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Artículo: El problema de la primacía de las ciencias Autor: Ernesto Grassi

naturales o de las ciencias del espíritu en la tradición humanista
Libro: Las ciencias de la naturaleza y del espíritu Autor: Ernesto Grassi y Theo Von Uexküll
Luis Miracle, Editor Barcelona-
Von Ursprung der natur und geisteswissenschaften
Traductor: Adolfo Muñoz Alonso-1956
Tema: Este segundo capítulo hace parte de Origen y límites de las ciencias del espíritu.
Problema: Sobre el origen de las ciencias del espíritu y delimitación de las ciencias del espíritu y las de la naturaleza.
Desarrollo: Parte el autor de la idea de Disputa Artrium; que básicamente es la discusión entre la medicina y la jurisprudencia.
Esta discusión está consignada en Salutati (1390 originalmente) en el siglo XV (Petrarca es un antecedente) tiene gran valor porque
es el antecedente de la disputa entre si son las ciencias naturales o las ciencias del espíritu las que se pueden arrogar la primacía en
la formación del hombre. Para Salutati, las ciencias naturales, entre ellas la medicina, parten de principios muy especiales, en cuya
base estudian una esfera determinada de lo existente. Al contrario la jurisprudencia (entendida como la doctrina con la que el
hombre se completa en sociedad) tiene en cuenta el fundamento existencial por tanto es filosófica y metafísica. Salutati definía la
medicina como ciencia particular como un arte (ars) o tecne. El autor retoma las definiciones de Tecne de Platón y Aristóteles.
Salutati escribe algo revelador y tiene que ver con que la medicina puede ocuparse de curar pero no puede propiciar la felicidad. La
felicidad aquí tiene una importancia esencial pues tiene que ver con la idea de formación u hombre completo en el sentido del
empleo de su capacidad. Grassi nos presenta el concepto de experiencia de Leonardo da Vinci. “Significa para él un solo preguntar
por algo en base de ciertos principios y obtener una contestación sólo dentro de tal pregunta”. "La naturaleza está llena de infinitas
razones que nunca pueden ser traducidos en experiencia". Las ciencias naturales se pueden preguntar por el ser en cuanto materia
movimiento, número pero no al ser en cuanto ser. Bacon en su Novum Organum intenta hacer una nueva crítica a la concepción
tradicional en las ciencias naturales que se presentó en la edad media. "La ciencia natural que él encuentra nace de silogismos, es
decir, de frase generales de donde se obtienen más adelante ciertas conclusiones." Anticipatio mentis: “se deducen de las
presuposiciones filosóficas y metafísicas ciertas demandas de las cuales luego se forma un cuadro de la naturaleza que es
totalmente atrevido y desacertado; ya que la naturaleza es mucho más sutil que todas las reflexiones a priori." “Bacon anuncia,
pues, por una parte claramente la finalidad práctica de la ciencia natural que se ve limitada a facilitar ciertas posibilidades dentro
de la naturaleza y, por otra parte, encontramos en él por vez primera la concepción de que este dominio de las posibilidades en la
naturaleza es ya un conocimiento de la naturaleza misma. Conocer significa ya un saber de la primera causa. Las ciencias naturales,
como hemos visto, lo hacen solo con las causas “medianeras” y no tienen nada que decir sobre la causa “primaria” como dice
Bacon. ¿Qué se puede decir en lo relativo a la demostración de la primacía de la doctrina jurídica? Para Salutati esta respuesta es
importante porque es aquí donde la tradición latina humanista se antepone al racionalismo de Descartes y al Idealismo alemán.
Con G.B. Vico entiende la evolución del espíritu humano como un camino que va del bosque a la academia. ¿es esto la formación
del hombre?¿Las ciencias se relacionan de manera original con el “llegar a ser” del hombre o son el resultado tardío de una
cultura? Para el humanismo la realización del hombre se realiza en la ciencia jurídica, pero esta no es una ciencia especial sino una
auto-afirmación del hombre total. La autoafirmación se da con base a lo que le interesa al hombre y lo que le interesa
originalmente es la actitud a salvarse de las “fuerzas de la naturaleza”. “Por eso podemos decir que lo que importa al hombre es la
actitud que favorezca su existencia”. “… el hombre debe tomar una “recta” dirección de que él en forma constante necesita
justamente por el experimento de su falta de orientación, de su separación de los vínculos, de modo que “derecho” significa una
constante decisión, una elección.” La Ley se incluye en esta idea. “Elegir, decidirse entre posibilidades –legere- es solo posible en
cuanto consta una vinculación originaria entre el que elige y lo que se elige. Una de las características esenciales del “ius”, el
derecho, debe ser una legalidad originaria que supone al individuo. Pero ante todo el ius tiene el carácter de una “institutio”, es
decir, una instancia que establece lo que es correcto e incorrecto. La Ley puede ser determinada como derecho divino cuando
supera al particular y lo coloca antes de toda elección en la plenitud de las posibilidades”. “… en situación concreta el hombre
debe tomar una decisión entre distintas posibilidades – la cual por la inclinación está determinada sólo en cierto sentido y no
encontrada definitivamente aún- , entra aquí una decisión en la cual el hombre ordena, manda a sus inclinaciones. Se trata ya del
derecho humano que está en la situación de afirmarse dentro de estar vinculado, mediante sus inclinaciones dominables. “Percibir
y ordenar lo recto es la prudencia. “Los humanistas eran perfectamente conscientes, en su suposición, de la primacía de la ciencia
en relación a estos tres momentos: el derecho como institutio divina, como inclinatio natural y como mandato humano. Salutati lo
llama derecho absoluto o divino, derecho natural (aquello que nos impulsa a nuestro fin compleeto, y derecho humano, (cuya
esencia es el mandar, el iubere, término si pensamos que los griegos atribuían el mandar y el dominar solo aquel que tenía
capacidad de prever –proveer- lo verdadero). En la tradición latina “el hombre se “forma”, se desarrolla originalmente no en el
saber, sino en la realización de las leyes”.
Conclusión: Conocimiento significa llevar a cabo en su totalidad, la necesidad de orientación del hombre. “La salvación, la
autodefensa y con ella la cuestión de lo recto presuponen ya al hombre como algo alejado, que ha de tomar la dirección de su
autoformación, de su desarrollo entre sus manos”. ¿Si no hay vínculo con lo originario (pues hay alejamiento) es lo político lo
originario? “¿Deben las ciencias del espíritu ponerse del lado de la jurisprudencia?