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MARCO CONCEPTUAL Y TEÓRICO

NECESIDAD DE PLANIFICACIÓN PARA LA PREVENCIÓN Y MANEJO


DE RIESGOS NATURALES EN EL MUNICIPIO DE SAN JUAN
ALOTENANGO, DEPARTAMENTO DE SACATEPÉQUEZ.

ANTECEDENTES

El municipio de San Juan Alotenango del departamento de Sacatepéquez es una


comunidad que constantemente ha sufrido daños a consecuencia de los riesgos
naturales como derrumbes por exceso de lluvias en la época de invierno, pero el
mayor peligro al que están expuestos sus habitantes es la constante actividad que
mantiene el Volcán de Fuego que este municipio se ubica en las faldas de este coloso.
A pesar del riesgo evidente en que se encuentra esta población, no existen en el lugar,
sistemas adecuados que sean capaces de alertar tempranamente ni tampoco existe
una planificación que permita salir del lugar de riesgo de manera ordenada y llegar
a un punto seguro ya determinado previamente.

La carencia de una planificación adecuada para la prevención y manejo de riesgos


naturales, específicamente el riesgo por la actividad del Volcán de Fuego tiene como
consecuencias daños a la infraestructura del municipio, pérdidas materiales y lo que
es peor, pérdida de vidas humanas.

“Hablar de adecuada planificación para la prevención de riesgos no se refiere


únicamente a la existencia de planes de contingencia y mecanismos de evacuación
en el momento en que ocurre el desastre, se refiere también a un adecuado
ordenamiento territorial” (OEA, 1991), es decir, considerar el lugar donde se
construyen las viviendas, en Guatemala debido a causas como la pobreza, carencia
de políticas de Estado en materia de vivienda, los habitantes construyen en lugares
de alto riesgo y empleando sistemas constructivos y materiales inapropiados que los
hace más vulnerables ante los riesgos naturales.

En referencia a lo anterior, se analiza la erupción del Volcán de Fuego ocurrida el 3


de junio de 2018 alrededor de las 13:00 horas, el cual registró la mayor erupción en
el país desde 1974, esta violenta erupción afectó directamente los departamentos de
Escuintla, Chimaltenango y Sacatepéquez, siendo la Aldea El Rodeo y la Colonia
San Miguel Los Lotes las comunidades más afectadas pues quedaron sepultadas bajo
miles de toneladas de material volcánico. Según datos estadísticos de la
Coordinadora Nacional para la Reducción de Desastres (CONRED) se
contabilizaron 195 personas fallecidas y 256 desaparecidas y miles de damnificados.
Esta erupción del Volcán de Fuego causó la muerte de todas estas personas porque
no se realizó la evacuación a tiempo a pesar de que según afirma el vulcanólogo
(Chigna, 2018) “el Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología, Meteorología e
Hidrología de Guatemala (INSIVUMEH) alertó desde las 06:00 AM sobre el riesgo
de una posible erupción del volcán y de flujos piroclásticos, pero por que las
autoridades no tomaron medidas hasta una vez que la erupción estaba en proceso”.
La erupción más fuerte del volcán tuvo lugar a las 13:00 horas y la información fue
compartida por la CONRED 40 minutos más tarde. Finalmente, no se emitió la orden
de evacuación hasta las 3:00 de la tarde, cuando ya muchos pueblos estaban bajo la
lava.

Esta tragedia refleja dos situaciones realmente preocupantes: La primera es que en


Guatemala se construye en lugares inapropiados por ser de alto riesgo, por ejemplo,
los asentamientos ubicados en barrancos, viviendas a orillas de ríos que en invierno
aumentan su caudal y en este caso, en las faldas de volcanes que tradicionalmente
han estado activos. Y la segunda situación, es que a nivel nacional no estamos
preparados para prevenir y manejar los riesgos naturales a los que estamos
expuestos. El día de la erupción, comunidades como la aldea El Porvenir entre otras,
del municipio de San Juan Alotenango, tuvieron que ser evacuadas, pero la
evacuación se dio solo cuando ya se tenía conocimiento de la tragedia ocurrida en la
aldea El Rodeo y San Miguel Los Lotes. Hasta la fecha en el municipio de San Juan
Alotenango, no se tienen planes de contingencia ni mecanismos lo suficientemente
eficientes para alertar y evacuar a los habitantes en caso de ocurrir un desastre como
la erupción del 3 de junio de 2018.
JUSTIFICACIÓN

El problema de la carencia de una adecuada planificación para la prevención y


manejo de riesgos naturales en el municipio de San Juan Alotenango, departamento
de Sacatepéquez es sumamente grave, ya que, este es un municipio que se encuentra
ubicado en una zona altamente vulnerable a riesgos naturales, principalmente las
consecuencias de la constante actividad que mantiene el Volcán de Fuego.

Son varias las comunidades de este municipio que se ubican en las faldas del Volcán
de Fuego, lugares que por el riesgo que representan no son aptos para la construcción
de viviendas y debido a ello se ven gravemente afectadas cada año por los desastres
naturales que ocurren en el lugar, las viviendas sufren daños en su infraestructura
porque además de estar construidas en lugares inadecuados, están construidas con
materiales y sistemas constructivos precarios lo que representa mayor vulnerabilidad
ante los riesgos naturales.

Para evitar las tragedias humanas en los países en desarrollo se hace necesario que
se implementen una serie de medidas de prevención que vayan acorde al tipo de
riesgo en que se encuentra cada comunidad.

Lamentablemente en nuestro país se dedican más recursos económicos a reparar los


daños después de ocurrida la tragedia y no se invierte lo suficiente en planificación
para evitar que ocurran estas tragedias.

