico tenían un
rías probable y posible. Esta última riesgo significativamente más alto
categoría se aplica cuando no se de muerte que aquellos sin déficit.
pueden excluir otras causas, tales Las tasas más elevadas de mortali-
como infecciones oportunistas y dad se encontraron en aquellos
neoplasias (American Academy of sujetos que reunían los criterios de
Neurology Aids Task Force, 1991). TCMM. Por lo tanto, no está claro
si la relación entre déficit neuropsi-
CONSECUENCIAS DE LOS cológico y supervivencia existe
TRASTORNOS COGNITIVOS porque los sujetos deteriorados tie-
RELACIONADOS CON EL VIH nen menos capacidad para benefi-
ciarse del apoyo social y médico o
Aunque la literatura no es amplia, tienen una cepa más virulenta de la
hay evidencia de que la disfunción e n f e rmedad, o si la persona con
cognitiva influye de forma relevante déficit es por sí misma más sucep-
en el funcionamiento diario de los tible al virus.
individuos infectados y es un factor
de predicción de superv i v e n c i a . 2. Calidad de vida. Kaplan et al.
Esto parece ser cierto incluso para (1995) encontraron en una muestra
aquellas personas que no han sufri- de casi 600 sujetos que existe una
do de una demencia incapacitante. relación inversamente proporcional
entre calidad de vida y la gravedad
1. Rendimiento neuropsicológico del déficit. Éste aumentaba incluso
como predictor de supervivencia. El después de controlar los factores
desarrollo de la demencia en suje- médicos relevantes.
tos con sida correlaciona con un
menor tiempo de superv i v e n c i a . 3. Tratamiento médico. Albert et
McArthur et al., (1993) informaron al. (1999), utilizando un nuevo ins-
de que la mediana de supervivencia trumento de evaluación del trata-
después del diagnóstico de miento de la medicación, examina-
demencia era soló de 6 meses. ron la relación entre funcionamiento
Además, el déficit neuropsicológico neuropsicológico y capacidad del
no suficientemente grave para dar sujeto para preparar correctamente
lugar a un diagnóstico de demencia las medicaciones y entender la
y que ocurre durante la fase médi- i n f o rmación de la pre s c r i p c i ó n
camente asintomática de la infec- escrita. Encontraron que los déficit
ción también puede ser predictivo neuropsicológico en memoria, fun-

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cionamiento ejecutivo y destrezas cidad laboral en los sujetos positi-


psicomotoras estaban asociados vos para el VIH fue de 2,76, com-
con una falta de interés en el cum- parado con los sujetos seronegati-
plimiento del tratamiento médico, y vos ( ≥ 24 meses de actividad
que los sujetos con déficit neurop- laboral de menos de 20 horas a la
sicológico tenían más dificultades semana comp ara do co n un os
con la adhesión al tratamiento. antecedentes laborales de más de
Reicks et al. (1999) también infor- 20 horas a la semana). Análisis
man de que los sujetos seropositi- p o s t e r i o res indicaron que en el
vos para el VIH neuropsicológica- grupo médicamente asintomático
mente deficitarios obtienen peores el desarrollo de un déficit neurop-
puntuaciones en una escala de fun- sicológico importante era un factor
cionamiento diario, incluyendo lo relevante en la incidencia de inca-
relacionado con el régimen de la pacidad laboral, incluso después
medicación. de ajustar para el estado sintomá-
tico, recuento de lifocitos CD4+ e
Está claro que el no tomar la incapacidad laboral.
medicación antirre t roviral de la
forma prescrita puede aumentar el 5. Conducción de vehículos a
riesgo de desarrollar resistencia a m o t o r. Sesenta y ocho sujetos
los fármacos. seropositivos para el VIH participa-
ron en simulaciones de conducción
4. Actividad laboral. Heaton et para explorar la relación entre fun-
al. (1996) encontraron que los cionamiento neuropsicológico y
sujetos seronegativos para el VIH capacidad de conducción. Los
realizaban mejor sus actividades sujetos con déficit neuropsicológi-
laborales que los sero p o s i t i v o s co no pudieron realizar la tarea en
para el VIH con déficit neuropsico- simulación de la forma validada
lógico. Al comparar los anteceden- a n t e r i o rmente a una velocidad
tes personales laborales anteriores mucho más alta que los sujetos
a la infección se comprobó que el seropositivos para el VIH sin déficit
grupo con déficit neuropsicológico (62% frente al 24%, P< 0.001), y
mostraba deterioro significativo en p resentaban un número más alto
su capacidad laboral. Albert et al. de accidentes en la simulación de
(1995) examinaron a 207 hombres conducción en una ciudad (2,3
homosexuales y bisexuales, de los accidentes frente a 1,5). Existe evi-
cuales 123 eran seropositivos para dencia de que el déficit cognitivo
el VIH. Encontraron que durante asociado con el VIH puede afectar
c u a t ro años y medio de segui- a la capacidad de conducción
miento el riesgo relativo de incapa- (Marcotte et al., 1999).

