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CAPÍTULO XXIX
EPIDEMIOLOGÍA
Y FISIOPATOLOGÍA
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GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS
en tal condición la mortalidad puede ser aún trauma de los grandes vasos torácicos. Los
mayor. pacientes con trauma penetrante casi siem-
pre presentan inestabilidad hemodinámica, co-
Los vasos que tienen un punto fijo en sus tra- mo consecuencia de hemorragia masiva hacia
yectos son los más susceptibles de sufrimiento una de las cavidades pleurales o hacia el me-
en el trauma cerrado; los ejemplos más impor- diastino. En los casos en que la lesión pene-
tantes son las venas pulmonares, las venas trante está localizada por dentro del pericar-
cavas y la aorta descendente a nivel del liga- dio, puede haber taponamiento cardíaco. Es-
mento arterioso y del diafragma. Algunos tos pacientes son llevados a la sala de cirugía
vasos como la arteria innominada y el arco de manera rápida, y es durante la operación
aórtico pueden lesionarse por mecanismos cuando usualmente se hace el diagnóstico de
compresivos entre el esternón y la columna lesión de grandes vasos. Por el contrario, los
vertebral. A pesar de que siempre se consideró pacientes con trauma cerrado que no fallecen
que el mecanismo traumático que se asocia en el sitio del accidente ni durante su traslado,
más frecuentemente con lesiones cerradas de generalmente ingresan al servicio de urgen-
la aorta es el de desaceleración rápida al es- cias en estado hemodinámico normal y su le-
trellarse el vehículo de frente, en el estudio sión puede pasar inadvertida durante la eva-
de Williams y col. se encontró que hasta en luación inicial.
50% de los casos se pueden ver estas lesio-
nes en los accidentes con impactos laterales. En las víctimas de trauma penetrante, hay al-
El sitio que más se lesiona en todos los estu- gunos elementos que se deben detallar en la
dios de trauma cerrado es el istmo aórtico, el historia clínica, tales como la longitud del arma
cual se ve comprometido hasta en 85% de o el calibre y el número de disparos realizados,
los pacientes. la distancia a la cual se encontraba la persona
al recibir el impacto, los antecedentes de heri-
En cuanto al trauma penetrante, las heridas das previas y otros datos que los acompañan-
por arma cortopunzante y por proyectil de ar- tes puedan aportar sobre el evento. En los ca-
ma de fuego siguen siendo la causa más fre- sos de trauma cerrado, la información sobre
cuente de lesiones de aorta y grandes vasos. el accidente y el mecanismo del trauma es de
La mayoría ocurre en los trayectos extraperi- gran importancia. Algunos de los datos peren-
cárdicos, por lo cual las hemorragias masivas torios de registrar son: la severidad de la desa-
a la cavidad pleural (principalmente la izquier- celeración (altura de la caída o velocidad del
da) y al mediastino, son una constante que se automóvil), la magnitud de la transferencia de
asocia con una mortalidad significativa. En energía (estado del vehículo), posición del pa-
algunas ocasiones se pueden encontrar pseu- ciente en el automóvil, uso de cinturones de
doaneurismas y fístulas arterio-venosas, aor- seguridad o de “airbags”, la distancia de ex-
to-pulmonares, o inclusive, aorto-cardíacas. pulsión desde el vehículo. El personal de aten-
ción prehospitalaria también puede suminis-
trar información importante sobre la escena
ASPECTOS CLÍNICOS del accidente, como el volumen del sangrado,
el estado hemodinámico y neurológico durante
En general se deben tener en cuenta algunas el transporte, los volúmenes de cristaloides
generalidades en el momento de afrontar el infundidos, entre otras.
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CAPÍTULO XXIX: TRAUMA VASCULAR TORÁCICO MAYOR
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GUÍAS PARA MANEJO DE URGENCIAS
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CAPÍTULO XXIX: TRAUMA VASCULAR TORÁCICO MAYOR
Un importante concepto que se debe tener en 3. Mattox KL, Feliciano DV, Beall AC. Five thousand
cuenta es el de la cirugía de control de daños, seven hundred sixty cardiovascular injuries in 4459
la cual tiene dos abordajes diferentes. El prime- patiens. Epidemiologic evolution 1958 1987. Ann
Surg 1989; 209:698-705.
ro trata de enfocarse sobre el manejo definiti-
4. Mattox KL, Feliciano DV, Moore EE. Trauma. Cuar-
vo de las lesiones, pero con técnicas más sim- ta edición. McGraw-Hill Interamerican. México,
ples y rápidas, como el uso de suturas mecá- 2001.
nicas y las resecciones que se puedan realizar 5. Mattox KL. Red River Anthology. J Trauma 1997;
más rápidamente (por ejemplo neumonectomía 42:353-368.
para lesiones del hilio pulmonar), y el segundo 6. Pate JW, Cole FH, Walker WA, Fabian TC.
intenta restablecer las condiciones fisiológicas Penetrating injuries of the aortic arch and its
del paciente de manera inicial, para programar branches. Ann Thorac Surg 1993; 55:586-592.
7. Pezzella TA, Silva WE, Lancey RA. Cardiothoracic
una segunda intervención para realizar las re-
trauma. Curr Prob Surg 1998; 35:762-770.
paraciones definitivas de las lesiones. 8. Rich NM, Spencer FC. Injuries of the intrathoracic
branches of the aorta arch. En Vascular Trauma.
Editado por NM Rich, FC Spencer. WB Saunders.
LECTURAS RECOMENDADAS Phladelhia, 1978.
9. Wall MJ, Hirshberg A, LeMaire SA, Holcomb J,
1. Greendyke RM. Traumatic rupture of the aorta. Mattox KL. Thoracic aortic and thoracic vascular
Special reference to automobile accidents. JAMA injuries. Surg Clin North Am 2001; 81:1375-1393.
1966; 195:527-530. 10. Williams JS, Graff JA, Uku JM, Steinig JP. Aortic
2. Ivatury R, Cayten C. The Textbook of Penetrating Injury in vehicular trauma. Ann Thorac Surg 1994;
Trauma. Williams & Wilkins. Philadelphia, 1996. 57:726-730.
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