Una adecuada planificación para la reducción de desastres por riesgos naturales no


abarca únicamente sistemas de alerta temprana para evacuación sino más importante
aun, estrategias no estructurales como elaboración de un Plan de Ordenamiento
Territorial y reglamentos de construcción que permitan identificar los terrenos que
son aptos para construcción de viviendas y los terrenos donde se debe restringir el
uso habitacional.

El motivo que me impulsa a investigar a profundidad este problema es determinar si


con una adecuada planificación para la prevención y manejo de riesgos naturales, es
posible reducir los desastres naturales en el municipio de San Juan Alotenango,
departamento de Sacatepéquez.
PLANTEAMIENTO DEL PROBLEMA

El municipio de San Juan Alotenango del departamento de Sacatepéquez se


encuentra en riesgo constante por ubicarse en las faldas del Volcán de Fuego el cual
es uno de los volcanes de Guatemala que históricamente ha mantenido constante
actividad, “según datos del Instituto Nacional de Sismología, Vulcanología,
Meteorología e Hidrología de Guatemala (INSIVUMEH) el Volcán de Fuego en los
últimos años ha tenido 15, 16 y 17 erupciones por año” (EFE, 2018), debido a ello
los pobladores de San Juan Alotenango, de alguna manera están acostumbrados a
que se registre esta actividad, sin embargo, en cualquier momento puede ocurrir una
erupción de mayor magnitud y los pobladores no están preparados para manejar este
riesgo y prevenir una tragedia como la ocurrida el 3 de junio.

El problema específico en este municipio es la carencia de una planificación


adecuada ya que no existe ordenamiento territorial ni políticas que eviten que se
construyan viviendas formando poblados en lugares de alto riesgo ni tampoco hay
mecanismos eficientes para alertar a la población que vive en estos lugares y
eventualmente evacuarla hacia un sitio seguro. Es lamentable, pero ni siquiera las
autoridades de gobierno encargadas para tal efecto, están preparadas para responder
adecuadamente ante una situación de esta naturaleza. La mayoría de los pobladores
no tienen conocimiento de que hacer si ocurre una erupción de gran magnitud, no
conocen si existen rutas de evacuación o quienes son las personas delegadas por las
autoridades para orientarlos en caso de emergencia.

Debido a esta problemática, surge la interrogante: ¿Planificando adecuadamente,


es posible prevenir y manejar los riesgos naturales a los que están expuestos los
habitantes del municipio de San Juan Alotenango, departamento de
Sacatepéquez?
ALCANCES

El desarrollo de la presente investigación se centró en el Caserío El Porvenir del


municipio de San Juan Alotenango del departamento de Sacatepéquez ya que es una
de las comunidades que se encuentra justo en las faldas del Volcán de Fuego y por
lo tanto está en mayor riesgo que el casco urbano del municipio.
El caserío El Porvenir se ubica a una altura de 1,060 metros sobre el nivel del mar.
En este caserío se tienen planes de emergencia para responder ante una emergencia
por erupción del Volcán de Fuego, sin embargo, estos planes son ineficientes, no son
adecuados, por lo que, con el desarrollo de la presente investigación, serán
beneficiados los habitantes de dicho caserío, que son 2500 personas
aproximadamente.

PREGUNTAS GENERADORAS

1. ¿Ante qué riesgos naturales son vulnerables los habitantes del municipio de San
Juan Alotenango, Sacatepéquez?

2. ¿Cuáles son los peligros a los que están expuestos los habitantes del municipio
de San Alotenango debido a las erupciones del Volcán de Fuego?

3. ¿Qué estrategias debe incluir una adecuada planificación para la reducción de


desastres ante el riesgo de erupciones volcánicas?

4. ¿Cuál sería la propuesta habitacional más adecuada para brinda una solución
habitacional de reubicación a las comunidades que están en zonas de alto riesgo
a las erupciones del Volcán de Fuego?
1. GENERALIDADES DEL MUNICIPIO DE SAN JUAN ALOTENANGO,
DEPARTAMENTO DE SACATEPÉQUEZ

1.1 Ubicación Geográfica:

San Juan Alotenango, municipio del departamento de Sacatepéquez, se ubica a 12


kilómetros de la cabecera departamental y a 55 kilómetros de la ciudad capital, está
localizado dentro de la cuenca hidrográfica del río Achiguate y Coyolate, con una
elevación de 4,514 metros sobre el nivel del mar. San Juan Alotenango está situado
al sur del departamento de Sacatepéquez en medio de los volcanes de Fuego,
Acatenango y Agua. Tiene una extensión de 95 kilómetros cuadrados.

1.2 Colindancias:

Colinda al Norte con San Miguel Dueñas y Ciudad Vieja (Sacatepéquez); al Este
con Palín y Escuintla (Escuintla) y al Oeste con San Pedro Yepocapa y
Chimaltenango (Chimaltenango).

1.3 Distribución Administrativa:

Administrativamente se integra por la cabecera municipal que está dividida en 4


zonas, 8 parajes, 12 fincas y 5 labores como se estableció en el taller de lugares
poblados llevado a cabo en el año 2009.
1.4 Población:

El municipio de San Juan Alotenango cuenta con una población de 20,906


habitantes, siendo el 51% hombres y el 49% mujeres de todas las edades.
El 27.8% de la población es ladina y el 72.20% indígena maya Kaqchikel.
El municipio está considerado como urbano ya que el 78.9% de la población se
encuentra ubicada en la cabecera municipal.

1.5 Vivienda:

El casco urbano está integrado por 3,250 viviendas de las cuales el 78.9% se
encuentran en el área urbana y 26.18% en el área periurbana.
Las características de la vivienda en el municipio son importante indicativo del nivel
económico por el tipo de material utilizado en su construcción.

Existe un alto porcentaje de viviendas construidas con materiales altamente


vulnerables y susceptibles a movimientos sísmicos e incendios, situación que indica
condiciones de pobreza.

