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Tema: La Revelación de Dios

Título: EL TESTIMONIO DEL DIOS DESCONOCIDO


Texto: Hechos 17. 16-32
Objetivos:

 Conocer que la revelación de Dios está dada para que todos los seres humanos como
creaturas suyas le conozcan, se vuelva a él, antes que llegue el día de juicio.
 Reconocer que como creyentes en Dios debemos estar abiertos a compartir el
evangelio de Jesucristo a toda persona sin distingo de raza, religión o cultura para
que alcancen la salvación.
 Hacer uso de los medios, las circunstancias y las estrategias que Dios nos da para
compartir el evangelio en medio del mundo en que vivimos.

Incentivación: ¿Alguna vez se ha preguntado el por qué la gente cree en los santos o
ídolos, o en los agüeros que anoche estuvieron de moda? ¿Cuántos santos existen en el
mundo católico? (La Iglesia Católica cuenta con los 7.000 santos que aparecen
reflejados en la última edición del Martirologio Romano, presentada en 2005. En el
2010 habían 7.730) Y no es de extrañar si dentro de algunos años, tengamos un santo
compositor, antes del 24 algunas personas realizaron el chance con los números 2212,
correspondiente al día y al mes de la muerte de Diomedes y ganaron, así que
posiblemente sea canonizado como el santo de los apostadores. Y en el mundo existen
más de 5000 millones de personas que no conocen a Jesucristo. Pero, ¿Qué debemos
hacer los creyentes frente a esta realidad? Veamos que dice la Biblia.

Adquisición: los creyentes de la iglesia primitiva aprovechaban cada oportunidad para


predicar el evangelio, la primera parte del capítulo 16 nos ilustra esta verdad,
evangelizaron junto al rio, en el lugar que solían orar, en la cárcel, en la casa del
carcelero, en el hogar de Lidia, en la plaza, en el areópago, en las casas, etc.

El texto de hoy nos muestra como el apóstol Pablo aprovecho la oportunidad que tuvo
para presentar el evangelio a las personas de su época y nos lleva a preguntarnos ¿Cómo
evangelizar en un mundo tan diversificado?

Dios ha dejado su testimonio en la historia de la humanidad para que se arrepientan y se


vuelvan a él por medio de Jesucristo.

1. El Mundo a que Dios Testifica Hch. 17. 16-21:

Mientras Pablo los esperaba en Atenas, su espíritu se enardecía viendo la ciudad


entregada a la idolatría. 17 Así que discutía en la sinagoga con los judíos y
piadosos, y en la plaza cada día con los que concurrían. 18 Y algunos filósofos de
los epicúreos y de los estoicos disputaban con él; y unos decían: ¿Qué querrá decir
este palabrero? Y otros: Parece que es predicador de nuevos dioses; porque les
predicaba el evangelio de Jesús, y de la resurrección. 19 Y tomándole, le trajeron
al Areópago, diciendo: ¿Podremos saber qué es esta nueva enseñanza de que
hablas? 20 Pues traes a nuestros oídos cosas extrañas. Queremos, pues, saber qué
quiere decir esto. 21 (Porque todos los atenienses y los extranjeros residentes allí,
en ninguna otra cosa se interesaban sino en decir o en oír algo nuevo.).

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La ciudad de Atenas, en los tiempos de Pablo, era considerada como la capital
cultural del mundo, una ciudad universitaria, donde llegaban o afluía gente de todo
el mundo conocido, para prepararse en lo político, filosófico, religioso, en el arte,
etc. En los tiempos de Nerón, se dice que había en Atenas más de 3000 estatuas
públicas, además de un número incalculable en las paredes y muros de las casas de
sus habitantes (Gayo Plinio Segundo 23-79 de C). Por eso se decía que “En Atenas
era más fácil encontrar a un dios que aun hombre”.

Cuando el apóstol Pablo, camina por la ciudad, se da cuenta que la ciudad está
invadida o llena de ídolos, hay altares dedicados a los doce dioses del Olimpo, pero
también a deidades menores y si por casualidad se olvidaron de alguno, hay un altar
dedicado al dios desconocido. Por eso se piensa que era una ciudad supersticiosa,
agorera, llena de miedo a los dioses.

Cuando el apóstol Pablo ve todo esto, se indigna, y a la vez le causa mucha tristeza,
que la ciudad cuna de la sabiduría, donde se desarrollo el pensamiento de Sócrates,
Platón, Aristóteles, siga sumida en la ignorancia, los agoreros y la superstición. Y
sostiene discusiones, debate en la sinagoga con los judíos y los prosélitos
convertidos al judaísmo, pero también lo hacía en la plaza con los asistentes.