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Deterioro y evaluación neuropsicológicos en pacientes con infección por el VIH-1

III. EVALUACIÓN 3. Se de ben incluir también


NEUROPSICOLÓGICA medidas para la evaluación de la
depresión y la ansiedad.
Para la evaluación neuropsicoló-
gica se recomienda utilizar una Hay que señalar que esta batería,
batería que incluya todas las áreas en su versión breve, no incluye
cognitivas. Presentamos aquí cinco tests de velocidad motora ni de
de las baterías más utilizadas en la abstracción, las cuales son áreas
evaluación de los déficits neuropsi- cognitivas que con frecuencia pre-
cológicos del VIH-1. sentan deterioro en la demencia
asociada con el VIH-1.
E l National Institute of Mental
Health (NIMH) de los Estados Uni- La Batería Neuropsicológica del
dos (Butters et al., 1990) propone Centro de Investigación Neurocon -
una batería que incluye 10 áre a s ductual sobre el VIH de San Diego
cognitivas: inteligencia pre m ó r b i- (Kelly et al., 1996). Tiene un tiempo
da, atención, velocidad de proce- de aplicación de aproximadamente
sa mi en t o de la i n fo rm a c i ó n , c u a t ro horas y permite valorar 8
memoria, abstracción, lenguaje, áreas cognitivas y obtener una pun-
ca pac ida des vis oe s pac ia les , tuación global del nivel de deterio-
capacidades constructivas, capa- ro. Se puede reducir a una duración
cidades motoras y área psiquiátri- de hora y media o de cuarenta y
ca. La a dmini strac ión de e sta cinco minutos, en el caso de suje-
batería lleva de 7 a 9 horas, pero tos que por motivos médicos (fati-
existe una versión más corta que ga, inmunosupresión import a n t e ,
re q u i e re sólo d e 1 a 2 ho ras etc) no pueden completar toda la
(Tabla 6). Además, el NIMH hace batería. (Tabla 7).
las siguientes recomendaciones:
La Bateria Neuropsicológica de
1. Los procesos atencionales y S c re e n i n g ( F e r nández y Levy,
la velocidad de pro c e s a m i e n t o 1990). Esta batería sirve para eva-
deben recibir especial atención luar no sólo los efectos de la infec-
d e n t ro de la exploración neuro p- ción por el VIH sino también los
sicológica. p roducidos por la neuro t o x i c i d a d
causada por los fármacos antirre-
2. Deben incluirse pruebas que trovirales, de restauración del siste-
dectecten los cambios sutiles del ma inmunitario y otros agentes far-
funcionamiento cognitivo en las macológicos. A esta batería se le
fases iniciales de la infección por el pueden añadir o quitar tests depen-
VIH. diendo del estado del paciente. Se