Materiales utilizados en vivienda


San Juan Alotenango, Sacatepéquez

MATERIAL % TOTAL URBANA % PERIURBANA %

Adobe 10.17 69.17 30.82


Ladrillo 2.99 66.19 33.81
Bajareque 0.50 18.33 81.66
Block 54.12 73.68 26.31
Lepa, palos 18.64 67.60 32.39
Madera 7.70 56.89 43.10
Concreto 1.64 70.44 21.55
Lámina Metálica 2.70 66.70 33.29
Fuente: INE, 2002
1.6 Vías de Acceso:

San Juan Alotenango tiene dos vías de acceso, la Ruta Nacional 14 que lo comunica
con Escuintla hacia el sur, y hacia el norte con Chimaltenango y la Ruta Nacional
10 que lo comunica con la cabecera departamental, las dos carreteras son asfaltadas
y transitables durante todo el tiempo y épocas del año. Sin embargo, debido al daño
causado por la erupción del Volcán de Fuego el 3 de junio de 2018, la Ruta Nacional
fue cerrada por varios días, actualmente es transitable en horario de 06:00 a 18:00 el
cual fue establecido por las autoridades correspondientes por el riesgo que representa
los lahares que descienden del volcán.
Las vías de comunicación dentro del municipio están constituidas por calles
pavimentadas y adoquinadas.

1.7 Comunidades pobladas de San Juan Alotenango

a. Cabecera Municipal
b. San José Las Lajas
c. El Establito
d. Capetillo
e. El Porvenir
f. La Candelaria
g. La Reunión
h. La Unión
i. Monte María
j. Santa Clara Las Lajas
k. Santa Augusta
l. Población dispersa
m. Santa Bárbara
n. Condominio Antigua Garden
o. Condominio La Reunión, S.A.
p. Urbanización Doña Beatriz
q. Pauleque II
1.8 Amenazas que representan riesgos para el municipio de San Juan
Alotenango:

Las principales amenazas que afectan el territorio son las siguientes:

2. Inundaciones
3. Deslizamientos de tierra
4. Deforestación
5. Erupciones volcánicas
6. Contaminación ambiental
7. Derrumbes
2. ERUPCIONES VOLCÁNICAS

2.1 Definición

“Una erupción volcánica es una emisión violenta en la superficie terrestre de


materias procedentes del interior del volcán. Exceptuando los géiseres, que
emiten agua caliente, y los volcanes de lodo, cuya materia, en gran parte es
orgánica” (INGEMMET, 2014).

2.2 Tipos de erupciones volcánicas

2.2.1 Magmáticas

El magma (roca fundida) emerge a la superficie en forma de lava o ceniza y


piedra pómez. Existen varios tipos de erupciones de este tipo: pliniana,
peleana, vulcaniana, estromboliana, hawaiana e islándica o fisural.

2.2.1.1 Pliniana

Son erupciones muy violentas que levantan columnas verticales de gases,


piroclastos y fragmentos de roca a varias decenas de kilómetros de altura. A
menudo son acompañadas por el colapso de la parte superior del edificio
volcánico. Este tipo de erupción se observó en el Volcán Santa María el 24 de
octubre de 1902.

2.2.1.2 Peleana

Se caracterizan por su alto índice de explosividad asociado a un magma


viscoso con alto contenido de gases. Pueden producir explosiones de rocas,
gases y magma muy pulverizada dirigido lateralmente, formando nubes
ardientes o flujos piroclásticos como el Volcán Santiaguito.

2.2.1.3 Vulcaniana

Las erupciones son menos frecuentes y más violentas debido a que el magma
es más viscoso y por lo tanto la liberación de los gases es más difícil. Las
erupciones van acompañadas por una nube de gases cargados de ceniza, arena
y fragmentos de rocas que alcanza varios kilómetros de altura. Después de
ocurrida la explosión, que limpia la chimenea, aunque es poco frecuente se
puede crear una corriente de lava, ya sea saliendo por el cráter principal,
secundario o por una fisura lateral, como lo sucedido en el Volcán de Fuego.

2.2.1.4 Estromboliana

Existe una actividad constante de explosiones que lanzan lava pastosa en


estado incandescente. Son acompañadas por ríos de lava y emisión de gases, y
suelen edificar conos de sustancia vítrea con bastante rapidez. Un ejemplo de
este tipo de actividad es la del Volcán Pacaya.

2.2.1.5 Hawaiana

Esta erupción posee una abundante salida de magma que forma grandes ríos y
lagos de lava. Los gases son liberados en forma tranquila. Las erupciones
violentas son raras y los gases pueden impulsar fuentes de lava que llegan a
alcanzar los 500 metros de altura.

2.2.1.6 Islándica o Fisural

En este tipo no existe un cono con cráter central. La característica principal es


la emisión de enormes volúmenes de lava a través de fisuras o grietas. Algunas
forman masa de lava de poco espesor que cubren áreas enormes.

2.2.2 Freáticas

Suceden cuando el magma, cuya temperatura es extrema (600ºC - 1.170ºC),


toma contacto de manera indirecta con un volumen de agua, provocando un
repentino calentamiento, lo cual genera vapor a muy alta presión causando una
gran explosión de vapor, agua, ceniza y bloques.

2.2.3 Freatomagmáticas

Las erupciones son impulsadas por la interacción directa entre el magma y el


agua. Tienen lugar en el mar, lagos o aguas subterráneas, y pueden
ser surtseyanas, submarinas y subglaciares.