Esta ciudad y sus habitantes es un prototipo de la sociedad del mundo actual,


caracterizada por su manera de pensar y actuar, donde encontramos: entre los que
oyen las discusiones de Pablo están los miembros de dos escuela de pensamientos,
quienes lo consideran un charlatán, es decir alguien que no tiene ideas propias, sino
que se las pica de sabio, un palabrero, hablador, chismoso, embustero. Estas dos
corrientes de pensamientos son:

1.1. Los que no creen en Dios (Epicúreos): Y algunos filósofos de los epicúreos y de los
estoicos disputaban con él; y unos decían: ¿Qué querrá decir este palabrero? Y
otros: Parece que es predicador de nuevos dioses; porque les predicaba el
evangelio de Jesús, y de la resurrección. Los epicúreos, considera que el mundo, el
universo era producto de la casualidad, que los dioses no intervenían en la vida de
los hombres, negaban la existencia de una vida futura, ellos creían que al morir una
persona su cuerpo y su alma se desintegraban, por lo cual el bien supremo del
hombre era la búsqueda del placer, la felicidad, entendida como la liberación del
sufrimiento y del miedo, eran materialistas, y se puede decir que tenían un especie
de ateísmo práctico. En los tiempos del apóstol Pablo su pensamiento se había
degenerado hacia la sensualidad, la autocomplacencia, la satisfacción personal.

Este tipo de pensamiento sigue teniendo su vigencia en la sociedad en que vivimos,


personas que piensa que la muerte es el fin, por eso su filosofía de vida es la que
describe Isaías 22. 13: y he aquí gozo y alegría, matando vacas y degollando ovejas,
comiendo carne y bebiendo vino, diciendo: Comamos y bebamos, porque mañana
moriremos (La celebración de anoche es un ejemplo típico de ello, la gente despidió
el año comiendo, bebiendo). Esta escuela era la filosofía de la desesperanza, de no
creer en la resurrección de los muertos y la vida eterna. Cuando no se tiene
esperanza este es el tipo de pensamiento que domina la vida 1 Cor. 15. 32: Si como
hombre batallé en Efeso contra fieras, ¿qué me aprovecha? Si los muertos no
resucitan, comamos y bebamos, porque mañana moriremos.

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Una vida sin esperanza se suma en el placer, en lo inmediato, y puede llevar al
fatalismo, al punto de terminar con su propia existencia, por no saber afrontar las
diversas circunstancias y situaciones que nos presenta la vida, porque no hay un
proyecto de vida, un orientador, un blanco, una meta. Por eso hoy encontramos
personas que aparentemente lo tiene todo y no son felices, se quitan la vida, les
hacen daño a otros en busca del placer.

1.2. Los que creen que todo es Dios (Estoicos): es la escuela filosófica fundada por
Zenón (360-260 a de C) reconocían la existencia de un dios supremo, pero de un
modo panteísta, confundiéndole con el alma del mundo. El mundo dependía del
destino y los seres humanos deben cumplir su deber, resignarse a vivir en armonía
con la naturaleza y la razón. Enseñaban el dominio propio y la dureza con una
austeridad que impulsaba a la soberbia o al suicidio en caso de fracaso, una
perspectiva egocéntrica de la vida, fundamentada en el panteísmo. Ellos enseñaban
el dominio total de uno mismo y que la meta de la vida humana era llegar a un punto
de indiferencia total del placer y el dolor.

Si dios es el alma del mundo, el ser humano puede llegar a ser uno con él, o
constituirse en su propia divinidad, son el tipo de personas que dicen “ese es mi
destino”.

Ambos grupos tiene en común que menosprecia al resto de los seres humanos, se
creían superiores a los demás, poseedores de la verdad, de la sabiduría y el
conocimiento, idólatras, supersticiosos, agoreros. Todavía se siguen comiendo las
12 uvas y pidiendo un deseo por cada mes del nuevo año, o colocándose los
pantaloncillos o los cucos amarillos, está el que sale dando la vuelta a la manzana
con la maleta, los que se llenan los bolsillos de granos para la abundancia y la
prosperidad, los que usan los colores amarillo, azul (velas) y rojo (manteles) etc.

Así mismo su vida está interesada en lo novedoso, buscan oír y experimentar lo


nuevo, es lo único que les interesa. ¿No está la clase de persona que encontramos
hoy? La cual tiene un menosprecio por la historia, la tradición, las buenas
costumbres, insatisfecho con todo.