68 CLÍNICA Y SALUD
L. Millana y J.A. Portellano

tarda unas dos horas en adminis- et al., 1990; Selnes et al., 1990;
trar la batería completa, y la mayo- McArthur et al., 1989; Llorente et
ría de los subtests que la compo- al., 1998) es un estudio epidemioló-
nen son repetibles o tienen formas gico para evaluar la historia natural
alternativas para evitar el efecto de de la infección por el VIH y para
a p rendizaje, y pueden utilizarse identificar los factores de riesgo de
para realizar un seguimiento del la infección. Se realizó una evalua-
paciente durante el curso de la ción longitudinal a gran escala
enfermedad. (Tabla 8). En el caso basada en los siguientes criterios
de un sujeto que sufra CDS, esta para la elección de la batería neu-
segunda batería resulta exhaustiva ropsicológica:
y, por lo tanto, su administración
lleva demasiado tiempo y puede 1) los tests tienen que evaluar
ser muy fatigosa para los pacien- una amplia gama de déficit
tes, especialmente para aquellos cognitivos,
con un deterioro físico y mental
importante. Sin embargo, los ele- 2) Deben ser suficientemente
mentos de la batería se pueden fiables para evitar los efec-
adaptar a este tipo de pacientes. tos del aprendizaje por la
Para los que sólo pueden respon- práctica
der “si” o “no”, las observaciones
se pueden limitar únicamente a las 3) Deben ser sensibles a los
alteraciones más notables de la posibles cambios en el fun-
conducta. Además la comprensión cionamiento cognitivo relacio-
se puede evaluar mediante el Sub- nados con la evaluación de la
test de Recepción Auditiva del Illi - infección por el VIH
nois Test of Psicholinguistic Abilities
Auditory Recepcion Subtest (Levy, 4) El tiempo de realización de las
Fernández y Pirozzolo, 1988), que pruebas debe ser breve.
p e rmite determinar si el paciente
está o no respondiendo al azar, a El MACS estudia las siguientes
través de un análisis del patrón de áreas cognitivas: lenguaje, memo-
respuesta. Se trata de una prueba ria, atención, velocidad motora,
para evaluar el grado de compren- destreza manual y funcionamiento
sión de cualquier paciente con psicomotor (Tabla 9).
demencia y con un repertorio limi-
tado de respuestas. Incluye además una evaluación
de la depresión mediante la escala
El Estudio de Cohorte Multicén - de depresión CES (CES-D) (Radloff,
trico sobre el SIDA (MACS) (Miller 1977).

CLÍNICA Y SALUD 69
Deterioro y evaluación neuropsicológicos en pacientes con infección por el VIH-1

La Batería Cantabria se utiliza Por último existen una serie de


para la evaluación neuropsicológica factores que pueden afectar al ren-
de pacientes infectados por el VIH- dimiento neuropsicológico en la
1, cuya administración re q u i e re infección por el VIH, tales como
unos 90 minutos (Tabla 10). Es edad, nivel educativo, género, raza,
usada en la Unidad de Investiga- síntomas constitucionas, fátiga, uso
ción en Psiquiatría Clínica y Social y abuso de drogas, alcohol, fase de
de Cantabria (UIPCSC) (Ay u s o la enfermedad y estado de ánimo.
Mateos, 1997).
IV. CONCLUSIONES
Utilizan para estimar el funciona-
miento premórbido el subtest de En definitiva, la evaluación neu-
vocabulario de la WAIS, pero la ropsicológica puede ser de gran
entrevista con el paciente y con sus utilidad para dar respuesta a toda
familiares ocupa un papel impor- una serie de preguntas que surgen
tante en la valoración. ante el CDS y el TCMM provocados
por el VIH-1, tales como competen-
La Bate ría ne uro p s i c o l ó g i c a cia del paciente, etiología orgánica
d e s a r rol l ada po r Pi lar Arr a n z frente a etiología funcional y pro-
(Arranz, 1990), utilizando un méto- g resión del deterioro cognitivo.
do estrictamente neuro p s i c o l ó g i- Además, estos tests pueden tam-
co. Seleccionó las pruebas basán- bién servir para elegir el tipo de tra-
dose en la sensibilidad de las mis- tamiento, tanto médico como neu-
mas por ser indicadoras de las ropsicológico (intervención psicoló-
alteraciones cognitivas y motoras gica). Es decir, la evaluación neu-
más características en este tipo ropsicológica de los pacientes
de enfermedad. Para re a l i z a r l a infectados por el VIH-1 tiene doble
siguió el patrón de disfunciones importancia: teórica y práctica. El
que acompañan a la demencia psicólogo clínico, por tanto, debe
s u b c o rtical (Tabla 11). El tiempo conocer al menos los aspectos
de aplicación de la batería está prácticos de esta evaluación, para
comprendido entre 20 y 25 minu- contribuir así, en el contexto de la
tos. atención multidisciplinar al pacien-
te, a la calidad de vida de éste.
Para esta batería se elaboraron
t res cuestionarios específicos: En este sentido, no debe olvidar-
camb ios de comport a m i e n t o , se que diferentes estudios han
expectativas del sujeto, situaciones demostrado que puede producirse
vitales y observación de las medi- una mejora en el rendimiento cogni-
das preventivas propuestas. tivo de los pacientes infectados por