2.2.4 Freática o Geiseriana


Estas se producen por el contacto de las aguas subterráneas con la roca y
fumarolas todavía caliente dentro del volcán. A diferencia de todas las
anteriores no existe ascenso de magma. Por lo general presenta emanación de
vapor de agua y gases en las proximidades o laderas del volcán que puede durar
por mucho tiempo y a veces se intensifican en la época de lluvia. En algunos
casos llegan a producir explosiones que forman pequeños cráteres como las del
coloso de Tacaná, en 1986 y Acatenango, en 1972.

2.3 Peligros por erupciones volcánicas

2.3.1 Flujos de Lava

Los flujos de lava son corrientes de roca fundida emitidas a elevadas


temperaturas. Estas lavas pueden ser expulsadas por el cráter o fracturas en
los flancos del volcán. La lava puede fluir por el fondo de los valles y alcanzar
varios kilómetros de distancia con respecto al volcán. Las lavas emitidas por
nuestros volcanes normalmente se enfrían en la zona del cráter, a veces
formando domos o recorren escasos kilómetros. Los flujos de lava destruyen
todo a su paso. Sin embargo, no representan un grave peligro para las personas
debido a su baja velocidad.

2.3.2 Flujos de Lodo (Lahares)

Los flujos de lodo son mezclas de fragmentos de rocas volcánicas, de diversos


tamaños movilizados por el agua que fluyen rápidamente por las quebradas y
valles que surcan un volcán, a velocidades que varían de 40 a 100 km/h. Se
generan en periodos de erupción o de tranquilidad volcánica. El agua puede
provenir de fuertes lluvias, fusión de hielo o nieve. Estos flujos eventualmente
pueden salir de los cauces. El área afectada depende del volumen de agua y
de materiales disponibles, así como de la pendiente y topografía.
Normalmente destruyen todo lo que encuentran a su paso y pueden alcanzar
grandes distancias (>200 km).
“Los lahares se producen cuando la ceniza y los derrubios volcánicos se
saturan de agua y fluyen
pendiente abajo por las
laderas volcánicas,
siguiendo normalmente
los valle de los ríos”
(Tarbuck & Lutgens,
1999).
2.3.3 Avalanchas

Las avalanchas de escombros son deslizamientos súbitos de una parte


voluminosa de los edificios volcánicos. Se originan debido a factores de
inestabilidad, tales como la elevada pendiente del volcán, presencia de fallas,
movimientos sísmicos fuertes, explosiones volcánicas, etc. Las avalanchas de
escombros ocurren con poca frecuencia y pueden alcanzar decenas de
kilómetros de distancia. Bajan a gran velocidad y destruyen todo lo que
encuentran a su paso.

2.3.4 Lluvias de Ceniza y piedra pómez

Se generan cuando los fragmentos de roca son expulsados hacia la atmósfera


violentamente, formando una columna eruptiva alta. Las cenizas
posteriormente caen sobre la superficie terrestre. Los fragmentos más grandes
y densos caen cerca del volcán y se denominan bombas o bloques (>64 mm),
mientras que las partículas de menor tamaño denominadas lapilli (2-64mm) y
ceniza (<2 mm) son llevadas por el viento a distancias kilométricas, luego
caen y forman una capa de varios mm o cm de espesor. Estas partículas
pueden causar problemas de salud en las personas, contaminar fuentes de
agua, colapsar los techos por el peso acumulado, afectar cultivos, interrumpir
el tráfico aéreo, entre otros.

2.3.5 Gases Volcánicos

Durante las erupciones volcánicas se produce una importante liberación de


gases, principalmente vapor de agua; pero también dióxido de carbono,
dióxido de azufre, ácido clorhídrico, monóxido de carbono, ácido
fluorhídrico, azufre, nitrógeno, cloro y flúor. Estos gases se diluyen y
dispersan rápidamente, sin embargo, pueden alcanzar concentraciones altas
en las zonas bajas o depresiones muy cercanas al volcán, donde pueden causar
intoxicación y muerte de personas y animales. Los gases también pueden
condensarse y adherirse a partículas de ceniza, así como reaccionar con las
gotas de agua y provocar lluvias ácidas que generan corrosión, daños en los
cultivos, contaminación de aguas y suelos, etc.
2.3.6 Flujos Piroclásticos

Los flujos piroclásticos son masas calientes (300ºC a 700ºC), conformadas


por una mezcla de ceniza, fragmentos de roca y gases. Estos flujos descienden
por los flancos del volcán a grandes velocidades, mayores a 100 km/h. Poseen
normalmente una parte inferior densa que se encausa y desplaza por el
fondo de las quebradas o valles y otra superior, menos densa, denominada
oleada piroclástica, compuesta por una nube turbulenta de gases y ceniza, que
con facilidad salen del valle. Los flujos piroclásticos voluminosos
frecuentemente sobrepasan relieves importantes y afectan una mayor área.
Los flujos y oleadas destruyen y calcinan todo lo que encuentran a su paso.
“El material piroclástico significa Fragmentos de fuego. El tamaño de estos
fragmentos oscila entre un polvo muy fino inferior a 0,063 milímetros v de
diámetro y cenizas volcánicas de tamaño de arena y trozos que pesan más de
una tonelada” (Tarbuck & Lutgens, 1999).
2.4 Períodos de Retorno

El período de retorno para un volcán es el tiempo estimado para que ocurra una
nueva erupción. Este concepto probabilístico es similar a la esperanza de vida
para el ser humano en una determinada sociedad.