¿Cómo hablar de Dios, cómo predicar el evangelio en este mundo? Llamado “aldea
global”, “mundo de la conectividad” pero a la vez, menos humanizado, más
egocéntrico, amantes de los placeres, pero, no de Dios.

2. El Testimonio de Dios al Mundo Hch. 17. 21-29: como creyentes en Jesucristo,


conocedores del evangelio de salvación, somos llamados no solo a sentir dolor,
tristeza por las personas, sino a proclamar el evangelio de la esperanza, de la
resurrección, de la eternidad. En su discurso o sermón en el areópago el apóstol
Pablo nos muestra los puntos de contacto desde los cuales podemos compartir la fe.

Entonces Pablo, puesto en pie en medio del Areópago, dijo: Varones atenienses, en
todo observo que sois muy religiosos; 23 porque pasando y mirando vuestros
santuarios, hallé también un altar en el cual estaba esta inscripción: AL DIOS NO
CONOCIDO. Al que vosotros adoráis, pues, sin conocerle, es a quien yo os
anuncio. 24 El Dios que hizo el mundo y todas las cosas que en él hay, siendo
Señor del cielo y de la tierra, no habita en templos hechos por manos humanas, 25

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ni es honrado por manos de hombres, como si necesitase de algo; pues él es quien
da a todos vida y aliento y todas las cosas. 26 Y de una sangre ha hecho todo el
linaje de los hombres, para que habiten sobre toda la faz de la tierra; y les ha
prefijado el orden de los tiempos, y los límites de su habitación; 27 para que
busquen a Dios, si en alguna manera, palpando, puedan hallarle, aunque
ciertamente no está lejos de cada uno de nosotros. 28 Porque en él vivimos, y nos
movemos, y somos; como algunos de vuestros propios poetas también han dicho:
Porque linaje suyo somos. 29 Siendo, pues, linaje de Dios, no debemos pensar que
la Divinidad sea semejante a oro, o plata, o piedra, escultura de arte y de
imaginación de hombres.

El apóstol Pablo observó la forma de vida de esta ciudad y vio que había un punto
de contacto que le permitiría presentar el evangelio del Señor, ellos le había
escuchado hablar de Jesucristo y de la resurrección de los muertos, era una sociedad
que le gustaba oír cosas nuevas y en su religiosidad tenían un altar al Dios
desconocido, eso no quiere decir que ese altar estuviera dedicado al verdadero Dios,
podía ser cualquier dios, que enojado se airara contra ellos, para evitar la ira de ese
dios habían hecho el altar, pero, partiendo de ahí el apóstol, les presenta el evangelio
de salvación y habla como Dios ha dejado su testimonio en la historia de la
humanidad.

2.1. Es el Creador: 24 El Dios que hizo el mundo y todas las cosas que en él hay,
siendo Señor del cielo y de la tierra, no habita en templos hechos por manos
humanas. Dios es diferente a sus creaturas, es distinto a la naturaleza, pero todo lo
que hay fue creado por el Dios que hizo el mundo y todas las cosas. Al mencionar a
Dios como creador contradice las creencias o filosofías de su época, porque el
creador no es el alma del mundo y tampoco es indiferente a lo creado en el mundo.
Dios creó el mundo, pero también lo sustenta con la palabra de su poder.

La naturaleza, el universo, y todo lo creado, testifican de la existencia de Dios, la


noche, el día, testifican de la existencia de Dios. El Salmo 19. 1-2 nos recuerda esa
verdad: los cielos cuentan la gloria de Dios, y el firmamento anuncia la obra de sus
manos. Un día emite palabra a otro día, y una noche a otra noche declara
sabiduría. Día tras día, permanentemente, a cada instante el Dios Creador se está
dando a conocer por medio de las cosas hechas, en la lluvia, en el verano, en el
nacimiento de un niño, en la muerte, en la alegría y en la tristeza, etc.

Como Dios Creador, está por encima de sus creaturas, no necesita de templos, ni
que le hagan una imagen, porque sería reducirlo, él es tan grande que nada, ni nadie
lo pude contener. Hch. 7. 48-49ª: si bien el Altísimo no habita en templo hecho de
mano, como dice el profeta: el cielo es mi trono, y la tierra el estrado de mis pies.
En 1 R. 8. 27 Salomón nos recuerda: los cielos de los cielos no te pueden contener.
Es por eso que los templos son llamados casa de oración, lugares desde los cuales
podemos hablar con Dios invocar su nombre, derramar nuestros corazones, suplicar
su misericordia, porque él, está por encima de todos los cielos.