70 CLÍNICA Y SALUD
L. Millana y J.A. Portellano

el VIH-1 cuando son tratados con ropsicológica, tarea que compete al


zidovudina y, quizá, otros antirretro- psicólogo clínico. Por otro lado, el
virales. Además, diferentes progra- conocimiento de las competencias y
mas de intervención psicosocial de los déficits cognitivos de las per-
pueden también mejorar los déficits sonas infectadas por el VIH-1 puede
cognitivos de estas personas. Por lo contribuir a mejorar la planificación
tanto, es importante realizar un diag- de los servicios sociales (e.j., asis-
nóstico precoz de los déficits cogni- tencia domiciliaria) que re c i b e n
tivos mediante una evaluación neu- estos pacientes.

CLÍNICA Y SALUD 71
Deterioro y evaluación neuropsicológicos en pacientes con infección por el VIH-1

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CLÍNICA Y SALUD 75
Deterioro y evaluación neuropsicológicos en pacientes con infección por el VIH-1

TABLA 1
Revisión de 1993 del sistema de clasificación del VIH.

RECUENTO DE CATEGORIAS CLÍNICAS.

LINFOCITOS (A) (B) (C)*


Asintomático Sintomático Criterios de SIDA
CD4 mm3. LPGxx pero no (A) según CDC/OMS (1987)
Infección aguda. ni (C).

1. =500 (= 29%). A1 B1 C1
2. 200-49 (14-28%). A2 B2 C2
3. <200 (< 14%). A3 B3 C3

A3, B3, C1, C2, C3 = definición de sida en los EEUU.


C1, C2, C3 = definición de sida, según los CDC/OMS de 1987 más tres enfermedades
definitorias (definición europea).
*Nuevas patologías añadidas en 1993 a la definición de sida: neumonia recurrente, carci-
noma de cérvix invasivo, tuberculosis pulmonar.
xx LPG: linfoadenopatía persistente generalizada.

Fuente: MMWR,41:RR-17.

76 CLÍNICA Y SALUD
L. Millana y J.A. Portellano

TABLA 2
Características clínicas del CDS.

ESTADIO INICIAL
A. Manifestaciones comportamentales
Apatía. Pérdida de interés por el trabajo. Pérdida de la libido. Aislamien-
to social. Aplanamiento afectivo. Disforia. Psicosis. Trastornos de per-
sonalidad.
B. Cognitivas
Pérdida de memoria. Pérdida de atención y concentración. Bradipsi-
quía. Bradilalia. Deterioro cognitivo global.
C. Motoras
Pérdida del equilibrio. Pérdida de fuerza en las extremidades inferiores.
Deterioro de la escritura. Lentitud psicomotora. Disartria transitoria.
Temblores.
D. Otras manifestaciones neurológicas
Cefaleas. Temblores. Convulsiones. Delirium. Otros signos neurológicos
(disartria transitoria, ataxia, sintomatología piramidal, paresias). Altera-
ción de los movimientos oculares rápidos y propositivos.

ESTADIO AVANZADO
A. Comportamentales
Síntomas negativos notables. Psicosis orgánica. Mutismo. Falta de
control de los impulsos y diferentes trastornos conductuales.
B. Cognitivas
Deterioro marcado de la memoria y de la orientación temporoespacial.
Deterioro cognitivo global.
C. Otras manifestaciones neurológicas
Delirium. Convulsiones. Temblores. Signos de liberacion frontal. Mielo-
patía con paraparesia espástica. Hemiparesia. Ataxia. Hiperreflexia.
H i p e rtonía. Neuropatía sensorial. Lentificación psicomotora grave.
Incontinencia urinaria y fecal.

Fuente: Salvador, L y cols. 1995.

CLÍNICA Y SALUD 77
Deterioro y evaluación neuropsicológicos en pacientes con infección por el VIH-1

TABLA 3
Sistema de clasificación del CDS por Estadios.