Una erupción es la culminación de un largo proceso que se inicia con la


generación de magmas, su ascenso, su posible almacenamiento en cámaras
magmáticas y su salida a la superficie. Todo este mecanismo es claramente
repetitivo, de tal forma que los tiempos entre erupciones se repiten de forma casi
constante, pero con las lógicas fluctuaciones derivadas de su propia complejidad.
Así, cuando en una región han ocurrido un número elevado de erupciones y están
bien datadas, es posible calcular el periodo de retorno mediante métodos
estadísticos. “En general, las erupciones muy violentas tienen periodos de retorno
de varios miles de años, mientras que las erupciones menos explosivas son más
frecuentes con periodos de pocas decenas de años” (Linares & Marrero, 2002)
3. PLANIFICACIÓN PARA LA REDUCCIÓN DE RIESGO A
ERUPCIONES VOLCÁNICAS

3.1 Definición

La planificación para la reducción de riesgos es un enfoque estructurado para


manejar la incertidumbre relativa a una amenaza, a través de una secuencia de
actividades humanas que incluyen la identificación, el análisis y la evaluación de
riesgo, para luego establecer las estrategias para su tratamiento, utilizando
recursos estatales. El objetivo de la planificación es reducir los diferentes riesgos
relativos a un ámbito preseleccionado a un nivel aceptado por la sociedad. Puede
referirse a numerosos tipos de amenazas, pero en el presente proyecto de
investigación, nos enfocamos únicamente al riego de erupciones volcánicas,
específicamente, el Volcán de Fuego.

La reducción de riesgos debe entenderse de una manera amplia dado que incluye
planificación relacionada con la educación, la investigación, la tecnología y la
planificación en todas sus modalidades: física, sectorial, territorial,
socioeconómica.

3.2 Medidas de Reducción de Riesgo

“Se reconocen, en general, como medidas de reducción del riesgo aquellas que
se realizan con anterioridad a la ocurrencia de desastres con el fin de evitar que
dichos desastres se presenten y/o para disminuir sus efectos. Es decir, la
reducción del riesgo es una acción ex ante” (Colombia, 2005)
A nivel internacional se indica que existen medidas estructurales y no
estructurales para evitar o reducir las consecuencias de los fenómenos peligrosos.

3.2.1 Medidas Estructurales

Estas medidas se refieren a una intervención física de la amenaza y de la


vulnerabilidad mediante el desarrollo o refuerzo de obras de ingeniería para la
protección de la población y sus bienes. En general, cuando se hace referencia
a obras de protección y control para la prevención de desastres, en la mayoría
de los casos, se está haciendo referencia al planteamiento de que mediante la
intervención directa de la amenaza se puede impedir la ocurrencia del
fenómeno que la caracteriza o controlar los efectos de este en el caso de que
se presente.
Estudios detallados acerca de las características de los fenómenos y análisis
de la fuente generadora de eventos peligrosos, permiten la concepción de
obras de protección y control que pueden prevenir o mitigar desastres
provocados por inundaciones fluviales o costeras, sequías, deslizamientos,
flujos de lodo, etc. Las obras de protección y control más comúnmente
conocidas son las construidas para la reducción del riesgo de inundación,
como presas de regulación, canales, diques y otros tipos de trabajos de
ingeniería relacionados con la adecuación de causes.
En resumen, las medidas estructurales para la intervención de la
vulnerabilidad física y funcional tienen como objetivo mitigar el riesgo
modificando los niveles de vulnerabilidad y/o de exposición de los elementos
en riesgo.

3.2.2 Medidas No Estructurales

Las medidas no estructurales son de especial importancia para que en


combinación con las medidas estructurales se pueda mitigar el riesgo de una
manera efectiva y balanceada.
Cualquier medida que no suponga una construcción física y que utiliza el
conocimiento, las prácticas o los acuerdos existentes para reducir el riesgo y
sus impactos, especialmente a través de políticas y leyes, una mayor
concientización pública, la capacitación y la educación.

Estas medidas pueden ser activas o pasivas.

Las activas son aquellas en las cuales se promueve la interacción directa con
las personas, como, por ejemplo: la organización para atención de
emergencias, el desarrollo y fortalecimiento institucional, la educación formal
y capacitación, la información pública y campañas de difusión, la
participación comunitaria y la gestión a nivel local.

Las medidas estructurales pasivas son aquellas más directamente relacionadas


con la legislación y la planificación, como las siguientes: códigos y normas de
construcción, reglamentación de usos del suelo y ordenamiento territorial y
estímulos fiscales y financieros.
3.2.2.1 Plan de Ordenamiento Territorial

“El ordenamiento territorial es la realización de una proyección espacial


de las políticas sociales, económicas, culturales y ambientales y la gama
de instrumentos de planificación y de mecanismos de gestión que facilita
una apropiada organización del uso del suelo, la vida económica y social
de una comunidad o territorio” (Pascal, 1999).

El ordenamiento territorial es una acción que debe ir más allá de dividir el


territorio por las características del suelo. El ordenamiento territorial
también debe tomar en cuenta todas las relaciones económicas, sociales,
ambientales y políticas que se dan en el municipio y que son determinadas
por los intereses, problemas y proyectos que en su conjunto tiene la
población.

Trabajar en un Plan de Ordenamiento Territorial –POT- que incluya la


variable de gestión para la reducción del riesgo a los desastres, debe
considerar elementos que ayuden a “… mitigar desastres y reducir riesgos,
desincentivar la construcción y habitabilidad en asentamientos
humanos de alta densidad y la construcción de instalaciones
estratégicas en áreas propensas a amenazas” (DELNET, 2008).
“El ordenamiento territorial puede favorecer el control de la densidad
poblacional y su expansión en áreas de alto riesgo, el adecuado trazado de
rutas de transporte, conducción energética, agua, alcantarillado y otros
servicios vitales” (DELNET, 2008).

Para la realización del POT es importante consultar los estudios que han
realizado algunos ministerios o instituciones y que pueden ayudar a tener
información técnica apropiada.