2.2. Es el Señor y Soberano: El Dios que hizo el mundo y todas las cosas que en él hay,
siendo Señor del cielo y de la tierra, no habita en templos hechos por manos
humanas, 25 ni es honrado por manos de hombres, como si necesitase de algo;
pues él es quien da a todos vida y aliento y todas las cosas. 26 Y de una sangre ha

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hecho todo el linaje de los hombres, para que habiten sobre toda la faz de la tierra;
y les ha prefijado el orden de los tiempos, y los límites de su habitación. Como
creador y soberano, Dios no es indiferente a la creación, a sus creaturas.

En especial el ser humano ocupa un lugar importante en la creación de Dios, lo hizo


de una sola sangre, es decir que el género humano viene de un mismo tronco, sin
importar la raza, el color, o la nacionalidad, un blanco puede salvar la vida de un
negro a través de una transfusión de sangre o viceversa. Para Dios no hay diferencia,
él no hace acepción de personas. Los griegos consideraban a los otros pueblos
barbaros, que podían ser sus esclavos, para Dios todos son sus creaturas, sobre todas
hace salir el sol, les da la lluvia, el alimento.

La soberanía y el señorío de Dios también esta revelado en que ha prefijado el orden


de los tiempos, Dios tiene el control tanto del acenso como la caída de una nación,
de un imperio o de una persona, ese control se ve reflejado tanto en el nacimiento,
como en la muerte de cada uno de nosotros, la historia de la humanidad, su
desarrollo, sus éxitos y fracasos tienen sus límites en las manos del creador. Dios es
el Señor de la historia humana, y por eso las creaturas solo llegarán hasta donde
Dios le permita llegar. Es Dios quien pone y quita reyes. Es Dios quien da la vida y
quien la quita. Es Dios quien pone los límites a las naciones. Es Dios quien tiene
determinado en qué momento será el fin del mundo.

Ese accionar de Dios en la historia y en los tiempos, tiene el propósito de que lo


busquemos: para que busquen a Dios, si en alguna manera, palpando, puedan
hallarle, aunque ciertamente no está lejos de cada uno de nosotros. 28 Porque en
él vivimos, y nos movemos, y somos; como algunos de vuestros propios poetas
también han dicho: Porque linaje suyo somos. Los actos de Dios, la manifestación
de su gloria y grandeza en la creación son medios que Dios mismo a usado para que
los hombres se acerque a él, para que entendamos que procedemos de Dios y a él
volveremos, es decir que nuestra vida y muerte está en sus manos. Honramos a Dios
por ser el creador y soberano del universo y del ser humano.

En consecuencia Dios no puede ser comparado con nada: 29 Siendo, pues, linaje
de Dios, no debemos pensar que la Divinidad sea semejante a oro, o plata, o piedra,
escultura de arte y de imaginación de hombres. Por muy preciado que puede ser el
metal no es comparado a Dios, por muy excelente artista que puede ser el escultor,
no puede hacer a Dios, porque él está por encima de todos nosotros.

2.3. Ha sido tolerante con la ignorancia humana: Pero Dios, habiendo pasado por alto
los tiempos de esta ignorancia, ahora manda a todos los hombres en todo lugar,
que se arrepientan. En todo el proceso de la creación y la historia humana, Dios ha
sido tolerante, pero no alcahueta, permitió la idolatría, pero se ha revelado y dado a
conocer para salvar al hombre de su pecado, por ser un Dios misericordioso y
compasivo, por nuestra incapacidad para buscarlo y para salvarnos, envío a
Jesucristo, quien murió en la cruz y resucitó para darnos eterna salvación y frente al
acto salvífico de Dios, tenemos que dar una respuesta.