ESTADIO GRAVEDAD CARACTERÍSTICAS

0 Normal Función cognitiva y motora normal.

0’5 Equívoca/subclínica Síntomas equívocos mínimos o ausentes sin altera-


ción en el trabajo ni en las actividades de la vida
diaria. Signos leves, tales como hocico catatónico.
También puede presentarse lentificación de los
movimientos oculares o de las extremidades.

1 Leve Capaz de llevar a cabo, si no todas, la mayoría de


las actividades laborales o de la vida diaria. Eviden-
cia de déficit motor o intelectual, tal y como se
detecta mediante la anamnesis o exploración neu-
ropsicológica. Puede caminar sin ayuda.

2 Moderada Capaz de llevar a cabo las actividades básicas de


cuidado de sí mismo. Incapaz de trabajar o de reali-
zar las actividades más difíciles de la vida diaria.
Puede requerir ayuda ambulatoria.

3 Grave Incapacidad intelectual importante (no puede seguir


las noticias o encargarse de los asuntos persona-
les, no puede seguir una conversación complicada,
lentificación considerable de todas las respuestas
cognitivas), incapacidad motora (no puede caminar
sin ayuda, lentificación y torpeza de los brazos).

4 Fase terminal Estado casi vegetativo. La comprensión intelectual


de situaciones sociales y las respuestas son rudi-
mentarias. Mutismo total o casi total. Paraparesia o
paraplejia con incontiencia fecal y urinaria.

Fuente: Everall, 1995.

78 CLÍNICA Y SALUD
L. Millana y J.A. Portellano

TABLA 4
Definición operativa de la demencia asociada al VIH Tipo 1.

PROBABLE (o muy posible)


Debe cumplir cada uno de los 4 criterios siguientes:

1. A.- Alteraciones adquiridas, durante al menos 1 mes, en al menos dos de las siguientes
áreas cognitivas: atención/concentración, velocidad en el procesamiento de la informa-
ción, abstracción/razonamiento, aptitudes visoespaciales, memoria/aprendizaje y
habla/lenguaje.

1. B.- Disfunciones cognitivas que afectan al rendimiento laboral o a las actividades de la


vida diaria. Este déficit no puede explicarse sólo por enfermedades sistémicas.

2.- Al menos uno de los siguientes criterios:


A.- Alteración adquirida del funcionamiento o rendimiento motor, documentada en la
exploración clínica, tales como enlentecimiento de la capacidad para realizar
movimientos rápidos, marcha anormal, falta de coordinación de las extremidades,
hiperreflexia, hipertonía, debilidad, o registradas mediante tests neuropsicológicos:
velocidad psicomotora fina, destreza manual y habilidades motoras perceptuales.
B.- Deterioro de la motivación o del control emocional, o cambio en la conducta
social. Puede incluir alteraciones de la personalidad con apatía, inercia, irritabili-
dad, labilidad emocional, déficit en el juicio con respecto a las situaciones socia-
les, y comportamiento socialmente inapropiado o desinhibición.

3.- Ausencia de obnubilación de conciencia durante un periodo suficiente para establecer


el criterio número 1.

4.- Exclusión de otra etiología como causa de los síntomas, entre ellas infecciones opor-
tunistas o neoplasias en el sistema nervioso central y trastornos psiquiátricos, mediante
búsqueda de antecedentes personales, exploración clínica, pruebas de laboratorio (por
ejemplo, análisis de sangre y punción lumbar) y pruebas de neuroimagen.

POSIBLE
Debe cumplir uno de los siguientes criterios:
1.- Los criterios 1, 2 y 3 mencionados en el apartado de “Probables” están presentes,
pero hay además otra causa posible.

2.- Los criterios 1,2 y 3 mencionados en el apartado de “Probables” están presentes pero
la evaluación clínica es incompleta.

De la AAN (Academia Americana de Neurología), 1991.

CLÍNICA Y SALUD 79
Deterioro y evaluación neuropsicológicos en pacientes con infección por el VIH-1

TABLA 5
Modificación del algoritmo de la Academia Americana de Neurología.

COMPLEJO DE DEMENCIA ASOCIADO AL VIH - 1.