3.2.2.2 Reglamento Municipal de Construcción

Una de las causas del mayor riesgo al que están expuestos los
asentamientos humanos, (en áreas urbanas y rurales) se debe, entre otras
razones, a que las viviendas e infraestructura en general, no son
construidas tomando en cuenta las características del suelo sobre el
cual van a ser edificadas o los materiales que según estas
características deben utilizarse.
La infraestructura en general es uno de los elementos más propensos a
sufrir daños al momento de suceder un desastre por lo que la creación de
códigos o reglamentos de construcción por parte de las municipalidades y
su aplicación ayuda a que las nuevas construcciones sean seguras.

Los códigos o reglamentos de construcción son documentos oficiales


aplicables a las construcciones desde su planificación, construcción,
supervisión y mantenimiento, que buscan garantizar sobre todo la
seguridad y calidad de las obras que se construyen en el municipio, deben
incluir normas y estándares de construcción adecuados para resistir
eventos peligrosos.

Los códigos o reglamentos permiten:

 Preservar la vida, la seguridad física, los bienes materiales y bienestar en


general de la población del municipio cuando éstos se vean impactados por
un desastre.

 Fijar requisitos técnicos a los que deberán sujetarse las construcciones,


ampliaciones, modificaciones y demoliciones de viviendas y edificios
públicos y privados, para que cumplan con las condiciones de
habitabilidad, seguridad estructural, no estructural y funcional, así como
de higiene, comodidad y uso.

 Fijar las restricciones en el uso de los suelos y determinar el tipo de


construcciones que pueden levantarse en ellos.

 Otorgar o restringir licencias para la construcción, cuando las condiciones


lo ameriten.

 Velar por que, en nuevas construcciones de viviendas, edificios públicos y


privados, se tomen en consideración aspectos históricos de las amenazas y
vulnerabilidades del territorio. Ejemplo: si en determinado sitio se han
registrado inundaciones, hundimientos, derrumbes, deslizamientos.

Se recomienda para la elaboración de un reglamento de construcción incorporar las


“Normas para la Reducción de Desastres” de la Secretaría Ejecutiva de CONRED y
las normas sugeridas por la Asociación Guatemalteca de Ingenieros Estructurales –
AGIES-.
3.2.2.3 Normas de Reducción de Desastres

“Son un conjunto de especificaciones que tienen como principal objetivo


ser un mecanismo de preservación de la vida, seguridad e integridad de las
personas, estableciendo los requisitos mínimos que deben cumplir las
edificaciones e instalaciones a las cuales tienen acceso los distintos
usuarios” ((CONRED), 2018).

Actualmente existen tres normas vigentes aprobadas por el Consejo


Nacional para la Reducción de Desastres:

3.2.2.3.1 Norma de Reducción de Desastres No. 1 ˗NRD1˗


Requerimientos estructurales para obras críticas,
esenciales e importantes.

Establece los criterios técnicos mínimos que deben implementarse en el


diseño de obras nuevas, la remodelación o reparación de obras existentes,
y la evaluación de obras, a efecto de prevenir daños a la integridad de las
personas y a la infraestructura indispensable para el desenvolvimiento
socioeconómico de la población; la aplicación de esta es de cumplimiento
obligatorio en obras clasificadas dentro de la misma norma como
esenciales e importantes. (AGIES, 2018)

3.2.2.3.2 Norma de Reducción de Desastres No. 2 ˗NRD2˗


Normas mínimas de seguridad en edificaciones e
instalaciones de uso público.

Establece los requisitos mínimos de seguridad que deben observarse en


edificaciones e instalaciones de uso público, para resguardar a las personas
en caso de eventos de origen natural o provocado que puedan poner en
riesgo su integridad física. La norma es de cumplimiento obligatorio para
todos aquellos inmuebles a los cuales tienen acceso terceras personas, por
ejemplo: hospitales, centros educativos, oficinas públicas y privadas, etc.
Esta norma establece que la infraestructura de acceso público con o sin
restricciones, debe contar con Planes de Respuesta a Emergencias, para
reducir los riesgos de las personas que trabajan o visitan estas
instalaciones. (AGIES, 2018)
3.2.2.3.3 Norma de Reducción de Desastres No. 3 ˗NRD3˗
Especificaciones técnicas para materiales de construcción.

Contiene las especificaciones técnicas con las cuales deben cumplir los
materiales de construcción, que se utilicen en edificaciones e
instalaciones de uso público nuevas, así como las que sufran
remodelaciones o rehabilitaciones de construcción gubernamental y
privada. (AGIES, 2018)

3.2.2.4 Reubicación de Comunidades en Riesgo

El acelerado crecimiento de la población guatemalteca ha provocado que


se establezcan poblados en diferentes puntos del país que son peligrosos
por el riesgo que representan, numerosas familias sólo pueden acceder a
terrenos en zonas de alto riesgo, como las laderas pendientes, las áreas
erosionables, las márgenes de quebradas, faldas de volcanes activos, y así
enfrentar condiciones de profunda vulnerabilidad, agravadas por la falta de
recursos y de capacitación.

Este fenómeno obedece al elevado costo de la tierra tanto urbana como


rural, los bajos recursos de los pobladores, su escasa participación en la
toma de decisiones, la incapacidad del Estado para eliminar el déficit de
viviendas y afrontar el mejoramiento habitacional.

Luego del impacto producido por la erupción el Volcán de Fuego que dejó
pérdida de vidas humanas, así como pérdidas económicas, las políticas de
Estado han sido encaminadas a la ayuda humanitaria para los
damnificados, y es bueno apoyarlos, pero la reconstrucción después de un
desastre es mucho más costosa que la prevención.

En ese sentido, podemos deducir que una buena planificación para la


reducción de desastres debe incluir como estrategia primordial, la
reubicación de las comunidades que se encuentran en las faldas del volcán
de Fuego por estar en riesgo latente ante una nueva erupción de gran
magnitud como la ocurrida el 3 de junio de 2018.