3. La Respuesta del Mundo al Testimonio de Dios Hch. 17. 30-34: Pero Dios,
habiendo pasado por alto los tiempos de esta ignorancia, ahora manda a todos los
hombres en todo lugar, que se arrepientan. 31 por cuanto ha establecido un día en

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el cual juzgará al mundo con justicia, por aquel varón a quien designó, dando fe a
todos con haberle levantado de los muertos. 32 Pero cuando oyeron lo de la
resurrección de los muertos, unos se burlaban, y otros decían: Ya te oiremos acerca
de esto otra vez. 33 Y así Pablo salió de en medio de ellos. 34 Mas algunos
creyeron, juntándose con él; entre los cuales estaba Dionisio el areopagita, una
mujer llamada Dámaris, y otros con ellos. La revelación de Dios, su testimonio
tiene como propósito que el ser humano crea, se vuelva al Dios verdadero, por eso
con base en su revelación Dios espera:

3.1. Un llamado al arrepentimiento: Pero Dios, habiendo pasado por alto los tiempos de
esta ignorancia, ahora manda a todos los hombres en todo lugar, que se
arrepientan. El testimonio de Dios como creador y soberano busca que los hombres
se arrepienta. Este arrepentimiento lleva a los que no creen a creer, a los que adoran
ídolos a volverse al Dios verdadero, a los que niegan su existencia a creer que él
existe. Dios es real, no es un mito, no es una leyenda y cada ser humano es un
testimonio de su existencia.

El arrepentimiento nos lleva a volvernos de los ídolos, de las imágenes, de lo


supersticioso, de los agoreros al Dios verdadero, no necesito de un santo o de un
agüero para ganarme la lotería, porque Dios es mi proveedor y sustentador.

No necesito hacer una promesa a un ídolo o pagar una manda para ser sano porque
en la Cruz, a través de su sacrificio Jesús me sanó y me ha librado del pecado y de la
muerte.

No necesito de la esencia de “quererme” para que una mujer este atada a mi lado, o
para que una mujer retenga a su marido y no busque a otra. Porque el amor de Dios
que ha sido derramado en nuestros corazones por el Espíritu Santo, es más que
suficiente para llenar cada vacio de nuestras vidas.

No necesitas un amuleto de una cruz, de una cuenta, de una aseguranza, de utilizar


tu ropa interior al revés, de comer doce uvas, de la ropa interior amarilla, de las
velas azules, para tener un año de prosperidad, porque el Señor creador de los cielos
y de la tierra es nuestro protector, nuestro guardador, el que nos libra de todo mal y
no nos deja caer en tentación, da pan al que siembra, da salud, y ni uno de nuestros
cabellos cae a tierra sin ser la voluntad de nuestro Padre que está en los cielos. El
que tiene a Dios, el que tiene a Cristo, no le faltan las añadiduras.

Pero necesitamos volvernos a Dios de todo corazón, con toda nuestra alma, y creer
en Jesús que murió y resucitó para ser salvos, ser hijo o hija de Dios.

3.2. Viene el día del juicio: por cuanto ha establecido un día en el cual juzgará al
mundo con justicia, por aquel varón a quien designó, dando fe a todos con haberle
levantado de los muertos. Este es el tiempo que Dios ha establecido para que
alcancemos la salvación por medio de Jesucristo. El apóstol Pedro nos dice: el Señor
no retarda su promesa, según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente
para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca, sino que todos proceda al
arrepentimiento. Así como Jesús murió y resucito para nuestra salvación a todo
aquel que cree, también vendrá como juez de vivos y muertos.

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El juicio de Dios es un realidad, si no me arrepiento de mis pecados, seré
condenado, los santos o ídolos por muchos que existan no salva, no libran de la
muerte, no libran del infierno, no libran de la condenación, no pueden interceder por
los vivo, y mucho menos por los muertos. Esta establecido para los hombres que
mueran una sola vez y después del juicio.

Las religiones no salvan, no me salvo por ser judío, católico, islámico, budista,
pentecostal, luterano o calvinista, hinduista o cualquier otra. Dios no estableció las
religiones como medio de salvación. Dios no estableció a los santos como
intercesores. Dios no nos dio ningún amuleto para ser salvo.

El único medio de salvación que tenemos, y el único aceptado por Dios es


Jesucristo: en ningún otro hay salvación; porque no hay otro nombre bajo el cielo,
dado a los hombres, en que podamos ser salvo.

Dios no quiere que ningún hombre se pierda, Dios quiere que todos procedamos al
arrepentimiento pero solo existe un medio: porque hay un solo Dios, y un solo
mediador entre Dios y los hombres, Jesucristo hombre.

Dios nos ha dejado su testimonio revelado como creador, pero también en las
Escrituras, en la Biblia, y nos ha dado este espacio de tiempo, para que alcancemos
la salvación, y a los creyentes para ser partícipes de compartir la salvación con los
que todavía no gozan de ella.