Deben reunirse o satisfacerse los criterios 1 y 2:

1. Puntuación de una desviación estándar por debajo de las normas, ajustadas


para educación y edad en 2 de 8 tests neuropsicológicos o dos desviaciones estandar
por debajo de las normas en una de los 8 tests.

2. Necesidad de ayuda o dificultad del paciente (debido a un déficit bien físico o


bien cognitivo) en una de los siguientes IADL (Actividades Instrumentales de las Escalas
de la Vida Diaria de Lawton y Brody):

- Utilizar el teléfono
- Manejar dinero
- Tomar la medicación
- Llevar a cabo tareas domésticas que requieren poco esfuerzo
- Hacer la colada
- Preparar la comida
- Ir a comprar a la tienda de ultramarinos o caminar pequeñas distancias.

Y debe satisfacer el criterio 1 o 2 de los siguientes:

1. Cualquier déficit en las siguientes áreas:

- fuerza en las extremidades inferiores, coordinación, golpeteo con los dedos,


movimiento alternante de la mano o de las manos, agilidad con la pierna o rendimiento en
el test de tablero y clavijas de dos desviaciones estandar por debajo de la media para la
mano dominante.

2. depresión frecuente autoinformada que interfiere en el funcionamiento de la vida


diaria, pérdida de interés en las actividades usuales o labilidad emocional o irritabilidad.

ESTADIFICACIÓN DEL COMPLEJO DEMENCIA SIDA (CDS):

LEVE: los resultados en el IADL deben atribuirse a un origen cognitivo.

MODERADO: Satisface los criterios neurológicos y psiquiátricos para el complejo


demencia sida de carácter leve más un déficit funcional bien al utilizar el teléfono o bien al
tomar la medicación o manejar dinero más 2 o 3 de otras IADL o ADL (movilidad en casa,
comer, vestirse, mantener un buen aspecto personal, aseo, acostarse y levantarse de la
cama, baño) atribuido a una fuente cognitiva.

80 CLÍNICA Y SALUD
L. Millana y J.A. Portellano

TABLA 5 (CONT.)
Modificación del algoritmo de la Academia Americana de Neurología.

GRAVE: satisface los criterios neurológicos y psiquiátricos para el CDS modera-


do, y tiene además un déficit al utilizar el teléfono y al tomar la medicación o al manejar
dinero al menos en 4 IADL o ADL (escala de Automantenimiento Personal de Lawton y
Actividades de la vida diaria de Katz) que son atribuibles a un origen cognitivo.

TRASTORNO COGNITVO MOTOR MENOR ASOCIADO CON EL VIH-1 (TCMM).


No satisface los criterios para el trastorno cognitivo motor asociado con el VIH-1 y satisfa-
ce los criterios 1 y 2 siguientes:

1º. Déficit en al menos dos de las siguientes áreas:

- Lentificación mental: símbolos-dígitos al menos una desviación estándar por


debajo de las normas ajustadas para edad y nivel educativo.

- Memoria: El Test de Aprendizaje Verbal Auditivo de Rey (puntuación total) al


menos una desviación estándar por debajo de las normas.

- Disfunción motora: cualquier déficit en el Test de Golpeteo con los Dedos o


pronación/supinación.

- Incoordinación: déficit leve en la marcha o torpeza al moverse, labilidad emo-


cional o apatía y retracción de todo contacto social.
y:

2. Déficit en al menos una de las medidas funcionales atribuidas en parte a la


función cognitiva:

- Necesidad de descansar con frecuencia.

- Disminución del tiempo normal dedicado a las actividades de la vida diaria


(necesidad de tener menos actividades).

- Se logra menos de lo que se desea cuando se plantea un objetivo.

- No puede llevar a cabo las actividades con tanto cuidado o tanta atención
como le gustaría.
- Limitación en las actividades laborales o en otras.
- Dificultad para llevar a cabo las actividades normales de la vida diaria.
- Requiere ayuda especial para llevar a cabo las actividades normales.

Fuente:Dana Consortium,1996.