Una de las comunidades que se encuentra en alto riesgo es el Caserío El


Porvenir del municipio de San Juan Alotenango, departamento de
Sacatepéquez, por encontrarse justo en las faldas del Volcán de Fuego, fue
una las comunidades evacuada por la pasada erupción.
El terreno en el que se ubica este caserío es destinado a uso agrícola
principalmente no es apropiado para uso habitacional porque no reúne las
condiciones necesarias de seguridad para que sean construidas viviendas
en ese sitio; si terrenos como este han sido poblados se debe la inexistencia
o incumplimiento de un plan de ordenamiento territorial del municipio de
San Juan Alotenango, departamento de Sacatepéquez.

Se considera necesario que este caserío sea reubicado en un lugar seguro


para evitar una eventual tragedia debido al riesgo que representan las
constantes erupciones del Volcán de Fuego.
El lugar a donde deben reubicarse los pobladores del Caserío El Porvenir
debe ser el apropiado, es decir, que cumpla con los requisitos básicos para
ser habitado por las personas y las viviendas que se construyan deben
cumplir con los requisitos establecidos en los reglamentos de construcción
y en las normas de reducción de desastres.

Obviamente, hablar de reubicación nos hace considerar que no es un


proceso que puedan hacer los pobladores de ese caserío, se necesita la
intervención del Estado y de otras organizaciones que brinden apoyo
económico y logístico para llevar a cabo un proyecto de esta magnitud.
4. PROPUESTA PARA LA REUBICACIÓN DEL CASERÍO EL
PORVENIR, SAN JUAN ALOTENANGO, SACATEPÉQUEZ.

4.1 FILOSOFÍA DEL DISEÑO

El objetivo primordial de este proyecto de urbanización y vivienda es reubicar a las


personas que actualmente habitan en el Caserío El Porvenir, municipio de San Juan
Alotenango, departamento de Sacatepéquez, dentro de un marco de vivienda digna
que les proporcione todos los servicios básicos indispensables para que tengan una
buena calidad de vida, tomando en cuenta que para que un ser humano desarrolle
una buena calidad de vida esta debe ser integral, es decir se deben tomar en cuenta
todos los aspectos que conforman a una persona:

 El cuerpo o el aspecto material y de salud.


 El alma o el aspecto espiritual.
 La mente o el intelecto.

La urbanización debe proporcionar la oportunidad para que sus habitantes puedan


satisfacer todas sus necesidades materiales y vivir saludablemente.
Para ello se proporcionarán los servicios de infraestructura adecuados: electricidad,
iluminación pública, agua potable, drenajes, servicio telefónico, calles
pavimentadas, seguridad, y las viviendas unifamiliares y multifamiliares adecuadas
a sus habitantes, además de áreas verdes y recreativas.

Todo ello dentro del marco del respeto al medio ambiente, ya que sin respeto al
medio ambiente tampoco existe respeto a la salud física y mental de los habitantes.
También se proporcionará el espacio para construir un centro de salud.

Con todo ello se puede satisfacer el primer aspecto de calidad de vida integral; el
aspecto físico o material.
Los aspectos espirituales o mentales pueden ir entrelazados en una persona. Se
proporcionará el espacio.
Para ello el proyecto debe ser diseñado utilizando los conceptos básicos y más
importantes del nuevo urbanismo, el ecourbanismo y la arquitectura bioclimática, a
manera de lograr no solo una urbanización de vivienda popular, sino una
urbanización de vivienda digna integral.
4.2 OBJETIVOS DE LA PROPUESTA DE DISEÑO

4.2.1 Objetivo General del proyecto

Proponer un Modelo de Urbanización para la reubicación del Caserío El Porvenir,


el cual debe contar con todos los servicios necesarios para satisfacer las necesidades
de sus pobladores, así como presentar un diseño que sea respetuoso del medio
ambiente.

4.2.2 Objetivo General de Uso

El uso primordial del Modelo de Urbanización a proponer es de carácter


habitacional, tomando en cuenta todas las actividades soporte que un proyecto de
esta índole puede requerir, como la es la recreación, circulación y la vivienda o
habitación.

4.2.3 Actividades para desarrollar

Se diseñará un modelo de urbanización que permita a los habitantes desarrollar las


siguientes actividades:

- Habitar
- Recrearse
- Circulación peatonal y vehicular interna
- Salud
- Educación
- Social y/o religioso

4.2.4 Servicios por prestar:

- Habitación: vivienda unifamiliar

- Recreación: plaza, cancha deportiva y áreas verdes.

- Transporte: espacio para circular internamente de manera peatona y


vehicular y para el abordaje de trasporte público en el exterior.

- Salud: se designará el espacio para ubicar un centro de salud o clínica, pero


el diseño y construcción deben estar a cargo de las instituciones
gubernamentales pertinentes.
- Educación: de la misma manera únicamente se designarán las áreas para la
construcción de la escuela, su diseño no forma parte de este proyecto.

- Religioso y Social: el salón comunal tendrá también como propósito


funcionar como iglesia ecuménica, es decir, que permita que grupos de
diferentes cultos puedan hacer uso de este.

- Ambiental: Remoción adecuada de desechos sólidos y aguas negras.


Disposición adecuada de aguas pluviales.

- Seguridad: sistema adecuado de seguridad que permita el ingreso de personas


externas o visitantes sin restringir el uso de las instalaciones como cancha
deportiva, áreas verdes, escuela o centro de salud al resto de personas ajenas
al Caserío.

4.2.5 Usuarios:

Los usuarios serán principalmente los habitantes que componen actualmente el


Caserío El Porvenir, con un total aproximado de 1,800 habitantes que viven en 378
viviendas.

Además de ellos, se permitirá el acceso controlado de familiares,


visitantes y del resto de la comunidad de Villa Canales, haciendo
del proyecto una urbanización no excluyente que aporte calidad
de vida a todo el municipio.

