Jabones de café

Para terminar, un producto que también es derivado del café y funciona con los residuos de café que quedan en el filtro de
nuestra cafetera es el jabón de café. Además los jabones de café funcionan muy bien como exfoliantes del cuerpo,
ayudándole a mantener la piel suave y humectante.
El jabón de café se puede hacer en casa y sirve como una actividad que pueda reunir a la familia en su elaboración. Lo
que se necesita son 8 onzas de jabón de glicerina, un cuarto de taza con café molido usado, una cucharadita de vainilla,
una cacerola pequeña, un recipiente pequeño de metal o vidrio, un recipiente para preparar muffins o simplemente de la
figura que se quiera dar al jabón, un cucharón y un cuchillo para mantequilla.

Para comenzar en la cacerola pequeña agregar una taza de agua, colocar al fuego al estilo baño maría con el recipiente
de metal o vidrio. Añade el jabón al recipiente y deja que se derrita, solo tardará un par de minutos.
Mientras el jabón se funde, engrasa cuatro veces el recipiente o molde y coloca una cucharada pequeña de café molido
en la base de cada uno. Ya que el jabón se haya convertido en líquido, apaga el fuego, agrega vainilla y añade una
cucharadita de café molido. También puedes añadir leche o avena para darle una mayor consistencia y propiedades
benéficas al jabón.
Con cuidado vierte el jabón en el molde de rellenado, o sea, el molde que le dará figura al jabón y cúbrelo hasta la parte
superior. Deja que los jabones se enfríen durante varias horas y finalmente despréndelos con la ayuda de un cuchillo para
mantequilla. No olvides mantener el jabón sobre una bandeja cuando esté en uso para evitar las manchas de café en
lugares no deseados.

Cómo hacer jabón exfoliante de café

¿Aún no has probado los maravillosos efectos del jabón de café sobre la piel? El jabón elaborado a base de café es un
producto natural de belleza con unas increíbles propiedades exfoliantes, anticelulíticas, reafirmantes, energizantes y
rejuvenecedoras. Su uso cosmético más popular es como tratamiento anticelulítico, pues la cafeína es un ingrediente que
actúa eficazmente contra los depósitos de grasa que se acumulan bajo los tejidos de la piel y favorece su eliminación,
además de que combate la flacidez y aporta firmeza y tersura a la dermis afectada. Pero esto no es todo, también es
excelente para exfoliar la piel del rostro y evitar la formación temprana de arrugas. Sigue leyendo este artículo de
unComo si quieres saber cómo hacer jabón exfoliante de café paso a paso y de qué forma debes usarlo para
embellecer tu piel.
 Pasos a seguir:
El jabón exfoliante de café es un producto con muchísimos beneficios para la dermis tanto del rostro como del cuerpo.
Seguidamente, cuáles son las propiedades del jabón de café para la piel y te mostramos cómo puede ayudarte a
potenciar tu belleza:
 Es exfoliante, por lo que permite eliminar todas aquellas células muertas que se acumulan en las capas superficiales de
la piel y la apagan y le restan belleza.
 Es anticelulítico, pues tiene la capacidad de estimular la circulación de la sangre y facilitar la disolución de los depósitos
de grasa acumulados en algunas zonas del cuerpo.
 Reafirma la piel.
 Gracias también a que mejora la circulación sanguínea, es un buen producto para mejorar los problemas de varices.
 Es antioxidante, por lo que frena la acción de los radicales libres, mantiene los tejidos de la piel jóvenes y evita la
aparición prematura de signos de envejecimiento.
 Es desodorizante y aporta un agradable aroma a la piel.
 La cafeína es una de las mejores sustancias para combatir las ojeras oscuras, ya que reactiva la microcirculación
sanguínea de la zona, descongestiona y reduce la inflamación.

Si quieres hacer un jabón anticelulítico de café casero, primero deberás reunir los ingredientes y materiales
necesarios, y estos son los siguientes:
 300 gramos de jabón de glicerina en barra
 1/4 de taza de café molido
 1 cucharada pequeña de esencia de vainilla
 vaselina
 1 taza de agua
 un cazo pequeño
 un recipiente de metal o cristal
 molde o moldes para el jabón
Una vez tengas listos los ingredientes y los materiales necesarios, es el momento de ponerse manos a la obra y empezar
a hacer el jabón exfoliante de café casero. Para empezar, pon un cazo en el fuego con una taza de agua y dentro
coloca un recipiente de metal o vidrio para derretir el jabón de glicerina al baño María. Deja que se cocine a fuego
medio hasta que veas que el jabón se ha fundido por completo.
También puedes llevar a cabo este proceso usando el microondas durante unos segundos para derretir el jabón.
 Cuando el jabón de glicerina se haya fundido, apaga el fuego, añade la esencia de vainilla y 1 cucharada sopera de
café molido. Remueve bien todos los ingredientes con la ayuda de una cuchara hasta que veas que se han integrado
por completo. En este punto, también puedes agregar a la mezcla un poco de leche polvo en el caso de que quieras que
el jabón final tenga una mayor consistencia.
Reserva la mezcla anterior y ve humectando con la vaselina el molde o los moldes que hayas elegido para colocar el
jabón exfoliante de café. Esparce la vaselina por el fondo y las paredes laterales de los moldes de manera uniforme.
Cuando lo hayas hecho, coloca en el fondo de cada uno 1 cucharada pequeña de café molido.
Por último, vierte la mezcla con cuidado en el molde o moldes, llenándolos hasta llegar a la parte superior de cada uno
de ello. Deja reposar a temperatura ambiente durante unos minutos hasta que se enfríe y luego coloca el molde en la
nevera para que se refrigere más rápido. Deja que estén en el frigorífico durante toda una noche y a la mañana
siguiente, corta el jabón de café con un cuchillo, desmolda y deja que se seque durante unos 2 o 3 días antes de
utilizarlo.
Para usar el jabón de café casero correctamente, tan solo tendrás aplicarlo sobre tu piel humedecida dando masajes
circulares en las zonas deseadas. Hazlo hasta que salga espuma y luego enjuaga con abundante agua tibia.
En el caso de que quieras emplear este jabón de café para la celulitis, frota la piel de los glúteos, las caderas, las
piernas, el abdomen, los brazos, etc., con el jabón haciendo movimientos circulares de manera enérgica durante unos 10
minutos. Luego, ponte un guante de crin y realiza con él un masaje circular en la zona para, así, exfoliar la piel más
profundamente y favorecer la circulación sanguínea. Por último, cuando salgas de la ducha, lo mejor es que completes el
tratamiento aplicando una buena crema anticelulítica o reafirmante en las zonas del cuerpo con celulitis. Además del uso
del jabón anticelulítico de café, te recomendamos que tengas en cuenta los consejos que te mostramos en el
artículo Trucos para quitar la celulitis, así podrás ganarle la batalla a la piel de naranja de una vez por todas.

Si te apasiona el mundo de los jabones caseros, en unComo tenemos un montón de recetas con las que podrás
elaborar los que más te gusten, no te pierdas los siguientes artículos:
 Cómo hacer jabón de azufre
 Cómo hacer jabón de romero
 Cómo hacer jabón de rosa mosqueta
 Cómo hacer jabón de miel

Exfoliación en dermatología es el proceso natural de renovación celular de la piel mediante la eliminación de

las células muertas de la epidermis.