CLÍNICA Y SALUD 81
Deterioro y evaluación neuropsicológicos en pacientes con infección por el VIH-1

TABLA 6
Batería neuropsicológica propuesta por el National Institute of Mental Health
(NIMH) de los Estados Unidos
1. TEST DE INTELIGENCIA PREMÓRBIDA
Vocabulario. Escala de Inteligencia de Weschler Revisada para Adultosa
Lectura. Test Nacional de Lectura para Adultos.
2. ATENCIÓN
Dígitos. Escala de Memoria de Weschler Revisada
Secuencias Visuales. Escala de Memoria de Weschler Revisadaa
Test de Búsqueda Visual (Rennick, 1979)
3. VELOCIDAD DE PROCESAMIENTO DE LA INFORMACIÓN
Tarea de Búsqueda de Sternberg
Pruebas de Tiempo de Reacción Simple y de Elección
Test de Adición Auditiva en Serie de Dificultad Crecientea
4. MEMORIA
Test de Aprendizaje Verbal de Californiaa
Test de Memoria de Trabajo
Test de Reproducción Visual Modificado
5. ABSTRACCIÓN
Test de Categorías
Test del Trazo, Partes A y B

6. LENGUAJE
Test de Nominación de Boston
Test de Fluidez de Categorias y Letras
7. FUNCIONES VISUOESPACIALES
Test de Figuras Encajadas
Test del Sentido de la Dirección de Money Estandarizado en un Mapa
de Carreteras
Clave de Números

8. CAPACIDADES CONSTRUCTIVAS
Test de Construcciones con Cubos
Test de Rendimiento Táctil

9. FUNCIONES MOTORAS
Test de Clavijas y Tablero
Test de Golpeteo con el Dedo
Fuerza en la Mano con un Dinamómetro

10. EVALUACIÓN PSIQUIÁTRICA


Entrevista Diagnóstica
Escala de Hamilton para la Depresióna
Cuestionario de Ansiedad Estado/Rasgo
Mini-Mental

a Bateria abreviada.
Fuente: De Butters, N.; Grant, I. et al., 1990.

82 CLÍNICA Y SALUD
L. Millana y J.A. Portellano

TABLA 7
Batería neuropsicológica del centro de investigación neuroconductual sobre
el VIH de San Diego.
1.- ÁREA VERBAL
Test de Nominación de Bostonb,c
Fluidez de Palabras de Thurstone (escrito)c
Vocabulario de la WAIS – R
Fluidez de Letras y Categorias (oral)

2.- FUNCIONES EJECUTIVAS ( Flexibilidad cognitiva/abstracción)


Test de Categorias
Test del Trazo b,c

3.- MEMORIA/APRENDIZAJE
Test de Memorización de Historias b,c
Test de Aprendizaje Verbal de California
Test de Memorización de Figurasc

4.- ATENCIÓN/VELOCIDAD DE PROCESAMIENTO DE LA INFORMACIÓN


Dígitos de la WAIS – R
Aritmética de la WAIS – R
Test de Sumas de Series Auditivas de Dificultad Crecienteb,c (PASAT)

5.- APTITUDES PERCETUALES – MOTORAS COMPLEJAS

Cubos de la WAIS – R
Clave de números de la WAIS – R

6.- APTITUDES MOTORAS


Test de Clavijas y Tablero c
Test del Golpeteo con los Dedos

7.- HABILIDADES SENSOPERCEPTIVAS


Prueba Sensoperceptiva

a Se pueden añadir otros tests en función del juicio profesional y/o preferencia del evalua-
dor (p. ej., tiempos de reacción informatizados y tareas de velocidad en el procesamiento
de la información)
b Batería abreviada de unos 45 minutos de duración
c Protocolo abreviado de hora y media de duración

Fuente:Kelly y otros, 1996.

CLÍNICA Y SALUD 83
Deterioro y evaluación neuropsicológicos en pacientes con infección por el VIH-1

TABLA 8
Batería neuropsicológica de screening.

1.- GENERAL
Mini- examen cognoscitivo

2.- MEMORIA
Test de Recuerdo Selectivo Verbal
Test de Retención Visual de Benton
Test de Copia de una Figura Compleja de Rey-Osterrieth

3.- LENGUAJE
Test de Asociación Controlada Oral de Palabras de Benton
Test de Nominación Visual

4.- ORIENTACIÓN
Cuestionario Breve del Estado Mental de Pfeiffer
Test de Orientación Temporal de Benton

5.- CAPACIDADES VISOESPACIALES


Test Guestáltico Visomotor de Bender
Matrices Progresivas de Raven.