4.3 PROGRAMA DE NECESIDADES

4.3.1 Vivienda Unifamiliar

Se construirán 150 vivienda unifamiliares distribuidas de la siguiente manera:


100 viviendas unifamiliares de 3 habitaciones cada una y 50 viviendas de 2
habitaciones cada una. Cada vivienda contará con cocina, sala, comedor, patio.

4.3.2 Salón de usos múltiples:


4.3.3 Escuela
4.3.4 Centro de Salud
4.3.5 La urbanización contará con parada de autobuses con un ingreso
peatonal, con garita de control para este ingreso.
4.3.6 Existirá una plaza central o cívica, ubicada en un punto central, enfrente
del salón de usos múltiples.
4.3.7 Boulevard principal y calle secundarias, con sus respectivas aceras.
4.3.8 Los remanentes del terreno serán áreas verdes y reserva.

PRESUPUESTO GENERAL
ITEM CANTIDAD UNIDAD PRECIO TOTALES COMENTARIO
TERRENO 23 Manzanas Q 70,000.00 Q 1,610,000.00 Finca Agrícola de 161,000m²
URBANIZACIÓN/LOTIFIC Calles, aceras, agua potable,
150 Lotes Q 12,000.00 Q 1,800,000.00
ACIÓN drenajes, energía eléctrica, etc.
VIVIENDAS Q 1,884.00 por 69 m² de
UNIFAMILIARES DE 3 100 Unidades Q 130,000.00 Q 13,000,000.00 construcción + adicionales
HABITACIONES portón, pila, muro, jardín)
VIVIENDAS Q 1,864.00 por 59 m² de
UNIFAMILIARES DE 2 50 Unidades Q 110,000.00 Q 5,500,000.00 construcción + adicionales
HABITACIONES portón, pila, muro, jardín)
BOULEVARD PRINCIPAL 9,000 M² Q 150.00 Q 1,350,000.00 Pavimentos, aceras, etc.
PLAZA CENTRAL, Pavimento, concreto peatonal,
4,000 M² Q 250.00 Q 1,000,000.00
JUEGOS DE NIÑOS, juegos
SALÓN DE USOS
2,000 M² Q 1,300.00 Q 2,600,000.00 Estructura
MÚLTIPLES
OTRAS EDIFICACIONES 200 M² Q 1,500.00 Q 300,000.00 Garitas, paradas de bus, etc

ÁREAS JARDINIZADAS 110,000 M² Q 10.00 Q 1,100,000.00 Grama y jardinización artesanal

RESERVA 25,000 M² Q 5.00 Q 125,000.00 Limpieza, reforestación.


ESCUELA Y CENTRO DE
N/A M² N/A N/A Instituciones Gubernamentales
SALUD

TOTAL Q28,385,000.00
PROGRAMACIÓN, POSIBLES FASES
ÍTEM TIEMPO ESTIMADO DE EJECUCIÓN COMENTARIOS
LIMPIEZA DEL SITIO, Obtención del terreno
TRABAJOS 1 MES previo estudios. Diseño,
PRELIMINARES licencias
Instaaciones, calles,
PROCESO DE
aceras, etc. Planta de
URBANIZACIÓN Y 6 MESES
tratamiento, tanque
LOTIFICACIÓN
elevado. Etc.
CONSTRUCCIÓN DE Mampostería reforzada
VIVIENDAS 18 MESES tradicional vrs. Formaleta
UNIFAMILIARES autoconstrucción
CONSTRUCCIÓN DE
18 MESES Paralelo a Vivienda
OTRAS ÁREAS
ESCUELA Y CENTRO DE Insituciones
N/A
SALUD gubernamentales
TOTAL 2 AÑOS Y UN MES aproximadamente
4.3.9 OBSERVACIONES:

- El proyecto constará de un total de 150 viviendas, donde se podrán reubicar


las 130 viviendas existentes actualmente en el Caserío El Porvenir.

- El proyecto podrá albergar a un núcleo familiar por.

- Las viviendas unifamiliares estarán diseñadas para permitir la ampliación a


un segundo nivel.

- El proyecto contará con espacios cívicos, de recreación, y se dejará el espacio


para la construcción de una escuela y un centro de salud.

- El proyecto está diseñado para la realización de diferentes actividades como


habitar, recrearse, actividades sociales o inclusive culturales, de manera que
se puedan suplir todas las necesidades de un ser humano dentro de un mismo
complejo y evitar así los largos desplazamientos de los habitantes.

- Se deberá formar un comité de vecinos y oficinas administrativas deberán


estar anexadas al salón de usos múltiples.

- Se deberá redactar un reglamento interno de convivencia y preservación del


diseño arquitectónico original del proyecto y que contemple también los
lineamientos para un crecimiento futuro.

- Para hacer viable el proyecto, será imperativo la adquisición del terreno en


donación.

- El diseño y construcción del centro de salud y escuela deberán estar a cargo


de las entidades de gobierno.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS

(CONRED), C. N. (2018). https://conred.gob.gt. Obtenido de


https://conred.gob.gt/site/Normas-para-la-Reduccion-de-Desastres

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de Normas de Seguridad Estructural 2018. Guatemala, Guatemala,
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Chigna, V. G. (06 de Junio de 2018). Volcán de Fuego: ¿Era evitable la tragedia


causada por la erupción? (B. N. MUNDO, Entrevistador)

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desarrollo. New York, EE.UU.: John S. Swift Co., EE.UU.

Tarbuck, E. J., & Lutgens, F. K. (1999). Ciencias de la Tierra. UNA


INTRODUCCIÓN A LA GEOLOGÍA FÍSICA. Madrid, España: Pearson
Educación.

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