Dios está esperando que nos arrepintamos y nos volvamos a él por medio de
Jesucristo. Y para eso la iglesia ha sido constituida la agencia de Dios en la tierra
por medio de la cual él sigue proclamado su mensaje de salvación hasta lo último de
la tierra. En Dios hay esperanza, en Dios hay paz, en Dios hay salvación, en Dios
hay salud, en Dios hay libertad y los que hemos experimentado la gracia de Dios en
verdad somos los llamados para proclamar el llamado de Dios al arrepentimiento y
la conversión de la humanidad.

Hay más de 5000 millones de personas en el mundo que necesita conocer esa
verdad, hay más de 400.000 personas en esta ciudad que necesitan conocer esa
verdad, hay más de 40.000.000 millones de personas en Colombia que necesitan
saber la verdad.

Tenemos padres, hermanos, hijos, nietos, tíos, sobrinos, primos, amigos, enemigos,
conocidos y desconocidos que necesitan del arrepentimiento para con Dios. Nuestra
meta del 2017, es comunicar el testimonio del Dios revelado, es llevar la esperanza
de salvación, aun pueblo oprimido, explotado, desamparado, y necesitado de Dios.

Hay muchas situaciones que tal vez nosotros no podemos cambiar, como el aumento
del costo de vida, el pago de impuestos, las epidemias, los fenómenos naturales, etc.
Pero podemos contribuir a transformar vidas, ha llenarlas de esperanza, a través del
testimonio del Dios revelado, con el evangelio de salvación.

El desafío y el llamado de Dios para nosotros durante este 2017 es de Evangelizar,


Consolidar, Discipular y Comisionar, a través de la revelación que Dios nos ha
dado. Comencemos por casa, el lugar de estudio, el puesto de trabajo, el vecindario,

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y en cualquier lugar o circunstancia que Dios nos permita vivir o enfrentar este año.
Este debe ser el año de la Esperanza de salvación para todos los que Dios ponga en
nuestro camino.

La mayor bendición que una persona puede recibir de nuestra parte como hijos de
Dios, es que conozca a Jesucristo como su salvador, que crean en la esperanza de la
resurrección y la vida eterna. Porque la paciencia de Dios esta llegando a sus límites,
y ya no habrá tiempo para el arrepentimiento, para la salvación y lo que nos espera
es el juicio.

Somos privilegiados por tener a Cristo como Señor y Salvador en nuestras vidas, y
somos llamados a compartir el evangelio con todos aquellos que no le conocen. En
nuestra tarea evangelizadora para este año, tenemos varias actividades: el seguir
orando por alrededor de las manzanas, el seguir llevando el evangelio puerta a
puerta, los diferentes grupos que conforman la iglesia están organizando actividades
para alcanzar a sus pares y a todos los miembros de la familia a través de:

El Te helado, usted y yo podemos invitar a un amigo y por 5 semanas les


presentaremos el proyecto de salvación de Dios para sus vidas.

Los docentes y educadores: han organizado unas conferencias taller sobre la


problemática de matoneo en los colegios y en donde quiera hay un grupo social,
pero no es una responsabilidad de los docentes solos, usted tiene amigos que son
padres, madres, que tienen hijos que sufren, comprometámonos a invitar, a traerlo
que participen de estas charlas-taller, donde también les daremos a conocer el
mensaje de salvación.

Los que trabajan en el área de la salud, también estarán dando charlas orientadoras
de prevención contra enfermedades y situaciones que enfrentamos, y todos podemos
vincularnos, invitando a otros, asistiendo, orando y compartiendo el mensaje de
salvación.

Los que trabajan con los niños estarán abriendo espacios para compartir con ellos.

Los que sabe un arte, como hace pan, pasabocas, estarán organizado talleres que
buscan mejorar la calidad de vida y la economía de las familias, un espacio más para
compartir nuestra fe y dar testimonio del Dios creador, el Dios desconocido, que se
da a conocer tanto en la creación, como también a través de cada uno de nosotros.

Si usted es de las personas que dice que no sabe que hacer en la Iglesia o se siente
desubicado, dígale a Dios, ubícame en el ministerio, la actividad donde mejor te
pueda servir. Puede abrir las puestas de su casa una hora a la semana para compartir
con sus vecinos, familiares y amigos el evangelio. Puede traer personas a la iglesia
para que escuche el evangelio.

Ore diciéndoles al Señor soy un instrumento de bendición, úsame para ser


bendición, para llevar bendición, y que la medida en que me usas, yo sea bendecido
por ti, que pueda testificar de ti en los lugares y en la posición en que tú me has
puesto, úsame con poder, con autoridad y con un corazón humilde que reconozca y
te de la gloria siempre.

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