6.- FUNCIONES INTELECTUALES, EJECUTIVAS Y PSICOMOTORAS


Dígitos, Aritmética, Clave de Números de la WAIS o WAIS-R.
Test del Trazo, parte A y B.
Test de Clasificación de Tarjetas de Wisconsin.
Test del Golpeteo con los Dedos
Test de Clavijas y Tablero
Tiempo de Reacción
Auditivo Simple
Visual Simple
Visual de 4 Elecciones
Escala de la Vida del Instituto Shipley
Test de Colores y Palabras de Stroop

Fuente: Fernández y Levy, 1990.


a La batería está indicada tanto para evaluar los efectos sobre el SNC de la infección por el VIH como
los efectos de los antirretrovirales y de otros agentes farmacológicos.

84 CLÍNICA Y SALUD
L. Millana y J.A. Portellano

TABLA 9
Batería neuropsicológica de screening revisada, utilizada en el estudio de
cohorte multicentrico sobre el sida (MACS)
1.- Test del Trazo
Parte A y parte B

2.- Test de Clavijas y Tablero


Mano dominante y no dominante

3.- Test de Modalidades de Dígitos y Símbolos


Puntuaciones en crudo
Recuerdo de parejas

4.- Test de Aprendizaje Verbal Auditivo de Rey


Ensayos del 1 al 5
Interferencia
Recuerdo depués de la interferencia
Recuerdo diferido
Reconocimiento diferido

5.- Test de Copia de una Figura Compleja de Rey-Osterrieth


Copia
Recuerdo inmediato
Recuerdo diferido

6.- Test de Colores y Palabras de Stroop

7.- Paquete Informatizado de California para Evalución (CalCap)


Tiempo de reacción simple
Tiempo de reacción de Elección
Emparejamiento de patrones en serie (tiempo de reacción secuencial)

Fuente: Selnes y Miller 1994; Llorente et al., 1998

CLÍNICA Y SALUD 85
Deterioro y evaluación neuropsicológicos en pacientes con infección por el VIH-1

TABLA 10
Batería Cantabria de la UIPCSC.

1.- Capacidades premórbidas


Vocabulario. Escala de Inteligencia de Wechsler para Adultos

2.- Atención
Dígitos. Escala de Inteligencia de Wechsler para Adultos

3.- Velocidad de procesamiento


Tiempo de reacción informatizado (CalCap)

4.- Memoria
Verbal: Test de Aprendizaje Verbal Auditivo de Rey
Visual: Test de Copia de una Figura Compleja de Rey-Osterrieth

5.- Abstracción
Test del Trazo, Partes A y B

6.- Lenguaje
Fluidez de Letras y Categorías

7.- Habilidades Constructivas


Cubos. Escala de Inteligencia de Wechsler para Adultos

8.- Capacidad motora


Test de Clavijas y Tablero

9.- Percepción visual


Clave de Números. Escala de Inteligencia de Wechsler para Adultos

10.- Otros
Exploración neurológica

11.- Evaluación psiquiátrica.


SCAN
Escala de Hamilton para la Depresión
Actividades de la Vida Diaria

Fuente: Ayuso Mateos,1997.

86 CLÍNICA Y SALUD
L. Millana y J.A. Portellano

TABLA 11
Pruebas que componen la batería neuropsicológica (Arranz, 1990).

1.- Aprendizaje y memorización


Test de Aprendizaje auditivo verbal de Rey

2.- Memoria inmediata


Dígitos. Escala de Inteligencia de Weschler para Adultos

3.- Flexibilidad cognitiva


Test del Trazo, parte B

4.- Atención y concentración


Dígitos. Escala de Inteligencia de Weschler para Adultos
Inversión de los meses
Inversión de los días de la semanas

5.- Perceptivo-Motriz
Test del Trazo, parte A y B
Clave de números. Escala de Inteligencia de Wechsler para Adultos
Grafismo

6.- Comportamiento
Cuestionario específico

7.- Estrés
Cuestionario de ansiedad de Hamilton
Cuestionario de sucesos vitales

CLÍNICA Y SALUD 87

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